Federico 22a

Conversación con mi hermana, viaje a cuba, noviazgos.

22A

PARA PRESTAR ATECIÓN.

Antes de éste relato se deberían leer “Las Vueltas que tiene la vida” , en todas sus partes, ya que éste… “Federico” es su continuidad y algunos personajes o situaciones son enganchados…y puede ser que no se comprendan en su totalidad…

DE QUÉ SE TRATA ?

El presente es un relato sobre una etapa de la vida de un muchacho… cuenta su niñez, llega a cuando con 18 años, terminada la secundaria, se va a Barcelona, España, habla de su trabajo en un restaurante, de sus estudios en la universidad, sus amores, sus desengaños… hasta  los 23 años…años de aventuras, romances, estudios, trabajos, peleas…

FEDERICO.

Por lo menos para mí fue así! en mi caso yo lo creo, no siempre uno se hace hombre cuando debuta sexualmente,  a mí me pasó! creo…

Cuando tenía 7 años e iba a ingresar a una escuela nueva, a segundo grado, le menciono a mi hermana que me gustaría que mamá estuviera acá…

Ella se da vuelta y brutalmente me dice…dejate de llorar y lamentarte, no seas llorón, entendela de una buena vez…no va a volver más, se fue, nos dejó, se fue con otro hombre, avivate boludo!!!

Y sí, ahí fue!!!

En ese preciso instante…

En el que dejé de lamentarme, dejé de hacerme ilusiones, si! ahí fue!…

Ahí me hice hombre, creo…

Desde ese día ya me sentía más grande, más seguro, más hombre…

Nunca más volví a mencionar a mi madre…

Nunca más volví a llorar, sí señor, ahí fue en que me hice hombre…es lo que creo… en mi caso.

Cuando yo nací mis padres cumplían 26 años, ya existía una hermana de un año, Esperanza.

Mi hermana es una preciosura, blanca, con un cuerpo perfecto, es lo que creo, yo le llevo unos centímetro de altura, así que debe andar por el metro setenta y cinco…

Mi padre Antonio Martínez, es ingeniero y mi madre María Estigarríbia, es contadora, es tan alta como mi padre y yo…uno ochenta, blanca, de pelo negro, cuerpo trabajado por la natación…

Todos cumplimos en diciembre, yo el 4, mi hermana el 5, mi padre el 6 y mi madre el 7…

Soy Federico Martínez, un metro ochenta, blanco, pelo castaño oscuro, ojos negros, mi cuerpo representa horas de natación, de tenis, de baile, de artes marciales, también de inglés que es todo lo que me mandaron a estudiar además de la escuela…

Me acabo de recibir de técnico informático y me voy a Barcelona,  a trabajar en un restaurante de unas amigas de mi padre, a pasear y a estudiar…

Él me acaba de decir que por dinero que no me preocupe que si necesito pida y listo, pero yo soy bastante orgulloso y me gustaría ganármelo…así que vamos a ver que depara el destino…

Por lo pronto voy a contar todo lo que recuerdo de mi vida…me encanta anotar y dejar registrado mis momentos vividos…

Todavía no tengo nada de qué arrepentirme, por lo tanto puedo anotar todo…y trataré de contarlo más o menos como lo sentí en ese momento.

CONVERSACIÓN CON MI HERMANA.

Había ganado una competencia de natación en el club…lo que pasa que para mis años (fue antes de cumplir) yo era el más grande de todos, le sacaba como una cabeza a mis competidores.

Además estaba súper entrenado, en mi casa, mi madre y mi abuela me corregían cualquier mal movimiento que hiciera al nadar, eran exigentes.

Mi viejo me dijo…

Fede, esta competición la podés ganar muy fácil…ganá por poco, no demuestres todo lo que podés…no hace falta, primero para no dejar ver tu real potencial y segundo para no humillar a tus adversarios…

Y así hice, gané por poco…me dieron una hermosa copa…

Bueno lo cierto es que mi hermana me dice…

Fede, quiero hablar con vos algo muy importante, vamos a tu pieza…

Qué pasa Pere...

Quiero dejar de ser virgen, quiero tener mi primera experiencia sexual…y quiero que sea papá el que me desvirgue…

Vos me dijiste que se coge hasta la abuela, así que se lo voy a pedir…

Él es bien experimentado y me va a cuidar y me va a hacer gozar…

Qué te parece...

Es más vos podés decirle a mamá que lo haga con vos también, sos bastante grande!!!...

Que lo parió, qué digo…

Pere si vos ya lo decidiste, si te parece que es lo mejor, sabés que yo siempre te voy a apoyar en todo, que te amo…

Y te parece que le diga a mamá...

No me sacará cagando...

Decile lo del abuelo, lo de la abuela y papá, que hablaste conmigo y sabés lo que voy a hacer con papá…

Vas a ver que no se opondrá…

Y así fue…

Má, necesito hablar algo muy importante con vos…

Si hijo, decime…estuve hablando con mi hermana y me contó, lo que quiere con papá…yo también quiero lo mismo con vos!...

Qué es lo que querés Fede...

Quiero hacerme hombre, tener mi primera experiencia sexual, quiero que seas vos mi primera mujer, la que nunca me podré olvidar (todo el mismo verso que me había enseñado Débora y que tan bien me resultó con Lumila)…

Me dejás asombrada Fede, es cierto lo de tu hermana, pero lo tuyo…

dejame que lo hable con tu padre…

Cagamos, pensé, él ya sabe que de primera vez nada…

Y no, no dijo nada mi viejo, se calló e hizo como que no sabía nada…

Debe ser porque se iba a voltear a mi hermana…

Mi mamá buscó la ocasión, cuando estábamos en su habitación me dijo…Fede yo no sé cómo hacer esto, nunca he estado con un chico y menos con mi hijo…

Má dejá que haga yo, que he leído mucho en internet (un poco mentira…leer leí, pero era por la experiencia)…

Y comencé a abrazarla, a besarla por las mejillas, el cuello, me pareció que si apuraba los besos de boca, podría sentir rechazo, le fui sacando la ropa, acariciando todo su cuerpo, cuando estuvo toda desnuda, la besé, la lambí, la chupé, jugaba con mis dedos en sus labios vaginales, en su clítoris, ella pegaba unos gemidos espectaculares, acabó en mi boca, la tomé de los tobillos, le levanté las piernas y con mucha suavidad se la fui metiendo hasta el final…

Ah, la tenés un poco más gruesa que papá, dijo…

Y con firmeza estuve dándole un rato bastante largo, acabó otra vez, sin salir de dentro de ella la besé en la boca, me aceptó con pasión…

Te amo hijo…

Y después sexo anal, mamada, cubana,  estuve  aplicando todas las enseñanzas de Débora como por tres horas…se quedó dormida…

Pasando un tiempo volvimos a tener sexo, hasta me ayudó con Lumila…después cuento...

FUIMOS A CUBA.

Los seis, hicimos escala en Perú y después derecho a Cuba, nos llevaron al hotel con un auto como el de mi abuelo, precioso, grandote, de los de antes, mi papá y yo adelante y los demás atrás, entraban cómodos.

Parece una ciudad de la época de la colonia Cuba, algunos lugares están destruidos, recorrimos todos los lugares que había que visitar, plazas, museos, bodegas, fábricas de habanos, plantaciones, no se nos pasó ninguno…

Mi viejo y mi abuelo, se tomaban “mojitos”, yo lo probé y es muy fuerte, no me gusta el alcohol…

Después de varios días nos cambiamos de hotel, a uno que estaba pegado a la playa.

Yo me iba con mi hermana todos los días a nadar, a las noches había espectáculo en un teatro que tenía…

Me encantó nadar con los delfines, lo  inteligentes que son, te dan besos, te pasean, te suben de las plantas de los pies y te tiran, son geniales.

Recorrimos la tumba del “Che Guevara”…era argentino. Pasamos a otro hotel en Trinidad, que ciudad pintoresca, todo pintado de colores fuertes, música por todos lados, pasamos por otro lado y nos volvimos…

Dicen mis abuelos que tienen que regresar para terminar de conocer todo Cuba…

A mi mucho no me interesa…

DESFILA EL AUTO DE MI ABUELO.

Lo habíamos lavado, lustrado, cepillado, decorado, estaba hecho una pintura, fuimos con mi viejo, el jefe y mi madrina…

Mi abuelo manejando…en el desfile del pueblo, nos pusimos, unos sombreros, mi abuelo y yo adelante y mi madrina atrás…el jefe y mi viejo no quisieron desfilar…

Para no afear el auto decía el jefe…

Después invité a dar una vuelta caminando a mi madrina, con un helado y le conté de Lumila, (de mi mamá no me atreví)…quise ser sencillo pero no me dejó, quiero todo, con lujo de detalles, desde el primer momento…

Y ahí estuve, narrando desde que comenzamos a bailar, hasta que me bajé de su auto…

Así se hace ahijado, ya estás listo para dejar contenta a más de una chica, pero ojo…siempre con respeto, con humildad, nunca te creas el súper macho y por sobre todas las cosas, “nunca seas bocón”…

Es una enciclopedia mi madrina…

ACONTECIMIENTO.

Me parece que fue cuando empezaban las vacaciones de julio, ahí nació, el hijo de Silvina, Norbertito, Tito le decíamos, lo cuento porque después iba a resultar mi hermano, Tito Martínez, mi viejo lo reconoció como suyo…

Con mi hermana estábamos muy contentos, nos gustaba Silvina y ahora nuestro hermanito…

Mirá cómo nos habremos integrado familiarmente que mi viejo dormía con mi mamá y con Silvina…con las dos juntas!!!

DE NOVIO.

Había invitado a Jennifer a ir a dar una vuelta en lancha (yo para el cumple pedí un ciclomotor y me lo regalaron, pensaba llevarla con ese) le conté un poco a mi abuelo y me dijo…

Vos no podés manejar la lancha por el río, si te agarra prefectura te mete en cana, porque no le hacés un asadito, escuchan música en el velero y cuando llegue la tarde se vuelven...

Ok, compré unos Paty y una coca y nos fuimos, cuando llegamos al velero hacía un frío bárbaro, prendí unos calefactores, puse música, y recorrimos todo el velero…

Yo le contaba para qué sirve cada cosa, ella me dice…

Hace mucho frío para andar en lancha Fede, hacé la comida y escuchamos música en el camarote calentitos, (justo lo que me recomendó el médico).

Ok…comimos y tranquis, en el camarote, calentitos, tan calentito estaba que la empecé a besar, acariciar, en ningún momento me rechazó, cuando le comencé a quitar la ropa…

Fede, yo soy virgen, si lo vamos a hacer quiero que me cuides, que no me lastimes…

La verdad no lo podía creer, todas las estupideces que pensé de ella…

Jenny, vos confiá en mí, vas a ver que vas a disfrutar mucho y será una excelente experiencia…(verso, pero verdad)…

Y una vez más, apliqué toda la instrucción de mi profesora, madrina Débora… hasta me puse profiláctico doble, me contó que sintió apenas un pinchacito al perder su virginidad, cuando empezó a perder el miedo, se soltó, y respondía con pasión, gemía y gozaba.

_Nunca me voy a olvidar de éste momento, nunca creí que pudiera disfrutar tanto, sos genial Fede, le voy a contar a mis compañeras para que lo hagan con vos, que sos un maestro (ni un poquito de afecto la guacha, me iban a usar…no me quejo!).

En esa vacación fui con Jenny tres veces, dos veces con Trinity, una morochita muy bonita, ella ya no era virgen.  Dos veces también con Lola, una compañera de Jenny y de mi hermana, gordita, las hijas de puta de las compañeras la llamaban corchito, tapón, con buenas tetas, le sacaba como 20 centímetros, blanca, parecía mi mamá de jovencita, muy simpática, a mí me encantaba.

Hice todo igual que con Jenny, Lola quedó enamorada de mí, fui su primera vez…

Es más, en los recreos, le compraba chocolates y conversaba con ella, las compañeras celosas, nos cargaban “la gorda y el flaco”, “la enana y el lungo”, como  me hinchaban las pelotas, reconocí ante todos que somos novios, hasta Lola me quedó mirando, después conversando, me dijo.

Fede… no me humilles ante la gente, sabés que yo te quiero mucho, pero me dolería muchísimo…

Lola, de ahora en más vamos a ser novios ante todos y si hay algo que tenemos que cumplir es respetarnos… pero sabemos entre nosotros que de mi parte, cuando me reciba y cumpla 18, me voy a España…

Ok y yo un año antes voy a ir a la universidad y vivir en La Plata…

Ok, quedamos de acuerdo, novios por el tiempo que nos quede…

Con el pasar de los días íbamos “aceitando” nuestra relación, ella entendía que era su novio oficial, y que si me salía algo… con mucha discreción…

Me llevaba de maravilla con Lola, me llevó a visitar a su madre…Teresa, igual a mi madre cuando tenía unos kilos de más, era cirujana, trabajaba en clínicas y hospitales por todos lados, al quedar a solas conmigo, me sentó…

Y qué pensás a hacer con mi hija...me interrogó…

Nada, somos novios hasta que ella se vaya a la universidad, la voy a cuidar y la voy a proteger, éste tiempo que estemos juntos lo vamos a pasar genial…

Te la cogiste...

Entre los dos lo hicimos, habrá notado cómo ha cambiado, no porque ya no es virgen, sino porque tiene más seguridad y personalidad, verá en un tiempo lo que va a cambiar para mejor…

Pendejo cuántos años tenés…

señora…

Decime Tere boludo y si le llegás a hacer mal a mi hija, te la corto, mirá que ando todo el día con el bisturí…

Ja ja, si Tere y si querés podés venir a mi casa y conocer a mis padres…

Voy a ir, voy a ir…

A mi gustaba gordita, con esas tetas, pero ella se quejaba, que no podía adelgazar.

Le propuse una dieta, si vos te cuidás dos días, cogemos y todos los días a la pileta, mi mamá, mi hermana, ella y yo… mi madre la puso sobre su protección y no la dejaba ni a sol ni a sombras, mi abuela le preparaba viandas con comidas “saludables” y yo en su casa, su madre no estaba nunca, (su padre las había dejado por irse con otra doctora a España, hablaba pestes de su ex)…

Cogíamos todos los días y de las formas más variadas… cuando llegó la fiesta de la primavera, tenía un cuerpo espectacular, las que la cargaban la miraban con asombro, es más se quisieron amigar y ella ni bola les dio…

Se juntaba siempre con mis compañeras y compañeros, aunque éramos de una división inferior…

También venía a practicar baile con la profesora Ingrid en casa, venían además cuatro de mis compañeras y dos compañeros, la pasábamos durante dos horas ejercitando todos los movimientos, cuando se iban todos los chicos… Lola se quedaba…

Con mi hermana bailábamos casi profesionalmente, ella nos miraba con admiración…

A mi hermana le gustaba y no le gustaba Lola…

Pasado un tiempo importante y por otras circunstancias voy a contar lo que me dijo mi hermana…

Con la profesora Ingrid teníamos mucha confianza, después de bailar, nos bañábamos y clase de inglés…era más exigente aún que con baile…nos daba muchísimos ejercicios y prácticas de charlas que teníamos que hacer con mi hermana…

Cuando yo practicaba ingles  con Lola, a mi hermana no le gustaba nada…el enamoramiento de Lola duró casi un año y medio, después si bien seguimos figurando como novios, su amor no era tanto, ya no pedía enloquecidamente que vayamos a su casa, tenía unas primas en La Plata y varios fines de semana se iba con ellas, pasados varios fines, ni me llamaba, me dolía un poco, pero era más por orgullo que por amor, creía que me estaba sacando un peso de encima…

Continuará…