Estando muy cerca de la muerte (6)*

Luisa:

Ya joderle mas la vida a Sam, no podía… era justo aceptar que soy una cobarde que no se atreve aceptar quien es.

¿Para que suplicar amor a alguien que me lo da, pero yo no lo quiero recibir?

El alma, se me estaba partiendo en dos

Salí de esa hacienda… traumada… estuve a punto de acostarme con ella; y debo decir que, mucha parte de no hacerlo, quizás también era por miedo a que alguien nos hubiera visto… que patético, no?

Hoy es sábado!!

La fiesta de todos los estudiantes de medicina

-hola mi vida

-ma. Toca cuando entres al cuarto – le digo con mi voz todavía ronca de apenas despertarme

-hah bueno – se devolvió – toc, toc… hija ¿puedo pasar?

-no me refería a que te devolvieras pero bueno – agité mi cabeza - ¿Cómo amaneces?

-bien amor - sonrió – un poco trasnochada

-¿volviste a salir anoche?

-si y me fue --ES – PEC- TA – CU – LAR

Callé

-no me digas que te vas a molestar por eso

-¿te parece lindo el ejemplo que le das a Maite?

-ugghh – me miró frustrada – vas a ir a la fiesta que tienen hoy?

-Stop!! ¿Tu como sabes que hay fiesta?

-ah… por que si… - se puso nerviosa – tu me lo habías dicho

-haha yo no te he dicho nada de eso

-mira, hasta la memoria te está fallando – se dio la vuelta y salió

Lo más probable es que… esté saliendo con alguien de la universidad

Toda la mañana me la pasé viendo televisión, pensando en todo… pensando en Sam… pensando en que quedaría con Cristina, pensando en que… ya no la tendría para mi jamás

La tarde, llegó rápidamente y las muchachas llegaron (porristas) aquí en mi casa, nos organizamos, en eso se nos fue casi 4 horas.. pero el fin quedamos listas

Fuimos a comer, y por ahí derecho llegamos a la universidad

Decir que "había mucha gente" era poquito. Sin pensarlo, con mi mirada buscaba a Cristina… entramos y la vi… se dio la vuelta y me miró

Se veía linda

Tenía un pequeño vestido azul, que resaltaba su figura por lo pegado que estaba a su cuerpo

Su cabello se veía perfecto, y esa sonrisa hacia una excelente mezcla con su personalidad

La fiesta comenzó y no hay que decir que… "fuimos el centro de atención" es decir… esta fiesta sin nosotros no es nada… (Modestia aparte)

Cada segundo que pasaba, me recataba de que Pablo no estuviera por ahí, tenia miedo… el, se muy bien que es capaz de contar todo y no quiero eso… no me imagino en lengua de toda esta gente murmurando que mi sexualidad, se cambió de bando

Los hombres, se acercaban a mí detenidamente, bailé hasta donde me cansé, quería olvidarme un rato de todo – jajá ¿a quien quiero engañar? Si aquí, en lo último que estoy pensando es en Sam – si, lo se… soy de lo peor… pero al menos reconozco que no la merezco

¿Cómo puedo estar feliz acá mientras que ella tiene que estar lejos de todo por mi culpa?

Sentada en una de las mesas, volteé a ver a Cristina, hablaba con un tipo que de seguro – estaba proponiéndole bailar – para mas tarde hablarle al oído y decirle "que te parece si vamos a otro lugar?" jajaja… que absurdo que es la situación tan tonta en la que se meten los hombres… ella, como me lo esperaba no aceptó y salió a los lados de la piscina.

Me levanté. Dejando a todos atrás y la seguí… me daba la espalda

-Buenas noches señorita – saludé haciéndome notar

Bebió de su copa y me miró – hola Luisa

La felicité por la fiesta, era obvio que aquí solo había rastros de que todo lo arregló una mujer… o varias, en fin

-creo que tu ganas Cristina – recorrí dos pasos que me separaban de ella – creo que… no la merezco – acepté

Ella… solo se limitaba a analizarme, quizás piensa que miento o quizás… solo quizás… se está alegrando

Entre abrió sus labios para responderme cuando sentí que me cogían del brazo fuertemente

El, ni siquiera me dio tiempo de reaccionar, cuando pude pararme por mi sola, comenzó a gritarme cosas… estábamos en toda la mitad del salón

Miré a la gente y los constantes empujones de Pablo me hicieron mirarlo

-¿Qué te pasa estúpido? A mi no me gritas – le seguí la discusión

-te dije que no fueras a verla y te valió mierda!! Carajo

-a mi no me mandas – reí – deja de ser tonto!!

-eres una puta Luisa!!

-jajaja una puta por la que te estás peleando

En ese momento quise tirar todo a la basura, las apariencias, el que dirán, los chismes… todo

-maldita Lesbiana!! – dijo con rabia

Seguí riendo… hasta el punto de que cogió con sus manos y me empujó, haciéndome caer

Desde el piso, miré un circulo que comenzaba a formarse "que bien" – pensé---

El seguía discutiendo, su rostro estaba rojo… me asustaba… me quedé un instante allí hasta que unas manos suaves me ayudaron a levantarme

– ¡¡IMBECIL!! –

Le dijo Cristina, me paré y Pablo seguía igual

-jajá esta es la nueva pareja o qué?

Ella lo empujó y al final, solo atinó a pegarle en la cara

Como era de esperarlo, se enfureció más y dispuesto a golpearla… sus amigos llegaron y lo detuvieron

Cristina se acomodó delante de mí.. y de repente pensé

"la gente iba a averiguar por que esta pelea" "tarde que temprano todos lo iban a saber" entonces… ¿para que mas ocultar?

-dilo - pasé cerca de él – diles a todos lo que soy, anda – lo reté – habla!! – grité

Sus amigos seguían teniéndolo, y

Le evité que hiciera el esfuerzo

Pedí un micrófono, y todos mirándome a mí, escucharon

-lo que mi EX quiere decirles, es que su Ex lo dejó por que se dio cuenta de que le gustan las chicas

El silencio que me esperaba, surgió

-si, eso es… entonces este tipito – lo señalé – cree que puede seguir chantajeándome y no, no, no – miré a Cristina – ya lo saben!! Me gustan las niñas y… - aclaré – no recibo hojas de vida

Jajaja no quería que por haberme declarado… todas las mujeres creyeran que en todas me iba fijar, eso era ridículo!!

En ese momento, sentí miedo… vergüenza, sentí rabia y un profundo descanso

La gente, para mi sorpresa, comenzó a reírse de Pablo, a decirle cosas burlonas

Su mirada seguía continuamente atraída por mi – esta no se queda así Luisa – y salió con todos sus amigos

Tenia tantas ganas de

Ni siquiera sabia que hacer, seguían mirándome… me sumergí en mirar al piso

-ven. Vámonos – dijo ella, tomándome de la mano

No pronuncié ninguna mirada en el camino

No sabia ni a donde nos dirigíamos

Hasta que vi un pequeño lugar de donde se originaba una música suave

-¿quieres que tomemos algo?

-quiero beber – expresé con lagrimas

Entramos al lugar, estaba todo prácticamente que a oscuras, se me hizo muy peculiar que ni siquiera había pista de baile, solo eran asientos

Había una pantalla gigante, que era la que le daba iluminación a lugar… donde se veían los videos de las canciones que sonaban

Se acercó un mesero y antes de que preguntara que deseábamos tomar, respondí

-una botella de whisky

-Luisa, es muy fuerte, eso no

-gracias – no le di otra opción al mesero

Cristina mi miraba con las manos chocadas, sobre sus labios

-tenia miedo de saber quien era en realidad. Sam, siempre, desde un principio me había parecido una niña demasiado interesante y esa maldita apuesta fue lo que complicó todo

Asintió

-me metí con ella, y terminó siendo mas de lo yo esperaba… logré que hablara un poco mas, logré que sonriera constantemente, logré que me dijera "te amo"… ¿Sabes? Es muy tierna, había días en los que me invitaba a su casa, veíamos alguna película, mientras comíamos helado y era genial… cuando me abrazaba, cuando sus besos me daban eso que nunca sentí con alguien más

Baja y subía su cabeza, dispuesta a seguir escuchando

-entre mas días pasaban, mas me gustaba, nunca sabia que esperarme con ella, siempre era una continua sorpresa… dejé de pasar tiempo con él, con mis amigas por que solo quería ocupar mi tiempo en ella

-sigue

-hasta que llegó ese martes… donde fuimos a comer, caminamos por un parque, donde sus besos estaban haciéndome querer mas y cuando pidió un taxi para llevarme a casa, simplemente… no la dejé

-y estuvieron juntas – complementó

-y fue lo mas hermoso que viví Cristina… jamás había tenido algo sexual que fuera tan tierno… el miedo que sentí en ese momento era indescriptible, pero ahí estaba… dispuesta a sentir y hacerla sentir. Esa noche fue la que me reafirmó que… me estaba enamorando… y no podía con eso – comencé a beber – yo, enamorada de una mujer? O sea ¿yo? – Sonrió – yo tenía miedo, en realidad admiro a todas esas personas que lo aceptan maduramente, por que créeme que no es fácil

-lo se

-y, al día siguiente no hablamos, ella me buscó pero dejó de insistir, supongo que se dio cuenta de que lo que había pasado me había dejando en blanco. Yo… me obligué a pensar que seguía en una apuesta que ya había ganado y… pasó eso… el día que cumplimos un mes… ella me vio con Pablo

-si, yo lo vi

-¿Sabes? Me dio una cadena hermosa… tenia un corazón en oro, y muy pequeño decía "te amo"

Volvió a bajar y subir su cabeza

-me sentí mal cuando tocó mi espalda y me felicitó por engañarla, me sentí mal cuando me di cuenta de que estaba en el hospital, me sentí mal cuando me dijo llorando que me largara de su vida, me sentí mal cuando… la vi contigo… cuando se besaron… - otra copa mas de whisky, pasó por mi garganta – me sentí mal cuando la seguí, y… vi que se refugiaba en esas pastillas, me siento mal de ver que está en un centro de rehabilitación por mi culpa, me siento mal por que a pesar de todo, esta conmigo y… yo sigo huyendo a lo que soy

-entiendo – dijo pausadamente

-yo la quiero Cristina… pero no la merezco

Ella, se fue acomodando a mi lado

La conversación se hizo larga

Su compañía me hacia bien, era tranquila… es irónico que las dos, nos peleamos por Sam… y hoy estamos juntas hablando de la misma persona

-¿Qué pasará entre Sam y tu? – le pregunté con mas tragos en mi cabeza de los que pensaba tomarme (que eran 4 o 5)

-eso solo decide ella Luisa

Ambas, estábamos lo demasiado tomadas como para pensar en que estábamos haciendo

Mis ojos buscaron los suyos

Y sin pensarlo

De la forma más repentina

Y cuando menos lo pensé

Mis labios estaban en contraste con los suyos

Suspiré e inmediatamente la cogí de su rostro… ¿Qué estaba haciendo? No yo misma lo sabia, ella se quedó mirándome estática, sin digerir algún acto o palabra… me acerqué mas hasta que

Lo irremediable pasó

Iniciamos un beso corto… de unos 5 segundos

Me separé y ella me miró

No dijo nada, por lo que accedí a continuar

Sus labios eran suaves, y sus besos encantadores… ella, al darse cuenta de que yo la estaba provocando, siguió mi juego y en muy poco tiempo… la batalla por quien cedía más o simplemente, quien se rendía ante la otra… estaba comenzando.

Mientras la besaba, me daba cuenta que lo que estaba haciendo no estaba bien… pero tampoco quería detenerme, pasé mis manos alrededor de su cuello… y ella… comenzaba a jalar mi labio

-suspiré-

El beso se subió aun más de tono

La sensualidad estaba cobrando venganza ante la ternura, ya la forma en que nos besábamos no era romántica ni lenta sino todo lo contrario

Hasta que nos dimos cuenta de que ya había pasado mucho tiempo y estábamos todavía en eso

Lentamente y sin querer hacerlo, nos fuimos separando

Su respiración estaba demasiado agitada, y la mía… la mía estaba igual o peor

-Lo siento – dijimos las dos en el mismo momento

Baje mi rostro apenas dándome cuenta de la porquería en que me estaba convirtiendo

-yo

-no digas nada Luisa, así es mejor

-si

Terminamos la botella y salimos, como ambas estábamos tomadas, pedimos un taxi y ella dejó su carro en un parqueadero

Me llevó hasta mi casa y se fue

Ninguna dijo una sola palabra

Es que ¿Qué carajos fue eso?

La culpabilidad y el remordimiento por Sam, no me dejaba tranquila

Ahora si vengo a pensar lo que hice – que conveniente – Sam está allá por mi culpa, sufre por mi culpa, y yo me voy de fiesta y me beso con Cristina… pero ¿Por qué ella me correspondió así el beso?

Me acosté sobre mi cama a pensar, pero el licor que había digerido ya me estaba pasando su factura y un malestar terrible se apoderó de mi cuerpo

Me la pasaba de la cama al baño y del baño a la cama

Ya con esta, eran 5 veces que había ido a vomitar todo lo que había bebido

Salí del cuarto a tomarme alguna pastilla que me calmara y sorpresivamente vi a Maite (mi hermana) sentada en las rodillas viendo hacia abajo

-que haces aquí? – le pregunté

Ella, se puso sus dedos sobre sus labios haciendo un perfecto "Sshhh" y me señaló a donde ella miraba

Me recaté de que algunos ruidos se escuchaban… presté aun mas atención cuando me di cuenta que eran pequeños gemidos

-Esto si es el colmo – dije en voz alta, pero no la suficiente para que mi mamá escuchara

-vete para el cuarto – le ordené a mi hermana

-pero es que escucho todo

-entonces ponte a escuchar música o lo que quieras pero vete

-si – y salió corriendo

Bajé cuidadosamente las escalas

La sala estaba a oscuras, por lo que se me dificultó saber quien acompañaba a mi madre, solo veía a medias la espalda de un hombre que hacia un rápido vaivén sobre mi mamá

Solo escuchaba… era una completa falta de atrevimiento lo que estaban haciendo

-Haaahh…Sigueee…Sigueeee…mmmmmm….Duroo…Maaaaaaass…aahhhhh…me…me vengoooo…ahhhh Pabloooooo!!! – casi que gritó

Reaccione ¿acaso dijo Pablo?

Me acerqué aun mas, casi a 4 pasos de donde estaban ellos y escuché la voz ronca de Pablo, que al igual que mi mamá gemía

Moví mi cabeza negativamente, estaba sorprendida, era increíble que mi mamá se metiera con el… no por que me den celos ni nada de eso… pero para ella, el y yo somos novios ¿entonces por que lo hace?

Cuando llegué, ellos no estaban ahí… quizás habían salido y como vieron la luz de mi cuarto apagada, pensaron que no estaba

Subí las escalas y regresé a mi cuarto, me recosté sobre la cama y quedé dormida aun, sorprendida por todo lo que pasaba

Que lindo… no se puede confiar en amigas, en desconocidos, en la familia ni en la propia madre

Cristina

Suena el celular

Una vez

Dos veces

Tres veces

.

Quinta llamada

Una vez

.

Sexta vez

-Maldición!! ¿Quién insiste tanto?

Como si fuera un secreto saberlo

-¿alo? – contestó de mala gana

-Hola mi vidaaaaaa – se ríe - ¿Estabas durmiendo?

-No!! Estaba jugando a que tú me desesperabas con tus llamadas y me hacías levantar – digo irónicamente

-jajaja ¿Cómo amaneces?

-de mal humor

-jajaja yo bien – sigue riéndose – arréglate que en 10 minutos paso por ti

-no

-por qué?

-quiero descansar

-Cristina, me tienes que contar muchas cosas

-claro, cuando quieras menos hoy

Y colgué

Automáticamente, todo lo que había pasado anoche me dejó en shock

¿Cómo pude besar a Luisa?

Maldita sea… ahora ¿Qué va pasar? Todo este tiempo detrás de Sami, mostrándome correcta para hacer esto?

Pff

Aghhhhhhhh ¿Por qué accedí a ese beso? ¿Por qué Luisa me besó? ¿Por qué siento que me gustó? ¿Por qué me siento mal por Sami pero me siento bien por lo que pasó? ¿Por qué?

Todo el día me la paso en esas

Es

Es extraño… se supone que ella me cae mal, se supone que siempre he odiado a ese tipo de personas ¿Entonces?...

A la mañana siguiente… me despierto temprano, me meto en la laptop para hacer un trabajo y aprovecho para conectarme un momento

Se aparece una pequeña ventana en donde me aparece la invitación de alguien, está lleno de signos y letras que casi no se entienden, por lo que no sé quién es, así que le doy "agregar" y listo.

Me concentro charlando con otros compañeros hasta que se abre su ventana

&//$...Dice: Hola Cristina

Cris<< Dice: hola

&//$...Dice: quiero decirte algo

Cris<< Dice

: ¿Quién eres?

&//$...Dice: ayer vi lo que pasó

Me pareció extraño

Cris<< Dice: ¿viste que?

&//$...Dice: el beso

Inmediatamente me asusté ¿fuimos tan estúpidas de no pensar si nos habían seguido?

Cris<< Dice: ¿Cuál beso?

&//$...Dice: todo se va a saber

Escribió y cuando pensaba responderle, ya aparecía como desconectado ¿Qué fue eso?

Si Sami se entera

Simplemente hasta ahí llega todo

Sami:

Ya han pasado varios días acá, quizás ya llevo el mes… la verdad no tengo claridad del tiempo, ni siquiera sé qué día es hoy.

Solo sé que a lo mejor… saldré pronto de aquí.

-¿puedo preguntarte algo Samantha? – dijo, ese muchacho que quizás, es mas extraño de lo que me consideran a mi

-qué?

-esas dos hermosuras que vienen a visitarte en las mañanas son

-son solo amigas – lo interrumpí

-como sea, a ti te gustan las niñas, no?

-a lo mejor si

-esa no es respuesta

-para mi, si lo es

-no se que le ven a una vieja que… se las da de intelectual y madura, cuando en realidad es solo una niña que quiere llamar la atención

Algunos compañeros que se encontraban allí, iniciaron un festejo gritando "uUuughh Fuertee!! Fuerteeeeee!!!!"

-ok, eso piensas tú, pero ellas no –

-no te soporto, sabes?

-si lo sabia

El tipo este, comenzó a molestarse simplemente por que ignoraba sus comentarios, hasta que se lo llevaron. En esta casa me llevaba bien con casi todos, exceptuando a unos dos o tres.

Ya me sentía mucho mejor

Pero en realidad quería irme

Solo quería eso.

Camila, no la había visto hace una semana

Es diferente esto, por que ella, está todos los días y… ¿Será que se habrá ido?

Espero todo el día, igual que ayer, igual que antes que ayer, igual que esta semana y nada

Me decido levantar y voy a la dirección

Tun- tun

Toco la puerta del despacho de Gabriela

-¿puedo pasar?

-adelante – dice

Entro y la observo, está mirando el atardecer desde la ventana

-¿Qué sucede Samantha?

-emm… lo que pasa es que… yo

-¿Si?

-echaste a Camila?

Se voltea mirándome graciosamente

-no

-¿y por que no ha venido?

Siguió sonriendo

-tu respuesta está tras de ti

Con pena "suponiendo lo más obvio" volteé a mirar y allí estaba ella

Llevaba puesto un pantalón blanco con botas, y una blusa negra elegante… se veía algo mayor para la edad, que suponía que tenia, pero eso no quitaba de que se viera realmente hermosa y atractiva.

Su cabello, estaba recogido y sobre sus ojos, se posaban unos lentes de descanso que - como siempre – le daban, ese aire intelectual

Ella, es demasiado alta para mi gusto (hablo de 1.78, 1.80)… es delgada y tiene un lindo cuerpo… me gustan sus piernas – aunque siempre está de pantalón – alguna vez, llegué a verla con un capri (dícese del jean que llega mas o menos a la rodilla) (Jajaja perdón por la especificación pero quizás queden como ¿? ¿Qué es eso?) Son de tez blanca pero están bronceadas, son tonificadas y se me hacen bastante llamativas

-¿me buscabas? – prontamente, me sacó de mis divagaciones… su voz tenia ese toque de ternura mezclada con seriedad – sonrió –

-eh… no, no, no – mentí

-¿no me estabas preguntando por ella? – se metió Gabriela - ¿ó hay otra Camila aquí?

-jaja – fingí sonrisa al verme descubierta – solo me parecía extraño que no volvieras

Gabriela sonrió – yo las dejo, supongo que tienen terapia

-sip – asintió Camila entrando al despacho. Su mirada, por alguna razón que todavía no llegaba a comprender bien; me ponía algo nerviosa – siéntate

Obedecí

-¿Dónde estabas? – bueno, bueno Samantha ¿Qué carajos haces preguntándole eso? – digo… - traté de corregir mi pregunta pero ¿Cómo lo hacia?

-estaba en Venezuela, dando unas conferencias – explicó

-Ya – callé varios segundos – la verdad es que me parecía raro no verte

-es decir que ¿te hice falta? – sus mejillas se posaron de un color mas rojizo, era gracioso ver que para todo lo profesional era la mujer mas segura del mundo, pero cuando – misteriosamente – llegábamos a temas como este, esa seguridad se iba a la basura y yo – para conveniencia – gozaba viendo de sus expresiones de vergüenza

-Quizás – sonreí - ¿Cómo te fue?

-bien – se encogió de hombros – exceptuando una mala experiencia con el gerente del hotel, donde me hospedaba

-te lo pidió – afirmé sin mirarla a los ojos, como lo mas tranquila del mundo

-¿perdón? – ella, sabia bien de que hablaba… pero supongo quería que se lo dijera en mejores términos

-que si te pidió acostarse contigo – repetí igual de tranquila

-oyee!! – Hizo que mirara a su dirección – no digas eso

-Hum – me recosté en el sofá – está bien ¿pero por qué te fue mal?

Bajó su rostro – quiso sobrepasarse conmigo

Reí

Me miró

Traté de contener mi risa

Volvió a mirarme

-eso significa que tengo la razón

-puede decirse que si, es solo que lo dices en

-términos reales – completé – es la verdad Camila

-ok, ok – me encantaba cuando entraba un poco mas en confianza conmigo y olvidaba por un momento que… era la doctora - ¿Cómo te ha ido a ti?

-relativamente bien. Contesté – algunos problemitas de más pero todo bien

Sacó su agenda, mirándome pícaramente a los ojos – sé que los haces a propósito – señalé la agenda

-haha es mi trabajo – se justificó

-Va!! Ok, está bien

-¿tu animo?

-estable

-¿tu familia?

-bien, aunque no entiendo a mi mamá

-¿por qué?

-siempre que me ve, está llorando – negué con mi cabeza – tan fea estoy?

Su risa se me hizo contagiosa, y logró rápidamente, sacarme una sonrisa –claro que no – dijo

-¿Luisa?

-no lo se

-¿Por qué no lo sabes?

-por que no se!

-¿no sabes que?

-no se que pasa con ella

-¿Por qué dices eso?

-por que, llega un día… me ve, me visita, unas veces se comporta bien otras veces es alejada… esta semana… ya sabes – traté de evadir el tema –

-¿ya sé qué? – como si no supiera que no se pasa nada

-pues… un beso

-aja

-aja ¿Qué? – pregunté

-sigue

-bueno, al final se fue – dije resignada

-¿y que sentiste?

-que me dejó mal

-¿Por qué te dejó mal?

-pues imagínate ya en eso y que te dejen así – expresé

-no me refería a como te sentías con tus hormonas – manifestó seriamente – sino, que sentiste emocionalmente

-que ella no me quiere

-lo dices por lo que hizo o por qué en realidad eso es lo que piensas?

-ambas

-Y ¿Cristina?

Sonreí – ella es linda

Su mirada se reflejó aun mas seria -¿Qué quieres decir con linda?

-Es linda, en todos los aspectos… es

-¿es qué?

-ella, es muy madura y eso me gusta, es sincera… sabe en donde está y lo que quiere, se preocupa por mi y... Es tierna

-vaya – anotó en su agenda – dices muchas cualidades de ella

-si

-¿Sientes algo por ella?

A lo mejor

-¿y entonces Luisa donde queda?

-luisa… luisa… luisa… luisa es una niña hermosa, es esa persona que cualquier persona quiere tener al lado, digo… para mostrarla, para costarse con ella y para divertirse

-estas diciendo entonces, que lo lindo de luisa es su cuerpo?

-no, por que yo miré en ella algo mas ¿o crees que hice todo eso solo por su cuerpo?

-ok, ¿Qué viste en luisa?

-vi miedo a ser amada y amar

--¿a quien amas entonces?

La miré

-¿amar?

-si

-esa palabra tiene mucho sentimiento ¿no crees?

-si

Ahora era yo, la que preguntaba

-esa palabra es… gigante

-si

-y no es justo decir que amo a alguien cuando en realidad, en el fondo se que no es cierto

-¿Qué quieres decir?

-que en este momento, no se que es el amor, hace un mes más o menos pensé que amaba con mi cuerpo y corazón, y hoy a la persona que "amaba" la quiero… pero a la vez… siento que… no me hace bien

-nadie dijo que amar hacia bien

-entonces eso es masoquismo

-el amor duele, Samantha

-¿y me lo dices a mi?

-no siempre es como deseamos que sea, o por lo menos, nos damos cuenta de que no es como lo pintan

-si, estamos de acuerdo

Sonrió

Iba a preguntarme algo cuando, vi a mi madre aparecer por la puerta

-perdón por interrumpir – se excusó entrando al despacho

-mm mamá! – Me levanté y la saludé – ¿Qué haces aquí?

Estaba con su rostro envuelto en una felicidad, que se me hacia incontable

-sales el sábado de aquí

-wow – sonreí – es genial

Camila se levantó y habló con mi mamá varios minutos… "el sábado" haha… tan solo pasado mañana.

Sentía un aire de libertad aun, sabiendo de que todavía no había salido, pero el solo hecho de pensar en ello, se me hacia glorioso.

Mi mamá se fue, después de que hablamos un buen rato

Estoy en mi habitación, viendo la entrada de la hacienda y parte del jardín

Hay algunos compañeros que, todavía siguen en lo mismo… supongo que ser drogadicto a tantas cosas que se hacen dependiente, a ser… simplemente alguien que le gusta tomar pastillas para tranquilizarse, hay una gran diferencia… estar en un lugar como este no es nada fácil, pero… al menos, me ha servido para despejar mi mente, y pensar muy bien las cosas.

Me acceden la única llamada del día, y esta vez – como casi siempre – llamo a Luisa

Espero 3 timbradas

Luego 6

Y antes de irse a buzón de mensajes

Contesta

-hola – sabe que soy yo

-hola… ¿llamé en mal momento?

-em no.. no hay problema ¿Cómo estas?

-bien y tú?

Calla un momento

-¿Luisa?

-Sam perdóname – dice con su voz algo seca

-si, ya me has pedido perdón muchas veces, no es necesario que lo sigas haciendo

-no Sam, esta vez es sinceramente… perdóname

-ok, yo te perdono – quise decirle que saldría el sábado, pero mejor verla y darle la sorpresa – quería escucharte

Se queda en silencio… nuevamente

-debo colgar – anuncia

-está bien

-te quiero – dice, y casi puedo jurar que la siento mal

-¿Luisa? ¿Estás bien?

Tu, tu, tu, tú

La llamada se cuelga

Me resigno aceptar que… siempre será lo mismo, hoy no estaba de humor.. hay días en los que ella hace hasta lo imposible por llamarme aquí… y otros días como hoy, que demuestra que no le agrada escucharme.

-¿colgó?

-si – miro a Camila, sentada en el sofá que hay en la habitación - ¿Escuchaste?

-si, venia a despedirme de ti

-¿A dónde vas?

-ya me voy, mañana no tenemos terapia y el sábado te vas

Se levantó y silenciosamente, se acercó a mi… tomó mi rostro en sus manos y me dio un pequeño beso en mi frente

-Cuídate Sami

Y salió

Dejándome terriblemente deshabitada

Lo único bueno que quedaba.. era que pronto saldría de este lugar