Experimentando con mi tío vi
Otro encuentro con la decepción
Aunque estaba pasándola extremadamente bien, si me percate de lo que acababa de salir de mi boca, solo esperaba que Sergio no se hubiese dado cuenta, pero creo que si grite el nombre de mi amigo lo suficientemente alto para que él lo escuchara, lo que más llamaba mi atención fue que de la nada, si ni siquiera decir una sola palabra, saco su pene de mi interior, me extraño porque aún no había acabado, al inicio pensé que quizás quería cambiar de posición, pero no era así, tomo su bóxer, se lo puso y se dirigió a la puerta
A: todo está bien?
S: si, ya obtuve lo que quería
A: estas seguro? es que esta vez tú no has…
S: que he tenido suficiente he dicho.
Tras gritarme abrió la puerta de la habitación la cual se encontraba en total oscuridad, pero al iluminarse su rostro pude ver que tenía una cara de molesto que decidí no hacerle más preguntas, de todas formas esta vez yo si lo había disfrutado y era lo que me había propuesto, intente dormir pero varias dudas rodeaban mi cabeza, ¿Sergio se habrá molestado por decir el nombre de alguien más mientras estaba con él? y la más importante ¿Por qué estaba pensando en esa persona mientras estaba con Sergio? sin darme cuenta el sueño me venció
Por la mañana fui despertado por un Sergio muy serio, ni escuche cuando entro, solo sentí cuando halo la sabana con la que me tapaba, tomo la ropa que estaba en el suelo y me la lanzo advirtiéndome que en diez minutos bajara para que me pasara dejando en la casa de mi tío y si no me daba prisa debía buscar otra forma para irme por mi cuenta, durante el trayecto que fueron como 20 minutos no me dirigió la palabra y pues mentiría si no admitiera que la sensación de que estuviera molesto conmigo no me llenaba de placer, al llegar a la casa mi tío Omar lo invito a quedarse a desayunar, pero no acepto porque según él tenía planes con su futura conquista y no es que así haya sido, si no que fueron las palabras que había usado para explicar por qué no podría quedarse
Durante los siguientes días no supe nada de él, algo que agradecía ya que deseaba recuperar mi relación con alguien más, lo cual así fue, aunque fue la semana de exámenes finales, había tenido una semana muy buena, fue hasta el viernes que supe nuevamente de Sergio y esta vez no fue a través de un teléfono, sin previo aviso apareció afuera de mi colegio, ni si quiera me había dado cuenta de su presencia en el estacionamiento del colegio hasta que de una manera algo brusca me halo del brazo interrumpiendo una conversación que había hecho que ignorara mi alrededor
A: ¡oye! grite sin darme cuenta de quién me tomaba por el brazo, ¿Sergio qué haces aquí?
En ese momento empezó a casi arrastrarme hacia el estacionamiento, quien me acompañaba intento detenerlo, pero le pedí que me dejara hablar con Sergio
S: date prisa, llevo mucho tiempo esperándote en el estacionamiento
A: ¿y tú por qué vienes por mí?
S: mis padres salieron de viaje de nuevo y pienso pintar su habitación, tu mamá ya sabe que pasaras la noche en mi casa para ayudarme
A: de acuerdo, podrías esperarme en el auto, llego en un momento
Aunque su rostro reflejaba que estaba molesto, me dio la privacidad que, no considere haberme tardado demasiado, pero una propuesta por parte de mi amigo me había dejado con muchas cosas por pensar, subí al auto de Sergio y debí estar muy suspensivo que ni note cuando salimos del colegio ni prestaba atención a lo que Sergio me decía, el tras darse cuenta en una esquina freno de manera brusca y yo al no tener puesto el cinturón de seguridad obviamente me fui de enfrente
S: piensas ignorarme todo el tiempo
Había alzado la voz y fue cuando me percate que realmente estaba muy molesto, pero yo me estaba reponiendo de un golpe que me había dado en la cabeza con el tablero del auto, así que también estaba molesto
A: imbécil, has visto lo que has hecho
S: eso te ganas por ignorarme, imagino que con quien estabas era el famoso Iván
Ya consiente de la situación y no sé por qué, pero con algo de temor por su reacción solo afirme con la cabeza, después de eso no me dirigió la palabra hasta llegar a su casa, cuando llegamos, abrió la puerta, entro delante de mí, vi que subió a su habitación y yo me quede abajo sin saber que hacer, el desde arriba me grito que subiera y así lo hice, al entrar vi que se había cambiado de ropa, tenía un pants deportivo y una camiseta que se ajustaba a su cuerpo, enserio se miraba muy bien, al punto de que me le había quedado viendo y él lo noto
S: qué haces allí parado? busca en los cajones algo que te quede bien, cuando estés listo me alcanzas en la habitación de mis padres, ya moví los muebles así que solo debemos empezar a pintar
Me demore un poco en buscar ropa que ponerme, toda la ropa de Sergio me quedaba grande, después de encontrar una pantaloneta que aunque floja, fue lo más ajustado que encontré y una playera que dudaba que aún le quedara a Sergio porque no me quedaba tan grande. Al llegar a la habitación de los papás de Sergio, él descaradamente se empezó a burlar de como me veía
A: ya deja de reírte, fue lo único que encontré, me hubieras avisado para traer mi propia ropa
S: así estas bien, ven, toma el rodillo que deje en la esquina y empieza pintar
Mientras pintábamos Sergio había puesto algo de música, sin darnos cuenta empezamos a cantar partes de las canciones que nos sabíamos, yo era un total desastre pintando, por donde yo pintaba, Sergio pasaba el rodillo dos veces más, al darme cuenta me disculpe por ser tan malo pintando, pero sorprendentemente recibí una sonrisa de su parte y me dijo que la primer mano de pintora no se notaba si estaba bien o no, que él pasaría una segunda y tercera capa de pintura, al terminar ambos estábamos manchados de pintura, pero no me había dado cuenta que la playera que traía puesta estaba totalmente manchada
A: perdón por el desastre con tu playera, dije realmente apenado
S: y si que debes disculparte, esa playera era nueva
Debí poner una cara muy graciosa porque Sergio empezó a reírse a carcajadas
A; perdón Sergio, no sabía, me hubieras avisado, pero yo te la repondré
S: ni te molestes, era nueva ´pero no me quedaba, fue el último regalo que recibí de Silvia (su exnovia)
Después de eso último hubo un silencio largo muy incómodo el cual Sergio se encargó de terminar
S: salgamos de acá que necesitamos un baño y otro cambio de ropa
Al llegar a su habitación nuevamente él se empezó a desvestir enfrente de mí, cuando note que se dirigía al baño trate de salir de la habitación, lo cual el noto
S: a dónde crees que vas?
A: creí que podría usar la ducha de alguno de los otros cuartos
S: tú te quedas aquí y no sales, entraras a la ducha después de que yo salgo, salvo que quieras hacerme compañía
A: entonces creo que tendré que esperar a que salgas
La tentación de acompañarlo realmente era muy grande pero mi indecisión era tanta que al darme cuenta Sergio ya había salido de la ducha totalmente desnuda mientras se secaba con una toalla, me sentí tan nervioso que al reaccionar salí disparado al baño, puse el seguro y encendí la regadera, durante la ducha obviamente me masturbe pensando en lo último que había visto, pero decidí detenerme porque sabía que Sergio no dejaría que me quedara caliente, tras terminar de ducharme salí del baño con una toalla en la cintura y toda la ropa que había quedado en el baño para llevarla a la lavadora pero al parecer Sergio ya no quería perder el tiempo y yo felizmente me deje llevar, lo primero que hizo fue quitarme la toalla que tenía enrollada y empezó a besar mi cuello, pude sentir como sus brazos rodeaban mi cuerpo y de la nada empezó a cargarme y llevarme a la cama, tras caer sobre ella me ordeno que me pusiera en cuatro, nuevamente era algo nuevo para mí, pero inmediatamente cumplí con sus órdenes, mientras lo hacía me preguntaba si me dilataría con sus dedos o me metería su pene de golpe como lo hizo la última vez que llego a casa, en eso pensaba cuando empecé a notar algo extraño en mi ano que hizo que intentara voltear a ver, obviamente por algunos videos porno que había visto sabía muy bien lo que Sergio hacía, pero aun no podía creerlo, cuando empecé a notar como Sergio hacia círculos con su lengua en mi ano un tipo de calofríos recorrió mi cuerpo, realmente se sentía muy bien, sin poder hacer nada por silenciarme empecé a gemir de placer, el debió notarlo porque empecé a notar como introducía más su lengua más profundo, note cuando empezó a meter sus dedos y después de un rato empezó a pasar la punta de su pene por la entrada de mi ano
Pensé que después del gran placer que me había dado, ahora si metería su pene con brusquedad, pero no fue así, fue introduciéndolo muy lentamente y ocasionalmente se detenía para que me acostumbrara a su pene, pude notar que finalmente tenía todo su pene adentro al sentir su bello púbico pegado a mí, se detuvo un momento nuevamente y empezó a besar mi cuelo y al llegar a mi oído me advirtió lo que pensaba hacer
S: basta de ser tierno, ahora empieza lo bueno
Empezó un mete y saca muy fuerte, puso su mano derecha en mi hombro y la otra en mi cadera, no pude resistir mucho el ritmo de sus embestidas así que no pude mantener la posición a cuatro, cuando mi cuerpo cedió al cansancio él me pidió que me pusiera bocarriba, coloco una almohada sobre mi trasero, puso mis piernas sobre sus hombros y empezó nuevamente con sus embestidas, no tardamos mucho en venirnos, yo fui el primero en expulsar unos dos o tres chorros de semen sobre mi abdomen y Sergio acaba dentro de mí, pude notar unos siete choros como mínimo, esta vez ambos habíamos quedado satisfechos y tras salirse de mí se acostó a mi lado
S: ha sido grandioso
Nunca antes había hecho comentarios sobre el sexo después de haber tenido sexo, creo que eso me hizo tener ideas tontas e intente besar sus labios, enserio creí que en esta ocasión seria correspondido, nuevamente me había hecho falsas ilusiones, él al notar mi cercanía me alejo
S: creí que había quedado claro que no habría nada de besos, si tanto te mueres porque te besen mejor busca a tu amiguito Iván
Estaba tan molesto por su actitud, realmente no me lo esperaba, es decir, se negaba a besarme en los labios pero hace un rato me había besado el culo, tenía tanta ira que sin importarme que estuviera desnudo, tome la ropa que había dejado en el piso, me dirigí al cuarto de lavado, encendí la lavadora, me quede allí hasta que la ropa salió de la secadora, estuve esperando que Sergio bajara por mí, cosa que no paso, decidí pasar la noche en la habitación de visitas o así la llamaba yo, pero sabía que era la habitación que Carla ocupaba antes de casarse
El sábado por la mañana me levante muy temprano, Sergio aún seguía durmiendo, tome mis cosas, por suerte siempre cargaba dinero para emergencias, logre encontrar un taxi al salir de casa de Sergio y me dirigí a la mía, mi mamá aun seguí durmiendo en casa, por lo que aproveche para sorprenderla con el desayuno hecho, no me había percatado que mi teléfono estuvo apagado en todo momento, subí a mi habitación por el cargador y al encenderlo encontré varias llamadas perdidas y dos mensajes de texto, uno cuestionándome por mi paradero y otro pidiéndome que atendiera las llamadas porque querían escuchar mi voz, al ver ambos mensajes empecé a reírme de lo estúpido que había sido, estaba perdiendo mi tiempo con la persona equivocada, pero apenas era un adolescente y a esa edad cometemos muchos errores, tome el teléfono y le marque a Sergio…