Experiencias adolescentes

Cuando comenzamos a crecer y descubrimos el sexo... en otra persona de nuestro mismo sexo.

EXPERIENCIAS ADOLESCENTES

Gracias a todos los que me hicieron llegar sus comentarios. Para ustedes y especialmente para mi amiga Pilar, les dedico este nuevo relato, que espero les guste.

No se si a todas las mujeres en nuestro desarrollo, nos pasan las mismas cosas, pero supongo que de no ser así, las cosas que sentimos deberían ser bastante similares. Sobre todo a esa edad en que el sexo nos revoluciona las hormonas, pero no hemos tenido aún oportunidad de practicarlo. Es decir, ya nos hemos tocado, hemos probado frotándonos algunos objetos y demás, pero concretamente, no hemos sido aún penetradas por un hombre. En esa época, transcurrió lo que quiero contarles hoy. Todo comenzó en un caluroso Abril. Un sábado en que estábamos, como otros tantos días juntas en casa, mi compañera del colegio y amiga, a quien llamaré Pilar ( en honor a mi amiga de Mexico , a pesar de no ser este el verdadero nombre de la co-protagonista de este relato ).

Pilar, por supuesto, tenía mi edad, casi mi altura, morocha, con una cola mucho mas linda que la mia ( no lo tomen como un acto de vanidad…por lo menos, en esa época y hasta el día de hoy, sigo recibiendo comentarios y piropos en la calle por mi cola ), pero con tetas mas pequeñas. Mis padres habían salido y llevaron con ellos a mis hermanos, con lo cual, quedamos solas por unas horas, con toda la casa a nuestra disposición. Aprovechando que hacía calor, nos pusimos los trajes de baño y decidimos meternos en la piscina. Luego de refrescarnos y jugar un rato, regresamos a mi cuarto a escuchar música. Nos quitamos los trajes de baño y como travesura, nos quedamos desnudas, mientras cambiábamos interminablemente las estaciones de radio, hasta encontrar una que nos permitiera bailar, cosa que tanto a Pilar como a mi, nos encantaba en aquel entonces.

Cuando dimos con la estación indicada, ambas saltamos de la cama y nos pusimos a bailar en el centro de la habitación. Luego de 3 o 4 canciones, pasaron un tema lento que a ambas nos gustaba, y casi automáticamente, nos abrazamos para bailarlo…luego del cual, ya no hubo vuelta atrás. En el momento en que nos abrazamos, sentir los pezones de Pilar rozándose con los míos fue eléctrico. Poder sentir su cuerpo desnudo contra el mío, me resultó una sensación mas que excitante y en ese momento, se me confundieron todos los valores. Si bien ambas, pensábamos en varones y hasta nos habíamos masturbado una delante de la otra en varias oportunidades, lo que nos estaba sucediendo en ese momento, era único. Aprovechando la música, comencé a acariciar la espalda de Pilar y apoyé mi cara sobre su hombro. Su piel suave, me producía placer.

En el momento en que empecé a bajar mis manos para acariciar su cola, Pilar me dio un beso en la mejilla…y otro…y uno mas…mas dulce, mas largo, mientras me acariciaba el pelo con sus manos…y mis manos que acariciaban sus nalgas…con dulzura…con amor. Levanté mi cabeza de su hombro y la miré a los ojos por unos segundos, como preguntándonos recíprocamente si estábamos seguras de hacer lo que parecía ya inevitable. Pilar tomó mi cara con ambas manos, y tan suave como siempre ha sido, me besó en los labios. No fue un beso apasionado, fue un beso cálido pero tímido a la vez…como si tuviese temor a ser rechazada. Pero no era esa mi idea…muy por el contrario, creo que yo había incitado ese beso con mis caricias previas sobre su espalda y su cola. Luego hubo mas y mas besos…y cada beso iba subiendo de intensidad…de duración…de pasión…de sexo.

Nuestras lenguas se buscaban y se enroscaban dentro de su boca o de la mía, mientras que los abrazos cada vez eran mas efusivos y nuestros pezones, cada vez mas duros y nuestras vagínas...cada vez mas húmedas. Fue ella la que se atrevió a abandonar mi boca, para comenzar a bajar por mi cuerpo…me pasó la lengua por el cuello, por los pechos…chupó mis pezones, produciéndome una sensación espectacular y siguió bajando por mi panza…hasta llegar a mi pubis. El espejo de mi cuarto, me devolvía una imagen, por demás excitante…verme a mi, con los pezones erguidos, parada con las piernas abiertas, acariciándole la cabeza a Pilar, que de rodillas en el piso y aferrada a mis caderas me lamía el clítoris….y por supuesto su lengua…me hicieron acabar en un delicioso orgasmo, que hasta hoy, mientras lo escribo y lo recuerdo, necesito cerrar fuerte mis piernas…( tal vez este último comentario del cierre de piernas, solo las mujeres lo comprendan…solo nosotras sabemos que cosas nos produces ese movimiento y lo que sentimos cuando cerramos fuerte las piernas )

Me arrodillé también y besé nuevamente la boca de Pilar. Tomándola de la cintura, nos levantamos besándonos, mientras la guiaba hacia la cama. Suavemente hice que Pilar se acostara boca arriba para poder sentir en mi boca, el preciado sabor de su vagina. Hice prácticamente lo mismo que había hecho ella…la bese desde la boca, pasando por su cuello y pechos, hasta llegar a su pubis morocho…el que lamí primeramente y chupé con desesperación después. Mis manos, le sostenían las piernas abiertas, mientras yo hurgaba con mi boca en su sexo…que emanaba un aroma indescriptible a lujuria, con una sabor mucho más delicioso aún.

Succioné los labios superiores de Pilar y su clítoris durante largos minutos. Los dedos de mi amiga, separaron mi boca de su allí y me guiaron a su canal vaginal. Mientras ella se frotaba el clítoris, yo hundía lenta y suavemente mi lengua dentro de su sexo húmedo…sabroso y le empujaba así a su orgasmo, que llegó con un suspiro profundo y la contorción típica en el cuerpo de Pilar, que mientras terminaba, miraba como su amiga de la infancia, aun exploraba su vagina con la lengua. Lentamente me reincorporé y besé a Pilar en la boca con todo el amor que pude poner en ese beso. Por unos instantes nos quedamos mudas, sin poder emitir palabra…había pasado algo que no estaba previsto y era obvio, que ambas los habíamos disfrutado plenamente. Pilar fue la que rompió el hielo ….

"Sabés ? Me gustó mucho…" y las dos echamos a reír, no se si de nervios o porque acabábamos de descubrir nuestra capacidad de amar de mujer a mujer.

Luego nos volvimos a bañar en la piscina y a cambiarnos, ya que estimaba que mis padres estarían pronto de regreso. Mientras nos vestíamos nuevamente, volvimos a besarnos en la boca, ante la imposibilidad de hacerlo cuando mis padres estuvieran presentes. Y asi terminó ese día en que descubrí el sexo entre mujeres.

Cuando estábamos fuera de nuestras casas, entre nosotras, decíamos que éramos novias…este "noviazgo" duro casi 3 meses, en los cuales, hemos evolucionado en las artes amatorias y hemos descubierto otras cosas que las mujeres podemos practicar, cuando no existe un pene en el medio ( 69, cruces y muchas otras cosas que resultan tan deleitables) y hasta hemos hecho un pequeño album de nuestro amor, del cual extraje esta foto ( en el que no se nos ve la cara, por supuesto ) solo para ustedes.

Nuestra "pareja" terminó, cuando Pilar se puso de novia con un chico de otra escuela y reconozco que estuve triste por un tiempo, hasta que comprendí que así debía ser.

Hoy Pilar es una mujer feliz, casada con 2 hijos, a la cual sigo viendo de vez en cuando y con quien no he vuelto a tener sexo, pero solemos saludarnos cada vez que nos encontramos, con un beso en la boca, como lo hacíamos por aquel entonces.

Espero les haya gustado mi relato y me hagan llegar sus comentarios a : fisica_mente@hotmail.com