Estrella esta hospitalizada
Una muchacha de 20 sufre un accidente y entabla relación con una enfermera.
Me llamo Estrella, a los 20 años tuve un accidente de moto en el que me rompí el brazo derecho y la pierna izquierda, eso me dejo tumbada en la cama de un hospital durante bastantes semanas. Allí mi único contacto eran las enfermeras que iban pasando para cambiarme el camisón, darme la comida y otras cosas. Entre todas las enfermeras había una llamada Isabel, pequeñita, con el pelo muy corto y los ojos verdes que era la más cariñosa. Un día le dije:
Isabel, necesito ducharme, me siento fatal.
Eso no puede ser mi amor, pero no te preocupes que mañana vendré temprano y te lavare enterita para que te sientas mejor.
Al día siguiente vino con una gran poza de agua caliente, primero me desnudo, tengo que decir que mis pechos sin muy grandes y mis pezones se pusieron duros solo de rozarme.
que pechos más bonitos Estrella, y se le han puesto los pezones duros...
Es del frío, conteste yo algo avergonzada.
Cogió la esponja y empezó muy lentamente a lavarme, era como si me acariciara, cerré los ojos y sentí una gran excitación. Llego a mi coño y empezó a lavarlo lentamente.
¿Nunca has pensado en quitarte todo este pelo cielo?
Pues no, nunca.
No sabes lo que te pierdes, ¿quieres que yo te lo haga?
Yo no sabía que contestar, estaba muy excitada, entonces me dijo:
Si tienes alguna duda de cómo te quedará mira el mío.
Se levanto la bata blanca, y vi su coñito totalmente rasurado, una rajita maravillosa por la que sobresalía su clítoris que parecía humedo. Cogio mi mano izquierda y la acerco a su coño, se abrió de piernas y sentí todo su chochito suave y caliente, empezó a moverse en mi mano, y yo ya completamente excitada también me atreví a mover mis dedos... entonces dijo:
Esta noche vendré y te rasurare mi vida, veras que limpita te vas a quedar.
Ya no pude pensar en otra cosa, y llego la noche, todo estaba en calma y note como se deslizaba despacio en mi habitación corriendo el pestillo.
Aquí está Estrella, ábreme tu coñito para mí.
Primero noté el agua caliente, y luego la espuma de afeitar mas fría, después note como deslizaba la cuchilla una y otra vez, sentía le frío y el calor todo junto, mi clítoris palpitaba, al cabo de unos minutos empezó a aclararme, muy despacio con la esponja.
Ya esta mi niña lista y limpia.
Me beso en la boca, y esa misma lengua bajo en un momento a mi coño, la sentí cálida y juguetona, en mi clítoris, la notaba haciendo círculos, succionando, a la vez introdujo dos dedos en mi coño que estaba empapado, comenzó a moverlos muy deprisa a la vez que chupaba mas y mas fuerte, me vino un orgasmo tremendo que silencié, pero ella no me dejo parar y mientras mi coño palpitaba por el primer orgasmo siguió introduciendo su lengua en mi agujero, sus dedos en mi culo, y me vine otra vez, mojándola, corriéndome en su boca, como si fuera la primera vez.
Desde entonces siempre llevo mi coño muy rasurado y cuando me masturbo pienso en Isabel.