¡Feliz Cumpleaños, David!
Tomamos el taxi y en cuanto subimos empezó todo: tus manos sujetaban mi talle y mordías mis labios mientras jugueteaba con los tuyos
Tomando en el bar con la gente por tu cumpleaños. Por lo menos esta vez tenemos un motivo Generalmente y simplemente- salimos a tomar porque es viernes.
Y dijiste: "necesito hablar contigo"
Y contesté: "claro, dime qué pasa"
- "mmm, no, aquí no, hay mucho sapo mejor vamos un toque afuera "
- "ok dale "
- "dime, que pasa.."
- "es que, en un toque ya nos quitamos, con una gente nos vamos a mi jato y quería saber si te apuntas "
- "aaasu, hasta Chorrillos?? Y quiénes van a ir, ah?
- "una gente "
- "pero quienes pues.."
- "mmm, tú y yo "
- "ah! tono de a 2 y porqué me invitas a mí, ah? Si la ultima vez me dijiste que ya no pasaba nada "
- "es que estaba en otra nota y como que "
- "ah! ya entiendo, soy la única cojuda que está disponible "
- " no, no es eso lo que pasa es que he estado pensando muchas cosas y bueno, yo quería "
- "mira, no te hagas paltas por las puras, ya? Sólo dime si esto es de una noche nomás y porfas sé honesto, que sólo te voy a pedir una cosa "
- (ríes pícaramente, porque sabes que ya caí) "a ver, qué cosa "
- "que te quedes callado, porque si escucho por ahí un comentario huevón de Arturo ó de quién sea, te juro que te vas a arrepentir "
- "jaja, y qué me vas a hacer "
Te miro fijamente, fingiendo indignación y tomándote de la mano te alejo de la entrada (como para que nadie nos vea) me inclino hacia tu rostro, beso tu mejilla mientras mis manos acarician tu rostro. Y sigo mirándote, "y qué vamos a hacer en tu casa" pregunté Te acercaste a mi oído y susurraste eso que hizo que me mordiera las labios, y aunque ya estábamos cerca, acerqué tu cuerpo hacia mi que ya estaba recostada en la pared y te besé "vámonos pues"
Regresamos a la mesa y la gente seguía en su charla, nos sentamos cada uno por su lado y nada, todo seguía normal hasta que me llegó un mensaje que decía: "y quién sale primero?"
Levanté la vista y te miré extrañada (creo que ya estamos un poco viejos para estas vainas), y contesté: "tú".
Saliste despidiéndote de unos cuantos y texteaste otra vez, qué pondrías porque no lo leí, hasta que pasaron como 10 minutos y regresaste, me tomaste de la mano y me sacaste apresuradamente en medio de las pifias y los silbidos de toda la gente qué risa carajo
- "Eso querías, no?" dijiste, mientras me reía
Tomamos el taxi y en cuanto nos subimos empezó todo: me recosté hacia ti y te besaba muy despacio, bajaba hacia tu cuello y acariciaba tu cabello, tus manos sujetaban mi talle y mordías mis labios mientras jugueteaba con los tuyos
Me gustas, puta madre, me gustas mucho, quiero que me hagas de todo, te susurré al oído, mientras sonreías y seguíamos jugueteando mientras me manoseabas con rudeza y gemía para tu goce Deslizo mis manos por debajo de tu polo, quiero sentir tu piel tibia en mis dedos, quiero ver tus brazos rodearme mientras uh, qué rico muerdes, hazlo otra vez
Llegamos a la casa, te abrazo y acaricio las nalgas mientras abres la puerta, al pasar y mientras echas las cerraduras me quito el saco y el chaleco, saco mi blusa del pantalón y me voy acercando hacia ti, te beso y tomándote de la mano te siento en el sofá, recojo un cojín y lo tiro al suelo, te abro las piernas acercándome mientras me arrodillo y te miro con lascivia y sin vergüenza, me inclino y después de chupar y morder tus labios, te pido que me desabotones la blusa lentamente, lo haces y acaricias mis senos y los muerdes por encima de la tela qué bien se siente
Con delicadeza te quito esa chompa celeste que tanto me gusta (hasta ahora no comprendo por qué motivo) y me acerco a tu oído para susurrarte cuánto te deseo, que me gustas, y que quiero que me tomes, mientras tus caricias me encienden la piel y los mordiscos se hacen más rudos, lo único que puedo hacer es gemir, cada vez más y más fuerte, me abandono a tu hacer y acaricio tus piernas subiendo poco a poco "quiero comértela hasta que acabes en mi boca" te susurro mientras te miro y deslizo tu pantalón, te manoseo el pene sobre el algodón y tus labios se entreabren al sentir el calor de mis manos "empieza pues", ordenaste "como tu digas", contesté
Te tomé entre mis manos y comienzo a besar la punta primero, luego a chupar y dejo que mi saliva se deslice por el tronco y mis manos que ahora te masturban lentamente, y llevo mis labios hacia la base, chupando tus testículos y gimiendo de placer sabes cómo me encanta darte sexo oral, me enciende y me pone como una perra en celo a medida que sigo succionándote y escuchando tus bramidos mientras me insultas y empujas mi cabeza haciendo que me atore, pero sigo, me gusta Después de que me has cogido a tu antojo por la boca, te retiras y me acaricias el rostro con tu glande, preguntándome si me ha gustado, si la quiero dentro de mi, si quiero que me rompas con tu verga; contesto que si a todo porque estoy tan excitada y caliente. Lo único que hago es mirarte, el deseo y el morbo que me provocas no lo había sentido por nadie.
Te ofrezco mi mejor ángulo, mientras hago mi cabello hacia un lado y te miro sobre el hombro:
- "ven aquí, castígame que he sido una niña muy mala"
No tengo que decir más, vienes hacia mí y tomas mis caderas entre tus manos con dureza, mis glúteos se zarandean a medida que te posicionas y de una me penetras ah! Doy un suspiro y me meneo empujándome hacia ti, me pegas haciendo que me detenga.
- "Quédate quieta, que este culo me lo como a mi manera"
Tus movimientos que al principio eran suaves y acompasados, ahora son violentos y salvajes, mis quejidos te ponen a mil y te calientan, jalas mis rizos arqueando mi espalda, me estas empalando con tanta fuerza que siento que me vas a partir en dos, estoy sometida y me encanta; me estas maltratando y me encanta. Te detienes, y es que ahora me toca moverme a mí
Te siento sobre el sofá y lentamente me introduzco ese animal que me ha estado torturando, me muevo muy lento mientras masajeo tus testículos con mi mano, y al arquearme hacia atrás es que empiezo a sentir como se me va calentando todo, poco a poco mis gemidos van en aumento, mis senos se bambolean al compas de la cabalgata y acabo. Mis espasmos disminuyen poco a poco pero tu no me das tregua, te empujas para seguir penetrándome y puedo sentir ese rayo caliente del orgasmo recorriéndome otra vez mientras que tu leche caliente me inunda poco a poco.
Y eso que recién empezamos