Este vestido me lo gané por puta

He dicho en reiteradas ocasiones que mis historias no tienen una relación cronológica, en este caso, lo que estoy a punto de contar sucedió hace apenas un par de meses.

En ese sentido al no establecer fechas, mis historias no necesariamente han sucedido hace poco tiempo, por lo que he de confesar que desde hace tiempo tengo el firme propósito de mantenerme fiel como medida para no arriesgar lo que tengo.

Mis relatos han servido en muchas ocasiones como una manera de calmar mi morbo, sin necesidad de recurrir a la infidelidad.

A pesar de ello, desde varios días antes de que pasaran los hechos que voy a describir, tuve varios momentos de una fuerte calentura que no podía apagar con las sesiones de sexo habituales con mi marido, necesitaba algo más y mi mente creativa empezó a fraguar un plan que esperaba calmara mis ganas.

Creo que parte de esa calentura provenía de una amiga cibernética que gusta de mis historias y me manda unas fotos de infarto, me identifico mucho con ella, buenota, nalgona, tetona, sexosa y puta a mas no poder,  su  nombre es Brenda.

Ella vive en otro país a muchos kilómetros de distancia de mí, así que es difícil jugar juntas, sin embargo decidí realizar una pequeña travesura que me ayudara a calmar mis ganas, aunque he de confesar que no salió justo como planeaba pero de todos modos fue muy placentero.

En la ciudad en la que vivo estaba por presentarse un espectáculo para mujeres, que no es nada más que un grupo de artistas de televisión jugando a chip and dale’s y cobrando un buen dinero por ello, la verdad es que este tipo de funciones me llaman la atención primero por mi naturaleza caliente y luego porque al ir con varias chicas solas, el ambiente se pone muy divertido.

Le pedí permiso a mi marido para asistir, complaciente como  siempre no tuvo problemas en darme su visto bueno, esperando que la combinación de alcohol con la variedad, podía hacerme regresar más caliente de lo normal, esto siempre es algo que a él le gusta bastante, suele esperarme despierto después de mis salidas a divertirme porque con un par de copas encima literalmente llego a violarlo.

Estuvo tan de acuerdo en el plan que incluso un proveedor de negocios es dueño de una suite y se la presta con frecuencia, asi que le llamó y hasta lugar gratis conseguimos, mi marido trató de complacerme, desconocía y desconoce lo "complacida" que quedé.

A partir del plan empecé a idear como hacer más intensa mi noche, el tiempo era fundamental porque la salida tenía que ser esa noche y no tenía mucho margen de maniobra.

Decidí entonces hacer partícipe a un par de lectores / admiradores con los que llevo tiempo escribiéndome y que se han ganado mi confianza.

Luego le escribí a Brenda y le informé que estaba planeando una travesura que la incluía a ella, le preguntaba si necesitaba más datos o si procedía a iniciarla y sorprenderla, su respuesta reflejaba su instinto, solo respondió: Sorpréndeme.

Con esto tenía su entera confianza para hacer lo que me pareciera conveniente, no pensaba traicionar esta confianza haciendo algo que la comprometiera.

Una vez ideado el plan me decidí por 4 lectores y este es más o menos el correo que les envié, en todos ellos copie a Brenda:

Esta es la parte medular del correo:

-          Estoy preparando una historia que se llamará "este vestido me lo gané por puta", en ella mi amiga Brenda (a quién copio) y uno o dos lectores que me han llamado la atención serán participes.

-          Las reglas las establecemos Brenda y yo,  no hay negociación, si aceptas será bajo nuestras condiciones, en caso de que no estés de acuerdo, la propuesta se la haré a alguien mas.

-          Esto no implica conocernos ni tener contacto físico, es solo formar parte de una fantasía.

-          Creo que es una gran oportunidad de tener contacto con una par de putas, calientes y buenotas

-          La historia se maneja así:

• Deberás comprar un par de vestidos idénticos, los vestidos deberán ser extremadamente sexys pero "usables", es decir deben llamar atención pero sin ser totalmente descarados, del tipo de prendas que están en el límite para ser usadas en un bar.
• Además deberás comprar una par de tangas también idénticas
• Es tu decisión si acompañas el atuendo con otro tipo de accesorio como zapatos, ropa interior, lencería para la intimidad etc. Si decides esto deberás de comprarlas también en pares idénticos.
• Deberás enviar un paquete a mi atención aquí en México y hacer llegar el otro a Venezuela
• Ya con las prendas en nuestro poder nos pondremos de acuerdo para salir exactamente la misma noche y con el mismo atuendo.
• El tema es que al ponernos el atuendo nos diremos a nosotras mismas "esto me lo gané por puta" y ver si nos empezamos a calentar desde aquí
• Como premio tendrás una foto del atuendo en donde por supuesto no se verán nuestros rostros, en cuanto cada una de nosotras se termine de arreglar mandará un correo con copia a los demás con su foto.
• Ambas saldremos a buscar un macho que nos calme las ganas, esto no deberá de ser difícil; el punto es que Brenda y yo cojamos esa misma noche, con el mismo atuendo de putas y con la ropa que alguien más nos regaló.
• De manera deseable más no obligatoria podremos mandar correos durante la noche para platicar como nos está pintando la noche.
• Una vez terminada la experiencia, cada una contará su parte y se construirá un relato que eventualmente será publicado

-          Es importante reiterar que el tema no es que queramos que nos compres ropa, ambas tenemos la posibilidad de comprar cuantas prendas queramos, es el morbo de usar algo que fue escogido por alguien mas

-          Si estás de acuerdo te daremos instrucciones de envío, en donde se buscará mantener nuestras condiciones de privacidad

-          En mi condición de mujer casada no me es muy fácil tener este tipo de salidas sola, así que mi atuendo deberá de llegar antes del xxxx, ya que ese día ya tengo programada una salida, la intención sería que la cita se diera en esa fecha, espero que tengas los días suficientes para cumplir con el compromiso.

A partir de ahí esperé los resultados, los cuales empezaron pronto a fluir, Brenda aceptó de inmediato aunque estableció dudas sobre la logística y los tiempos, en su trabajo viaja mucho y a veces no está disponible.

De los lectores dos de ellos respondieron inmediatamente que sí, otro tardó bastante en responder y cuando lo hizo ya era tarde, el último simplemente nunca contestó.

De los dos finalistas uno de ellos tuvo que salir de la ciudad de improvisto y ya no pudo mandar su paquete aunque si aportó el recurso para una nueva travesura que no tenía en mente y que tal vez luego escriba aunque no sé si publique, en tal caso el relato se llamaría "Este viaje me lo gané por puta"

Con ello me quedaba un lector en la jugada, los tiempos eran cortos pero con todo y ello siempre se mostró muy interesado.

De última hora mi amiga se tuvo que salir del proyecto porque le salió un viaje inesperado, así me quedé sola con mi lector para cumplir con mi fantasía.

Durante todo este proceso hubo una tensión sexual muy agradable, diario debía revisar mis correos y coordinar varias cosas, de repente llegué a pensar que las cosas no saldrían porque no todos tenían la posibilidad de adaptarse a mis tiempos, sin embargo fue muy grato darme cuenta de la disponibilidad de la mayoría de ellos en participar, es una realidad que muchas personas desean ponerle picardía a su vida sexual.

En esos días mi libido estaba a tope, me masturbé con regularidad y tenía sesiones intensas de sexo con mi marido, esto era un solo un paliativo para mi deseo sexual, después de coger notaba que mis ganas seguían casi intactas, pensaba en mi plan y de inmediato sentía mariposas en el estómago.

En varias ocasiones mientras tenía sexo con mi esposo o me masturbaba, cerraba los ojos y me imaginaba mi tanga y mi vestido, fantaseaba con llegar a un bar vestida súper sexy y ser manoseada descaradamente por el primer cabrón que se atreviera a hacerlo, las imágenes volaban en mi mente como una película erótica, en sí, era penetrada por mi marido pero mi satisfacción estaba en mi cerebro y no tanto en mi cuerpo.

Tuve orgasmos deliciosos en esos días y el morbo no hacía otra cosa que incrementar, pasara lo que pasara yo saldría el día pactado, lo que no sabía es si contaría con el paquete y más aún, no sabía si en caso de no contar con él iba a seguir adelante con el plan de la infidelidad, he de confesar que hubiera sido altamente probable que sin el paquete, hubiese regresado a casa temprano a coger sólo con mi esposo.

Justo el día del evento me llegó el paquete, se trataba de un vestido rosa o fucsia, muy entallado, de una sola pieza y con un par de tirantes que podían combinarse para hacer distinto diseños en la parte de arriba, el vestido cumplía perfecto con los requisitos, era muy sexy pero aún era “usable”, estaba justo en los límites para salir con él, la flexibilidad del uso de los tirantes podía hacer que se hiciera más o menos sexy.

Además del vestido llegó una tanga del mismo color, muy pequeña y también justo como me gustan de tirantes a los lados y con un triángulo atrás.

El paquete llegó por la tarde, como niña pequeña lo abrí de inmediato y corrí hacia el vestidor de mi casa, no miento cuando digo que me mojé cuando me probé ambas prendas, estaba tan caliente que ahí mismo me hubiera cogido al primero que me topara, al estar sola en casa eso no pudo ser, pero nada me impidió comenzar a jugar con mis tetas, con toda intención no seguí porque no quería terminar, quería mantenerme caliente hasta el momento que un macho bajara mi calentura.

Como me gusta pensar que soy una mujer cumplida me dispuse a tomarme varias fotos y mandarlas por correo a los lectores, el título decía: “Este vestido me lo gané por puta”

Me quité la ropa recién llegada y me dispuse a regresar al trabajo, simplemente no podía concentrarme, al llegar la hora de salida mis amigas pasaron por mí  y de ahí nos fuimos al espectáculo en mi carro.

Mis amigas son casadas fieles, la mayoría amas de casa y no saben de mis aventuras, no tienen idea de lo caliente que soy, a sus ojos soy otra mujer casada de buena vida y devota a su marido y su hogar; así que en ese entorno no podía llevar a cabo la conclusión de mi plan.

Mi intención era sencilla ir al espectáculo, tomar un par de tragos e incrementar mi calentura viendo hombres de cuerpos bien formados y semidesnudos, luego dejar a mis amigas en sus carros y quedarme sola, irme por mi cuenta a un lugar de no mucha clase a levantar a mi próxima víctima.

De esta forma el vestido se usaría en la segunda parte de mi plan, la tanga decidí usarla ya estando en el evento justo en el momento preciso en que mi calentura se incrementara con la visión de los hombres desnudos; ambas prendas (tanga y vestido) se guardaron en mi bolsa.

Para acabar de completar el cuadro le pedí prestado su coche a mi marido, es un auto europeo de lujo que me encanta, me gustaba la idea de putear en su auto y en el evento para el que él mismo me había conseguido entradas.

Llegamos al evento y nos instalamos en la suite, era súper exclusiva con muy buena vista, baño y sala privada, teníamos a nuestra disposición un mesero y las bebidas y los gritos comenzaron a fluir, al terminar mi primer margarita y con la visión de diversos machos en poca ropa, mi mente recordaba ya lo sucedido apenas una horas antes cuando me tocaba la tetas con una atuendo que recién me había ganado por puta, en ese momento me dirigí al baño y me puse mi nueva tanga rosa, era muy pequeña y se me metía bastante en el culo, al colocarla parecía que tenía un vibrador integrado, sentí de inmediato como mi calentura se incrementó.

Regresé con mis amigas y seguí con la fiesta, debía de moderar mi calentura interna y mi gusto por lo que veía, debía de aparentar que sólo echaba relajo junto con ellas, la verdad es que en mi interior quería que el tiempo pasara, ponerme mi nuevo vestido y buscar una buena verga que calmara mis ganas.

Para las 11 pm ya estaba libre, un par de margaritas y varios hombres desnudos después de ponerme la tanga, mi calentura estaba al extremo, dejé a mis amigas en el lugar donde habían dejado su carro y con el pretexto de tener otro compromiso me fui sola.

Manejé un rato por la ciudad hasta encontrar un lugar adecuado, tenía que encontrar un lugar no muy exclusivo pero tampoco de mala muerte, debía de asegurarme de no encontrar a ninguna persona conocida pero tampoco irme a un lugar donde mi seguridad peligrara.

Encontré entonces un lugar donde se bailaba cumbia y reggaetón, era el lugar ideal para mí, apenas al llegar me dirigí al baño para cambiarme de ropa, me puse el vestido y amarré los tirantes en la manera más sensual posible, con un escote que recorría mis senos por la mitad, por supuesto que no use bra, así que mis tetas y pezones eran evidentes.

Salí del baño y di una vuelta por el lugar con el único objetivo de exhibirme, al instante sentí miradas por todos lados de hombres y mujeres posándose en mis nalgas, tetas y algunas pocas en mi cara; al terminar mi recorrido tomé una mesa y me senté sola, tome mi teléfono y le escribí al donador de mi vestido: “Estoy caliente, la fiesta apenas empieza y ya acaparo varias miradas” ese sería el último correo de la noche, solo hasta la publicación de esta historia sabrá, junto con todos ustedes, lo que pasó esa noche.

No pasó mucho rato para que alguien se me acercara y me pidiera bailar, sin decir palabra accedí, yo tenía un cierto aire de puta pedante que a veces me encanta, solo lo miré, me levanté y caminé por delante de él moviendo mis nalgas sin pronunciar palabra.

Al llegar a la pista me coloqué de espaldas a él y así comencé a bailar, siempre le di la espalada y me aseguré de mover mis caderas lo mejor que pude, pasó poco tiempo para que tomara mi cintura y yo me dejaba hacer, sin dirigirle la palabra y sin voltearlo a ver.

Aprovechando el tipo de baile y el ambiente aproveché para bailar más sexy y “perrear” con él, sacaba mis nalgas y se las arrimaba, luego las movía de arriba hacia abajo descaradamente; él por su parte ya me tomaba de las caderas y acompañaba mi ritmo arrimándome su paquete.

No tarde en sentí su miembro duro entre mis nalgas; duro pero pequeño. No era lo que estaba buscando, si la intención era sólo el sexo, y no importaba ni el físico ni la buena conversación, entonces lo único importante era el tamaño de la verga en cuestión, si habría de hacerlo habría de hacerlo con la verga más grande que estuviera disponible y la noche era aún joven para pensar que ésta sería mi única opción.

Al terminar la canción regresé a la mesa nuevamente sin decir palabra, no pasó mucho tiempo para que un nuevo prospecto apareciera y me invitara a bailar, la dinámica fue básicamente la misma, misma actitud, misma secuencia de baile y desafortunadamente mismo tamaño de verga; así que evidentemente mismo resultado, una canción y de regreso.

Al volver a la mesa decidí hacer un cambio en mi estrategia, solo necesitaba una verga, no necesitaba un hombre, ni un macho, no necesitaba a alguien guapo o varonil, alto o pequeño, solo quería una verga de buen tamaño y con suerte de buen desempeño.

El lugar estaba bastante lleno así que había gente parada en los pasillos, decidí aprovechar esto, me dirigí al baño y ante una fila de hombres rocé mis nalgas contra varios de ellos tratando de encontrar la verga que buscaba, de todas sentí una en especial, llegué al baño y aproveché mi camino de regreso para hacer un segundo recorrido, la estrategia funcionó y en la segunda vuelta ya la noté un poco más dura, al sentirla supe que tenía un ganador, al terminar de recorrer mi culo sobre él, volteé a verlo pícaramente y le sonreí, él entendió de inmediato y me siguió, tomó mi mano y me llevó a bailar.

Nuevamente hice lo mismo, le di la espalda y comencé a moverme lo más sexy posible, la diferencia era que ahora si tenía una idea de lo que tenía detrás de mí y quería terminar lo antes posible mi búsqueda porque la calentura del proceso era mucha y no tenía tanto tiempo, le había avisado a mi marido que me iría a tomar un par de tragos con mis amigas al terminar el espectáculo, pero no podía demorarme tanto.

Al poco rato ya me movía como toda una profesional y le restregaba mis nalgas sobre su pelvis, al momento sentí como crecía su verga, y con gusto la sentí pegada a mi culo; tomó mis caderas y literalmente me cogía por encima de la ropa; para la segunda canción sus manos se posaban alternándose en mis nalgas y mis tetas.

Puede confirmar que no me equivocaba en el tamaño, ya una vez que se puso dura confirmé que tenía lo que estaba buscando; el tipo era más o menos de mi edad, estatura media, moreno, pelo corto, de espalda muy ancha y con una barba de varios días sin cuidar.

Aún no le había dirigido al palabra y solo me dejaba manosear mientras le movía el culo sin ningún pudor, mientras bailaba cerraba mis ojos y recordaba el vestido y la tanga que traía puesta y más caliente me ponía.

Por primera vez voltee y lo tuve de frente, entonces le planté un beso intenso y apasionado, mi lengua jugó un buen rato con la suya mientras con sus manos apretaba mis nalgas, ahí fue cuando le dirigí por primera vez la palabra:

-          Vámonos

Fue lo primero y último que dije, me tomó de la mano y me llevó para afuera, al salir me llevaba de la cintura con su mano sobre mi nalgas, me sentía como una puta y me encantaba. Al salir le entregué mis llaves al Valet Parking, a hacerlo le dije:

-          Nos vamos en mi carro

Mientras esperábamos le besaba el oído y el cuello, literalmente yo lo estaba agasajando con mi boca mientras él se dejaba hacer.

Quería sentirme más puta, quería que manejara el carro de lujo de mi esposo, quería que la gente creyera que era su auto y que yo era una golfa que acababa de levantar, quería mamársela en el auto de mi marido justo sentado donde se sienta mi pareja, quería sacarme las tetas en el asiento en donde paseo con mi marido y quería coger ahí mismo, quería sentirme como la perra infiel que a veces es derrotada por la calentura.

Al subirnos al auto de inmediato me saqué las tetas y me fui hacia abajo para sacar su verga y comenzar a mamarla, lo hice tan rápido que estoy segura que el Valet alcanzó a verme,  al comenzar a andar, el camino estaba lejos de estar desierto, era una zona de bares, pasamos justo por la puerta del lugar del que salimos a un velocidad baja, supongo que varias personas pudieron ver que una puta se la mamaba a un afortunado tipo que manejaba una auto europeo de lujo, para hacerlo aún más evidente no me senté sobre mi asiento, sino que literalmente me puse en cuatro patas, con las rodillas sobre el asiento, con ello mis nalgas podían verse desde afuera mientras seguía con mi mamada.

Mientras la chupaba de arriba abajo le daba de lengüetazos a la cabeza de su verga, se veía que lo disfrutaba porque sentí sus músculos comprimirse, yo estaba tan caliente que gemía mientras lo hacía, le dije:

-          Apúrate me urge coger¡¡

Luego dejé de hacerlo y me incorporé, sentada, puse mi espalda contra la puerta para que me tuviera de frente, con las tetas de fuera comencé a tocarme y le regalé un show bastante erótico, mientras lo hacía, él se masturbaba y yo estaba que explotaba.

Me llevó a un motel cercano, al estacionar el auto de inmediato me abalancé hacía él, le puse un condón y lo monté, ahí mismo en el auto; el vestido, todo el plan, el estar en el carro de mi esposo y coger con un completo desconocido en el asiento donde mi esposo conduce, me tenía completamente pendeja

Lo monté salvajemente, literalmente me lo cogí, en cuestión de segundos, casi en cuanto me metí su verga tuve mi primer orgasmo

-          Ahhhhhhhhhh¡¡¡¡¡¡¡¡ asi¡¡¡¡¡ asii¡¡¡¡¡ así cabrón¡¡¡¡¡¡

Con todo y el orgasmo no reduje el ritmo por el contrario lo incrementé, solo veía su cara abrumada siendo violado, no me importaba él en lo más mínimo era todo yo y mi placer, no podía parar, durante los minutos que duró la cogida no le di tregua, uno y otro orgasmo explotaron mi cuerpo, toda la calentura todas las ganas contenidas explotaron, valió la pena todo el proceso, puede haber tenido varios orgasmos antes en varios lapsos del día, pero los había ahorrado para este momento y hoy mi cuerpo despilfarraba estos orgasmos que habían batallado tanto en salir.

-          Ahhhhhhhhhhhhhhhh¡¡¡¡ que rico¡¡¡¡¡ no pares cabrón¡¡¡¡¡, te gusta esta puta pendejo????

-          Si

-          Pues aprovecha porque no me vas a volver hijo de la chingada¡¡¡ agarra mis tetas¡¡ chúpalas¡¡

Así lo hizo, se comía mis tetas con desesperación y yo estaba en el cielo, la verdad lo hacía bien y su verga era bastante rica, hubiera pensado en volver a verlo si no fuera porque tenía muy claro mi plan de que fuera una persona a la que no volvería a ver, ese morbo de hacerlo con un desconocido con quien apenas había intercambiado palabra hacía que se incrementara aún más mi calentura.

Terminamos riquísimo, y subimos al cuarto, hice todo lo posible porque se recuperara y se excitara rápido para no perder el tiempo; lo logré, no pasó mucho tiempo para cuando ya lo cabalgaba nuevamente sobre la cama.

Conmigo encima movía yo generosamente las nalgas, a ratos bajaba hacía él y le ofrecía mis tetas para que me las mamara mientras me cogía, luego mi primer orgasmo me retiré y me puse un cuatro patas, me penetró de inmediato pero con un ritmo semi lento

-          Así no cabrón¡¡¡¡ dame duro¡¡¡

Aceleró el ritmo y al poco rato ya me taladraba sin piedad, yo también hacía mi parte y me movía para incrementar el placer de la cogida

-          Mas¡¡¡ mas¡¡¡¡ que rico¡¡¡¡¡ no se te ocurra parar¡¡¡ Ahhhhhhh¡¡¡¡¡¡¡

En todo este proceso, con toda la intención me quede con el vestido puesto, al final el pequeño vestido estaba únicamente sobre mi cintura, pero lo sentía sobre mi piel y eso me encantaba, mientras más fuertes eran las envestidas pensaba: este vestido y esta cogida me las gane por puta, en un momento dado incluso lo llegue a decir en voz alta

-          Te gustó mi vestido cabrón??

-          Si mucho

-          Pues este vestido y esta cogida me la gané por puta¡¡¡¡ ahhhhhhhh¡¡¡¡

Y al decirlo tuve el mejor orgasmo de la noche y justó mi amante terminó al mismo tiempo, no entendió mi comentario pero no importaba, él no preguntó y yo no pensaba decirle

De inmediato me arreglé y debía irme

-          Tienes dinero para un taxi?

-          Si

-          Bueno pues ya debo irme, bye

-          Te vas?? Me vas a dejar aquí??

-          Si

-          Cómo te llamas

-          BRENDA  (era mi manera de pensar que al final las dos cogimos ese día)

-          Te veré otra vez? Me das tu número??

-          No, debo irme

Y salí corriendo aprovechando que él seguía desnudo, en el camino me di cuenta que seguía caliente por todo lo sucedido y hasta por el hecho de haberlo dejado ahí como un objeto.

Al llegar a mi casa entré al baño que se encuentra justo a la entrada y me aseé un poco o un mucho, mi marido dormía pero todavía era una hora razonable

Lo desperté a besos y le dije:

-          Papi estoy muy caliente, al llegar entré al baño y me puse este vestido nuevo para ti, lo quiero usar para coger, cógeme con este vestido puesto rey¡¡

Y así en pocos segundos ya tenía la verga de mi marido nuevamente ensartada en mi cuerpo,  estaba tan caliente que fue la misma historia, casi al instante tuve mi primer orgasmo

-          Papi estuve muy caliente todo el día¡¡¡¡ necesitaba una buena verga¡¡¡¡¡ ahhhhhhh ohhhhh¡¡¡

Y no mentía, solo que no aclaré que había tenido más de una buena verga esa noche, mi esposo quedó encantado con la sorpresa y lo bien que me quedaba mi nuevo vestido.

Y esa fue la historia del vestido y la tanga que me gané por puta, espero que haya valido la pena el esfuerzo hecho por mis dos lectores.

Aprovecho para agradecer nuevamente a todos los que gustan de mis historias, además informar que me tomaré un rato sin publicar, no sé incluso si volveré a hacerlo; no me ha gustado el uso de mis historias en diversas partes sin mi autorización, incluso hay gente que las ha usado haciendo creer que son suyas, cosa que no creo que sea correcta.

Creo además que esta página debe de revisar sus políticas, me parece que hay lectores con actitudes poco motivantes para escritores que en su esencia no somos profesionales, aunque no me siento particularmente ofendida por ello, soy también lectora de la página y hay personas que califican y opinan con demasiada dureza, descalificando y desmotivando a varios escritores que con talento o no, lo único que pretenden es compartir sus textos, este solo hecho ya merece respeto, sin mencionar el tiempo que debe el escritor de dedicar a realizar y revisar sus historias.

Además creo que hay ciclos que es bueno cerrar o al menos hacer una sana pausa en el camino; seguiré escribiendo porque aún tengo varias ideas en la cabeza, incluso tengo relatos ya escritos, pero encontraré por el momento, otras maneras de compartirlos sólo con las personas que realmente les interese.