Experiencia de una aprendiz de sumisa
Mi Amo solo ordenaba lo que quería de mi....
Mi amo me instruye para que a su llegada ningún detalle quede al azar... debo estar desnuda... caliente y húmeda...requisitos básicos para agradarle.
Al tocar la puerta, en silencio lo recibo y me cuelgo a su cuello para que sus manos revisen si sus deseos se cumplen.
Tengo mi vagina hinchada y mojada, mis pezones duros...
Me toma del cabello con firmeza, muerde y chupa mis pezones cada uno en forma alternada donde comienzo a gemir pero me calla mordiendo mis labios y metiendo su lengua en mi boca.
No hay que adivinar a donde se dirigen los pasos, que sin dar la orden, es a nuestra cama la dirección que nos llevan los besos.
Desnuda me tumbo en la cama, mi amo se desnuda develando que sus ganas son tan intensas como las mías.
Pero no hay caricias, amarra firmemente mis manos tras la cabeza y venda mis ojos con la instrucción de abrir las piernas y no cerrarlas bajo ninguna circunstancia, no para meter sus dedos en mi vagina, sino que su lengua en mi clítoris...perversa y suavemente comienza a recorrer el pequeño órgano eréctil que con solo la humedad de su boca me hace gemir desde las entrañas... me retuerzo sin control olvidando que no debo juntar las piernas.
Entonces su cabeza entre mis piernas impide que cierre el paso y con dedos furiosos y lengua firme...da forma al orgasmo que viene... sin ver... sin tocar... solo queda rendirse al río húmedo que se viene para salir de entre mis muslos... me corro estrujando la vagina, apretando cada músculo pelviano, deseando que ese desmayo que ahoga se diluya por el cuerpo y se haga eterno.
Jadeante me repongo y vuelvo a quedar a disposición de mi amo... pido mi turno... ruego para que ahora me toque chupar su pene , porque me calienta sentir en mi boca ese bocado que al estrujarlo entre mis mejillas haga que El gima sin control... que tome y tire mi cabello con fuerza y le dé ritmo a mi mamada.. Mi lengua recorre su pene, lo descubre y lo deja libre, lo humedece y lo aprieta como si fuese mi vagina la que hace el trabajo.
Lo tomo entre las manos y lo masturbo, El me enseñas dónde y cómo hacerlo, pero sus dedos también juegan entrando y saliendo húmedos desde mi vagina.
Me corro... nuevamente... siento que me desmayo solo de placer, me elevo y caigo en este orgasmo.
Pero mi amo me ordena cabalgarlo y obedezco sin reclamo... entonces me acomodo... tomo su pene en mis manos y lo introduzco en mi vagina... todo... erecto para mí... suspiro.... lo miro y sonrío porque sé que al moverme me dará palmazos que son el castigo por ser mala niña... niña mala...
Soy su puta... su puta divina que se mueve con fuerza hasta el fondo, sus manos mueven frenéticamente mis caderas, me aprieta las nalgas, me aprieta los pechos... me muerde y me ordena... que me corra hasta la última gota.
Entonces me abandono al estruendo del deseo y solo me lanzo al vacío sintiendo que podría comer su pene una y mil veces con mi vagina... pienso... que delicia es esto... que delicia es estar tan caliente que puedo caer rendida exhausta y volver a empezar...
Me calienta en extremo, quiero que me lama y chupe mi clítoris que muerda y saboree mis labios... los mayores y los menores... que sus dedos y su lengua se metan en mi vagina y busquen el punto preciso, el que aún no podemos encontrar, para lograr eyacular frenéticamente sobre El.
Pierdo la razón cuando me lleva al límite del universo parece que el aire me falta y se me va entre las piernas...no puedo dejar de pensarlo... en realidad no puedo dejar de desear que lo meta una y mil veces... sin compasión, sin piedad por mi vagina... por mi ano... por la boca y las orejas.
Pero El no me da descanso, de bruces y a palmazos me tumba en la cama buscando mi ano para poseerme y hacerme suya , toma mi pelo y tira de él susurrándome al oído que soy su puta... que si me gusta como lo hace... si disfruto como lo mete...si quiero más fuerte….
Respondo casi sin aliento que me gusta... que me encanta... que lo siento hasta el fondo…que quiero más y más….
Entra y sale con energía, resbala y busca nuevamente la entrada.... de pronto ante tanta danza de movimientos ... se corre violentamente ... con delirio... con gemidos... con suspiros que solo puede dejar el éxtasis de estar muy calientes hasta el fin...
Así, sobre mi espalda descansa jadeante aún dentro de mí... besa mi cuello y respira en mi oído...
Cuando me libera... enjuago mis lágrimas que son solo de la intensidad de la sublime excitación que ya culmina.
Busco el abrazo de mi Soberano dueño que se deleita con el humo de su cigarrillo mirando al infinito mientras yo tomo mi lugar en su hombro derecho donde me cobijo y reposo... donde sin decir palabra alguna me siento plena, segura y de su propiedad.
Me dio su última gota... de la que no se puede regresar....