Fantasias o Realidades (2)

CAPITULO II

Entre ambas partes hay un paréntesis de tres meses, en este tiempo he sufrido algunos cambios laborales que han afectado a la naturaleza de nuestro principal personaje que soy Yo el autor de estas memorias, por lo que volveré a coger el ritmo deseado en un cierto espacio de tiempo que deberemos valorar oportunamente.

Este párrafo de introducción es lo que me permite volver arrancar la siguiente historia.

La Señora me ha puesto en régimen de alquiler, considera que tengo demasiado tiempo libre, esto significa que a mis tareas domésticas las tendré que realizar con menos tiempo o lo que es lo mismo más deprisa, ya que el Ama no quiere eliminar ninguno de los trabajos que se me exigen sino todo lo contrario añadir de nuevos. En consecuencia cuando llego de la oficina a las 6 de la tarde, tengo que ir tres días a la semana, a un bar restaurante cuyos dueños son íntimos amigos de mi Ama, allí estoy hasta las 9 y durante estas tres horas he de limpiar hasta quedar extenuado, los platos del restaurante y los cacharros de la cocina los he de limpiar a mano a pesar de tener lavavajillas, los días que voy Yo, no se pone en marcha, estos les hace mucha gracia a los dueños del bar que tienen el permiso de mi Señora para correrme a tortazos tu Ama nos ha dicho que para gastar corriente eléctrica ya te tenemos a ti así que date prisa o le dijo a Paco que te utilice de sparring, y es que su marido es un antiguo Boxeador de pesos medios y no duda en entrenar conmigo con la de que Yo me he de coger las manos a la espalda, y no soltarlas.

Las horas me las pagan a 1000, -Ptas. o sea que al final de mes no llega a las 50.000, -Ptas. Que mi Ama se gastará en cualquier capricho, pero lo importante es el hecho de utilizarme al 100%, cuando regreso a casa con el importe de las 3 horas, roto de fregar y postrándome a sus pies le entrego las tres mil pesetas, las recoge y de un patada me manda a la cocina a preparar su cena, estas horas que estoy trabajando en el bar son las que antes yo dedicaba arreglar su habitación, recoger la mesa de la comida del mediodía y al estar los dos en casa existía un trato más humano, quería conocer coma había sido mi jornada laboral planteándose un pequeño, pero para mi muy agradable dialogo Y aún que siempre el trato era despectivo por unos instantes volvía a ser una persona. Con la ocupación de estas horas, ahora tengo que realizar las mismas tareas, pero mucho más deprisa, las cosas no salen tan bien como Ella quiere se enfada y yo recibo por partida doble, no hay conversación y si palos me temo que si se mantiene por mucho tiempo esta situación, cada vez seré más un objeto al que se debe sacar hasta la última gota, come Ella dice te he de exprimir hasta que revientes, vas a desear irte al otro barrio . Estas palabras que son muy fuertes, se han de situar en el contexto que nos movemos. En mi interior quiero pensar que Ella no desea este final, pero se queda claro que debo estar todo el día a su disposición.

La noticia que me anuncio anoche con una sonrisa sibilina fue que me había encontrado otra casa para ir hacer faenas, los martes y los jueves que son los días que libro en el bar, esto complica más la situación pues al menos yo sabía que estos días estaba más rato con mi Ama.

Esta casa donde voy estos dos días corresponden a la vecina del 4º 2ª es una chica separada de muy buen ver y que ha cogido odio al sexo masculino, a causa de su fracaso matrimonial y la verdad desde que me conoció como esclavo de mi Señora, ha hecho lo imposible para poderme utilizar como su esclavo. Mi Señora ha accedido después de llegar a un acuerdo muy ventajoso ya que me alquila a 2000, -Ptas. la hora, o sea que cada día que voy son cuatro mil ptas. Lo que sí os puedo decir es que me lo gano de sobras, pues durante dos horas no paro de limpiar y de recibir palizas descomunales, para mí que existe un pique entre ellas a ver quien arrea más fuerte, cuando más amigas peor para mí yo soy el acuse de recibo de todo, siempre cobro, la venganza hacia el sexo opuesto en este caso se cumple al 100%.

Cuando estoy con la mencionada vecina las bofetadas las recibo por cualquier cosa o sea que en las dos horas que estoy, hay días que me da mas de 100 latigazos, hasta 50 bastonazos con la terrible caña de bambú, patadas e incontables bofetones, esto quiere decir que si estoy limpiando el baño se me acerca y me obliga ha ponerme de rodillas con los brazos en la espalda y empieza a darme nunca se cansa ni tiene bastante, es de naturaleza pegona al contrario de mi Ama que es más cerebral, con una humillación que ronda la perfección y que a veces duele más, cuando vuelvo a casa con el importe de las dos horas la fregona y el cuerpo que parece un mapamundi esgrime una sonrisa es su pequeña victoria sobre la total sumisión de un ser humano, en este caso mi Señora no se ha tenido que molestar en pegarme, otra persona con su permiso lo ha hecho.