Fallándole a mi esposo (III)
Como toda una puta
El martes no fui al gimnasio así que el pase normal, hice el amor con mi esposo, pero ahora no sentí mucho y sentí la necesidad que fuera más rudo y me dijera cosas morbosas, pero no estábamos acostumbrados a eso por lo cual no se lo pedí y al final tuve que fingir un orgasmo.
El día miércoles fui a dar clases normalmente y juan me mandó un mensaje.
--¿Por qué te dejaste coger por ellos?
-No te interesa.
--Bueno ahora tengo más material para subir a internet y tu esposo sabrá que te gustan los tríos.
-No hagas eso por favor.
--Ven a las 3 a la tienda de ropa.
-está bien ahí estaré.
Yo estaba esperándolo en la tienda de ropa que me dijo y llego un poco tarde, se veía muy molesto y me dijo que lo siguiera, nos metimos a la tienda y fue seleccionando unas ropas. Me llevó a los probadores y sin decir nada se sacó su pene del pantalón.
--Agáchate puta y ponte a mamar.
-¿Qué te pasa?
No me dejo decir nada más y metió su pene a mi boca, tomo mi cabeza y comenzó a moverla muy rápido que me estaba lastimando un poco, pero me estaba encantando y me estaba poniendo caliente y estaba tan enojado que no me sacó su pene de mi boca y terminó dentro sin yo poderla saborear. Me dijo que fuera al gimnasio porque me iba dar una buena cogida.
Ya había llegado la noche y yo estaba llegando al gimnasio.
--Hola, que bueno que llegaste para continuar con tu entrenamiento.
-Si pues aquí estoy.
--Bueno pues vamos a comenzar, ven sígueme.
Yo lo seguí y me llevo a una especie de almacén que estaba en la parte de atrás y que tenia muchas cosas del gimnasio y estaba muy oscuro y un poco sucio, se notaba que no lo habían limpiado en días y el polvo me hizo empezar a toser hasta que llegamos a una esquina que estaba alumbrada con unas luces de neón como si fuera una especie de antro.
-¿Qué hacemos aquí?
--Te dije que te iba a dar una buena cogida putita.
-Yo no soy puta de nadie.
--Mientras tú estés en este gimnasio vas a ser mi puta, mi perra, mi mamadora de verga, mi contenedor de mecos y te voy a coger cuando se me dé la gana.
Yo lo noté muy enojado y lejos de darme miedo y salir corriendo mi lado pervertido empezó a apoderarse de mí y pensé “Esta putita quiere tu verga gorda, grande y venuda en mi panocha”, pero no dije nada y traté de disimular mi calentura y cuando terminó de hablar se acercó a mi oído, me agarró de la mano para ponerla en su bulto y mientras yo masajeaba su bulto me dijo “eres mi puta y esta noche vas a gozar”, yo me calenté mucho y le apreté la verga y le respondí “Dale a esta puta lo que le gusta”, me da una bolsa que contenía ropa que había comprado de la tienda y que me la tenía que poner.
Cuando me terminé de poner la ropa ya había pasado casi media clase y ellos llegaron y me dijeron que les tenia que bailar como puta haciendo striptease. Mi atuendo consistía de unas medias color negro que llegaban hasta unos centímetros más debajo de mis nalgas y que tenían un encaje bien bonito de color rojo, tenia puesto un panty que hacia juego con las medias (en realidad era un juego de lencería completo) y que estaba abierto por la mitad para penetrarme sin necesidad de quitármelo, mi brasier era muy diminuto y que en realidad solo me tapada del pezón aunque si se notaba el color de mi areola y finalmente uno guantes que eran muy parecidos a mis medias.
--Bueno ya que estamos calientes y tenemos una puta, hay que ver lo que puede hacer.
*Anda puta, súbete a la mesa y comienza a bailar.
Ellos se acomodaron en las sillas que habían puesto alrededor de la mesa y uno de ellos puso música de teibolera, yo no lo pensé dos veces pues ya mi ser había sido controlado por mi puta interior y empezando a bailar me fui subiendo a la mesa, comencé a bailar muy seductoramente y cada vez iba con movimientos más atrevidos, tomaba sus manos y me las llevaba a mis tetas, mis nalgas, mis piernas y después pase a sacarme una de mis tetas y me le acerque a Juan y puse una de mis tetas en su cara y de inmediato me la comenzó a mamar, debo decir que eran unas mamadas esplendidas y de las mejores que me han dado, se llevaba mi pezón a la boca y trataba de comérmelas lo más que pudiera para después morderlas un poco con los dientes y finalmente succionando como un bebé hasta que la sacaba de su boca, Julio se acerco y descubriendo mi otra teta comenzó hacer lo mismo que Juan y tenia a los dos mamándome las tetas muy rico.
Después sentí las manos de Arturo en mi trasero y solo alcance a escuchar que dijo “Ya no aguanto, te voy a coger puta”, yo no sé cómo le hizo, pero inmediatamente me la metió y solo pensé que si no estuviera tan caliente me hubiera dolido muchísimo. Juan se levantó de la silla y de su short se sacó la verga, yo como estaba tan caliente le dije “que rica verga” y se la comencé a mamar, Julio también se levanto y con mi mano se la comencé a jalar y pasaba de mamarle la verga a juan para empezar a mamar a Julio mientras Arturo estaba como loco metiéndomela. Pasando un tiempo Arturo se sentó en la silla y yo me comencé a dar sentones en su verga y al parecer a los otros dos no les gustó tanto pues ya no podía mamárselas, le dije a Arturo que me la metiera por el culo y yo lo guie hacia la entrada y poco a poco fui bajando hasta que terminé recostada arriba de Arturo, subí mis piernas y le dije a Julio que me la metiera por la vagina, escuche a Julio decirme “Pinche puta morbosa” pero no se resistió y al final me estaban cogiendo los dos por delante y por detrás y con mi boca se la estaba mamando a Juan, todos me estaban agarrando las tetas, me las apretaban, me las acariciaban, me las pellizcaban, me las jalaban, Juan me paro y deje de mamar y después va hacia donde estaba Julio y me levanta las piernas para ponerse delante de Julio y pensé “Ya salió joto”, pero era todo lo contrario y por donde me estaba cogiendo Julio, él metió su verga y Julio me la metió por el culo y me dolió mucho, comenzaron a cogerme, yo tenia dos vergas en mi culo y una en mi vagina y la sensación era de dolor que muy pronto se convirtió en puro placer, estaba gimiendo y creo que gritando con los ojos en blanco y terminé con un grandioso orgasmo que me dejo temblando todo mi cuerpo, ellos seguían cogiéndome y yo pensaba que tenia mucha suerte ya que si se le ocurría meterme una verga junto con el monstruo que Juan tiene, hubiera sido una masacre para mí, me pusieron de rodillas y se las comencé a mamar, se la estaba mamando a Arturo y Julio mete un dedo a mi boca para que la abriera más y chupar dos vergas al mismo tiempo, los dos terminaron en mi boca pero no me trague su semen, estaba esperando la leche de Juan y ellos se quitaron, yo abrí mi boca llena de leche y Juan en frente mío se comienza a masturbar, acerca la punta de su verga a mi boca y descarga sus huevos llenándome la boca de su leche y cuando terminó yo decidí tragar para luego volver abrir mi boca y mostrarles que me había tomado hasta la ultima gota de leche, les dije “muchas gracias por su leche” y decidí limpiarles la verga a cada uno con mi boca.
Cuando terminamos me fui a cambiar por la ropa que tenía puesta y cuando iba hacia afuera ellos me comenzaron a nalguear y uno de ellos me levanto el top, Juan me dijo, “Nos vemos mañana” y así con las tetas de fuera salí del gimnasio a mi carro y apenas prendí mi carro Sebastián me llama y me dice “¿Por qué no has llegado?” y le respondí que había pasado a un Oxxo a comprar un jugo porque tenía mucha sed. Al final de todo y en esa noche hice el amor con mi esposo pensando en la cogida que me dieron en el gimnasio y esta vez sí tuve un orgasmo y no fue por él.