Eva no tenía muy claro que estudiar

Eva se prepara para decidir cuál será su futuro universitario... por suerte contará con buenos amigos que la ayudarán.

Quería contaros la historia de Eva desde que empezó en la universidad hasta que la conocí yo, en los relatos anteriores ya os conté una etapa de nuestra vida la parte que os relataré ahora no yuve una participación directa, de echo ni conocía a Eva… así que no tendremos "vendetta" (je,je,je,je)

Con los 18 añitos recién cumplidos Eva no tenía muy claro que estudiar, dudaba entre estudiar diseño, empresariales y aunque le apasionaba la arqueología esta última no le parecía una carrera con salida profesional.

La pasión de la arqueología le venía gracias aun amigo de s padre que era arqueólogo y desde la infancia cuando acudía a visitarles le narraba a Eva innumerables aventuras de las excavaciones, muchas tenían que ser mentira pero desde la infancia, Eva idealizó al amigo de su padre y su maravilloso trabajo.

Ese verano el amigo de su padre, Federico o Fede como ella le llamaba, le había propuesto que acudiese a una excavación a África, él estaría tres meses pero Eva podía pasar 15 días en el campamento y descubrir si era su verdadera vocación.

Eva estaba muy emocionada, su primer viaje al continente negro, y con el amigo de su padre del que en secreto siempre estuvo enamorada durante su infancia, la verdad es que el arqueólogo tenía 48 años, pero su pelo moreno, su piel siempre bronceada aunque pasaba más tiempo en la universidad que en las excavaciones, su cuerpo musculoso y sobre todo esa sonrisa encantadora que debía ser el terror de sus alumnas en la universidad.

Para el padre de Eva era un consuelo el que se fuese con su buen amigo, sería una gran aventura para su hija, estaría bien protegida y le había pedido a su amigo que hiciese lo que fuese para que no estudiase arqueología ya que era un profesión que podía alejarla durante meses de su lado y le hacía ilusión que estudiase empresariales y empezase a trabajar con él en las empresas familiares.

Días antes de la partida Fede le dijo a Eva que mejor se iban de la residencia de su padre, en el campo y se trasladaba con él a su casa en la ciudad ya que debían ponerse varias vacunas y pasar un reconocimiento médico.

Eva se alojó en casa de Fede y dedicó varios día a hacer compras para el gran viaje, por suerte contaba con la experiencia de Fede que le recomendaba las mejores prendas de vestir para el calor que iba a pasar en ese país. Un día Fede le comentó mientras cenaban.

Eva mañana he quedado con el médico de la universidad para que te ponga las vacunas y la revisión médica

¿Debo ir en ayunas?- consultó Eva

Sí supongo y no olvides llevar bragas limpias – dijo Fede en tono de broma y con una sonrisa.

Ahh gracias por el recordatorio… no pensaba llevarlas pero ahora que lo dices- contestó siguiendo la broma y guiñándole un ojo.

Sí tú ríete que para lo que te van a durar puestas, pensó Fede

A la mañana siguiente fueron a la consulta de la universidad, Fede le comentó que el médico era encantador aunque no se fiaba mucho de su criterio médico era un trámite necesario. El próximo año llegaría a los 70 años y tendría que jubilarse. También le dijo que iba a echarle mucho de menos porque no ponía pegas a la hora de firmar los certificados.

El doctor les recibió en la consulta que tenía en la universidad.

Buenos días Eva… así que necesitas el chequeo para tu viaje arqueológico.

Sí y ponerme las vacunas que me ha dicho Fede, perdón Don Federico que son muchas.

No tantas, no tantas sólo son dos ahora y una de recuerdo la semana próxima. Pero antes vamos al chequeo.

Has tenido suerte… ayer me prometió que se ponía braguitas limpias - dijo Fede con una sonrisa – y esta semana se ha duchado jejejeje

Ahh toda una muestra de respeto y un detalle para el doctor – dijo el doctor devolviendo la broma- por favor Eva pasa detrás de ese biombo y desnúdate.

Eva fue tras el biombo y se desnudó, dudó si debía quitarse las braguitas, se había puesto unas blancas de algodón bastante castas. Salió y se percató de las miradas que ambos hombres. Fede no le quitaba los ojos de encima, lo que para ella no tenía mucho sentido ya que la había visto desnuda muchas veces en la piscina de casa de su padre donde Eva practicaba nudismo sin prejuicios, pero siempre que no estuviese su padre al cual respetaba mucho. La mirada del galeno también le sorprendió un poco ya que siendo médico de la universidad debería estar muy acostumbrado a ver a las jóvenes estudiantes, enseguida pensó que era un poco tonta ya que si ni conocía al médico era imposible interpretar su mirada.

Allí estaba ella en medio de esa pequeña consulta "protegida" por su braguita blanca delante del médico y de Fede. Por las tonterías que se piensan cuando se está un poco nerviosa pensó que el doctor con su bata blanca y ella con sus braguitas blancas se conjuntaban, pero Fede con esa camisa color ocre casi totalmente desabrochada que dejaba ver su bronceado pecho desentonaba un poco.

Bueno Eva no me entendiste, te dije que te desnudases del todo.

Usted perdone doctor pensé que en ropa interior.

Por favor Eva no me llames de usted, sé que aparento más años que los que tengo… pero no soy tan viejo, que no te engañe mi pelo blanco que a los 21 ya lo tenía así.

La verdad que Eva sí pensaba que era muy viejo, es más le transmitía afecto ver a ese anciano. Eva se bajo las braguitas delante de los dos ya que considero que era absurdo meterse en el biombo para terminar saliendo en pelotas.

Ahora súbete a la camilla, bonita. Pero no te tumbes siéntate. Por cierto veo que llevas un bronceado sin marcas muy bonito y estamos a principio de verano ¿No iras a esas terribles máquinas de rayos UVA?

Eva todavía sin sentarse le contestó.

No, no es que mi padre tiene una casa en el campo con piscina y tomo el sol casi todo el año.

Desnuda por lo que veo- apuntillo el doctor

Sí –dijo Eva

Muy bien, eso es muy sano, muy sano y no esas horribles máquinas de rayos.

Durante más de diez minutos Eva de pié y desnuda tuvo que aguantar la charla del Doctor sobre lo mala que eran las máquinas. Eva no sabía muy bien qué hacer con las manos le parecía absurdo taparse el coñito o las tetas, hubiesen pensado que era una carca, pero tampoco tenía bolsillos donde metérselas, así que decidió cruzar los brazos bajo sus pechos por lo que estos se elevaron . Por fin el doctor dijo

  • pero vamos a dejar de hablar de esas máquinas y vamos con la revisión. Siéntate por favor.

Eva lo hizo y el médico empezó a hacerle un montón de preguntas sobre su historial médico le preguntó por espacio de casi media hora e iba anotando las respuestas, la verdad que esa parte de la prueba podía haberla realizado vestida pero al fin y al cabo después de tanto rato Eva se sentía tan cómoda desnuda que ni se percató.

Ahora voy a pedir a mi ayudante que entre y pase a limpio este informe y así vamos ganando tiempo.

Cuando el ayudante entró Eva se llevó una sorpresa ya que esperaba a la vieja enfermera que estaba en la entrada cuando llegó a la consulta y no a un chico joven de unos veintipocos años vestido con ropa de calle y no de enfermero.

Pasa, pasa Alfredo – sentenció el doctor.- os presento a Alfredo que me ayuda con el tema de archivos… es una joya, estudia segundo curso de archivador y además es un jugador del equipo de baloncesto de la universidad… un crak como dicen ustedes ahora.

El chaval entraba decidido pero al ver el cuerpo de Eva se quedó como paralizado, detalle que no escapó a Eva pero sí al despistado doctor que los presentaba sin percatarse de la desnudez de Eva, y le explicaba a un atónico Alfredo que Eva igual el año próximo estudiaba en la universidad. Eva pensó que el pobre chaval lo estaba pasando mal por la situación de verla en pelotas así que trató de animar al chaval y ser cortés, por lo que entablo conversación. La verdad que la situación era un poco surrealista ella allí desnudita delante de tres tios completamente vestidos.

¿Y que tal es la universidad?

¿Eh? Dijo alfredo mientras su ojos pasaban de las tetas la coño de Eva

¿Qué que tal la universidad?

Ahh … ehhh… bien

Me alegro

¿Hay gente maja?

Sí – seguía sin levantar la vista

Así que juegas en el equipo de baloncesto… se nota eres altísimo. Tienes que medir casi dos metros.

Sí.

Bueno Alfredo, esto es lo que tienes que pasar a limpio – y el doctor les entregó las hojas- cuando lo tengas me lo entras para la firma.

Y Alfredo salió nervioso y golpeándose con el escaso mobiliario de la consulta. Seguro que ahora este se va al baño a cascarse una paja pensó Eva muerta de vergüenza. Creo que es bueno aclarar que si bien Eva era nudista en su casa y lo había practicado delante de Fede y del servicio domestico de su padre todavía no había acudido a muchas playas nudistas y menos a un centro de vacaciones nudista por lo que no era tan desinhibida como años después.

Bueno Eva abre la boca y saca la lengua.

Eva lo hizo.

Ahora levántate y respira por la nariz y saca el aire por la boca- mientras hacía esto le ponía el fonendoscopio en la espalda

En ese momento volvió a entrar Alfredo que no entendía algunas cosas de la letra del médico y ya que estaba aprovecho para ver con más detalle a Eva y admirar su culazo anteriormente oculto a sus ojos porque Eva estaba sentada. El entrañable doctor se lo aclaró y volvió a salir.

La letra de médico… ya se sabe y siguió con la exploración.

Eva voy a comprobarte los pechos – y agarrando cada una de sus mamas empezó a presionarlos para comprobar si tenía algún bulto.

Tienes unos pechos perfectos y no aprecio nada anómalo.

Bueno no son muy grandes, muy redonditos sí pero quizás un poco más grandes serían mej

No, no son perfecto… haga caso a su doctor- le dijo con una sonrisa.

Gracias, Doctor – dijo Eva con una sonrisa. .

Además eso tiene solución si las quieres más grandes … aquí tienes el inflador – y el doctor le agarro uno de los pezones

Eva puso cara de sorpresa y de no entender

El inflador, el inflador – dijo sonriendo y soltando el pezón acercó si boca al mismo lo cubrió y empezó a soplar.

Eva estaba alucinando… le estaba soplando en una teta y notaba su húmeda lengua en su pezón. El medico paró y soltó una carcajada.

Me encanta esa broma, llevo años haciéndola y siempre ponéis una cara de sorpresa muy graciosa.

Eva también se rió con la ocurrencia, sorpresivamente Fede se acercó y le puso la mano bajo el pecho sobre el que había actuado el doctor, Eva notó la mano calida y un tanto áspera del amigo de su padre y la sensación le resultó muy agradable.

La verdad doctor creo que se ha pasado inflándola ahora esta es más grande que la otra- y Fede puso la otra mano en la otra teta- hay que compensar la otra- y acercó su boca a su pezón y empezó a soplar.

Riéndose el doctor apartó a Fede.

Vamos, vamos, no hagas el tonto que con uno que haga bobadas ya tenemos bastante.

Es una broma cojonuda – dijo Fede.

La verdad que sí – indicó una todavía sorprendida Eva.

Ninguno se había percatado pero durante las infladas había vuelto a entrar Alfredo y posiblemente había visto todo.

Perdone otra vez doctor pero tampoco entiendo esta parte de su letra.

A ver a ver- dijo amablemente el doctor leyendo el papel- dice… actividad sexual baja y esporádica, perdió la virginidad a los 16 años.

Gracias doctor

Alfredo espera, para que no estés todo el rato entrando y saliendo porque no haces el escrito en mi ordenador y así si tienes alguna duda te la resuelvo al momento.

Alfredo le hizo caso, el chaval no debía ser tonto precisamente ya que la mesa del doctor donde tenía el ordenador estaba justo enfrente de la camilla, por lo que iba a ser un espectador excepcional de la revisión de Eva.

El doctor siguió haciendo pruebas, tomándole la tensión

Eva túmbate en la camilla boca arriba y abre las piernas que tengo que revisarte la vulva.

Eva por supuesto lo hizo y allí quedó bien abierta para que el doctor hiciese lo que procediese. Según se abrió las piernas Fede se situó para ponerse frente a la camilla y no perderse detalle de la revisión. Como respecto a la mesa donde estaba Alfredo Eva quedaba de medio lado y claro no podía admirar desde esa posición el coñito bien abierto de Eva, casualmente, le surgió una duda de la letra del doctor y se levantó para consultarle y pode echar un buen vistazo a la almejita de Eva.

El doctor abrió los labios vaginales con el dedo índice y corazón y poniendo la cara a escasos centímetros comentó. La cara estaba tan cerca que notaba el aliento del doctor sobre su vulva.

Buen aspecto, tiene buen color. Yo no veo nada raro.

A Eva le molestaba un poco porque en ese momento estaba agarrándole los labios y presionándolos, cuando Eva levantó la cabeza vió como Fede y Alfredo no perdían detalle de la exploración. No le importaba demasiado la presencia de Fede pero se sentía muy incómoda viendo a Alfredo hay "plantado" con el papel en la mano así que se animo a decir.

Doctor Alfredo está esperando para hacerle una consulta

Ah sí, pero no te preocupes que como tengo que tomarte la temperatura anal le atiendo mientras espero a que suba el termómetro.

El doctor siguió durante unos segundos enredándole el coño e introduciéndole algunos dedos y le pidió que

Ponte a cuatro patas sobre la camilla y eleva los glúteos.

Eva lo hizo poniendo el culo ante el "público". Estaba muerta de vergüenza sentía como se clavaba la mirada de Alfredo aunque no podía verle. Por sorpresa notó como se le introducía el dedo del doctor por el ano que le estaba poniendo vaselina

Mejor separa un poco las piernas que sino puedo hacerte daño… y ahora te pongo el termómetro y a esperar unos minutos.

Mientras le introducía el termómetro la palma del doctor descansaba sobre uno de los cachetes de Eva. La verdad que la visión era espectacular ese culazo ofreciéndose al "público" y parte de su rajita totalmente colorada debido a las presiones del doctor.

Bueno Alfredo, ya puedo atenderte

Eva seguía en esa postura tan humillante y mientras el doctor atendía a Alfredo aquel le pidió a Fede.

Fede perdona, ¿puedes ayudarme?

Claro doctor, ¿Qué necesita?

Mientras termino de atender a Alfredo, ¿Puedes retirar el termómetro de Eva? Creo que ya estará.

Fede acercó tanto la cara al culo de Eva que esta podía notar su respiración sobre sus gluteos, por supuesto también apoyo la mano en el cachete de Eva para retirar el termómetro.

Ya está doctor, ¿le limpio los restos de vaselina?

Claro muchas gracias.

Eva pensaba que se refería al termómetro, pero no, se refería a su culo ya que notó como la mano de Fede pasaba por todo su ojete e incluso le introducía un dedo para sacar la vaselina. La vaselina del termómetro debía haberse extendido porque a mano limpiadora de Fede llego hasta en tres ocasiones al coñito de Eva.

Gracias, Fede… déjame ver el termómetro.

Eva seguía en esa posición, pasó casi un minuto y nadie decía nada. Puedes vertirte

Pues esto está muy bien, la temperatura es normal, Eva ya puedes levantarte

Eva alucinaba cuando se incorporó comprobó que Alfredo seguía frente a la camilla, ¿pero este no tenía que escribir el informe? ¿Por qué seguía allí mirándole el culo?

Ahora Eva de pié como estás apoya los codos en la camilla y saca el culito hacía afuera que te voy a poner las vacunas.

Eva así lo hizo, estaba preciosa en esa postura con su culazo bien expuesto para que le introdujesen las inyecciones. Estaba tan nerviosa ante los pinchazos que no hacía más que mover el culito de derecha a izquierda.

Eva deja de mover el culo… que no sé si voy a poder poner así las inyecciones – comentó el doctor en tono amable mientras le agarraba el culo con ambas manos para detenerlo.

Eva notaba la presión de esas manos arrugadas, sobre todo las arrugas. Las manos eran suaves pero nunca antes le había toqueteado una mano de una persona de tanta edad, era raro porque hasta ahora la había tocado gran parte de su cuerpo pero ahora la agarraba fuertemente y eso hacía que las notase más, además desde que le había manipulado el chochito parecía que su cuerpo era más sensible a los tocamientos. Cuando el doctor soltó las manos comentó a Fede.

Fede vete masajeando las nalgas para ablandary calentar la zona de la inyección

Fede posó sus manos en el culo de Eva y empezó a masajearlos con las yemas de los dedos.

No, no así no- interrumpió el doctor- mira quita apoya bien las manos y masajea como si estuvieses haciendo una masa de pan y vas dando círculos – el doctor lo hacía mientras lo explicaba. – Lo ves con las dos manos a la vez.

Fede probó, pero el pobre hombre no debía tener mucha psicomotricidad porque le salía bastante mal llevar el ritmo con ambas manos.

Fede esta visto que no te sale- interrumpió nuevamente el doctor que en ese momento ya tenía la inyección en la mano- menos mal que tenemos ayuda. Verás tú te quedas con la nalga derecha y Alfredo se ocupa de la otra. ¿Te importa ayudarnos Alfredo?

Claro que no doctor, pero no sé si sabré.

Tranquilo es bastante fácil, a ver prueba –y claro Alfredito probó y le salía bastante bien.- Lo haces muy bien, si ser archivero o jugador de baloncesto no te sale bien siempre puedes ser panadero, venga Fede ahora tú en la otra nalga.

Mientras el doctor preparaba la vacunas ambos hombre manoseaban con fuerza el culo de Eva, parecía que habían ensayado porque se compenetraban perfectamente le abrían los cachetes y le dejaban el sonrosado ojete a la vista. Ambos tenían la cabeza inclinada para ver mejor el culazo de Eva. Eva notaba las vibraciones cerca de su coño y estaba empezando a excitarse con tanto movimiento. Cuando llevaban cerca de cuatro minutos y ya se notaba que el coñito de Eva lanzaba su húmedo flujo el doctor dijo.

Gracias chicos… bueno Eva ahora a relajarse

Le clavó una aguja en el cachete derecho, el pinchazo no dolió pero sí mientras la vacuna iba introduciéndose.

¿Te a dolido, Eva?

Un poco

Bueno no será para tanto- dijo el doctor con una de sus maravillosas sonrisas

Mientras decía esto aprovechando la distracción le clavó la otra inyección en el otro cachete.

Bueno y ahora unos minutitos más de masaje gluteal, pero ya me ocupo yo.

Por espacio de tres minutos las manos del doctor aliviaron los doloridos glúteos de Eva, mientras Alfredo y Fede no se perdían detalle.

Eva ya puedes vestirte. Por cierto es bueno que te masajees los cachetes por espacio de dos horas para evitar que la vacuna duela, ¿tenías pensado ir a casa? ¿Hay alguien que pueda masajeártelos?

Bueno estos días viv en casa de Fede

Pues excelente entonces… no dejes de masajearlos porque sino el dolor será insoportable.

Gracias Doctor.

Se fue hacia el biombo a vestirse y desde allí escuchó la voz de Fede.

Bien doctor ahora mi revisión, ¿Me desnudo?

No, no que solo te voy a tomar la tensión y mirar la respiración. Con que te quites la camisa sobra.

Eva salió y allí estaba Fede, con los pantalones puestos mientras el doctor lo ocultaba.

Eva acompaña a Alfredo a secretaría a poner el sello de la universidad al informe mientras termino con Fede y así ganáis tiempo que con la tontería me ha costado más de una hora hacer tu revisión médica.

Eva se fue con Alfredo, estaba cabreadísima se sentía engañada por Fede y el puto doctor a ella le hacía una revisión en profundidad y desnuda y a Fede que únicamente se quitase la camisa. Por suerte Alfredo no era muy hablador porque estaba tan cabreada qu no hubiese podido contenerse.

Cuando Eva salió, y se quedó el doctor a solas con Fede, el doctor le dijo

Diagnostico que esta muy buena, ja,ja,ja

Pero que muy buena y no sólo de salud, supongo

A eso me refería no a su salud. ¿Y esta va a ser alumna nuestra?

Posiblemente en un par de meses

Pues hay que hacerle otra revisión cuando sea alumna… Por dios si se ha dejado hacer de todo, es la mejor revisión que he hecho

Ya te dije que la conocía y que sabía que podíamos camelarla y disfrutar un poco con ella

¿Podríamos habérnosla follado?

Hombre tanto como eso… complicado… pero todo llegará, todo llegará- Dijo Fede

Seguro que en tu viaje te hace pasar buenos ratos.

Estamos trabajando en ello- comentó Fede con acento mexicano y con una amplia sonrisa.

Bueno toma tu certificado médico y en un par de días me la traes que hay que ponerle la última vacuna.

Cuando Fede se acercó a secretaría a sellar su certificado, Eva ya había terminado y se estaba despidiendo de Alfredo. Fede y Eva salieron de la universidad en dirección a la boca del metro para regresar a casa, Eva no decía nada,.

¿Eva te pasa algo?

¿A mi?... que me va a pasar

Nada pues es que me parecía.

Cuando llegarán al anden del metro Fede mpezó a masajear el culo de Eva, que se volvió muy cabreada.

¿Pero qué coño haces?.

Sigo las indicaciones del doctor, para que no te duelan las vacunas.

Suéltame, no me toques… dudo mucho que ese doctor sepa tan siquiera curar un catarro- Dijo chillando una Eva muy enfadada.

Hombre ya te dije que no era el mejor médico… pero nos ha dado los certificados, podemos ir a las excavaciones.

Sí ya he visto, como os gusta reíros de mi.

¿reírnos?

Sí, o aún peor aprovecharos de mi

¿pero de qué hablas?

Yo he tenido que desnudarme y tu ni te has tenido que soltar el pantalón.

Ja,ja,ja – Fede echó una carcajada.- ¿por eso estas cabreada? ¿piensas que nos hemos aprovechado de ti?

Lo pienso y lo sé.

Eva creo que no es buena idea lo de ir a la excavaciones… veo que no hay confianza. Yo no me he desnudado porque cada seis meses me hace una revisión profunda y tengo todavía las vacunas desde el último viaje… ¿Cómo has podido pensar que estábamos aprovechándonos de ti?

Eva estaba muerta de vergüenza, claro ella era la primera vez que iba y la revisión había sido profunda. ¿Cómo era posible que hubiese pensado eso de ese doctor tan encantador y sobre todo de Fede, si la había visto desnuda al menos cinco veces

Yo… yo… lo siento Fede, de verdad … es que pensé que… lo siento de verdad.

Déjalo Eva está claro que no hay confianza. Mira el viaje será duro, largas jornadas en la selva, compartir tienda, igual hasta camastro… si en cada cosa vas a penar mal mucho mejor que no acudas

No, yo quiero ir, quiero ir… de verdad. Perdona Fede confio en ti, confio plenamente, eres amigo de mi padre desde la mili…Confio plenamente en ti.

Bueno Eva perdoname tú. Debía haberte avisado de que mi revisión sería más breve. ¿pero no crees que si hubiésemos querido aprovecharte de ti hubiésemos hecho un paripe con mi revisión médica?

Tienes razón, tienes razón perdona.

Bueno olvidemos el asunto – y mientras Fede decía esto le puso una mano en el culo y empezó a sobárselo.

Eva sonreía, sin duda eso significaba que le había perdonado. Allí estaba ella una adolescente sonriente y una señor maduro sobándole el culo en medio de un vagón de metro mientras algunos los miraban escandalizados pero la mayoría complacientes y envidiando a ese señor.

En casa mejor te quitas el pantalón y te aplico el masaje directamente… así dolera menos la vacuna

Claro Fede lo que tú digas, siempre lo que tú digas- le respondió Eva con una sonrisa.

Ya verás que bien lo pasamos en África – sobre todo yo pensó Fede mientras le devolvía la sonrisa.

Os dejo la primera entrega, como siempre espero opiniones y aportaciones para ir mejorando la trama entre todos y todas. Saludos