Experimentando con mi tío i

Hola mi nombre es Andrew y como varios (según creo) me he decidido a relatar algunos sucesos de mi vida en lo que transcurre la cuarentena.

Actualmente tengo 24 años, pero lo que están por leer sucedió cuando tenía 18, les contaré un poco de mi vida para entrar en contexto, he sabido de mis gustos por los hombres desde muy temprana edad, desde los 4 para ser más exactos, pues cómo lo sé, simplemente lo recuerdo, puesto que aunque a veces mi familia se extraña, tengo muchos recuerdos de mi infancia gracias a mi buena memoria.

Todo inicio en la casa de mi tío Omar, donde prácticamente pasaba todas mis vacaciones y varios fines de semana al año. Por cuestiones de la vida y culpa de unos bastardos ladrones el había enviudado cuando tenía 5 años, quedando sólo con mis tres primas: Isa, Jas y Rosy.

Recuerdo que esa mañana estaba muy ansioso, me levanté muy temprano (por cierto, tengo mi propia habitación en la casa de mi tío desde antes de la muerte de mi tía) debía preparame muy rápido para bajar a ayudar con los preparativos de la fiesta de 18 años de mi prima Isa, mi tío Omar había tirado la casa por la ventana, puesto que era su hija mayor la festejada. Yo me quedé una noche anterior para poder ayudar y como era costumbre, mis padres accedieron.

No era el único que llegó a ayudar, puesto que cuando baje a la sala ya habían llegado Carla con sus dos hijos, Alfonso y Emilio y su hermano Sergio, Carla y Sergio eran hijos del primo de mi fallecido abuelo materno y puesto que mi familia es muy unida, incluso con los familiares muy lejanos.

A Carla de pequeño siempre la llamaba tía, al ser ella mayor que mi mamá, caso contrario a Sergio que lo trataba como a un primo, pues era mucho más joven, con 18 años en ese entonces.

La fiesta estaba muy animada, todos los adultos ya estaban ebrios y como todas las fiestas que organizaba mi tío Omar, terminaría hasta la madrugada del día siguiente, todos los menores ya nos habíamos ido a la cama, incluso mis primas, yo tendría que compartir mi habitación con Alfonso y Emilio mientras los demás invitados que se daban de baja de la fiesta sabían que las habitaciones de huéspedes estaban disponibles para ellos.

Aunque ese día me había despertado muy temprano, realmente no tenía deseos de dormir, así que me decidí a bajar a la fiesta, cuando vi la hora realmente me sorprendí al ver que eran a las 2 de la madrugada y ver que todos únicamente estaban sentados charlando entre ellos, esperaba que algunos estuvieran bailando o al menos intentarlo.

Lo que llamó mi atención fue cuando mi Tío Omar ya muy ebrio pidió parar la música para hacer un brindis en honor a mi tía Olivia y como cada vez que la mencionaba, desató en llanto y contagio a todos, incluso a mí.

Tras esa escena triste y sin darme cuenta termine llorando en la habitación de mi tío Omar frente a la fotografía de su boda con mi tía Olivia, ella siempre fue como una segunda madre para mi, mi muñequito fue como siempre me llamo.

Estaba inmerso en mis recuerdos con mi tía cuando de la nada escuche que alguien entraba a la habitación y como no me lo esperaba obviamente me asusté. A duras penas me recuperaba del susto cuando Sergio empezó a reírse por mi reacción,

S: a caso pensaste que era un fantasma, me dijo en tono de burla.

A: no, pero no esperaba que nadie entrará a esta habitación le contesté

S: perdón Andy pero mi hermana me envió a buscar donde se habían quedado mis sobrinos

A: creo que la bebida definitivamente afectó a tía Carla, por la tarde ya le había comentado que les haría espacio en mi habitación

S: pues como hemos llevado la fiesta no es de extrañarse, oye Andy, pero por qué siempre le dices tía a mi hermana y a mi siempre me tratas por mi nombre

A: ¿es enserio Sergio, cómo pretendes que te diga tío si apenas nos llevamos 6 años?

S: pues si a Carla le dices tía a mi también me deberías tener el mismo respeto

Por como hablaba me di cuenta que Sergio había bebido y según percibía estaba muy ebrio

A: lo lamento Sergio pero así son las cosas y si me permites, me voy a la cama que desde hace mucho me llegó la hora de dormir

S: me vas a decir que aún tienes horario para ir a la cama? dijo en tono de burla

A: claro, si apenas soy un crío

S: a tu edad yo hasta ya había cogido. Fueron esas palabras las que llamaron mi atención, debió estar muy ebrio para haberme dicho eso, pero que alguien me hablará de sexo era algo que últimamente notaba que me ponía nervioso y ese momento no fue la excepción y Sergio lo noto

S: que pasa Andy, acaso no te han dado tus padres la famosa charla, porque si no yo te la puedo dar en estos momentos

A: Sergio mejor busca donde dormir, esas no don cosas que deba hablar contigo

S: pero porque no, si eres mi sobrinito, si quieres pregúntale a Emilio y Alfonso quién les enseñó a besar y a otras cosas que si quieres te las puedo enseñar a ti también

Fue esa revelación la que hizo que mi corazón empezará a palpitar muy fuerte, sabía muy bien que todo lo que me decía era producto del alcohol, peto joder, no era el primer secreto oscuro que me enteraba de la familia porque a alguien se le iba la lengua tras los tragos, así que aunque ya había tenido alguna que otra experiencia tocandome con algún que otro compañero del colegio, el pensar que Sergio era mayor que yo y que según sus insinuaciones el pensaba que estaba frente algún tonto del cual se podía aprovechar, decidí seguirle el juego.

A: enserio tu le enseñaste a besar a tus sobrinos?

S: si, pero fue hace algunos años, aunque ustedes tengan la misma edad, creo que ellos te llevan ventaja en algunas experiencias

A: si sólo saber que ya se han besado con alguien más es más que suficiente para darme cuenta que me llevan ventaja. fue lo que se me ocurrió decirle para propiciar que algo pasara en ese momento y mi idea cada vez estaba más cerca de hacerse realidad.

S: me estás diciendo que a tus 18 años aún no das tu primer beso?

A: primero tengo 18 años y segundo la verdad aún no

S: no puedo creer que ninguna niña de tu colegio te haya permitido darles un mendigo beso

A: alguna que otra amiga si me lo ha propuesto, pero realmente me da pena no hacerlo bien, así que siempre digo que no

S: pues no sería un buen tío si hiciera alguna diferencia entre mis sobrinos, aunque si quieres que te enseñe a besar debes pedirmelo

A: ¿podrías enseñarme a besar por favor Sergio? Mientras se lo pedía por dentro sólo ahogaba mis ganas de reirme.

S: creo que he dejado muy claro que únicamente hago ese tipo de favores a mis sobrinos

Yo realmente moría de risa por dentro pero también tenía ganas de saber hasta donde podría llegar Sergio, así que tuve que tratarlo como me lo pedía

A: tío Sergio por favor podrías enseñarme a besar? Tras pedírselo en un tono muy suave para que pareciera que realmente el era quien tenía el control se acercó a mi y puso sus manos en mi cintura

S: por supuesto sobrino. Se acerco a boca y muy suavemente posó sus labios sobre los míos, realmente debió creer que era mi primer beso porque fue muy cuidadoso, apenas hubo lengua, pero eso sí que fue largo y el muy cabron hasta empezó a mover sus manos hasta mi trasero, estaba a punto de empezar a tocar su bulto, el cual ya era perceptible por el roce cuando escuchamos llegar a mi tío Omar quejándose de que lo llevarán a su habitación, lo cual obviamente interrumpio nuestro beso

Tras llegar mi papá con mi tío con gran esfuerzo que ni siquiera le extraño que estuviéramos en la habitación, yo ayude a papá para acostar a mi tío y cuando busque con la mirada a Sergio el ya no estaba.

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Obviamente este es sólo el inicio de mi historia con Sergio, pero consideraba importante explicar algunos detalles que desde mi punto de vista, fueron importantes para los encuentros que tuvimos, estaré leyendo sus comentarios por si tienen alguna opinión de como mejorar mis relatos, pues cómo les comenté, es la primera vez que escribo uno.