Experiencias en el transporte público

Soy nueva en este tipo de escritos pero trataré de ser de su agrado. Son experiencias que jamás imaginé. Usualmente hago recorridos de aproximadamente 10 km y en esta ocasión el camión como siempre lo aborde y no estaba lleno pero me tocó ir de pie.

Como les decía son recorridos que hago diariamente, esto ocurrió en mi época universitaria y como estudiaba y trabajaba al mismo tiempo, siempre procuraba ir bien arreglada para ir a mi trabajo, me gusta usar mallones, vestidos, todo lo que me haga lucir muy bien y creo que si lo logro, ya que por eso me ha ocurrido lo que les detallaré.

Ese día llevaba una falda arriba de la rodilla y zapatilla lo que me hace ver muy bien, soy de un cuerpo regular pero me han dicho que lo que llama la atención de mi es que me veo alta y más con zapatilla. Ese día mi falda detallaba perfectamente mis pompis y como iba de pie agarrandome de un tubo y cargando mi bolsa de mano, la verdad iba ya algo cansada hacia mi trabajo porque ya había estado 4 horas en la universidad y no me percate como tan rápido se lleno el camión.

Ya iba totalmente lleno y se sentían empujones y yo seguía en el mismo lugar bien sostenida por el tubo, cuando de repente sentí como alguien ya estaba exactamente atrás de mi, con tanta gente no podía moverme a ningún lado. Ahí fue donde comenzó todo este momento que jamás había pasado.. El tipo que iba atrás de mi se acomodo lo mejor que pudo y poco a poco comenzó a frotarse con mis nalgas, yo no supe que hacer si moverme y alejarme, pero por más que miraba como moverme no se podía.

No se que pasó por mi mente, fue algo raro.. Porque debí alejarme pero lo que yo comenzaba a sentir no era para nada desagradable. Hubo momentos que intente separarme de este hombre y es increíble lo que pasaba me agarraba y me acomodaba para que siguiera disfrutando de mi, en momentos me sentí una mujer sucia por permitir esto.. Pero la verdad fue algo que empecé a disfrutar, solo sentía algo de pena de que la gente que viajaba ahí se diera cuenta de lo que pasaba. Sentir sus manos grandes y el cómo me acomodaba él a su cuerpo me hacía sentir esa dominación que casi nunca he permitido por ningún hombre. En ese momento hubo muchos pensamientos, hasta llegué a sentirme mal por aceptar que alguien gozará con mi cuerpo y que no era mi pareja. Ese recorrido fue inolvidable porque lo que yo sentía me estaba prendiendo, lo que más deseaba era seguir sintiendo su pene duro y enorme, pero el recorrido estaba por terminar y al bajar del camión lo mire y con una ligera sonrisa agradecí el placentero viaje.

Se que esto no es nada nuevo pero para mí si lo fue y lo disfrute mucho.. Gracias