Felicidad por partida doble.

Mi estado de felicidad por conseguir mi visa a Alemania hace que conozca a un polícia muy macho que me dará una gran cogida.

Soy un asiduo lector en este foro, tengo muchas historias registradas en mis favoritos, realmente admiro a muchos de los que escriben en esta sección pero hace unos días me ocurrió una situación digna de contar. El lunes tuve la cita en la embajada de Alemania en la que me confirmarían si me daban el visado para irme a estudiar mi segunda carrera. Había estado ahorrando por mucho tiempo para poder tener un fondo y poder mantenerme allá mientras lograba estabilizarme y encontrar un empleo para subsistir. Para mi buena suerte, la embajada se encuentra a solo unas calles de mi hogar entonces no me tomó mucho tiempo ir y asimismo regresar. El resultado, positivo, me dieron la visa y yo me encontraba extremadamente feliz, con esto mi vida cambiaría mucho. Regresé a mi hogar a ponerme algo más cómodo e ir a un buen restaurant a engreírme.

Dicho sea de paso, no les he contado sobre mi. Tengo 23 años. Mido 1.82m, unos 15cm por encima de la media en Perú, además que me gusta ir muy a la moda, cuido mi apariencia, además que según mis amistades tengo una caminata algo peculiar, como si siempre estuviera modelando, aunque creo son exageraciones de mis amigos pues no fuerzo mi caminar ni nada. Lo que más resalta en mi y lo que me han acotado muchos de mis amantes masculinos son mis piernas y el culo, muy redondo y que con casi cualquier tipo de pantalón me ponga hace su aparición.

Volviendo a la historia, recién había salido de casa, vivo en una zona residencial de Lima que para mi suerte es una de las más custodiadas y seguras de la ciudad, aunque es dificil mencionar que este lugar tenga lugares seguros. Estaba caminando mientras oía algo de música, la sonrisa en mi rostro era muy evidente por la noticia recibida hace un par de horas y a pesar de todo estaba muy abstraido en mi mundo que no me di cuenta que estuvo a punto de atropellarme un carro de seguridad distrital, solo pude mencionar disculpas mientras el conductor y el copiloto me increpaban mi falta de responsabilidad, y para ser sincero, yo no podía quitarle los ojos al copiloto, también era de seguridad pero era increíblemente guapo, debajo de su uniforme se adivinaba un muy cuerpo además de tener una mirada muy fuerte que al parecer notó que no le sacaba los ojos de encima pues por un momento me pareció que me había sonreído, siguieron un par de minutos mas comentando mi falta y se fueron. Me quedé muy contrariado y mientras seguía caminando imaginé a aquel semental y no pude evitar tener una erección, felizmente tenía un abrigo puesto y evitaba se note.

Decidí sacar eso de mi mente y dirigirme al restaurant, me pedí mis platos favoritos y la verdad me encontraba muy feliz, me hacía mucha ilusión mi viaje e imagine todo lo que sucedería en el país teutón incluso hasta después de terminar mi almuerzo y volver caminando a mi hogar, grata fue mi sorpresa que al pasar por el lugar de mi incidente se encontraba aquel guapo especimen, como custodiando la calle. Justo antes de cruzar el semáforo cambió a rojo. Era lunes y a las 3pm en la zona donde vivo no hay tanto movimiento, el tipo notó mi presencia y se quedó observándome. Yo simplemente no podía aguantar su mirada y miré hacia el semáforo, cuando cambió de color cruce hasta la acera donde se encontraba el de seguridad.

Al pasar por su lado no quería ni verlo pero el se acercó un poco y dijo: "ahora si estuviste atento al semáforo"

Yo no pude evitar reírme y responderle: "Lo siento, me distraje". El soltó una risa que se me hizo de lo más masculina e hizo volteara a mirarlo extrañado. El me miro directamente a los ojos y me dijo: "Por supuesto, te distraíste mirando mi cuerpo, que piensas, que no me di cuenta".

No sé que cara debi haber puesto que hizo que el sereno se acercara más a mi y susurrara: No fuiste el único, yo ya te había visto unos segundos antes y no podía dejar de verte, sobre todo tus piernas, no las escondas con tu abrigo. Me quedé mudo realmente.

"¿No dices nada? Al parecer me equivoqué, perdoneme usted" Y empezó a caminar.

Yo lo detuve, y le dije que me había dejado un poco enfrío pero que no se equivocaba con lo que me decía. La tensión era muy alta y yo no quería dar el paso, en verdad si queria pero siempre me gusta esperar a lo que los otros lo hagan y yo ceder, felizmente este tipo la llevaba muy clara.

"Mira, yo termino mi turno en un par de horas. Me das tu número y podemos ir a tomar algo y vemos, o (Esto lo dijo más bajo) prefieres ir directo a la acción. Y yo que no quería muchos rodeos, le dije que sería mejor ser francos, le di mi número y le dije me llame apenas esté libre para vernos. El tomó nota y se despidió diciendome tenía que seguir haciendo guardia. Yo volví a mi hogar totamente sorprendiendo pero con una excitación que de solo tocarme me vendría a chorros.

El tipo en cuestión debia estar por el 1.85m, con muy buen cuerpo, una mirada penetrante, de color oscuro y una voz tan masculina así como sus ademanes que hicieron me derritiera. Llegué, ordene un poco la casa y darme una ducha para hacerme la limpieza respectiva pues por lo que podía intuir el tipo parecía era de esos que follaba muy duro.

A las 7pm puntual recibí su llamada, me dijo estaba por salir de su turno y me consultaba donde nos encontraríamos, le dije que venga a mi hogar pero de preferencia venga de civil pues tengo un portero que es algo chismoso y quería evitar las habladurías a pesar que no era el primer hombre metía en mi hogar. En 30 minutos llegó y primero le ofrecí algo de beber, me pidió solo agua entonces fui a la cocina, con lo que no contaba era con que me seguiría y se pegaría a mi espalda y a besarme el cuello casi boto el vaso por la sorpresa, simplemente me deje seducir y dejar que ese semental recorriera mi cuerpo.

Poco a poco iba sintiendo su dureza contra mis nalgas y vaya, se sentía algo muy grande, el solo me susurraba al oído las ganas que tenía de ponermela. Al parecer no estuvo con rodeos pues procedio a bajarme el pantalón y boxer y amasarme las nalgas, el hizo lo miso con su pantalón sin antes sacar un sachet de lubricante y un condon y ponerlos a un lado. Al bajarse el boxer note su grandeza. Tranquilamente eran 20cm de carne dura, que emanaban un olor a macho terrible y su cabeza apuntandome, lo primero que hizo fue simular una penetración mientras seguía mordiendome la oreja por detrás y decirme que me la quería meter así, yo no quería perder el tiempo así que cogí el lubricante y empecé a untarmelo en el ano mientras el se ponía el condón. Al estar listo, se puso un poco en la punta y empezó a introducirlo, yo la verdad estaba en el cielo y muy lubricado así que mucho dolor no sentí, solo cuando al ir por la mitad la clavó entera, alli me hizo emitir un grito que fue mas gemido que lo primero, al ver que no había mayor resistencia empezo a meter y sacarla a una velocidad que me resulto espectacular, yo solo podia gemir mientras el mordia mi cuello y daba pujidos muy masculinos. De seguro todos mis vecinos me escucharon pero eso no me importaba por el momento, estuvo a ese ritmo unos 10 minutos diciendome se correria. y le pedi salga y se venga en mis gluteos, le gusto la propuesta fue salio y solo se dio 3 jaladas y senti mis nalgas llenas de su leche, yo solo necesite de 5 jaladas para venirme en todo el suelo de la cocina, el se sujeto a mi para recuperar el aliento y yo apoyandome de la encimera pues había sido muy extremo.

Pasaron un par de minutos y mencionó: "Ni creas que ha terminado, yo no me voy sin ponertela al menos 3 veces asi que espero no tengas planes porque no me voy", esas palabras me pusieron tan feliz, el como si no pesara nada me cargó y empujo contra la pared a devorarme la boca. si cogía increible ni les digo que eran sus labios, no me queria despegar. En un momento para respirar me preguntó por el baño le indique donde estaba y me dijo: "bueno, alli te cogeré de nuevo". Me cargó como si nada hasta allá. Allí prendi la ducha y bajo el agua siguió besándome. Aquello estaba resultando perfecto. por mientras noté se le volvia a levantar, asñi que me arrodillé a devorarme aquel pedazo de carne que se me antojaba a mas no dar. El al comienzo solo e agarraba de las orejas y dejaba tenga mi ritmo pero luego empezó a embestirme la boca durante un rato hasta anunciandome su corrida, le alce un pulgar en señal que podia correrse dentro de mi boca, eso lo motivó más a seguir hasta darme todo su nutriente lacteo que tome con sumo placer. Terminamos la ducha, le pase una toalla y fuimos a mi habitación donde nos repusimos un poco. Me empezó a contar sobre el, que trabajaba ya 3 años en seguridad, estaba soltero pero ya en casa lo comenzaban a presionar a que se casara pues ya tenía 30 años, el me dijo que era bisexual pero no creía en el matrimonio además que le gustaba su independiencia pero le estaban hinchando los huevos sobre todo su padre que ya quería nietos, su padre tambièn trabajo de policía al igual que su hermano mayor. Pensamiento machista, lo comprendí, me consultó por mivida, le mencioné que en unos meses me iba a ir a Alemania a vivir, se alegró pues a el le hubiera gustado poder estudiar algo pero su familia no tenía mucho dinero y una forma de estar tranquilos era ingresando a trabajar en seguridad ciudadana. Debo admitir que se me hizo un hombre muy sensato, maduro y con ideales, lo cual permitía buena química entre nosotros ademas que el no era ningun iletrado. Le consulté si queria cenar algo pero me dijo ya lo habia hecho antes de salir del turno.

Ya se hacia muy tarde y a mi me entraba el cansancio y el no tenia ninguna intencion en irse, e comente que ya quería descansar y si se quería quedar pero me comentó debía volver pues su familia lo esperaba. Fui a la puerta a despedirlo y había un poco de tensión. Al decir adiós, el se me fue encima a seguir besandome, si no fuera porque de verdad tenía sueño hubiera dejado me follara por tercera vez pero lo corté. El entonces me dijo: "te debo la tercera, así que atento a tu celular porque en serio, quisiera verte de nuevo, tu quieres?" Y me lanzó una mirada tan como de súplica que no pude decirle no. "Yo también quiero volver a verte". Sonrío y me dijo me llamaría estos dias y lo vi marcharse.

Me eché en cama pensando que había conocido a un hombre que no solo era un macho en la cama sino un caballero fuera de, me dejo intrigado hasta que me dormí. La pregunta es, ¿Lo volveré a ver? Uno nunca sabe,ya les contaré si hay algo nuevo...