Evangelion Código XXX (11)

Hikari al fin encuentra el momento y el valor para confesarle sus sentimientos a Touji. Asuka descubrirá más de Rei cuando tiene que ir a su casa y Shinji sufrirá una nueva cena cocinada por Misato.


Evangelion Código XXX

Autora: Laura_Asuka

Capítulo 11: Cuestión de Sentimientos

Contenido:

Asuka X Rei

Hikari X Touji

Shinji X Misato



Notas de la Autora: Hikari al fin encuentra el momento y el valor para confesarle sus sentimientos a Touji. Asuka descubrirá más de Rei cuando tiene que ir a su casa y Shinji sufrirá una nueva cena cocinada por Misato.

Para que os hagais una idea del formato de la historia cada vez que veais el nombre de un lugar entre asteriscos (***) significa el inicio de una nueva escena y el lugar donde se desarrolla. El fic está en su mayor parte narrado así que no hay problema, pero cuando veais texto en cursiva con un guión (-) delante significa que es diálogo o pensamiento de algún personaje, creo que explico bien cuando alguien habla o piensa así que no creo que haya problemas para entenderlo ^^



Casa de Misato


Después de tres días hospitalizada Asuka al fin regresaba a casa. Venía mareada, pero no por el tratamiento médico o por las heridas, si no por la brusca manera de conducir de Misato, la mujer mayor abrió la puerta del apartamento y la chica se quedó de piedra con lo que vio. Un gran cartel desplegado en el techo con las palabras "Bienvenida Asuka" y a Shinji con delantal manchado de harina y con un bol con las manos.

-Qué es todo esto?

Preguntó parpadeando.

-Ah... Habeis llegado antes de lo que pensaba, aún no he terminado... dadme unos minutos...

Se disculpó el chico algo azorado.

-Todo esto lo has hecho tú?

La pelirroja caminó por la cocina mirando todos los platos que su compañero le había preparado, la mayoría complicados pues ella tenía gustos muy refinados y es que también todos eran sus favoritos. Asuka se quedó mirando al chico muy seria, este tragó saliva sin saber que hacer, el temperamento de su compañera era muy inestable y a lo mejor le parecía mal lo que había hecho y se ganaba una bronca. Pero en vez de eso le sonrió y se acercó a el para rozar sus labios con los suyos durante un momento.

-Gracias Shinji.

El chico se puso rojo como un tomate por el beso.

-Vaya Shinji, dos besos ya, parece que estás enamorando a Asuka!

Dijo Misato divertida.

-Ahhhhh...

Avergonzado el piloto miraba al suelo rascándose la nuca.

-No digas tonterías Misato, sólo intento ser más amable con él. No decías que tenía que serlo?

Protestó la chica por las insinuaciones.

-Desde luego no tienes término medio Asuka.

Rió la mujer. Los tres compañeros de piso disfrutaron de una comida como nunca la habían tenido, tranquila y agradable. La alemana estaba bastante animada e incluso rió bromas de Shinji, este y Misato no sabían si es que había cambiado o es que los sedantes aún le hacían efecto.


Nerv


Rei estaba metida dentro de un tubo de pruebas lleno de LCL, se encontraba en una de las salas de acceso restringido de la base, del tubo salían multitud de cables que se unían a los sistemas informáticos de MAGI para guardar los datos de los experimentos de los que era partícipe la chica de pelo azul. Dentro de la vitrina cilíndrica tenía los ojos cerrados y su pelo flotaba libre. Cuando acabaron de recabar datos el estanque artificial se vació y Rei salió de su confinamiento goteando el líquido anaranjado, desnuda caminó hacia la única persona que estaba presente, el comandante Ikari.

-Hemos terminado?

Preguntó la chica.

-Si Rei.

Respondió el hombre.

-Podríamos ir a almozar juntos.

Sugirió la piloto sonriendo.

-Lo siento, he de hacer otras cosas, pero tienes tiempo para hacer esto.

El hombre de barba desabrochó su pantalón dejando salir su pene flácido.

-Oh... Entiendo.

La chica habló en tono suave y serio y mirando el miebro se arrodilló, lo tomó con una mano y comenzó a lamerlo.


Instituto


El humor de Asuka empeoró cuando Misato la obligó a ir de nuevo a clase, ella ya había terminado la universidad en Alemania y sentía que era una pérdida de tiempo ir a clases que ya había aprobado hacía años, pero su tutora preferría que fuera para integrarse, y también para que estuviera vigilada. La chica ya estaba recogiendo sus cosas pues las clases ya habían acabado cuando apareció su amiga Hikari.

-Asuka, necesito que me hagas un favor, puedes llevar estos deberes a casa de Ayanami?

Le pidió esta.

-Eso es trabajo tuyo como delegada.

Le dijo de malos modos.

-Ya lo sé, pero es que he quedado con Touji y esta es mi oportunidad! Anda por favor!

Suplicó a la pelirroja.

-Díselo a Shinji!

Dijo resoplando.

-Ikari y Aida ya se han ido para que Touji no pueda estar con ellos, se lo pedí como favor...

Dejando entrever que ahora quería un favor por parte de ella.

-Ah!!! Está bien!

Protestando la alemana le arrancó los papeles de la mano y los guardó en su cartera.

-Gracias Asuka, eres la mejor!

La joven de pecas aplaudía sonriendo de felicidad.

-Si, si...

Refunfuñó la pelirroja mientras se iba.


Casa de Rei


La piloto de pelo azul acababa de llegar a casa directamente de la base de NERV, en su boca aún tenía mal gusto, la presencia del comandante Gendo Ikari ya no le parecía reconfortante, tristemente miró la calle desde la ventanada, que como siempre estaba fría. En ese momento alguien llamó a la puerta, fue a ver quien era la extraña visita a esas horas.

-Hola Sohryu.

Dijo la chica sosteniendo la puerta al ver a Asuka.

-Hola Rei, vengo a traerte los deberes de clase. Dónde demonios están?!

Decía cabreada rebuscando en su cartera.

-Pasa...

Susurró la del pelo azul volviendo a su habitación y sentándose con aire distraido y melancólico en su cama. La pelirroja siguió refunfuñando dando unos pasos en el apartamento mientras sacababa papeles y papeles.

-Ah aquí están, por fin!!!

Dijo aliviada pasándole los deberes que traía para ella. Rei alargó la mano y los tomó sin mirar a su compañera.

-Te ocurre algo?

Preguntó la piloto del Evangelion rojo.

-No, nada...

Respondió suspirando, se la notaba cada vez más triste. La alemana hizo gesto de irse pero resopló y dió la vuelta sentándose al lado de la chica de ojos rojo.

-Si quieres puedes contármelo.

Dijo apoyando aburrida la cabeza en una mano.

-Es sólo que...

La chica parecía dubitativa.

-Si?

Aunque no quería admitirlo Asuka tenía curiosidad, ya que nunca había visto así a la peliazul.

-Sohryu... Piensas que soy hermosa?

Le preguntó mirándola a los ojos.

-Pues si...

Le respondió esta sorprendida por la pregunta.

-Seguro que no lo dices por amabilidad?

Quiso saber. Asuka sonrió ante la nueva pregunta, parecía que no la conociese.

-Si fuera solo por amabilidad haría esto?

La pelirroja tomó a su compañera de sus pálidas mejillas y cerrando los ojos le dió un largo beso en los labios, cuando terminó la alemana se la quedó mirando con una sonrisa, Rei llevó dos dedos a sus labios y los rozó, dudando un momento acercó su cara a la de su compañera y le devolvió el beso. Asuka lo aceptó con satisfacción y con su mano derecha comenzó a acariciarle el muslo por debajo de la falda de su uniforme escolar, la piloto de pelo azul no se quedó quieta y llevó su diestra hasta el pecho izquierdo de la otra y lo apretó por encima de la ropa.

-Mmmmm

Gimió Asuka mientras sus dos lenguas jugaban dentro de sus bocas e intercambiaban saliva, la alemana desabrochó el lazo rojo de la blusa y comenzó a abrirla descubriendo el sujetador de Rei que acarició.

-Ah... Sohryu!

Jadeó con los ojos cerrados y las mejillas rojas de placer al sentir como sus pechos eran tocados.

-Llámame Asuka...

Le indicó ella sonriendo.

-Si...

Asintió muy acalorada mirándola a los ojos. Asuka la hizo acostarse y ella se puso encima, las caricias en sus muslos fueron cada vez más enérgicas hasta que recogieron la falda dejando ver sus bragas.

-Quiero hacértelo...

Susurró la pelirroja lamiéndole la oreja derecha y acariciando por encima la tela de la ropa íntima.

-Y yo...

Gimió Rei ladeando la cabeza y retorciendo su cuerpo de la excitación que sentía.

-Pues... afuera bragas.

De un gesto rápido se las bajó descubriendo un hilo trasnparente de fluidos que unía la tela y los labios vaginales de la peliazul.

-Vaya... mira que tenemos aquí.

Sonrió traviesa la piloto, relamiéndose bajó su mano derecha y comenzó a frotar el sexo de su compañera con dos dedos que se humedecieron rápido. Esta gemía cada vez más fuerte, su pecho se elevaba y bajaba cada vez más rápido debido a la respiración agitada, la de pelo largo aprovechó para quitarle el sujetador, se lamió la mano derecha y la frotó por los pechos de Rei haciéndolos brillas y moverse.

-Si, preciosos...

Dijo mirándoselos fijamente y mordiéndose el labio inferior. Mientras jadeaba Rei tomó a su compañera de la nuca y acercó su cara a la suya dándole un apasionado beso, la alemana empezó a meter y sacar dos dedos de su vagina, sus piernas temblaban y la humedad se hacía más intensa.

-Ahhhh! Espera, déjame ponerme cómoda..!

La pidió recuperando el aliento después del intenso beso y poniéndose de pié, delante de ella comenzó a desnudarse muy lentamente, los ojos rojos no perdían detalle.

-Te gusta lo que ves?

Preguntó pícaramente tras quedarse tan sólo en ropa interior. La muchacha asintió abriendo y cerrando las piernas ansiosa, Asuka se tiró prácticamente encima de ella para volverla a besar y frotar los dós cuerpos jóvenes y femeninos, la piloto de pelo azul cerró las piernas sobre las caderas de la otra y comenzaron a revolverse por encima de la cama.


Tokyo-3


Touji caminaba dando toques a un balón de fútbol distraidamente por la calle ya que entrenaba con el equipo de fútbol. Volvía sólo a casa, sus amigos Kensuke y Touji habían desaparecido y aunque había esperado no aparecieron así que se marchó del instituto sin compañía. En la esquina de la calle le espiaba Hikari que le había seguido y adelantado para hacerle caer en una pequeña trampa y así inicier el acercamiento a él. Cuando el chico atravesó la esquina la chica se precipitó sobre él cargada con bolsas de la compra.

-Uhhhhh!

Gritó la de coletas mientras caía al suelo.

-Pero qué?!...

Asustado por el repentino encontronazo Touji logró mantener el equilibrio.

-Ah, las bolsas!

Gritó Hikari mirando los paquetes que había comprado por el suelo.

-Oh, lo lamento, déjame ayudarte Hikari.

El muchacho re arrodilló para empezar a recoger todo, la delegada hizo lo mismo.

-Deberías mirar por donde andas Touji.

Le dijo de malas maneras mientras metía productos de nuevo en las bolsas.

-Si, si, lo sé.

Respondió este resignado. La chica sonrió para sus adentros. Cuando terminaron de recoger todo el estropicio ambos se pusieron en pié.

-Bueno, ya está, me voy, nos vemos delegada.

El chico se limpió el polvo del pantalón dispuesto a marcharse.

-Gracias por ayudarme Touji.

Sonriendo le agradeció y poniéndose de puntillas le besó en la mejilla.

-Y esto?

Preguntó algo sorprendido por el repentino gesto de la muchacha.

-Es mi forma de agradecértelo.

Dijo tímidamente sonriendo.

-Ah, no tenías que.. mmmmm!

El joven fue acallado por los labios de su compañera que se sellaron.

-Y esta es mi forma de decirte que te quiero.

Confensó después del beso.

-Me... Me quieres? A mi?

Sonrojado el chico se señaló a si mismo.

-Si...

Dijo en un murmullo Hikari mirando al suelo sonrojada con las manos tras la espalda y moviendo nerviosa la punta de un pie en círculos.

-Pero por qué?

Preguntó este aún confundido.

-No sé, sólo sé que me gustas...

Respondió ella.

-Siempre me estás gritando.

Le recordó.

-Eso es por que tenía miedo de que se notara que me gustabas, pero ahora ya no lo tengo!

Le miró seriamente negando con la cabeza.

-Y bueno... que dices tú?

Volvió a mirar al suelo recuperando algo del miedo. Esta vez al rechazo.

-Pues... Eres una chica muy guapa, y siempre he admirado tu inteligencia y madurez, no como yo que soy un burro, jejejejeje.

Ambos chicos rieron por la broma.

-Bueno... Tú a mi también me gustas...

Confesó finalmente, Hikari sonrió con gran felicidad y le abrazó. El chico se sintió algo intimidado pero sonriendo también cerró los ojos sintiendo el cuerpo de ella. Era curioso pero el que la chica se hubiera declarado hizo entender a Touji que la quería muchísimo aunque nunca lo hubiera pensado.


Casa de Misato


Shinji miró por la terraza mientras ponía la mesa, era casi de noche y Asuka aún no había regresado a casa, estaba algo preocupado, así que tomó su teléfono y la llamó, sonaron dos tonos antes de que la chica lo cogiese.

-Si, qué quieres?

Su voz sonaba molesta.

-Asuka, dónde estás? Ya es tarde...

Dijo este con miedo.

-Pero bueno! Ahora resulta que eres mi padre!

Le gritó por teléfono.

-No, no es sólo que quiero saber si vendrás a cenar...

DIjo asustado.

-No, me quedaré a cenar y a dormir en... casa de Hikari! Adios!

Le colgó repentinamente, era extraño, pero juraría que su voz estaba entrecortada y escuchaba otra respiración por detrás.

-Hablabas con Asuka?

Preguntó Misato saliendo de la ducha con una toalla al cuello se secaba el pelo, llevaba una camiseta amarilla con las mangas recogidas y unos jeans cortados.

-Si, hoy no vendrá a domir, se queda en casa de una amiga.

Le explicó el chico dejando el teléfono.

-Bueno, ya que tenemos la noche para nosotros dos solos que te parece si hago yo la cena?

La mujer le guiñó un ojo.

-Eh... no hace falta Misato-san, en serio.

Dijo este sonriendo falsamente.

-Insisto!

Con alegría la mujer se encaminó a la cocina, tras la cabeza de Shinji se pudo ver una gran gota de sudor resbalando.


Casa de Rei


Asuka y Rei estaban en la cama de esta, ambas tapadas por las sábanas hasta la cintura dejando al descubierto sus pechos jóvenes y firmes que apuntaban al techo gris, sucio y roto.

-Quieres echar otro?

Preguntó la pelirroja girando hacia su compañera y jugando con el pezón derecho de ella con su dedo índice.

-Es muy tarde, no tienes que irte?

Respondió esta con otra pregunta.

-Pues pensaba en quedarme a dormir contigo.

Le dijo apoyando su cabeza en una de sus manos sin parar de mover el dedo.

-En serio?

Preguntó la piloto de pelo azul.

-Si, no puedo?

Quiso saber su compañera.

-Es que siempre he dormido sola, nunca nadie se había quedado a hacerme compañía.

Asuka la miró con ternura, la verdad es que aquel lugar era horrible para dormir sola.

-Pues hoy no.

Y comenzó a besar sus mejillas, labios, cuello, hombros, pechos, pezones, vientre, ombligo, caderas, pubis... Finalmente desapareció bajo las sábanas. Rei jadeaba cada vez más y más con las mejillas rosas y los ojos cerrados, moviendo su cabeza de lado a lado tuvo que agarrarse a los barrotes de su cama para soportar como la pelirroja devoraba su sexo entre sus piernas.


Casa de Touji


-En serio Hikari, no tienes por que hacer esto.

Dijo Touji sentado en el salón de su casa. Hikari había insistido en hacerle la cena cuando se enteró de que la mayoría de las veces se la tenía que hacer él, o más bien meter en el microondas un plato precocinado. El chico veía avergonzado como su ahora novia iba y venia de la cocina llevando platos y servilletas.

-A mi me encanta cocinar!

Respondió esta alegremente yendo a vigilar como iba el guiso de pollo que estaba preparando. Después de unos minutos ambos estaban a la mesa. Touji miraba con ojos de lobo feroz todos los platos que tenía delante de él, nunca había visto comida con tan buena pinta.

-Buen provecho.

Dijo alegre Hikari tomando los cubiertos.

-Buen provecho!

El chico se avalanzó sobre la comida y empezó a devorarla, cada plato le sabía mejor que el anterior y se lo hacía saber a la chica de pecas. Esta casi no comía, se contentaba con mirar como el chico disfrutaba de sus habilidades culinarias y eso la llenaba de satisfacción.

-Ahhhhhh! Estoy llenísimo!

El jóven del chándal se recostó encima del sofá palpándose la barriga.

-Te ha gustado?

Preguntó la chica sentándose a su lado.

-La mejor comida de mi vida!

Aseguró complacido.

-Seguro que no lo dices por ser gentil?

Le preguntó sonrojada.

-En serio, yo no soy de esos.

Aseguró asintiendo con la cabeza. Hikari le dedicó una gran sonrisa.

-Bueno, habrá que fregar los platos sucios!

Dijo la chica levantándose.

-No, no te dejaré que hagas eso.

Touji la agarró de un brazo y la obligó a sentarse de nuevo a su lado para darle un beso en los labios, beso que aceptó con gusto la muchacha, cuando acabó comenzó a besarle la oreja, con los ojos cerrados la chica de coletas tembló ante la humedad y calor de la lengua del chico que le hacían cosquillas. El joven más animado comenzó a acariciarle la pierna derecha.

-Ah Touji... Creo que aún no estoy preparada...

Susurró la delegada mientras se revolvía con suavidad.

-Oh entiendo.

El chico se apartó.

-Qué haces?

Preguntó ella muy sorprendida.

-Pues, has dicho que no estás preparada.

Le respondió algo confundido por su actitud.

-Bueno, si... pero eso es lo que se supone que debo hacer no?

Dijo tímidamente.

-Entonces... En realidad quieres que siga?

Preguntó dubitativo. La chica asintió con la cabeza, y entonces él volvió a ponerse sobre ella recostándose en el sofa y para volverla a besar, esta vez en el cuello.

-Ahhhh...

Jadeó siento estimulada por las caricias de su novio, ella le acariciaba la espalda por encima de la ropa, amaba el contacto con el cuerpo del chico y quería estar así siempre. Sin resistirse más a la tentació Touji se puso de rodillas encima de ella y comenzó a desabotonar su blusa y abrió su sujetador viendo sus incipientes pechos con pezones puntiagudos y marrones.

-Son pequeñas verdad?

Dijo Hikari sonrojada de verguenza.

-Son preciosas.

Respondió este mirándolas como hipnotizado y comenzó a masajearla scon cuidado viendo como se hacían más grandes cuando las juntaba y como recuperaban su forma original al soltarlas. El joven se relamió y con mucha precipitación bajó sus pantalones dejando escapar su miembro erecto, a su novia le pareció inmenso, nunca había visto uno y abrió los ojos soprendida, sin preguntarle el chico comenzó a frotarlo entre sus senos.

-Ohhhhh!

Touji echó la cabeza hacia atrás sonrojado y gimiendo, su pene ya tenía líquido preseminal de la excitación y unido al sudor de la chica hacían que el tronco se deslizase con facilidad entre sus pechos pequeños que apretaba juntándolos para hacer un canal.

-Te da placer?

Preguntó con algo de miedo la joven que se sentía extraña haciendo eso.

-Muchísimo!

Casi sin poder hablar el chico del chándal se arqueó hacia delante aumentando el ritmo de su frotamiento entre los pechos de su novia, en su cara se reflejaba el esfuerzo y las gotas de sudor de su frente caían sobre su miembro, laro, cálido y duro. Hikari cada vez se iba excitando más y sentía en su entrepierna un cosquilleo y un calor que jamás antes había experimentado, en un acto reflejo abría y cerraba las piernas continuamente teniéndolas flexionadas con los pies apoyados en el sofa.

-A mi también...

Confesó ella cerrando los ojos para concentrarse más en el placer que sentía. De repente sintió como una gota de líquido salía de su sexo humedeciendo sus bragas.

-Oh...

Gimió extrañada de placer.

-Te ocurre algo?

Preguntó Touji al notar su estado.

-Siento algo extraño en mi entrepierna.

Confesó. El joven vió la oportunidad de admirar más de la hermosa chica y se deslizó hasta abajo abriendo sus piernas y recogiendo la falda verde del vestido vió con placer sus bragas blancas de colegiala que estaban pegadas a ella húmedas de su sudor y sus fluidos.

-Eso es que estás excitada.

Le dijo con una sonrisa.

-Qué verguenza!

Hikari se tapó la cara con las manos negando con la cabeza.

-No, no, es genial! Dime... Puedo metértela?

Le preguntó con algo de miedo de parecer brusco. La chica sintió con la cabeza tragando saliva algo nerviosa y él le bajó las bragas hasta que quedaron aferradas a su tobillo derecho, tenía escaso vello púbico. Touji pasó un dedo por sus labios inferiores y comprobó que estaba pringoso debido a la humedad, la joven de coletas jadeó ante el contacto. El chico se puso encima de ella con las manos apoyadas en el respaldo donde ella tenía la cabeza, parecía que fuera a hacer flexiones. Mirando hacia abajo movío sus caderas rozando su glande también húmedo contra su sexo, cuando lo tuvo en posición comenzó a penetrala lentamente forzando a la vagina de ella a abrirse con su ancho pene.

-Ahhhhh!

Hikari gritó y tembló a medida que era desvirgada. Para acallarla Touji la besó en los labios, una vez la mitad de su pene estuvo dentro de la chica, dejó caer su cuerpo para estar encima de ella y así comenzar a penetrarla a un ritmo suave. Era tan estrecha que le costaba meter cada centímetro de su miembro pero esto a la vez le daba más placer al apretárselo. Ella mientras le besaba con lágrimas en los ojos abrazándole el cuello, estaba muy feliz de por fin estar con el chico al que amaba, y por que no, también disfrutaba del placer del sexo que había descubierto que era muy reconfortante. Touji siguió penetrándola un buen rato, cada vez sudaban y jadeaban más, por abajo la chíca estaba cada vez más mojada.

-Ahhhhhh!!!

El chico sintió que se corría y sacó con rapidez el miembro de dentro de Hikari, eyaculó sobre ella manchando ropa y piel y se volvió a tumbar sobre ella acariciando sus pechos y besando su cuello y cara. La chica sonreía cansada pero satisfecha y besó a su novio en la frente antes de quedarse los dos dormidos de puro agotamiento.


Casa de Misato


Era medianoche y Shinji daba vueltas y vueltas sudando en su cama sin poder dormir. La comida de Misato atacaba de nuevo. Se levantó resignado, sólo llevaba una camiseta blanca y unos slips del mismo color para dormir. Salió de su habitación para ir al baño enseguida cuando vió alggo que le paralizó. La luz del salón acababa de ser encendida y de su habitación acababa de salir Misato en su ropa de dormir, que eran unas bragas color azul, por lo demás estaba completamente desnuda con sus enormes pechos descubiertos. Ambos se quedaron mirando el uno al otro, el chico con la boca abierta no cambió de expresión pero se fue poniendo cada vez más y más rojo.

-Ahhhh! Shinji, no mires!

Gritó Misato tapándose con las manos y dándose la vuelta.

-Ah perdona! yo no quería, no sabía que estabas aquí!

Dijo este temblando muy nervioso, la mujer de repente se dió cuenta de una cosa y una sonrisa se dibujó en su cara.

-Tú no querrías, pero tu "mini Shinji" se ha alegrado.

Dijo traviesa señalando a la entrepierna del piloto. Su pene se había erectado y luchaba por salir del slip haciendo un notable bulto que apuntaba arriba a ala derecha.

-Yo, yo, Misato, lo siento, lo siento de veras!

Se disculpó muy avergonzado intentando taparse con la camiseta, Misato se acercó a el y rodeó sus hombros con su brazo izquierdo.

-No digas eso, me halaga tu reacción, pensaba que una mujer como yo ya no podía gustar a chicos jóvenes.

Le dijo con una sonrisa.

-Pero Misato, tu eres muy atractiva.

Le dijo algo cohibido. En respuesta ella sonrió y tiró del elástico del slip descubriendo su pene duro y caliente.

-Misato. Qué...? Ohhhh!

Shinji cerró los ojos y gimió arqueando la espalda cuando la mujer tomó su miembro con la mano derecha y comenzó a masturbarlo.

-Un chico de tu edad tiene que eyacular un par de veces al día, retener tanto no es bueno cuando sois tan activos. Y yo como responsable tuya de de ayudarte.

Le explicó sintiendo palcer en tener el tronco de carne en su mano mientras lo movía. El chico solo suspiraba sonrojado mirando con ojos soñadores los senos de la mujer de pelo largo, firmes, grandes, redondos y con pezones de buen tamaño.

-Me gusta tu polla Shinji, es dura, larga y firme, preciosa.

Murmuró algo sonrojada sin dejar de meneársela mientras la miraba modiéndose el labio inferior, con su brazo seguía sosteniendo al joven de los hombros.

-Mi... misato... ya que estamos en un momento tan íntimo... puedo confesarte algo?

Preguntó agitado mientras sudaba.

-Dime.

La mujer no bajaba el ritmo de su movimiento en ningún momento.

-Cocinas fatal... A partir de ahora deja que siempre lo haga yo...

Le dijo mirándola sonrojado con una sonrisa idiota mientras saliva caía de la comisura de sus labios.

-Jejejejeje está bien Shin-chan.

A parte de la respiración agitada se escuchaba el ruido de chapoteo que hacía la mastrubación de Misato ya que el pene segregaba líquido preseminal y este era extendido por el vigoroso movimiento de la mano de la mayor.

-Ahhhhhhhhh!!!

Shinji estiró su espalda, apretó los dientes y elevó la cabeza mientras salía chorro tras chorro de blancuzco semen de su pene. Al estar d epié y sin nada delante que interfiriera el esperma fue volando hasta caer al suelo y formar un charco espeso.

-Bufff!!!

Resopló cuando terminó de correrse, unas gotitas de semen cayeron justo debajo de él. Misato miró su mano que estaba pringosa de la eyaculación del piloto.

-Bueno, te encuentras aliviado?

Le preguntó sonriendo mientras sacudía la mano manchada haciendo que salpicase.

-Mucho...

Dijo este aún recuperando el aliento.

-Pues ya puedes irte a dormir tranquilo y no preocuparte por las consecuencias de mis guisos.

Le dijo cariñosamente besando su frente sudorosa y revolviendo su pelo. Le guiñó un ojo y se metió en su cuarto.

-Qué mujer!

Dijo este con admiración subiéndose el slip para volver de nuevo a su cama.


Instituto


Al día siguiente Shinji fue a clases con una sonrisa en la cara, pero cuando entró en el aula su cara se transformó en un gesto de sorpresa al ver una escena que pensó inimaginable. Asuka estaba de pié al lado del pupitre de Rei, esta sentada la miraba sonriendo y ambas estaban teniendo lo que parecía una animada charla. El joven piloto se frotó los ojos murmurando para si mismo que aquello era increible. Pronto se le unió a su lado Kensuke que miraba de igual forma a una escena similar pero protagonizada por Touji y Hikari. Ambos chicos se miraron el uno al otro sin entender nada.


Fin del Capítulo 11

Terminado: 22-01-2008