Estando muy cerca de la muerte (14)

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Estando Muy Cerca De La Muerte 14

Fran07 – Danii2

Todo esto estaba haciéndome estallar… mi cabeza me hacia dar vueltas progresivamente, no quería asustarme pero ¿Qué estaba pasándome?... además, mis ojos me pedían descaradamente mas horas de sueño. Por lo que fui a bañarme y quedarme frente a la ducha aproximadamente 25 minutos, mientras el sueño desaparecía.

Bajé a la cocina, tomé un vaso de agua… vi una nota de mi mamá que decía que había tenido que salir de afán, pero que no demoraba… respondí a esa nota para que cuando llegara, no me fuera a ganar otra cachetada

-"ma, voy para donde Camila, llámame más tarde…t…

dile que la quieres sami<< te kiero

Y salí de la casa… mi celular, sonó

-¿Si?

-carajo! hasta que por fin contestas Samantha ¿Dónde rayos te has metido?

-Cris, por favor no grites que me duele la cabeza ¿Dónde están?

-En el hospital, el hermano de Camila, se golpeó en la cabeza por que se peleó con su ex cuñado

-¿y Camila?

-está hablando por teléfono

-ok, ya salgo para allá

Y colgó sin despedirse

ah, estoy acostumbrándome a que todos, se molesten conmigo<<

Revisé mis bolsillos… ya estaba a 3 cuadras de mi casa, esperando a coger un taxi

grandioso, eres la primera persona que sale sin dinero<<

Me di la vuelta enojada por mi estupidez, y de nuevo el celular

-aló?

-hola – escuché la voz de un hombre por el otro lado – hola, hola, sami ¿Cómo estas?

Recordé "Freddy"

-¿Freddy?

-Sii, jaja te acordaste – vaya, este hombre, parecía un niño – disculpa que te moleste, sólo que ayer te quedaste con la chaqueta con la que trabajo y… la necesito

Toqué mi cabeza >>soy lo mas torpe<<

-claro, ashh que pena con vos, si quieres yo te la llevo o ¿cómo hacemos?

-yo, estoy al frente de tu casa

Alcé mi ceja

-ok, espérame 5 minutos.

Corrí hasta llegar a casa, allí estaba… tenia un pantalón blanco con una camisa negra, su cabello estaba más descomplicado que ayer, y llevaba puestos unos lentes

-hola – me acerqué a él, saludándolo

-hola Sami – sonrió – pensé que estabas en casa

-no, estaba cerca, espérame que ya te la paso ¿ok?

-claro – asintió esperándome

Regresé de nuevo, busqué entre todo mi desorden, la bendita chaqueta, revisé el jean que llevaba ayer, saqué lo único que tenía y bajé

-toma, muchas gracias Freddy y disculpa de nuevo

-no hermosa, no te preocupes, antes discúlpame a mi por pedírtela, es sólo que sin ella, no puedo trabajar

-si, es cierto, bueno, discúlpame que sea tan grosera pero es que tengo que irme rápido

-¿te esperan?

-Mas o menos – miré la avenida, buscando un taxi – mierda, cuando uno los necesita, ahí si no pasan

-ah?

Reí >>como siempre, hablando sola<< - no, un taxi, voy a adelantarme un poco a ver si lo encuentro. Cuídate

-oye, Sami, si quieres yo puedo llevarte – se encogió de hombros

No había que pensarlo, tenía que llegar rápido

-Vale, si voy a aceptarlo por que necesito llegar urgentemente

-sube

Y me monté en su carro, el arrancó, le pedí que fuera rápido, el trafico no ayudó mucho, pero logramos huir pronto de él, después, llegamos. Para mi mala suerte, ellas, apenas salían junto con Poncho, por lo que me vieron llegar con él.

Me bajé del auto, me costó un poco recuperar mi equilibrio, miré a Camila… se notaba molesta… y eso sin mirar a Luisa y Cristina

-hola, perdón la demora pero es q

-hablamos en casa – mencionaron las tres al mismo momento, poncho con un pequeño parche en su frente sonrió

-Vaya Sami, te las ganaste!

Le sonreí irónicamente – si, y tu ni enfermo dejas esos comentarios

-Umm… pero aquí ninguna anda de genio, que jartera, ¿Cómo hacen para soportarse entre ustedes mismas si todas son así?

-cállate Poncho – le dijo Camila, sus ojos estaban llorosos, y rojos

-Sami, entonces yo me voy – apareció Freddy >>se me había olvidado<<

-ah, si, Freddy, enserio, de verdad muchas gracias por todo

El, sin yo pensarlo, se acercó a mi, despidiéndose con un corto beso en mi mejilla… cerré los ojos tratando de imaginar la cara que Camila estaba poniendo en ese momento.

-adiós – le dije, y se marchó

Volteé a verlas – Jajaja ayer fue día de sexo, hoy vas a estar castigada –

-jahh jahh jahh sos taaaaaaaan chistosito – lo miré queriendo matarlo - ¿vamos?

Ninguna me respondió, sólo estaba el carro de Luisa, ellas dos se acomodaron en los asientos delanteros, Camila, poncho y yo, atrás.

El ambiente estaba demasiado tenso, sabia que era por mi… >> ¿para qué me llamaron si están enojadas? pff<<

-y Sami – comentó Cristina con un sarcasmo que no podía con el – cuéntanos quien era tu amiguito, eh?

-amm… él es Freddy

-Ya – se metió Luisa - ¿y de donde lo conoces?

ojo con la respuesta<<

-de un bar

Tonta, Tonta, Tonta<<

Camila me miró, esa mujer me conocía muy bien, y sabía perfectamente cuando mentía y cuando no, por lo que no me atreví a fingir en mis palabras

-¿un bar? waoo…. Y ¿desde cuándo frecuentas bares?

-niñas, dejemos la ironía ¿Si? tengo dolor de cabeza, pongamos música hasta que lleguemos y en casa hablamos

-¿dolor de cabeza? ¿Acaso tomaste ayer?

-no, no tomé, pero tengo dolor de cabeza – me recosté sobre el espaldar y cerré los ojos, estaba mareada… esto comenzaba asustarme

Luisa

Hoy estoy mas nerviosa que nunca, tengo miedo… me siento fatal… ¿Qué tendrá Pablo para decirme? … la noche de ayer, fue increíble… ella todavía duerme, la sabana cubre tan sólo parte de sus piernas… admiro su cuerpo, es hermosa… su piel es suave… es increíble como cambiaron tantas cosas en tan pocos días. Hace mas o menos un mes y medio, podía jurar que Sami o era para mi, o no era para nadie… Cristina siempre estuvo… ¿Cómo no me di cuenta de ella antes? juego con su espalda, dándole pequeños masajitos con mis dedos… su piel reacciona, por lo que se va moviendo poco a poco. Su cabello negro, cubre su rostro, me deshago de algunos mechones que no me dejan verla… miro sus labios… y una sonrisa traviesa aparece sin ser llamada.

jajaja (se que suena vergonzoso pero;) anoche me hizo tener los mejores orgasmos de mi vida<<

Bajo hasta sus labios y la beso

Todavía no me responde, me acomodo mejor, pongo mi mano sobre su pecho… comienzo a acariciar sus senos… uff, esto comienza a calentarme de nuevo… sigo besándola… aumento mi movimiento, hasta que su cuerpo reacciona con un brinquito. Abre sus ojos y me mira

-que vista tan linda – su voz suena algo ronca >>la mía debe estar igual, estoy hablando mentalmente 0_o<< - Jaja, me encantaría despertar siempre así, y que tú seas lo primero que mis ojos vean –

(muakk)

-¿Cómo dormiste?

-Jamás había dormido mejor ¿y tú?

-igual – la besé. Ella quería un beso corto, el común de "los buenos días" pero yo no quería eso

Déjala dormir Luisa!!<<

Pasé con demasiado cuidado mi lengua por sus labios, pude ver como abrió sus ojos sorprendida y correspondió de la misma forma… no tardó mucho en abrazarme, sus brazos abrigaban mi cuerpo… las dos, estábamos totalmente desnudas. El juego, comenzaba de nuevo.

-¿te levantaste con ganitas? – dijo riéndose

-¿Yo? ¡Para nada!

-jaa! sobre todo

Como estábamos de lado, busqué su cadera… la rasgué con mis uñas, mientras mordía su labio – Ufff, amaneciste con mucha pasión

-ajam… - respondí

Besé su cuello, e hice que se acomodara boca-arriba mas no de lado… yo, estaba sobre ella, sus manos se refugiaron a los costados de la almohada apretándola con fuerza, por mi lado, comencé a besarla por su pecho… llegando lentamente a sus senos… mordió sus labios, para evitar gemir tan prontamente… hice mas presión con los míos… y sonreí al escucharla

-mmmmmmmmmmmmmhhhhhhhhhhhh

Sus ojos estaban cerrados, bajé mi mano a su sexo… haciendo que se humedeciera más rápido de lo esperado

-Luisa por Dioossss…….. ¿Tus hormonas están revelándose?....

Descendí por su abdomen, jugué con los pocos bellitos, que adornaban toda su cintura… me fijé en ellos, no los había detallado bien… eran monos, unos estaban un poco mas abajo de su ombligo, y otros, arriba… su cadera iniciaba un movimiento retador con la velocidad de mis labios, la mojé con mi lengua… Volví a mirarla, presionaba con más fuerza la almohada… hasta que… llegué a su vientre

-Sigueeee

Sus piernas, se encogieron, para estar de rodillas hacia arriba, me acomodé entre ellas, observé sus muslos… pasé mis manos por ellos… su cuerpo se movía cada vez más rápido y con mas fuerza… abrí un poco mas sus labios

-si te vieras – dije riéndome – estás súper húmeda

-mm… no me puedo ver… pero si… puedo sentirme….hh

Trató de sonreír, su rostro estaba siendo esclavo de los gestos de placer que su cuerpo estaba sintiendo

La besé

Y se estremeció

Una de sus manos se aferró a mi cabello, obtuve un muy buen apoyo de mi lengua, lo que causó que sus suspiros, su respiración, sus gemidos, y los muy pequeños griticos, que rebeldemente se escapan de sus labios, aumentaran de una manera considerable… sentirla así, estaba haciéndome excitar mucho mas de lo que yo podía controlar, su abdomen bajaba y subía fugazmente, su mano derecha subió a sus senos… agilicé mis movimientos… pude sentir como sus paredes vaginales, cobraban vida casi tan de repente como anunciándome que ya estaba pronta a llegar

la besé con mas pasión, jugué con mi lengua sobre todo su sexo, subí y bajé, para que, finalmente, terminara ejecutando mi objetivo sobre su clítoris… y solo sentí que sus gemidos quedaron ahogados, que su cuerpo se tensó, que la cantidad de excitación comprobada por su humedad, iba incrementando sorpresivamente… sus manos apretaron con fuerza mi cabello, sus ojos no sentían la mas mínima necesidad de abrirse, sus labios pasaron de estar mojados, a totalmente secos… y sus piernas perdieron su poder, y cayeron sobre la cama casi sin esperarlo



-¿Hola?

-Luisa h

-Maite! – sonreí – hola chiquita ¿Cómo estás? ¿Cómo te has portado? ¿Cómo te sientes? – esperé un momento - ¿ya desayunaste?

Sentí la mano de Cristina, tocar mi espalda, la miré y con su rostro me dijo que fuera mas despacio

-jaja que pena, lo siento Maite, no he dejado hablarte

-si, si – su voz, parecía asustada – una cosita antes de decirte lo que te voy a decir, que no se note que aun no te levantas ¿estas loca?! Son las 12 del medio día ¿Cómo desayunar?

-las doce?! rayos! como se ha pasado el tiempo – mencioné haciéndome la desentendida

-aja, claro, si, si Luisa ¿me crees tonta? quien sabe en que se te fue el tiempo, no? pero bueno, ese no es el royo

-¿Qué pasa?

-hace 10 minutos, llegó un tipo y está discutiendo mucho con el hermano de Camila

-¿pero todo anda bien?

-¡No! Camila está tratando de calmar las cosas pero ellos dos se están insultando y me están haciendo dar miedo

-¿Qué pasa? – me preguntó Cristina al ver mi rostro

-no lo sé – retiré la bocina para hablar mejor – al parecer poncho está a punto de pelearse con otro hombre en el apartamento de Camila

-¿pero ellas están bien?

-no sé, Maite está angustiada

-pásamela – le di el celular – bueno? Maite? – Esperó a que le respondiera – mira muñeca, yo voy a organizarme, si ellos se pelean o te hacen daño a ti o a Camila, vuelves a llamar – volvió a esperar – no, no te preocupes, voy a llamar a Sami, a ver dime algo ¿Quién es el hombre? – (espera) - Umm, ok, dile a Camila que si necesita que estemos allá y vuelves a llamar ¿Listo? – (Espera) – dale, y no te asustes – sonrió – ahorita hablarnos, chau.

-¿y?

-el tipo ese es como que un ex novio de Camila, la verdad no se

-¿y Sami?

-espera la llamo

Marcamos a casa de sami, su mamá dijo que ayer había llegado muy tarde, en la madrugada, por lo que estaba durmiendo… Luego, llamamos a su celular, pero estaba apagado.

-voy a bañarme

-ok – asentí, fui a la cocina y preparé algo de comer… miré mi cuerpo, estaba sin una sola prenda, mi subconsciente viajó al pasado, hace dos o tres horas… que rico fue todo eso… tomé un vaso con gaseosa y esperé a que ella saliera del baño. Divisé todo su apartamento, Cristina estaba muy organizada para ser tan joven. Hasta el momento, no se nada de su familia, tan poco es que sepa mucho de sus amistades… ni siquiera sé como se mantiene. Al fondo de la sala, en un pequeño rincón, estaba un cajón que se veía antiguo… sobre él, estaba un portarretratos… me acerqué a este… la fotografía no se veía de lejos, pero a medida que me iba acercando, con mejor visión me daba cuenta de quienes eran los protagonistas de la foto. Allí estaba cristina, mirando a un lugar muy lejos de la cámara o el fotógrafo… y con ella, una mujer más baja, que la abrazaba.

¿Quién es ella?<< >>¿por qué está abrazándola?<< >>¿Por qué Cristina tiene esta fotografía?<< >>¿Seria su antigua novia?<< miles de preguntas rondaron mi mente, no es que me sintiera celosa, simplemente se me antojaba saber quien era esa mujer.

Sentí que ella salió del baño y regresé a la cocina. Una toalla blanca cubría desde su pecho hasta sus piernas… su cabello mojado la hacia ver hermosa, sus ojos eran intensos, oscuros, y su mirada hacia un intimo contacto con ellos para hacerla interesante.

Me bañé. Luego desayunamos, enviamos mensajes a Sami que nunca respondió… eso si que estaba extraño… quedarse donde Camila hasta tan tarde? para ese caso, se hubiera quedado a dormir.

--mierda – dijo ella mientras estábamos en el parqueadero

  • qué pasó?

-se descompuso está llanta, argh!

Observé su carro, era cierto

-no hay problema, vamos en mi carro

-si… ahora me acuerdas para llamar al técnico y llevarlo

-si – me dio un beso, y subimos.

Prendí el auto, aceleré… y salimos de allí. Mientras conducía el miedo a lo que pasaba hoy, me tenia inquieta. Cristina no sabía nada, y no sabia si contarle era lo mejor.

¿Cómo le digo?<<

-Cris

-dime hermosa

-emm… tengo que decirte algo

Sus ojos se posaron sobre los míos, sonrió mirándome con ternura, estaba encariñándome mucho con ella, podía sentirlo

-Pablo llamó ayer

-¿¡que!?

-y me dijo que nos viéramos hoy

Soltó mi mano, y miró a otro lugar - ¿por qué no me habías dicho?

-no lo se, quería olvidarme de eso. Yo no puedo decirle que no, por que sabes que está pendiente de Maite, o a lo mejor le haga daño a mi mamá

-si, entiendo

-oye, no te enojes – estiré mi mano, y acaricié su rostro

-no, simplemente que eso no me gusta Luisa, yo no se que quiera ese estúpido. Voy a llamar al agente para que esté al tanto.

-Cris, a penas Pablo se dé cuenta?

-y entonces qué prefieres? que nos quedemos calladas?

-no… sólo asegúrate de que hagan bien las cosas

-si

En el camino, no hablamos nada mas, sé que no le gustó mucho lo que le dije pero no podía hacer nada. Quiéralo o no, me tenia que ver con el. Esto no era un juego, y ya Pablo me había demostrado lo que era capaz. Primero se metió con mi madre, casi deja embarazada a Maite, y eso era el principio, no podía arriesgarme.

Llegamos a casa de Camila, me asusté al ver que la puerta estaba abierta, y en la entrada del apartamento se encontraba un zapato.

-¿Qué pasa aquí?

Empujamos, y si Cristina no me jala para su lado, un jarrón me cae en toda la cara. En el fondo estaba poncho golpeándose brutalmente con un hombre mucho más fuerte que él. Camila estaba hablando por celular, y Maite estaba detrás de ella.

Ellos, se dieron cuenta de nuestra presencia y ni aun así se detuvieron.

-Ya!! Poncho suéltalo, Sergio por favor, para ya! – gritó Camila, colgando su celular, angustiada

-yo no lo suelto, hasta que lo vea en el suelo – le respondió Sergio, o como se llame ese tipo

-pues primero caes vos, hijo de puta – respondió el hermano de ella

Cristina, se metió al igual que Camila, Maite vino a mí y la abrasé ofreciéndole algo de tranquilidad, el tipo ese por soltar a Camila de su brazo, la jaló empujándola contra la punta del sofá. Lo que causó que cayera con fuerza y se golpeara en la espalda y la cabeza. Corrí a ella, y la ayudé a detenerse.

-Cristina salte de ahí – exigí preocupada – llamemos a la policía, ya!

-ya, ya vienen, ya llamé. Poncho yaaaaaaaaaaa! – por primera vez, la vi fuera de si, ella siempre mantenía la calma, pero no… Sergio estaba golpeando fuertemente a poncho, se miraron y mientras Sergio le dio un puño en todo su abdomen, que hasta yo, sentí dolor… poncho lo escupió en su rostro

-YA ME JODISTE MARICON! – con su mano derecha formó un puño… que dio a parar en toda la sien de poncho, y no bastándole con esto, lo empujó contra la puerta de la habitación principal, uniendo la cabeza de la que ahora, era su victima contra la madera, continuamente. Gritamos, Camila se levantó empujándolo con fuerza, Cristina la ayudó, Poncho cayó al suelo, Sergio cogió a Camila del rostro, obligándola a mirarlo… mientras que con una sola mano, empujó a Cristina, yo quedé en shock, sin saber que hacer… la puerta se abrió y antes de que el tipo pudiera irse, la policía llegó junto con el portero de el edificio, tomaron al hombre con fuerza obligándolo a soltar a Camila.

Llamé a Sami, y su celular seguía apagado

Dejé a Maite en casa y salimos a llevar a poncho al hospital

Últimamente, todo estaba saliendo mal.

L

Camila

-¿Cómo te sientes?

-bien, eso no fue nada. – respiré tranquila – pero esto no se queda así – retiro lo que dije

-Poncho por favor ya no mas ¿Cuándo se va acabar esto? no quiero saber mas de el

-por eso!

Esa conversación se alargó por 8 minutos más, Poncho daba su punto de vista y sinceramente. Yo no podía comprenderlo.

Salí de la habitación, según el doctor, solo fue un golpe, pero nada grave para que se quedara.

Ya eran las 4:30 de la tarde. me entristeció ver el celular y saber que no había nada de Sami… ayer, en la noche la llamé uno hora después en que salió de mi casa ¡no había llegado! su madre me estuvo llamando por tres horas mas

Hasta que al fin, me anunciaron que había llegado… descansé, pero la pregunta de donde se había metido, frecuentaba mi mente, continuamente. Ayer me dejó claro una cosa ¡no estaba lista para tener una relación!

La llamé, nunca contestó… ahora, sólo quedaba esperar a que le dieran de alta.

-¿Cómo sigue?

-ya está mejor – las miré a ambas con agradecimiento, jamás hubiera imaginado que serían ellas, la que me ayudarían, observé su comportamiento… Cristina era más simple que Luisa, le importaba poco que pensara la gente de si la veían tomada de la mano con la que ahora, era su novia. Pero Luisa, era más discreta, al parecer eso no le disgustaba pero tampoco quería hacer de su relación un continuo tema de toda persona que las viera. – agradezco todo lo que hicieran, a lo mejor en este momento, Poncho estuviera mucho peor y yo

-ya, tranquila – expresó Luisa acercándose a mi –¿el es tu ex novio?

-mas bien mi ex prometido

Tomamos el ascensor y bajamos a la cafetería, yo pedí un botellón de agua, Luisa se conformó con un refresco y Cristina un café.

-¿ibas a casarte con él?

-si – suspiré recordando en que momento la relación que tuvimos alguna vez, donde para mi; era la mejor, se acabó… así como así – yo, perdí el bebé que estaba esperando y ese fue el motivo que acabó con lo que teníamos.

-¿Por qué te busca? ¿todavía mantienen contacto?

-Luisa, deja de preguntar eso – la interrumpió Cristina

-Si, perdón.

-no, tranquilas. ¿si todavía estamos en contacto? no. pero el todavía me busca, no acepta que ya acabó, cuando irónicamente, fue el quien terminó con todo.

-Dios! ¿esto es un Karma? ¿qué le pasa a los hombres?! – cuestionó Cristina, mientras bebía de su café

-y ¿Sami?

-no responde, la he llamado a la casa y al celular y no sé nada de ella.

-debe estar durmiendo, hasta donde sé, anoche llegó tarde a casa.

-¿Cómo? ustedes no se quedaron…. – Luisa miró a Cristina, quien con un carraspeo de garganta, trató de hacerla entrar en razón – ya, lo siento, lo siento

-no te preocupes, puedes preguntar lo que quieras, y no, Sami se quedó una hora mas o menos y luego se fue.

-mira, no se ella por qué dijo eso ayer, pero créeme que no es así, es sólo que Sami es algo extraña ¿Sabes? y en ocasiones es muy difícil y hasta casi imposible de entender lo que dice o lo que hace.

Cristina detalló a su novia, como pensando lo mismo que pensaba yo "que bien la conoces" si, era algo extraño eso, Luisa se dio cuenta y

-ya, o sea no es un secreto de que estuvimos juntas por un tiempo, y Sami se mostró tal y como es, por eso es que lo digo. – estiró su mano acercando a su novia a sus labios.



-sólo falta esperar a que el doctor termine de hablar con él, y ya pueden irse – informó una enferma sonriente, quien recibió los papeles que yo, acababa de firmar.

-Camila, ¿Qué vamos hacer hoy? – su rostro se veía preocupado, y mi mente viajó al pasado, justo el día de ayer cuando su ex novio la llamó

-ohh no recordaba que hoy te vez con él, por Dios ¿Cómo se me pudo pasar?

No habíamos planeado nada, como tampoco habíamos informado a las autoridades

-esperemos a que salga tu hermano y vamos a tu casa a ver que hacemos

-de acuerdo.

Pasaron cerca de 10 minutos, cuando Poncho salió, su ropa estaba manchada por sangre, y en su cabeza se encontraba un parche cubriendo el golpe. Con ayuda de un enfermero, lo sacamos del hospital y justo antes de subirnos en el auto de Luisa, apareció sami, en un carro y con un hombre que jamás había visto.

Sami, Sami… te estás metiendo en serios problemas conmigo<<

Ella se bajó, sus ojos formaron una mirada tierna… por primera vez, me sentía realmente molesta con ella. Hizo una pequeña discusión "amistosa" con poncho, mientras que Luisa y Cristina le formulaban preguntas de las que yo quería saber respuesta.

Hasta que se bajó un muchacho, casi de la misma estatura que ella, del auto en el que Sami llegó. Se despidió de ella con familiaridad, y se fue.

Nos montamos en el auto, Sami, Poncho y yo, nos ubicamos en los puestos traseros de carro. Recosté mi cabeza sobre el asiento, dando un largo respiro, deseaba de todo corazón que Sergio nunca más volviera a mi vida.

Voy a ponerle una demanda, no puedo dejar que las cosas lleguen a ser peores<<

Luisa puso algo de música, nadie habló en el camino prácticamente, Sami estaba dormida… Poncho me dio su mano y me abrazó… ahora en lo único que debía pensar era en que íbamos hacer esta noche con todo ese asunto de Pablo.


-ya está! al fin llegamos – manifestó mi hermano desesperado por salir del carro, el despertó a Sami, le dio bastante dificultad abrir sus ojos y reaccionar.

anoche tuvo que tomar para estar así<<

cuando llegamos al apartamento, Maite nos tenía preparado algo de comer, llamó poderosamente mi atención, el hecho de que se llevara también con Sami… quien inmediatamente desde que llegó se recostó en el sillón, sentía que mi paciencia estaba acabándose, tenia muchas preguntas y Sami no quería responde ninguna.

-ok, esto es lo que pasa. Hoy me veo con Pablo, y obligadamente me toca verme con él.

Sami reaccionó, recobrando su compostura, su rostro formaba gestos de estar sintiendo malestar, cruzó sus piernas, llevaba los mismos zapatos que ayer.

-no Luisa, no te vas a ver con él – y casi sin ella misma darse cuenta, su voz estaba ronca – llamemos a la policía, a los mismos agentes con los que ayer pusimos la demanda, ellos deben hacer algo.

-si, pero no voy arriesgarme Sami, si no es Maite es m mamá… así que mientras pueda, voy hacer lo que el quiera, obviamente que las autoridades estén al tanto de todo

-¿A que horas?

-en dos horas

Miro su celular – a las 8?! esperen

Se levanto y llamó a los agentes… pero parecía no entender nada, por lo que Cristina terminó hablando con ellos.

Poncho estaba poniéndose al tanto de la situación con Luisa, y Sami se acercó, acomodándose a mi lado.

-¿Estás enojada conmigo?

-no – mentí descaradamente

-no es cierto, estás enojada conmigo – afirmó

-si lo sabes ¿entonces para qué lo preguntas?

Tomó mis manos, me encantaba cuando hacia eso… unió su mano con la mía, mientras que con la otra, entrelazaba sus dedos con los míos

-Perdóname por no haber aparecido hoy, lo que pasa es que curiosamente, hoy fui capaz de dormir por mucho tiempo – sonrió

mala, malísima para mentir<<

-claro, y mas si entras de madrugada ¿no?

-¿no me digas que mi mamá te llamó?

-no, yo la llamé para saber si habías llegado bien, y tú no habías aparecido, sólo después de 3 horas mas.

Se disponía a contestarme cuando Cristina colgó.

-bien, el me dio una idea, pensándolo bien, es muy acertada, el problema es que es muy arriesgada

-¿Qué dijo? –

-no pues que no le digas que no te vas a ver con él, porque las cosas se pueden poner peor. Yo les dije la hora y el lugar donde se van a ver, el me dijo que estarían pendientes de todo lo que pasara, y que trataras de consultar que es lo que quiere. Y que no te limites a negar nada, por lo que necesitan más pruebas, porque Maite no resultó violada, y no hay pruebas que afirmen las amenazas que está haciendo.

-eso es cierto – mencionó Poncho – pero hay que ser sinceros, por lo que me cuentas – se refirió a Luisa – el ego del hombre está herido ¿pero el de que hombre no va a estar herido si te dejan por una mujer? pero eso no es razón para que haga eso, el tipo está bien obsesionado contigo, y por lo que me dices que te pidió cuando te llamó, lo mas seguro es que lo que quiera es acostarse contigo.

Luisa no se esperaba eso, ni Cristina, ni yo

-totalmente de acuerdo – habló Sami – lo que debemos hacer, ya que no puedes negarte a lo que está pidiendo es que le des a entender que vas a responderle con lo que el quiere

-¿Cómo así?– preguntó la victima de todo ese problema

-Luisa, llévalo a una discoteca, baila con él, trata de seducirlo, un hombre es muy débil, cuando piensa con el de abajo en vez de pensar con la cabeza – Poncho la miró sorprendido, como verificando que lo que ella decía era cierto – así cuando él te quiera pedir algo mas, le dejas la cosas claras y primero te das cuenta que es lo que en realidad quiere, dile que accediste a verte con el, a tener una salida amistosa y a tratar de solucionar sus problemas, háblale calmadamente pero que el entienda que ya no puede joderte mas, ni a ti ni a tu familia

-eso lo dices por que se ve fácil Sami, pero Pablo no es fácil de convencer y menos como ésta

-lo se, pero por eso vas a estar bien con el toda la noche. y si el se pone violento o algo, pues para eso están en una discoteca, allá no va a poder obligarte a hacer nada, y que los agentes estén haciendo un seguimiento, así si en caso positivo de que él tome las cosas a lo bien que es lo menos probable, que entablen algún trato con el, de que no pueda acercarse a ti o alguna de esa mierda – parecía estar haciendo un gran esfuerzo por hablar – y si toma la violencia o te sale con algún acto que sea alarmante, que de una caigan y ahí ellos mismos ven, que es cierto, y tienen las pruebas, mas con lo de Maite, que se acostó con una niña, más que contratamos a un abogado que lo joda bastante, y ya! ahí queda o con una multa bien grande que lo deje sin un puto peso, o felizmente que lo metan un tiempo en la cárcel, que eso es lo que se merece.

-pero todas tenemos que estar allí –

-si, pero obviamente alejadas de ellos dos, si Pablo nos ve, es el, quien nos jode.

-si – volvió hablar Poncho – mejor organicémonos y nos preparamos – parecía preocupado, y estar hablando en serio, lo cual era algo verdaderamente extraño.

-¿organicémonos, preparamos? no señor – dije levantándome – tú no puedes salir – y cuando trató de hablar, me adelanté – y no pongas peros, poncho que sabes que hablo enserio. Tú te quedas con Maite que nosotras los estamos llamando.

-no, pero ¿Todas mujeres? y ¿si pasa algo? está mas que visto, por que hoy lo comprobamos que así sean 5 mujeres con un hombre, no se puede – expresó acertadamente Luisa

-si, yo llamo a Oscar – Sami volvió a levantarse, pero su equilibrio le falló y calló al sofá

Todas nos fuimos tras ella, abrió sus ojos y tocó su cabeza

-¡Samantha!¿ ayer tomaste?

-No Cris – fui a la cocina a prepararle algo, y desde allí vi, como me miraba – es sólo que… --calló, ya no tenía que decir nada… eso no era resaca… las pastillas que se tomaba, eran las únicas que la volvían así.

-Púdrete! – le gritó Luisa – ¿a vos que carajos te está pasando? ¿Volviste a tomar eso Sami? ¡¡Qué estás pensando por Dios!! ¿Es que no vez todo lo que pasó por eso?

-si, yo se, sino que anoche no podía dormir bien y me tomé una, pero ya

-¿donde tenes eso? – preguntó Cristina quien le hablaba en el mismo tono que Luisa - ¿para que diablos guardas esa droga todavía?

-argh! ya déjenme quieta que me duele la cabeza ¿Si? mañana que no sienta hasta me pegan si quieren, pero déjenme quieta hoy! – se levantó yéndose para la habitación

-jamás en mi vida he conocido una persona tan llevada de su parecer como ella! Cris, vamos a casa me organizo

-espera Luisa, Cristina que pase por Sami y yo tipo 7:30, de aquí allá se nos van 15 minutos si mucho, y tu sales a tiempo para llegar puntualmente.

-si – asintió ofuscada, al parecer el hecho de que Sami, hubiera tomado eso, nos molestó a las tres por igual – pero ¿Sami si está en condición de ir?

-si, le voy a dar esto y que duerma una horita mas y ya se pone bien, no creo que acepte quedarse

-bien, entonces vámonos ya que se nos hace tarde – ambas se despidieron, Maite tuvo una escena de ternura en exceso con su hermana, cuando se abrazaron para despedirse le echó la bendición unas 10 veces, eso fue lindo, y después evitando llorar aunque no lo logró, le dijo cuanto la amaba y lo importante que era para su vida. Luisa también comenzó a lagrimear, obligando a su voz a no demostrar que sentía miedo, le habló con seguridad.

-te amo chiquita, y todo va a estar bien, confía en mí, y perdóname porque por mi culpa, está pasando todo esto. – nos miró, sonriendo tristemente – no llores que eso te hace envejecer pronto

Maite sonrió, tranquilizándose ingenuamente, esta noche seria muy importante, Pablo estaba realmente metido en una obsesión intensa con Luisa, y una persona así es más peligrosa que el peor asesino… nunca reaccionan, nunca saben hasta que limite pueden llegar, sólo actúan según sus instintos.

La nueva pareja, salió de mi apartamento… Maite quiso acostarse un rato, y Poncho fue con ella.

Yo, me quedé un momento en el balcón, donde se veían algunos niños jugando en el parque, me abrasé

que lindo seria, donde estuvieras aquí<<

pensé en mi bebé… jamás entré a un fondo depresivo tan fuerte como cuando lo perdí…tantas ilusiones, tantos deseos, la ropa comprada, su habitación decorada, lista para cuando naciera… mi felicidad!... todo… todo se perdió… todo por culpa de él.. o quizás de mí por aguantarlo… quizás el destino no lo quiso

-Cami – su voz me trasladó de nuevo a mi casa, Sami me tenia triste… ayer se comportó muy diferente, aún sabiendo que estábamos bien… volteé, apenas dándome cuenta de que varias lagrimas escaparon de mis ojos, allí estaba ella, con sus manos metidas en los bolsillos de su jean, encogida de hombros, sus labios de nuevo estaban extrañamente rojos… --¿por qué lloras?

-hoy es un día triste ¿Sabes? – miré el cielo, volvía a tornarse oscuro, queriendo llover

-¿soy yo quien te tiene así?

-es todo

No tenia zapatos, tan solo se veían sus tobilleras blancas… fui subiendo mi mirada despacio… desde sus pies… pasando por sus rodillas… sus piernas…sus muslos, el color de su pantalón era negro, con algunos parches de color blanco… al subir mi vista por su pantalón, me di cuenta de que tenia la cremallera abajo, el botón estaba perfectamente en su lugar… al lado de este, estaban sus manos abrigadas en los bolsillos… en todo su torso tenia una camisa de color azul, con una estructura poco común, pero se veía bien… pasé mi vista por sus brazos, por sus hombros… por su pecho… miré su cuello… su mentón… y finalmente sus labios

como me gustan<<

Me di cuenta, de que ya no había distancia entre las dos, ella esperaba a que yo le dijera algo y mi atención estaba fija en sus labios, a lo mejor recreando una hipótesis del por qué son tan rojos sin llevar lápiz labial, sin estar húmedos, y sin haber besado

Sus manos acariciaron mi rostro, a lo mejor con el objetivo de secar mes mejillas, mojadas por las lágrimas.

Sentí su aroma… Ella era un poco más baja de estatura que yo, por lo que se tuvo que empinar un poco y sentí sus labios en mi orejita

Cerré los ojos

Suspiró

Bajó lentamente por mi cuello… mojé mi labio inferior, comenzó a besarme… de una forma como jamás nadie lo había hecho… manejaba una lentitud que simplemente estaba haciéndome reaccionar al contacto de su cercanía

-siento algo mas por ti

Susurró despacio… con su voz entre-cortada… mis manos se fueron refugiando sobre su espalda, bajo su blusa

-que un simple querer

Sonreí en mi interior… no era un secreto saber que yo, me había enamorado más rápido… y que ella… sólo iba despacio… pero sin pensarlo, sin esperarlo…. lo dijo, no con las palabras que atinamos a usar comúnmente…pero lo dijo

La humedad de su lengua, causó que mi cuerpo reaccionara casi sin anunciármelo, un pequeño gemido, salió de mis labios… subí mis manos mas por su espalda… preparada para besarla

Y nos fundimos en el mejor beso, que nos habíamos dado… la besé con todo el amor que cabía dentro de mi… con toda la pasión que lograba despertar en mi cuerpo… con toda la ternura en que me convertía cuando la sentía así… respondió maravillosamente… clavando sus labios sobre los míos… su respiración aumentaba con cada beso…cada caricia…cada suspiro…con cada cercanía que íbamos teniendo

Sus piernas se fueron entrelazando con la mías… estrechándome más contra la pared a la que yo, estaba sujeta… su lengua introduciéndose tímidamente en mis labios, propinó que un inmenso suspiro le diera el sí para que hiciera lo que quisiera… inició un leve movimiento circular, segundos después… buscó la mía, adueñándose de cada rincón de mi boca, esta situación estaba saliéndose de mis manos, ya no sabia nada de mi… ni siquiera el hecho de que no estábamos en mi habitación, estaba causándome afán por terminar… sentí sus manos justo en mi abdomen… recorriendo mi cintura… y terminando en mi cadera… imitó mis movimientos, palpando con extremada ternura y delicadeza mi espalda… con la misma lentitud en que las subió… las bajó… haciendo suave presión, acercándome mas a su cuerpo… pero al mismo tiempo con su pierna, acabada de ubicarse justo en medio de mi entre-pierna causando la misma presión, logró chocar y desubicar mi cuerpo, moviéndolo hacia adelante y hacia atrás… sentir eso, fue el aviso de que Sami estaba causando que mis hormonas, que hasta el momento habían sido obedientes con las ordenes exigidas por mi razón, se olvidaran por completo de quien había llevado las riendas hasta el momento… ahora comenzaban a despertarse (de que hablo? sabemos que desde que ella se acercó y me miró de ese modo, se despertaron) muy velozmente… hasta el punto en que llegaba a imaginarme que no podría al menos tratar de "fingir" que lo que estábamos haciendo me gustaba, pero podía "controlarlo" perfectamente.

( Esperamos no nos maten por haberla dejado hasta ahí =), gracias a tod@s ustedes, por seguirnos con esta historia. Les deseamos un muy lindo año 2011, y de nuevo ¡¡mil gracias por todo!!)