Estando muy cerca de la muerte (17)

Dicen que la unicon hace la fuerza...esperamos que sea de su agrado esta unicon, esta nueva entrega, esta sorpresa, Bequi mil gracias por tu apoyo, por tu personaje tan maravilloso...Disfrutenlo !!!

Estando Muy Cerca De La Muerte (17)

A todos mil gracias, especialmente a

Niñas: Fran07, Johanita89, Lilian, Angela, Juliana Sabater, Docofd2, Ojosverdes87, Maria26291, Leilibeth, Roseblack, Virginia, Dalu89, Guacha, Lamusasolitaria, Lolylole, Shadal, Sally, Lulu, Krizty, Patylove, Pandita, Jamielove, Smgn, Mishelle, Leti88.

Niños: Daniel Bryan, Hombrefx, Fran07.

Jamás en mi vida había pasado por este tipo de situaciones, donde se habla con la mamá de la persona con la que estás saliendo y dices lo que sientes… te sinceras o simplemente mientes para quedar como una buena persona. Donde ese miedo – del que la mayoria habla – recorre todo el cuerpo y las palabras no salen por más que intentes hablar, y terminas quedando como una idiota.

-¿Dónde te apetece hablar? – cuestionó ella con un tono de voz amable

-¿le parece bien si afuera cerca a la zona verde?

-claro – sonrió – ¿puedo preguntar tu edad?

-pues… si usted quiere escuchar la verdad soy menor de edad, si quiere una mentira, tengo 21 años – sonreí, señalándole una banca que estaba a pocos pasos de nosotras

Su rostro se armó en un gesto gracioso de sorpresa – Vaya… - musitó sin saber que mas decir

-Lo siento, solo bromeaba. Tengo 19 años

-bueno ¿si o no?

-si, 19 – asentí

-¿Qué haces de tu vida? ¿Con quien vives? cuéntame de ti, Sami

-perdón… ¿me podría decir su nombre?

-oh que pena, no lo había dicho. Soy Adriana Gómez

-mmh el gusto es mío, señora. Yo soy Samantha Díaz

-muy bien. Te escucho

-bueno, usted me perdonará pero yo quisiera saber por que le nació hablar conmigo.

-Ok. Si vamos hablar así de directo, para mi mucho mejor – estuvo de acuerdo, su respuesta me causó algo de temor, pensar en que iba a decirme, me ponía inquieta – quiero que te alejes de mi vista y espero no volverte a ver por acá en el hospital – tomó su bolso y me dejó helada

No sabía qué hacer, tampoco le pregunté nada… miré sus zapatos alejarse de la banca y su risa me hizo mirarla confusamente

-estamos en paz – volvió a sentarse, sus carcajadas causaron cierto alivio en mi cuerpo, ¿había sido víctima de su broma?

-bien, debo aceptar que estuvo mejor que la mía – dije sinceramente

-jajaja lo siento – trató de recomponer su seriedad – hablando enserio Sami… quiero que no te tensiones mas… ya viste que no soy mala – sonrió conmigo – mejor cuéntame quien eres tú con Camila ¿sí? – Mí vista se vio ocupada en sus ojos – cuéntame por que tanta preocupación, por que tanto interés en quedarte en las noches con ella

Bien, aquí estaba el problema… yo no podía decirle la verdad sin saber que pensaba Camila, su mamá hace pocos minutos hablaba amistosamente con el ex de su hija, y también conoce a Sergio… ¿Qué puedo pensar? es mas que obvio que ella no sabe nada de esto, ó si lo sabe… no seré yo, quien se lo confirme.

-¿A que se refiere con quien soy yo con Camila?

Suspiró – no evadas el tema por favor, poncho ya me contó

-ahh está bien. yo… conozco a Camila hace pocos meses… y… ella había sido mi psicóloga, mi terapeuta, la persona a quien le confié mi vida, la persona que estuvo conmigo en muchos problemas de los que apenas intento salir… y es alguien especial para mi

-ajam, ¿hay algo mas que deba saber de la relación psicóloga que se convirtió en amiga y ser especial para ti o eso es todo?

piensa bien en que vas a responderle Samantha<<

-Señora, Señora Adriana, es mejor que usted termine esta conversación con Camila, yo no soy quién para decirle algo que sólo su hija puede decírselo.

Ella calló por breves segundos, en donde parecía estar meditando mi respuesta, que sin ser directa pero tampoco lo contrario, logró responderle sin tener que sentirme autora de lo anteriormente dicho.

-si, estoy de acuerdo – sonrió levantándose de la banca – espero que Camila termine lo que tu iniciaste

-si, yo espero lo mismo

-Gracias por aceptar hablar conmigo

-no señora, al contrario, soy yo quien debe agradecerle, créame que es importante esto… sólo que podríamos hablar mas cómodamente y con más confianza cuando Camila logre resolver sus preguntas.

-claro que si

Caminamos lentamente hasta llegar de nuevo a la sala de espera, ya iban siendo cerca de la 1 de la tarde (13:00) todavía seguía el mismo hombre ahí, se fijó en mi… y su mirada me molestó intensamente… ¿Qué estaba esperando? ¿Qué le dieran un permiso para verla de nuevo?

-¿Sami nos vamos?

-si, vamos.

Después de despedirnos de los presentes… salimos del lugar… Cristina me llevó a casa y ella se fue con Luisa, lo primero que hice al llegar fue pegarme un baño de casi 1 hora, refugiarme bajo el agua y soñar en convertirme en eso. Algo tan frágil y tan simplemente necesario, tan enriquecedor y a la vez algo tan temido… algo que pasa por entre los dedos y al segundo ya no está… mi pensamiento, por más de que lo obligaba a viajar a otros sitios distintos que no fueran ella, no obedecía. La brisa del agua rosó mis labios con suavidad… y ese acto tuvo una gran relación con sus besos

¿Cómo pude llorar ante ella? Dios… ¿Por qué esta manía de complicarme tanto mi existencia?

toc – toc – toc

-Hija, ¿puedo pasar?

-pues ma… yo me estoy bañando, pero si quieres, puedes pasar

-pues si, tienes razón, te formulé una pregunta demasiado obvia – sentí que sonrió – apenas salgas me llamas que necesito decirte algo ¿Está bien?

-Dale

Sumergida en tantas cosas, decidí al fin, salir del baño… me vestí, cepillé mis dientes, organicé mi cabello, retoqué el maquillaje, apliqué mi loción, y salí de la habitación.

Mi madre estaba sentada en el sofá de la sala, tomándose su café en esa tasa en la qué solo toma ella. Junto a ella, estaba el director de música y artes contemporáneas de la universidad.

Diablos… ¿por qué no la llamé antes de bajar?<< tenia puesto un jean que no me quedaba directamente ajustado pero tampoco me quedaba grande, con el botón suelto, la cremallera hacia abajo, con una blusa que apenas me estaba componiendo y unas babuchas con figuras de flores y lunas

Ambos me vieron con gestos graciosos, y yo no pude hacer más, que acompañarlos en la risa.

-¿Cómo estás Samantha?

-Hola Doctor – siempre le había dicho de ese modo… era lindo en sentido literario… canoso, con un poco de barba alrededor de su mentón, sus ojos estaban cubiertos por unos lentes claros que le daban un aspecto señorial y a la vez irónicamente, juvenil. Me gustaba su pinta (vestimenta) siempre lo mas sobrio, y bohemio… - ¿yo estoy bien y usted?

-pues, lograste sacarme una gran sonrisa al verte

en otras palabras, te dijo payasa sami<<

-ah, gracias. Debo de verme muy graciosa para que usted sonría

Yeah, así se hace<<

-crees que soy amargado entonces… --y volvió a reírse

-Umm – me senté al lado de mi mamá – no sabia que estaba enterado de donde vivía

-bueno, no lo sabia pero ya lo sé, es importante estar enterado de todo acerca de ti – sonrió felizmente – debo felicitarte Samantha, te fue excelentemente bien en la presentación que hiciste.

-si Doctor, ya me lo había dicho

-anda, si que eres modesta ¿no? pero bueno. A lo que vengo es a decirte que hay una discografía que le gustó bastante el trabajo de todos en general y quisieran hablar para ver que se puede hacer.

-Doc ¿es enserio?

-si – se levantó extendiendo sus brazos, logrando obtener un gran abrazo

Una felicidad extrema recorrió mi cuerpo… no me hacia muchas ilusiones pero si estaban interesados, ya era algo muy, muy bueno =)

-solo se está esperando, la llegada de la productora general, según creo, regresa en tres semanas, entonces, yo te estoy avisando señorita.

-Gracias Doc, me terminó de alegrar mi día –

-vale la pena haber venido hasta acá. Usted sabe que lo que necesite, aquí estoy a la orden.

-Lo se. –era la única persona de todos los docentes que dictaban clase en mi carrera, que me agradaba completamente –

-muy bien, hasta luego señora – le cedió otra tasa a mi mamá – que terminen de pasar buena noche y de nuevo, felicitaciones.

Salió de mi casa dejándome un lindo sabor a triunfo en todo mi ser… ese día me había ganado eso porque ella fue mi inspiración… y porque simplemente logró despertarme un montonón de emociones que… no pensé que sentía con ella.

La música era todo un sueño para mí, eso que se asimila a todo momento de mi vida y a cada situación por la que paso continuamente… toda la tarde me la pasé con mi mamá, necesitaba dedicarle tiempo a ella, demostrarle que era muy, muy importante para mi y que la amaba con todas mis fuerzas. Estábamos viendo una película cuando sentí que ya se había dormido. Bajé y le preparé algo de comer a mi papá y esperé a que llegara. Nunca me había percatado completamente de lo detallista que era, cuando entró, todavía no sabia que yo estaba viéndolo… fue a la cocina y sacó un refresco… Luego, su mirada se vio realmente ocupada en la cena que le había preparado con la nota que estaba a su lado.

"perdóname por olvidar ser buena hija, igual sabes que te amo y espero que esta comida, logre recomponer un poco, mis daños"

Pude observar como caían de su rostro algunas lágrimas que el mismo, intentó ocultar. Le dio su primera cucharada a la cena y repitió la misma operación simultáneamente por varios minutos.

Cuando por fin acabó, encendió la luz que daba iluminación a las escalas y a la sala principal, y me vio sorpresivo.

-¿hace cuanto estás ahí?

-lo suficiente para ver que eres igual o más llorón que una mujer, que llora por una simple nota – sonreí - ¿te gustó?

-estaba deliciosa hija – se quitó su camisa de botones y quedó con una camisilla blanca – vaya, el día hoy estuvo muy agotador- dejó escapar un gran suspiro de descanso – me enteré de que ya despertó

-Siii – dije animada – Gracias al cielo ya está bien, bueno, sigue muy herida y debe tener un buen reposo pero ya despertó

-¿ves? sólo tenias que confiar en todo saldría bien y ya

-Si papá, lo que pasa es que uno se acostumbra a que tantas cosas le salgan mal, que es dificultoso creer que algo podría salirme bien.

-Lo se, tu suerte no ha sido la mejor últimamente pero ya cambia ¿no? – rodeó mis brazos con su abrazo – sólo te digo una cosa Sami, y es muy seria… no quiero volver a verte en una camilla de un hospital por líos de amor ¿estamos?

-Si señor, todo lo que pasó sirvió al menos para que yo pudiera madurar en ese sentido

-¿te sentís bien con ella?

-si, sabes que no voy a estar con alguien con quien no me sienta a gusto

-Dormimos juntos ¿hoy? desde que tenias unos 5 años, no duermo contigo – susurró con ternura, su rostro denotaba cansancio y sueño

-Va, pero ¡¡no ronques!!

-Umm, eso va a hacer un gran problema – sonrió pícaramente – voy a tratar de que no sea tan duro

-¡papá!

-bromeo

Nos levantamos y nos fuimos directo a la cama en donde estaba mi mamá… era ilógico ese momento para mi, mi mamá dormía plácidamente en el rincón de la cama, mientras que mi papá, lograba acomodarse en toda la orilla, y por supuesto, yo me quedaba en el medio de ambos.

No tardé demasiado en poder conciliar el sueño, últimamente no dormía nada, tan solo escasas dos horas al día… pensar en Camila, en su estado, en la universidad, en el miedo que tenia por que ella estuviera bien.. ¡¡Tantas cosas!! La constante respiración de ambos era rítmicamente sensorial, pareciera que se propusieran hacerlo a la perfección a una velocidad prácticamente que igual. Dormí tranquilamente… al menos ya tenia esa sensación de plenitud de que Camila esta noche dormiría consiente de ella misma… y que mañana cuando su cuerpo se lo ordenara, abriría sus ojitos y comenzaría con una recuperación benéfica para su salud.

Luisa

-¿por qué vas hacer eso Maite?

-Luisa, si a ti no te importa, a mi si! – contestó groseramente dándome la espalda

-¿pero acaso ella te ha buscado para al menos saber como andás?

-no – se resignó – pero es mi madre y me hace falta, no se nada de ella en días ¿Cómo podré saber si está bien o no?

-ok, espérame yo me visto y vamos

-no, no es necesario, voy sola

-¿Estás loca? cargas con 15 años de edad prácticamente y ¿queres andar la ciudad de arriba hacia abajo sola?

-amor, relájate ¿si?

-Cris ¿no la oyes?

-pero ella tiene razón

-ah ósea ¿tu la apoyas? perfecto – me alejé de ambas – entonces, ve y llámame cuando llegues pro favor

-Luisa – dijeron las dos – ya deja ese show de niña consentida y caprichosa que sólo busca que se hagan las cosas a su antojo – manifestó directo y Maite, no hizo más que asentirle – yo la llevo y te aviso ¿ok?

-Claro! otra excusa tuya para salir de casa sin mi, no? – bien, sabia que me estaba pasando, solo que esa llamada que le contesté de su celular me dejó inmune, ¿por qué tenia que estar llamándola una mujer y preguntar por ella tan misteriosamente?

Suspiró, como pocas veces, la veía enojarse… mandó a Maite a la otra habitación y cerró la puerta de la nuestra con fuerza.

-ok, ahora si me puedes explicar por qué desde anoche estás así conmigo ¿Qué pasa Luisa?

-dime por que te llama una mujer en la noche, y pensando que la que contesta eres tu, me dice que por favor nos veamos, que las cosas se tienen que aclarar, ah?

Su cuerpo, reposó calmadamente sobre la cama - ¿es eso por lo que estás así?

-¡¡Si!! ¿te parece poco?

-Pues primero deberías preguntarme ¿no? además, deja de suponer cosas que no son – enunció con arrogancia y eso, me molestó mucho más

-Ok! ahora la que pide disculpas soy yo entonces, pff eso es absurdo – me dirigí al baño

-y si esperas a que yo lo haga, andá tómate un café por que no voy hacerlo

-¡¡CRISTINA!! – casi que grité, estaba fuera de mi, me molestaba que no reconociera que yo tenia la razón y que no asintiera a mis reclamos – arrghh!!

Me devolví a reclamarle más, más y más, jamás me había caracterizado por ser, eventualmente celosa, pero saber que alguien más estaba tras ella, había logrado desestabilizarme en todos los sentidos.

Se levantó agarrándome fuertemente de los brazos – CALMATE YA! – exigió

-¿y sino qué? decime ¿ya te aburriste de mi?

-así no voy hablar contigo, cuando te calmes, me buscas – dio un paso hacia atrás buscando la salida de la habitación

Me fui tras ella, y antes de que abriera la puerta, obligué a que se volteara y se quedara mirándome, sin esperar a que digitara la más mínima palabra, me balanceé sobre ella, estrechándola bruscamente contra la puerta. Tomé su rostro con fuerza y comencé a besarla de una manera desesperada, no correspondió a mi beso, pero es no me impidió que siguiera besándola… quería demostrarle que era mía, mía y de nadie mas. El forcejeo del momento, impidió que Cristina pudiera soltarse fácilmente de mis brazos, ya que mi furia estaba dándome todo el poder y el manejo de la situación. Bajé a su cuello, y sin pensarlo dos veces, lo mordí, mientras que tomé su cabello, haciendo que arqueara un poco más su cabeza, para tener un mayor acceso a lo que estaba haciendo.

-mierda! te enloqueciste – expresó con rabia, tratando de alejarme de ella – así no!

-así si! – y sin su permiso, quité el botón de su jean, bajando de prisa su cremallera, introduciendo mi mano sobre su prenda intima

Suspiré, busqué sus labios y no tardé mucho en encontrarlos, recorrí toda su boca con mi lengua, lo hice con violencia, quería dejarle claro que ahora yo era su dueña y no necesitaba de una intrusa en esta relación. Agité mi mano, mientras sentí como dejó escapar un armónico gemido que me incitó a seguir, a continuar… dejó de poner objeción a mi instinto y me tomó del cabello, asintiendo a todo lo que mi cuerpo estaba ordenándole. Descendí velozmente por cada centímetro de su cuerpo… arrojé su camisa lo mas lejos de mi vista y ahora mi objetivo era darle muerte pronta a su sostén. Arqueó su espalda, para poder quitárselo, sus labios húmedos en espera de un beso que no le di… palpé sus pechos esforzándome por hacerlo intensamente, mientras presionaba su sexo con mi muslo

-luisaaa… asii… no… seee… debennn… arreglar las cosas

-¿quieres que me detenga?

La miré inquieta, esperando su respuesta, así fuera negativa, estaba mas que claro que no iba a parar… inclinó sus rodillas, y nuestros labios volvieron a juntarse, su lengua abrió paso, el deseo, la excitación, las ganas de hacerla mía mezclada con toda la ira que sentía, causó cosas en mi que no conocía, tomé su lengua con mis labios iniciando con suaves masajes que si me estaban excitando a mi que era la que lo estaba haciendo, no quería imaginarme que estaría sintiendo ella en este momento, la estimulé y terminé besándosela como nunca lo había hecho antes, la humedad de sus besos conjugarse tan perfectamente con los míos, solo podía desbordar una infinita pasión, ansiosa de ser saciada.

Sus manos se abandonaron en mis senos, tenía prisa de hacerla sentir, era como si necesitara que ella se diera cuenta lo más pronto posible de quien era su mujer.

Llegué a sus senos después de haber besado sus hombros… su cuello… toqué cada parte de ellos con ternura, luego, volví a besarlos… me enredé en la suavidad de su vientre y en el olor que comenzaba a formarse en la habitación, cómplice de la sublime pasión que existía entre ella y yo.

-Baja!! – pidió

Alcancé a rozar el inicio de su intimidad, y un leve movimiento de su cuerpo, hizo estremecerme por completo. Me fui ubicando de rodillas sobre el suelo de su habitación, al mismo momento en que ella dejaba reposar su cuerpo sobre el espaldar de la puerta, se refugió en mi cabello, mediando su equilibrio, jugué con mi lengua sobre su abdomen, y la bajé tímidamente por su vientre, su piel iniciaba un ataque de excitación y de sus labios sólo podían salir expresiones que aumentaban la mía.

-Ummmmmmhh, Continuuaa asíiiiiii……. Si tardass mucho, No prometo Soportarr Hastaa qu..e acabes!! – gimió, a sus ojos se les dificultaba estar abiertos para este momento

Primeramente, comencé a besar sus muslos, me encantaba sentirla así.. era… era perfecto verla de eso modo por mi… subí lentamente por el inicio de sus labios… y pude obtener la sensación mas indescriptible al verla… estaba totalmente húmeda, me embriagaba su sabor, su olor… sus movimientos, su cuerpo, sus suspiros, esa manera tan característica de expresar en su rostro el placer que le hago sentir… Dios… la besé por instinto, posé mis labios sobre los suyos y mi lengua se introdujo expertamente sobre su clítoris, movió su cadera… en un vaivén rítmico, coordinado a la perfección con la velocidad de mis besos… buscó mis manos, guiándolas con las suyas a la finalidad de su pecho… le encantaba hacer eso, desde que recuerdo, las veces que hemos hecho el amor siempre hace lo mismo… manejar mis manos con las suyas, haciendo breves masajes sobre sus senos… me concentré en besarla aumentando la estimulación de su sexo y en acariciarla… me mantengo firme en ese mismo movimiento por varios minutos… su lubricación alcanza a lograr dejarme sin habla, estimulo a la mayor rapidez posible su deseo de mujer, y sólo siento que empuña sus manos con fuerza, sus piernas pierden fuerza e irremediablemente va cayendo a mi lado, su pecho se mueve con velocidad, su respiración todavía está agitada, sus suspiros aparecen, en el mismo momento que sus gemidos se apoderan de pequeños gritos, para finalmente… convertirse en lo primero

-¡Te amo! – susurré cerca a su oído, era la primera vez que lo decía tan sinceramente y tan segura de lo que estaba diciéndole

-yo te amo mas bonita – me tomó del rostro robándome un ligero beso, al mismo momento en que me llevaba a su cama – entiéndelo… SOLO ESTÁS TÚ

Y me demostró su faceta diferente a la mía, logró calmar mi miedo, mi inseguridad, mi absurda desconfianza en ese momento… mi cuerpo se reposó sobre la cama, y ella fue desprendiendo cada una de las prendas que me quedaban con mucha lentitud

-Cris no hagas eso

Sonrió, sus labios rozaron los míos, y una sutil caricia de su parte inició un breve movimiento en mí

Besó cada parte de mi cuerpo en proporciones considerables en tiempo, para todas por igual... Exceptuando la llegada de sus labios a mi entrepierna… la misma operación volvía a repetirse… su cuerpo estaba devolviendo, el placer recibido… me aferré con fuerza a las sabanas para después, encontrar mejor apoyo en su cabello… la velocidad y el ritmo con que lo estaba haciendo, indicaba que no había tiempo que perder, cada segundo que pasaba, aumentaba mi deseo y las apresuradas ganas por sentir… sumergida en el mas allá sin sentido de mi subconsciente y alejada del mundo real, cuando pensaba que no podía estar sintiendo mejor… sólo esa sensación que recorrió mi cuerpo y un frio extremo me cobijó agarrándome por sorpresa cuando vi que dejaba sus labios para concentrarse en sus dedos… primero uno, y luego otro… un ritmo lento pero profundo… una aceleración fija en su cometido… mis continuos suspiros… interminables gemidos… profundizó mas el movimiento hasta que un gigantesco orgasmo sacudió mi cuerpo dejándome simplemente agotada.

Me quedé en silencio, esperando a que dijera algo, em sentía sumamente avergonzada por mi comportamiento, todavía no entendía por qué había actuado de ese modo con ella, los celos se me subieron a la cabeza y había sido incapaz de controlarlos.

-¿no dices nada? – me preguntó acariciando mi rostro con ternura

-¿Qué quieres que diga, Cris? yo... Lo siento… - me incliné hacia ella y justo antes de darle un beso, sonó su celular de nuevo

Se levantó apresurada por contestarlo, y yo la tomé del brazo - ¡estas conmigo! mas tarde hablas con quien te esté llamando

-no puedo, espérame. Intentó alejarse, pero volví a cogerla, añadiéndole un beso esporádico que logró retenerla dos segundos

-bebé… espérame, no tardo – se levantó tan rápido que no tuve tiempo ni de hablarle, buscó su pantalón entre la ropa que estaba en el piso, comenzó a desesperarse al no encontrarlo, hasta que lo tomó y justo cuando iba a contestar, colgaron

-MALDICION! llama paola, llama, llama, llama!! – dijo casi que orando y yo me quedé sin entender que diablos pasaba, al final se dio por vencida y se resigno a que no la llamarían de nuevo

-¿ah pues si tantas ganas tienes de escucharla por qué no le devuelves la llamada?

-¡¡por que no puedo, no puedo!!

-¡eres una descarada Cristina! quien es Paola? la misma perra que te llamó ayer verdad

-¡Luisa cállate! no sabes lo que dices, enserio ¡cállate! – jamás me había hablado así, y me desesperaba en el alma que lo hiciera por otra vieja ¿por qué le molestaba tanto eso?

-¿qué me calle? es que vos pansas que soy una idiota y me voy a dejar engañar así como así, no pues ¡que maravilla!

-¿Engañar? ¿De qué carajos estás hablando? ¿Cual engañar? - se levantó ofuscada buscando toda su ropa

-NO TE HAGAS!! SI TENES A ALGUIEN MAS, FACIL! DILO Y YA!

-Pfff – me miró molesta - ¿Eso es lo que crees? ¿Qué te engaño? ¿qué tengo a alguien más? – suspiró – si tan solo preguntaras quien es

-y ahora soy yo la culpable, Cristina? ¿Qué mas queres que piense? te llama una mujer y habla sobre aclarar las cosas y mira como te pones por que no atiendes a esa llamada? ahh? acaso crees que no me duele?

-Cállate! – tocó su cabeza mostrando un fuerte descontrol de mis palabras – si no confías en mí, no hay nada que hacer!

Me quedé estática ¿me estaba terminando?

-esa niña que llamó es… bueno, ya no importa... sigue pensando que con quien te engaño… - terminó de componerse su pantalón y salió de la habitación con su paso firme, sin mirarme, sin articular ninguna palabra –

Cerró la puerta con fuerza y entonces supe que lo mejor era irme de aquí

Cristina

Sami contesta, contesta, contesta, contesta… necesito hablar con alguien, tengo rabia ¿Luisa como puede pensar que la engaño si sabe que la amo? ¿Por qué no se toma el tiempo para preguntarme quien es la mujer que me llamó?

-¿si vas a acompañarme?

La voz de Maite me hizo calmar un poco, su rostro estaba en una expresión de sorpresa, con miedo… lo mas seguro fue que escuchó la discusión entre su hermana y yo y ahora no entiende nada.

-no linda, mejor quédate aquí con tu hermana hoy ¿Si? yo prometo que mañana te llevo donde tu mamá, no dejes a tu hermanita sola

-¿pelearon?

-mas o menos – le sonreí – mira, quédate con ella que yo regreso mas tarde ¿está bien?

-ok pero no vayas a tardar mucho

-prometido

Le di un beso en su frente y salí del apartamento agotada, preocupada por Paola, no sabía en qué había acabado todo ese problema con su esposo ¿Cómo se le ocurre casarse con un hombre 20 años mayor que ella? joder! ¿en que estaba pensando? intento marcarle a Sami pero no contesta… llego al parqueadero, subo al auto y pienso a que lugar ir… prácticamente que acabé con todo entre luisa y yo… sé que no debí decirle eso ni hablarle de ese modo pero.. ¿Por qué carajos tiene que dudar de mí? y ¿Cómo se le ocurre iniciar una pelea cuando acabamos de estar juntas? ¡!

Un mensaje aparece de repente

-te llamo en unos minutos - >>vaya respuesta la de sami<<

Logro perderme del edificio, dando vueltas sin sentido por parte de la ciudad sin saber a que lugar dirigirme

Camila

Todavía me duele mucho todo el cuerpo… además estos sedantes me mantienen medio atontada, la conversación de ayer con mi mamá me dejó mucho en que pensar… sabia que ya se estaba imaginando algo de la relación que estaba llevando con Sami… sólo que en mis condiciones, no es muy adecuado hablar de ese tema.

-¡buen día Camila! –

-Hola Sofía – le sonreí a la enfermera

-¿Cómo te sientes? ¿ya mejor?

-si, claro que si, es mas, ya estoy para que me den de alta

-jajaja claro – no necesitaba tener mucha malicia o ser demasiado inteligente para darme cuenta que ella estaba siendo por demás, demasiado atenta conmigo, o le caía demasiado bien, o estaba intentando coquetear conmigo

-ok, ya vamos a bañarte, las visitas ya llegaron y no es muy bueno, ponerlos a esperar

-¿Sami está?

Pensó un momento en responder, pero al fin lo hizo – si, no llegó hace mucho

Y automáticamente mi día comenzaba ser bonito. Ya llevaba cerca de 15 días aquí en el hospital, y cada día me sentía un poco mejor… no era novedad decir, que lo que me había causado el ex novio de Luisa, había afectado bastante toda mi salud en general, pero por lo menos, eso ya estaba siendo perfectamente superado.

Sami no había faltado un día sin venir a visitarme, estaba irremediablemente enamorada de ella… ya no sabia mucho de mi, todo giraba en torno a su nombre.

Me "organicé" en pocos minutos.. La verdad, solo era asearme, bañarme, cepillar mis dientes, y peinar mi cabello

Por la puerta, entró mi madre con una sonrisa gigante en sus labios, si alguien podía darme ánimos de que cada día me veía mejor, era ella. Acompañada de mi hermano, Sandra, y Javier

-¿Cómo amaneces Cami?

-bien,, ya me siento mucho mejor – sonreí para todos, Javier fue mostrando con sus manos, que se mantenían atrás en su espalda un ramo de rosas rojas, ahora no sabia que pensar se suponía que a pesar de todo lo que había pasado entre nosotros, ya las cosas habían quedado allá; en el pasado, y tan solo debíamos preocuparnos, por ser amigos. Pero últimamente no lo veía con ese mismo pensamiento, manejaba otra actitud conmigo y sus continuos detalles, estaban causándome problemas con Sami.

-¡Javier! no te hubieras molestado, en serio… no es necesario que hagas esto

-Vamos Cami – se metió mi amiga en defensa de él – Están Hermosas, ya quisiera yo tener tu suerte

Un rápido ambiente de incomodidad se formó para mí, y sabía muy bien que mi mamá y mi hermano lo habían notado.

-creo que de aquí, a la otra semana ya están en casa – comentó él, mientras detallaba el aseo de la habitación – eso me comentó el doctor

-ohh ¿de verdad? es una excelente noticia o no Cami?

-Si mamá, ya estoy cansada de estar acostada y siempre lo mismo

-si me canso yo de estar pegando el mismo camino todos los días – murmuró sarcásticamente mi hermano – Pff ¿no podías quedarte en un hospital mas cercano?

-si, es que quería hacerte enojar – bromeé – y ¿papá?

-trabajando – respondieron todos al unísono >>es obvio!!<<

-está bien?

-si mi amor, el pasa ahora mas tarde. Cami, ahora que me acuerdo, nosotros debemos viajar la otra semana, espero y sea después de que ya esté en casa... pero sino..

-tranquila mamá, entiendo. Al contrario, han descuidado mucho sus labores por estar aquí, además ya van varios días… ¿tu te quedas?

-obvio brother

si, lo se.. es un gran tonto mi hermano pero ¿Qué puedo hacer?<<

-en primera, soy mujer ¿ok? – Todos rieron – en segunda, no es Brother, es Sister o tú tienes un hermano en vez de hermana?

-ja-ja-ja-ja tan graciosa – poncho a pesar de su edad, tenia una manera de ser a niño y eso me encantaba – ni enferma dejas de ser tan presumida

-haha ok, antes de que comiencen a pelear quiero decirte que me llamó el doctor Fernández y me pidió que te saludara y te dijera que han estado muy pendientes de ti, y que te esperan pronto en la oficina.

-si, me hace mucha falta volver, a demás mis pacientes y..

-Sí, si Cami, ya lo sabemos – de nuevo poncho al rescate

-oye ¿podrías callarte?

-Sip - sonrió

-Cami mi amor, te tengo una buena noticia ¡Voy a Quedarme un mes Mas en el país!

-Waoh que sorpresa Javi, me alegro mucho

-Sí, así que necesito que te mejores rápido para que nos veamos fuera de aquí

Mmm… ahora como voy hacer para sacármelo de encima?<<

-Bien, Creo que mejor nosotros nos vamos

-no Sandra, no tienen por que irse

-sí, Poncho me acompañará a comprar una ropa y es mejor temprano amiga

-eh, si… mamá ¿te quedas?

-no, acérquenme al club – los odié a los tres en ese momento y mas de saber que Sami estaba fuera esperándome

-entonces, díganle a Sami que pase – dije, mientras se despedían

-no Cami, ahorita, déjame hablarte un segundo a solas

maldita sea ¬¬<<

-mañana nos vemos hija

-adiós mamá! – hice mi ultima mirada de "por favor no me hagas esto ¡quédate! y se hizo la ciega o la que no entendía

Salieron los tres y sólo me quedaba esperar a ver que quería Javier

-Cami, mirando todo lo que pasó… yo… Camila Suarez tu mas que nadie sabes todo lo que pasó entre los dos… y estos días que he tenido aquí en el país junto a ti, me han servido para darme cuenta de que yo todavía te

-Hola!

no puede ser… ahí Dios…<<

-Sami – cambié de rumbo mi mirada, ahí estaba parada sostenida sobre el borde de la puerta, su mirada me decía que había escuchado lo que Javier me estaba diciendo y una sonrisa irónica indicó un buen salido – hola! ¿Cómo estás?

-Bien y tu?

-bien - >>Vamos, arregla las cosas<< Javier la miraba con ganas de estrangularla y yo solo podía agradecer por haberme salvado y a la vez por haber llegado así – pasa

-nah, aquí estoy bien – contestó directo >>bien, esta enojada<<

-Cami no he tenido el placer de presentarme con esta señorita ¿Quién es?

Sami alzó su ceja, era claro… o respondía, o respondía..

-Sami es Una amiga ->>no te vayas a ir amor<<

-Si, una amiga – lo miró a él - ¿y vos?

-Su futuro prometido – lanzó tan de repente que me quedé estática sin poder creer todavía que él lo había dicho

-ja! mucho gusto ¿Javier es que te llamas?

-así es, el placer es mío Sami

-Samantha mejor – manifestó con fastidio, se entró mas a la habitación y su mirada me fulminó violentamente – venia a verte, y como se que estás mejor y en buena compañía, ya te dejo – sabia que esto último lo había dicho en doble sentido, sonrió y dio la vuelta

Reacciona Camila!! ¡¡se va a ir!!<<

-no Sami, espera... Javier es un amigo, y no tienes por qué irte, el ya se iba – dije en tono firme para que él se diera cuenta de lo que trataba de decir

-de hecho si, disculpa – se refirió a mi – volveré después hermosa – dejó las rosas sobre la camilla – hasta pronto Samantha, que estés bien

-igualmente

-amor no te enojes conmigo, no se por que le dio por decir todo eso, yo… Sami! – hice un puchero – tu sabes que sólo estoy contigo, y es por lo que dije de que eras una amiga… lo siento

-No, no es eso, sabes que no voy a discutirte el hecho de que no digas nada, eso lo harás cuando te sientas bien y segura, el problema es que no entiendo... por qué no le dices que se vaya y ya?

-Sami, Javier además de un buen amigo, es socio de unos negocios que tiene con mi papá, además de que también es intimo amigo del Doctor Fernández, Javier donó mucho dinero cuando comenzó t

-mira, no me hables de dinero... está bien... está bien… Cambiemos el tema... no quiero seguir con esto – la veía realmente fastidiada con el tema, por lo que asentí con ella

-no me has dado mi beso – tomé su cuello ligeramente, agarrándola por sorpresa y atrayéndola a mi… besé sus labios como si se me fuera la vida netamente en eso

-te amo hermosa

Sonrío dándome otro besito – mira, te traje esto!

Y sacó de su mochila una caja de chocolates

-Oye ¿me quieres poner fea muy fea? – reí – con esta es la tercera en esta semana, me vas hacer visitar el gimnasio muy seguido

-Vale ¿pero quien te entiende? malo que porque la comida no te gusta, no puedes comer otra clase de comida y ¿tampoco chocolates? umm... tocará dárselos a alguien mas

-¬¬ no em gustó ese comentario –

-jajaja eres hermosa!! y te ves linda así celosa

Miré sus labios, su cabello, su rostro… sus manos sujetando los chocolates, su cuerpo levantado y sus ojos mirando cada movida de mi mirada… se dio cuenta que la estaba mirando.. y me besó

-me gustas – susurró – me encantas – dijo en el mismo tono – me fascinas – y un pequeño cosquilleo recorrió mi cuerpo por completo – y me hace mucha falta abrazarte, besarte… acari… bueno, besarte… y besarte… - sonrió con pena! – aquí no dejan ni siquiera que te de un beso que pase el minuto, pff ¡¡que frustrante!!

-Voy a mejorarme solo para poder besarte por más tiempo

-¿Si?

-ajam – me incliné hacia ella, pasando mis manos por los costados de su cintura -

-shh, mejor gastemos el tiempo en esto – y justo cuando el beso comenzaba a profundizarse, Sofía nos interrumpió

-se acabó el tiempo señorita – expresó en tono déspota

Sami se separó de mí, y tomando un largo suspiro, dijo

-¿Qué tenes contra mí?

Sofía se quedó mirándola sorprendida, al igual que yo

-amor ¿Qué pasa?

-no es enserio – se acercó a ella – desde el primer día ha sido lo mismo… - miró su reloj – llevo unos pobres 8 minutos y ya me decís que me vaya?

-Sami

-No Camila, es enserio! ¿Qué pasa? todos pueden quedarse 30 minutos, y yo no paso de los 10, decime ¿Es por que soy mujer y ella es mi novia?

-Samantha!

-déjame hablar Camila – volteó a mirar a Sofía de nuevo – habla pues, o ya no tienes nada que decir?

-me parece que usted está irrespetándome señorita – se defendió ella

-Sami ya mi amor, párale!

-¿qué le pare? decime si no es cierto… ¿cuanto llevo aquí? 10 minutos! no llevo más… y mira ya que me vaya... por Dios.. ¿qué es esto?

-retírese o llamo a seguridad

-Sofía eso no es necesario

-entonces dile que se vaya

-pues no me voy a ir – le contestó groseramente – o sácame vos a ver si sos capaz! – la retó, jamás la había visto de ese modo

-SAMI DETENTE YA!!

-hah no es que qué lo diga y ya!

-¿Qué diga que? Sami estás muy alterada, cálmate y hablamos mejor

-No Camila, esta vieja cree que yo soy ciega! ¿Acaso no te has dado cuenta de cómo te mira, de cómo te trata?

Sabía que tenía razón, e ignoraba que ella ya se había dado cuenta del trato de Sofía conmigo.

Sofía le siguió el reto con la mirada.. y cada vez veía más descontrolada a mi novia

-amor, es mejor que te salgas un momento y… - callé, su mirada me pidió que no dijera mas – mira que si no, no te vuelven a dejar venir y yo te necesito aquí conmigo, no sin mi!

-pff – cogió su mochila con afán – ¿sabes qué? ¡Descuida! no importuno más tu día

-Sami no te vayas así

-no, ¿cómo me voy? no ves que la dueña del hospital ya me echó! – se echó a reír con una ironía que estaba haciendo poner de mal humor a Sofía – cuídate! – y hasta ahí la vi

-Discúlpame Camila, no fue mi intención

-no, tranquila – me indispuse, era claro que Sami tenia mucha razón – pero es cierto ¿Por qué siempre la mandas a salir tan pronto?

Se puso nerviosa – debo irme, disculpa.

Y ahora no sabía nada de ella... Sami se había ido enojada conmigo, primero lo de Javier... ahora lo de Sofía.. Dios

Sami

Es bien incomodo escuchar que alguien le dice todo eso a la persona con quien compartes una relación… peor de incomodo que Camila no le diga "adiós" por asuntos laborales… peor que el tipo haga una broma con ser su prometido y yo no pueda decirle nada… y peor aun que la enfermera le lleve ganas y no lo oculte… claro… y la mala del cuento soy yo!

Caminé... estaba agotada de tantas cosas… ese tal Sergio, no dejaba pasar la oportunidad para acercarse a ella también... no tenia clase… por lo que decidí irme a un bar a calmar mi rabia. El hospital en donde estaba Camila quedaba muy al norte de la ciudad, por lo que al caminar crucé varias calles, encontrándome con varias tabernas, discotecas, bares… pero preferí unirme a uno de ambiente... No necesitaba ligar con nadie pero tampoco me agradaba mucho la idea de ver a parejitas besándose y a hombres creyéndose los súper conquistadores tratando conseguir algo más conmigo.

El celular me sonó varias veces repetidamente, miré que era Cris… pero seguí caminando... no estaba de humor para hablar con nadie

Caminé y caminé hasta que llegué… era grande y se veía moderno... sonreí al ver su nombre "Daniela's girls" ¿Qué diablos es ese nombre? al lado de él, habían cuadros de chicas al parecer ligando entre ellas... y desde afuera se escuchaba una canción de maná "labios compartidos"

este es<<

Entré… no había mucha gente… eran contadas las parejas, habían mas chicas que se estaban conociendo y algunas otras parejas de chicos que solo estaban charlando y tomando

Me acerqué a la barra… pedí un trago de ron… me ubiqué allí y traté de pensar bien las cosas… me había comportado inmaduramente, es sólo que esa situación comenzaba a irritarme… otra canción de Vilma palma e vampiros... bueno, al menos la música, era buena.

Tomé otro trago… pasó fuertemente por mi garganta… miré la pista de baile, nadie bailaba… todos estaban metidos en lo suyo, alguna que otra niña hizo el ademan para acercarse y con mi mirada, les dije que no.

Volví a mirar a la mesera, se concentraba en cada una de las personas, reaccionó y se dio cuenta de que la estaba mirando, y con una coqueta sonrisa me ofreció otra copa.

Me encerré en mis pensamientos, en su carita… en sus besos… en esa sutilidad al pedirme que calmara y esa preocupación por ver lo alterada que estaba… de nuevo, timbró el celular… era Cris… se me había olvidado llamarla... me incliné y tomé el celular de la mochila

-Cris, perdóname… estoy distraída y no lo recordé

-Sami ¿Qué carajos te pasa? yo esperándote desde hace rato

-Lo se ¿pasó algo?

-donde estás? ¿Te apuntas a embriagarte conmigo?

-wow ya empecé ¿por qué? ¿Tu tomando? como raro

-Luisa! pff no quiero hablar de eso ¿Dónde estás? ¿Con Camila?

-nah, ando cerca del hospital a unas 5 cuadras bajando… en un bar que se llama "Daniela’s girls", pregunta por aquí cerca y deben decirte

-ok ¿oye que haces en un bar con ese nombre? pero bueno. Ya salgo para allá

-dale

Colgamos, otra copa mas… podía sentir como me estaba causando efecto el alcohol… apagué el celular

Capitulo Vl

Después de unos segundos… se ubicó a mi lado una mujer un poco mas alta que yo, delgada… se sentó con precisión en un asiento al lado del mío – un tequila doble, y una cerveza por favor – pidió

Yo, pedí otra copa, ya con esta eran 5 o 6, ya no lo recuerdo… el ron, pasó agriamente… la mujer que está a mi lado, se entretiene con la espuma con la que se va absorbiendo la cerveza, luego toma el vaso y lo bebe desmedidamente, me entretengo al ver su capacidad para tomar tan rápido y sin detenerse, hasta que llega una mujer con aspecto a querer ser hombre en plan de ligar con ella.

Sin pensarlo, comienzan una discusión entre ellas dos, la aparecida por que insiste y la mujer que está a mi lado, por que se niega… giro mi vista buscando algo más que ver y siento como me cae encima la cerveza que ella estaba tomando, me levanto furiosa tratando de secar mi ropa que está totalmente mojada

Alzo mi mirada y veo como la mujer que intentaba acercarse a la que estaba a mi lado, se va molesta alegando ella sola.

-¡Lo siento! nena... no quería tirártela a ti, más bien a la tipa esa – expresó aparentemente avergonzada

Vaya día este<<

-Tranquila, no hay rollo – vuelvo a sentarme, suspirando largamente, mientras me quito la cazadora

-Me gustan esos chavos, antes no tenía otra cosa en mi closet sino esos... pero ya ves... lo que hace que uno crezca – señaló mis piernas y sólo me quedó sonreír ante su comentario

-Gracias, pues si, son cómodos y eso es importante para mi

-Bueno... ¿Qué te parece si te invito un trago, una cerveza, una copa, lo que sea que estés tomando por haberte mojado? – intentó sonreír, pero su lucha fue un total fracaso, mientras su apariencia quería demostrar estar bien, sus ojos se veían tristes, muy tristes

-Un trago de ron esta bien – dije mientras que ella esperaba mi respuesta junto con la camarera

-¡Salud!- y choca su copa con la mía en un acto espontaneo - ¡AHH! Me falta el limón

-y la sal – complemento

La observé, algunos centímetros mas alta que yo, delgada y con un cabello hermoso, de contextura oscura, liso y ligeramente suelto, sus ojos no me mostraban su color perfectamente, las luces del bar me engañan de manera cruel al mostrarlos cafés muy claros, pero me inclinaba mas, por que eran de color miel, manejaba un estilo rockero, eso me gustaba, su jean estaba desgastado su camisa de manga larga con cuadros rojos y negros y un par de botas medio altas de color marrón

-Esto suena como a ligue... pero no lo es... ¿Qué haces aquí sola, triste y abandonada? y para colmo de males ¿Emborrachándote sola?

-bueno la verdad es que, estos últimos días han sido difíciles y tenia que desahogarme – no pude evitar sentirme mal – pero no estoy sola, ya viene una amiga; además, estás tú

-Yo soy una completa extraña... mas bien bebamos... por las mujeres que nos hacen… - y su aspecto se descompuso en una triste facción a melancolía

-Mucho gusto completa extraña, soy Samantha – reí, sentía la necesidad de hacerla cambiar de animo, quería verla sonreír, dolía verla así

-Pues, un placer Samantha – me tendió su mano – el mío es Claudia

-dime Sami – y miré el anillo que llevaba en una cadena alrededor de su cuello >>esto es de compromiso<< >>vale ¿A ti que te importa?<<

-Te me quedaste viendo... esto es como andar en bicicleta jajajajaja – bromeó haciéndome parecer una idiota, me quedé observándola por un tiempo considerable sin reaccionar a su mirada >>Dios<<

  • Discúlpame, de verdad lo siento – susurré con vergüenza – Lindo anillo, ¿Significa algo? - >>a vos que carajos te importa Sami?<<

-¿Este? – me miró ofuscada, con rabia, molesta y con ganas de matarme, después recapacité y supe que nunca debí de preguntarle eso, así que su mirada se fue calmando y apareció una tierna sonrisa

-Si, realmente es muy hermoso, ¿que sig...?- callé antes de continuar >>imprudente, deja de preguntar cosas que no son tu asunto Sami<<

-Significa... la historia de un gran amor... un amor que cambió mi vida, un amor que me transformó por completo, me hizo mejor... pero mejor en todo... y colgado en el cuello, porque la mano que podía tenerlo... ya no está... – y su voz se quiebra a pesar de que ella hace su mayor intento por no demostrarlo, abre su mano y permite qué yo lo observe

-Vaya, está Lindo Claudia. Pero sos joven ¿pensabas casarte desde ya? - >>soy una Estupida… los tragos me hacen triplemente mas tonta al hablar<<

Y antes de que pueda responder noto su malestar al ver mi pregunta >>¡rayos! que inoportuna he sido<< - sabes? Lo siento... no estoy siendo discreta. – bajo mi rostro pensando cambiar de tema

-Tranquila, ¿Quieres verlo?... pero antes otro trago...

Ya siento que todo me da vueltas, la música, las luces, su compañía, el licor... ella toma rápido, aún más de lo que lo estoy haciendo yo

-¿Puedo hacerte una pregunta?

-¡Pues...! ¿Qué harías si te digo que no? – inició un tono divertido acompañado de risas, al mismo momento en que asentía con su cabeza

-¡Umm creo que entender tus Cambios continuos de humor, me harán marear mas pronto de lo que pienso! pero va... ¿por que estás sola en pleno día, en una ciudad que no es la tuya y bebiendo con una desconocida? ¿Desastres amorosos?

-Si... mi humor... no eres la primera que lo dice – y bajó una cálida lagrima de sus ojos – ¡La verdad no conozco a ninguna chica en Medellín!, ya no somos desconocidas... te llamas Samantha ¿Desastre amoroso?... define desastre amoroso... además yo te pregunté eso primero y no me respondiste

Antes de que yo digitara alguna palabra, me interrumpió – ya se que me dijiste que fue una semana difícil... pero no dijiste nada concreto... fue una respuesta vaga eso... yo te cuento y tu me cuentas... ¿Que opinas?

-Debo tener privilegio al estar en mi territorio o ¿no? - sonreí logrando que ella también lo hiciera, me partía el alma ver a alguien llorar y mas verla a ella con esa mirada tan frágil demostrando ser fuerte – está bien! ambas por igual

-Yo me enamoré, se enamoró de mí... vivimos juntas... y... – su mirada se perdió

-Bajé mi rostro - ¿acabó?

  • Acabó... si – asintió -- acabó sin que ella ni yo lo quisiéramos... - ¿Otro trago?

-Si - sirvió otra ronda mas – lo siento

  • No lo sientas... ha sido lo mas hermoso que he vivido... pues ahora sufro... pero los años que vivimos... eso no me lo quita nadie, ni este trago, Ni este dolor que me acompaña. No hay nada como estar enamorado y vivir el amor... a todo pulmón, a todo sudor... – me observa cuidadosamente - ¿Te has enamorado?

-Si - me dejé llevar por lo que sentía – quizás lo hice hace poco tiempo como nunca antes, pero todo terminó mal – bebí y otro sorbo mas de la copa – ahora, también lo estoy – y ella antes de beber de nuevo, se detuvo para reír – de otra persona

-Pues... brindemos... enamorarse dos veces...!Wau! y esta otra persona ¿que?... ¿Te corresponde?, ¿Se lo haz dicho?... ya se... ya se... te dijo que no y por eso estás bebiendo aquí... jajaja

-ja! no... Si me lo ha dicho, pero ella está ocupada con alguien mas – bueno , no es cierto... digamos que un ataque de furia me hace decir eso , es complicado. Ella está en un hospital, tiene a su ex comprometido como un adicto a ella que no la deja en paz, al ex amor de su vida que hoy se le declaró y a una enfermera que me está siendo la vida mierda mientras voy a visitarla

  • Pero ella... ¿Te ama?, no importa los payasos que molesten, las moscas que estorben... ¿Ella te ama? – Me observa seria y yo solo atino a huir a su mirada – es decir... que si tienes algún obstáculo... tu simplemente... ¿Te rindes?... ¿Bajas los brazos y ya?... ¿Dejas que se aleje la mujer, que te dijo que te ama, que tu... evidentemente amas, por terceros? – eso definitivamente merece un tequila... y un ron de esos que tomas... - Bebemos - Si piensas así... no mereces que te amen...

-a lo mejor - era directa y eso era lo único que yo estaba pidiendo - Tienes razón, sólo que las cosas se ven fáciles desde afuera pero no lo son desde aquí - y me señalé a mi misma

-¿Esa es tu respuesta? ¿A lo mejor?... pobre mujer que esta enamorada por ti...

Eres una puta cobarde... viendo la vida desde la comodidad, sin sentirla, sin pelearla... personas como tu... me dan ganas de golpearlas... pedazo de Boba

-Y vos quien te Creés para venirme hablar así? - al parecer mi rabia todavía no estaba calmada, viene ésta a hablarme de cobardía sin conocerme - si mirá lo que me estás diciendo, no se pudo nada entre la mujer que amas y tu por que el destino no lo permitió! pff que diplomacia! – me levanté fastidiada por la reacción – como es de bueno hablar y juzgar, no? – mis ojos se clavaron en su mirada molesta – te ahorro las ganas de golpearme! – bebo el ultimo sorbo y agarro mis cosas – disculpe, súper majestad Valiente! – expreso irónicamente

Su risa mueve aún mas mis descontrol, me devuelvo y la miro pero sigue riéndose - rola tenias que ser! – m e aguanto las ganas de golpearla >>a una mujer, no<< tomo mi rumbo cuando siento que me toma con fuerza de mi brazo – Déjame quieta – suelto su mano de mi brazo

-¡LA MUJER DE LA QUE HABLAS... ESTÁ MUERTA! – me grita y se devuelve sirviendo nuevamente las copas

-¿Muerta? >>Jodida Vida<< - me devuelvo – hubieras comenzado por eso! – le reprocho

-¡Ahora si vez porque me rio! ¡Dios le da pan al que no tiene dientes! ¿Un trago? para que se te baje la calentura paisita

--¡y yo que Diablos iba a saber! - sentía rabia, vergüenza, algo de diversión por mi torpeza y por sus ganas de hacerme quedar en desventaja, triste por ella... y sin saber que decir – bueno pues al menos ESTÁS JOVEN! - >>Carajo Sami<< me miró con ganas de golpearme enserio y me reí

-ok, ok... Estamos en paz

  • Tampoco preguntaste ¿no?

-si, debí tener imaginación - volví acomodarme - ¿fue hace poco, verdad?

-Bastante poco... una semana, desde ese día... no duermo sin tomar...

Uff, esta mujer me estaba poniendo la piel erizada ¿Una semana? ¿Que se siente pasar una semana sin la mujer que amas y mas sabiendo que esta muerta? ¡Dios! - mierda!... ¿que le sucedió?

-Un accidente de transito, la robó de mis brazos, pero con ella se fue mi corazón., así que... a beber... – comentó tristemente

-Claudia, en verdad es una lastima... ¡todo se resume a eso! vives bien un momento pero llega otro mas fuerte con un sabor amargo - una lagrima brotó de sus ojos y sin su permiso, rosé su mejilla con mi mano - no llores, eres muy linda para llorar

-Eres la primera persona que dejo que me consuele...¡Gracias! , Aunque... eso no quita lo que pienso; eres una Estupida... bonita... pero estúpida - busca a tu chica, grítale que la amas, que la extrañas, que la quieres contigo... que estas dispuesta a hacer por ella... lo que no haz hecho por ninguna...¡DEJAR DE SER UNA COBARDE! lánzate a los brazos del amor, porque al final, lo que te queda es eso, el miedo no sirve de nada, el amor es mas grande que eso; sino eres capaz deja a esa mujer en paz, porque no la mereces sino eres capaz de luchar... Vívelo, yo no puedo, no tienes idea, despertar todas las mañanas y saber que la personita que amas no esta a tu lado y tener la esperanza muerta porque nunca lo estará... TU LA TIENES AQUÍ... ¡DIABLOS! ¿Acaso eres tan ciega para no verlo?...

En ese momento, la figura de Cris aparece de repente... un beso suyo en mi mejilla, me da un saludo... la miro, ¡ha llorado! luego mira a Claudia con curiosidad

-Cris, ella es Claudia - se dan la mano y una y otra vez las palabras de esa mujer que apenas he conocido hoy retumban en mi mente

Se saludan, todavía me quedan las palabras de Claudia en mi cabeza, una completa desconocida que logra sacudir todo en mí. Es increíble como a pesar de que pasan tantas cosas sigo siendo igual de egoísta.

-¿vos pensas que yo no tengo nada mas que hacer? ¡Ha pasado 1 hora 40 minutos! y nada que daba con este puto lugar, sami!! Y tu celular apagado, como siempre... – su voz me obliga a mirarla asustada casi me pega con ese solo grito y después de un momento, se calma, me levanto y la abrazo

-Discúlpame ¿Si? tienes toda la razón, ¿Qué pasó? ¿Por qué tienes los ojitos así? – dije, Luego de hacer los arreglos respectivos nos cambiaron a una mesa apartada, con un sofá en U y una pequeña mesita en el centro.

-Luisa… piensa que el engaño – susurró abrumada

Me levanté y llamé a Luisa, ocupándome de que ella no fuera a pensar siquiera irse de esa casa, conociéndola y conociendo su orgullo, eso era lo más probable.

Finalmente, logré que Luisa se calmara y decidiera quedarse en casa por lo menos esta noche, después de todo, no podía irse, no tenia a donde, yo estaba ya lo suficientemente ebria como para ponerme a defender una estúpida pelea, solo por celos absurdos de Luisa, donde la mujer con la que estaba desconfiando de su novia era su propia cuñada. Pfff

Colgué, y me di la vuelta acercándome de nuevo a la mesa… podía ver como mis pies enredaban su paso de manera recta, observé a dos parejas de mujeres bailar en la pista de baile, en donde parecía mejor el inicio de una noche salvajemente excitante.

-lo siento – choqué con una niña que le ponía máximo 18 años con una sonrisa hermosa

-no hay problema – contesté con ternura, un mechón bajó por su rostro y ese gesto hizo verla en extremo, demasiado sensual, me quedé atontada viéndola, su aspecto me recordó hace un año que estaba yo en la misma situación, así igual de tímida y con esa misma expresión romántica, sonriendo con esa dulce sonrisa a alguna mujer que me agradaba - eres linda! – le dije y me alejé de ella.

Me aproximé a la mesa, y esa imagen… todavía atormenta mis sentidos

Wowwh… ¿qué carajos es esto?<<

Claudia casi encima del cuerpo de Cris, unidas por un pasional beso que me deja estática

-Ya Basta – dije fuertemente sin entender aún

Ellas se miran confusas, cruzan dos palabras y Cristina se levanta en dirección al baño, suspiro

Malditos Tragos!! Lo que Causan<<

-Se parece demasiado a Mariana! – me observa apenada, confusa y con miedo – en serio En serio!... lo siento mucho... - Sus lagrimas caen - !Siento como si hubiera sido infiel!

Claudia está pasando por un momento que no le deseo a nadie; esto sumado a que el poco sentido que tiene de razón, está perdido por culpa de todas las cervezas y los tequilas que ha bebido este día. Voy y busco a Cristina pero no está >>Debió irse<< regreso y decido a irme con Claudia en taxi. El camino es silencio puro, yo pensando en todas las palabras del día de hoy, en los hechos, en su triste realidad y en mi absurda mentalidad de que siempre lo peor me pasa a mi. Llegamos; se baja del taxi conmigo, la miro inquieta y su mirada sigue apenada

-Sami un placer... este es mi numero – saca una tarjeta con su nombre y su numero y me la entrega – llama cuando estés en Bogotá ó cuando vayas a Santa Marta

-Claudia ¡Relájate! no puedo ni entender por lo que estás pasando. Un Gusto conocerte - le doy un abrazo y ella vuelve a reincorporarse en el automivil

-¡Oye! – me gritó cuando ya me estaba dando la vuelta

-¿Sii?!

-!El amor todo lo puede, todo lo alcanza, el amor es suficiente...! jajaja –sonrió y vi como el taxi se alejó, un extraño corrientazo a confusión recorrió mi cuerpo, sentía la necesidad de seguir hablando con ella, me había gustado su compañía, quería acompañarla en su dolor así no supiera nada de la mujer que ama… me di la vuelta pensando en llamar a Camila pero… sabia que la enfermera esa no iba permitirlo, mordí labio impotente por no poder hacer nada y el grito de mi madre, hizo olvidarme de todo

-¡Samantha Díaz! ¿Hasta cuando?

Se que esta parte estuvo muuuy larga y pues, ofrezco disculpas por eso, además de que demoramos un poco más pero las circunstancias, obligaron. Igual saben que aquí aceptamos criticas y de nuevo, gracias, gracias por tomarse el tiempo para leernos.