Fiesta de fin de año de las tres parejas
Cuando tres parejas swinger se reunen para celebrar el fin de año, ellos si saben como hacer para que el comienzo, al menos, de ese año sea todo un placer memorable.
Han oído hablar alguna vez acerca del síndrome del "nido vació"??? De cuando los hijos se hacen mayores y se van de la casa? Oh no!! Eso es solo "los hijos crecen y se van de la casa". Yo hablo del síndrome en donde lo importante no es que se vayan sino que, por fin, los padres tenemos la oportunidad de disfrutar de la soledad, de la quietud y si, de lo que por muchos años nos abstuvimos de disfrutar. En nuestro caso, ese nido nunca, pero lo que es nunca, tuvo tanta actividad y tanto calor como el que tiene nuestro nido hoy en día.
Ya son varios años que el último de los hijos dejo la casa y ahora, no solo la casa sino el país. Así que nos quedamos los dos "viejos solos" y cada vez que leo o escucho la palabra "viejo" me sonrío pues pocos? nadie? imagina como mi marido y yo le hemos sabido sacar provecho a esta "soledad". Quien fue que dijo que el sexo es monopolio de los jóvenes? Me permito dudar que muchos, muchísimos de los jóvenes que se dicen ser "sexuados" y "liberales" sepan disfrutar del sexo como lo hemos estado haciendo nosotros en los últimos años.
No me creen? Lean.
Hace ya varios años que nos hemos convertido en avezados y experimentados swinger y son pocos, muy pocos y no solo en América Hispana sino en el Mundo que entienden lo que el swing significa. El swing significa romper con los esquemas de propiedad que La Sociedad nos ha impuesto. Así mismo!!! El hombre que defiende a su mujer y el honor de su mujer lo que está haciendo es proteger su propiedad. De lo contrario, que tiene de malo que otro hombre le meta el pipi cuando él está de viaje? Igual él no es el que está a su lado? En especial a nuestra edad, pasada ya la etapa fértil, cual es daño que se le pueda causar a nadie con un poco de diversión?
Y señora: que tiene de malo que, cuando su marido esté de viaje (o sea usted la que lo está), pueda ser él el que le meta su pipi a la jovencita de la tienda de abajo o a la dependienta del hotel donde se aloja? O tal vez no sea a la jovencita sino, mas bien, a su amiga Judith, a quien el marido abandonó hace varios meses para irse con la secretaria y que le ha estado haciendo ojitos a su marido desde entonces? Vamos!!! Al fin y al cabo, Judith es su mejor amiga y no es lindo que usted sea solidaria con ella y le preste a su marido que tanto la satisface a usted, siempre, que lo haga de vez en cuando con su amiga?
Un poco de solidaridad humana nunca ha hecho daño y mas bien, lo deja a uno con la sensación de que ha aportado un poco de satisfacción a un ser necesitado, o a dos.
El hecho es que hace ya años que somos swinger, como lo dije mas arriba y la Nochevieja, la noche que nos separa del año anterior ha sido siempre una noche para disfrutarla con nuestros amigos que también "han sido abandonados" por sus críos. No, los editores de Cosmopolitan no fueron invitados. Es una noche en la que descollan las panzas abultadas, en ellos y ellas, las tetas caídas, las calvas y las canas. Y eso es lo lindo de poder estar con gente de nuestra generación, gente que se ha librado de las taras y los prejuicios en los que fuimos formados.
Otra ventaja de hacerlo con este grupo tan íntimo es que no nos gusta usar condones y periódicamente nos hacemos exámenes que nos permiten sentir como se desliza dentro de mi una verga dura y caliente. Niños!!! No intenten hacer esto ustedes: embarazos y enfermedades circulan por allí. Solo nosotras podemos permitirnos ese contacto directo y asumo que mas intenso es para ellos el poder sentir todas nuestras humedades y todos nuestros pliegues una vez nos van perforando.
Este 31 de Diciembre no solo que no fue la excepción sino que, a decir de todos los presentes, fue el mejor intercambio del que hayamos hecho. Solo tres parejas, pero eso era todo lo que hacía falta. Al igual que nosotros, profesionales, serios, "pilares de la comunidad", "respetables" ejecutivos, profesionales y uno, hasta presidente de la junta de condominio. Y aficionados al sexo todos seis. La mas joven roza los cincuenta y el mas viejo pasa, no por mucho, los sesenta.
Ya a las nueve estábamos los dos duchados y comenzando a vestirnos para la ocasión. Yo, como anfitriona, sería la batuta de los acontecimientos y yo lo sabía, yo daría el tono de cómo se sucederían los acontecimientos. Yo también tenía mi agenda oculta (o tal vez no tan oculta?).
De las dos parejas, uno de los hombres era un mangote con el cual no solo estaba dispuesta a intercambiar sino que, con él, me iría por una semana a tirar todo el día y toda la noche, los dos solitos y esa noche estaba determinada a sentirlo hasta lo mas profundo de mi.
Como les dije, iban a ser dos parejas de amigos con las que hemos estado tirando por varios meses y que tiran diviiiiiiiino. Lo bueno (para que vean algunas ventajas de ser hetero) es que las otras dos mujeres le meten al bi y entonces me despejan a los dos (y hasta a los tres hombres ) para mi solita parte del tiempo. Yo me puse una faldita super corta, que ya me la he puesto en varias ocasiones y me puse medias esta vez y las pantaleticas de la mariposa que me dejan la cuca abierta. Por encima me puse una blusita transparente, negra y sin sostén y aunque tengo las tetas caídas, a estos hombres les fascina. Lo dicho: no estábamos buscando el premio de Cosmo sino pasarla bien los seis y según pude verlo, en los ojos y en lo que hicieron, los hombres estaban fascinados con mi aspecto y las mujeres me lo mencionaron.
Poco después de la diez de la noche llegó una de las parejas y media hora mas tarde la otra. Las dos mujeres vinieron con ropa "normal" y en la casa se cambiaron. Debo reconocer que quede fascinada ayudándolas a vestirse pues aunque no soy bi, no puedo negar que tiene su encanto ese coqueteo con el bi-ismo.
A una la ayude a ponerse las medias y lo que me gustó fue el poder acariciarle el muslo mientras lo hacia y hasta rozarle la cuca. Ella es mas o menos gordita, mas que yo y le costaba un poco subirse y atarse las medias al liguero y debo decir que disfrute el pasar la mano y sentir ese swwwwwwwwwwish swaaaaaaaash del nylon en mis manos y luego, mientras le ataba el liguero, sentir mis manos sobre su piel. Era como extraño. Yo también me lo hago cuando me pongo medias y liguero y disfruto cuando me lo hacen pero me pareció extraño hacérselo a otra mujer. Siempre me lo ha parecido. Me parece super sensual cuando me están acariciando la pierna, el muslo y me llegan hasta donde termina el nylon y queda esa piel tan sensible y mas aun, cuando me llegan hasta la cuca que a estas alturas ya está húmeda. Mas cuando es con la boca que me lo hacen. Y he aquí que yo estaba sintiendo como mis manos subían por ese muslo, que dentro de poco mi pareja iba a disfrutar y por esas nalgas regordetas que mi pareja tanto alaba.
No pude evitar admirar la cuca afeitada y lisa que tenía. Las veces que habíamos follado con ellos, el vello, que nunca era muy frondoso, ocultaba esos labios tan carnosos que tenia. Hoy la tenía totalmente afeitada y se le veía super rica. De verdad que casi se la mamo.
A la otra la ayudé a cerrase el sostén. Esa tiene unas tetas que Dios se las guarde y que fascina a esos muérganos de hombres y mientras lo hacíamos, que excitación nos daba a las tres putas estar haciendo los preparativos para lograr, en conjunto pararles esas vergas a esos tres hombres que tanto adorábamos. También eso es parte del swing. Cuando vamos a un restaurant, nos paramos juntas para ir al baño, cierto? Pues aquí estábamos las tres, arreglándonos y maquillándonos para lucir las mas excitantes putas que estos tres hombres podían codiciar. Así que cuando estaban listas (yo ya lo estaba antes de que llegaran) salimos las tres putas a seducir a esos machos.
Las dos mujeres se unieron a los tres hombres y las muy putas comenzaron a coquetear con ellos mientras yo iba a la cocina a comenzar a servir los tragos y los aperitivos. Solo que yo, la trabajadora explotada, la mesera, salía a repartir tragos y pasapalos y estos bandidos metiendo la mano en todos lados, aprovechándose de la pobre trabajadora. Yo cargaba dos bandejas en las manos y ellos sabían que yo no podía hacer mas nada, sentados como estaban me ponían la mano sobre la rodilla para de allí subir hasta la pantaleta abierta. Los tres lo hicieron.
Uno de los hombres, el de la esposa con la cuca afeitada no me da mucha nota. Es decir, es agradable y simpático y por eso son tan buenos amigos pero no es gran cosa en la cama pero el otro, el de la mujer de las tetas grandes, es el mango que mencioné antes. Que mango es. Y tiene una verga, aaaaaaaaaaah pero que divina y rica la tiene. Pues ese coño-de-su-madre, me llegaba a la cocina y se me pegaba por detrás y comenzaba a meterme la mano por todos lados y el muy descarado me metía la mano en la cuca y se relamía después los dedos. MI pareja estaba feliz de la vida y yo lo disfrutaba también pues estaba (o estuvo hasta media noche) sentado en el sofá con las dos mujeres a cada lado. En todo caso, el arreglo, no hablado, es que hasta la medianoche no pasaba nada y eso es lo rico pues así como estábamos era que nos tocábamos y nos acariciábamos. Una de las cosas que me puso a millón fue cuando el esposo de la de la cuca afeitada se acercó a su mujer a prenderle el cigarrillo y ve a las dos mujeres con mi pareja y les dice "caramba, miren como ya tienen al pobre hombre " y mientras dice eso le agarra la verga a mi pareja y no hay nada que me excite mas que ver a otro hombre agarrándole (o mamándole ) el güebo, mi güebo, a mi hombre.
La luz era tenue, a pesar de la festividad y así que estuvimos mas de una hora, acariciándonos todos, sintiéndonos todos, metiendo manos todos y generando morbo y deseo que no habría de explotar sino hasta medianoche. Por supuesto que cada vez que yo me acercaba y ellos me tocaban a mi, no perdía oportunidad de meterle mano a ese mango y de sentir esa verga dura y rica. Es que yo me mojo de solo pensar en esa pinga y de las veces que me ha echado esas cogidas tan divinas y aunque ya lo dije, quiero repetir que es con él que yo estaría dispuesta a irme un fin de semana solo para tirar de lo rico por horas y horas. Así que cuando llegaron las doce de la noche, nos paramos los seis en el centro de la sala y nos comenzamos a abrazar y a besar. Por supuesto, el primero que me besó fue mi marido y cuando lo hacia me dice al oído "que puta te ves esta noche cariño, así que mas vale que te goces esas vergas que tienes paradas ansiosas de cogerte" y mientras me decía eso me acariciaba la cuca. Los hombres se abrazaron cordialmente mientras las mujeres hacíamos lo mismo y las otras dos se dieron su buena restregada conmigo cuando me abrazaron pero cuando ellas dos lo hicieron comenzaron las acciones!!! Yo corrí, de verdad, corrí a abrazar AL QUE NO me gusta tanto, para después quedarme con el mangote. Sin duda fue rico como me abrazó y me metió las manos por la cuca y las nalgas y cuando lo está haciendo me llega el otro por detrás, desliza su mano de entre la apertura en la blusa y comienza a jugarse con mis tetas y le dice al otro "pero coño ........ hay que ver que eres un acaparador, vamos a tener que llamar al INDECU" Estuvo pegado detrás mio como lo había hecho en la cocina pero ahora me tenia agarradas las dos tetas y me ha volteado y que lengua tan brava y dura me metió y que divino me besó. Coño es que me toco hasta en la cédula. Por donde no lo hizo mientras yo hacia lo posible por sentirle esa verga buenota que tiene. El primero no se quedó con esa y entre los dos han comenzado a tocarme y mamarme toda. Me hicieron un sandwiche y se restregaban conmigo como les dio la gana y yo sentía como me corrían los jugos en la cuca y como me daba esa piquiña sabrosa en la pepita mientras lo hacían. después de un rato, el otro se arrodilla me levanta lo poquito de falda que tenia y a través del hueco en la panty comienza a mamarme la cuca y que divino se lo veía metido dentro de mi faldita lamiendo y chupándome la cuca. No se en que momento ni como lo logré pero les abrí los pantalones a los dos y ellos se terminaron de quitar las medias y las piernas y los muslos se entrelazaban mientas los dos me atendían a mi.
Yo los paré a los dos frente a mi y comencé a acariciarles las vergas por encima de los interiores. Lo bueno de lo que hacemos (una de tantas cosas) es que no hay envidia así que los dos veían como mis manos les acariciaban esas vergas ricas y divinas y por supuesto que se notaba la diferencia. Además, al mangote ya se le había parado ese monstruo así que se los saqué primero y al otro se lo terminé de parar con las manos y se lo saque también. No se si fueron los whiskeys o el ambiente o que, pero que divino cuando el otro acerca la mano y comienza a ayudarme con el güebote del mango. Estábamos los tres parados y uno de ellos agarrándole la verga al otro así que yo tomo la mano del buenote y se la llevo a la verga del otro. Casi casi acabo allí mismo. Y mas aun cuando volteo y veo que mi pareja está parado mas al ladito y las dos mujeres arrodilladas, mamándole esa verga que te hasta me pareció que la tenía mas grande y dura de lo que yo la haya visto alguna vez.
De lo que pasó de aquí en adelante, no pueden esperar de mi que lo cuente con lujo de detalles pues a partir de ese momento, como en tantas otras ocasiones, me envolvió un torbellino de sensaciones solo que esta vez, los brindis de antes de la medianoche, el año que se va, la preparación en el cuarto, todo todo todo hicieron que yo perdiera la noción de todo y solo tenía mis neuronas pendientes del placer que me estaban proporcionando y sin duda esas neuronas no fueron suficientes como para canalizar el diluvio de impulso y estímulos que estaba recibiendo.
El mango y el otro me habían comenzado a desnudar y no habían terminado de hacerlo. Fe hecho hasta casi el final de la noche no terminé de desvestirme. Me habían abierto la blusa y cada uno tenia en su boca una de esas tetas que ni Cosmo ni Playboy publican pero que a ellos los tenía hechizados. Que divino era sentir como cada uno se jugaba con mis pezones de un modo distinto. El mangote con tanta delicadeza como él sabía que a mi me gustaba y el otro lo hacia rico también pero no como el mango. O sería que yo estaba influenciada por la verga que dentro de poco me iba a meter? Los dos estaban sentados en un sofá y yo parada frente a ellos mientras ellos mamaban y lamían mis tetas.
Las manos de los dos me acariciaban de lado, cado uno en una nalga o un muslo y mientras mamaban las tetas, sus manos me hacían ver el Cielo con como me tocaban estos dos. No lo pensé en ese momento pero lo pregunto ahora mientras escribo: cuantas mujeres en el Mundo, en todo el Mundo han tenido el inmenso placer de tener a dos hombres mamándoles las tetas al mismo tiempo? Y a los hombres? Cuantos hombres han estado mamándose las tetas a una mujer y de los pocos pocos que lo han hecho, cuantos han sido con su propia novia o peor aun, su propia esposa?
Y estoy absorta en el placer que me están dando y el mangote se levanta y ya desnudo se me para al lado y comienza a restregar su verga contra mi muslo y yo de reojo noto como mi marido está parado también, las otras dos deleitándose con su verga rica y de las dos, la mas tragona es la de las tetas, la esposa del mango. Que sabroso fuese que yo me fuese con el mangote y ella se quedase con mi marido? Logro notar como las dos bandidas reparten sus besos entre la verga de él y las bocas de ellas pues agarraban su verga y la lamían juntas y cuando llegaban a la punta, las lenguas de las dos se encontraban y los jugos de las dos se mezclaban en las bocas con la lechita que ya le debía estar saliendo a mi marido. Veo esa cara que conozco tan bien y se que es lo que él está sintiendo peor también se lo que ellas dos están sintiendo porque ese güebo me lo conozco tan bien y todas las sensaciones de los seis las siento yo mientras estos dos me hacen de todo y yo se los devuelvo.
Se para el otro también y de nuevo soy un sandwiche entre ellos pero yo con la falda levantada, las medias cayéndose, la cuca pidiendo macho a través del hueco de la pantaleta y ellos desnudos, presionando sus vergas contra mi. Debo dejar de pensar solo en mi y debo pensar en ellos también, me acuerdo haberme dicho a mi misma y es cuando me siento y me los traigo hacia mi. Ahora soy yo y yo sola la que los va a mamar a ellos y parados como están, uno al lado del otro comienzo a mamarlos. Primero uno, después el otro, de nuevo el primero, repito el segundo y cada vez los lapsos entre verga y verga son mas cortos así como lo es la distancia entre ellos y es cuando me los meto los dos al mismo tiempo.
Qué delicia y que morbo el sentir las dos vergas en la boca y mas aun, el saber que con mi lengua y labios lograba restregarlas una con la otra. Medio levanto la mirada y me percato de que las nalgas de los dos están una junto a la otra y es otro pinchazo, otra descarga eléctrica que siento en la pepita de verlos piel con piel pero la sorpresa estaba por venir. Las dos vergas estaban tan paradas como lo habrían de estar el resto de la noche, no iban a estar mas pero mis flujos, mis pobres y limitados flujos vaginales se incrementaron cuando el otro, no el mango, se sienta al lado mío a ver muy de cerca como le mamo el güebo al mangote y con una sonrisa pícara lo saco de la boca, se lo enseño y sin convicción, solo por joder, le pico los ojos y le insinuó que me ayude.
Y es cuando el otro pone su mejilla al lado de la mía y siento su after shave en mi nariz cuando veo como tímidamente, como si fuese la primera vez, que lo era, acerca sus labios a la verga del otro hombre. Como lo adoré en ese momento y como eso nos estaba uniendo para siempre: estábamos los dos mamándonos un güebo y a medida que lo íbamos haciendo, mas y mas gusto destilaba y lo sentía por los gemidos de placer de los dos, o de los tres. Yo incluida.
Pero allí no paró la cosa. Mi marido dejó a las dos mujeres revolcándose la una con la otra en el sofá y viendo de la fiesta a mi lado, se para al lado del mangote y mientras el otro mamaba al mango, yo disfruto de sentir, por primera vez esa noche, la verga de mi marido, mojada, babosa, sabrosita con el olor y sabor de las dos mujeres que me lo habían gozado y que ahora lo tenía a mi lado. Están los dos hombres parados y el de la esposa de la cuca pelada y yo mamándolos y para mantener la equidad, me lo traigo para que me ayude a mamar a mi marido. El mangote se quedó sin mamadores restregando las nalgas con las de mi marido y poco tiempo después, para no dejar caer la acción, va a donde las dos mujeres y se las lleva a la habitación.
El otro y yo seguimos mamando a mi marido por un rato mas y nos unimos al otro trío en la habitación. La mujer del otro, la gordita cuca-lisa, estaba acostada boca arriba mientras el mangote le comía por completo esa cuca y con su saliva y la de su mujer, esa cuca brillaba mas que una estrella y mientras el mango se comía la cuca de la gordita, su esposa estaba como sentada encima de su cara gozándose una mamada de cuca. De las cosas simpáticas del swing: le mango le lamía la cuca a su mujer a través de la lamida que la hacia a la otra. Lo que se
llama la Ley de Transitividad del Sexo: si uno le mama la cuca a una mujer y esta se la mama a otra, es como si la primera persona mamase la cuca de la tercera. Válido para vergas también, por supuesto.
Al llegar a la habitación, el otro se sonríe con nosotros cuando ve el culo del mango levantado mientras mama a su esposa y comienza a acariciarlo y no sabría decir si fue porque no se dio cuenta o porque estaba absorto en esa cuca rica o pensando que tal vez era yo la que lo estaba acariciando en el culo o sencillamente porque le gustó, el mango comienza a menear ese rabo y es cuando el otro se le acerca y le aloja su verga entre las nalgas. Y nada!!! El mangote ya debía estar sintiendo esa verga caliente entre sus nalgas pues yo se lo que es tener una verga entre las nalgas y no podía ser que no lo sabía y la conclusión que me volvió a generar un corrientazo es que el mango estaba gozando esa verga donde estaba.
El otro se acerca a su mujer y entre los dos comienzan a mamarla pero al cabo de un rato, el otro se hace como si se moviese hacia la boca de su mujer que está mamando a la mujer del mango y hecho el loco acomoda su verga a la altura de la cuca de su mujer, que es donde el mango esta mamando y mientras mi marido y yo nos restregamos viendo lo que pasaba el mango le agarra la verga al otro y con que gusto comienza a mamársela.
MI marido me tumba sobre la cama y acuesta encima mío, se me pega como si fuese a cogerme pero en eso el mangote se incorpora, con mucha amabilidad y dulzura saca a mi marido de encima mío y le dice "no papito, esa mujer es mía esta noche" y me hace levantarme y ponerme en cuatro y él me llega desde atrás y con toda la suavidad comienza a deslizarse dentro de mi. Y es cuando mi marido decide hacer lo que tanto le había pedido y se mete debajo mío, como el mecánico de un taller que se mete debajo del carro a revisar el tubo de escape y mientras el mango me da duro por esa cuca, mi marido comienza a lamerme la pepita.
Cuanto había yo soñado con esa noche!!!??? Mis orgasmos son casi siempre clitorianos y yo he acabado una que otra vez durante las cogidas, en especial con el mangote pero siempre soñé con eso, con tener una verga adentro y una lengua en la pepita y eso me estaba haciendo perder la noción del lugar, del tiempo y de cualquier cosa pues yo ya había pasado el punto de no retorno y mientras oigo al mango bombeando y soltando todo lo que tenía en esas bolas y mi marido lamiéndome con tanta delicadeza la pepita siento como s eme arquea la espalada y como si fuese la primera vez en mi vida comienzo a acabar y acabo y acabo y acabo y no dejaba de acabar mientras el mango seguía bombeándome mas y mas de su lechita dentro de mi cuca.
El otro ya se estaba cogiendo también a la tetona con la otra acostada de lado besándolos a los dos y aupándolos y cuando mi marido se dio cuenta se deslizó por detrás de ella y desde atrás le aparta las piernas, los muslos y se lo mete.
No se si fue lo intenso de la noche o lo rico que mi marido se la estaba cogiendo o el whiskey que había tomado o todo eso junto pero la de la cuca lisa comenzó a acabar junto con la tetona y su marido y menos mal que afuera aun continuaban las festividades pues el ruido que generaron estos tres acabando casi al mismo tiempo hubiesen justificado llamar a las autoridades.
Y yo al momento me di cuenta del nefasto plan de mi marido. No, él no iba a acabar con la cuca-lisa. El la hizo acabar a ella pero se contuvo. El iba a venir a mi, a gozarse esa cuca doblemente, triplemente babosa y resbalosa de mis jugos, de la saliva de todas las mamadas pero, ahora también, con el polvo que el mangote me había dejado dentro.
Mis placeres no habían acabado para mi esa noche. MI marido deslizó esa verga tan bella y tan querida por mi dentro de ese charco que había en mi cuca
Y mientras yo le susurraba, "que rico y que divino me dieron esta noche" él soltaba la mayor cantidad de lechita caliente que yo recordase en mucho tiempo.
"Estuvo rico amor, cierto? " fue todo lo que yo alcancé a preguntar para ser premiada con un dulcísimo "si, mi amor, so que lo fue".