Fiesta Sorpresa (II)

No hay duda que es una delicia sentir esas manos sobre mi cuerpo nuevamente, Danny esta tan excitada y se ve tan rica, sus pezones tan duros y llenos de deseos de sentir mis manos en ellos. Pero no sólo sienten mis manos, mi boca se dirige hacia ellos para chuparlos y lamerlos, los siento tan duros que se antoja darles unos pequeños mordiscos, ella se arquea disfrutando la sensación, le digo que se acueste boca abajo, voy a darle un masaje con mis manos, con mi lengua, con mi panocha, la he montado y pongo mi pucha en sus nalgas, siente mis vellos en ellas y me dice que se esta mojando más y más, yo sigo con mi masaje, mis manos tocan con movimientos circulares su espalda, sus hombros, su cuello, me recuesto encima de ella para que sienta mis pechos, empiezo a bajar lentamente y me encuentro con unos hermosos montes que son sus nalgas, las acaricio, las beso y las muerdo.

Danny emite jadeos y gemidos de placer al sentirme, luego con suavidad separo sus nalgas y busco su ano, ella se cohibe un poco, pero le digo que me deje hacer, que ya le llegara su turno y podrá hacer conmigo lo que ella desee. Pongo un poco de saliva en mi dedo, el cual luego pongo en su ano, poco a poco me acerco más y empiezo a lamerlo, ella se estremece completamente, siente extraño pero rico me dice, sigo lamiendo su ano, hasta dejarlo mojado completamente con mi saliva, luego toco su conchita mojada y traigo algunos jugos con mis dedos hacia su ano, ya está más que mojada y excitada de su hoyito apretado, así que lentamente empiezo a introducirle un dedo, la sensación no le es desagradable, al contrario levanta un poco más sus nalgas para que se lo pueda meter mejor, después meto otro dedo acompañando al primero, mis dedos entran y salen de su ano sin ninguna dificultad, está excitadísima y su ano se esta abriendo más y más.

David se ha repuesto ya sólo con ver lo que le hacía yo a Daniela y me pidió ocupar mi lugar, "claro," le dije, "mira cómo esta su ano, esperando una verga," así que yo me moví y le cedí el lugar a mi marido, Danny estaba en un estado de excitación tal que casi no se percató cuando mis dedos fueron remplazados por la verga, claro que David empezó a metérsela cuidadosamente, mientras yo supervisaba la operación, cuando Danny sintió ésta nueva invasión, nos dijo que le dolía un poco, yo le dije que era natural, pero que enseguida se le pasaría, ella estuvo de acuerdo en seguir disfrutando siempre y cuando parara David si ella sentía mucho dolor.

Quedamos de acuerdo, le pedí a David que sacar su verga, la cual llené de lubricante vaginal, puse un poco también en la orilla y un poco dentro del ano de Daniela, ¡esto le gustó!.

Luego la verga empezó nuevamente a introducirse, yo solamente veía cómo poco a poco empezaba a desaparecer dentro del ya muy dilatado ano. Cuando por fin pudo meterla completamente en ese delicioso hoyo, Daniela dejó salir un gruñido de placer, entonces fue cuando me acerqué a ella, y le ofrecí mi pucha llena de jugo, ella encantada empezó a darme unos deliciosos lengüetazos, parecía querer hacerme sentir el placer que ella estaba experimentando, se veía cómo disfrutaba de tener esa verga en su ano, David mientras tanto se estaba dando un banquetazo de ojo, ver a dos hembras cogiéndose y encima de eso, poder meter su verga en un estrecho ano era lo máximo, sobre todo sabiendo que era la primera vez anal de Daniela.

Poco a poco la fue levantando hasta ponerla en una posición de perrito ...se sentía orgulloso de su hazaña, por mi parte yo sentía que de un momento a otro me correría, ya que Daniela me estaba proporcionando un oral maravilloso, ella empezó a moverse más y más aprisa, tenía ya el orgasmo encima, me dio tanto placer que fue imposible contenerme más, me vine con un delicioso grito de placer, sentía los espasmos en mi vagina, David al ver esto, con sus manos tocó la vagina de nuestra amiga, dos o tres pasadas en su clítoris y ella estaba lista, se corrió como loca, sus gritos seguramente fueron oídos por los que estaban en la habitación de junto pero no le importó, al verla en ese estado David no aguanto más, y sacó su verga del ano de ella, se vació completamente en su espalda mientras ella caía lentamente sobre la cama totalmente agotada, al igual que nosotros... con ese tipo de venidas, ¿quién no se agota?.