Examen de Lenguaje

El Examen de Lenguaje

La semana pasada terminamos de dar los exámenes de medio semestre, esta bien en todo, excepto en lenguaje que me por poco saco nota a la menos, no le soporto a la profesora y el sentimiento creo que es mutuo, tenía que buscar a un mediador para que me tomen otro examen así por lo menos intentar aprobar. Solo un nombre vino a la mente: DIANA. Ella estaba dispuesta a ayudarme pero por un pequeño precio, que gustosamente lo pago y si quiere hasta con interés.

Al día siguiente me prepare para pedir el favor, me vestí con un terno negro, muy elegante, parecía que me iba a una boda, era el bicho raro caminando entre los demás, pero se que a ella le excita mucho los hombres elegantes. Entre a la oficina, todo muy cortés le salude y le invite a un café en una cafetería cercana. Con una tasa de café en la mesa y después de haber charlado por unos minutos pedí que me ayudara.

-Claro que te ayudo estas con matricula condicionada y no puedes descuidarte

-Gracias, crees que acepte. Sabes entre los dos hemos tenido varios roces

-Descuida, es muy amiga mía y si te esfuerzas ella te recompensará

En el camino de regreso ella me dijo lo bien que me queda ese terno y lo rico que huelo. También me dijo que me estaba descuidando de mi "matricula condicionada" y que debía ganarme el pequeño favor que me estaba haciendo. Susurro en mi oído

-Hoy te vestiste así solo para seducirme, ven mi oficina en el almuerzo que necesito una inspiración para saber que decir.

Yo solo respondí con un pequeño beso en la boca. No podíamos darnos el lujo de que algún conocido de la universidad nos vea.

Espere ansioso el medio día, ella es volcán ardiente y uno nunca sabe a que atenerse, un momento esta calmada y es muy sumisa, y en un instante puede convertirse en la más salvaje zorra deseosa de sexo. Si el sexo no fuera tan bueno creo que me casaría con ella.

Entré a mis clases, pero solo mi cuerpo estaba sentado en esa aula, mi mente solo imaginaba que iba a tener comer hoy, será acaso un par de tetas enormes tan suaves como algodón de azúcar y con dos grandes pezones que son el delirio de todo hombre, una deliciosa vagina con unos labios rosaditos y acompañados de un clítoris pequeñito y bañados en sus inconfundibles jugos, tienen un aroma que me vuelve loco; o talvez comería un sabroso culito con un toque de ano virgen. Estoy con una erección de los mil demonios solo repensar en ella.

En medio de todas las fantasías el profe de mate me pregunta la respuesta del problema y yo solo logre balbucear algo parecido a palabras, el muy desgraciado me hizo pasar vergüenza

-Bien es la mejor respuesta que me han dado en años, felicitaciones señor sin duda va a ser el mejor ingeniebrio de la taberna algún día. ¡Ponga atención!

Aunque aquel suceso me bajo de mi nube, no me costo mucho trabajo subirme a una nueva. Dónde lo haremos hoy en el escritorio, sobre el sofá, o nos daremos una escapada a un hotel. Como lo haremos, ella sobre mi en una silla, la clásica del misionero en una cama, o parados en alguna oficina vacía, las posibilidades son infinitas, con ella lo único seguro es que va a ser mejor que la ves anterior.

Seguí con mis fantasías hasta que terminó la clase. Vi el reloj y faltaba una hora y media más para el almuerzo y tenia por delante otra clase tediosa. Después del receso entre al salón de clase y me senté dispuesto a poner atención. A los 10 minutos estaba divagando otra vez. Se me hacia agua la boca solo pensar en que hoy seria el día en que desvirgaría aquel culito virgen que me tiene caliente desde el día en que lo vi.

Como empezaría, talvez con un beso negro, recorriendo todo el camino hasta su vagina con mi lengua y de regreso. Le metería un dedito, luego dos para continuar con tres, entre gemidos de placer y dolor. Le pondría mi pene en su ano y empujaría despacio, dejándola que se acostumbre para luego continuar con el mete saca.

Podría ser un maldito y comenzar haciendo en la de perrito y cuando este tan excitada le sacaría de la vagina y se la metiera de golpe por atrás, causándole gran dolor. De cualquier modo, mi promesa de año nuevo es estrenar el único agujero virgen que le queda.

Finalmente se acabo la clase y yo salí como alma que lleva el diablo, llegue algo agitado a la oficina, para mi sorpresa estaba cerrada y una compañera de Diana me dijo que la espere, había salido y regresaría en un cuarto de hora. Ya había resistido varias horas, un poco mas no me haría daño. Muy natural conversamos con la otra secretaria y me aseguro que Diana conseguiría ayudarme.

Regreso Diana y le dijo a su amiga que puede irse tranquila a almorzar que ella había comido algo y no tenia hambre. Finalmente nos dejo solos, cerro la puerta y me abalance sobre ella, le di un beso y trate de meterle la lengua, a lo que contesto con una bofetada y dijo

-Que se ha creído, solo por el hecho de tomar un café y pedirme un favor no tiene derecho a estar propasándose.

-Que te pasa, no era eso para lo que me citaste.

-No. Ya hable con tu profesora, dijo que tienes otra oportunidad, pero en el siguiente periodo tienes que compensar la ayuda que te esta dando.

-Gracias, me has salvado la vida, no se como puedo pagarte.

Se acerco me dio un beso muy apasionado y me recordó que ella estaba caliente. Muchas veces me confunde, dice que no quiere nada y un segundo después me besa, no se que esperar de ella. Continúo diciéndome

-Muy bien, yo te hice un favor y ahora tu me debes uno y me lo voy a cobrar aquí mismo. Tienes una hora.

Solo moví mi cabeza con un gesto de aprobación.

-Me pica mucho todo mi cuerpo, quiero que lo calmes con tus besos.

Tomo mi corbata y yo su cintura, nos fundimos en un apasionado beso, acariciaba ese culito, lo apretaba y se pegaba a mí, sentía sus tetas en mi pecho, sus pezones tan duros como rocas se clavaban en mi cuerpo como dos dagas envenenadas, cuyo veneno me hacia sucumbir ante los deseos de esa diosa de piel canela.

Recorrí su cuello con mis besos, le mordía el lóbulo de la oreja y le decía palabras cariñosas, ella respondía solo con gemidos

-Eres hermosa, te deseo

-mmm… mmmmmm

-Necesito de tus caricias, excita tener a la mujer perfecta solo para mí

-ahh… aaahhhh

Ella estaba fuera de si, por primera vez tenia el control total. Seguí recorriendo su cuerpo, zafé los botones de su blusa, esta cayo al suelo y me encontré con sus dos tetas desnudas, con los pezones parados, porque recibir el veneno en mi pecho si puedo tomarlo con mi boca. Posé mis labios sobre sus montes y los besé los chupe, los recorrí por todo el contorno

-Sigue aaaa…sí, me encanta no pares

Sentía sus uñas en mi espalda, baje mas y mas, solté su falda liberando su aroma a mujer, un olor a hembra en celo que pide ser montada. Aquel olor que casi me produce un orgasmo. Llevaba un lindo panti rosa, estaba muy mojada, podía sentirlo al poner mi mano en su intimidad, la despoje de su prenda y mi lengua se perdió en su cueva de placer.

• MMMMMMMM……………… continuuuuuuu…aaaa…… me coooo……rrooooo…… AAAAAAHHHHHHH

Exploto en un orgasmo tremendo, cayo al suelo temblando con los ojos cerrados, debió haber estado al limite, y ahora es mi turno. Me quité la ropa lo mas pronto que pude y me acerque a ella, no se había recuperado todavía, me acosté a su lado y le abracé.

-Hoy me vas a dar tu ano virgen y no hay peros

-Si mi macho, tu putita te da su culo para que lo partas

Hice que se ponga de lado, y se lo metí por la vagina, estaba toda húmeda y caliente, que rica que estaba, se lo metía y sacaba como poseído, ella solo gemía y se dejaba hacer.

-mmm… mmm… sssiii… sssiii… metela masss

Era extraño las otras veces era un concurso de quien manda a quien. Cambiamos de posición ella estaba encima de mi continuamos haciéndolo, tener el mando me excitaba por fin era el jefe supremo. Mientras e cabalgaba empecé a jugar con su culo, le metí un dedo y seguía el ritmo d la penetración.

-Me duele un poco, seguro de que me va a gustar

No le conteste nada, solo le metí otro dedo mas. Ella hizo un gesto de dolor pero se acostumbro rápidamente.

-Con cuidado que soy delicada, es la primera vez y quiero recordar como algo dulce, no como una violación.

Le metí otro dedo más, ya eran tres a ella no le pareció molesto mi otro dedo, al contrario me devolvió una sonrisa. Yo estaba acercándome al orgasmo, pero mi semen estaba reservado para su virginal ano. Cambiamos de posición, le puse en cuatro y seguí dándole por la vagina, le cogía esas tetas mientras escuchaba como llegaba a otro orgasmo.

-Cabrónnnnnn………… eres el mejor aaaahhhhh………… mi machooooo

Termino en otro orgasmo más, la mantuve en esa posición, mientras ella seguía experimentando tal placer, se lo metí de golpe por el culo

-Hijo de puta así no se juega, sacado que me duele

-Mi zorrita así es más rico solo siente como se desliza

-Rico para ti maldito, me cortaste un orgasmo

-Ahora vas a tener uno diez veces mayor

Bombeaba sin piedad, ella seguía maldiciendo, pero su cara me decía que lo disfrutaba como hembra en celo. En un momento solo se escuchaba gemidos de placer.

-Te voy a llenar todo de semen, he querido hacerlo desde que te vi en las inscripciones.

-Que esperas termina de estrenar mi culito, que ya no es virgen

En un largo y lento orgasmo le llene el culito de mi leche, a lo que ella respondió con un orgasmo mucho más fuerte que el que le corte.

-Mmmmmm……en…ti…ro…sooooo…… so…lo… fue… nueveeee…… veces maaaaaahhhhhs

Cayo rendida al piso, esa sesión de sexo la dejó agotada.

-Límpiame que ya mismo es hora

-Claro ama le voy a limpiar

Le chupe el ano hasta no dejar ni una sola gota de semen, luego se lo di en la boca para que se lo trague. Me vestí y le ayude a que se vista. Nos besamos y abrasamos, para finalizar.

-Te gusto tu primera vez

-Me encantó, y quiero que regreses en la noche, tu deuda no esta saldada, me debes mucho y me vas a pagar en "leche"