Federico 40

40

Federico

Antes de éste relato, se deberían leer “Federico 21 al 39”… éste Federico 40 es la continuidad y algunos personajes o situaciones son enganchados, puede ser que no se comprendan en su totalidad…

Rutina…

Así pasó el tiempo, yo llevaba a mi hermanito a la escuela, tenía sexo con Silvina, con Claudia, con Isabel, con Emanuel, con mi abuela cada tanto, lo que siempre mencionaba que era sexo sin compromiso, bueno con mi mamá y mi abuela ja ja no tenía que aclarar tanto…

Lo tenía como consigna fundamental dejar establecido el tema…

Sin compromisos heee…

Con la que le daba seguido era con Teresina, la chica que hacía la limpieza en casa, con ella éramos amantes, ya lo dije que le regalé mi moto cuando me fui a España, salíamos los sábados a bailar, al cine, salíamos con el motorhome y ahí cogíamos sin ningún problema…

Una idea genial…

Parece que todos ya lo sabían, me preguntaban si había hablado con mi papá…

La cuestión era que cuando nos pusimos a hablar me dijo su idea…

La de hacer un hotel de lujo en la casa del Tigre, que él consideraba que estaba desperdiciada y de paso les daba entretenimiento a la gente…

Tiene un poder de parla que si lo dejan hablar no lo fusilan ja ja…

Y cómo sería pa…

Bueno vos sos el que sabe del gremio, no al pedo fuiste administrador del mejor restaurant de Barcelona e inauguraste un hotel restaurant en Valencia…

Y hablamos y hablamos…

La casa tiene ocho dormitorios con baño, sala de música, comedor, estar, cocina y no sé cuántas cosas más…

Decidí que hacían falta diez habitaciones más…

Se lo dije…

Voy a hablar con Teresa.

La arquitecta de la empresa, amiga de la familia, esposa del doctor, los padrinos de mi hermanito, ja ja serían mis compadres pensé…

Pa no te compliques, hacé una tira a dos aguas con cinco habitaciones de cada lado, todas con baño,  dejá un pasillo en el medio y dale salida también para el parque, nos va a servir que estén alineadas, que tenga galería por los dos lados…

Me quedó mirando.

Si es así ya la diseño me dijo…

Todos estábamos enloquecidos, Isabel, Claudia, Emanuel y el más enloquecido yooo, les había dicho a los tres que íbamos a trabajar juntos, a Claudia que se jubilara en la docencia, le faltaban unos meses para la edad…

A Emanuel que vendiera la parte del boliche, que acá iba a tener trabajo a cagarse…

Y a Isabel, que se pusiera a hacer ejercicio, que ella iba a ser la cara del hotel, le encantó lo que le dije, me acordé de un jefe de cocina en Barcelona, cuando lo hacés partícipe a uno se multiplica.

Inicio de obra…

La construcción fue a los pedos, mi viejo con el jefe y su cuadrilla, le daban como diez horas por día…

Hicieron una tira a dos aguas de tejas, con un pasillo al medio, una galería rodeando las amplias habitaciones, con salida para el pasillo y para el parque, quedaron hermosas, en la galería pusimos sillas, mesitas y reposeras…

Tuve que supervisar todo lo referente a computación.

Cumpleaños y fiestas.

Para no perder la costumbre con las fiestas de cumpleaños de pa, ma, y mío hicimos unos asados de locos, la pileta estaba llena, creo que en casa había como cincuenta personas, no faltaba nadie, en mi caso recibí felicitaciones de todos.

Saben quién me saludó, Camila de Salta, Estela de Formosa, Ester de Uruguay y  Alicia y Celeste de Mendoza, hinchado de gozo estaba, que se hayan acordado me hizo muy bien, les agradecí con bastantes palabras, tampoco quise preguntar mucho, ya tengo 25…

Las fiestas de navidad y fin de año fueron algo parecido, la pileta llena de amigos, la parrilla humeante, música, baile, risas, la verdad es que disfrutamos, de Salta vinieron los padrinos Raúl y Carmen.

Las trillizas todos los días, con los hijos y las parejas, las chicas y sus parejas, las doctoras, la gente de la pileta en el edificio, o sea el que era gerente de bancos con su familia, el comisario y Sonia, un montón…

Estábamos en la pileta, un calor agobiante, mediados de enero y  como ya la construcción de las habitaciones estaba bastante avanzada se lo tire…

Pa necesitamos que nos construyas un quincho comedor para quince mesas cocina y dependencias, va a ser un restaurante del hotel y para el que quiera venir sin ser huésped…

Fede me imagino que ya tenés una idea de lo que querés no…

Y le tiré otra vez, grande, vidriado, alto, escenario, mesas, cocina vidriada, dependencias como ser baños, depósitos, cambiadores, sala de descanso, no me quedó nada por pedirle…

También me la pasé pensando como dos meses e investigué muchísimo…

Y unos dormitorios comunitarios para mujeres y varones, que quepan cuatro cuchetas en cada uno, son para los que se tengan que quedar o descansar…

Listo dijo, mañana con Teresa hacemos el proyecto y en cuanto terminemos las piezas arrancamos me dijo…

A traición y no me gustó…

Me parece que no fue una buena idea la de llevar el motorhome a la casa de la isla, era para quedarme ahí, no me gustaba dormir todos los días en la casa…

El problema vino en que Emanuel estaba cada rato conmigo y cada rato me hacía una mamada, que se la metiera, que durmiéramos la siesta, claro él trabajaba de noche.

Una tarde que mientras dormíamos y después de acabar dos veces, estaba destruido, los dos desnudos en la cama del mh, no va que el guacho al estar durmiendo boca abajo me monta y me la empieza a meter, cuando me di cuenta ya la tenía adentro, no me dolió mucho, la tiene mucho más chica que la mía, estuve un rato recibiendo su pija, no me gustó, tampoco me gustó que me lo hiciera a traición, de arrebato, me di vuelta violentamente y lo tiré de la cama, cuando me miró se dio cuenta que había metido la pata…

Perdón, perdón, no sé qué me pasó, Fede no te enojes, Fede perdoname no se volverá a repetir…

Tomátela, rajá de acá, no te quiero ver y claro que no se volverá a repetir, si llegás a hacer otra cosa así te reviento, chau!!!

Agachó la cabeza y se fue…

(No me gustó que me cogieran, pensé).

Quedó claro quién manda…

Como me acordaba de las cagadas que habíamos hecho en el restaurante en Barcelona y en el hotel restaurante en Valencia, trataba de no volverlas a hacer, así que organizaba para no meter la pata…

Resultó que me di cuenta que lo que había mandado a hacer no se había hecho, es más se había hecho justo como hicimos cagada con mi hermana en Valencia…

Cuando averigüé resultó que Isabel y Claudia lo habían cambiado…

Las llamé y les pregunté por qué habían cambiado mi orden…

Me torearon las dos, que ellas consideraban que cómo ellas pensaban estaba mejor…

Me subió una bronca bien de adentro, pero me mantuve tranquilo, les expliqué las consecuencias de la cagada que se habían mandado, una a una les fui dando razones por las que se habían equivocado…

Cuando parece que lo reconocieron…

Ahora, les voy a decir algo que será la única vez que lo oirán…

Acá el que dirige soy yo!!!

Grité a más no poder, se asustaron…

Y están castigadas, vengan arrodíllense acá, acá dije!!!

Se agacharon.

Háganme una mamada de castigo vamos!!!

Meta gritos las hice poner en cuatro con el culo levantado y le di una serie de cachetazos a cada una que me quedó la mano doliendo, no me imagino el culo de ellas…

Santo remedio, todos entendieron que no se discuten mis órdenes…

Desde ese día tanto Isabel como Claudia me adoran…

A la que había contratado ya era a Teresina, la morocha, no solo trabaja como tres sino que por las noches duerme conmigo en el motorhome, nos pasamos unas noches en el hidromasaje y la cama hasta entrada la mañana, después cuesta llevar adelante el día, no se queja, encima hace de espía mío, me cuenta todo lo que pasa por todos lados…

Me acuerdo cuando le dije a mi viejo que iba a hacer con mi vida, cuando me dijo que tenía tiempo para trabajar…

Hijo de mil, el tipo y el padrino, terminaron todo lo referente a construcción y se fueron a la mierda, me dejaron con semejante quilombo, tenía que volver a organizar un hotel y un restaurante…

A la que pude enganchar fue a mi vieja, ella nos iba a llevar toda la contabilidad…

Buscando personal…

Tengo que ocuparme de buscar el personal, dónde mierda busco gente, creo que son como 10 o 20 personas…

Al que le hablé fue al que reparte mercaderías por todas las islas, también a los de las lanchas de pasajeros, a todos les decía lo mismo…

Buenas chicas de 20 a 50 años, que sean de las islas, sin demasiados problemas…

Que les dijeran que me vinieran a ver…

Se corrió la bolilla y llegaron un montón de mujeres, estuve haciendo entrevistas como una semana…

La buena noticia fue que el de la lancha de mercaderías me preguntó si no necesitaba una buena cocinera, que su mujer y su cuñada fueron cocineras muchos años y si se ponen a trabajar no me rompen las pelotas ja ja…

Siiii le dije decile que vengan mañana.

Josefa y  Sigris pasaron a ser las cocineras…

Como Isabel, Claudia y Emanuel estaban castigados ni siquiera se acercaban, cuando yo con cinco mucamas hacía el recorrido por las habitaciones indicándoles cómo se debían hacer las cosas, qué cosas hacer, en qué prestar atención, me seguían, observando mi enseñanza…

También cuando a cinco mozas les indicaba cómo servir, qué prestar atención, cómo llevar las bandejas, cómo limpiar las mesas, los detalles a tener en cuenta, con las adicionistas, el manejo de las cuentas, de los registros, qué observar, con los ayudantes de cocina, cómo lavar las copas, cómo acomodar la vajilla, en fin me observaron cómo le di indicaciones a todos…

Menos a las cocineras, ahí no sabía, salvo hacer un tuco…

Otra cosa que organicé con ayuda de Teresina fue que todos debían correr al menos media hora por día, que tuvieran un buen estado físico, ayudaba que teníamos pileta, sala de masajes, gimnasio…

Cuando nos juntamos con Isabel, Claudia y Emanuel, pensaron que se les venía otra cagada a pedos…

Pero no, le especifiqué cuál sería el rol de  cada uno, Emanuel e Isabel de recepcionistas y Claudia de supervisora general…

También les di muchas indicaciones, me miraban embobadas, les recalqué cuál iba a ser el trabajo de cada una…

Para rematar las indicaciones les di un beso de lengua a las tres, felices se retiraron…

Del club dónde practiqué artes marciales contraté a cinco compañeros, se iban a ocupar de la seguridad, también les indiqué cuál serían sus consignas, qué cuidar, cómo comportarse…

Y fundamentalmente las compañeras son sagradas dentro del área del trabajo, afuera ningún problema…

Ja ja les cagué las ilusiones…

Usaban muy seguido los dormitorios cuchetas para descansar, viajaban de lejos…

A Teresina no la puse en ningún lado, me gustaba usarla de comodín, trabajaba como la mejor, pero me parece que iba a servir estando sin compromiso específico y no porque durmiera conmigo, podría servir para ocupar cualquier faltante y que no dejara de hacerme lo que me hace por las noches ja ja, ventajas de ser el jefe…

Continuará…