Excursión con el grupo de Mario y Luisa

Encuentro con Luisa en la tienda de campaña y Mario su novio afuera y después en el baño de damas y él buscándonos

EXCURSIÓN CON EL GRUPO DE MARIO Y LUISA

Con Luisa en la tienda de campaña y Mario afuera, después en el baño de mujeres y Mario buscándonos.

Pasaron como dos meses del día de campo y varios compañeros y amigos de Mario y Luisa querían organizar una acampada al volcán sangangüey a hora y media de la ciudad en bicicleta, nos iríamos el viernes saliendo de la escuela, acamparíamos a las faldas del volcán y al otro día subiríamos, es una excursión como de cinco horas para subir hasta el cráter y después bajar o sea que nos llevaríamos entre doce y quince horas subir, disfrutar la vista y descender al campamento.

Nos organizamos de manera que cada quién llevaba su equipo individual, nos juntamos 12 personas en total 5 mujeres y 7 hombres, de los cuáles iban dos en parejas (Mario y Luisa y otra pareja que no conocía) los demás íbamos solos, 3 chavas y 5 chavos, llevábamos 7 tiendas de campaña, una de la pareja que no conocía, otra de Mario que la ocuparían él y Luisa, otras dos grandes donde dormirían las tres chicas y en la otra tres de los chavos, un compañero de Luisa llamado Juan que llevaba su tienda, la mía individual con sleeping y otra que usaríamos para guardar en ella los víveres y demás provisiones.

Llegamos cuando el sol comenzaba a ocultarse así que lo primero que hicimos después de descansar unos minutos fue armar el campamento, pusimos la tienda con los víveres en medio y las demás a su alrededor pero todas con vistas a la fogata central, hicimos una zanja alrededor del campamento y las medidas de seguridad pertinentes en cualquier armado de un campamento.

Quedando tres a la derecha de la tienda con los víveres ( la mía, la de las chicas y la de Juan) y a la izquierda la de Mario y Luisa, la de los chavos y la de la otra pareja.

Nos sentamos todos alrededor de la fogata platicando y asando bombones, así estuvimos un buen rato y después haciéndole una seña imperceptible a Luisa me retiré diciendo que iba arreglar mis cosas para mañana y me fui hacia mí tienda, rodeando el campamento me fui a la tienda de Luisa y me metí por la parte de atrás sin que nadie se diera cuenta, sólo Luisa que ya sabía que la esperaba en su tienda. Ella le dijo a Mario que estaba cansada y ya se iba a dormir y Mario como estaba muy a gusto platicando con sus amigos contando chistes y anécdotas le dijo que él iría más tarde a dormir.

Abrió el cierre de la tienda y entrando me dijo: que haces aquí, por dónde entraste?

Me acerqué a ella y cogiéndomela por la cintura la pegué a mí besando su cuello, por acá atrás, todo el día he estado pensando en tenerte así entre mis brazos…!!!

Huy cómo estás niño!!! Dijo moviendo su cadera buscando un mayor roce de su vulva con mi erecto pene, qué duro y caliente se siente..!!!! Y me besó en los labios muy apasionadamente!!

Así me tienes todo el día nena, con ése shortcito que marca tan bien tus preciosas nalgas y apretándoselas comencé a desabrochar su short bajándoselo hasta las rodillas, se deshizo de ellos y se quitó la blusa quedando en ropa interior, yo me quité toda la ropa y me senté en la cobija; ella se inclinó y cogiendo mi erecto y grueso miembro sobándolo de arriba abajo mientras besaba la punta y pasaba su lengua alrededor del glande, con una mano acariciando mi vientre y pecho y con la otra masturbando mi pene y acariciando mis testículos mientras succionaba mi glande y comenzaba poco a poco a metérselo en la boca.

Y acariciaba sus senos y le quité el brassier quedando sus senos colgando, se los acariciaba y jalaba levemente sus pezones y ella gemía deliciosamente aumentando mi excitación. Pasaba mis manos por sus redondas nalgas acariciándolas y apretándolas, las separaba y pasaba mis dedos entre ellas pasando mi dedo medio entre sus labios vaginales, desde el inicio de su vulva hasta su orificio anal haciéndola gemir y retorcerse de gusto!!!

Así me la estuvo mamando pasando su lengua desde la punta hasta la base de ida y vuelta varias veces ensalivándolo completamente, chupaba mis testículos uno a uno y volvía a meterse mi pene en la boca mientras yo le bajaba su panty y acariciaba con mis manos su vagina apretando su clítoris con mi dedo medio y con la otra mano le metía un par de dedos en su mojadisima vagina, así la estuve masturbando haciendo que tuviera un par de orgasmos que acallaba metiéndose mi grueso pene en su boca.

Cuando se recuperó de su segundo orgasmo, la jalé hacia mí y dirigiendo mi pene a su vagina le dije que me montara, y se lo fue metiendo poco a poco en su vagina suspirando y resoplando en lo que entraba mi miembro por completo aaahhh hummm, qué rico se siente!!! Ya lo extrañaba!! Me dijo al apoyarse con sus brazos en mis hombros y comenzar a subir y bajar ensartándose todo mi pene ella sola una y otra vez disfrutando la penetración y besándonos apasionadamente en los labios!!!

Acariciaba sus ricas nalgas y besaba y lamía sus erectos pezones mientras ella no dejaba de ensartarse mi duro y grueso miembro en su mojadisima vagina, eran tantos sus fluidos que mi pene se deslizaba libremente dentro de ella chocando sus nalgas a cada profunda penetración con mis testículos y muslos plap plap plap se oía cada vez que se lo metía completamente, estábamos tan excitados disfrutando de tan rico encuentro que ya no nos importaba si se alcanzaban a escucha nuestros gemidos y chapoteo al unirse nuestros cuerpos!!!

Afortunadamente la grabadora estaba tan alta que opacaba nuestros ruidos, se quedó quieta con todo mi miembro dentro de su vagina mientras mordía mi labio inferior al llegar ella a un orgasmo más..!! Nos abrazamos fuerte, mi pene pulsaba dentro de su vagina y ella apretaba sus piernas y labios vaginales para sentirlo mejor.

Al poco rato y con nuestros cuerpos sudorosos la volteé, poniéndola en 4 y apuntando mi pene a la entrada de su vagina se lo volví a meter de un solo empujón haciéndola gemir y gritar aaahhgggyy al sentirse penetrada profundamente y arqueando su espalda me dijo: despacio amor que nos pueden oír…. Y comencé un continuo mete y saca más lento sacando casi por completo mi pene para luego volvérselo a meter hasta sentir cómo topaba mi glande contra su cuello uterino una y otra vez haciendo que mentalmente midiera todo lo que le entraba!!!

Así estábamos cuando escuchamos la voz de Mario: cariño te pasó algo? Porque gritaste?

No, nada amor me moví y me pegué en el tobillo pero ya estoy bien gracias

Ya que estás despierta me puedes pasar mis cigarros están en mi chamarra….

Ok amor pero no abras porque estoy desnuda por el calor y me pueden ver tus amigos…

Ok, espero

Cogí los cigarros de Mario y se los di a Luisa sin dejar de moverme lentamente metiendo y sacando mi pene de su deliciosa y bien lubricada vagina…!!!

Ella abrió un poco el cierre de la tienda y sacando su mano únicamente evitando que se viera hacia adentro los dejó sobre el pasto: aquí están…. Ya vas a venir?

No, mi amor está muy amena la plática, tu duérmete y descansa…. Y se fue hacia la fogata mientras yo seguía bombeando dentro de su noviecita ya muy cerca de eyacular y llenarla con mi semen!!! Ella acopló el movimiento de su cadera a mis embestidas que fui haciéndolas más constantes y profundas, la cogí fuerte de las caderas y comencé a penetrarla más fuerte y a mayor velocidad haciendo que mis colgantes testículos rebotaran una y otra vez en su carnosa vulva.

Así estuvimos unos minutos más hasta que sentándome en mis talones y jalándola fuertemente hacia mí, se lo ensarte por completo hasta el fondo llenando su matriz y canal vaginal con fuertes chorros de espeso semen, ella quedó sentada sobre de mí recibiendo largos disparos que la inundaron por completo mientras yo acariciaba sus senos y mi pene palpitaba una y otra vez dentro de su vagina en cada chorro que salía de mi miembro directamente a su matriz!!!

Así nos quedamos abrazados un buen rato hasta que salió la última gota de semen y mi pene fue disminuyendo lentamente de tamaño y grosor, manteniéndose dentro de su cálida vagina!!!

Nos recostamos de lado mientras nuestras respiraciones se normalizaba y mi pene salía de su cálido recinto quedando pringoso con nuestros fluidos reposando entre sus redondas nalgas.

Me vestí y me salí sigilosamente por dónde una hora antes había entrado y me fui a dormir plácidamente a mi tienda!!!

A la mañana siguiente me levanté temprano y me preparé un café en lo que los demás se despertaban, al poco rato salió Juan de su tienda y le ofrecí una taza de café y nos sentamos alrededor de la fogata que ya la había reavivado yo con más leña y nos pusimos a platicar.

De pronto me suelta: que tal estuvo con Luisa anoche eh?

Con Luisa? No te entiendo a qué te refieres le contesté haciéndome el extrañado por su pregunta

Mira tú hace poco que me conoces pero soy amigo y vecino de Luisa desde pequeño, fuimos al kínder y primaria juntos, nuestros padres son muy amigos de hecho son compadres, el papá de Luisa es mi padrino así que comprenderás que entre ella y yo no hay secretos, somos como hermanos y se lo de ustedes desde la apuesta de Mario y tú….

Me le quedé viendo y le dije: si es como dices entonces espérate a que ella te cuente no crees?

Tienes razón, disculpa y si necesitas un paro me dices, al fin que el tal Mario me cae en la punta…

En eso salió una de las chicas, nos saludó y nos pidió que vigiláramos que nadie fuera hacia donde se dirigía.(seguro iba a hacer pipí) poco a poco se fueron levantando todos, al poco rato salió Luisa, venía con una playera deportiva y unos jeans y tenis y se sentó al lado de Juan quién le ofreció un café y comenzamos a platicar entre los tres conduciendo Juan la conversación para que Luisa confirmara lo que minutos antes él me había dicho, que eran amigos desde niños y que prácticamente eran confidentes uno del otro.

Desayunamos algo ligero todos y cogiendo nuestras mochilas iniciamos nuestra caminata hacia el cráter, llegamos al refugio donde descansamos un momento y vimos que había baños completos para poder asearnos al regreso, eso les gustó mucho a las chicas. Seguimos nuestro ascenso hasta el cráter.

Era una vista fantástica y como nos tocó un día bastante soleado se alcanzaba a ver toda la ciudad de Tepic incluso prácticamente todo el estado. De vez en cuando nos veíamos Luisa y yo con mucho deseo por su parte y mucha lujuria de la mía, viendo su entrepierna pasaba mi lengua por mis labios o la movía en forma de taquito, cosa que ella ya había experimentado conmigo cuando acariciaba su clítoris con ella.

Cuando se descuidaba Mario le acariciaba las nalgas o las piernas disimuladamente diciéndole que la extrañaba y le mostraba mi erección, ella se reía, mordía su labio inferior y me empujaba con el codo, o pasaba por detrás de ella y le hacía sentir mi paquete entre sus nalgas o soplaba sobre su cuello excitándola poco a poco.

Cuando íbamos descendiendo ya de regreso a nuestro campamento, las chicas dijeron que querían refrescarse y bañarse antes de regresar al campamento aprovechando que en el refugio había regaderas, todos estuvimos de acuerdo en bañarnos ahí.

Llegamos al refugio y me senté en una banca, Luisa hizo lo mismo en otra con las demás chicas y los demás chavos fueron a ver las instalaciones de los baños y pedir toallas y jabones, pronto las chicas cogieron su toalla y jabón y se metieron a las regaderas quedándose Luisa recostada en una banca descansando; Mario se le acercó y algo le dijo pero ella movió la cabeza negando.

Mario y los demás chavos se tomaron un refresco y algunas frituras antes de meterse a bañar, yo me quedé platicando con Juan en una banca frente a la de Luisa, al poco rato se metieron todos a bañar con excepción de Luisa y yo.

Casi no había gente pues ya era algo tarde porque el ascenso y descenso se hace en casi diez horas así que ya eran poco más de las seis de la tarde . Me acerqué a Luisa y nos comenzamos a besar y nos fuimos excitando con nuestras caricias, quise desabrochar su pantalón per no me dejó diciendo: espera nos pueden ver si salen del baño.

Es que ya no aguanto, quiero hacerlo contigo…. Le dije. Yo también tengo ganas pero hay que cuidarnos porque si no se puede armar y se levantó metiéndose al baño de damas.

Al poco rato salió y me dijo: sólo están mis amigas en cuanto salgan me meto y te hago señas para que me alcances si no hay nadie ok?

Perfecto le dije, con solo la posibilidad de volver a estar con ella mi pene se puso más duro aún

Salió Juan y nos preguntó por las chicas y le dijimos que ya se habían adelantado al campamento con dos de los chavos para preparar algo para merendar, en lo que acomodaba sus cosas, Luisa se metió al baño y haciéndome señas de que podía entrar, me acerqué a Juan y le dije: haznos el paro y si sale Mario lo entretienes si? Voy con Luisa….

El volteó a la entrada del baño de damas y al ver a Luisa ahí , se sonrió y moviendo la cabeza me dice: ok pero buzo no te vean porque de arma la bronca.

Le di una palmada en el hombro y le dije: gracias, te debo una.

Y agarrando mis cosas me metí al baño detrás de Luisa, pusimos nuestras mochilas en los lockers y nos fundimos en un apasionado beso, acariciándonos por todos lados desvistiéndonos uno al otro.

Ya completamente desnudos la acosté en la banca y poniendo mi pene erecto entre sus labios me incliné e iniciamos un delicioso 69, separé sus piernas y le metí dos dedos en su mojadisima vagina, estaba súper caliente ahí adentro y llena de fluidos!!! Puse mis labios en su clítoris y comencé a chupárselo con mucha pasión mientras ella me hacía una rica mamada metiéndose mi pene lo más que podía en la boca y succionaba mi glande como queriéndolo exprimir, sobando mis testículos y acariciando mis muslos mientras mi pene entraba y salía de su boca una y otra vez!!!

Ella movía su cadera al encuentro de mi boca, su respiración era muy agitada y sus movimientos muy frenéticos hasta que con su mano empujó mi cabeza hundiéndola entre sus piernas mojando copiosamente mi boca con su orgasmo, el cual fue tan intenso que gimió y gritó de placer aaahhh sin importarle quien le oyera, se metió mi pene a la boca y comenzó a mamarlo como si la vida le fuera en ello, lo metía y sacaba una y otra vez , lengüeteaba la cabeza y recorría todo el tronco de arriba abajo hasta que me separé de ella y poniéndome entre sus piernas, levanté su cadera con mis manos en sus nalgas y se lo ensarte, de una estocada le metí más de la mitad, ella volvió a gemir al sentirse empalada.

Se lo fui encajando poco a poco hasta metérselo completamente, me moví en círculos para que disfrutara con todo mi miembro dentro de su vagina mientras acariciaba sus senos y fui aumentando la velocidad de mis penetraciones, estábamos gozando plenamente a pesar del poco tiempo que tendríamos para asearnos después, casi estaba sentado y la posición no era muy cómoda así que la levanté y ella quedó sentada sobre mi y la impulsaba con mis manos en sus nalgas para arriba y abajo haciendo que entrara y saliera constantemente mi grueso pene de su deliciosa vagina mientras besaba y lamía sus senos alternadamente atrapando con mis labios sus erectos pezones, ella venía de placer aaahhh y aceleraba su sube y baja disfrutando de mi pene dentro de ella hasta que los dos llegamos casi al mismo tiempo a nuestro clímax.

Me apretó fuertemente y mordía mi hombro y mi cuello mientras tenía un intenso orgasmo y yo inundaba su vagina con fuertes chorros de espeso semen, nos quedamos abrazados y quietos mientras mi pene brincaba dentro de su vagina expulsando las últimas gotas de esperma y ella apretaba sus labios vaginales alrededor de mi pene como exprimiéndolo!!!

Cuando escuchamos la voz de Mario preguntando por nosotros y Juan le decía que no sabía, que lo más seguro era que ya estuviéramos en el campamento.

No lo creo decía Mario, cuando me metí a bañar ellos todavía estaban aquí y yo voy saliendo, ni modo que hayan terminado antes además a Eugenio no lo vi en el baño? Y si entramos a ver si está Luisa?

No, como crees, si hay más mujeres dentro se nos arma…!! Mejor vámonos al campamento, de seguro allá están todos esperándonos, aquí solo estamos tu y yo… anda vamonos.

Nos despegamos y nos metimos rápido a una de las regaderas por si en verdad entraban.

Me coloqué pegado a la pared del fondo para que no se vieran mis pies, solo se vieran los de ella.

Se inclinó para asomarse por si alguien entraba solo se oía las voces de Juan y Mario en la entrada, ver a Luisa así con sus ricas nalgas hacia mí y sus piernas separadas mostrando sus rozados labios vaginales brillosos y con un hilillo de semen, pufff me pusieron súper caliente y le dije: tienes unas nalgas riquísimas nena….!! Me fascina tu culo….

Sabes bien que es solo tuyo, tú lo estrenaste… enjabone mi pene y su orificio anal sin dejar de sobar sus deliciosas redondeces, le metí un dedo en su culito y ella gimió girando su cara hacia mí con una gran sonrisa de aceptación y enfilando mi grueso pene, se lo fui metiendo poco a poco en su apretado culito, ella apretó sus labios al sentir cómo avanzaba mi pene dentro de ella y se amoldaba al cálido invasor aaahhh que rico me lo haces…. Solo tú me llenas todaaa!!!

Y se lo dejé ir hasta el fondo, acariciaba sus senos moviéndome de atrás hacia adelante ensartándole una y otra vez mi miembro, que rico culito, bien apretadito, sentía como se estiraba la piel de mi pene al ir entrando, parecía una funda hecha exprofeso para mi miembro y comencé a darle duro, bajé una de mis manos a su vagina para acariciar su clítoris y con la otra en su seno izquierda aceleré mis embestidas entrando y saliendo completamente de su rico culo, ella se mordía los labios para no gemir o gritar y sólo resoplaba indicándome que le gustaba mucho como le penetraba.

De pronto escuchamos la voz de Mario: Luisa, cariño estás ahí?

Luisa me miró angustiada y le dije al oído: tranquila contéstale y dile que luego lo alcanzas!!

Luisa, sigues ahí contesta…!!!

Si, mi amor aquí estoy, no te escuchaba porque unas chicas estaban hablando, termino y te alcanzo en el campamento, ya casi salgo.

Ok, te espero, aquí estoy con Juan…

Reinicié mis embestidas dándole bien duro, ella se mordió el puño en el momento de tener su orgasmo y apretaba su culito haciéndome sentir bien rico, lo apretaba tanto que apenas lo podía mover unos cuantos centímetros, le di una nalgada para que aflojara y comencé a penetrarla con fuerza y más rápido hasta llenarla de semen, se lo metí completamente y comencé a eyacular dentro de su apretado culo, por la presión sentí que los chorros de semen salían con mucha fuerza ella arqueó su espalda al sentirse bañada por dentro quedando sus intestinos llenos con mi esperma!! Se agachó y limpió con su boca mi pene retirando los restos de semen con su ágil lengua.

Terminamos de bañarnos y quedamos que si tosía era señal de que no había nadie en el vestidor y podía salir, se vistió me dio la señal y se salió para encontrarse con Mario y ambos se fueron con Juan al campamento, después llegue yo y Juan me preguntó: dónde andas?

Conociendo el lugar, dando una vuelta por allá señalando el horizonte, cogí un refresco y me senté entre Juan y una de las chicas.