Exodo Capitulo 8

EL QUE SE FUE.

“ All this money can't buy me a time machine ”

Muy lejos de mi, escuchaba una voz, pero la verdad estaba muy cansado como para abrir mis ojos, me dolía la cabeza, me dolían los huesos, pero sobre todo me dolía el pecho. Poco a poco recordé el motivo por el cual yo estaba en esta obscuridad, inmediatamente sentí esa descarga de adrenalina que me impulso a salir de esa obscuridad y abrir mis ojos, desperté.

-¡¡¡¡¡Noooooooooooo!!!!! Grite lo mas fuerte que pude, hasta que mi garganta se desgarro y hasta que mis ojos se vieron inyectados de sangre de la fuerza con la que grite. No, no, no, no puede ser, dije, y me baje de la camilla donde me tenían, me arranque la línea del suero y me quite la mascarilla de oxigeno, no pude avanzar porque mis compañeras estaban sobre mi inmediatamente.

-Jose tranquilo, tienes que reposar.

-Quítate, grite y salí corriendo del área de hospitalización y corrí lo mas que pude a urgencias, y lo vi. Mi corazón se destrozo inmediatamente, ese no era el Miguel que yo conocía. Estaba muy mal herido, tenia una herida que abarcaba toda la parte de enfrente de su rostro, tenia una herida en un hombro, al parecer un trozo de metal lo había atravesado, pero no me importo.

Corrí y empuje a los doctores, e intente darle respiración de boca a boca, trataron de detenerme, pero no me deje, me abrace a el lo más fuerte que pude, los doctores trataban de controlarme pero no podían hasta que oí una voz que me grito: -No se puede hacer nada Jose, tranquilízate.

Di media vuelta y lo vi, era su papa, corrí hacia el y lo abrace.

-¿Por qué? Porque me dejo, le dije, teníamos muchos planes, muchas cosas que hacer, porque, porque, grite lo mas fuerte que pude, don Miguel solo me abrazo muy fuerte.

-Fue un accidente. Conducía por la zona de la sierra donde hay demasiadas curvas, estuvo a punto de chocar con un autobús pero decidió tirarse al barranco. Me llamaron hace unas horas y les pedí que lo trajeran aquí ya que estaban mas cercas de aquí que de la capital. Pero no resistió.

-No puede ser, dije, no puede ser, agarre a don miguel del cuello de la camisa y le grite: Dígame que es una broma de mal gusto, dígame que no es verdad, ¿verdad que de pronto miguel va entrar por la puerta riéndose? Diciéndome que fue una broma de mal gusto, ¿verdad que si? ¿Verdad?

-Por mucho que me duela…el ya no volverá y a nosotros solo nos queda ser fuertes.

En ese momento llegaron unos hombres y preguntaron por miguel:

-¿Este es el cuerpo de Miguel Gonzalez Gonzalez?

-Si, es este dijo don Miguel.

-Venimos de la funeraria por el cuerpo, si ya esta todo el papeleo, procederemos a llevárnoslo.

-Adelante, mis abogados están arreglando todos los trámites con el hospital y con el ministerio público, procedan.

-No, dije, no voy a dejar que se lo lleven, por políticas del hospital se debe de preparar el cuerpo aquí, ustedes se lo pueden llevar ya que se le hayan realizado los procedimientos correspondientes en el hospital.

-El seño Gonzales ha pedido que aquí no se le haga absolutamente nada, Enfermero, me dijo el Doctor, la funeraria se encargara de todo.

-Don miguel, déjeme hacerlo a mi.

-¿Estas seguro? ¿Puedes hacer eso?

-Claro que si. Si puedo. –Adelante entonces.

Procedí a quitarle las líneas del suero, del oxigeno, a quitar las gasas, las vendas, procedí a dejarlo limpio, ya que estaba muy sucio y aparte tenia demasiada sangre, lo prepare con tanta ternura, con tanto cariño, aunque yo sabia que el ya no sentía, lo trate con tanto cuidado como si le doliera.

-Amor, ¿Por qué me dejaste? Te amo demasiado, te amo y por eso soy yo el que esta haciendo esto, los demás no tendrían tanto cuidado contigo como yo, sabes teníamos muchos planes, muchos lugares a donde ir, no se en realidad a que ibas en ese viaje, ¿sabes? Hace una semana vi en tu agenda lo programado para el día de hoy, y aunque no lo quiero creer, sospecho que me engañabas, perdóname amor por pensar eso, pero no se que creer, dame una señal, dame una señal de que se trataba este viaje, porque te juro que no quiero pensar cosas que no son, quiero estar en paz sabiendo que jamás me fallaste, así como yo jamás te falle.

Entregue el cuerpo a la funeraria y se lo llevaron. Con él se fue una parte de mí.

¡¡JOVEN MUERE EN TRÁGICO ACCIDENTE!!

Ese fue el titular del periódico, debido a que don miguel pago una elevada suma por las fotografías, la noticia solo fue informativa, mas no ilustrativa, el funeral se llevaría acabo al día siguiente en una funeraria de la ciudad, debido a todo lo que paso, el hospital me dio una semana libre para atender todo lo relacionado con el funeral. No quería ir, pero tampoco me quería despegar de el. Me fui a mi casa, a la casa que rentaba al principio. Se sentía vacía, fría y sola, pero en ese momento me di cuenta de que así estaba mi vida ahora sin miguel, estaba acabado.

No sabia si era lo correcto, pero tenia que hacerlo; marque un numero que me sabia de memoria, un numero que a pesar del tiempo que había pasado, no lo había olvidado.

-¿Bueno?

-Arturo soy yo, tu hermano antes de que cuelgues escucha lo que tengo que decirte.

-¿Qué quieres? Pude notar un poco de amargura en su voz, tengo muchas cosas que hacer y no qu..

-No me importa que tengas que hacer y no marque para pelear, solo marque para decirte que Miguel se mato ayer en un accidente, a estas horas me imagino que si tuvieras el habito de la lectura ya te habrías dado cuenta, salió en los periódicos.

-¿Qué dices? ¿Qué fue lo que paso?

-Fue un accidente, el funeral será mañana en la funeraria del centro de la ciudad, no asistas por mi, si no por el. Adiós. Colgué, no tenia nada más que decirle.

Llegue a la funeraria en cuanto llego el cuerpo. Por tradición, vestí de negro, y al llegar y verlo en el ataúd, no encontré diferencia alguna, se veía muy tranquilo, en paz, parecía que durmiera, vestía un traje negro, aunque en vida nunca lo vi de traje se veía hermoso, la mayoría de los asistentes fueron personas que yo no conocía, pero que sin duda eran amigos de el o de la familia.

Ahí estaba yo, parado junto al ataúd, mirando y reviviendo cada momento que viví con el, hasta que de pronto se acerco una joven, muy hermosa por cierto.

-Hola Jose. La mire sorprendido y le pregunte: -¿Te conozco?

-Se supone que nos conoceríamos ayer en la noche, Miguel iba por mí.

Sentí unas ganas inmensas de gritarle que por su culpa Miguel había muerto, ¿Quién era ella? ¿La amante? ¿Venia a reclamar su lugar? ¿Cómo se atrevía a presentarse en el funeral y mucho menos a acercarse a mi.

-¿Qué quieres aquí? No tienes nada que hacer aquí. Lárgate.

-Se lo que estas pensando, no soy ni fui amante de Miguel, soy su prima, el iba por mi porque quería que te conociera. Quería que estuviera presente cuando…

-¿Cuándo que? Sentía ese nudo en el estomago que te dice que estas apunto de recibir malas noticias.

-Cuando te diera esto…y me entrego una pequeña caja negra.

Al abrirla mis ojos se llenaron de lágrimas, era un anillo de oro blanco, tenia la fecha que nos conocimos grabada por dentro y por fuera tenía la leyenda: I LOVE YOU.

-¿Qué es esto?

-Te quería pedir que te casaras con el, nadie mas lo sabia mas que yo, yo le dije que yo podía viajar, pero ya sabes que a el le gustaba demasiado manejar e insistió en ir por mi y ahora, mira.

-No te preocupes, pensé que me engañaba contigo, pase una muy mala semana, el ultimo día que lo vi, se despidió de mi y por primera vez nos dijimos Te amo. No se porque pero antes de irse me beso en la frente y me dijo que me cuidara mucho, es como si el supiera que algo estaba por ocurrir, todo el día traje un mal presentimiento hasta que llegue al hospital y me di cuenta de todo.

-Jamás pienses que el te fallo, el te amaba como no tienes una idea, todos los días hablaba conmigo de ti.

-No sigas, le dije, ¿Por qué tienes tú este anillo?

-El me pidió que lo comprara en una joyería de la capital, el era cliente de esa joyería, así que el diseño que pidió para ti es exclusivo, nadie mas tiene ni tendrá uno como este. Escucha esto, me dio su celular y puso a reproducir un audio decía lo siguiente: “Hola prima hermosa, estoy saliendo de la ciudad, ya voy en camino, espero ya tengas lo que te encargue de la joyería, estoy emocionado, antes de salir de casa por fin me lo dijo, por fin me dijo que me ama, bueno te marco cuando entre a la ciudad, hay algo de trafico y se batalla con la señal, ahorita le mandare un mensaje a mi amor”. El audio se cortaba ahí, y ya no había más mensajes. Mis lagrimas de nuevo corrían por mi cara y por mas fuerza que quisiera aparentar no pude, me arroje sobre el ataúd y llore, llore con tanta tristeza que no creí que fuera posible, hasta que unas manos tocaron mis hombros y me dieron la vuelta y me abrazaron contra su pecho.

Sentí ese olor, ese aroma, me trajo tantos recuerdos que no logro tranquilizarme, si no que incluso llore con mas sentimiento.

-¿Por qué tardaste tanto en llegar? Le dije. –No sabia si venir o no, no sabia que hacer, me dijo.

-Arturo, gracias por venir. Era mi hermano el que me abrazaba.

-¿Cómo es que se conocían? –Hace mas de un mes el me encontró y a partir de ahí…púes nos frecuentamos y nunca me dejo solo, el no era como tu y papa.

-Lo lamento, me da mucho gusto que hayas estado en buenas manos, y perdóname por lo que paso, yo, yo, la verdad es que…

-No tiene caso hablar de eso ahora. –Esta bien. Me abrazo mas fuerte y los dos nos soltamos a llorar.

El entierro fue privado, en un cementerio de la capital.

Pasaron los días y mi hermano tuvo que regresar a casa, el nunca supo y hasta la fecha no sabe lo que paso entre miguel y yo. A partir de ese día no he vuelto a tener comunicación con el. Ni tampoco he vuelto a llorar. Simplemente no puedo.

Entre las cosas personales de Miguel, encontré su agenda y su diario, es increíble lo que escribía de mi, de verdad nos amábamos, el anillo que el me había comprado se fue junto con el.

Dias después recibí una llamada de don Miguel que necesitaba verme en su casa, así que fui para ver que pasaba.

-Hola Jose, pasa, ¿gustas algo de tomar?

-No don Miguel, gracias, vine porque me dijo que era urgente. ¿Qué pasa?

-Bueno, lo que pasa es que estaba revisando algunos papeles de Miguel y entre esos papeles esta su estado de cuenta bancaria y pues, tu sabes que en caso de que la persona muera, debe de dejar un beneficiario, tanto del dinero de la cuenta, como del seguro de vida que provee el banco.

-Si lo se…pero ¿Qué tiene que ver eso conmigo?

-Pues resulta que Miguel te dejo de beneficiario de la cuenta, y del seguro de vida, los abogados están en camino para hacer el papeleo aquí en casa el notario publico también es en camino.

-¿De cuanto estamos hablando? Dije nerviosamente, ya que sabia que Miguel si algo tenia era que ahorraba mucho, aunque tenían dinero, el no despilfarraba, al contrario invertía aquí y haya.

-Del seguro de vida son $200,000.00 y de lo que hay en la cuenta son aproximadamente $250,000.00, estamos hablando de casi medio millón.

-¿Por qué Miguel tenia tanto dinero en esa cuenta? Hasta donde supe el estaba por entrar a estudiar, y trabajaba con usted, no se cuanto le pagara usted, pero es mucho dinero.

-Efectivamente, Miguel tenía un salario como el de cualquier auxiliar de ingeniero, ya que no tenia la carrera terminada,  no por ser mi hijo le iba a dar preferencia, sabes que no soy así, supongo que parte de las ganancias del restaurante al que te llevo el otro día iban a parar a esa cuenta. Aparte tu sabes que el ahorraba demasiado, los gastos de la casa los cubro yo, así que su sueldo era para su escuela, a la que estaba por entrar, y su consumo personal, comida, lujos etc.

-Y usted cree que eso justifique esos $250,000.00 de la cuenta

-Supongo que si, o hasta donde se, el no tenia mas entradas de dinero.

-Y ¿Que pasa con la renta de la casa de San Luis?

-¿Te conto de la casa que tiene a su nombre?

-Entre miguel y yo no había ningún secreto, pero para evitarnos más líos, me gustaría estar presente cuando lean el testamento que dejo.

-El notario esta apunto de llegar y ya que no hay mas familia cercana sele dará lectura aquí mismo.

Estábamos en eso cuando llegaron los abogados junto con el notario publico, y se procedió a darle lectura al testamento. Don miguel no pudo evitar la cara de alegría cuando en el testamento se especificaba que; las cuentas bancarias, porque eran dos, la casa de San Luis el carro, que se destrozo en el accidente, y sus objetos personales, (relojes, ropa, lentes de sol, computadora etc etc.) quedaban a mi nombre.

-Definitivamente te amaba demasiado, me dio don Miguel, me da gusto que mi hijo haya arreglado todo esto lo mas pronto que pudo, así nos evitamos muchos procedimientos legales.

-Gracias a don Miguel, yo ignoraba todo esto, yo no sabia que pusiera todo a mi nombre, de hecho aunque me lo hubiera dicho, no pensé que este día llegaría tan pronto.

-Y bueno, pues puedes mudarte aquí a la casa, yo tengo la mía y esta aunque es mía en documentos, el se encargaba de mantenerla en pie. ¿Qué vas hacer con todo lo que te dejo?

-No lo quiero. Conocí a Miguel muy bien, y si algo tenia el era que ayudaba a los demás, el siempre fue muy sencillo, cualquiera que lo viera diría que no tenia dinero, usted sabe que el nunca fue ostentoso.

-Pero, Jose, el te dejo todo eso, tienes quehacer algo.

-Tengo una idea de lo que puedo hacer con eso.

-Haz lo que mejor te parezca, no tienes que darme cuentas a mí. Mañana mismo ese dinero estará disponible en tu cuenta para que hagas con el lo que quieras, la otra cuenta tiene poco dinero pero hasta el ultimo peso es tuyo.

-Gracias.

A veces no pensamos en lo pronto que cambia la vida, es cierto que el dinero te da seguridad, pero no te compra ni la vida ni un minuto de tiempo más. Poco a poco fui retirando ese dinero y lo use, no en mi, si no en otras personas necesitadas, una parte de ese dinero lo done a una escuela de aquí de la ciudad, otra parte lo done a otro hospital, otra parte de ese dinero lo use para condicionar un albergue que estaba cerca del hospital publico para darle alojamiento a los familiares de los pacientes que tienen meses internados.

Fueron grandes contribuciones las que hice, pero no a mi nombre, si no a nombre de el, si un día se hiciera una ceremonia para honrar a los patrocinadores, dirán el nombre de el, no el mío, a mi no me costo acumular ese dinero.

Don Miguel con el tiempo vendió las casa y se fue de la ciudad, actualmente se donde esta, solo que la comunicación entre nosotros se acabo, no tenemos nada mas de que hablar.

Pasaron 6 meses y aunque el dolor estaba ahí presente, poco a poco se iba haciendo soportable, los primeros días soñaba con el. Hasta que un día tuve un sueño un tanto extraño.

Tocaron la puerta de mi casa, ya era algo noche, así que fui abrir con cuidado.

-¿Quién es? Pregunte. –Soy Miguel, abre amor. Abrí la puerta y ahí estaba el, con su ropa habitual. Me avente a sus brazos. De pronto Miguel estaba sentado en la orilla de mi cama y yo acostado mirándolo.

-¿Por qué me dejaste? Le pregunte, teníamos tantas cosas por realizar.

-A veces uno no entiende los planes que te tiene la vida, pero me da mucho gusto haber compartido ese tiempo contigo. Se que te protegí y cuide de todos y de todo. Espero haber estado a la altura.

-Lo estuviste, pero ahora que no estas, solo estoy yo.

-Tienes que vivir.

-No, no quiero, se que tengo que seguir, pero no sin ti, a veces pienso en irme yo también para estar contigo.

-No digas eso nunca más, tu tienes toda una vida por delante, tienes que hacer que yo me sienta orgulloso de ti, tienes que vivir, no soy egoísta y jamás te pediría que me guardaras luto, todo este tiempo has estado culpándote de muchas cosas, pero eso ya paso.

-Me hubiera gustado ir contigo en ese carro.

-Pero no estabas y es porque la vida te tiene algo bueno, muy bueno, así que a vivir, déjate de remordimientos y vive, por favor, prométemelo.

-Te lo prometo amor, pero siento que no podre, yo te amo.

-También te amo, pero ahora nuestro amor es diferente, y me harás muy feliz si encuentras a alguien que este contigo, sabia que todo lo que te deje lo usarías de la mejor manera. Beneficiaste a muchas personas y eso me hace sentir orgulloso. Eres una persona súper fuerte, afrontaste lo de tu familia y ahora esto, se que eres fuerte, más fuerte de lo que tu te imaginas, asi que adelante…estas listo para seguir sin mi.

-Se que por algo me dejaste todo eso, sabia lo que tenia que hacer…soy fuerte pero a veces solo lo aparento, me siento muy solo sin ti. No me dejes.

-Me tengo que ir amor, no se si pueda volver a verte aquí, pero estoy seguro de cuando llegue tu momento, yo estaré de pie para recibirte.

-No me dejes…no te vallas.

-Me voy, pero siempre estaré adentro de aquí, puso su mano en mi corazón, y tú estarás aquí, puso su mano en su corazón.

-¿Me lo prometes?

-Te lo prometo amor, ahora a vivir ¿de acuerdo?

-Lo intentare, te lo prometo.

-Muy bien dicho, ahora a dormir, yo me tengo que ir, me dijo, me beso en la frente y con su mano limpio una de mis lágrimas. Siempre te voy a cuidar, me dijo y de pronto desperté.

Estaba con la respiración agitada, mi cuerpo estaba bañado en sudor, me senté y cuando quise bajarme, toque la orilla de la cama y se sentía caliente, como si alguien hubiera estado sentado ahí, como si alguien se hubiera ido en cuanto yo desperté. Y por extraño que parezca, sentía su beso en la frente.

Tenia que vivir, no buscaba remplazarlo, ya que seria algo estúpido, solo esperaba que llegara la persona adecuada, la persona que me hiciera sentir vivo de nuevo, y sabía que cuando esa persona llegara era porque Miguel estaba detrás de todo. Aun faltaban algunas horas para que amaneciera, pero el sueño había huido de mí.

Aunque el siempre estuvo en desacuerdo de que yo me hiciera un tatuaje, lo estaba pensando seriamente. Esa fue la ultima vez que soñé con el, a partir de ahí, el dolor desapareció poco a poco, los episodios de tristeza fueron disminuyendo y supe que el estaba en paz, y yo tenia que estarlo, por los dos.

A la mañana siguiente salí rumbo a mi trabajo, estaba esperando mi autobús, cuando de pronto sentí que una mano me tocaba por la espalda:

-Hola, ¿Cómo estas? Era el, el chico de la mueblería.

-¿Qué necesitas? Dije con una voz poco amable.

-Invitarte a salir, puse mis ojos en blanco, y aunque pongas esos ojos así no me daré por vencido, aceptas por las buenas o aceptas por las malas.

En ese momento llego mi auto bus y me subí, pero antes alcance a decirle: -No me tientes, porque vas a perder. Y me fui a mi trabajo.

Hasta aquí este capitulo, gracias por sus fotos que mandaron, fueron pocas por eso no las subí a la pagina, gracias por sus likes, sus solicitudes de amistad. Gracias por sus mails. La historia tendrá por lo menos 10 capítulos, ya que esos fueron los capítulos que tenia planeados originalmente, aunque no lo se aun, he tenido buena respuesta de parte de ustedes, espero que sigamos así.

Díganme que les gusta que les moleste, háganmelo saber para así poder complacerlos a ustedes mis queridos lectores.

Escuchen estas dos canciónes, me gustan mucho por el suceso que viví con Miguel, se llaman:

Historia de un Sueño de La Oreja de Van Gogh.

The One That Got Away de Katy Perry .

Hasta la próxima.