EVENTOS INESPERADOS 14 voy cap
Una propuesta por parte de mi padre me sorprende y me hace feliz al saber que papá está dispuesto a compartir nuestro amor, Aldo desea el amor de Óscar y esta dispuesto a todo por tener su amor.
EVENTOS INESPERADOS 14
La propuesta
Oscar. solo mis Dos hermanos sabían de la relación que hay entre papá y yo, papá les pidió a mis hermanos mantenerlo en secreto por el momento, aunque papá y yo vivíamos como una pareja que día con día nuestro amor se incrementa, papá y yo nos complementábamos, estábamos en casa descansando papá y yo en el sofá como cada tarde después de comida, cuando sonó el timbre de la puerta, papa se para y fue a abrir la puerta, yo me quede acostado en el sofá por suerte ese día estábamos vestidos con playera y short.
Rogelio. Aldo pasa ¿Cómo estas a que debemos el honor de tu visita?
Aldo. Gracias, tío me gustaría hablar con Oscar y quiero que estes también tu, para que me escuches, ¿espero no interrumpir y si es que Oscar está aquí?
Rogelio. Claro que, si adelante Oscar está en la sala, vamos toma asiento.
Aldo. ¿Hola Oscar como estas? ¿Podemos hablar?
Oscar. hola, Aldo todo bien, si claro que podemos.
Rogelio. Bueno yo los dejo para que hablen a solas.
Aldo. No, tío espera quiero que también tu estes aquí, no quiero que mi visita se preste a malas intenciones, quiero que estes tu aquí con nosotros, sé que Oscar esta con alguien y no quiero que su pareja se tome a mal mi visita, me gustaría que te quedes aquí por favor.
Rogelio. Está bien Aldo me quedare con ustedes. – Aldo no sabe que la pareja de Oscar soy yo y no sé si eso sea bueno o malo.
Aldo. Verán, ¿si recuerdas el día que te pedí que fuéramos a con el tío Vicente Oscar?
Oscar. sí lo recuerdo, ¿Qué paso con eso?
Aldo. Ese día yo quería hablar de lo que me estaba pasando y solo podía confiar en tío Vicente y en ti, pero tu malinterpretaste mis intenciones y hasta te viste medio molesto, me sentí muy mal y me fui a ver a tío Vicente, pero en lugar de contarle lo que estaba pasándome le platique de lo triste que estaba, le confese mi amor por ti Oscar y al ver cómo me viste ese día se me partió el corazón me sentí muy mal, derrotado, mi esposa y yo como sabes estamos pasando por un mal momento y hace días decidimos que sería mejor dejarnos, nos estamos haciendo mucho daño y será mejor dejar las cosas así antes de hacerle daño a nuestros hijos.
Rogelio. Disculpa que te interrumpa Aldo, pero no tienes que apostar todo por nada, tú has perdido a tu familia por algo que no es seguro, eso te puede llevar a una mal decisión ya que has dejado a tus hijos, espero que yo este equivocado y mal interprete lo que has dicho.
Aldo. No tío yo no he venido a pedirle a Oscar que deje todo por mí, ni me he separado para convencer a Oscar, una manzana podrida pudre a las demás y las primeras en podrirse a nuestro alrededor son mis hijos, solo quiero decirle a Oscar que lo amo y quiero que tu seas testigo de lo que digo aquí para que no se preste a malentendidos, Oscar te AMO, es lo que quería decirte.
Rogelio. Disculpa que te pregunte esto, pero creo que es necesario que te pregunte ¿que estás dispuesto a hacer por Oscar? – mi pregunta va por otro rumbo depende de la respuesta será más adelante que hablemos Oscar y yo usare lo que responda Aldo.
Aldo. A todo, estoy dispuesto a lo que me pida, a mendigar su amor, que me trate como perro, pero siempre y cuando este a su lado.
Rogelio. No tienes que hacer tanto como humillarte, dejemos que Oscar diga que es lo que piensa y desea hacer ya que es el único que puede decidir qué hacer.
Oscar. ha no sé qué responder estoy confundido y tengo miedo a responder algo que no esté bien, o no sea lo que realmente quiero decir, por favor dame tiempo de pensar y digerir lo que he escuchado, estoy de acuerdo con papá nadie tiene que humillarse, dame tiempo de hablarlo con mi pareja y conmigo mismo. – Aldo se despidió de papá y de mi esa noche nos fuimos a dormir, pero papá como siempre se quedó callado esperando a que estuviera listo para hablarlo, al día siguiente por la tarde cuando ya estábamos más tranquilos papá y yo lo hablamos.
Rogelio. En qué piensas hoy estas muy callado, hasta me está preocupando tu silencio. – le di un beso a mi hijo que estaba recostado en mis piernas.
Oscar. no he dejado de pensar en Aldo, no sé qué pensar, si pusiera en una balanza a ti y Aldo la balanza se inclinaría a tu favor, pues siempre has estado a mi lado me has tratado bien y te amo mucho, pero por otro lado también amo a Aldo y eso lo sabes, siento lastima por Aldo, pero no puedo hacer nada por él, que me aconsejas, como le puedo decir para que sea menos doloroso decirle que si lo amo, pero no podemos tener nada.
Rogelio. Si lo amas no tendrías por qué decirle que no, podrías decirle que sí.
Oscar. no pienso alejarme de ti o dejarte, te amo y no soportaría dejarte, así que si pensabas decir que me dejarías que fuera a hacer mi vida al lado de Aldo olvídalo yo me quedo a tu lado.
Rogelio. Si Aldo te ama tanto como yo te amo, no se va a rendir, ya que yo no me rendiría ni pienso dejarte nunca mientras nos amemos, pero si Aldo está dispuesto a hacer todo, entonces aceptara que en lugar de ser pareja seamos un trio y estará dispuesto a compartirte con alguien más, así como yo lo estoy, así que de mi parte ese es mi consejo.
Oscar. esa tarde noche papá y yo hablamos de los detalles con la relación, papá estaba dispuesto a compartir una vida con dos hombres, estaba dispuesto a verme feliz, pues aunque lo soy él quería que estuviera contento, me decía que si yo soy feliz él lo será, papa fue claro al decirme que está dispuesto a invitar a Aldo a ser parte de nuestras vidas, al día siguiente le llame a Aldo y le dije que el día que pudiera viniera a vernos, pero que estuviera preparado a lo peor, pues ya que lo que queríamos es platicar con él, Aldo acepto venir a vernos ese mismo día y vendría por la tarde, lo cite a las 5 de la tarde pues queríamos estar papá y yo cuando el llegara, ya faltando 10 para las 5 de la tarde Aldo estaba tocando a la puerta, le abrí y lo invite a pasar, entro y fue a sentarse a la sala solo estábamos él y yo, me pregunto por mi pareja pero le dije; no tarda en llegar., obviamente Aldo no sabía que papá es mi pareja, estaba ahí en casa esperando a que habláramos Aldo y yo.
Oscar. en lo que llega mi pareja quiero preguntarte algunas cosas que siempre he tenido duda, esto no tiene nada que ver con la decisión que hemos tomado, ya que la decisión que hemos tomado dependerá mucho de lo que tu decidas, ¿es posible que una persona que ha sido siempre pasivo de repente se vuelva activo? – yo sabía que Aldo no es 100% pasivo pues me lo ha demostrado varias veces al estar conmigo.
Aldo. No se la respuesta a tu pregunta, pero lo que sí sé, es a donde va tu pregunta y antes de que la hagas te responderé, mi primer experiencia sexual fue algo nuevo, yo sabía que me gustaban los hombres pero no tenía experiencia en ello así que cuando decidí experimentar me encontré con la oportunidad y lo que quería era probar, sin importar que fuera, mi primera vez fue con chupón y debo aclarar que todo estuvo bien, pero en el segundo encuentro algo cambio, pues cuando Chupón me lo metía se le aguadaba su erección, se bajaba, entonces yo empecé a analizar eso en él, en la tercera vez fue un poco más lejos, cuando se la estaba mamando le acaricie el culo y le empecé a meter el dedo, Chupón se dejó llevar por mis dedos y le gustaba lo que estaba haciendo.
Así que cuando estuvimos listos para penetrar, le di la vuelta y lo acomode le apunte mi verga en su culo y se la metí y a partir de esa ves chupón solo quería que se la metiera y eso me gustaba más, que me la metieran, en cuanto a tío Vicente los pocos encuentros con el siempre fueron como pasivo, pero me gustaba que me comparara contigo, pues me imaginaba siendo yo el que te penetraba, pero por orgullo fingía que me molestaba ser comparado contigo.
Oscar. que paso la noche que los encontré teniendo sexo a los tres, tu, checo y chupón, los dos te estaban metiendo la verga a la vez, solo es curiosidad siempre me quedé con eso ya que chupón le pidió a checo que te la metiera, a la misma vez.
Aldo, jejeje no pudimos, tratamos pero estaba muy cerrado y nervioso y agradecí que llegaras, Chupón cuando esta col alguien más se comporta como si el fuera el activo pero con el tiempo logre dominarlo, tanto que en una ocasión charro logro meterle la verga delante de mí y yo le ordenaba a Chupón para que hiciera lo que yo le pidiera, pero eso fueron otros tiempos, puedo contarte de otras cosas pero lo que te puedo decir es que chupón desde hace tiempo me cambio por mi hermano checo, checo es quien le rellena el culo a chupón, como charro a tío Ricardo.
Oscar. Aldo, si yo te dijera que te seguiré que quiero estar a tu lado, ¿qué pasaría nos iríamos a vivir al pueblo, a la ciudad o aquí en el rancho?
Aldo. En el pueblo nunca, en la ciudad o aquí en el rancho tu decidirías donde si fuera aquí construiríamos una casita para nosotros dos, eres mi príncipe y cumpliría lo que me pidas estoy dispuesto a todo por ti.
Oscar. prefiero quedarme aquí, de verdad estas dispuesto a todo lo que te pida o te ¡PROPONGA ¡
-Aldo. Si a todo lo que me pidas, e incluso a que me trates como perro y solo me des las sobras, pide lo que quieras y te lo daré.
Oscar. ¿estarías dispuesto a compartirme con alguien más? ¿Te gustaría que vivierais los tres como un trio tú, mi pareja y yo?
Aldo. Te amo y estoy dispuesto a todo, si tu pareja también está de acuerdo., Se lo plantemos ahora que venga y si el está dispuesto, porque yo si lo estoy con tal de amarte.
Oscar. no te preocupes él está aquí y también está de acuerdo con que seamos un trio, pero él quiere poner algunas reglas, espero que no te incomode lo de las reglas.
Aldo. claro que no me incomoda para nada, donde está el quien es?
Rogelio. Aquí estoy Aldo, soy la pareja de Oscar y la primera regla, nadie será tratado de forma humillante, sin insultos, comparaciones, no forzará a nadie, etc. También amo a Oscar y por eso quiero que seamos felices los tres. Oscar estaba con una cara de asombro que no podía con ella.
Aldo. Pero tío tu y Oscar, esto es sorprendente y muy bueno si están de acuerdo con que seamos un trio, obviamente yo lo estoy, pero la pregunta es, ¿puedo venirme a vivir aquí y cuando me puedo venir?
Rogelio. El día que gustes te puedes venir a vivir aquí, eso responde tu pregunta ahora los dejo que hablen de otras cosas y conforme pasen los días iremos poniendo las reglas, otra regla al salir de esta casa solo somos padre e hijo, tío y sobrino y un par de primos, iré con Rene y sería bueno que le contaras a tu padre de esto, por cierto, Oscar también te ama a ti.
-Aldo. Gracias, tío, pero papá ya sabe que estoy enamorado de Oscar.
Oscar. cuando papá salió de la casa nos quedamos viendo a la puerta luego nos volteemos a ver Aldo y yo, Aldo se acercó a mí me acerco a su cuerpo coloco su mano en mi nuca y nos empezamos a besar apasionadamente y con mucho cariño, Aldo beso mi cuello y mientras lo hacía, él fue desabotonando mi camisa, lo hacía con suavidad y destreza, me volvió a besar con esos carnosos labios, hermosos y suaves, mientras quitaba mi camisa hasta dejarla caer al piso, mientras Aldo se ocupaba de besar mis labios y cuello deslice mis manos por su pecho e hice lo mismo que el fui desabotonando su camisa hasta dejarla caer al piso, ahí estaba una vez más frente a mi ese cuerpo hermoso y sexi con vellos recortados que tanto me atraían, verlo así con sus bellos recortados en todo su pecho y abdomen suabes.
Con mis manos recorría su pecho y abdomen queriéndome gravar ese cuerpo y lo recorrí con suavemente con ambas manos, sus bellos sintiendo entre mis dedos las fibras de sus cuerpo y sus bellos como se deslizaban entre ellos, como cuando tocas una tela suave que puedes sentir la textura de esta como se desliza entre tus manos, Aldo acaricio mi cara con sus dos manos y me dio un tierno beso me vio a los ojos y su sonrisa hermosa, me derretían al verlo ahí con su hermoso torso desnudo, me besaba y bajo sus manos para desabotonar mi pantalón y bajar el zíper, mientras bajaba mi pantalón sus manos suabes acariciaron mis piernas con delicadeza y despacio fue bajando mi pantalón hasta que lo quito por completo.
Me dio la vuelta y beso mis nalgas que aún tenía puesto mi bóxer, las acaricio con ternura y detenidamente, luego subió por mi espalda dando besos suabes y tiernos hasta que estuvo de pie, me dio la vuelta para besarme una vez más, yo hice lo mismo quite su pantalón y lo deslice por esas piernas velludas, suabes, fuertes y torneadas hasta que le quite por completo el pantalón, solo se quedó con su bóxer de licra ajustado a su cuerpo, un bóxer azul apretado que se le marcaba su miembro, dejando ver su hermoso cuerpo, acaricie cada parte de su cuerpo pase mi lengua por el contorno de su verga, subí lento dando besos por todo su cuerpo, bese su abdomen y pecho, antes de llegar a la altura de su cara, Aldo me acaricio mi cara y la llevo hasta la suya me volvió a besar, luego me dio la vuelta pego su cuerpo al mío, su pelvis a mi trasero su pecho a mi espalda y sus labios a mi cuello, con una de sus manos acariciaba mi pierna y nalga con la otra mis pechos.
Aldo. Pegado a la espalda de Oscar lo lleve a su habitación sin dejar de besar su cuello y orejas y con mi pecho pegado a su espalda, llegando a su habitación baje por su espalda besando cada parte de esta hasta llegar a sus hermosas nalgas, quite su ropa interior lo incline sobre su cama y me arrodille atrás de él quedando mi cara a la altura de su hermosas nalgas redondas y duritas, la separe con ambas manos y luego pase mi lengua por su culito riquísimo, una y otra vez haciendo que Oscar se estremeciera en cada lengüetazo que le daba, después le chupe su año por un rato dándole placer a ese culito y dilatándolo poco a poco, mi verga estaba que reventaba bajo mi ropa interior pero estaba dedicado a darle placer a Oscar para que el disfrutara de esa comida de culo que le estaba dando, después se lo empecé a besar, mordiditas y meterle mi lengua su culo estaba preparado para ser penetrado, Luego le pedí que se sentara al borde de la cama y me pare frente a él.
Oscar. ahí estaba Aldo frente a mí me tomo de la cara y me dio un tierno beso me tocaba a mi devolverle el favor y darle una mamada de verga como él me había mamado el culo, recorrí con mi boca el contorno de su verga por encima de su ropa interior, despacio bajé su ropa interior, y ahí estaba frente a mí su verga de 18 cm, su hermoso torso con bello recortado y ese par de pechos firmes, tome su verga con mi mano la aprete un poco luego bese tiernamente su glande, acaricie sus testículos, después comencé a lamer su glande poco a poco suabe, pasaba mi lengua por su glande, alrededor de este, después lo metía a mi boca lo chupaba y volvía a lamerlo con suavidad, en cada mamada que le daba, metía un poco más su verga a mi boca hasta que después de varias mamadas por fin lograba meterme toda su verga a la boca, la sacaba y de nuevo la llevaba hasta lo más profundo de mi garganta.
Mientras con una de mis manos acariciaba sus testículos con la otra me sostenía de su cadera, mi boca devoraba su verga la chupaba con energía mamándole cada centímetro dejándola impregnada de mis babas, mi boca era auto follaba por esa hermosa verga que entraba y salía con suavidad de mi boca, mis labios alrededor de su verga la presionaban para hacerlo sentir placer Aldo gemía y se estremecía en cada mamada que le daba me sujetaba de la cabeza y acariciaba mi cara, me acariciaba y levantaba mi rostro para ver como su verga era devorada por mi boca, después de varia mamada viéndole a los ojos a Aldo me tomo de mis manos y me paro frente a él, me beso tiernamente y me recostó sobre la cama boca arriba.
Aldo. Ahí lo tenía boca arriba sobre la cama me agache a mamarle el culito una vez más para dejárselo listo, pase mi lengua lento mientras con mis manos serraba ese hermoso par de nalgas, lamí varias veces antes de empezar a mamarle su culito rosado, mientras le chupaba su culito mis ojos buscaban la mirada de Oscar que se retorcía al sentir como mi lengua empezó a penetrar su rosado culito, después de un rato de estárcelo mamando estaba listo para recibir mi verga, acomode sus pies apoyados en mi pecho y apunte mi verga en su culito dilatado y lleno de saliva, presione suavemente y mi verga se fue abriendo camino al interior de Oscar.
Veía el rostro de Oscar su cara de placer al sentir como mi verga iba entrando despacio se deslizaba suavemente a su interior, sus gemidos de placer fueron alimentando mi propio placer y al sentir la presión de su culito alrededor de mi verga, los gemidos que ambos dábamos resonaban en la habitación al compás de nuestros movimientos, cuando al fin logre meterle toda mi verga me incline y le di un beso largo que deje que su recto se acostumbrara a mi verga, poco a poco me empecé a mover lento suave en círculos, luego saque un poco y se la volvía a meter, así la saque un poco más y se la volvía a meter, hasta que casi se la sacaba por completo y se la metía de nuevo, me gustaba ver como Oscar serraba sus ojos y apretaba sus labios dejando escapar unos leves; umm… umm… sus gemidos son como música para mis oídos, poco a poco comencé a darle un poco más de velocidad entrando y saliendo de su culo, conforme aceleraba mis movimientos nuestros gemidos también fueron aumentando así como el calor de nuestros cuerpos.
El sudor de mi frente y de mi pecho goteaban sobre el cuerpo de Oscar este esparcía mi sudor por todo su pecho y se movía clavándose mi verga aún más en cada envestida que daba, de repente se abraso a mi pegando nuestros pechos sudados y me besaba las orejas y cuello, con cada beso en el cuello y oreja, me prendía más y yo no paraba de meterle la verga en cada envestida gemíamos y gemíamos cada vez más fuerte, después de un rato cambiamos, él se puso en cuatro patas y l e clave mi verga, Oscar se empezó a mover de una forma fenomenal clavándose mi verga una y otra y otra vez en su culo, me tenía prendidísimo así que le pedí que se montara sobre mí, me acomode boca arriba y me empezó a cabalgar, lo hacía de una manera estupenda yo no dejaba de acariciar su pecho mientras este se clavaba mi verga.
Al estar en esa posición Oscar me estaba haciendo que se acercara el momento de terminar, así que le pedí que se colocara boca arriba y le coloque una almohada bajo su cadera le metí la verga una vez más, pero esta vez de frente le comía la boca a besos intensos apangando nuestros gemidos, mi respiración se empezó a acelerar le pregunte donde quería que me viniera el me pidió que lo hiciera en su boca, después de un de estarlo envistiendo le saque la verga me quite el condón y empecé a masturbarme en su boca, el me la mamo y me vine dentro de su boca, luego me agache y se la empecé a mamar, en pocos segundo Oscar término dentro de mi boca nos besamos apasionadamente después de haber terminado quedamos abrasados en la cama de Oscar, después de un buen rato escuchamos que había regresado el tío Rogelio, nos vestimos solo con nuestra ropa interior nos limpiamos bien antes de ir a la sala donde estaba tío Rogelio y ya en la sala nos terminamos de vestir, el tío nos veía con una sonrisa que nunca le había visto esta era cálida y tierna, nos sentamos un rato los tres hablando de como seria la relación y terminamos por quedar en algunos acuerdos y al terminar la noche me despedí de Oscar dándole un beso en la boca y al tío solo le dije adiós, pero este me detuvo.
- Rogelio. Si te despides de uno con beso te tendrás que despedir de los dos iguales, así que ven acá. – jale de la mano a Aldo y le di un abrazo después un pequeño beso en su mejilla, que él me respondió algo rojo de vergüenza pues no estaba acostumbrado a que lo tratara así.
Rogelio. Nos fuimos a dormir a mi habitación pero en ese mismo momento me di cuenta que la cama en la que dormíamos Oscar y yo sería muy pequeña para que durmamos los tres cuando se mude a vivir Aldo a la casa, así que al día siguiente me fui a comprar una nueva cama enorme donde fácil cabríamos tres personas, por la tarde llego Aldo con todas sus pertenencia y nos pusimos a ayudarlo a bajar todo e instalarse, en la casa a partir de ese día viviríamos los tres en nuestro nuevo hogar y la nueva familia, además estrenaríamos los tres la nueva cama con una noche de pación y amor, pues por primera vez haríamos el amor los tres.