Fin de semana en Vera invitados por un amigo
Somos un matrimonio maduro, en mitad de lo 50, que tuvimos una experiencia impensable, a raiz de una invitacion
Fin de semana en Vera, invitados por un amigo.
La historia que voy a relatar, es totalmente real, y nos ocurrió el verano pasado.
Somos un matrimonio de 57 y 58 años, llevamos 35 años felizmente casados, estamos en una etapa de la vida en la que hemos superado muchos tabúes, sobre todo en materia sexual, por lo que nuestra confianza y compenetración en el sexo es total.
Cuando follamos, nos decimos, sin ningún prejuicio, que fantasía nos gustaría realizar en ese momento, consiguiendo un estado de excitación sin fronteras, recomiendo a quien lea este relato, lo practique con su pareja, si ambos están de acuerdo.
Bueno, no quiero desviarme de la cuestión que me ha traído hasta aquí, es decir; contar y compartir la experiencia que hemos tenido con un amigo, y que en muchas ocasiones, ya la habíamos realizado en nuestras fantasías, pero que nunca pensamos que llegaríamos a hacerla.
Nuestro amigo, vamos a llamarle Andrés, es un hombre de nuestra edad, 55 años soltero, discreto, con una posición estable y desahogada, nos vemos con cierta frecuencia, hemos tenido charlas de todo tipo política, religión, convivencia en pareja, en fin de todo, cuando hablamos de sexo, lo hacemos los tres sin tapujos ni puritanismo, aunque no hasta el extremo que llegamos en esta ocasión.
Se ha comprado un apartamento en Vera, para inaugurarlo y enseñárnoslo, nos invito a pasar un fin de semana en la playa, nos advirtió que la playa era nudista (ya lo sabíamos), y si eso, seria un inconveniente para nosotros, desde luego para nosotros no era ningún inconveniente, ya habíamos practicado nudismo en Menorca hace años, y la verdad fue estupendo; mas bien, seria la ocasión perfecta, para darle un poco mas de morbo a nuestra relación, no teníamos previsto nada que no fuera pasar un fin de semana agradable, eso si, un poco mas excitante de lo habitual, por las circunstancias que se daban; las fantasías eran una cosa y la realidad otra, aunque para ser sinceros siempre nos preguntamos si nos atreveríamos a hacerlo realmente; al no tener ocasión siempre nos quedábamos con la duda.
Llegamos, el viernes por la tarde, el apartamento, una especie de ático con dos habitaciones, estaba situado casi en primera línea, se podía ver la playa desde la terraza, no teníamos ningún edificio delante.
Nos fuimos los tres a cenar, estuvimos hablando de la buena compra que había hecho, sobre todo por el precio, pasamos una velada muy agradable, el nos recordó, el tiempo que llevábamos juntos, y lo compenetrados que se nos veía, aspecto que le parecía envidiable en estos tiempos, terminamos la cena, y como estábamos cansados del viaje, decidimos volver al apartamento.
Una vez allí, y antes de acostarnos, decidimos tomarnos una copa en la terraza del ático; le preguntamos que como se había decidido a comprar en Vera, nos confeso que el precio, había sido determinante, le encantaba el ambiente de la playa nudista de Vera; de hecho cuando iba de vacaciones, buscaba sitios como Vera para poder practicar el nudismo.
Nosotros también nos encanta hacer nudismo, aunque siempre lo hemos hecho solos, en esta ocasión será la excepción.
La conversación comenzó a derivar, un poco al terreno sobre actitudes sexuales, ya que la situación y el lugar se daba para ello, entre otras cosas hablamos de las relaciones de tantos años, si no se perdía interés hacia la otra persona, si la rutina podía ser la peor enemiga etc.
Estáis tan compenetrados en el sexo? Porque no me negareis que después de tantos años, la rutina puede acabar con la pasión, o quizás tenéis alguna vacuna para ello?, nos dijo sonriendo.
Te sorprenderías, Andrés, de lo que la mente humana puede elucubrar para mantener vivo el deseo y la pasión en una pareja, nosotros lo hablamos todo, y posiblemente sea esa, la razón de nuestra compenetración, sobre todo en el sexo, las fantasías son una excelente vía de escape de la rutina o el aburrimiento, nosotros las practicamos con frecuencia, nos revelamos, el uno al otro, nuestro deseo mas inconfesable, y nos funciona.
Estamos entrando en un terreno que me gustaría, me explicaseis con más detalle, aunque entiendo que es un poco delicado, pero os aseguro, que por mi forma de pensar, el tema me interesa muchísimo, yo también tengo deseos, convicciones que no puedo compartir con nadie, las considero un poco fuertes para exponerlas, pero me gustaría compartirlas con alguien como vosotros, no penséis que las fantasías son un coto cerrado de las parejas, yo me identifico totalmente con lo que habéis contado hasta ahora, y me ha sorprendido gratamente, es mas, estoy alucinado de lo que os estoy contando.
A estas alturas de conversación, los tres estábamos queriendo llegar con nuestras explicaciones un poco mas lejos, ser mas explícitos , pero ninguno daba el paso, Paloma mi mujer, disfrutaba de la conversación, se la veía receptiva, yo Jaime, estaba encantado, y sorprendido de lo que estábamos contando todos, de forma tan natural, Andrés, en un acto de confianza, nos confeso, que en varias ocasiones, había entrado en alguna pagina de contactos, e intentado contactar con algún matrimonio o pareja, para hacer un trío y disfrutar del sexo con ambos, evidentemente nunca tuvo respuesta.
Paloma y yo nos miramos, le dijimos que ese deseo, lo tenían muchos hombres y mujeres, nosotros nos incluíamos en el, de hecho, lo habíamos recreado en nuestras fantasías, por tanto le entendíamos perfectamente.
En esta situación y este ambiente, todos estábamos deseando, confesar detalladamente nuestros deseos mas íntimos, pero nadie, se atrevía a ser mas explicito, hasta que Paloma propuso, que cada uno escribiera en un papel, lo que le gustaría hacer, en este momento, aceptamos sin rechistar, nos pareció una idea brillante, tres deseos, que se pondrían en un vaso, los sacaríamos al azar y los leeríamos en voz alta, nos llamamos morbosos, pero estábamos disfrutando como adolescentes. Era una prueba de confianza entre nosotros.
Paloma y yo siempre lo habíamos hablado entre nosotros, pero nunca con terceras personas, esta seria la primera vez, y reconozco que eso nos producía muchísima
excitación.
Escribimos, nuestros deseos, los pusimos en un vaso, lo agitamos, y nos dispusimos a sacar el primer deseo, el primer deseo en salir, fue precisamente el de Andrés, le toco leerlo a Paloma y decía lo siguiente:
Deseo de Andrés
“Me gustaría follarme a Paloma, y mientras me la follo, hacerle una mamada a Jaime”
Mientras Paloma lo leía, Andrés estaba, realmente cortado, no sabia donde mirar, esperando nuestra reacción, sonreímos, aplaudimos, y le dijimos, no esta nada mal, excitante, se podría intentar dijimos entre risas.
Sacamos el segundo deseo, era el de Paloma, decidimos que fuera Andrés, quien lo leyera
Decía así:
Deseo de Paloma
“Me gustaría que me follara mi marido, mientras Andrés se folla a mi marido por el culo”
A mi, este deseo de mi mujer, no me sorprendió en absoluto, aunque reconozco que a Andrés le pillo desprevenido, pero su reacción fue decir, habrá que intentarlo.
Solamente quedaba la mía, volvió a leer Paloma, y decía así:
Deseo de Jaime
“Me gustaría que mientras me follo a Paloma, esta le haga una mamada a Andrés.”
Aquí estábamos los dos aplaudiendo, mientras Paloma se reía, diciendo que machistas sois.
Ya eran las dos de la madrugada, y alguien dijo,…. a que no nos atrevemos a realizar uno de los tres deseos ? hubo un pequeño silencio, y a continuación se oyó la voz de Paloma, por mi no hay problema, aunque no os garantizo nada, eso era, lo que tanto Andrés como yo estábamos deseando escuchar, yo le dije cariño, ya sabes que, por mi parte tampoco hay problema.
Decidimos que fuera Andrés, quien eligiera, el deseo que mas le apeteciera, nos pidió perdón y nos dijo que le gustaría realizar, su deseo si no nos importaba, fenomenal, le dijimos, le propuse que fuera yo quien empezara a calentar a mi mujer, por supuesto dijo, me acerque y comencé a desvestirla, aproveche para preguntarle si realmente le apetecía, me contesto que si, que durante la conversación que habíamos tenido, se excito mucho, y que un día es un día.
La deje totalmente desnuda, le dije que cerrara los ojos y disfrutara, así seria mas fácil y morboso, le dije a Andrés que se desvistiera y se acercara, ya estaba empalmado, de ver a mi mujer desnuda, ninguno de los dos tenemos un cuerpo diez, pero estamos bien conservados, ella tiene unas tetas muy hermosas, y mientras yo se las chupaba, lleve la mano de mi mujer a la polla de Andrés, para que la sintiera y le pajease, ella seguía con los ojos cerrados, y empezó a masajear esa nueva polla, yo no me podía creer que todo esto estuviera pasando, pero tenia una excitación como nunca había sentido, ver a mi mujer, cogiendo otra polla, y disfrutando con ello, era lo mas, le dije a Andrés que le empezase a chupar las tetas, que eso le gustaba mucho y la ponía muy cachonda Andrés estaba también sobre excitado, mientras le chupaba las tetas me masajeo mi polla, por encima del pantalón, yo todavía no me había desvestido, pero estaba totalmente excitado.
Me desvestí y me sume a la fiesta, le dije que ya podía abrir los ojos, y disfrutar plenamente de todo, nos cogio a ambos las pollas, y con mucha delicadeza, las empezó a masajear, se la veía que estaba disfrutando, confieso que era como un sueño, verla así, como en nuestras fantasías, le propuse que hiciera una mamada a Andrés, me apetecía verla, mira que eres morboso me dijo, se arrodillo, y empezó a chuparle la polla, despacio suavemente, como sabe que me gusta a mi, la escena, que tantas veces me había imaginado, superaba ampliamente la ficción, ver como le chupaba la polla a Andrés, me puso en un grado de excitación, en el que se caen todas las barreras.
Decidimos irnos a la habitación, y continuar lo que prometía ser una autentica orgia,
Una vez allí le dije a Andrés que le comiese el coño a mi mujer, acepto encantado, mientras le comía el coño, yo aproveche para poner mi polla en su boca, estaba viendo otra escena, que me había imaginado, en infinitas ocasiones, mientras le estaban comiendo el coño, ella me estaba haciendo una mamada de impresión, la excitación era indescriptible, le dije a Andrés que era un buen momento para que se la metiera, le abrimos las piernas entre los dos y empezó a metérsela despacio, hasta el fondo, otra escena que habíamos imaginado, en infinidad de veces, pero que la realidad superaba con creces la ficción, yo estaba fuera de mi, ver como se la estaban follando, como estaba disfrutando ella, y como estábamos realizando algo, impensable hace unos días
Andrés me pidió que le pusiera mi polla en la boca, así lo hice, empezó una mamada impresionante, disfrutaba teniendo mi polla en su boca, mientras se follaba a mi mujer, Paloma al ver la escena, decía que no podía aguantar mas, que se iba a correr, nos pidió por favor que nos corriéramos, Andrés asintió, y dijo que tampoco podía aguantar mas y yo por mi parte, estaba haciendo verdaderos esfuerzos, para no correrme; le pregunte a Andrés, si me podía correr en su boca, me dijo que estaba deseando sentir mi corrida.
Paloma ya no podía mas, nosotros tampoco, empezamos a corrernos, como locos, le inunde la boca a Andrés, este al sentir mi corrida, inundo a mi mujer con una abundante corrida, cuando le saco la polla, vi como le salía los restos de semen, nos habíamos corrido como auténticos burros.
En nuestro primer día, desaparecieron todas las barreras que creíamos tener, rompimos el hielo con gran facilidad, cosa que nos sorprendió gratamente.
Nos fuimos a la cama, no sin antes preguntar a Andrés, que le había parecido, cuál era su opinión, nos dijo, que ni en sueños hubiese imaginado, disfrutar como lo había hecho, o que algo así le pudiera pasar, y me encantaría poder repetirlo; en cuanto a vosotros, ha sido como lo imaginabais?. Andrés, para mí, ha sido alucinante, ni por lo más remoto, pensaba que sería tan excitante, compartir con alguien a mi mujer, y que iba a disfrutar tanto con las escenas que hemos protagonizado, compartiendo a Paloma, aunque ya las habíamos escenificado en nuestras fantasías.
Al principio no las tenía todas conmigo, dice Paloma, pero he disfrutado mucho con los dos, no pensaba que dos hombres me pudieran excitar tanto, no sabía, si sería capaz de hacer lo que he hecho, pero reconozco que he disfrutado muchísimo haciéndolo, sobre todo por la novedad al ser follada por otro hombre, incluso he disfrutado haciéndole sexo oral, con el morbo añadido de estar mi marido delante, observando, y participando, ha sido una sensación única, que no tengo palabras para describir, solo sé que he disfrutado más de lo que me podía imaginar.
Lo relatado fue el principio de un fin de semana, qué ni por lo más remoto pensamos, pasara lo que paso.
Todavía, nos quedaban dos días más, sábado y domingo, y podía pasar de todo, de hecho paso.
Una situación como esta, solo nos ha ocurrido una vez y queremos compartirlo, con aquellos, que de alguna manera, se sientan reflejados en esta historia, disfruten con ella y quieran perder el miedo, a realizarlo.
Uno mas.