Fiesta de Empresa
Hola soy Amalia, la madurita y ardiente mujer de Juan, os contaré otra aventura que viví, en una fiesta de la Empresa de mi marido, por lo buenos resultados obtenidos.
Todo sucedió cuando cierto día mi marido me avisó telefónicamente que tendríamos que asistir a una cena con gente de la empresa donde trabaja y con algunos clientes, los cuales son personas muy adineradas pues se mueven en el mundo de los negocios, yo como siempre tratando de sobresalir con mi cuerpo y con esto ayudar también a mi marido pues siempre se fijan en la esposa y la critican en esas fiestas, escogí un vestido que me regaló mi marido y que aun no lo había estrenado, que aunque es bastante provocativo me gustaba, pues tenía un escote muy pronunciado en la espalda llegando el inicio de mi culo y de frente caía sobre mis pechos solamente sostenido por dos delgados tirantes, en la parte baja de un lado la falda caía hasta mis rodillas y abierto en “V” invertida que iniciaba en el muslo dejando al desnudo casi en su totalidad mi pierna. Por lo tanto sólo me puse un diminuto tanga de hilo dental, el vestido delineaba perfectamente mi figura.
Mi marido paso a recogerme a casa y llegamos a la fiesta, al entrar en la casa donde era la fiesta ,estaba lleno de personas más de lo que en otras ocasiones, entramos y nos dirigimos hacia donde estaba el Director Comercial, con otros ejecutivos y clientes con sus esposas, saludamos y nos sentamos, aunque me percaté que al saludar los hombres no me quitaron la mirada de encima y algunos de reojo trataron de ver algo a través de mi escote, pues mis tetas invitaban a hacerlo.
Después de un rato de bailar, cenar y tomar los hombres comenzaron a formar sus grupos y a hablar de pie en el salón, las mujeres hablábamos también y algunas seguían bailando, no era raro ver a algunas esposas bailando con personas diferentes a sus maridos pues la mayoría se conocían.
Fui al tocador y al salí me topé con un grupo de 8 compañeros que trabajan con mi esposo, de los cuales 4 casi no me caen bien pero me detuve a saludar uno de ellos, Alejandro es siempre muy atento conmigo y conozco a su mujer por lo tanto siempre me pide consejos y hablamos siempre muy agradablemente, sólo que en esta ocasión todo mundo metía en las charlas luego sin sentirlo fuimos a un salón a hablar todos, ahí había más gente nos sentamos en los sillones que se encontraban ahí, al lado mío se sentó Ricardo el que peor me caía para ese entonces Alejandro se disculpó para ir al baño y comenzó a hablar conmigo Ricardo un tipo moreno alto, del estilo agitanado, cosa que a mí no me llama la atención, como siempre su charla fue acerca de sexo y como siempre a decirme piropos e indirectas, siempre coqueteando.
Me disculpé y dije que iba a buscar a mi marido, al levantarme miré de reojo y vi cómo su mirada era directa a mi culo, al llegar con él se encontraba hablando con unos clientes importantes por lo que me dijo al oído que fuera a darme una vuelta, me retiré y fui a la barra a tomar algo fresco pues había tomado en la cena diferentes vinos aparte de mi bebida y la verdad me sentía medio mareada y con sed, pedí algo fresco al bar y le dije que mientras lo preparaban saldría al jardín y que me lo llevaran allí al andar observaba a los hombres posar sus miradas en mis nalgas y en mi pierna desnuda.
Al salir el aire me afectó más sintiéndome más mareada y recordé que en la parte de arriba hay un balcón que da al jardín con sillas y mesitas, al ir entrando me encontré a Ricardo el cual se acercó a mí y me dijo aquí está lo que pediste, le dije cómo sabes qué es lo que pedí, me contestó que al retirarme de la barra él se iba acercando y escuchó y me llevó la bebida.
Le di las gracias y seguí caminando, él me dijo te puedo acompañar, definitivamente no quería su compañía, pero cómo me lo quitaba de encima, así que le dije qué te parece si bailamos, comenzamos a bailar y él pegaba fuertemente su cuerpo al mío sentí de pronto cómo su polla estaba hinchada esto hizo que yo me retirara pero él seguía acercándose y me hablaba en el oído sólo que al hablar sentía su aliento entrar a mi oído y esto me comenzó a calentar, además de mover lentamente su mano muy sensualmente de arriba hacia abajo por mi espalda, esto hacía que me pusiera más caliente y a la vez con el alcohol sintiera a gusto.
Llegó un momento que extrañamente mi coño empezó a palpitar y a sentirme húmeda, por lo que terminé diciéndole que gracias y me separé rápidamente y fui por mi bebida pero ahora me encontraba más mareada por lo que sin pensarlo tomé el vaso y subí.
La casa es muy grande, llegué a la planta alta y me dirigí al balcón que está hasta el final del pasillo y se debe entrar a una recamara y luego entrar a un jacuzzi y salir al balcón.
Entré y me lavé la cara en el baño del jacuzzi para espabilarme y quitarme lo mareada, luego salí al balcón y me senté descansando un rato, pero la calentura seguía subiendo fuertemente y mi chocho se humedecía haciendo que mi corazón latiera fuertemente, me paré y me incline en el balcón de piedra y puse mi vaso a un lado quedaba la mitad de bebida en el vaso, era jugo de frutas naturales y con esto siempre se me calma el mareo pero ahora no daba resultado así que de golpe me tomé todo el vaso, habrían pasado tres minutos y la calentura era insoportable, de pronto abajo del balcón salió el grupo de personas con las que estaba mi marido.
Lo miré e instantáneamente bajé mi mano derecha y abrí mi vestido y toqué mi coño, sentí que mi cuerpo se estremeció y mi coño húmedo comenzó a recibir las caricias de mis dedos, primero encima del tangas y luego deslicé mis dedos por debajo, me excitaba el estarme masturbando frente a ellos y no se daban cuenta, de pronto necesitaba más excitación así que hice totalmente a un lado la falda y la puse sobre el balcón quedando mis nalgas y piernas al desnudo mientras una de mis manos sobaba mis nalgas la otra metía un dedo en mi chocho húmedo,empecé a moverme frenéticamente con mi dedo dentro y luego me llevé las manos a mi estomago hasta llegar a mi tetas acariciándolas y dándoles pequeños pellizcos a mis pezones, ya no aguantaba más al bajar mis manos nuevamente para acariciarme los tirante habían salido de lugar y el vestido cayó sobre mi cintura dejando mis tetas al aire con los pezones erectos, miré a los hombres debajo mío y la excitación me llevó levantar nuevamente mis brazos liberándolos de los tirantes y cayendo hasta el suelo, el sentirme desnuda fue sensacional, luego me incliné nuevamente sobre el balcón y empecé a acariciarme nuevamente ahora en el clítoris, me encontraba apoyada con una mano en el balcón con la otra en el clítoris y con las piernas abiertas mostrando mi redondo culo y mi coño peludo .
Sentía cómo mi cuerpo ardía y los líquidos corrían por mi coño, comencé a mover el culo de manera que mis nalgas rebotaban hacia mí haciéndome sentir más caliente y mirando cómo los hombres abajo se perdían del show, de pronto en el punto más alto de mi calentura sentí cómo algo tibio se acomodó en medio de mis nalgas, me quedé quieta y luego sentí cómo unas manos se apoderaban de mi culo sobando en ese momento me di la vuelta y era Ricardo totalmente desnudo, me quedé totalmente sorprendida y le dije qué crees que haces, él me contestó haciéndose para atrás un poco asustado, quería hacerte compañía y ayudarte con lo que hacías pero al hacerse hacia atrás lo miré desnudo aquel moreno tenía un físico atlético y lo sorprendente su polla enorme que al verla tiesa, gruesa me hizo sentir algo extraño no podía quitarle la mirada de encima y dio unos pasos y sin pensar nada más me puse de rodillas frente a él y tomé la larga y gruesa polla entre mis manos, la encontré tibia y al tocarla sentí cómo dio un salto como queriendo escapar,
la tomé con mis dos manos y para mi sorpresa todavía sobraba poco menos de media polla lo que hizo que la calentura reventara en mí y ante los ojos atónitos de Ricardo acerqué la polla a mi boca la cual tuve que abrir grande para dar cabida y al entrar mi lengua comenzó enloquecida a hacer su trabajo mientras a la vez la metía y la sacaba en repetidas ocasiones dando pequeños giros de un lado a otro a mi cabeza lo que hacía que él se estremeciera y apretara mi cabeza contra él, en ocasiones tenía que hacer fuerza en contra pues pareciera que él quería que me la tragara completa pero sentía que me ahogaba,
lentamente se fue hacia atrás y se dejó caer en una silla, mientras
yo mamaba su tiesa polla él alcanzó con sus manos mis tetas las cuales pedían a gritos que les dieran una chupada y sentía cada vez más caliente mi coño,
de pronto oí la voz de Ricardo diciéndome que
de seguir así iba a correrse en mi boca,
obviamente yo no quería eso, no porque no se me antojara sino porque necesitaba sentir esa polla dentro de mí, así que me levanté y me dirigí al balcón y tomé la postura del inicio mostrándole mis nalgas y mi peludo coño , mientras miraba hacia abajo viendo a mi marido con las otras personas, esto me excitó todavía más,
ahí estaba yo sobre mi marido follando con otro y él ni cuenta se daba, de pronto sentí cómo las manos de Ricardo tocaban mi espalda y se resbalaron hasta mi culo apretando las nalgas y acomodándose su cálida polla en el medio, yo bajé mi mano y busqué mi coño tomando mis labios y separándolos, para esto él ya estaba con una mano tratando de meterme la polla en mi coño
fue entonces que logró acomodar la cabeza de su capullo y yo sentí que mi cuerpo se electrizó de pronto ese pollón empezó a resbalar dentro de mí lentamente abriendo mi coño mientras que yo daba unos movimientos leves de nalgas gozando tremenda penetración pensando solamente en el placer y en tratar de dar entrada a todo eso, quería todo dentro de mí sentía cómo él tomaba mi culo y abría mis nalgas y la tiesa polla seguía entrando pareciera que no tenía fin, hasta que comencé a sentir un poco de dolor y le dije que tratara de meterlo más despacio pues me dolía, él sólo comenzó en ese momento a resbalar su larga polla en mi húmedo coño hacia adentro y hacia fuera una y otra vez yo sentía que las piernas no me responderían y me contorsionaba de placer moviendo todo mi cuerpo a cada metida, movía yo las nalgas de forma de sentir más
y más hasta que sin darme cuenta sentí cómo chocaban contra mí el abdomen y los huevos de él en mis nalgas y mi coño,
lo tenía todo adentro, la sensación era enorme, yo no acostumbro decir nada cuando lo hago pero en esta ocasión la calentura era extrema y me salió del corazón decirle métemela toda, es la polla más gorda que he tenido, follándome como una puta, cosa que como sabéis es mentira jaja él también comenzó a hablar y me decía así quería que me la metiera por el culo, siempre había querido meterme toda la polla y disfrutar mi rico cuerpo
– Amalia, follas como una puta, te mueves delicioso.
Estas palabras en vez de ofenderme me hicieron estallar en una tremenda corrida por lo que en ese momento tuve que girarme con toda la polla dentro ya que deje escapar un fuerte gemido de placer y mi marido y los de abajo miraron hacia arriba, afortunadamente logre quitarme a tiempo aunque mi marido sabia que me follaba a todo el macho que se me pone a mi alcance no quería que en esa fiesta se dieran cuenta de lo puta que soy,mis piernas ya no me respondieron y Ricardo logró mantenerme de pie, sentí cómo la polla resbaló hacia afuera me llevó a un asiento,
yo reventaba de placer mi abdomen seguía convulsionándose y en ese momento abrió mis piernas y vio cómo su polla húmeda por mi orgasmo se enfilo hacia mi peludo coño y de un golpe empezó a entrar, yo sorprendida miré cómo mi coño se tragaba toda la polla hasta llegar al tope, tal fue mi calentura al ver esto que nuevamente sentí otro orgasmo y me abracé a él, para luego caer en el asiento, miré su atlético cuerpo y cómo terminaba uniéndose dentro de mí por su polla, el comenzó nuevamente el mete y saca e instintivamente comenzó la calentura y me movía frenéticamente contra él mientras con su boca se apoderó de mis tetas y comenzó a chuparlas que sentía que me las quería arrancar mientras con sus manos se apoyaba de mis caderas atrayéndome hacia él metiendo y sacando su polla de mí,
luego bajé mis manos y rodeé sus huevos y comencé a acariciarlo mientras entraba y salía de mí hasta que al sentir con mis manos el movimiento rítmico y su rostro con una expresión de calentura total nuevamente comencé con una corrida que se unió con la corrida de él que en ese momento comenzó a soltar chorro de leche dentro de mí los cuales sentí con una fuerza extraordinaria y me abracé a él su polla estaba hasta adentro y no cesaba de correrse sentía cómo su leche caliente me llenaba cada vez más mi chocho, los dos terminamos y me recliné en el asiento y él sobre mí sin sacár
mela, descansó un rato y luego se retiró de mí y
yo aún un poco excitada quería ver cómo salía tremenda polla de mí, y así fue lentamente se fue saliendo y aun con que ya estaba floja era de tamaño considerable, salía húmedo por los líquidos de ambos y al salir la cabeza mi coño empezó a escupir borbotones de leche
, lo cual en vez de darme asco me excitó y dejé que se escurrieran hasta mis nalgas dejándome húmeda, Ricardo amablemente me dijo
– quieres que vaya por papel, yo le dije
– no déjame sentir toda esta leche tuya calientita sobre mí.
Él estaba de pie frente a mí y comenzó a decirme que había sido extraordinaria que había sido una de las mejores folladas de su vida y sobre todo con una mujer tan buena, para esto él andaba a lo largo del balcón y yo sólo miraba su polla colgando y meneándose a cada paso, hasta que no aguanté más y le dije ven aquí, él se acercó y lo tomé de las caderas acomodándolo de manera que tomé su polla floja y me la metí en la boca y empecé a darle una mamada como nunca lo había hecho, al introducirla de inmediato sentí el olor y sabor de la leche lo que hizo que me calentara y en ese momento le dije quiero que me llenes la boca de tu leche como me llenaste el coño
¿crees que puedas otra vez?
, él me dijo por ti lo que quieras cachonda, me la metí nuevamente y él sobaba mis tetas luego como el sillón era para dos personas se sentó y yo me acosté sobre sus muslos mamando su polla, así el podía sobarme por donde quisiera tocándome el coño, las caderas, las nalgas y luego me sobaba el clítoris jugando los pelos de mi coño.
Después de un rato me apretó fuertemente las tetas y su polla se convulsionó expulsando chorrazos de leche que chocaban nuevamente con gran fuerza en mi boca, yo trataba de retener lo mayor posible pero me pareció demasiado cachondo tragar todo aquella porción de leche que recibía, pero dado el tamaño de la polla no pude más y lo saqué de la boca, por lo que lo último salpicó mi cara dejándola húmeda y pegajosa.
Luego lamí y chupé la larga polla hasta retirar todo residuo de leche, me quedé recostada sobre aquel monumento de polla, acariciándole el pecho a aquel amante que antes yo repudiaba y ahora me había hecho sentir unas de la mejores corridas que he tenido de mi vida y eso que como sabéis ya son miles jeje, él me miró a los ojos y me dijo algo que en realidad me sorprendió, de verdad dio resultado la bebida, yo me quedé confundida y le dije cuál bebida y me dijo un compañero que estaba en el grupo saliendo del baño me dio un liquido el cual provoca una gran excitación y al comentarle yo que quería follarte desde hace mucho me dijo que intentara dártelo y resultó, yo lo miré recordando el placer que había recibido y le dije yo no necesito nada soy muy caliente y puta cuando quieras repetimos y me reí,ademas cuando quieras vienes a casa quiero que Juan mi marido vea como me metes ese pedazo de polla que tienes, a él se le dibujó una gran sonrisa y luego nos vestimos nos dimos un gran beso y le dije que él bajara primero que luego bajaría yo, yo en ningún momento me limpié la leche que había escurrido por mis piernas y nalgas, quise dejarlos como un grato recuerdo y que si lo recordé pues al bajar las escaleras al movimiento de mis piernas sentí que mi tanga se humedecía y más liquido escurría, en ese momento suspiré y expresé una gran sonrisa al momento que me unía a un grupo de señoras para hablar.
Espero en un futuro repetir esta experiencia y contarles esto pues ahora por qué el tener relaciones fuera del matrimonio son tan excitantes, por favor quiero conocer sus comentarios.