Explorador 7

Explorador 7

Destrozado esa noche fui a dormir al quilombo, por supuesto respetaron mi duelo y me dieron una habitación alejada del trabajo cotidiano de las chicas. Allí  segui hasta que todo acabó.

Las cinco mujeres que allí trabajaban me atendían y trataban de calmarme, pero inútilmente.

Al otro dia, que cesó el diluvio, regresé a lo que había sido mi morada en los últimos años, no a buscar nada pues nada había quedado sino a despedirme de lo que pasarían a ser mis mas penosos recuerdos.

Había perdido  a mi compañera y a mi hijo, además de todo lo que juntos habíamos tenido, claro está en estos últimos tiempos pues el resto era todo de ella.

No había ningún vinculo legal que me transformase en su heredero, ni tampoco lo hubiese querido, sin ella nada valía nada….

Caminé con aquellos borceguíes que ella compró para ir a la selva juntos, lo hemos hecho y cuantas cosas de la misma me fue enseñando ya era un veterano selvático, como decía, camine toda la casa; su estudio, sus experimentos nada, nada quedaba, solo el inodoro renegrido por el carbón parecía todavía sano pues estaba en pie en su lugar, la sala, nada y su dormitorio tampoco nada mas que hierros retorcidos luego de ser seguramente eyectados de su cajón por la explosión de los proyectiles, nada, hasta que un pie se hunde en el piso por suerte la protección del borceguí evito me hiriese el tobillo, caigo sentado . me incorporo y hurgo en ese foso, un cofre, lo levanto y llevo afuera, a golpes con una piedra lo logro abrir, era de chapa y adentro había papeles, por estar abajo enterrado el fuego no los había deteriorado; los miro con la curiosidad propia de llegar a tener algún recuerdo de mi amada, y rescato un documento donde recién en ese momento descubro la verdadera identidad de la mujer que fue mía, el despacho de capitán del ejercito libertador de Montenero, nombrándola capitán a la señora Madelen Bujjanich de 28 años de edad, medica y doctorada en filosofía natural e ingeniería electrónica.

Una libreta de banco, con algo de dinero pero de una cuenta compartida entre Magdalena DeJesus y Oscar Villa, era yo y no lo sabia. Sus movimientos indican los emolumentos por comisión editorial y una pension vitalicia de la Ex Slabonia.

Recortes de diarios sobre el accidente donde por poco fallece y copia de la solicitud de patente de una nueva formula para acumuladores de energía eléctrica basada en el ion litio.

Cierro la caja metálica y con ella regreso al pueblo donde devuelvo la mercadería y vendo  a precio vil la chata, que dicho de paso estaba a nombre de Magda Dejesus, me guardo el permiso de transito también como recuerdo de ella.

Con esa plata me compro otra mochila, alguna ropa otra Victorinox, y una carpa iglú mas moderna y liviana que la que tenía, un cuchillo de monte y me voy a comer y tomar algo al café donde muchas veces estuvimos.

Comí y me vinieron a saludar muchas personas con la que había tratado, algunas queriendo retenerme en el pueblo, y algunos ofreciéndose para ayudar a volver a edificar donde había morado, pero no, llorando les agradecí sus gestos y sali a la ruta  ver si tenia suerte  haciendo de nuevo dedo.

Un desvensijado camión cargado con sal me alza, conversando me cuenta que lleva comida, no sal.

Pensé esta loco, pero me explicó que esa sal era la mayoría para cazar ciervos, que acudían a comerla al borde de la selva, su hábitat.

Yo que había llevado muchas bolsas para los indígenas, me estaba enterando de su uso. Pensaba que era para la chacina y la cecina, bueno también para eso.

Cuando llega a su destino habíamos recorrido 300 kilometros, ya allí la selva se iba perdiendo lo mismo que el pantano de turbales, dejando lugar a campos verdecidos por sembradíos.

Allí como algo en la estacion de servicio y a sus fondos armo mi carpa para pernoctar.

Fue el último y único uso que hice de ella.

Hasta esa ciudad llegaba la via ferrea, la que me llevaría, luego de dos combinaciones a mi ciudad, a reunirme con  mi familia luego de años de ausencia,  ya mis locuras de explorador estaban archivadas.

Retomar la vida normal ahora era  mi objetivo lo  mismo que estudiar ingeniería electrónica y sentar cabeza para formar una familia ya que estaba deseando ser padre, un deseo frustrado por el infortunio.

Era verano y me anoto para cursar el ingreso, consigo un buen trabajo en una concesionaria automotriz, donde tengo  a mi cargo la porción del taller de servicio técnico que comprende el alistamiento de unidas nuevas vendidas y su plazo de garantía, con servicio gratuito.

Mis padres felices de tenerme con ellos, pero mi inquietud me llevó a alquilar un bulin, donde poder satisfacer mis intimos requerimientos con la noviecita de turno.

Caminado hacia mi casa luego de las clases del preparatorio me tropiezo con un cura, me iba disculpar cuando me dice: Oscar tanto tiempo.

Eduardo, que haces disfr…..

No estoy disfrazado, soy cura, me corta mi antiguo compañero de estudios desde la primaria.

Hablamos algo en medio la calle y me invita a tomar un vinito a la sacristía de su iglesia a solo una cuadra de distancia.

El vinito un riquísimo mistela, me decía que consagrado era el utilizado en misa.

Que buen vino y pensar que  a los otros solo les dan una oblea.

Eres un sacrílego, lo que dices…

Le conté a grandes razgos mis vivencias y el las suyas como seminarista.

Me dice debes venir a dar una charla a nuestros niños exploradores, claro solo lo inocente no esas locuras sexuales que has vivido. Quedo en hacerlo.

Me haría saber para cuando asi lo concretábamos y de mientras, me dijo: pisas la iglesia que tanto te viene faltando.

Ese sábado a la tarde era la cita.

En el pequeño gimnasio cubierto al costado de la iglesia, habían dispuesto sillas y en ellas chicas y chicos de todas las edades, uniformados listos para escuchar partes de mi aventura, tambien ellos son exploradores, el escotismo es eso, cultivar el interés por la vida natural y una vida disciplinada basada en la fraternal ayuda a nuestros semejantes.

Había: lobatos, exploradores o scouts, caminantes avanzados, Vagabundos (rovers) o ruteros de 18 a 21 años y su jefes de 21 años en adelante.

Del grupo un señor de unos 30 años era su jefe, del grupo de varones, había varios encargados con grado de jefes, mientras que entre las niñas una rovers de solo 19 añitos era su encargada.

Su nombre Monica, maestra ya ejerciendo, además catequista de la iglesia, una preciosa niña que con solo verla me enamoró.

Hable como dos horas pues el auditorio me lleno de preguntas y terminamos en un dialogo muy constructivo, mi disertación habia durado solo 40 minutos.

El interés fue tan grande que hubo que recalentar el chocolate que sirvieron al final.

Mi amigo Eduardo no cesaba de agradecerme la charla.

Repetía, hay que hacer otras mas….

El sábado siguiente volví a la parroquia, no ha disertar sino a conversar con mi amigo cura y de paso volver a ver a Mónica, con la que también tuve una linda charla sobre pedagogía, nada mas….

Eduardo, será cura pero nada tonto, me reprochó, no has venido solo por nuestra amistad, ni por conocer nuestra iglesia, lo has hecho también por nuestra Mónica, cierto?

Si, como te has dado cuenta.

Todos hasta los niños se dan cuenta si un galán se babea por una compañerita y para colmo parece que a ella también le caes mas que simpático.

Lo único que te pido es que no siembres cariño si no lo honras como es debido, la chica no es como las que acostumbras a frecuentar.

Esa noche medité cada palabra de Enrique, claro seguramente el sabe de los pecados de esta niña,  debe ser virgen, la protege, además seguramente si ella siente algo por mi en sus frecuentes confesiones algo le habrá dicho.

Para colmo  Mónica me invitó a la misa de mañana a las 10, que haré?, un pecador como yo hasta Cristo deseará no estar en la iglesia.

Que me pasa con esa chica, es linda pero no despampanante, bueno se viste muy de nena, sencilla pero graciosa y esa melena rubia, larga, onduladita.

Si me da bola, me caso, ……. Y dormí hasta tarde por poco no llego a la misa.

En la puerta dando unas invitaciones para la kermese de la tarde estaba ella, cuando me ve, deja su tarea y me acompaña a sentarme previo santigüarnos con agua bendita a la derecha de la entrada.

Lo acompaño Oscar?, me lo encargó el padre pues supone que hace tiempo no asiste  a la ceremonia.

Este Eduardo, de celestino….. pensé…

Me indicó la marcha del rito y al salir me reiteró que no falte a la kermese a partir de las 18.

Luego del almuerzo me quedé de sobremesa con mis padres, asombrados me preguntan, que te pasa que no te fuiste corriendo de la mesa como acostumbras?

Es que tengo que hacer tiempo, ..

Para?

Iré  a una kermese … donde?

En la iglesia de la calle……..

Donde conocí a tu padre, exclama mamá.

Como, cuenta….

El era monaguillo….

Bueno no hace falta detalles de lo que era, dice papá…

Si;  en esa época era un chupacirios no un hereje como ahora.

Te sigo:  yo tomaba la primera comunión y él con su platito me lo puso debajo la barbilla mientras me miraba fijamente, yo abrí la boca para recibir la ostia y quedé con la boca abierta mirándolo me pareció tan lindo…..  con esa capita blanca de ribetes rojos, y esos rizos rubios.

Que hasta esa noche pensaba que pecado había cometido por haber hecho eso, me obnubiló este tu padre.

Al domingo siguiente se lo cuento en confesión al cura y me pena con un  solo padrenuestro, seguramente no había sido tan grave.

Desde ese dia fuimos noviecitos….

Que historia….

Y que te ha dado por ir a una kermese, a un rokero como tu?

Bueno nunca estuve en una en esa iglesia.

Si te parece te podríamos acompañar, nos traería tan lindos recuerdos…..

Mama, es que….

Que?

Que me invito  a ir una catequista de allí.

Mejor aun asi la conocemos…..

Pero no somos nada…..

No importa. Iremos. Juntos o separados si te avergüenzas de salir con tus padres…

Mama!!!! Que dices.

Se vistieron como si fuesen al teatro y yo como de costumbre odio usar corbata.

Caminamos, vimos los juegos, papa quiso que nos sentemos por una cerveza.

Al rato viene Enrique y se sienta con nosotros, mama lo reconoció, pero si usted es el amiguito de Oscar, venia a casa a estudiar juntos.

Señora para uds. sigo siendo el chico, debe tutearme.

Padre….

No doña Matilde, llámeme Edu como antes.

Pasa Mónica, asombrada por verme en una mesa con ellos, saluda y sigue, Eduardo la llama, ven hija, quiero presentarte, que apuro tienes?,

es que mi stand….

Olvídate por un rato de él, la mama y el papa de Oscar, la capitana de nuestra seccion femenina de boys scaut, catequista y colaboradora de nuestra parroquia.

Ademas docente en ejercicio….

Padre me apabulla, encantada de conocerlos.

Y mama, como es su costumbre, larga, te felicito Oscar que buen gusto tienes….  Eres hermosa Mónica.

La pobre se puso mas roja que la sangre, que bochorno tan grato.

Una Coca le pregunto?

Bueno,

Ya la traigo.

Asi fue la  ocasión en que mis padres conocieron a la que seria mi esposa.

Asi con esta rutina de trabajo y estudio, sostuvimos un romance durante tres meses, ingresé a ingeniería y adelanté en cariñitos con  mi amada, pero no al punto que ambos queríamos.

Solo hubo una visita a mi guarida donde por muy poco no cogimos, solo pajitas mutuas y hasta alguna chupadita pero resultaba poco afecta a ello pues la ponían muy mal.

Me pidió llorando no la dejase claudicar pues era la ilusión de su vida ser deflorada el dia de su boda.

Y tenia unas ganas locas de hacerlo.

Hasta me conto que su confesor le dijo que cuando estaba asi rezara, eso la sacaría de ese estado, pero no era cierto.

Nunca le pregunté quien era su confesor había solo tres posibles y uno era Eduardo.

Eso aceleró nuestro casamiento, allí sí;  luego del civil y al otro dia la iglesia, fiesta de por medio, nos amamos como locos.

Estaba tan estrecha que sangramos ambos, ardia, pero no importaba fuimos felices al máximo.

De allí en mas dia a dia me fue sorprendiendo por su capacidad sexual, sus intensas y frecuentes corridas y lo viciosa e impúdica resulto ser mi virgencita una vez disparada su libido por tantos años reprimida.

Nunca aceptó protección alguna y en esa semana quedo de Carlitos, luego vinieron, Axel y Laurita.

Si !!;  ya son tres mis hijitos queridos y además me acabo de recibir, voy  a ser como mi suegro profesor universitario, jaja si hasta él fue mi profe de física del estado sólido, y ya me anoté para ser su ayudante de trabajos prácticos, por allí se inicia la carrera docente en la universidad.

Mi vida de explorador ya es historia, la profecía de  Don Jaime, cumplida.