Fiesta-orgía de inauguración

Andrea (de 20 años), Jimena y Paula (ambas de 19 años) eran tres (mega pijas) estudiantes universitarias que recientemente se habían independizado y entre ellas habían alquilado un piso en un barrio de la zona norte de Alicante.

Se instalaron en aquel la segunda quincena de Agosto, así tendrían algo más de tiempo para ir terminando la mudanza, disfrutar de lo que quedaba de verano y luego ya poder volver a mediados de Septiembre con todo listo e instaladas a las clases.

Uno de esos días de subir trastos de la mudanza a su casa, las tres protagonistas se cruzaron con unos de sus vecinos de rellano: los tres varones de una familia gitana, Fernando (de 53 años) y sus dos hijos Antonio y Romero (de 22 y 17 años respectivamente). A estos últimos se le iluminaron los ojos al ver aquellas tres payas que iban a tener de vecinas. Y no dudaron ni un momento en hacer un primer contacto con ellas, se presentaron a ellas e incluso se ofrecieron a ayudarlas con la mudanza, a los que las tres chicas aceptaron encantadas…

Iban pasando los días y las chicas no dejaban de traer y traer trastos, puesto que, habían alquilado el piso por un periodo de 2 años, ya que la dueña se había marchado a su país natal (Argelia) y no quería dejar el piso tanto tiempo solo por miedo a que se metiera algún indeseable. Antonio y Romero no perdían el tiempo con aquellas payas, y no dejaban de ayudarlas en todo lo posible con la mudanza, llamando a algunos de su primos para que les prestaran la furgoneta.

Los primos de Antonio y Romero eran los típicos chulos de barrio; Juan Andrés (de 29 años), Emilio (de 25 años) y Pedro (de 19) que al ver a Andrea subir a la furgoneta se quedaron igual de prendados al ver a semejante paya, y es que ese día Andrea iba literalmente vestida como una puta de Alcorcón. Llevaba unos shorts vaqueros muy cortos, tan cortos que se le salían los cachetes del culo dejando unas vistas maravillosas, y en la parte de arriba un top, también extremadamente corto con un escote bastante sugerente que dejaba entrever sus enormes tetas. Los cinco gitanos estuvieron todo el camino babeando y fantaseando para sus adentros quien seria el primero en follarse con aquella paya.

Y por fin tras casi una interminable semana de mudanzas, llegó el día 7 de Agosto, día en el que habían organizado una fiesta de “inauguración” de su  nuevo piso. Lo que ella no sabían que aquella fiesta iba a derivar en una orgia fuera de cualquier control. Y a esa fiesta fueron invitados los 5 gitanos que habían ayudado a la mudanza de las chicas.

Las mega pijas como es evidente invitaron a mas gente, unas amigas y amigos todos compañeros de clase. En total eran unas 12 personas. Pero los 5 gitanos todavía no habían hecho acto de presencia.

Iban pasando las horas y los cubatas de Ron, Whisky y Vodka no paraban de rular por el salón de casa, seguían pasando las horas y mas de una (y uno) ya estaba contentillo… Hasta que finalmente sobre las 01:30 de la madrugada sonó el timbre.

Paula salió a abrir la puerta y recibió con dos besos a la cuadrilla de gitanos, que habían llegado con bolsas repletas de litronas de cerveza, alguna botella de vodka del Mercadona y con unos cuantos cogollos de marihuana.

Al resto de los allí presentes (ultra mega pijos también) no les hizo mucha gracia la presencia de aquellos gitanos en la casa , pero aun así se quedaron.

La noche es muy larga y nuestras protagonistas cada vez iban más cargadas de alcohol, y los gitanos ya habían sacado los cogollos de marihuana y comenzaron a liarse los primeros porros, lo que ofrecieron a las tres jóvenes que, hasta ahora nunca habían fumado porros, pero aceptaron sin ningún problema… Fue a partir de este momento cuando todo empezó a desmadrase.

Los porros y los cubatas seguían corriendo y las 3 chicas cada vez más borrachas, hasta el punto que Andrea se levantó el top dejando sus tetas de la talla 100 al aire ante la atónita mirada de los allí presentes que no daban crédito, ahora con las tetas completamente al aire, comenzó a saltar haciendo que se balanceasen y rebotasen.

Romero el más joven del grupo de gitanos y a la vez el más atrevido, que tras esa imagen se encontraba totalmente empalmado, se levantó del sillón y se acercó a Andrea por detrás agarrándole fuertemente las tetas y comenzar a sobárselas, pasado unos minutos de sobeteo de tetas dio el paso y se lanzó a lamerle los pezones.

Eso fue demasiado ya para el resto de  los allí presente, al ver que su amiga Andrea respondió al movimiento del gitano agarrando su polla. Así que optaron por irse del piso y dejar allí a sus amigas con los 5 gitanos.

Paula que también se hallaba bastante caliente, tenía a su lado a Juan Andrés que estaba sobándole los muslo, a lo que ella le correspondió bajándole la cremallera del pantalón y sacar su polla para comenzar a pajearlo.

Finalmente Jimena se vio rodeada por los otros 3 gitanos restantes, que ya la estaban metiendo mano por todos lados.

Andrea cuando se quiso dar cuenta ya estaba de rodillas ante Romero, que éste era virgen e iba a perder su virginidad en una fiesta y con una paya. ¿Qué más podía pedir aquel joven gitano?. Ante su inexperiencia, tuvo que hacer un gran esfuerzo para no correrse a la mínima en la boca de Andrea que no paraba de mamar aquella polla como si no hubiera mañana.

Jimena, también estaba de rodillas pero rodeada por Antonio, Emilio y Pedro; que conforme Jimena les iba manado la polla alterándose y a veces se las metía de 2 en dos en su preciosa boca, ellos se iban pasando el porro al mismo tiempo.

Paula seguía en el sofá, bien abierta de piernas, enrollándose con Juan Andrés que mientras le comía le boca le hacia unos dedos, que con cada mete y saca, sacaba sus enormes dedos empapados de los fluidos de aquel coño que se encontraba muy húmedo y baboso, al mismo tiempo ella agarraba con fuerza la polla mientras le hacia una paja.

Aquel gitano sabia muy bien usar los dedos y tras subir el ritmo del mete saca, hizo que Paula se corriera como un enorme chorro de Squirt, dejando a Juan Andrés flipando y por su boca salieron estas palabras:-“Ay primo! ¡Mirar que guarra la paya que se ha meado de gusto!”- El resto de gitanos se giraron hacia Paula y comenzaron a lanzar vítores y a llamarla puta y guarra, incluso le lanzaron algún que otro escupitajo dirigido a su coño.

Romero quería correrse en el coño de Andrea, estaba deseando meterle la polla a aquella paya tan guarra de tetas enormes. Así que con un gesto le ordeno que parara de mamarle la polla y la llevo al sofá, donde él se sentó e hizo que Andrea se le subiera encima y fuera ella quien le cabalgase a él. Andrea se chupo los dedos y se los paso por el coño, que estaba ya babeando sus jugos, luego agarró la polla de Romero que también estaba bastante chorreante de las babas que le había dejado durante la mamada y poco a poco se la fue metiendo hasta el fondo y así comenzar la cabalgada.

El calentón que arrastraba Andrea la hizo, en un acto casi de locura, levantarse del sofá, agarrar a Romero de la mano y dirigirse al balcón, donde comenzó a metérsela de nuevo, Andrea estaba con medio cuerpo fuera de la barandilla del balcón, con sus tetas colgando en el aire…

Ese balcón daba a un parque, donde había otro grupo de 4 gitanos que se hallaban allí fumando porros y bebiendo cervezas, en eso que oyeron los gemidos descontrolados de Andrea y miraron hacia arriba, donde vieron a Andrea recibiendo los envites de Romero y sus tetas colgando. Ella presa de la borrachera y el efecto de la hierba, entre gemidos de placer, les indicó a ese grupo de gitanos que se unieran también a la fiesta. Los nuevos gitanos no se lo pensaron dos veces y en cuestión de segundos el timbre del 2ºD volvió a sonar….

Sin presentación alguna aquel nuevo grupo entro a la casa y por el camino al salón donde estaba toda la fiesta se fueron sacando las pollas.

Allí dentro se encontraron con Romero follando  salvajemente a Andrea, a Paula haciendo un 69 con Juan Andrés y Jimena de rodillas chupando 3 pollas a la vez…

Jimena al ver a los nuevos invitados, dejo de chupar las pollas y bajándose los pantalones y quitándose el tanga, se puso a 4 patas sobre el sofá y dijo:-“Los que quieran follarme el culo que vayan haciendo cola”- Todo eso mientras se iba metiendo primero un dedo, luego dos y así hasta que metió hasta 3 dedos por su enorme culo para dilatarlo. A los 7 gitanos restantes se les salieron los ojos de las orbitas al ver a tal paya en ese estado de excitación y ofreciéndoles el culo. Pedro fue el primero en meterle la polla por el culo a Jimena que sintió un calambre de excitación al sentir aquella polla abrirse paso por el culo. Entonces Antonio se puso delante de ella ofreciéndole la polla para que se la mamara mientras su primo la enculaba. Pedro no tardó mucho en correrse en el interior de Jimena dejándole una buena corrida el recto, llegó pues el turno de Antonio de follarle el culo y al mismo tiempo Emilio le ofreció la polla a Jimena para que siguiera mamando. Antonio al igual que su primo no duro mucho con la follada anal y acabo corriéndose también dentro del culo, y  tras eso cedió el turno a Emilio, que este duro un poco más que sus primos, y al tener la polla más gorda le dio más placer a Jimena, tras unos minutos más de follada anal, acabo inundándole el culo de leche de nuevo…

Juan Andrés y Paula continuaban con su 69, este tenia unos dotes para usar la lengua y los dedos que hizo que Paula se corriera a chorros de nuevo, por tercera vez en lo que iba de noche, pero esta vez sobre la cara del gitano, dejándole la cara completamente chorreando, los nuevos invitados fliparon con lo que estaban viendo, sabían que las payas eran muy guarras y putas, pero no a ese extremo. Finalmente Juan Andrés se corrió sobre la cara de Paula, dejándola completamente “pintada” de leche que chorreaba por su cara y algunos pegotes ya caían sobre sus tetas.

Romero por su lado, se encontraba sudando y fatigado, no podía seguir el ritmo de la folla que le estaba pegando Andrea, y finalmente se acabo corriendo dentro del coño de la nueva vecina; dejándole dentro del chocho una enorme corrida que era tan espesa que parecía una cuajada de yogurt. Andrea estando en sus cabales no hubiera dejado que se le hubieran corrido dentro, pero en el estado en el que se encontraba le impidió ser dueña de sus actos y acabo con el coño completamente lleno de leche.

El primero grupo de gitanos habían terminado con su faena, se vistieron y conforme se iban les dijeron al otro grupo de gitanos:-“Ahora es vuestro turno de rematar la faena con estas putas”-, y luego dirigiéndose a ellas le dijeron:-“Espero que terminéis de disfrutar lo que queda de fiesta”-.

Andrea estaba tan mareada que ni se dio cuenta que los 4 nuevos gitanos empezaron a mear sobre ella entre risas. Uno de ellos se llevo a Andrea a una de las habitaciones aparte, otro agarro a Paula y comenzó a sobarla por todos lados, y los otros dos fueron a por Jimena que apneas estaba consciente y ni se mantenía en pie del pedo que llevaba en lo alto.

Como bien pudieron colocaron a Jimena otra vez de rodillas y comenzaron a darle bofetadas con su pollas en la cara, para luego hacerle que se metiera sus dos pollas a la vez en la boca.

El gitano que estaba sobeteando a Paula, le quiso meter tan adentro la polla en la boca, que Paula tras una arcada, acabó vomitando parte del alcohol que había ingerido durante la noche sobre su polla, una situación asquerosa, pero el gitano estaba tan cachondo que ni le dio importancia.

Cuando los gitanos terminaron de recibir la mamada de Jimena, uno de ellos se tumbo sobre el sofá e hizo que se subiera en su polla, y el otro aprovechando el orificio que quedaba libre y que se encontraba dilatado por la follada anterior no dudo ni un minuto y se la metió por el culo, comenzando así una doble penetración que la lleno de placer, aquellos 2 gitanos estaban completamente sincronizados que parecía que sus pollas se iban a rozar en el interior de Jimena. Aunque el placer le duro poco, aquellos inexpertos gitanos no tardaron en correrse mucho a la vez, llenándola de leche el culo y coño.

El que estaba liado con Paula, al igual que hizo Juan Andrés, se acabo corriendo sobre su cara dejándola otra vez perdida de semen.

La fiesta acabó oficialmente a las 04:00 de la madrugada. Cuando Andrea se despertó al día siguiente se encontraba completamente desnuda en la cama, no se acordaba apenas de nada de lo que ocurrió la noche anterior, el coño le ardía, miro y lo tenia completamente enrojecido y de su interior todavía brotaba una hilillo de semen. Paula no pudo evitar dar un grito cuando se vio en el espejo: tenia todo el maquillaje corrido, y pegotes de semen reseco por el pelo y la cara. Y Jimena tenia el ano completamente abierto y escaldado, y de su interior no dejaba de escurrir la leche que le habían dejado en el recto esa misma noche.

Ellas no se acordaban ni de la mitad de la noche anterior, pero para aquel grupo de gitanos aquella fiesta de “inauguración” del piso fue la mejor de su vida…