Estudios superiores

De como conocí a mi sobrina

Sin la menor duda, nuestra educación nos marca. Mi familia es muy tradicional: de misa diaria, costumbres rutinarias, bien vista, decentes…vamos, aburrida hasta la náusea.

Me llamo Daniel, tengo 43 años y vivo en León. Soy natural de Valladolid, y tengo una hermana de dos años menor, ya casada. Mis padres aún viven. Mi padre fue toda su vida director de banco y mi madre se dedicó a la casa y a la familia, como es de “bien”, según ellos.

Mi hermana, Paula, está divorciada, y tiene dos hijos varones y una chica. Bueno, tenía. El menor, Álvaro, ahora, con 27 años es Vega, una hermosa joven de sonrisa deslumbrante y mirada profunda.

Para mis padres, que su nieto el benjamín sea una muchacha transexual, ha sido un trauma. Aún no lo han superado y de su cambio de sexo han pasado ya 4 años. Cierto que llevaban mal que sus amaneramiento fuesen manifiestos y que claramente fuese homosexual ya era un martirio. Pero lo de su cambio de sexo, estuvo a punto de llevar al viejo a la tumba. Fue divertido. Y lo fue también ver la cara de su madre al conocer el total apoyo del entonces su marido a la decisión de su hija. He de decir que ese fue el motivo principal de que ella decidiese divorciarse y repudiar a su pequeño.

El caso es que hace unos meses mi excuñado, con el que aún mantengo una relación muy buena, me llamó, aprovechando que estaba de viaje, para quedar a cenar.

Me pareció una idea genial, así aprovechaba para preguntarle por Vega, de quien, por su puesto, por parte de su madre no sabía nada.

Quedamos en el barrio húmedo, la zona de vinos, para tomar algo y cenar en algún restaurante. Comenzamos a hablar las navidades, de las amistades comunes y de otros temas banales. También de su trabajo, un negocio mayorista de material veterinario, que aunque no le iba mal, no acababa de arrancar. Ese era el tema que más le preocupaba, después de su hija. Me contó que había sufrido mucho por la actitud de su madre hacia ella, y que le costó mucho sacar a su pequeña de aquel sentimiento de abandono que sentía. Fue una alegría para el que accediera a hacer un master, pues eso la animaría y la obligaría a dejar atrás los días de dolor que la habían acompañado los últimos años. Vega había visto uno allí, en León, que le llamaba la atención. Además, no estaría sola, por que yo, su amado tío, estaría por si necesitaba algo.

Me pareció una idea genial, y por supuesto, me ofrecí para todo aquello que necesitara.

Aquél tema quedó allí. Seguimos tomando vinos, charlando, y fijándonos en las chicas de nuestro alrededor, y concluyendo que ya no teníamos cuerpo para llamar su atención.

Pasaron unas semanas, cuando una tarde sonó mi móvil.

-¿Diga?

-Hola tío, soy Vega.- Su voz me impresionó. Suave, dulce, fluida, extremadamente femenina

-Ah!, hola cielo, me alegro de oírte.

-Yo también, y mucho- dijo- Quería pedirte un favor.

-Dime.

-Mira, le he dicho a mi padre que ya tengo donde vivir para hacer mi master, pero no es cierto- me confesó- en parte por que no me apetece compartir con extraños, y un colegio mayor me parece excesivamente caro.

-¿Y en qué te puedo ayudar?- inquirí.

-Me gustaría que me dejases dormir en tu casa unos días, hasta conocer a alguien o encontrar algo asequible….se que es un trastorno, y más para ti, acostumbrado a vivir solo…pero sería muy importante para mí.

La idea no me hacía ni puta gracia. Hacía casi 20 años que había vivido con alguien, y no era una experiencia que quisiera repetir. Pero aquella voz me venció.

-Por supuesto, reina. No le diré nada a tu padre, y puedes quedarte tanto como necesites y quieras.

-¡¡¡Gracias!!!¡¡Sabía que no me dejarías en la estacada!!!No sabes lo que significa para mí, sabré compensarte.

-¿Cuándo estarás aquí?

-El master empieza justo después de Semana Santa, nos dan un mes de vacaciones, en Agosto, y termina justo antes de la Semana Santa próxima.

-Pues muy bien, tendrás preparada una habitación, espantosamente decorada.

-Jajajajaja..que bobo. Tengo muchas ganas de volver a verte. No nos vemos desde…bueno, desde mi operación, ahora estoy algo distinta.

-Que no te hayas dignado a visitar a tu tío en los últimos 10 años, no significa que no siguiese tu vida de cerca, mala sobrina. Pero ya nos pondremos al día.

Colgué muy animado. Me había alegrado aquella conversación, pues su frescura, y su desparpajo dejaban entrever una persona que lleva la alegría consigo.

Pasé las semanas previas a semana santa adecentando la habitación que guardo para las visitas, y chateando con Vega, para ir haciendo alguna que otra gestión para su master.

El día de su llegada la fui a buscar a la estación de tren a las 20:00 horas. A la llegada, empecé a mirar con intensidad alrededor mío, sin llegar a identificar a nadie como mi querida sobrina. Hasta que ví una muchacha menuda, de pelo negro como el azabache, subida a dos tacones y tirando de dos pesadas maletas, las cuales, las abandonaba para lanzarse a mis brazos.

-¡¡Tío!!- gritó- ¡¡Qué ganas tenia de verte!!

-Mi vida, y yo también- afirme- no te conocía, estas fantástica.

-Gracias, zalamero; pero no es para tanto.

-¿Tu has visto con que cara de envidia me han mirado todas las pollas del andén?- bromee.

-Jajajajajaja…que bruto, por Dios- Me plantó un beso en la mejilla y me abrazó con fuerza. Aquél abrazo me dio la oportunidad de apreciar el cuerpo que escondía la gabardina que la cubría. Unas piernas torneadas y suaves sostenían un culo prieto y salido. Su vientre plano, estaba coronado con dos tetas grandes, duras y redondas, cuyos pezones se marcaban perfectamente. Unos labios carnosos y unos ojos grandes me observaban con divertimento bajo una espesa melena negra.

-Venga, vamos a casa. Ha sido un viaje largo y querrás descansar.

-¿Qué descansar ni que mierdas?, dejamos las maletas en casa y nos vamos a tomar algo, que para descansar hay muchos días.

Y así lo hicimos. Pasamos la noche de bar en bar, charlando, haciendo bromas y riendo, siendo ella la mirada de todos los tíos en cada local en el que entrábamos.

Se pasaron las horas volando, y, cuando nos echaron el ultimo pub, decidimos seguir en casa.

Al llegar a mi casa, he de decir que cuando menos, ambos estábamos más que alegres.

-¿La última, Vega?

-Naaaa, se dice la penúltima- Bromeó.- Por supuesto, venga esa copa.

-Oye, me he fijado en que garito en el que hemos entrado, garito en el que te han tirado los trastos.

-Bah..gañanes y niñatos que solo quieren descargar sus huevos. Paso de tíos mierdas. Para irme a la cama con alguien es para disfrutar los dos, no solo el.

-Jajajaja, mujer…no todos serán así.

-¿los de esta noche?...todos, sin excepción.

-Joder, ¿como estás tan segura?- quise saber.

Pues por que no han dejado de mirarme las tetas. Ninguno ha mirado más arriba, sino habrían visto mi nuez. Pero lo que me lo deja claro, es que ninguno me ha mirado a los ojos cuando me ha mirado por primera vez. Bueno, hoy hay uno que si lo ha hecho; pero no creo que quisiera estar conmigo en la cama.

-¿y por qué? Eres todo un bomboncito; todos te miran al pasar…y si solo te quieres pegar un polvo.

-¿Cómo sois tan simples los tíos, Dani? Tíos para follar tengo los que quiera…pero paso de solo sexo. Quiero tener una relación que vaya más allá. Quiero un hombre que me valore, que me escuche, que me aprecie. No creo en el amor de las películas; pero sí en que hay personas que son capaces de darte amor puro, y sexo salvaje.

-Vaya…eso si que es tenerlo claro, cielo.

-jajaja. ¿Y tú?¿Qué hay de tus ligues? No se por qué, pero me da que duermes acompañado con frecuencia.

-Bueno, no me puedo quejar. Tengo mis amigas, pero todos tenemos una edad, y tenemos muchos vicios en la vida diaria. Y al marido de alguna de ellas no le sentaría bien que mi “novia” se viniese a vivir conmigo.

-JAJAJAJAJAJAJA…Menudo tío tengo-Rió entre los vapores del alcohol- Seguro que las dejas bien agotadas.

Su forma de hablar me excitó –No tengo queja aún. De hecho, disfruto más cuando ellas disfrutan, que con mi corrida- confesé, animado por el ron.

-Vaya; va a resultar que eres un hombre de verdad. Dime, ¿Qué es lo que más te gusta?

-¿siendo sincero?- Pregunté- Claro..entre nosotros, sinceridad- me dijo. –Bueno, pues el anal y el oral. Hacerlo, claro.- confesé Vega me miró sonriendo, mientras apuraba su cubata.

-¿qué miras con esa cara, sobrinita?- le pregunte- Nada…te imaginaba desnudo, solo eso. ¿Quieres preguntarme algo?

-Si..¿Qué es lo que más te gusta a ti?- le pregunté, sentándome a su lado, mientras la miraba a los ojos.- Que encanta que me follen. Que entren en mí, con firmeza y fuerza, hasta que me llenen el culo con un río de leche. También me gusta mamarla; y que me la mamen…¿Quieres verme la polla?- preguntó cuando me vio sonreír a su respuesta.

-Claro..si no te es incómodo-

-Que va…eres mi tío; tu me protegerás de todo, ¿Verdad?- Dijo mientras levantaba su falda y bajaba sus bragas.

Surgió un rabo increíble. De longitud normal, pero muy grueso, depilado completamente y erecto y duro como el acero, como comprobé al agarrarlo por la base.

-Guau…es muy grande, y duro- Le dije, mirándola a los ojos mientras empezaba a masajear su polla.

-¿Te gusta?- Preguntó en un suspiro, entrecerrando los ojos. –Si, mucho…¿sabes que es la primera polla que agarro que no sea la mía?- le pregunté susurrándole al oído- ¿De verdad?- preguntó entrecortadamente- Si…y además, la primera que…- Sin poder reprimirme, me incliné sobre el rabo de mi sobrina y comencé a chuparlo con ansia. Era la primera polla que chupaba en mi vida; pero he de decir, que por los gemidos y los espasmos del cuerpecito de mi amada sobrinita, lo estaba haciendo muy bien

-¡¡¡OOOH…OOOHHHHH….SI, SIGUE, CABRÓN….COMO LA MAMAS!!!!.

-¿Lo hago bien, cariño?.

-Joder, hacía años que nadie me la comían así…sigue, no pares.

Poco a poco la fui desnudando, y ella a mí. En el momento que liberó mi rabo, lo metió con gula en la boca, chupando con fuerza.

-Tío…tu estás muy bien armado también. Vamos a pasarlo muy bien tu y yo, jijiji.

Después de pegarnos un 69 de campeonato, me miró a los ojos, y me preguntó

-¿Confías en mí?.

-Claro, ¿Por?

-Quiero darte todo el placer que puedas soportar. Pero no solo hoy. Quiero que seas mi amante; y yo la tuya.

-Me parece una buena idea…pero no entiendo que es lo que quieres.

-Espera- Dijo levantándose y dirigiéndose a su dormitorio. Al regresar, traía en su mano un bote de aceite.

-Confía en mí- me pidió mientras se arrodillaba en el suelo, y cogiéndome de las caderas, me puso el culo en pompa- Vas a disfrutar como esas putitas no te han hecho disfrutar jamás.- Y comenzó a jugar con su lengua en mi ano.

Nunca me habían hecho algo así, pero me gustó…me gustó mucho,

Vega me obligó a abrirme las nalgas para poder meter su lengua en mi culo mientras con una mano, me pajeaba y con la otra se pajeaba ella.

Aceitó la entrada de mi culo e introdujo un dedo, para que todo estuviese bien lubricado. –Todos creen que es mejor dilatar el culo antes de follarlo; pero se equivocan. Estando lubricado, es suficiente. No hay nada tan intenso como romper un culito virgen como el tuyo, querido tío. Te voy a desvirgar.-

En vez de asustarme, mi polla dio un bote, y comenzó a babear. Noté su polla gordota en la punta de mi ano, y entró de un solo empujón; no con violencia, sino con firmeza; sin prisa, pero sin detenerse o salirse.

Apreté los dientes, no era de dolor exactamente…sino por que me sentía lleno, a rebosar…era una sensación que no había sentido nunca, y me encantaba-

-Uhhhfffff- Resoplé.

-¡¡¡Siiii!! Qué apretadito lo tienes, hijo de puta…que culito virgen me estoy follando…que rico, papi.

-AAAhh…Sigue, puta, dame polla.- Aquél rabo me estaba partiendo en dos.

-¿Mi tío es un guarro y un pervertido? Tendré que castigarte- Me dijo, dándome un empellón que hizo chocar sus huevos con los míos.

Comenzó a darme por el culo con fuerza y brío. Acompasadamente, su polla llegaba a lo más profundo de mí, entre jadeos, suspiros y toda clase de insultos y obscenidades.

“como te tragas esta polla, cerdo cabrón”, “no eres mas que una putita cachonda”, “si tu hermana te viese follado por su hija” o “voy a llenar de leche el culito de mi tío”, fueron algunas de las cosas que gritó

En un momento dado, me dijo –Si mi amiga Nerea me viese, jejeje…-

-¿Qué?- le pregunté

-Nada, siempre me dice que se ha follado a aquel, o que le ha roto el culo a cual, siempre restregándomelo-

-Espera un momento- le dije, mientras me levanta, y cogía su móvil.

Me dirigí al comedor, me tumbé boca arriba en la mesa y puse su móvil en modo vídeo.

-Grava el polvo y mándaselo a esa zorra- le pedí sonriendo lascivamente. Ella, incrédula, preguntó -¿de verdad?¿Harás eso por mí?-

-Claro que sí putita; pero cuando te folle yo a ti, también habrá que hacer un vídeo-, le advertí

  • Por supuesto-, exclamó llena de alegría y deseo.

Comenzó a follarme y a pajearme brutalmente, mientras lo gravaba todo.

-Si, si…más, dame duro, zorra..

-Ufff, Uff..que rico, que apretadito…..me voy a correr-

Sacó su polla de mi culo y empezó a pajearse muy duro.-¿Qué haces?-

-Es que me voy a correr tío, y..-

-Si te vas a correr, métela hasta que mis cojones toquen tu ombligo, zorra- le ordené- ¿Qué te piensas?¿Que me vas a desvirgar el culo y te vas a correr fuera?, de eso nada. Y no dejes de gravar.

Me ensartó con fuerza, y el folleteo fue salvaje los escasos minutos que faltaban para la corrida más apoteósica que había disfrutado Vega.

-¡¡Si, si, zorra, córrete en mi culo; que tu leche rebose, más, zorra maaaaaasss…!!-

-¡¡Me corro, cabronazo estúpido, me corro como nunca!!!.

Mientras sentía los enormes chorros de leche de mi deliciosa sobrinita, comencé a soltar los míos, empapando sus duras tetas, su tripa y sus brazos. Casi acto segundo, sacó su polla de mi culo, y caímos redondos en el suelo, donde nos dormimos casi instantáneamente.

Nos despertamos al amanecer, el uno entre los brazos del otro, sonriendo como dos idiotas.

Vega le mandó nuestro vídeo a su amiga, cosa que me alegro, pues ya os contaré la relación que me une a ella a día de hoy.

Nos metimos en la ducha, entre caricias y besos. – ¿Deberíamos decírselo a papa?

-¿El qué? ¿Qué en la primera noche que pasas en León, le has desflorado el culo a tu tío?...no creo que se lo tomara muy bien.

-No, idiota, que me voy a vivir contigo, si te parece bien.

-Me parece bien; creo que será muy interesante.

Sellamos nuestra nueva relación enviando a Nerea una foto de la mamada que me hizo a continuación.