Eva 2

Hola amigos, continuando con mi relato de experiencias sexuales, escribo nuevamente para los lectores que se interesaron en leerme.

Bueno, pues en ésta ocasión tocaré algunos temas mencionados en mi anterior relato, pero seré más explícita platicándolos con detalle.

Como decía, me encanta hacer el amor en lugares prohibidos, a veces nos aventuramos a hacerlo también con luz de día como por ejemplo en el estacionamiento de la azotea de una plaza comercial, estacionamos el coche hasta atrás donde casi no pasa gente, me quito la tanga y salimos a dar la vuelta a ver las cosas de las tiendas.

Yo desde luego que me pongo una minifalda sexi y al caminar así entre la gente me calienta mucho al saberme sin nada debajo y que apenas un poquito mas arriba de la tela del vestido queda mi coño libre de toda ropa, mi esposo también se calienta porque le gusta mucho que me ponga mini, le encanta verme las piernas y mas al saber que no traigo nada debajo.

Ya después de un buen rato de caminar, subimos las escaleras al piso superior y nos ha tocado que personas del sexo masculino van con su pareja detrás de nosotros y de reojo volteo y veo que ellos no pierden detalle y abren unos ojotes!!! que para que les cuento.

Sus parejas los pellizcan y los regañan por andarme viendo en forma tan descarada las nalgas desnudas y el coño también porque cuando doy el paso hacia el escalón siguiente se me ve todo jajaja, ¡¡pobres!! ya me imagino lo que sienten y aunque vayan acompañados no pueden aguantarse las ganas de ver lo que va escalones arriba, en una ocasión uno de ellos por andarme viendo las piernas, se tropezó en la escalera y por poco y se cae, yo no puede aguantar la risa y me reí jajaja

Ya en el segundo piso y con barandales de cristal, me paro y me asomo para abajo, recargando e inclinando mi abdomen en este para que la mini me cuelgue en forma vertical y me descubra por delante el cuerpo, de tal forma que cuando alguien voltea hacia arriba me ve el coño y hasta el ombligo.

Pero no crean que si veo que alguien voltea, de inmediato me retiro, me da pena que me vean en forma tan directa jejeje o les diré que algunas veces cuando ya estoy muy cachonda, me hago disimulada como que no me doy cuenta que me están viendo y los dejo que vean un ratito, así de vez en cuando hago lo mismo en diferentes puntos de la placita para seguirme calentando mas.

Cuando ya estoy lo suficientemente caliente le pido a mi esposo regresar al coche y nos paramos del lado contrario al conductor con la puerta abierta, ponemos una revista encima del techo del auto para que cuando pasen coches cerca vean que estamos leyendo algo.

Jorge se pone detrás de mi, me sube la mini y se baja los pantalones a media pierna y se levanta un poco la camisa, yo paro las nalguitas, me mete la verga por la vagina y nos movemos rápidamente hacia atrás y hacia delante mmmm siento delicioso en las nalgas el contacto de su vientre, cuando vemos que pasa un coche nos detenemos, pero no me la saca y así seguimos hasta que con la excitación del peligro de que alguien nos pueda ver.

Nos venimos súper delicioso, a veces la gente desde lejos se nos queda viendo y tal vez se imaginan lo que estamos haciendo porque no creo que desde lejos alcancen a ver la revista verdad? jejeje, como quiera no tienen excusa para acercarse a nosotros y tampoco pueden ver nuestros cuerpos semidesnudos, pero eso no nos importa y si nos excita mucho.

Después de coger, regresamos a las tiendas a seguir viendo cosas ya mas tranquilos, me encanta que lo hagamos así seguido porque caminando se me empieza a salir el semen de la vagina, y junto con mis fluidos vaginales, me escurre por las piernas y me vuelvo a excitar.

Le muestro a él mis piernas escurriendo y también se vuelve excitar y noto que se le para la verga de nuevo debajo del pantalón, les confieso que esta segunda ocasión en las tiendas lo hago con un doble propósito, el que ya les mencioné y el principal que es porque después de darle las nalgas a mi esposo y volverlo a calentar, le puedo pedir que me compre cosas y él acepta y me compra lo que se me antoje jajaja, que lista soy verdad? y ya después nos vamos a casita llevando muchos paquetes y en premio, le doy las nalguitas de nuevo y hacemos todas las posiciones que se nos ocurren, mmm.

Otras ocasiones cuando estoy sola en casa los fines de semana, mis peques en alguna actividad y mi esposo en el trabajo, me gusta desnudarme completa y hacer las actividades del hogar así, abro las cortinas de todas las ventanas y me ando paseando por toda la casa, me imagino que al pasar por las que dan a la avenida donde vivo, alguien me ve y me excita sobremanera, ni siquiera volteo y cada que paso, me calienta muchísimo pensar que me están esperando a que pase de nuevo.

Me pongo a hacer mi gimnasia dando la espalda a las ventanas y me imagino que en la calle se sientan en la banqueta como si estuvieran viendo el cine o el teatro, que se están masturbando mentalmente viéndome desnuda.

Mucho me gustaría saber que si así fuera y todos los fines de semana a la misma hora me preparaba y les daría un show dentro de mi rutina de gimnasia, tal vez y así pase algo de lo que comento, pero como ya dije no volteo para nada para evitar que si es que alguien me esta viendo, se cohíba y se retire, dejaría de ser hot para mi.

Eso si, les aseguro que si ese “alguien” que me viera desnuda intentara hacer algo para contactarme, dejaría de hacerlo de inmediato, no quiero peligros mas allá de donde yo pueda controlar, pero hasta hoy no he tenido ningún problema, estoy segura que sí me han visto, porque a veces de reojo volteo disimuladamente o miro en los cristales de las ventanas usándolos como espejo y veo gente que se detiene a verme, pero sólo un rato y se van.

Les platico que algunas veces que salimos un fin de semana solos, desde la carretera temprano empezamos a hacer “cositas” me gusta sacarle la verga a mi marido que va manejando y darle unas mamadas súper deliciosas.

Me imagino que es un caramelo y me dedico a lamerlo y chuparlo succionándolo fuertemente para extraer su lubricante que sale casi como si se estuviera viniendo ya, luego para excitarlo mas, me desnudo y me pongo en cuatro, dejando las nalguitas a la altura del cristal de mi lado.

Le digo que aminore la velocidad para evitar accidentes y me pongo una de sus manos en el coño para que me toque y me meta los dedos y que cambie su mano de cuando en cuando a mi par de tetas que se balancean en el aire junto con mis movimientos de subir y bajar con mis labios a lo largo de su verga.

Hay amigos, que delicioso me resulta hacer esto, tanto jugar con su verga como sentir las caricias en mi cuerpo (sexo tántrico), yo aprovecho en venirme al menos una vez y a él no lo induzco al orgasmo por dos razones, para que no desfallezca al venirse cuando maneja (es peligroso) y para tenerlo súper caliente y no piense en otra cosa más que cogerme cuando lleguemos a nuestro destino jejeje que mala soy verdad? ¡pobrecito¡.

Acto seguido mi esposo se detiene y yo me pongo mi ropa, él me cede el volante del automóvil, con el pensamiento de fabricar otro momento excitante y buscando venganza por lo que le hice de no dejarlo venirse cuando maneja.

Me baja la blusa y el brassier, dejando mis tetas el aire, dándome una buena mamada en los pezones y aprovechando que tengo mis manos en el volante, acariciándolas a placer.

A mí se me hinchan los pezones al máximo por sus caricias y chupetones, tanto que le gusta lo que ve y me toma una serie de fotitos en esta condición, cada que pasa un autobús con gente viendo el paisaje, yo me imagino que me ven las tetas con los pezones bien paraditos y me excito más, busco su verga con una mano y lo masturbó haciendole una deliciosa chaquta hasta que ahora si el llega al orgasmo, no sé porque pero a él le encantan mis chiches.

Ya más tranquilo toma de nuevo el volante y yo estando de nueva cuenta caliente, me quito la blusa y el brassier, abro el quemacocos y me paro en el asiento sacando medio cuerpo del automóvil, dejando mis tetas a la vista de los vehículos que pasan en sentido contrario, mmm que sensación tan deliciosa sentir el aire en mis pechos desnudos y más por el hecho de que me los vean los de los otros vehículos sin el peligro de que no me pueden hacer ni decir nada por estar los vehículos en movimiento y en sentidos opuestos.

Así continuamos un buen tramo hasta que un camionero distraído al ver mis tetas, volantea y por poco y tiene un accidente, maniobrando hasta recuperar su camino, por lo que me agacho concluyendo el espectáculo para no causar accidentes, pero que rico mientras duró, me causó una gran excitación mostrarme así.

En otra ocasión, viajamos en autobús foráneo, era de noche e iba hasta el tope de gente, yo me empecé a calentar y le metí la mano a la bragueta para sentir su verga que de inmediato se le paró, me la coloque en los labios y empecé a mamarla silenciosamente.

Pero esto no fue suficiente para mí y se me calentó demasiado el coñito, así que de plano, me bajé el pantalón de mezclilla con mucho trabajo, me voltee de espaldas a él y despacito y poco a poco me fui ensartando en ella.

Les comento que me he sentido tan excitada por ir rodeada de gente en el autobús, que no me había comido ni la mitad de la verga cuando sentí que no me podía contener y me di una venida increíble y tanto que no pude ni pensar y emití mi grito acostumbrado de placer, cosa que se oyó hasta el conductor que de inmediato encendió la luz y bajo la velocidad para detener el autobús, pero como no oyó nada más, la apago y volvió a acelerar.

Mi marido dio un brinco de sorpresa al escuchar mi grito y de inmediato me empujo fuera de su verga y nos tapó a los dos con una frazada que llevábamos, haciéndonos los dormidos, para cuando la gente se paró de sus asientos para ver qué había pasado jajaja, Uds se imaginarán que pensaron cuando los únicos pasajeros que dormían éramos nosotros dos no?

Cuando el autobús llego a su destino, los pasajeros nos veían con sonrisas recordando lo acontecido y ya tranquilos nosotros nos moríamos de la pena y salimos casi corriendo de la terminal, riéndonos de lo acontecido.

Otras veces nos vamos solo a un barecito coqueto a tomar una copa y platicar, claro que yo me visto siempre muy sexi, pues me gusta mucho que los hombres me miren, me excita y me levanta la autoestima y solo me visto así cuando salgo con Jorge que me cuida y me protege, por lo que no creo llegar a tener nunca ningún problema.

Como les decía, me visto con una minifalda o con algún vestido holgado sexi y regularmente siempre con grandes escotes y los hombres me terminan de desnudar con la vista.

He visto que algunos hasta se atreven a saludarme levantando su copa cuando ven que mi marido se distrae, cosa que desde luego yo no contesto para evitar un malentendido que signifique un pleito de hombres con Jorge por andar yo de coqueta, para nada amigos no me arriesgaría nunca, así que solo me dedico a disfrutar de las miradas de ellos y sentirme deseada, que aunque no soy la gran belleza, si les llamo la atención más de lo normal por lo sexi que me visto.

En ocasiones que nos toca sentarnos en alguna mesita sin mantel, mis piernas quedan al descubierto por la minifalda y cada que pasan los hombres se me quedan viendo y los que están en mesas enfrente no me quitan la vista de ellas, salvo cuando Jorge esta de frente.

En una ocasión, estaba un tipo con su pareja enfrente de mí y cada que se distraía ella y Jorge, el tipo me comía las piernas con la mirada, así que decidí jugar un rato para ponerlo a cien jejeje.

Dirigí disimuladamente mis piernas hacia él y las abrí un poquito, el tipo abría unos ojotes!!! que para que les cuento, yo lo veía de reojo y me divertía al verlo sudar, luego cruce las piernas procurando que la mini dejara ver lo máximo posible de ellas y el pobre tipo se empezó a poner muy inquieto, ya no le importaba si su acompañante lo veía o no, solo se cuidaba de Jorge, que desde luego también se dio cuenta de la situación y me dijo en forma divertida

-que mala eres! pobre tipo, no le estés enseñando las piernas-

y yo le conteste con una risita burlona diciéndole que lo seguiría haciendo porque a pesar de estar acompañado, no le importaba su pareja así que era una especie de venganza por lo que le estaba haciendo a ella y me encargaría de hacerlo sufrir de esa forma.

Así que de cuando en cuando cambiaba de posición el cruce de mis piernas y al hacerlo levantaba una de ellas y la abría para que el pudiera ver mi tanga de hilo dental que era de color blanco, jajaja pobre tipo.

Creo que incuso fue a masturbarse al baño porque en una de esas que se paró para pasar juntito a mí y vérmelas más de cerca, se tardó más de lo normal en el baño y cuando regresó se sentó de espaldas a mí ya satisfecho y se dedicó a conversar con su pareja, tal vez para intentar quitarle lo enojada que estaba.

He de decirles que no soy Psicóloga y por lo tanto no me imagino porque si soy tan penosa, en ocasiones en vivo y personalmente, me excita tanto mostrar un poco más de lo normal mi cuerpo o estar en peligro que alguien me vea desnuda, soy una mujer muy erótica, pero no pecadora, me encanta el sexo y no me reprimo al expresarlo.

Pero tampoco soy una cualquiera, soy recatada y soy de un hombre, por lo que pienso que es algo relacionado a la mente porque es demasiado confuso saber por qué se presentan esas reacciones tan inexplicables para mí, incluso he llegado a pensar que me gusta el exhibicionismo, pero no lo entiendo porque me da mucha pena que alguien me viera desnuda en persona

Algo similar ocurre con mi marido, que le excita que me vean pero es muy celoso, tampoco lo entiendo, así que como ven resultamos una buena pareja yo con algo de exhibicionista y el con algo de voyerismo.

El caso es que esos gustos son siempre en forma ocasional, no abierta y por eso tiene más sabor erótico porque lo hacemos disimulada y ocasionalmente y las personas que me ven piensan que es por distracción mía que enseño de más ya que puede notarse que no lo hago a propósito, más que nada creo solo es la excitación por el peligro de que alguien me vea, por ejemplo les platico:

Cuando salimos a pasear de noche, entramos en el estacionamiento particular de algún local, nos bajamos del coche y si no hay nadie a la vista, Jorge, se baja la bragueta y se la saca, al mismo tiempo que yo me levanto la minifalda y hago a un ladito el hilo de la tanga y nos ponemos a coger ahí parados al lado del coche.

Si pasa un buen tiempo, digamos unos 10 minutos y nadie aparece, nos seguimos calentando más y me empieza a desabotonar la blusa y el sujetador sacando mis pechos al aire y me los cachondea desde atrás un buen rato, yo muevo frenéticamente las nalgas para que su verga entre y salga de mi vagina rápida y fácilmente, hasta que ayudados por el peligro que alguien nos vea, nos venimos casi al mismo tiempo y ya vacíos los dos entramos al local tranquilamente, claro yo con las piernas escurriendo de semen, cosa que me excita mucho.

Bueno mis queridos lectores, espero que les haya gustado este relato de mi vida y con objeto de no aburrirlos me despido de Uds. deseándoles que todo les siga saliendo muy bien, no sin antes pedirles que si les gusta leer mis experiencias, me escriban una notita si? … ¡porfa¡

Esperen mi próximo relato si es que les gusta lo que escribo.