Experiencia con un maduro

Un encuentro feliz con Antonio.

Hola, mi nombre es Andrés, esta una experiencia con un hombre maduro.

Tengo 27 años, moreno de ojos negros, 1,79 y 85 kilos.

Laboro en un banco en mi ciudad natal la cual tenia los servicios de mensajería de una empresa local de correos. En dicha empresa trabaja un señor llamado Antonio de 57 años, medio calvo, moreno, ex militar de excelente cuerpo, fuerte, grandes brazos, piernas gruesas, velludo, alegre, amable.

Desde el día que lo vi, me gusto muchísimo. Manteníamos una relación laboral como cualquier otra, pues era yo quien recibía el correo para el banco.

Después de cierto tiempo en esa misma rutina, me arriesgue a tirarle una mirada maliciosa a su entrepierna. Mucho antes lo hacia de forma disimulada, pero me atreví y la respuesta no fue de rechazo ni admiración. Creo que sospechaba mi atracción por él.

Empezamos a charlar de cosas distintas del trabajo y un día quedamos para tomarnos una copa.

Si vestido con su uniforme se veía atractivo, con ropa de calle era para comérselo ahí mismo.

Nos encontramos en un bar cercano a su lugar de trabajo y estaba recién duchado, con su poco pelo húmedo. Empece a imaginármelo desnudo, duchándose, enjabonándose sus partes intimas, y eso me puso a mil. Afortunadamente ya estabamos sentados y mi erección se disimulaba. Pero mi cara detonaba otra cosa, porque el primer tema de conversación (iniciada por él) fue de SEXO.

Diciéndome que con mi apariencia debería ligar mucho, que era bueno usar protección al mantener relaciones sexuales, y cosas por el estilo. Me dijo que no sabia ponerse un condón porque solo tenia relaciones con su esposa y no había tenido la oportunidad de usarlo.

Aproveche el tema y me ofrecí a enseñarle. Se sorprendió y cambio de tema. Yo no estaba dispuesto a eso, y traté de explicarle teóricamente. Eso atrajo su atención nuevamente hasta que lo convencí para hacerlo en la practica.

Ahora el sorprendido era yo. Vivo con mi familia y no tengo un lugar privado donde llevarlo. Me acordé de un "amigo" que varias veces me ha sacado de apuros similares prestándome su apartamento. Lo llamé y le describí a mi nuevo "amigo", que necesitaba su apto. Accedió con la condición de presentárselo en otra oportunidad, y así quedamos.

Llegamos y ambos estabamos nerviosos. Encendí la tele en el canal porno para crear ambiente.

Empece por mostrarle el condón.

Probablemente no me sirva.

¿Porque? pregunte

Es que la tengo GRANDE.

Qué tan grande. Sería mejor verla.

Esto no le he hecho nunca con otro hombre.

Que más da! Lo mismo que tienes tu, lo tengo yo. Además, nadie lo sabrá.

Esta bien.

Y ha sacado ese miembro maravilloso. Morena, de piel fina y tersa, de grosor normal, cabeza algo grande, en total 16 cm, y todo esto en reposo.

Vaya que la tienes grande.

Jajaja

El condón no se puede poner en esas condiciones, deber calentarte.

Eso intento, pero la tele no es suficiente.

TE AYUDO?????????

Cómo?

Y tome ese miembro en mis manos. Estaba tibia. Manejable. Empece a sobarla, subir y bajar. Me miro a los ojos y me dijo:

Te gusta?

Tu que crees? Respondí

Lo imaginaba pero al verte tan varonil......

Me arrodille delante suyo y sobándole la polla, lo miraba a los ojos. Su mirada delataba su gusto.

Quieres que te la chupe. dije

Que esperas?!!!!!!!

Puse mis labios en su cabeza y empuje, entro hasta la mitad, pues ya empezaba a crecer de forma rápida. En dos chupones más la tenia completamente erecta. Me la saque para admirarla. Los 16 cm, pasaron a ser más de 22 cm. Era increíble tenerla en la boca. Chupaba y lamía su polla, sus huevos peludos y grandes, su ingle, sus piernas, todo lo que podía. Con el tiempo mi garganta empezó a acostumbrarse a su grosor hasta que pude tragármela toda. Dio un gemido muy fuerte y se estremeció. Creo que le gusto pues me dijo que lo repitiera. Me la tragué toda y lo mire la cara. Si le gustaba, tenia los ojos blancos, volteados hacia arriba.

Nos quitamos la ropa? Pregunte

Creo que es más cómodo.

Seguro.

Así quedamos, como Dios nos trajo al mundo. Era un espectáculo. Su cuerpo bien formado, lleno de vellos gruesos negros, brazos largos y fuertes, unos pies grandes, muslos firmes, sin barriga. Su aroma me embriagaba.

Nos besamos de forma tímida. Parecía su primera vez. Y lo era. Luego me confeso que tenia la inquietud de cómo sería hacerlo con otro hombre.

Le bese todo el cuerpo y a cada beso, se estremecía. Desde su frente hasta los pies. Nuevamente en su miembro, chupé hasta que me detuvo ya que estaba a punto de correrse. Nos fuimos a la cama, se acostó boca arriba y puse mi cabeza entre sus piernas. Mamaba su polla de forma suave, memorizando cada centímetro. Fui bajando para buscar su ano, pero no le gusto la idea, así que desistí. Me tomo por la cabeza y me llevo hasta la suya para fundirnos en un beso largo y profundo. Estaba tomando confianza.

No pense que podría gustarme......

Tenias que probar, para salir de dudas, no?

¿o será porque tu me gustas?

No lo sé. Tu que crees?

Miro la mesa de noche donde estaba el condón, dándome a entender que quería penetrarme. Y yo ni corto ni perezoso.....

Tomé el condón y se lo puse. Busque la crema lubricante y me la puse en mi culo. Se intrigo de cómo era mi hoyito y me pidió que se lo mostrará. Me puse en posición de perrito y empezó a acariciarme.

Te puedo meter un dedo. Preguntó.

Cuantos tu quieras.

De verdad?

Pues claro. Con calma y despacio.

Logro meter tres con facilidad. Mi dilatación era total. Le dije que estaba listo para lo inevitable.

Puso su cabezota en mi culo y presionó. Con la cabeza dentro, me pregunto si me dolía.

Claro que me duele. Es que la tienes muy GRANDE.

Perdón.

Nada. Sigue que eso se pasa luego.

Seguro?

Seguro. Respondí

Siguió metiendo, hasta el fondo. Sentí la presión de su pelvis contra mis nalgas. Sus testículos golpeaban en los míos, era superexcitante!!!!!!!

El ritmo era lento y firme. Sacaba casi todo y dejaba la cabeza dentro. Y otra vez dentro, lento, suave. Ese método permite sentir muchas emociones de forma casi interminable. Sentía cada centímetro entrar y luego salir.

Varias veces hacia el mete – saca solamente con la cabeza. Mi mente divagaba. Saber que de aquella polla grande tienes solo la cabeza dentro, para luego metértela toda, es delicioso, indescriptible.

Me tomaba por la cintura y mantenía el ritmo lento. Otras veces me tomaba por los hombros. Metió sus brazos por debajo de los míos y me subió, dándome un abrazo fuerte pero tierno. En esa posición aceleró el mete – saca. Sentí que se contaría y expandía su polla. Pensé que estaba a punto de correrse.

Te vas a correr? Pregunté.

Metiéndotela puedo controlar la eyaculación, así que me correré cuando tu quieras.

QUE BIEN ¡!!!!!!!!

Me gusta tanto que no quiero acabar aún. Quiero darte el mismo placer que me das tu.

Y me lo estas dando. Nunca nadie me ha hecho tan feliz. Dije

Llego un momento de éxtasis que no soporte más y empece a eyacular de forma brutal. Cuando me relaje, él lo noto en la presión de mi culo y aceleró el ritmo, produciendo una larga corrida dentro de mí.

Estire mis brazos y piernas y quede acostado boca abajo y él encima. Me acariciaba las piernas, los brazos, la cabeza, todo lo que podía.

Me la saco y nos fuimos al baño para "enseñarle" a quitar el condón. Nos duchamos mientras redescubriamos nuestros cuerpos.

Ya camino a casa, charlando, quedamos en vernos nuevamente. Pero que le diera algo de tiempo para pensar lo que habíamos hecho. Lo apoye y le dije que podíamos vernos sin necesidad de tener sexo.

Esa parte la dejo para otro relato.

Espero les guste,

Andrés.