Evangelion Código XXX (1)

Evangelion Código XXX

Autora: Laura_Asuka

Capítulo 01: El Inicio de una Historia

Contenido:

Asuka X 2 Amigos

Asuka X Kaji

Shinji X Misato

Asuka X 3 Marineros

Rei X 3 Estudiantes

Notas de la Autora: Hola! y gracias por leer mi primer fic Hentai sobre Evangelion ^^ Como no se me ocurría nada en concreto he decidido hacer una historia larga con multitud de historias entre los personajes, espero que me salga bien! (cruzando dedos :P)

Para que os hagais una idea del formato de la historia cada vez que veais el nombre de un lugar entre asteriscos (***) significa el inicio de una nueva escena y el lugar donde se desarrolla. El fic está en su mayor parte narrado así que no hay problema, pero cuando veais texto en cursiva con un guión (-) delante significa que es diálogo o pensamiento de algún personaje, creo que explico bien cuando alguien habla o piensa así que no creo que haya problemas para entenderlo ^^

Casa de Misato

- Diablos, que tarde tan aburrida, no hay nada que hacer!

El piloto de Evangelion se quejó mientras permanecía tumbado en el salón del apartamento donde vivía junto a su tutora Misato Katsuragi. El sol de la tarde entraba por la puerta de cristal de la ventana iluminando su cuerpo adolescente vestido con una camiseta blanca y pantalones cortos deportivos azul oscuro.

- Será mejor que haga algo o me quedaré dormido en un momento.

Perezosamente se levantó y estiró sus brazos dándose la vuelta y mirando hacia la ciudad a través del ventanal.

- Hace buen día quizá podría salir a dar un paseo... No, mejor me quedo a arreglar la casa, si tengo que esperar a que lo haga Misato esto se convertirá pronto en un vertedero.

Habló para si mismo. Luego paseó por la casa a ver lo que podía hacer. La cocina estaba limpia y los platos fregados, el baño también lo había adecentado hace poco, la nevera de Pen Pen estaba reluciente y su cuarto recogido y en orden. Se quedó mirando a la puerta de la habitación de Misato, sabía que no era educado entrar, pero seguro que estaba hecha una pocilga, así que caminando con miedo de ser descubierto, aún sabiendo que la mujer no estaba en casa, abrió la puerta lentamente. Estaba oscuro y lo primero que notó fue un olor a cerrado muy profundo. Encendió la luz.

- Dios mío!

Al ver el desorden que tenía Misato en la habitación el chico se llevó una mano a la cara mientras una gran gota de sudor caía por su frente. El suelo estaba lleno de latas de cerveza vacías, recipientes de comida rápida igual de vacíos, revistas viejas, prendas de ropa. etc... El armario abierto con la ropa desordenada, incluso era tal la dejadez de la mujer que se había dejado el ordenador encedido, Shinji lo apagó y cogió varias bolsas de basura, las iba a necesitar, para recoger todo lo que había que tirar al vertedero. Resignado después de ese trabajo se dedicó a ir metiendo las prendas que había en el suelo dentro de la cesta de la ropa para llevarlas a la lavadora. Pero una de ellas llamó su atención y se quedó mirándola sorprendido mientras la sostenida delante suya con los dedos índice y pulgar de cada mano.

- Mi... Misato-san usa esto?

En sus manos tenía unas pequeñas bragas blancas de encaje muy elegantes que estiraba y volvía a contraer con sus dedos. Evidentemente aquella prenda íntima era demasiado pequeña para su tutora que tenía un culo grande y redondo. Un culo que en casa no paraba de insinuar llevando siempre pantaloncitos ceñidos que marcaban sus nalgas y quitaban la respiración. En la mente de Shinji pronto apareció la imagen mental de la parte inferior del cuerpo de Misato caminando por la casa solo vistiendo aquellas bragas muy tensas por la presión de su enorme culo que temblaba como gelatina a cada paso que daba. Shinji se sonrojó por la idea y notó un bulto en sus pantalones, su pene quería salir de su prisión a ver lo que estaba pasando.

Aún con las bragas en la mano el chico se asomó fuera de la habitación y asegurándose de que nadie había venido a la casa cerró la puerta del cuarto y respirando nervioso por lo que iba a hacer se bajó hasta las rodillas pantalón y calzoncillos quedando al fin libre su pene que apuntaba al techo palpitando aliviado. El chico rodeó su miembro con las bragas y comenzó a masturbarse con la mano derecha, inclinó un poco su cuerpo y cerró sus ojos jadeando, imaginando a Misato desnuda, paseando por la casa moviendo sensualmente su culo, con sus enormes pechos dando saltitos. Se imaginó a él dándole a su tutora todas las formas de sexo posible que conocía. Ella chupándole el pene, masturbándoselo con sus senos, penetrándola estando encima de ella, metiéndoselo por el culo...

- Ahhhh!!!

El joven no pudo aguantarse más, se inclinó aún más mientras su cuerpo temblaba y su miembro comenzó a expulsar chorros de semen sobre la ropa de Misato en el cesto de la ropa sucia. Shinji siguió masajeando su pene hasta que no echó más y lentamente abrió los ojos poniéndo su espalda firme mientras abriá los ojos respirando agitado. Se sorprendió de la cantidad de líquido blanco que había manchado la ropa, nunca en sus masturbaciones había eyaculado tanto, con las bragas se limpió el pene y las tiró a la cesta, tras subirse la ropa llevó las prendas, ahora más sucias a la lavadoras donde las metió ahora un poco arrepentido de lo que había hecho. Tras quedar bien limpias las metió en la secadora y luego las colgó del tenderete del baño para que Misato las encontrara y las guardase donde le pareciese oportuno.

Ya sin importarle el resto del día se tumbó en el sofá del salón tras darle de comer al pingüino de aguas termales y echó una larga siesta.

El ruido de la puerta de casa abriéndose le despertó, lo primero que vió fué que la luz del sol era anaranjada, síntoma de que el día estaba a punto de acabar.

- Cuanto habré dormido?

Se preguntó sentándose mientras frotaba sus ojos.

- Ya estoy en casa Shin-chan!!!

Saludó alegremente la mujer que llevaba sendas bolsas de la compra en las manos y que dejó encima de la mesa de la cocina.

- Hola, como te ha ido el día Misato-san?

Le preguntó levantándose del sillón aparentando no haber estado durmiendo toda la tarde.

- Aburrido como siempre, y el tuyo?

Sin parar de caminar por la casa Misato se quitó la cazadora roja de Nerv y la dejó sobre una silla quedando en vestido negro sin mangas se dirigió a su habitación.

- Pues no hice nada especial...

Tragando saliva intentando tranquilizarse al venir de nuevo a su cabeza lo que había hecho hace unas horas.

- Eh.... Misato, estuve ordenando un poco tu habitación, espero no te importe...

La avisó con algo de miedo antes de que entrara.

- Oh, Shinji! No tenías porque hacerlo, muchas gracias, eres un cielo!

Antes de meterse en su cuarto le dedicó una sonrisa a su compañero de piso.

- Si bueno... eh... no hay de qué.

Rascándose la nuca algo tímido fue a la cocina a sacar de las bolsas lo que Misato había traido y a guardarlo en los estantes y nevera, cogiendo de paso lo necesario para hacer la cena.

Media hora después Shinji y Misato estaban en la mesa comenzando a cenar. El chico se fijaba en su tutora, había recogido su melena azul oscuro en una coleta y llevaba shorts vaqueros y una camiseta de asas color violeta, el piloto se dió cuenta de que esa camiseta había estado en la cesta de la ropa sucia y había sido de la que más manchada había quedado. Se imaginó los chorros encima de la prenda que ahora llevaba Misato y bajó la cabeza hacia su plato comiendo en silencio.

- Te ocurre algo Shinji? No has dicho ni una palabra durante la cena.

Quiso saber Misato que tenía las piernas cruzadas y tomaba una cerveza mientras estaba recostada en el respaldo de su silla.

- No, nada, nada, ya sabes que no hablo mucho... je.

Sonrió de forma estúpida levantando un poco la mirada hacia la mujer, pero no mucho ya que estaba sonrojado.

- Si, es verdad...

Sonrió de forma amable para no seguir preguntándole ya que sabía lo retraído que era el chico y no quería incomodarle.

- Gracias por la cena Shinji, iré a darme un baño.

Le dijo levantándose y dada por terminada la cena se dirigió al cuarto de baño.

Shinji suspiró al oir la puerta cerrarse al ir su tutora a bañarse, ya podía descansar un poco de la tensión de la cena, para distraerse recogió los platos sucios y los llevó al fregadero para lavarlos, al terminar escuchó el ruido del agua de la bañera al chapotear y en su mente se vió la imagen del cuerpo desnudo de Misato en el agua, de nuevo su pene reaccionó dentro de sus pantalones.

- Mi...Misato, ya me voy a dormir!

Anunció a la puerta del baño tragando saliva de lo nervioso que estaba.

- Buenas noches Shin-chan!

El chico se metió con rapidez en su habitación cerrando la puerta y acostándose, bajo las sábanas no pudo resistir la tentación de masturbarse de nuevo pensando en como Misato se daba un baño.

Alemania

Aunque no lo reconocería Asuka estaba nerviosa, estaba a punto de coger un barco que la llevaría a ella y a su Evangelion a Japón para pronto realizar la tarea para la que había estado entrenando desde hacía 4 años. La chica llevaba puesto un vestido verde con escote sin asas y falda larga, la pelirroja avanzaba hacia el barco que la iba a llevar a su nuevo hogar cargando en cada mano una maleta.

-Ya te vas Asuka? Y no te despides?

Cuando la chica oyó una voz masculina a su espalda paró su caminar y se giró. Una sonrisa apareció en sus labios al ver quien era. Un chico alto y rubio de ojos azules, complexión fuerte y mirada decidida, cerca de el se encontraba otro de su edad, muy parecido a él pero de pelo castaño y ojos verdes.

-Chicos! Qué haceis aquí?!

Aunque sorprendida la voz de Asuka sonó alegre por la presencia de dos de sus compañeros de universidad.

-Nos enteramos de que salías hacia Japón y vinimos para ver si era cierto.

Le informó el de pelo más claro acercándose a ella hasta que la tuvo a escasos centímetros de él. La diferencia de edad, el chico era cinco años mayor que ella, se notaba en la altura ya que le sacaba muchos centímetros y la cabeza de la chica estaba a la altura del pecho de su compañero.

-No me puedo creer que pensaras en irte sin decirnos adios.

Dijo el otro chico con voz triste fingida. Este se había colocado a la espalda de la pelirroja y aprovechó para apretarle la nalga derecha por encima de la tela con su mano derecha abierta.

-Ah...

Asuka giró la cabeza a mirar sonrojada a su otro compañero cuando sintió su mano en su trasero.

-Teníamos que venir a despedirte como mereces...

El rubio colocó sus manos sobre el escote de la chica y tiró del vestido hacia abajo haciendo que terminase justo debajo de sus pechos en vez de cubrirlos como era su cometido original. Los senos de Asuka quedaron al aire libre dando un pequeño salto al no llevar ropa interior. Estos eran de tamaño normal para su edad, firmes y suaves con pezón pequeño y rosa.

-Chicos que haceis?! Aquí no!

La pelirroja se quejó con voz suave, pero el tono de su voz desvelaba que estaba excitada ante lo que sus dos compañeros estaba haciendo. El que tenía delante tomó con dos dedos su mentón y la obligó a elevar su cabeza besándola profundamente metiendo su lengua en su boca, con su otra manó usó su dedo índice para acariciar su pecho y subir por su cuello decorado con una cargantilla gris. Ella cerró los ojos y gimió sonrojándose más. El que estaba tras ella metió sus manos bajo la falda del vestido y desató los nudos laterales de sus bragas quitándoselas, las guardó en su bolsillo y acarició con mucha lujuria los glúteos desnudos, suaves y carnosos de ella por debajo de su ropa.

-Habría sido una gran pena no tocar este culo por última vez...

Comentó extasiado apretando los labios concetrándose en masajear las nalgas de Asuka que pellizcaba entre sus dedos.

-Vayamos a algún lugar más... privado.

Dijo soltando los glúteos mirando alrededor del puerto asegurándose de que nadie les viera. Él mismo comenzó a caminar hacia un almacén cercano seguido de su amigo rubio que había tomado a Asuka de las piernas y la llevaba al alza mientras ella le abrazaba del cuello y se seguían besando. El chico de pelo castaño sujetó la metálica puerta para que los otros dos entraran, luego entró él cerrándola a su paso, el amigo rubio dejó a Asuka con delicadeza sobre un montón de sacos apilados y vacíos. El lugar estaba vacío, era enorme y oscuro, tan solo iluminado por unas pocas ventanas que había en la parte muy superior del almacén, que estaba lleno de cajas de madera cerradas.

-No quiero que se me manche el vestido.

Pidió Asuka acostada sobre los sacos marrones respirando agitada haciendo que su desnudo pecho se hinchase.

-Eso tiene fácil solución.

Con una sonrisa el compañero que la había llevado en brazos se arrodilló delante de ella y le empezó a sacar el vestido por la cabeza. Ella no opuso resistencia, más bien le ayudó estirando los brazos, cuando acabarón dejaron el vestido doblado en un lugar seguro, acomodó su melena revuelta, había quedado completamente desnuda con la excepción de su reloj de correa roja, su gargantilla grisácea y sus conectores neuronales.

-Pero que cosa tan bonita tenemos aquí?

El muchacho de pelo más claro acostó boca arriba con delicadeza a la chica pelirroja mientras el se ponía entre sus piernas acostándose boca abajo, puso su mano izquierda sobre el pubis de ella y con el pulgar comenzó a acariciar el triángulo de pelo invertido depilado que tenía adornando su entrepierna, con la derecha pasaba el dedo índice sobre sus labios vaginales.

Asuka abrió un poco las piernas señal de que deseaba que lo hiciese y le miraba seria y sonrojada cuando sintió una mano acariciarle la mejilla derecha, giro su mirada hacia la izquierda y vió en frente suya el pene semierecto de su otro amigo que asomaba por sus vaqueros mientras lo masajeaba la mano del chico. Ella abrió la boca y sacó la lengua para lamerlo momento en el que él aprovechó para introducirle todo lo que pudo de su miembro.

-Huele delicioso.

El que estaba entre sus piernas le había ayudado a separarlas bien con sus manos mirando lujurioso el sexo de la chica y dándole una lamida de arriba a abajo muy lenta, saboreándolo. Asuka miraba de reojo con sus ojos azules como aquel chico lamía su entrepierna mientras ella chupaba el pene del otro, ahora erecto del todo.

-Así pequeña, así...

Murmuraba el chico que estaba recibiendo la mamada, la boca de la chica le llegaba más o menos hasta la mitad de su miembro que era de tamaño bastante grande tanto de largo como de ancho por lo que Asuka tenía la boca llena y la saliva se le escapaba por la comisura de sus labios. Con su mano derecha su amigo acariciaba de manera cariñosa su sedoso pelo y su caliente mejilla, con la izquierda había atrapado su pecho izquierdo manoseándolo con mucho placer.

-Sé que puedes llegar mucho más profundo.

Dijo el chico con una sonrisa y posando su mano derecha en la nuca de la futuro piloto sostuvo su cabeza quieta y le metió más de su pene en la boca echando hacia delante sus caderas poco a poco. Asuka abrió los ojos sorprendida mientras el inmenso miembro entraba en su pequeña boca, la saliva le caía por el mentón hacia el cuello y se sonrojó más al notar que la estaba ahogando.

Al mismo tiempo por abajo su otro compañero separaba con los dedos índice y pulgar de su mano izquierda sus labios inferiores y le metía todo lo que podía la lengua en su vagina.

El joven de pelo castaño siguió empujando con su pene forzando la boca y garganta de su amiga, esta se puso cada vez más roja y puso los ojos en blanco haciendo ruidos extraños desde su garganta taponada por la erección de su compañero, este al darse cuenta la retiró de golpe quedando su pene unido a la boca de Asuka por varios hilos de saliva.

-Tienes una boca profunda para tu edad.

Le dijo a modo de cumplido mientras agarraba su pene desde la base con su mano derecha y le daba golpecitos en la cara a la chica manchándola de su propia saliva que sonreía respirando agitada tratando de recuperar el aliento con el ojo izquierdo cerrado que era donde estaba golpeando el miembro.

Sin darle más tiempo a recuperarse el chico se puso a cuatro patas sobre la cabeza de la pelirroja y con su mano derecha guió su pene a la boca abierta de ella, en esa posición y como si hicera flexiones le penetró una y otra vez la boca mientras ella se quedaba quieta poniendo sus manos sobre el vientre de su amigo por si tenia que sacarlo de allí. Su otro compañero seguía masturbando su sexo con su lengua, acariciando su clítoris con sus dedos para darle más placer, cosa que parecía al estar su entrepierna ya muy húmeda, el chico rubio usaba su lengua para esparcir sus fluidos por su sexo y la zona interior de sus muslos, disfrutando del intenso sabor.

-Como había dicho... delicioso... Pero quiero algo más.

El chico se arrodilló delante de ella limpiándose los restos de fluidos en sus labios con la manga de su camisa para después bajarse la cremallera de sus pantalones y sacar su ya endurecido pene debido a la excitación que le había producido el darle sexo oral a su amiga. Con la mano derecha dirigió su miembro hasta que su despejado glande chocó contra la entrada de la vagina de Asuka, poco a poco lo fué introduciendo con mucha lentitud disfrutando de cada momento de la sensación húmeda y cálida. Se oyó gemir a la chica pero no podía hablar ya que su otro compañero follaba su boca mientras sudaba y se relamía del esfuerzo de las flexiones.

Cuando el de pelo más claro tuvo todo el pene introducido en su vagina hasta el punto de chocar las dos pelvis lo retiro hasta la mitad para volverlo a meter empezando con el ritmo de las penetraciones, su sexo ya estaba húmedo y era fácil metérla y sacarla de dentro de ella. Con sus manos acomodó las piernas de Asuka alrededor de el y luego llevó sus manos a sus pechos masajeándolos y pellizcando de vez en cuando sus pezones.

-Yo también quiero más!

El otro chico se levantó con esfuerzo sacando su pene de la boca de su amiga, estos quedaron unidos durante un rato por gran cantidad de saliva que había segregado, Asuka se relamió limpiándose mirando hacia donde iba el de pelo castaño.

-Daros la vuelta.

Indicó al rubio, este obedeció cargando con la chica hasta quedar el sobre los sacos boca arriba. Ella quedó encima, con las rodillas tocando el suelo mientras era penetrada, sus pechos al igual que el resto de su cuerpo aplastados sobre el cuerpo de su amigo que aprovechó la nueva postura para besarla en la boca con mucha pasión, con la mano izquierda le acariciaba la suave espalda y con la derecha le agarraba la nalga izquierda para indicarle que saltara para continuar follando cosa que hizo gustosa.

-Mmmm que vista tan increible...

El que había estado follándole la boca se colocó de rodillas tras su culo y con los dedos pulgares de sus manos le abrió el ano separándole las nalgas, este era rosa y pequeñito.

-Ah! Ten cuidado, aún no tengo mucha experiencia ahí!

Asuka giró la cabeza terminando el beso asustada para avisar a su amigo pero enseguida el otro la obligó a seguir besándole acallándola con su lengua.

-Tranquila cariño, tendré cuidado.

Relamiéndose posó la punta de su pene en el ano de la chica manteniendo las nalgas separadas con sus manos, sin aún meterlo, como estaba mojado de la saliva de la chica lo movió en círculos para lubricarlo bien. Cuando pensó que ya estaba lo suficientemente húmedo introdujo el glande en el culo de ella, cerró los ojos llevado por el placer de tan estrecho agujero. Asuka se intentó quejar pero el otro chico la agarraba de la cabeza besándola jugando con sus lenguas imposibilitando que pudiera hablar mientras con golpes de cadera la seguía penetrando salpicando fluidos en cada golpe.

Abriendo lo más que podía sus nalgas con sus mano fue introduciendo poco a poco su pene largo y ancho por el ano de la pelirroja que apretaba los ojos y se ponía cada vez más roja. Con mucho esfuerzo consiguió meter todo el pene en su culo. Con los pies en el suelo, rodillas flexionadas y piernas abiertas tomaba a su amiga de la cintura con las manos en la posición más cómoda que podía para no molestar al otro chico.

Aunque le dolía algo tener ese gran miembro en su culo, el placer que le daba unido a estar siendo penetrada por su sexo lo tapaba todo así que ahora con la boca llena de lengua de uno de sus amigos gemía pero de placer.

Los dos jóvenes amigos de Asuka llegaron a un silencioso entendimiento y mientras uno la penetraba el otro tenía el pene fuera para ir intercambiándose y lograr darle a la chica mayor placer, cosa que hicieron a la perfección ya que al poco rato de estar siendo doblemente penetrada la pelirroja no pudo contener un orgasmo manchando pene, testículos y pantalones del chico que tenía debajo. El que la estaba penetrando analmente la agarró de la melena y tiró hacia él para que terminase el beso con su otro compañero y así besarla él cosa que hizo con mucha pasión metiendole la lengua en la boca todo lo que podía, el otro no se resistió a dejar de saborear con su lengua a la chica y ya que tenía el cuello estirado se lo empezó a lamer de arriba a abajo.

Los dos siguieron follándosela hasta que no aguantando más los dos eyacularon a la vez en sendos agujeros haciendo que la chica casi se desmayase de placer, la dejaron cansada sobre los sacos, sudada, con los ojos cerrados respiraba fuerte y no se movía, de su entrepierna salían dos riachuelos de esperma. Con mucho cuidado y cariño sus dos amigos la limpiaron con pañuelos de papel y la ayudaron a vestirse, cuando estuvo más recuperada los tres salieron del almacen.

-Os echaré de menos chicos.

Asuka se puso de puntillas para darles un pequeño beso en los labios a cada uno a modo de despedida y después se fue corriendo hacia el barco donde tenía que subir cargando con dos de sus maletas. Los dos chicos la despidieron con gestos con su mano tristes de haber perdido a una chica tan sensual.

-Si que tardaste Asuka. Dónde te habías metido?

Le preguntó Kaji sonriendo que la esperaba en las escalinatas del barco.

-Lo siento Kaji, me restrasé pero ya estoy aquí!

Dijo la muchacha alegremente mientras se agarraba a uno de los brazos del hombre al que adoraba.

-Jejejeje está bien pequeña, vámonos o se nos hará tarde.

Tras esto los dos se subieron al barco que ya llevaba en la cubierta el Evangelion de Asuka listo para ser transportado.

Casa de Misato

-Dentro de unos días vas a tener una nueva compañera piloto.

Le dijo Misato a Shinji de golpe nada más despertar y salir de su habitación aún vestida con la ropa de dormir.

-Mmmmm?

Con los ojos muy abiertos el chico la miró sorprendido mientras tenía una tostada en la boca.

-Una nueva compañera?

Preguntó tras dejar la tostada a medio comer en el plato.

-Si, me avisaron ayer en Nerv, no te dije nada por que estabas dormido cuando llegué a casa. Hace días que ha salido de Alemania con su Evangelion, llegará aquí dentro de poco.

Explicó la mujer a su compañero de piso mientras se servía el desayuno.

-Oh! Es una gran noticia... supongo...

Dijo bastante confundido

- Tú siempre ta expresivo.

Le dijo Misato riéndose mietras recogía su desayuno y se iba a trabajar ya que se le hacía tarde.

Instituto

Nada más entrar por la puerta de su clase Shinji observó quienes estaban presente buscando a su compañera de pelo azul Rei Ayanami, la vió sentada como siempre en su pupitre mirando por la ventana de al lado con la cabeza apoyada en una mano.

-Hola Ayanami, Buenos días.

La saludó poniéndose de pié a su lado.

-Buenos días Ikari-kun.

Le devolvió el saludo con su voz suave y mirándole con esos ojos rojo intenso.

-Sabías que vamos a tener una nueva compañera piloto?

Le preguntó con una sonrisa.

-Si, Ikari-kun, fuí informada ayer por el comandante.

Mientras los dos jóvenes pilotos hablaban sobre temas de su trabajo tres chicos alumnos de su clase veían la escena desde la otra esquina de la clase, uno sentado en su mesa y los otros dos de pié junto a él.

-Es cierto que le pediste salir a Ayanami?

Preguntó uno de los chicos que estaban de pié que llevaba el pelo rapado al cero con un tono gris.

-Si, así es.

Respondió el que estaba sentado, rubio de pelo corto que no paraba de mirar a la chica de piel pálida.

-Y que te dijo?

Se interesó el que le había hecho la pregunta.

-No dijo nada, simplemente pasó de mi sin ni siquiera mirarme.

Dijo con desagrado torciendo el gesto.

-Conozco a ese tipo de chicas, se creen unas ídolos, nunca hablan con nadie por que se creen mejores que los demás.

El tercer chico, que era el más alto y fuerte de la clase y llevaba el pelo engominado de punta habló mientras miraba a Rei con los brazos cruzados.

-Si, alguien debería darle una lección!

Dijo el chico al que no había hecho caso la piloto mientras jugaba distraidamente con un lápiz.

-En serio piensas eso?

El chico más fuerte miró a su compañero de reojo en un tono de voz como si tuviera una idea.

-Mmmm por qué? Sé te ocurre algo?

Dijo el del pelo rapado.

-Puede ser, mirad...

Los tres compañeros se pusieron a hablar en voz baja entre ellos echando miradas nerviosas alrededor suya para asegurarse de que nadie se daba cuenta de lo que hablaban.

-Qué te parece que venga una nueva piloto Ayanami?

Le preguntó Shinji a Rei intentando continuar la conversación. Rei simplemente se encogió de hombros para volver a mirar por el cristal que daba al exterior.

-Me pregunto como será esa chica.

Pensó el piloto.

Océano Pacífico

La noche era estrellada y ninguna nube tapaba a las estrellas y para ser todo perfecto la luna estaba redonda y grande. Ryouji Kaji estaba tumbado boca arriba en la cubierta del portaaviones disfrutando de la brisa nocturna cuando la cara sonriente de una chica tapó a la brillante luna.

-Hola Asuka, no deberías estar en tu camarote durmiendo?

Le dijo con una sonrisa pero sin mirarla directamente a los ojos.

-No podía dormir, estoy algo inquieta por llegar a Japón.

Le confesó Asuka.

-Vaya, tú confesando debilidad? eso es nuevo.

Le respondió sonriendo algo irónico.

-No seas idiota Kaji! No estoy nerviosa, solo algo inquieta!

La chica fingió estar enfadada con el hombre al que idolatraba dándole una pequeña bofetada para despues acariciarse la mano pues su barba de tres días rascaba.

-Anda, te acompañaré al camarote, debes estar descansada para cuando llegues.

Levantándose puso una mano sobre el hombro de Asuka guiándola hasta las estancias del barco pese a las protestas de esta.

-Pero Kaji! Es aún muy temprano!

Se quejó Asuka ya en su camarote.

-Nada de eso, hasta que lleguemos a Japón yo soy tu tutor y es mi deber cuidar y velar por ti.

Respondió impasible apoyada la espalda en la puerta de la habitación y cruzado de brazos.

- Vaaaaale, pero quédate hasta que me quede en cama si?

La pelirroja guiñó un ojo alegremente y se metió en un anexo rápidamente. El hombre sonrió para sus adentros, durante el viaje todos los días había intentado seducirle con mil y una tácticas, pero el era un adulto y ella solo una niña y era lo suficientemente responsable como para no caer en las trampas de la astuta piloto de ojos azules, aún así le hacía gracia pensar que se le ocurriría ahoras.

Kaji se quedó con los ojos muy abiertos cuando la vió volver al cuarto. Se había quitado los conectores que recogían su pelo y llevaba la melena suelta, tan sólo iba vestida con una camiseta de asas blanca que se ajustaba mucho a su cuerpo y que no llegaba a cubrir el ombligo dejando ver su vientre plano sin pizca de grasa. Por abajo solo llevaba unas braguitas de niña color blanco con un osito dibujado por delante, esa prenda íntima le quedaba un poco apretada y marcaba sus labios vaginales y sus nalgas que medio cubría por detrás.

-Creo que ya es hora de que me vaya a dormir.

Dijo sonriendo, sabiendo perfectamente lo que hacía abrió las sábanas de su cama, para hacerlo tuvo que inclinarse dejando ver al hombre una gran vista de su culo apenas cubierto por aquellas bragas infantiles.

-Te está provocando, no le hagas caso...

Oía el hombre en su cabeza, pero sus ojos estaban fijos en aquellos glúteos redondos y salidos sin ninguna imperfección en la piel más clara que la de él. Tragó saliva mientras sentía que algo latía en su entrepierna.

Asuka por su parte se tumbó en cama sin taparse, flexionó la pierna izquierda dejando la rodilla hacia arriba y la derecha hacia el lado exterior quedando con las piernas bien abiertas para que pudiera ver su entrepierna, con un dedó llevó un mechón de su cabello naranja a sus labios acariciándoselos mientras miraba fijamente al hombre que deseaba.

-Al final lograste lo que querías...

El hombre del pelo recogido en la coleta se rindió suspirando con una sonrisa y desanudó su corbata y su camisa descubriendo su musculado torso, después hizo lo mismo con su cinturón y pantalones hasta quedarse en calzoncillos que ya mostraban un enorme bulto dentro de la tela que de inmediato fue descubierto al quitárselos. Su pene era largo y quizá no tan ancho, era curvado ligeramente hacia arriba en la punta despejada formando un arco.

-Pero si yo no hice nada

Dijo Asuka con una voz inocente y sexy mientras seguía jugando con su pelo y movía sus piernas algo emocionada por lo que iba a pasar. Kaji se sentó al lado suya en su cama y comenzó a pasar el dedo índice de su mano derecha entre los marcados labios vaginales de ella.

-Bonitas bragas.

Le susurró sonriendo.

-A mi no me gustan, quítamelas.

Pidió Asuka sonrojada y excitada. El hombre le hizo caso y tomando con sus dedos los bordes de la prenda la retiró hacia abajo sacándosela por los pies y tirándol al suelo del camarote. A continuación continuó frotando su dedo, ahora en la entrepierna desnuda hasta que lo introducjo dentro sintiendo el húmedo y caliente interior.

-Kaji, este es el momento más feliz de mi vida, he deseado tanto hacerlo contigo...

Susurró la pelirroja cerrando los ojos y moviendo la cabeza de lado a lado al sentir el dedo del hombre metiéndose en su sexo.

-Está bien Asuka, pero sólo será esta vez, ya es suficiente el riesgo que corro al estar contigo ahora.

Dentro de su vagina movía el dedo en círculos masturbándola, cuando lo saco estaba brillante de los fluidos de la chica y lo llevó a su boca para chuparlo.

-Sabes muy bien Asuka.

Le dijo, la chica le sonrió sonrojada. Luego el la tomó de los tobillos con sus manos y cargó sus piernas sobre sus hombros, con su mano derecha dirigió su largo pene a la entrada de la vagina de Asuka.

-Preparada o no te la voy a meter.

Kaji cumplió su "amenaza" y comenzó a introducir su pene dentro de la vagina, la chica suspiró al sentir el miembro de su hombre deseado penetrándola, rozándose contra las paredes de su sexo.

Para que sus piernas no se cayesen de la fuerza de sus embestidas las agarró de los tobillos teniéndolas aún sobre los hombros y empezó a follarla con un ritmo bastante acelerado. Ambos jadeaban y Asuka tuvo que taparse la boca con una mano para no hacer demasiado ruido ya que física y emocionalmente estaba muy excitada, gracias a la camiseta sus pechos no botaban y su sexo se humedecía cada vez más y más sacando fluidos en las perforaciones de Kaji que manchaban la cama. El hombre se relamía del esfuerzo y su torso musculado brillaba del sudor, caliente por lo que estaba haciendo.

-Puedo?

Preguntó el hombre de coleta en un susurro mientras sacaba el pene del sexo de la chica y sin cambiar de posición lo pegaba a la entrada de su pequeño ano.

-Si Kaji, quiero sentirte en cada centímetro de mi piel.

Le respondió Asuka con algo de miedo ya que pensaba que el gran pene de su amor podría lastimarle el culo, pero lo deseaba demasiado como para negárselo.

Con gran esfuerzo comenzó a introducírselo separándole más las piernas para que todo entrase, ella se tapó la boca con mucha más fuerza cerrando los ojos para resisitir la incómoda sensación de tan duro trozo de carne abriéndose paso en su culo.

-Asuka... es tan estrecho... me encanta tu culo...

Jadeaba el hombre adulto mientras sacaba poco a poco su erecto miembro sin haberlo metido del todo, para después volver a entrar en ella con un poco más de velocidad buscando abrir su culo.

-Ka...Kaji qu... que rico... se... se siente.

Consiguió decir la pelirroja con gran esfuerzo mientras sudaba intentando aguantar todo el pene dentro de ella.

Estuvieron así durante un rato, cada vez Kaji conseguía penetrarla con más velocidad y facilidad y a su vez Asuka sentía menos dolor y disfrutaba.

-Cambiemos de postura.

Sugirió Kaji, y sin esperar respuesta se sentó en el borde de la cama con los pies en el suelo cargando con Asuka que pasó su brazo izquierdo por el cuello del hombre para apoyarse mientras este tenía aún metido su pene en su culo.

-Salta Asuka.

Le ordenó bastante excitado, ella obedeció y comenzó a saltar siendo ella quien marcaba el ritmo de las penetraciones gimiendo cada vez que caía sobre el duro miembro. Kaji pasó su mano derecha por la espalda y la sacó entre el brazo y el cuerpo de la chica agarrando su pecho derecho y lo apretó con ganas. Su otra mano la llevo al sexo abierto de Asuka y comezó a frotárselo haciendo que se humedeciese con rapidez. El fluido de la chica caía manchando el pene que penetraba su ano mientras Kaji pellizcaba su pezón sobre la ropa.

-Ahhhhhhhh...!

Kaji tuvo que callarle la boca con un beso cuando sin poder contener el orgasmo gritó de placer, sus jugos cayeron por todo el suelo del camerino manchando las piernas fuertes del hombre, cuando estuvo algo más tranquila terminó el beso y sacándole el pene del ano le indicó que se arrodillase delante de él entre sus piernas.

-Yo también estoy a punto de correrme, y quiero hacerlo en tu hermosa cara.

Dijo excitado mientras masturbaba su pene con la mano derecha apuntando con su punta a la cara de la chica.

-Como quieras Kaji.

Le respondió sumisa mirándole inocentemente a los ojos con los suyos azules y las manos sobre sus piernas.

-Ahhhhggg!!!

Sin ya aguantar más ante la visión que tenía delante de él su pene expulsó cinco chorros espesos de semen que cayeron a lo largo de la cara de la chica que cerró los ojos al sentirlos, estos gotearon viscosos hasta sus pechos cubiertos por la camiseta.

-Bufff.. Ha estado genial... Ahora creo que deberías ducharte y dormir, yo iré a mi cuarto a hacer lo mismo.

Dijo cansado pero satisfecho para luego levantarse y vestirse a toda prisa. Asuka se levantó y caminó hacia la ducha dedicándole una sonrisa a Kaji cuando este palmeó su desnudo trasero al pasar por su lado. El hombre abandonó el camarote dirigiéndose al suyo sin darse cuenta de que un marinero le observaba, habiendo estado escondido vió todo a través de una ranura de ventilación.

Nerv

-Date prisa Misato o llegaremos tarde!

Gritaba la Doctora Ritsuko a la puerta del despacho de Misato mientras golpeaba impacientemente la puerta con el puño. Ritsuko iba vestida con un traje de noche negro muy formal con una abertura en su lado izquierdo de la falda que dejaba ver su pierna cubierta por medias negras. Su cuello iba decorado con un collar de oro a juego con sus pendientes y se abrigaba con una rebeca púrpura que no cubría sus hombros.

-Ya voy! Ya voy! Es este maldito vestido, debe haberse encogido al lavarlo!

Dijo enfadada saliendo de su despacho vestida con un traje rojo de una pieza que le quedaba bastante ajustado e intentaba estirarlo con las manos.

-Ese vestido no encogió Misato, eso son las consecuencias de tanta cerveza que bebes!

Le reprochó su amiga.

-Ritsuko!

La mirada que le dedicó Misato podría hasta matar.

-Anda déjate de tonterías y vámonos, llegaremos tarde a la despedida de soltera de Aiko.

Ambas mujeres se dirigieron al garaje de Nerv vestidas para la ocasión, se subieron al coche de Ritsuko ya que ella no iba a beber y salieron a gran velocidad ya que el trabajo las había entretenido hasta tarde.

-Pasado mañana llega el nuevo Evangelion y la nueva piloto.

Comentó la mujer rubia sin perder de vista el tráfico de la ciudad.

-Si? Eso es con un día de antelación de lo que esperábamos.

Dijo Misato asombrada de la prisa que se habían dado.

-Y adivina quien más viene con ellos.

La Doctora sonrió con bastante picardía al saber ya de antemano como podía reaccionar su amiga ante la noticia que le iba a dar.

-Quién?

Preguntó la mujer de pelo largo y oscuro mirando a la otra deseosa de saber.

-Kaji.

Le respondió simplemente con una sonrisa meléfica.

-QUÉEEEEEEEEE!!!!????

Ritsuko tuvo que dar varios volantazos para no chocar del susto que le dió el grito de Misato muy cerca de su oido.

-CÓMO QUE VA A VENIR ESE ÍMBECIL!!!!????

Gritó desesperada.

-Tranquilízate Misato, no seas niña!

Le regañó la mujer rubia una vez dominado el automóvil.

-Creía que algo de cariño le tenías aún después de lo vuestro.

Continuó la doctora.

-Después de cómo me dejó? No, lo siento, no tengo ninguna gana de verle.

Misato se cruzó de brazos enfadada mirando por la ventanilla.

-Pues vas a tener que verle, tienes que recibir a la nueva piloto al portaaviones antes de que llegue.

Una gota grande de sudor apareció en la cabeza de Misato.

-Ya llegamos.

Anunció Ritsuko frenando el coche. Ambas mujeres se bajaron y entraron al club donde se iba a celebrar la fiesta.

Nerv

-Gracias por hacerme compañía chicos.

Dijo Shinji dejando en la mesa de la cocina dos platos de comida para sus amigos.

-De nada! Siempre se agradece una cena gratis! Jajajajaja!

Riendo Touji atacó la comida que habían dejado encima de la mesa para él con ganas.

-A dónde fue Misato-san Ikari?

Quiso saber Kensuke mientras miraba divertido a su compañero de chándal que se estaba atragantando por comer tan rápido.

-A una fiesta de una amiga o algo así creo... De todas formas se lo merece, siempre está trabajando y ya era hora de que se divirtiera por ahí.

Le explicó mientras se sentaba a la mesa junto a los otros dos para cenar.

-Si, a saber que tipo de diversión!

Dijo Touji con cara pervertida y sonrojándose después de haber tosido y bebido agua.

-Que cosas dices!

Le dijo Shinji aparentando estar escandalizado pero algo culpable porque él también pensaba esas cosas. La cena transcurrió animada y los dos amigos felicitaron al piloto por lo buena que había estado la comida, le ayudaron a limpiar los platos y recoger la mesa y después se fueron al salón a jugar videojuegos.

-Os habeis enterado del último cotilleo?

Preguntó Kensuke mirando atentamente al televisor y pulsando los botones del mando de la consola.

-No me digas que te has convertido en una maruja Kensuke!

Dijo Touji mirando la pantalla con la lengua fuera y haciendo movimientos exagerados con las manos mientras jugaba.

-Hiroshi le pidió salir a Ayanami y ella pasó de él.

Contó el chico de gafas ignorando el comentario de su amigo.

-En serio?

Shinji estaba sorprendido con la noticia.

-Bueno, no me extraña, Ayanami sólo tiene ojos para ti Ikari.

Dijo Touji riendo mirándole de vez en cuando con diversión.

-Eso no es cierto!

Protestó el piloto sonrojándose.

-Tienes que reconocer que eres con el único que habla.

Dijo Kensuke no para fastidiarle, si no como para exponerle un hecho rigurosamente cierto.

-Eso es por que paso con ella más tiempo que nadie al ser los dos pilotos.

Se justificó Shinji. La partida duró horas hasta que a todos les entró el sueño, los amigos de Shinji se despidieron de él hasta el día siguiente agradeciéndole una vez más su hospitalidad, el hizo lo mismo por su compañía. Cuando estuvo solo se preparó para irse a dormir no sin antes haberle dado a Pen-Pen su última comida del día. Estaba ya por entrar en su habitación cuando escuchó la puerta del apartamento abrirse.

-Si que se me debe haber hecho tarde! Misato ya llegó!

Pensó yendo a recibirla.

-Hola Misato-san, te lo has pasado bien?

La saludó pero la mujer que entró tambaleante no le respondió, por su aspecto parecía que estaba bebida y el joven se resignó pensando que ella nunca aprendería cuando tenía que parar de beber. Shinji la siguió con la mirada hasta que esta entró en su habitación y se oyó el ruido de un cuerpo cayendo. Como había dejado la puerta abierta el chico se acercó a asegurarse de que no se había hecho daño. Cuando entró la vió tirada cerca de su cama, ya dormida y roncando, el traje se le había subido hasta la cintura dejando ver unas bragas rojas de encaje lo que hizo sonrojar mucho al muchacho.

-Misato...Misato...Misato...!

Intentó despertarla para que se desvistiera y se metiese en su cama, pero estaba muy borracha y no daba resultado. Se había arrodillado a su lado y tenía una buena vista de su culo que lo miraba embobado, antes de que el pudiese darse cuenta bajo sus pantalones cortos se notaba una erección. Como movida por una fuerza invisible su mano derecha se acercó poco a poco a su culo y lo rozó con los dedos, la suave sensación de su piel le excitó aún más y decidido le manoseo el gran glúteo con toda la mano abierta.

-Ohhh...

Con la cara roja como un tomate se sacó el pene por el pantalón para masturbase con la mano izquierda mientras tocaba con la derecha, cada vez más animado se atrevió a bajarle las bragas para desnudarle el culo y pasar sus dedos entre sus nalgas notando lo carnosas y redondas que eran.

De repente Misato se movió pasando de estar de lado a boca arriba. Shinji casi se muere del susto de ser descubierto pero para fortuna de él la mujer siguió dormida.

Aprovechando su nueva postura, ya que no podía seguir tocándole el culo el chico se puso frente a ella y bajó la cabeza hasta tenerla entre las piernas de la mujer que estaban abiertas con su sexo visible ya que le había quitado su ropa íntima. Al tener la cara tan cerca de su vagina se excitó más al notar el olor a entrepierna de mujer que desprendía y tímadamente sacó su lengua para lamerla de arriba a abajo, cosa que continuó haciendo una y otra vez cada vez con más ganas ya que le parecía deliciosa. Con la mano derecha se masturbaba a gran ritmo y con la izquierda se apoyaba en el suelo para sostenerse mientras devoraba ansionso la vágina de la mujer que se iba humedeciendo por la saliva.

-Oh!

Como poseido por un instinto salvaje Shinji posó sus dos manos a los lados de la mujer y de una decidida embestida la penetró de golpe, el chico se quedó sin respiración por ver si la mujer despertaba.

-Oh!

Al ver que no depertaba sacó su pene y lo volvió a meter en ella, se sentía delcicioso en el calor de la vagina y jadeaba fuerte muy sonrojado. Poco a poco fue aumentando el ritmo de sus penetraciones, no podía creerse que se estuviera follando a su tutora, una mujer hermosísima y del doble de su edad.

Con todas sus fuerzas arremetía contra ella haciendo un ruido peculiar al chocar sus entrepiernas, tan convencido estaba de que no iba a despertar que abrió su vestido descubriendo su sujetador a juego con sus bragas. Bajó sus copas sin quitarlo y manoseó las grandes tetas de Misato de pezón rosa sin creerse aún la suerte que tenía. Se tiró sobre su cuerpo más grande que el de el y comenzó a besar y lamer sus pechos mientras seguía uniendo sus genitales a los de ella a gran ritmo.

-Mierda!

Al sentir que se corría salió de ella ya que no podía dejar ninguna prueba de lo que había pasado, tapándose la boca para no gemir demasiado eyaculó sobre el suelo de la habitación formando un charco blancuzco y espeso. Cuando acabó se quedó de rodillas un momento respirando fuerte y recuperándose mientras sudaba en abundancia, no se pudo resistir a tomar con un dedo algo de su semen y frotarlo en los labios de Misato metiéndole el dedo dentro de la boca para que lo chupara inconscientemente, cosa que hizo y que provocó la sonrisa del muchacho que se inclinó hacia ella para darle un beso en los labios. Después le volvió a acomodar la ropa para dejarla tal y como estaba y con pañuelos de papel limpió el suelo del semen, sudor y saliva que había.

Una vez en la cama se deprimió arrepintiéndose de haberse aprovechado de Misato en esa situación y tardó en dormise por el remordimiento y esperando que ojalá ella nunca se diese cuenta de lo que pasó.

Océano Pacífico

Asuka caminaba alegremente con una sonrisa en los labios por los pasillos del portaaviones. Iba en busca de Kaji, el hombre con el que la noche anterior había follado, solamente quedaban dos días para que llegasen a Japón, y aunque él le había dicho que solo lo harían una vez esperaba convencerlo de que podían disfrutar juntos más veces.

-Disculpa! Disculpa! Espera!

La chica se paró en seco al darse cuenta de que se dirigían a ella, era uno de los muchos marineros que iban con ellos en la flota que custodiaba al Evangelion y a su piloto.

-Si? Qué quieres?

Preguntó con curiosidad al hombre que la había alcanzado, debía ser algo importante porque vino corriendo y ahora recuperaba el aliento apoyando sus manos en sus rodillas.

-E... Eres Asuka verdad?

Dijo entrecortadamente el hombre vestido de blanco.

-Si, esa soy yo!

Respondió orgullosa la muchacha por lo conocida que era. El hombre no le respondió, solamente sacó del bolsillo de su pantalón un teléfono móvil y le acercó la pantalla, Asuka miró por curiosidad que era aquello y vió con horror una grabación a través de una rejilla de ella y Kaji teniendo sexo.

-Pero qué?!

Asuka se quedó sin palabras al ver aquello, estaba nerviosa, asustada y enfurecida a la vez.

-Tranquila chica, no tienes nada que temer, pero sabes que esto podría traer problemas, sobretodo a tu acompañante verdad?

Le dijo el marinero con una sonrisa tranquila. Ella iba a responderle pero se mordió la lengua al comprender que lo que decía era cierto.

-Verás, hagamos un trato, haz lo que te pido ahora y borraré el video y no se hablará más del tema.

Propuso el hombre mirándola con intensidad.

-Está bien... que quieres que haga?

Murmuró Asuka con la cabeza baja mirando al suelo.

-Por ahora solo sígueme.

El hombre tomó a la chica del hombro y la guió caminando por el barco asegurándose de que nadie los viera, ella iba triste con la mirada perdida pensando en el daño que podría hacer esa grabación, finalmente llegaron delante de la puerta de un camarote que abrió y dejó pasarla a ella primero.

-Vaya... qué tenemos aquí?

Dijo divertido un marinero que estaba dentro del camarote. La estancia estaba llena de humo de cigarros y sobre una mesa que rodeaban dos hombres había cartas de baraja y botellas de licor.

- Pues lo qué os prometí.

Dijo el marinero que había llevado a Asuka a los otros dos haciéndola entrar empujando sus hombros por detrás.

-Es mejor de lo que nos habías dicho.

El que primero había hablado recorrió el cuerpo de Asuka de arriba a abajo deleitánose. La pelirroja iba vestida con unos vaqueros azules casi grises muy ceñidos a su cuerpo y un top rojo de asas, miraba hacia otro lado muy triste mientras movía sus manos nerviosa.

-Acércate chica.

Ordenó el hombre que estaba sentado haciendo un gesto con la mano, al ver que Asuka no reaccionaba el que estaba detrás de ella le enseñó de nuevo el móvil con la grabación, con desagrado la chica se acercó hasta el marinero que la había llamado.

-A tu edad no deberías vestir así, sabes?

Dijo con agradable lujuria, tomándole por la cintura le dió la vuelta haciendo que le diera la espalda y miró fijamente su culo que estaba muy marcado en la tela vaquera y no dejaba nada a la imaginación. Sin ningún reparo el hombre posó sus manos en su trasero y comenzó a masajear con los dedos el tierno culo de la pelirroja, esta se sonrojó apretando labios y puños sin atreverse a moverse.

-Inclínate un poco guapa.

Asuka obedeció y se inclinó hacia delante, el hombre que seguía sentado aprovechó para meter cuatro dedos de su mano derecha con los que empezó a frotar la entrepierna de la chica y con su pulgar apretaba su culo. La pelirroja cerró los ojos con desagrado al sentir la mano de aquel hombre, aunque no lo veía con su mano izquierda se tocaba un bulto que había en sus pantalones blancos*

-Ahora quiero que te quites los pantalones.

Le ordenó tranquilamente frotando sus manos en sus rodillas flexionadas.

-Qué?!

Asuka se dió la vuelta para mirar al hombre espeluznada, aquello estaba empezando a ir demasiado lejos.

-Creo que no tienes más remedio niña.

Le recordó el tercer marinero que todavía no había hablado y observaba todo con las manos dentro de los pantalones y apoyado en una de las paredes del pequeño camarote.

Maldiciendo para si misma la pelirroja se desabrochó los pantalones y comenzó a bajárselos con dificultad debido a lo apretados que estaban. El hombre observaba todo relamiendose y sin perder detalle de como se desnudaba la chica. Finalmente se los bajó del todo dejando ver su ropa interior, un tanga de hilo negro muy sexy.

-Es una ropa interior muy provocativa para una niña.

Susurró encantado con lo que veía, a continuación se bajó pantalones y calzoncillos hasta el suelo dejando ver su pene en completa erección y palpitando su glande rojo e hinchado.

-Creo que ya sabes lo que tienes que hacer.

Le dijo con una sonrisa torcida mientras ponía su mano derecha sobre la cabeza anaranjada de Asuka y empujaba hacia abajo. En contra de su voluntad la chica se arrodilló y acercó su cara al miembro del marinero. Con asco abrió un poco la boca e inclinó la cabeza hasta que metió la punta del pene entre sus labios que cerró al igual que susn ojos para no ver lo que estaba pasando, con lentitud se fue moviendo de delante para atrás haciéndole una mamada a ese hombre.

-Ahhhhhhh!

Este abrió más sus peludas piernas para que su miembro pareciese más grande mientras Asuka se lo chupaba.

-Mira que hermosa vista.

El que había traido a la pelirroja hasta el lugar habló al marinero que estaba apoyado en la pared llamando la atención sobre el culo de la chica. Al haberse arrodillado su culo quedaba hacia afuera muy abultado y el diminuto hilo del tanga no podía tapar ni su ano ni sus labios vaginales, este pasaba por el medio pero se veían claramente sus genitales.

-Yo no aguanto más!

El hombre que había hablado se arrodilló detrás de Asuka y se quitó los pantalones precipitadamente, con los dedos índice y pulgar de la mano derecha agarró el hilo del tanga y lo movío poniéndolo sobre su glúteo derecho despejando así sus nalgas, posó su pene en la entrada del ano rosa y sin ningún tipo de cuidado se lo metió por el culo dando un gemido de placer.

-Ahhhhhh!

El hombre que estaba sentado gimió echando la cabeza hacia atrás. Cuando el otro hombre la penetró por su ano Asuka abrió mucho los ojos y echó la cabeza hacia delante por incercia haciéndole la mamada mucho más profunda. En un desesperado intento por escapar la pelirroja apoyó sus manos sobre las rodillas del hombre que tenía delante y empujó.

-Vamos, no me digas que no te gusta, se que lo disfrutas al igual que el la grabación.

Le dijo al hombre que estaba recibiendo sexo oral, poniendo sus dos manos sobre la cabeza de Asuka le obligaba a seguir un ritmo en su felación comoenzando a escurrir saliva de su boca hacia su mentón. Ella entrecerró los ojos y dejó caer sus brazos consciente del inútil esfuerzo. Mientras por detrás el otro hombre jadeaba y sudaba agarrando con sus manos las nalgas de la chica las apretaba mientras embestía una y otra vez duramente para follarle el culo, cada vez que la metía se escuchaba el ruido de sus caderas golpear sus nalgas.

-Tengo curiosidad de como son tus tetas...

Quitándole las manos de la cabeza el marinero le subió el top sin quitárselo descubriendo sus pechos algo brillantes del sudor que ya recorría su cuerpo.

-Que ricas son!

Con sus manos masajeó sus pechos deformándolos como si fueran silicona, apretándolos, acariciálndolos, pellizcando y apretando sus pezones rosas, Asuka bajaba la mirada sonrojada a ver lo que hacía. El hombre de atrás pegó su cuerpo a la espalda de ella y pasó su mano derecha para aferrarla al pecho del mismo lado de la chica, penetrándola por detrás cada vez sacando menos el pene forzando su ano aún sin acostumbrar, con sus dedos jugaba con el pequeño pezón de la pelirroja retorciéndolo y estirándolo. Asuka sudaba abundantemente debido al agobio que le producían los dos cuerpos adultos de los hombres que la tenían atrapada.

-Ahhhhhhggggg!!!

Poniéndosele la cara muy roja el hombre que estaba sentado gritó aferrándose de nuevo a la cabeza de Asuka con las manos haciendo que esta chupara todo lo que pudiera de su pene forzando su boca hasta límites insospechados. Ella golpeó sus rodillas con sus puños para que quitara el pene ya que temía que la ahogase cuando sintió tres chorros de esperma salir despedidos directamente a su garganta. Ya habiéndose corrido el hombre dejó de hacer fuerza y Asuka pudo sacarse el miembro de su boca, apoyando sus manos en el suelo y quedando del todo horizontal tosió echando restos del semen. El otro hombre que estaba detrás aprovechó la nueva postura de la chica para apoyar sus pies en el suelo y aferrándose a su culo darle con más intensidad mientras seguía tosiendo agitaba por las embestidas.

-Como fue?

Preguntó divertido el marinero que todavía no había intervenido al que acababa de eyacular.

-Ahhhh... genial!

Dijo este reposando en su silla mientras se abría un poco la camisa dándose aire con la palma de la mano para aliviar el calor que sentía, su pene, ahora flácido, seguía goteando al suelo saliva y semen. Delante de él Asuka daba pequeños gritos con los ojos cerrados mientras le seguían dando por detrás.

-No vas a participar?

Preguntó agitado el hombre sentado.

-Si, en cuanto acabe él con ella.

Dijo señalando al hombre que sodomizaba a Asuka. Como si hubiese sido una señal predeterminada este inrodujo todo el pene el el ano de la chica y eyaculó abundantemente hasta que salió de ella, este se fue hacia atrás dejando a la pelirroja acostada en el suelo de lado, respirando con fuerza, con los ojos sin abrir mientras de su ano salía el líquido espeso y blanco que manchaba sus nalgas hasta formar un charco en el suelo.

-Eres una niña preciosa...

El marinero que había permanecido observando todo puso a Asuka boca arriba en el suelo y se colocó apoyando sus rodillas a los lados de ella quedando así casi sentado encima de la chica, con su mano derecha acarició su mejilla izquierda que ardía.

-Por..por favor... dejadme marchar ya... estoy muy cansada.

Suplicó la pelirroja jadeando haciendo que sus pechos se hinchase, el hombre parecía no oirla mirando con satisfacción sus tetas. Sin decir nada se desabrochó el pantalón y dejó salir su erecto pene que dirigió enseguida hacia el sexo de la chica. Asuka miró hacia otro lado con cara triste. Poco a poco el hombre fue introduciendo su pene en la vagina de ella inclinándose hacia delante y posando sus manos sobre el suelo cerca de la cabeza de ella, en esa postura empezó a empujar follándola.

-Realmente preciosa...

Murmuraba mientras la embestía con esfuerzo viendo con delicia como sus pechos botaban al estar libres del top, su vagina se iba humedeciendo haciendo más fácil la penetración por parte del hombre. Mientras la follaba los otros dos marineros recogían y limpiaban el lugar.

-Probemos algo nuevo.

El hombre ladeó a Asuka y se puso acostado también de lado tras ella, con su mano izquierda agarró la pierna izquierda de ella y la levantó lo más que pudo para penetrarla en esa postura, con su otra mano manoseaba las tetas de la chica y al tener las cabezas tan juntas aprovechó para darle un beso metiendo la lengua, Asuka le miraba con los ojos entrecerrados pero no hacía nada por mover su propia lengua. Así estuvieron follando durante un buen rato hasta que el hombre anunció que iba a eyacular.

-Es una pena que no pueda correr el riesgo de correrme dentro de ti!

Gritó y con esfuerzo puso a la chica de nuevo en el suelo boca arriba, sacando su pene de su sexo lo guió con su mano hasta apuntar a sus pechos los cuales cubrió rapidamente con el viscoso esperma, una vez acabó la eyaculación limpió la punta de su pene con el vientre plano y sudoroso de Asuka. El marinero usó sus manos para extender el semen por el torso de la pelirroja haciendo que este brillase aún más, finalmente con diversión pasó sus manos manchadas por la cara de Asuka haciendo que esta también brillase de suciedad. La chica permaneció cayada e inmóvil temiendo que le pidieran algo más.

-Bueno, como prometí ya puedes irte.

El marinero que la había traido le enseñó el móvil para que viera como borraba el video con el que la habían chantageado, al asegurarse de que ya nada les involucraba ni a ella ni a Kaji, Asuka se vistió con rapidez y abandonó el camarote para irse corriendo al suyo, ducharse y encerrarse allí para no voler a tener que cruzarse con ninguno de aquellos tres hombres, solo saldría cuando hubiesen llegado a Japón.

Instituto

-Pues claro que iré Shinji!

Gritó Kensuke emocionado cuando el piloto preguntó a sus amigos si querían ir con él a recibir al nuevo Evangelion y a su piloto el día siguiente. Al chico de gafas le encantaba la tecnología, en especial la militar y sobretodo los Evas.

-Bueno, si vais todos yo también iré.

Dijo Touji mientras se quitaba los pantalones del chándal. Estaban en los vestuarios masculinos donde todos los chicos de su clase se preparaban para empezar la clase de gimnasia. Shinji miró a su amigo con una sonrisa ya que sabía que le motivo real por el que iba a ir era para poder ver a Misato.

-Genial, entonces mañana estad en mi casa a primera hora.

Cuando salieron a la cancha de deportes antes de empezar la clase Shinji buscó a Rei y fue a junto de ella.

-Ayanami, vendrás mañana a recibir a la nueva piloto?

Le preguntó alegremente el chico a la piloto de pelo azul que ya se había cambiado de ropa y lucía el uniforme deportivo reglamentario que consistía en una camiseta algo ajustada color blanco con las letras "2-A" bordadas, shorts negros que marcaban sus nalgas y zapatillas blancas. El uniforme parecido era similar solo que con shorts más anchos y largos.

-No Ikari-kun, no iré.

Le respondío friamente con voz delicada.

-Por qué no?

Quiso saber el chico.

-Tengo que estar en el laboratorio con el Comandante todo el día.

Le explicó simplemente.

-Vamos chicos, comenzaremos por unas vuelta a paso ligero por todo el recinto!

Shinji iba a seguir preguntando a Rei cuando el profesor de gimnasia dió la orden de empezar la clase, así que se fue junto a sus amigos para iniciar el calentamiento mientras Ayanami también empezaba a correr por el lugar al igual que todos los demás alumnos.

Cuando pasaron cerca del antiguo gimnasio tres de los alumnos se quedaron rezagados y asegurándose de que no les viese nadie entraron dentro del edificio sin uso.

Esperaron pacientemente hasta que Rei dió una segunda vuelta, pasaba sóla por el lugar como siempre ya que nunca tenía compañía en las actividades escolares y aprovecharon eso para llamarla.

-Ayanami, ven aquí, el profesor nos a ordenado coger unos utensilios para la clase y dijo que nos ayudaras.

Dijo un estudiante de pelo rapado tranquilamente llamando la atención de la chica de ojos rojos. Esta se paró y caminó hacia el gimnasio. Los tres chicos sabían que la chica siempre obedecía las ordenes de los profesores y diciéndole que le habían mandado algo obedecería.

Cuando entró al lugar vió varios instrumentos de gimnasia viejos así como colchonetas apiladas y redes con pelotas de varios deportes, el chico que la había llamado cerró la puerta del lugar asegurándola con un candado, pronto Rei quedó rodeada por sus tres compañeros que la miraban sonriendo.

-Que es lo que tenemos que llevar?

Preguntó la chica sin darse cuenta todavía de que era una trampa.

-Tranquila, todo a su tiempo.

Riendo el chico de pelo al cero se acercó a ella y con su mano izquierda apretó el seno derecho de Rei por encima de su ropa. Esta le miró mal y sin decir nada dió dos pasos hacia atrás cuando sintió que unos brazos la rodeaban por el abdomen.

-Suéltame.

Dijo sin elevar su voz que parecía tranquila y mirando a un chico rubio que era quien la había apresado con sus fuertas brazos masculinos.

-Te crees muy importante eh? Crees que me puedes tratar como si no existiera eh? Pues ahora te vamos a dar una lección!

Con mucha rabia el muchacho sacó del bolsillo de sus shorts un pañuelo que envolvió y tapo la boca de la chica atándoselo por detras para que no pudiese hablar.

-Ahora veremos que es lo que escondes con tanto celo.

Con una sonrisa malvada le levantó la camisa descubriendo su delgado cuerpo pálido con un sujetador escolar tapándole los pechos de pequeño tamaño. El chico que estaba en frente agarró la prenda íntima y tiro hacia abajo descubriendo los senos con pezón rosa que destacaba en la blanca piel.

-Las tetas de Ayanami!

Gritó con entusiasmo su compañero mientras le tocaba las tetas con mucha agresividad y se relamía encantado con lo que hacía, Rei se sonrojó un poco pero no podía hablar por la mordaza que le tapaba la boca y el chico de detrás le agarraba fuertemente por las muñecas, ella sentía que su trasero tocaba con la entrepierna del chico que le había pedido salir y se empezaba a endurecer.

-No te distraigas con eso, tenemos poco tiempo.

El chico de pelo rubio hablaba muy serio y soltó uno de los brazos de la chica para bajar los shorts y bragas de colegiala de la chica y se sentó sobre un montón de colchonetas sucias.

-Coge una cuerda y átale las manos, no puedo agarrarla así.

El tercer chico que estaba presente, alto y moreno, fue a por una cuerda con la que ató juntas las muñecas de Ayanami, entonces y sin previo aviso el rubio alzó a Rei de las piernas y la dejo caer empalando su culo con su pene metiéndoselo por completo.

-Oh si, esto te gusta? ahora que opinas? quieres salir conmigo?

Decía el chico mientras subía y bajaba el cuerpo de su compañera para follarle el culo con intensidad, las gotas de sudor caían desde su frente a su cara mientras disfrutaba humillándola como el se había sentido. Ella abría mucho los ojos al sentir un increible dolor pero no poder quejarse.

-Ahi voy yo!

Exitado por ver los pechos de Rei moverse de arriba a abajo el de pelo rapado se bajó pronto los pantalones y agarrando con la mano izquierda a Rei del hombro guió con su derecha su pene hasta tocar su sexo donde lo metió con gusto relamiendose. En esa postura la piloto de pelo azul fue doblemente penetrada por sus dos compañeros. El que estaba delante miraba atontado como el pene entraba y salía de su sexo con toda la cara roja y la boca abierta casi babeando hasta que no pudo más y se vació dentro de ella.

-Se nota que es tu primera vez.

Comentó divertido el que no estaba actuando al ver lo rápido que eyaculo su compañero.

-Ahhh! No me pude aguantar, es tan cálida y estrecha!

Dijo este muy sonrojado aún mientras veía como el sexo de Rei seguía filtrando su semen.

-Si, debe de serlo, tengo ganas de probarlo yo también.

El chico más alto miraba a la chica de pelo azul con lujuria mientras se frotaba su bulto con una mano por encima del pantalón de gimnasia.

-Pues adelante, su agujerito quedó libre...

Con voz jadeante el chico que estaba tras ella seguía haciéndole saltar sobre su pene endurecido y con su mano derecha metió dos dedos en su vagina para dar más énfasis a sus palabras y los sacó manchados del semen de su amigo que limpió en el vientre de Rei que tenía los ojos cerrados y cara de dolor pero no podía emitir ningun sonido.

-No, esperaré a que tu acabes mejor.

Le respondió el del pelo engominado rechazando la oferta con una mano.

-Pues eso será dentro de poco.. Ahhhh!

Se quejó el que se la follaba por el culo con el rostro congestionado dando a entender que pronto eyacularía. Rapidamente sacó su miembro del agujero de la chica y esta cayó de rodillas, tirándole del pelo corto hizo que echase la cabeza hacia atrás y dirigiendo su pene terminó sobre su cara cubriéndola practicamente entera de semen.

-Esto te lo mereces por puta.

Le dijo con desprecio a la chica para luego darle una pequeña bofetada en la mejilla izquierda.

-Creo que es mi turno al fin.

El chico que aún no había intervenido se quitó la ropa inferior quedando desnudo de cintura para abajo con una gran erección entre sus piernas, agarró bruscamente a su compañera y la tumbó boca abajo en un potro quedando con los pies en el suelo y las manos atadas tras la espalda. Sin decir nada más le acarició el culo para estimularse aún más y comenzó a introducirle el pene por su sexo, primero hasta la mitad más o menos y luego aumentando el ritmo hasta que lo metió todo empezando sus penetraciones a buen ritmo.

-Aún no la abristeis del todo.

Dijo sudoroso mientras le metía un dedo pulgar por el ano mientras la embestía haciendo que su cuerpo inmóvil de la consusión y el miedo se agitase. Al mismo ritmo que su miembro con su dedo le fue penetrando el culo.

-Ahhh que calor!

Excitado por estar follándose a la chica más deseada de su clase se quitó la camiseta dejando ver un cuerpo trabajado y moreno para un chico de su edad mientras no dejaba de mover las caderas de forma sensual para penetrar a Rei, el movimiento que provocaba hacía que el semen de su cara cayese al suelo que estaba delante de ella.

-Tendremos que ir terminando, la clase está por acabar.

Avisó el de pelo rapado asomándose por la puerta.

-Me daré prisa!

Inclinándose un poco y agarrando a Rei de las nalgas comenzó a penetrarla con mucha rapidez sacando cada vez menos de su pene del lubricado sexo de ella.

-Ah ah ah ah!

Finalmente se corrió dentro una gran cantidad, mucho mayor que la de los otros dos, llenándola por dentro y manchando todo el suelo.

-Con una chica así es imposible no correrse con facilidad

Murmuró cansado dándole un azote en la nalga derecha.

-Será mejor que no le digas nada de esto a nadie, entendido?

Le dijo el chico rubio inclinándose delante de su cara amenazante. Tras esto la desataron y se fueron rápidamente del lugar dejándola en el gimnasio abandonado sola. Mientras, fuera, Shinji terminaba de hacer ejercicio preguntándose por que no había visto a su compañera desde hace rato.

Fin del Capítulo 1

Terminado: 21-12-2007