Fantasía anal de un hombre

Soy un hombre heterosexual de 29 años. Hace un año y medio que tengo novia y trabajo de profesor en una escuela del gran Buenos Aires.

Mi fantasía es desde siempre, ser penetrado analmente. Nunca la lleve a la práctica pero lo deseo desde adolescente (e incluso llegue a masturbarme introduciéndome objetos, desde lapiceras hasta penes de plástico). En esas experiencias sentía que tocaba el cielo con las manos e imaginaba lo que seria tener dentro de mí un hombre que se moviera aceleradamente, entrando y saliendo de mi ano con toda potencia.

Tengo una cola blanca y radiante, las mujeres siempre se quedan mirándola (y a mi novia le encanta acariciármela).

Mi fantasía es estar en un cuarto con un hombre e ir desnudando de apoco dándole la espalda. Sacarme la remera, el pantalón y quedar en slip. Poner mis pulgares en el slip y bajarlo lentamente para ofrecerle la visión completa de mi cola. Luego apoyar mis manos sobre el respaldo de una cama o sillón y entregarme a él.

Deseo sentir como acaricia mis nalgas y sus dedos empiezan a recorrer el medio. Uno de ellos, previamente humectado en algún lubricante llega a mi abertura, la moja y empieza a presionar. Se me escapa el primer gemido cuando la punta de ese dedo es agarrada por las paredes de mi ano y sigue su camino hacia mis profundidades.

Deseo sentir como ese dedo es acompañado por otro y entonces ya me éxito al saber que sus dos dedos entran y salen con facilidad (mi cola esta ya acostumbrada y flexible aunque nunca hay sido penetrada por un hombre).

Me voy a descubrir diciéndole que ya basta, que me saque los dedos y que de una vez me penetre.

Una vez retirado sentiré que los segundos son una eternidad y de golpe, la calidez de su glande se posa en mi entrada (no quiero preservativo, mas allá de los riesgos, mi primera vez debe ser totalmente pura).

Me aferro con las manos de donde estoy agarrado y siento como un leve movimiento de cintura hace que la cabeza del pene se vaya abriendo paso. Mis paredes anales se estiran y atrapan al glande para luego cerrarse. Con un leve empujo de su cintura empieza a meterme el tronco que resbala sin oposición hacia adentro de mi intestino. Allí, la cabeza se abre espacio y en unos segundos siento los testículos del hombre chocar con mis nalgas.

Deseo permanecer en esa posición unos minutos, sabiendo que tengo todo un pene dentro de mí y después si…él empezara sus movimientos. Primero lento, luego deprisa y mas deprisa. Serán de tal magnitud que su pene saldrá en su totalidad y entrara en cada nueva embestida hasta el fondo y en una de esas envestidas ya no saldrá, se quedara clavado bien adentro para vaciar su contenido de semen en mi interior.

Esta es mi fantasía y si existe alguien que quiera contarme como me penetraría, espero sugerencias (y llegado el caso, concretar). carlos_seis@yahoo.com