Federico 29a
Sexo, viajes, sexo, bailes, sexo.
29A
Federico
Antes de éste relato se deberían leer “Federico 21 al 28”… éste Federico 29 es la continuidad y algunos personajes o situaciones son enganchados, puede ser que no se comprendan en su totalidad…
DE QUÉ SE TRATA ?
El presente es un relato sobre una etapa de la vida de un muchacho…
Cuenta cuando con 24 años, volvió de Barcelona España, trabajó en un restaurante y estudió en la universidad…
Se recibió de director y administrador de empresas…
Sus amores, sus desengaños, de aventuras, romances, estudios, trabajos, peleas…
Soy Federico Martínez, un metro ochenta, blanco, pelo castaño oscuro, ojos negros, mi cuerpo representa horas de natación, de tenis, de baile, de artes marciales, también de inglés, que es todo lo que me mandaron a estudiar además de la escuela y todo lo que he vivido “por mi cuenta”.
Había vuelto de Barcelona, allá trabajé en un restaurante de tres amigas de mi padre, ayudé a la construcción de la ampliación de un hotel y restaurante de mi abuela materna en Valencia…
Me recibí en la universidad de Barcelona de administración de empresas…
Me he pasado cinco años meta trabajo y estudio…estoy de vuelta con mi familia…
Bueno, con parte de la familia, la otra parte son la que tienen el hotel y restaurante en Valencia.
Como con la familia había arreglado que me tomaría un tiempo para pasear, primero por el país, luego por otros, y andaba con un motorhome con todos los chiches, doble tracción, o sea 4x4, por dentro era un lujo, con baño con hidromasaje bien grande, con cama bien grande, no le faltaba nada, pero nada, todos los adelantos que puede tener un motorhome…
Por fuera estaba pintado exprofeso como si fuera uno viejo, medio oxidado, para no llamar la atención…
Además tenía una moto, una honda 125 que llevaba en el techo del mh., la subía y bajaba con un aparejo con un motor, muy fácil, la usaba para moverme por los aledaños, mi motorhome estaba de lo mejor equipado…
Había partido el primero de septiembre, anduve por algunos campings, he conocido gente interesante, estuve de bañero, de profesor de baile y lo que más me gustó… trabajando como changarín en un viñedo, en pleno sol, en medio de las plantas, aprendí mucho.
En principio iba a ir desde Buenos Aires, por la ruta panamericana hacia el norte, pero no sé por qué terminé en Mendoza…
Ahora estoy en San Juan, en una fiesta de cumpleaños en la ciudad de Jáchal,…
Lavado del motorhome…
Eleonor con un pantaloncito bien corto, que se le metía en los cantos del culo, mojada y enjabonada toda, con un cepillo en la punta de un mango de madera y una manguera lavaba el motorhome, ya había limpiado por dentro, dejó todo brillante, hasta se subió al techo, me hizo bajar la moto, que también lavó, limpió lustró…
Fanática de la limpieza la señora…
Yo con una planilla que me había hecho mi madre controlé los niveles de líquido del motor, de aire de las cubiertas, de agua para tomar, del baño, de la cocina, del aire acondicionado, los paneles solares…
Tuve que llamar a mi abuelo Federico para preguntarle sobre un instrumento de ubicación, que no era el gps y de paso me explico cómo hacer para poder ir hablando por teléfono mientras voy manejando…
Cuando se enteró que estaba con una señora, quiso hablar con ella, de guacho primero hice una video llamada y la enfocaba a Eleonor empapada hasta el culo, que también le enfocaba…
Se pasaron hablando como media hora, tuve tiempo de ir como a seis cuadras a comprar aceite y agua para el motor…
En un momento que estaba de espaldas pasando un trapo a los escalones de la puerta la agarré de atrás, primero se sorprendió, después sonrió, le bajé el pantaloncito, me costó por lo mojado, le corrí la tanga y de la metí en la vagina…
Haaa, gimió y ahí en el medio del patio estábamos cogiendo…
Claro como está todo cercado no se ve de los costados…
Cuando se la metí en el culo gimió de dolor o placer, le tiraba el pelo, le daba manotazos en los cachetes, al rato acabamos juntos…
Guacho, qué polvo que nos echamos me dijo…
Como habíamos quedado el miércoles nos fuimos a buscar a la familia del hijo, hicimos el viaje escuchando música, teníamos una buena relación, ella sabía que yo después de las fiestas me iba, en principio me quería ir antes, pero me convenció y me gustó el quedarme…
Por esa ruta con paisajes hermosos llegamos a la entrada que corresponde para ir a la granja de los Quispe…
Llegamos enseguida, hasta me parece que su propiedad llega a la ruta, vaya uno a saber…
La casa de material, un poco venida a menos, le haría falta una pintada…
Tienen vacas, caballos, gallinas, chanchos, una huerta espectacular, una plantación de cebollas…
Cuando llegamos una felicidad de parte de todos…
Salomé me dio un beso cerca de los labios…
Almorzamos pollo al horno de barro con papas, comí un pollo entero creo, después fui a dormir la siesta, ellos se quedaron conversando…
Al rato vino Cristian…
Fede, me dejás dormir contigo.
Si Cristian vení…
Al rato los dos durmiendo…
Sentí como nos miraban, Salomé y Eleonor…
Lástima que se tenga que ir, le decía Eleonor a la nuera, yo me lo quedaría para siempre…
Si, y lo compartirías no ja ja…
Se acostaron en las cuchetas…
Después de la siesta cargaron las cosas y emprendimos el regreso a Jáchal…
A la noche vinieron a dormir conmigo Cristian y Catalina, ellos en las cuchetas…
El jueves 24 fuimos con la moto como seis veces a comprar diferentes cosas, al mediodía Rogelio hizo asado y para la noche iba a hacer en lechón…
Esta gente se mata de hambre…
La siesta dormimos otra vez Cristian y Catalina en las cuchetas y yo en la cama, hablé con la familia…
Con el aire acondicionado es una delicia dentro del mh…
Cerca de las siete de la tarde aparecieron Juan, Débora, Gisela y Claudio…
Juan se prendió a la parrilla y a la cerveza con Rogelio…
Los chicos se fueron a jugar…
Me quedé con todas las mujeres…
Catalina me pidió permiso para ir a mi casa dijo…
Si Cata andá, está abierto…
Y estábamos rellenando empanadas, Eleonor, Salomé, Débora, Gisela y yo…
Muy suelta de cuerpo Eleonor me dice…
Fede te tenés que coger a Débora, es la única que no lo ha hecho con vos, te molestaría echarle un polvo a mi hermana.
Me quedé duro, por la pregunta, por el lugar y la situación…
Heee…qué decís Eleonor.
Todas me miraban, tragué saliva…
No tendría ningún problema pero ella tiene su marido…
Juan no puede coger, con la diabetes no se le para.
Y empezaron a organizarme como tendría que hacer…
Iban a darle mucha bebida a los hombres y dejar que los chicos duerman en una habitación todos juntos, después irían por turnos…
Eso sí primero Débora…
(tendré que tomarme dos pastillas azules pensé)
Me parece que no tuvieron que insistir mucho con la bebida para los hombres, decí que cenamos casi sobre las doce de la noche…
Brindis de noche buena y los tuvieron que llevar entre dos a cada uno…
Los chicos encerrados en una habitación y tranquilamente del hombro Débora y yo no fuimos al mh…
Apenas cerré la puerta nos comenzamos a besar…
Es más joven que Eleonor pero no tiene la pasión de la hermana, nos metimos en el hidro, nos besábamos, le mordía los pechos, mientras ella estaba empalada, en el hidro la hice poner de rodillas y se la metí por el culo…
Hijo de puta despacio que hace mucho que nada entra por ahí…
Al instante se acomodó…
Nos echamos otro polvo en la cama…
Miró la hora en el tablero del frente, se levantó y se acostó en la cucheta…
Al rato entró Salomé en la cama, me hizo una mamada para que se me pare, se sentó sobre mí metiéndosela, le mordía las tetas, le daba besos, ella acabó dos veces, yo una…
También se fue a acostar a una cucheta…
Como a la media hora aparecieron Eleonor y Gisela, cerramos la puerta y el trío fue perfecto, la tenía re dura pero no pude acabar, ellas un montón de veces…
El olor a café nos despertó, Gisela estaba apoyada en mi pija, Eleonor en mi pecho, al despertarnos no tuvo más que dar vuelta la cara y meterse mi pija en la boca…
Se me recontra paró, ella se sentó metiéndosela y Eleonor en mi cara, acabamos los tres…
Desayunamos los cinco y fueron a despertar a los demás…
Nada de comentar dónde se durmió…
Yo necesitaría un poco más dijo Débora…
Todas lo necesitamos nena, ja ja ja…
La navidad la pasamos con un almuerzo frío del sobrante de anoche, cena de sopa, ya que el sábado iríamos a hacer el camino de los molinos históricos.
Hablé con la familia.
El sábado 26 partimos temprano, yo manejaba, de copiloto Juan, los chicos en la cama, en las cuchetas Catalina y Gisela, los demás a la mesa…
Los molinos han sido declarados monumentos históricos, son varios: el de la familia Reyes, Molino de Sardiña, Molino de los García, Molino de los Dojorti.
Desde la época de las colonias los molinos producían la harina con el trigo de los campos, se movían con agua…
Visitamos un lugar llamado Barreal de Pachimoco, son socavones a lo largo del río…
Fuimos recorriendo los distintos molinos, el gps., me indicaba para dónde ir, los visitábamos, algunos lo mirábamos desde el motorhome…
En el Molino de la familia Reyes nos bajamos los diez, un edificio de adobe con techos de paja y barro, se ve la acequia que traía el agua para mover el molino…
En el pueblo de San Isidro, en una especie de pulpería almorzamos, es un pueblo de casa de adobe, visitamos la capilla.
Después fuimos al pueblo de Villa Mercedes, el mismo tipo de pueblo, visitamos la iglesia, seguimos al pueblo de Entre Ríos, dimos la vuelta me parece, viva el gps…
Sobre el camino vimos las casas de adobe con techo de palo y cañas…
Esa noche tuvimos fiesta, música, bailes, picante, los hombres se chuparon para el campeonato y muy sabias las chicas los llevaron a dormir a mi cama, ya que mañana tendríamos que salir temprano…
Los chicos a las cuchetas, a Catalina le armaron una cama en el suelo del motorhome.
Cerré la puerta con llave dijo Salomé después de acostar a mi hija…
Durante la noche abusaron de mí…
Menos mal que existen esas pastillas milagrosas y que tengo 24 años y que tengo un muy buen estado físico…
Sabés lo que es aguantar a cuatro mujeres desenfrenadas…
Decí también que se arreglaron entre ellas…
Débora se asombró cuando vio a la hermana con la hija o con la nuera, un rato le duró el asombro, se le fue cuando se la metí en el culo…
No dormimos en toda la noche…
Salimos por el mismo camino que ayer, pasamos por un poblado llamado La Falda, bajamos a comprar dulces, tabletas y tortitas jachalleras artesanales, con dulce de tomate y membrillo…
Desayuné con las cinco mujeres, los varones restantes estaban durmiendo…
Después bordeamos la falda de la sierra, subimos hasta el Dique Los Cauquenes sobre el río Huaco, hay un lago chico…
Dice prohibida la pesca, que raro…
Llegamos a un túnel, hice bajar a Catalina para que se fijara si no tocaba la moto arriba en el techo del túnel, me hacía señas que avanzara que sobraba lugar…
Leí que es la Sierra Negra la que atravesamos…
Llegamos a la Cuesta de Huaco, la ruta baja siguiendo el río desde el dique hasta el pueblo de Huaco.
Entramos en el camping La Ciénaga, paramos para almorzar, armamos unas mesas, banquetas, y despertar despertaron a los durmientes…
Hermosas sierras coloradas…
Después de guardar todo seguimos, nos bajamos en un mirador de la Cuesta de Huaco, balcón natural sobre la cuesta, con cerros de colores ocre y rojo, la ruta serpenteando entre los cerros, como entretenimiento buscábamos figuras erosionadas en las rocas.
Bajamos en Termas de Agua Hedionda, aguas sulfurosas, muy curativas creo pero no hay nada…
Propuse que nos metiéramos…
Casi obligamos a Rogelio y todavía más a Juan…
Cuando le dije que eran aguas buenas para la diabetes se metió volando…
Todos en calzoncillo, bombacha y corpiño ja ja…
Estuvimos unos minutos nada más te marean se te quedás más, salimos renovados, sobre todo los que habían chupado anoche, a secarse…
Nos sacamos la ropa mojada todos…
Dentro del baño heee…
Creo que todos menos yo se quedaron sin ropa interior, ja ja…
Luego de varias vueltas llegamos a Huaco, es un pueblo que tranquiliza, dan ganas de recorrerlo, sus casas de adobe, caminos llenos de árboles con cotorras y loros, sus montañas moradas, bajamos en una pulpería, nos cominos unos sanguches y nos volvimos…
Llegamos de noche a casa…
Esa noche Rogelio y Juan decidieron no tomar…
Ja ja les cagaron la fiesta a las chicas…
Comentaron que lindos días estaban pasando.
Y mucho te lo debemos a vos Federico, cuando nos levantaste en la ruta, cuando me dijiste de bañarme dijo Rogelio y a mí cuando me dijo de preparar comida, abrí la heladera con un miedo y tenía de todo…
Y a nosotros que nos llevó a conocer el Parque San Guillermo, toda una vida viviendo acá y nunca había ido…
Cuando nos tiraron a la mierda en el río…
Ja ja, la cara de orto que tenía la tía dijo Claudio, perdón…
Ja ja y yo que tengo que decir entonces dijo Eleonor…
Decime abuela, Fede es tu hombre ahora, le preguntó Cristian…
Se produjo un silencio…
Si amor, pero hasta fin de año nada más, el año que viene se tiene que ir Federico…
Y no es muy joven para vos.
No Cristian, yo necesito de pareja a un muchacho joven para que me aguante, ja ja.
Andá tía no te agrandés le dijo Gisela…
Y así salimos de las preguntas indiscretas, a Rogelio mucho me parece que no le gustó, menos le gustaría saber lo de Salomé, pensé…
Se fue la familia que tienen que atender sus negocios, Catalina y Cristian vinieron a dormir al mh…
Para la fiesta de fin de año vinieron varios invitados, se bailó, cantó, bebió hasta las cinco de la mañana…
No se quedó nadie…
El primero al mediodía fuimos a comer a la casa de Juan…
Hablé mucho con la familia…
Cuando el 2 de enero fui a llevar a los Quispe me había despedido de todos, Eleonor me besó en la boca, la familia de Juan a los besos y abrazos, todos me dijeron que vuelva, que me esperaban, que los venga a visitar, que los llame, y que y que…
El caso es que cuando dejé a la familia en su granja ni me bajé…
Emprendí el viaje para Guadacol, pude hablar con todos de casa, mientras manejaba iba cambiando de interlocutor, hasta llamé a los de España…
Guadacol es un pueblo pequeño, con pasado mejor, calles desoladas, visité la casa de Felipe Varela, uno de los últimos caudillos que luchó contra el poder centralista de Buenos Aires, no está abierta al público, la quieren hacer museo…
Estuve en el Olivo Histórico, desde donde partió una de las expediciones de San Martín a Chile…
Después rumbo a Fiambalá.
Continuará…