Exconvicto 5° capítulo libertad de mi padre

Eduardo se lleva una sorpresa con la llegada de su padre y es premiado por su padre en su primer día libre

EXCONVICTO

5° capitulo. La libertad de mi padre me hace un hijo obediente.

Eduardo. Mi relación con mi tío me tenía sumido ya que me hacía olvidar todo lo que me rodea, como los reclamos y malos tratos de la abuela así como también mis relaciones con benjamín y patricio, sin embargo los encuentros con patricio fueron memos frecuentes, con benjamín eran más frecuentes, pero después de mi relación con mi tío, fui distanciándome más de benjamín, día con día benjamín estaba más insoportable y empalagoso, rogándome por tener sexo más yo lo rechazaba pues me sentía completo al tener a mi tío, de hecho llego a amenazarme con contarle a mi abuela pero lo haría a su conveniencia, me decía qué le diría que yo era quien lo acosaba, esto me tenía muy tenso, y para calmar las aguas, así que ese día del cual marco una diferencia en mi vida, decidí acceder a sus peticiones de sexo y así calmar un poco las cosas.

Cuando mi abuela se marchó a trabajar y Patricio a ver a su novia, nos quedamos “solos” Benjamín y yo. después de mi encuentro con mi tío no me era posible verlo en su casa, pues me decía mi tía y mis primos que estaba bastante ocupado, cundo lo visitaba él no estaba en casa, pero no sabía el motivo de su ausencia, por un momento pensé que no quería saber más de mi después de ese día tan maravilloso que me había regalado. al estar solos en casa Benjamín insistió tanto que terminé cediendo a sus deseos.

Benjamín. Esta vez quiero hacerte el amor en la cama de tu abuela ya que hace días no he podido descargar mis ganas, necesito tu culito, no sabes las ganas que te traigo no siento el mismo placer al estar con tu abuela, además ella ya está muy fría conmigo. – me estaba enamorando de Eduardo cada día lo deseaba más y estaba dispuesto a todo con él.

Eduardo. será algo rápido pues no tengo mucho deseo de hacerlo con nadie. - La verdad es que en mi cabeza solo estaba mi tío y sus caricias, no se compara con Benjamín o patricio.

Benjamín. Ven amor quiero estar contigo toda la vida quiero que seas mi mujercita y me atiendas como tu hombre. – nos fuimos a la habitación y ya ahí dentro comencé a besarlo apasionadamente, pero él estaba algo distraído los últimos días.

Eduardo. como lo he dicho en mi mente solo estaba mi tío y aunque Benjamín fue quien me dio placer por primera vez, ya no sentía lo mismo que en la primera vez no es que no lo deseara o me diera asco, solo que ya no lo deseaba como hombre, pero aun así me deje llevar por sus caricias y besos, cuando en mi mente solo estaba mi tío, eso me hacía sentir mal por Benjamín, pero ya entrados en el acto sexual me prendía y las cosas se daban algo normal.

Después de los besos hicimos un 69 mientras yo le mamaba la verga a Benjamín el me mamaba el culito, dejándomelo mojadito y dilatado, luego de varios minutos de estar en ese rico 69 Benjamín se colocó un condón y en la entrada de mi culo me puso vaselina, comenzó a meterla lentamente suavecito y no dejaba de jadear y apremiar mi culo y lo rico que sentía al metérmela.

Benjamín. Que rico culito amor quiero que sea solo mío por el resto de mi vida, no sabes lo loco que me traías en estos días que me has dejado solito. – no dejaba de meter y sacar mi verga en ese culito tierno que me vuelve loco, y besar ese hermoso cuerpo por todos lados.

Eduardo. estábamos tan sumidos en nuestra relación que no nos dimos cuenta de que la puerta de la entrada se había abierto y entro alguien, seguíamos teniendo sexo entre gritos y gemidos más por parte de Benjamín que de la mía.

….

Ángel. bien hermanito por fin en cas después de diez años al fin estas aquí. – llegamos a casa de mi mama y estaba muy solo y al entrar y verme ahí con mi hermano me sentía feliz y triste a la vez tantos recuerdos buenos y malos.

German. Valla de nuevo en casa, pensé que no volvería a esta maldita casa. ¿Espera que son esos ruidos? - Casi al entrar escuche ruidos “raros”

Ángel. no qué rui.. hooo siii ya escu… - mi hermano me pidió que guardara silencio.

Ho siii que rico te la comes, vamos chiquito así dale placer a tu macho que ya desde hace días lo necesitaba, ummm que rico te mueves me vuelves loco hooo siiii unmmm que rico hooo siii bebe te gusta mi amor

Eduardo. ahí si me encanta hooo si unmmm ummm mummm ummm siii

Benjamín. vamos chiquito venga que estoy a punto de venirme donde quieres tu lechita, que ya días que necesitaba dártela ¿dime bebe donde la quieres?

Eduardo. dámela en el culo, quiero sentir como te vienes dentro de mí, vamos Benja dame tu leche.

Benjamín. suplica por mi lechita bebe, que te quiero oír suplicar por más venga, pídeselo a tu macho.

Eduardo. dame lechita quiero que me la des ya. La necesito venga ya por favor dame todo.

Benjamín. haaa siii hoooo me vengo hooo siiii, te amo chiquillo hooo siii hooo me vengo haaaaaa siiii que riiico

Eduardo. después de varias convulsiones benjamín se vino dentro de mí y me pidió que me masturbara antes de sacarme su verga de mi culo, yo me empecé a masturbarme en poco tiempo eyacule sobre mi abdomen, nos quedamos acostados en la cama hablando un poco o más bien escuchando a Benjamín.

Benjamín. sabes en estos días te he sentido distante, dime que te ocurre yo qui… - Eduardo me hizo una señal para que me callara, pero cuando lo vi estaba descolorido pregunte que ocurría.

Eduardo. espera se escucha alguien en la sala, no chingues es mi tío y alguien más. – de inmediato me puse de pie me vestí a toda prisa y antes de salir de la habitación Benjamín me detuvo.

Benjamín. espera vamos a explicarle a tu tío seguro que va a entender lo que pasa aquí, ambos nos queremos. -no quería que Eduardo se arriesgara con su tío por si nos había descubierto, pero como siempre con una madures me dijo:

Eduardo. tranquilo, esto lo arreglo yo, no salgas deja que yo hable con mi tío, ver con quien más viene. – mi preocupación fue la segunda persona, al Salir me limpie un poco en el baño antes de ir a la sala, pero cuando entre al salón me quede petrificado al ver quiénes eran.

Ángel. venga hijo saluda a tu padre que ya tiempo que no lo veías. – la cara de Eduardo estaba desencajada se le veía miedoso, nervioso triste y creo que avergonzado.

German. Hola, hijo, ven dame un abrazo, después de tanto tiempo sin verte, es lo mínimo. - mi hijo se veía avergonzado y triste, después de vernos y al saber que nos habíamos dado cuenta de su tarde de sexo.

Eduardo. mis sentimientos encontrados miedo, tristeza, felicidad, vergüenza, más miedo y ganas de llorar. Al ver a mi padre de pie estirando los brazos para que fuera a él, un “para mi extraño después de diez años sin verlo” un hombre alto, moreno, delgado, sus manos llenas de tatuajes y me suponía que todo su cuerpo, cabeza rapada, ojos grandes cafés, sus manos marcadas por las venas que sobresalían de los tatuajes. Tarde un instante en reaccionar e ir a darle un abrazo, Cuando me acerqué a darle un abrazo, comencé a llorar mientras mi padre me abrasaba con su mano izquierda y con la derecha acariciaba mi cabeza, mi tío nos abrazó por detrás de mi abarcándonos a ambos, a mi padre y a mí.

German. Vamos hijo ya estoy aquí para poder estar juntos y hacernos compañía el uno al otro, somos familia y no sabes cuantos deseos tenia de estar así con mi hijo y mi hermano, libre y feliz de tenerlos de nuevo. – el llanto de mi hijo me removía todo el pasado, pero no quería que ese momento fuera triste, los hechos del pasado así se deben de quedar en el pasado, así que para poder romper esa tención lo primero que se me ocurrió fue decirle a mi hijo y hermano: ya cabrones que no quiero que me estén agasajando, ven algo bueno y se lo quieren agasajar, nos separamos y sacudí el cabello de mi hijo y seque sus lágrimas.

Ángel. ya carbón ni que estuvieras tan bueno, puro pinche hueso y piel o no lo crees Eduardo ¿como ves a tu papa, es piel sobre huesos verdad? – logre sacar una sonrisa nerviosa de Eduardo y un golpe de German.

Eduardo. mi padre me tomo del hombro se acercó a mí y me dijo; ya escuché que te diviertes estando solo aquí en esta casa, yo no sabía que responder y creo que tanto mi papa como mi tío se dieron cuenta de mi expresión, mi tío se empezó a reír y le dijo a mi padre; ya tranquilo German que no ves que Eduardo no sabe cómo reaccionar después de haberlo encontrado pegando gritos de placer en la cama, yo me sentía avergonzado, pero ellos se están riendo de mí, con sus miradas de complicidad.

German. vamos hijo tranquilo que tener sexo no es algo malo, lo que, si espero que te hayas protegido, no quiero nietos en este momento, y que el carbón no quiera hacerse cargo del chamaco. – Ángel y yo seguíamos riéndonos de ver los gestos de mi hijo.

Eduardo. no se preocupen que si usamos protección – mi estado de ánimo cambio al ver la reacción de mi padre y mi tío, cambie de sentirme avergonzado a estar algo molesto, al ver como se reían, de repente apareció Benjamín saludo a mi tío y mi padre, todo quedo en un silencio incomodo hasta que hablo mi tío.

Ángel. bueno pues yo me retiro, hermano nos vemos después, hasta pronto Eduardo. – todo estaba bien hasta que llego ese perro de Benja que nunca me ha caído bien así que decidí regresar a casa.

German. está bien nos vemos más adelante para ir a comer en familia ya que agarré un trabajo jajajaja… – me despedí de mi hermano, pues la verdad estar todo el día firmando papeles y escuchando a los abogados es algo enfadoso, así que me fui a descansar al cuarto de mi hijo.

Eduardo. mi padre se retiró a mi habitación mientras yo me quede en el salón con Benjamín, después de que mi padre se perdió en mi habitación Benjamín estaba desconcertado me pregunto que había sucedido, pero en ese momento no estaba de ánimos para explicarle lo sucedido así que solo me limite a decirle que todo estaba bien y que ninguno de los dos se había dado cuenta de lo sucedido, pero deberíamos tener cuidado y no ser tan confiados.

después de la cena y ver tv un rato me metí a mi habitación, mi padre estaba acostado en mi cama, solo llevaba puestos un bóxer holgados y no pude evitar voltear a verlo admirar su cuerpo lleno de tatuajes, algunos buenos que no me gustaban, su cuerpo delgado, con musculo marcados, unos pectorales brillantes, sus pezones erguidos, y en su entre pierna se marcaba una verga de buen tamaño ya que se veía en reposo, su bulto se veía de buen tamaño, un movimiento de mi padre me saco de mi trance, así que saque algunas sabanas viejas y una manta, para dormir en el piso, cuando escuche a mi padre;

German. ¿qué haces Eduardo? – vi que mi hijo sacaba unas mantas delgadas de un viejo ropero.

Eduardo. pues saco algunas mantas para tenderme en el piso. – la voz de mi padre es grave pero dulce y calmada.

German. déjate de cosas aquí en esta cama cabemos los dos, esas mantas están muy delgadas, viejas y hace frio, no vas a dormir en el piso, anda prepárate para dormir. – mi hijo se veía algo disperso

German. mi hijo me dio la espalda y se empezó a quitar su ropa, yo estaba medio caliente por lo que había vivido al llegar casa y así que verlo desvestirse me puso dura la verga, me la saqué y empecé a darle carro a la verga (masturbarse), así que cuando la tenía en el punto de dureza le dije a mi hijo.

German. Eduardo te gustaría ayudar a tu padre con este problemita? – mi hijo se dio la vuelta se quedó mirando me la verga bien parada.

Eduardo. ¿sí, en que te pued…? - respondía mientras me daba la vuelta y vi a mi padre agarrándose la verga y mostrándome como ofreciéndomela, una verga larga más que la de mi tío Ángel, morena, una cabeza rosada y también un poco más delgada que la de mi tío, me quedé embobado sin despegar la vista de ese tremendo vergón recto duro

German. que dices hijo ayudarías a tu padre a bajarle esta calentura? En la prisión nunca me metí con nadie solo una que otra mamada, me gustaría saber cómo se siente metértela en tu culito. - Mi hijo solo me observaba asombrado.

Eduardo. papa esto no está bien, somos padre e hijo y no sería algo normal, seria incesto. - estaba que no creía lo que veía, pero ver la oferta de mi padre me tenía caliente y algo de nervios y miedo.

German. ya déjate de tonterías, que bien que has disfrutado de la verga de Ángel y así como le metí la verga a Ángel te la quiero meter a ti, soy tu padre y debes de ser obediente. – sabía que mi hijo deseaba que lo penetrara se le notaba en su mirada y en su cuerpo pues tenía una erección de campeonato.

Eduardo. veía a mi padre ahí dispuesto a meterme su verga y no podía creer lo que veía, escuchaba a mi papa estaba al tanto de lo que él hacía, pensé que más da si ya me había encontrado teniendo sexo que le podría ocultar, además yo deseaba tener esa verga en mi culo, aquella verga erecta pidiendo batalla la misma que me dio la vida, me acerqué a mi padre temeroso y le empecé a agarrar la verga despacio, mi papa empezó a gemir y acariciar mis nalgas e introducirme su dedo.

German. pero si este culito aun esta dilatado, ya preparado a darle paso a mi verga ¿quieres que tu papi te haga el amor, quieres darle la bienvenida, dándole tu culito a papi? – Eduardo está bastante caliente y su culito aun dilatado, y yo mucho más caliente, pues desde que Ángel me conto cuando penetro a mi hijo, yo lo empecé a desear y no pensaba perder más tiempo con ese ano que estaba preparado para mi verga.

Eduardo. sí papa lo deseo, quiero ser un hijo obediente y complacerte en tu primer día de libertad. – no podía negar lo que sentía y mucho menos lo que deseaba.

German. solo una cosa cuando estemos teniendo sexo, no quiero que me digas papa, me dirás German ¿de acuerdo?

Eduardo. entendido German, - quería disfrutar de mi padre así que no me importaba lo demás.

German. así me gusta un hijo que aparte de ser obediente, es listo y complaciente, quiero que te sientes en mi verga y tu seas quien se la valla metiendo, quiero que te mates solito, que tu solo te claves mi verga en tu culito.

Eduardo. me monte sobre el abdomen de mi padre de caballito una pierna en un lado y la otra al otro lado, me levante un poco, mi padre subió sus manos y las coloco detrás de su cabeza dejándome a mí solo hacer el trabajo, su verga estaba llena de líquido preseminal viscoso, me eche un poco de saliva en mi culo y apunte su verga en mi ano, fui bajando despacio, me la estaba metiendo poco a poco, me sentía tan feliz una sensación Maravillosa el sentir como me entraba cada cm.

Cerré mis ojos y fui despacio disfrutando de ese sentir como me ensartaba esa enorme verga en mi culo, hasta que quede por completo sentado en la pelvis de German, subí mis manos a mi cabeza y empecé a moverme lentamente, quería sentir cada vez que entraba y salía de mi la verga de German, me movía lentamente y gemía como zorra haayyy hayyy haaaa ummmm haash haaaa haayy ummm o si o ooooo ummm, más que gemidos parecían chillidos de placer, mientras cabalgaba la verga de German, me agache pegando mi frente a la de German.

German. Eduardo se movía lento y me hacía morderme los labios para reprimir mis gemidos, Eduardo lloriqueaba de placer con sus ojos cerrados y acariciaba su cabeza con mucha ansiedad y deseo, lo vea morderse los labios, cuando Eduardo pegó su frente a la mía empecé a besarle y sin dejar de mover mi cadera lentamente arriba y abajo, los gemidos de Eduardo eran más marcados, yo también empecé a gemir despacio y a resoplar, rodee el cuello de Eduardo y sin dejar de besarlo su boca, cuello y orejas. fui acelerando las envestidas Eduardo no paraba de gemir y retorcerse lleno de placer.

Eduardo. el comportamiento de mi padre me tenía muy sorprendido, pero más que nada excitado me tenía pegado a su cara con sus manos sobre mi cuello y no paraba de penetrarme y decirme; que culito tan caliente, que bien te comes la verga, me encanta tu culito apretado. Sin detenerse me seguía penetrando, bombeándome mi culo, luego paro de bombearme y me pidió que yo continuara así que lo hice durante un rato sacándome y metiéndome de nuevo esa verga larga y morena, duramos más de 45 minutos, el no dejaba de follarme en ocasiones despacio luego más rápido, también yo me movía, pero mi culo lo sentía ya muy irritado, me puso a cuatro patas, pero yo ya estaba muy irritado le pedí que terminara.

Eduardo. vamos German que me estas dejando el culo todo rosado ya dame tu leche, que la necesito. – aun que quería continuar por el placer que me daba mi papa, pero mi culo estaba muy irritado tanto por benjamín y más que nada por German.

German. solo te la daré si sabes cómo pedírmela, se amable y respetuoso no te olvides con quien hablas. – ya tenía un buen rato dándole verga a mi hijo por el culo así que ya me pedía la lechita.

Eduardo. German por favor dame tu leche, que ya la necesito dentro de mí. – mi padre se detuvo metiendo su verga hasta el fondo de mi culo, pegando sus huevos a los míos.

German. tome a Eduardo de las caderas y acelere mi ritmo de meter y saca, de repente paraba un poco y escupía en mi verga para lubricar, Eduardo lloriqueaba y gemía de placer cada vez con más fuerza, me suplicaba que terminara y le diera mi leche, así que me concentre y me deje llevar por ese culito apretado que me llenaba de placer.

Eduardo. mi padre comenzó a taladrarme cada vez más fuerte y aun que el placer era enorme ya no aguantaba más me retorcía de placer, pero también de dolor supliqué a German que ya terminara cuando empecé a sentir sus envestidas más fuertes y salvajes después un momento de su salvajismo gemía y se aceleraba más y su pene lo sentía que se hinchaba en mi interior.

German. ajjj aajjj ufff que culo tienes o que rico me voy a venir nene, te voy a llenar el culito de leche, ahí te va papa prepárate para recibir tu lechita.

Eduardo. sí German dame tu lechita ya la quiero.

German. ahí va ummm oooo que ri co hooo ummmm siiiii hoooooo ahhhhh ahhhhha ahhhha siii ahhhhh ahhhh…….

Eduardo después de varios gemidos y fuertes envestidas German termino llenándome el culo de leche, cuando estuvo satisfecho sin sacarme la verga de mi culo me empezó a masturbarme y yo jadeando y loco de deseo termine rociando leche por todos lados. German me paso su ropa interior para que limpiara mi desastre y Después de haber limpiado nos fuimos a dormir, por primera vez en tanto tiempo dormiría a lado de mi padre, me acorruque a su lado el me abrazo me beso la boca y quedamos dormidos abrazados mientras me decía; ya está mi niño bueno ya se tomó su lechita ahora a dormir, nos quedamos dormidos quede satisfecho y feliz esa noche.

German. vamos Eduardo tenemos que levantarnos para iniciar nuestro día, vamos a desayunar y te vayas a clases venga ya levántate. - Después de una excelente noche con mi hijo, sentí que mi regreso valió la pena al final en aquel maldito y desgraciado lugar, la primera noche fue maravillosa.

Eduardo. ya voy papa, gracias por tus atenciones. – me sentía confundido por lo que había pasado en la noche no me sentía bien, no sabias si solo fue un sueño o fue real ya que mi papa no daba señales de haber pasado algo.

German. no agradezcas es mi deber como padre, además tengo que recuperar el tiempo perdido, diez años para recuperar. - Mi hijo me observaba incrédulo dudando de lo que veía o de lo que había pasado en la noche.

Eduardo. papa me gustaría hablar contigo pues he pens…… - antes que terminara la frase mi papa me interrumpió.

German. ya es tarde hijo no quiero que lleguemos tarde, tu al colegio y yo a buscar un trabajo, hablamos más tarde, que hay pájaros en el alambre. – mi madre estaba escuchando lo que mi hijo me decía escondida en el marco de una puerta.