Estando muy cerca de la muerte (12)

Esperamos, les Guste esta parte. =)

Estando Muy cerca de la muerte (12)

Me encontraba ahí parada… viéndola de arriba hacia abajo… ese conjunto resaltaba maravillosamente su color de piel…. " Vamos Sami, No pienses en eso ahora "… seria perfecto, donde fuera yo, quien estuviera sin camisa en ese momento…. ¿Pero quien carajos es este tipito? la sangre subía lentamente a mi cabeza. " Para… Ve despacio… ella no es tu novia, por lo que no puedes hacerle un reclamo"

--Si, Yo ¡Sami! que pena llegar en tal mal momento, es solo que no pensé qué

--A ver, A ver, señoorita – su voz, sonaba algo retumbada, como… diferente, observé sus ojos, y andaban algo perdidos, y en su rostro, se adornaba una sonrisita juguetona que delataba su embriagues – antes de qué comiences a pensar, cosas que no son… Te aclaro que… él es Alfonso " Vale, Alfonso, Santiago, Rafael, francisco, armando… quien sea ¿A mi que me importa como se llama? "

--Aja – lo miré a él y alcé mi rostro, como dándole un breve saludo

--Un momento Camila ¿Por qué le hablas como si le estuvieras dando explicaciones a un novio?

--Resulta – esto, me había pasado una vez… y no me gustó sentir, lo que sentí… esa vez llegué tarde, esta vez… no iba a dejar que ella, se acosara con él... No, no, no… me entré en el apartamento y cogí a Camila de mi mano – que ella es mi novia ¿No lo sabias? – sonreí

Camila, apretó mi mano y lo miró a él haciéndole un gesto de "Lo siento"

--¿Qué? – me molestaba verla así, tratando de arreglar lo que yo había dicho, no sabia bien que estaba haciendo… sólo me impulsé a tomarla del rostro y la besé… en un beso suave y sutil, corto… pero logré disfrutarlo, no me correspondió, pero tampoco quiso alejarse

--Camila! – Dijo él - ¿me explicas que pasa?

Comenzó a moverse de un lado para otro en el apartamento… Camila trataba de hablar pero nada le salía… esta situación comenzaba a irritarme

--Ya lo sabes, soy sami, su novia… ¿y tu quien eres?

--Tu cuñado – expresó ella con una sonrisa oculta que logré verle… ahora, estábamos metidas en problemas " su hermano? pff…"

--¿Por qué no lo dijiste? – susurré despacio, para que el, no pudiera escucharlo

--por que no me dejaste

Me quedé en silencio, había dañado las cosas por ponerme a pensar equivocadamente, y lo peor, era que no sabía como arreglarlas.

--Poncho, de esto era de lo que te quería hablar en el bar… en serio, me apena que te des cuenta de este modo, pero ya lo sabes – suspiró fuertemente, buscando palabras adecuadas que no lograba encontrar – háblame ¿quieres?

El volteó y nos miró a las dos, cogió a Camila con fuerza y la abrasó… por mucho tiempo - ¿Segura de que eso es lo que quieres?

--no es esto lo que quiero, la quiero a ella

Sonreí… con esto me quedaba claro, que ella no era igual a las mujeres que había conocido

¿Por qué te demoraste tanto en llegar a mi vida?

--pensaste que era su amante o qué? – me habló graciosamente, burlándose de mi Estupida actitud

--Umm

--jajá Mucho gusto, ahora si – se acerca mi y tiende su mano – soy Alfonso, hermano menor de Camila… y te voy a pedir un favor sami ¿Si?

--el que quieras

--no le hagas daño por que te la vez conmigo, así seas una mujer

Esta ultima frase, logró que lo viera diferente… solté su mano y comenzó a reírse

--Jajajaja es broma!! Sólo no le hagas daño

--causas miedo ¿sabias? - y mas se rió

--Ya Va Sami, solo bromeaba… cuéntame una cosita ¿Cuántos años tienes?

--19

--Upa!! Cami pero te ibas sintiendo viejita o qué? 19? si esa edad tengo yo!! – anunció, Camila trataba de callarlo, pero el… estaba mas tomado que ella… me causa gracia eso… ¿ Por qué siempre que alguien está ebrio, sonríe con tanta frecuencia? ¿Será que por eso existen alcohólicos? ¿Es el único medio por el encuentran la felicidad?

--No poncho, no me iba sintiendo Viejita, lo que pasa es que sami quería probar con algo más interesante que niñas de su edad ¿verdad?

Una sonrisita cómplice salió de sus labios, logrando hacerme sonreír

Hablamos con el… al parecer al principio si le sorprendió eso pero no tardó mucho en comprenderlo y aceptarlo.

Me quedé a dormir en su casa, ya era muy tarde, no quiso enviarme en taxi y no me tocó más que llamar a mi mamá y decirle que me iba a quedar.

Dejé que ellos se acomodaran, Camila estaba tomada… a lo mejor, no se acordaba de que todavía solo estaba en su ropa interior, a su hermano lo ubicó en la habitación de huéspedes, a mi

--¿Duermes conmigo o te da miedo?

-j-jajaja creo que a la que le da miedo, es a ti

Sonrió, sus labios jugueteaban con algún mechón que rebeldemente, se desviaba de camino… sus ojos me miraban con expectativa… se acercó a mi, y me tomó de mis manos, jalándome hacia ella

--¿Eres Mi Novia?

Era unos centímetros más alta que yo… subí mis manos a su carita, y con la mayor sutilidad que cabía en mí ser, contemplé la suavidad de su piel.

--Estas ebria Camila, mañana hablamos bien de eso

--Lo dijiste por que te dieron celos verdad? – yo, desviaba mi mirada para negar calladamente lo que ella afirmaba, pero sus ojos buscaban los míos, y no se cansaban hasta encontrarlos – dímelo sami

Miré sus labios

Así

Perfectos, de un tamaño normal, ni muy pequeños, tampoco eran grandes… carnosos y lo que mas me gustaba, era que su color, era un rojo intenso natural.

En un inexplicable impulso, volví a besarla

Cerré mis ojos, y volví a acariciar su rostro, sus manos pasaron por mi cuello… mojé sus labios con los míos, los acaricié con cada parte de mi… eran tenues, tan suaves… esta mujer hoy me hizo vivir sentimientos que no me gustan… no me gusta sentir celos, eso… es… tan

--deja de pensar sami

--¿Cómo sabes que estoy pensando? – pregunté todavía, entre besos

--que no se te olvide que soy psicóloga y logro conocer cada parte, actitud y posiblemente pensamiento de las personas

Caminamos por la habitación, su lengua abrió camino por entre mis labios… la recibí Feliz, y contemplé su sabor… por un instante lo suficientemente largo.

Sin pensarlo, al darme cuenta, mis manos ya no estaban en su rostro, se encontraban en su cadera… las subí por su espalda delineando su figura con las yemas de mis dedos. Su cuerpo reaccionaba perfectamente al contacto con mis caricias, transmitía algo tan especial… ella… tiene algo… algo que no se como llamarlo, algo que no se que es, pero tiene algo que me atrae a su ser, a su esencia de persona.

--Te

Y la besé

Jugueteé con su cabello, por largos momentos… pareciera que el tiempo no pasara

<>

Sentía unas ganas de ir al baño… Impresionantes… al parecer, todo el rato que me quedé con su vecina hablando, mas el tiempo que me quedé esperando para que llegáramos a la habitación, me estaba cobrado su factura… hice fuerza en mis piernas tratando de soportar

--Espérame, si?

--¡¡Sami!!

Un puchero de niña consentida se dibujó en su rostro, se veía hermosa así… sus ojitos seguían igual de perdidos ¿Cuanto habrá tomado hoy?

Entré al baño de la habitación, demasiado grande para solo una persona. me demoré 30 segundos… aseé mis manos, me miré en el espejo, mis labios delataban el beso tan largo que acaba de robarle… esta sonrisa no quería pasarse, me sentía cómoda con ella… mis pensamientos viajaron al mas allá pensando en un futuro a su lado… un noviazgo diferente a los anteriores, sin tantas niñerías, algo mas templado y serio… me gustaba la idea, me gustaba pensar en salir y tomarla de la mano… y que la gente en la calle mientras nos viera caminar se preguntara ¿ Qué hace una mujer como ella, andando con una niña como Yo ? ohh!! Si... Me gustaba eso… me gustaba pensar en que en las noches, me entretenía en mi computador haciendo cualquier cosa, y que ella me llamara con su voz consentida y me preguntara por que no la había llamado todavía… que se dijera ella misma en voz alta, así con el propósito de que yo la escuchara si en realidad ya no me hacia falta. Pensé en un fin de semana, salir fuera de la ciudad a una cabaña, donde solo estuviéramos ella y yo, donde la naturaleza y el aire libre fueran nuestros únicos acompañantes… que en la noche saliéramos a comer, lo que ella quisiera, que fuéramos a un parque a comer algún helado, tomarla de su mano y decirle que su compañía me hacia bien… Tantas cosas

<>

Reacciono volviendo bruscamente a la realidad

<> abro la puerta, esperándola ver en la cama

Pero me encuentro con su silueta frágil y semi-desnuda recostada en un pequeño asiento, se había quedado dormida.

--Cami, Ven yo te acuesto en la cama, ayúdame – traté de alzarla y de este modo despertarla, no me costó mucho, se reincorporó y su manó buscó la mía

--¿te acuestas conmigo?

--Si

La llevé a la cama, quité las cobijas para que se acostara y de nuevo, acomodarlas sobre su cuerpo… estaba de medio lado mirándome, cada vez que me miraba de esa forma, hacia que yo me perdiera en sus ojos, tratando de descubrir por que apareció en mi vida de esa manera… ¿ Qué hubiera pasado si Camila no se hubiera parecido en mi vida?

Sonreí al mirarla, me junté a ella, y la besé en su frente – Te quiero ¿Lo sabias?

Sus ojitos, ya estaban cerrados… Traté de moverme para al menos quitarme la chaqueta y se levantó de nuevo

--Sami, No me dejes sola ¿Si?

--shhhh estoy aquí – sin encontrar una explicación medianamente concreta, dos lagrimas salieron de sus ojos - ¡no llores!

--siempre me dejas – susurró tristemente

--ei, Cami ¿Por qué dices eso?

-- es verdaddd, Tú… --el silencio se adueñó por un momento – tú juegas a ser la niña diferente de la historia pero… me tratas igual que a una persona que apenas conocieras

--no es cierto

--Sami, Yo a ti no te quiero ¿Es que no te das cuenta?

Sus ojos cada vez, se iban cerrando mas, y su voz, se escuchaba menos

---no entiendo ¿Qué?

--que te…a…m...o

--Camila, repítelo – la moví delicadamente - ¿Qué dijiste?

Y con una pequeña sonrisita, victima de los malditos tragos que se había tomado, se despidió… quedó dormida… y ya nada haría levantarla.

Me paré de la cama, y abrí un poco la ventana, hacia una noche serena… el cielo estaba estrellado, y la luna apenas se iba ocultando bajo las grandes nubes negras que comenzaban a formarse… las luces hacían iluminar las calles del condominio perfectamente. Pensé en lo que me dijo, aunque no alcancé a escucharle lo ultimo… lloró

<< Tú juegas a ser la niña diferente de la historia pero, me tratas igual que a una persona que apenas conocieras>>

<>

de pronto, sentí frio… se había descobijado, me hice a un lado de su cuerpo… estaba boca-abajo, admiré su espalda… con cuidado, desabroché su sostén y dejé su espalda libre… besé su cabello, y toda su columna vertebral… suspiré al sentir su aroma… que bien olía eso… con mis manos, contemplé su cuerpo… sólo de su cabeza a su cadera… después, solo le hice pequeños masajitos… me quité mi blusa, y mi jean… quedando similarmente a como se encontraba ella.

Me cansé de besar su cabello… de acariciar su espalda, de rosar sus brazos, de entrelazar sus dedos con los míos… hasta que me dormí… sentía miedo… ¿por qué? no lo sabia… sólo sentía miedo… sentía como si esto fuera lo ultimo que estuviera viviendo ¿Por qué? no lo se



Capitulo lV

Cristina

Durmió conmigo toda la noche… las dos veces que había amanecido con ella, era por que anteriormente habíamos tenido una escena de pasión y sexo, ahora era diferente.

Duerme como si no lo hubiera hecho en mucho tiempo, ambas, faltamos a la universidad. Sentí un pequeño ruido y fui en busca de Maite

Estaba en la sala comiéndose un pastel, todavía tenía esa esencia de niña ¿Cómo pudo hacerle eso Pablo?

--¿Cómo amaneces

?

--Bien – trató de sonreír – algo mejor que ayer

--ah bueno, eso me pone feliz ¿quieres desayunar? – me dirigí a la cocina esperando su respuesta

--oye ¿puedo preguntarte algo?

--lo que quieras

--¿Por qué nos estas ayudando? ó bueno ¿Por qué ayudas a Luisa? – bajó su rostro

--No, No… a las dos, tu me caes bien! – Hice que sonriera – y ¿por qué? no lo se… no me gustan las injusticias

--Puedes decirme algo y te juro que yo no le digo a Luisa que tú me contaste

--aja, que es?

--a Luisa le gustas?

Esa pregunta me dejó en blanco ¿De donde sacaba eso? Luisa y yo no estábamos dando el mínimo afecto de tener algo ¿o si?

--rum, rum – hice un pequeño malestar en mi garganta – que pregunta es esa Maite?

--mira, he aprendido mucho de mi madre así no lo creas, y con esto… he aprendido a observar bien a las personas

-Si

-y ustedes dos, no se miran como si fueran amigas

Reí ¿Ahora que le decía? para mentir… no soy muy buena

--¿Interrumpo?

Y apareció la dueña de la conversación

--no, solo hablamos de que quería desayunar ¿o no cris? – dijo ella, mirándome de una manera cómplice

--oh si, eso ¿Cómo dormiste?

--súper bien, me gusta tu cama – sonrió, es frase podía "malinterpretarse"

Hoy nos dan los resultados de tus exámenes Maite, ¿Estas preparada?

--si, pero ¿Apenas yo si sea madre de verdad? Luisa, apenas estoy en 8vo Grado ¿Puedes decirme como voy a llegar al colegio con mi barriga así gigante?

El orden, había desaparecido, Maite hablaba con desesperación y era totalmente entendible… cualquiera se pondría así… si yo, que estudio y tengo un buen presupuesto para llevar mi vida cómodamente, no me imagino embarazada ahora esta niña

--no nena, todo va salir bien, créeme ¿Si?

Luisa, se fue a sentar en el sofá principal de la sala, llamó a Maite y o me quedé preparando el desayuno

Podía escuchar claramente de que estaban hablando, pero eso no es lo que quería

Al final, preparé algo rápido y lo suficiente para que las tres quedáramos satisfechas, nos organizamos preparadas para salir al hospital y ver los resultados.

Subimos al ascensor, después de salir del apartamento, bajamos directo al parqueadero y optamos por ir en el carro de Luisa

--Listas? – dije, yo iba a manejar, Luisa estaba a mi lado y Maite en los asientos de atrás

Dispuesta arrancar, un golpe fuerte en el vidrio de la puerta donde iba Maite, causó gran conmoción en las tres—

Miré hacia atrás y allí estaba Pablo, parecía loco… golpeaba con fuerza el vidrio, queriendo quebrarlo, Maite, comenzó a Gritar descontrolada, y Luisa trataba de recobrar fuerzas para brindarle a su hermana, pero aunque no lo demostraba, estaba peor que ella

--Perra! Te dije que no dijeras nada!! Vas a pagarlo ¡¡Sal de ahí carajo!! – gritó a la niña

Yo, sin saber bien que era lo que estaba a punto de hacer, abrí la puerta, Luisa tomó mi mano

--llama a Samantha y dile que nos espere afuera del hospital en 30 Minutos

---cristina no salgas – sus lagrimas, sus llantos, su miedo; aligeraba mas mi descontrol

--¡QUE LA LLAMES!

Le dije en tono fuerte, no quería gritarle pero en ese momento, era de la única manera que podía entenderme

-¿Qué te pasa idiota?

--vaya! pero si es la otra lesbiana! ja, ja, ja ¿Cómo estas putita? – su manó derecha tocó mi mentón

--Das asco Cretino – grité, mirándolo con fastidio

--Lárgate que el cuento no es contigo

--si, Gracias a Dios! – Suspiré – o te vas o llamo a la policía

--llama a quien te de, la puta gana… pero MAITE se va conmigo

--estas loco

Me empujó violentamente, haciéndome caer, Luisa, había llamado al portero y cuando pablo vio que se acercaba, salió corriendo.

Estábamos metidas en problemas graves, por lo visto, a el le importaba poco si la policía sabia o no. Maite estaba como loca, su llanto se convertía en un fuerte grito de desesperación… Luisa callaba, haciéndose la fuerte... dolía verla así

--shh ya pasó, ya pasó linda, Vamos a ir al hospital, luego vamos a la policía y después vemos que hacemos ¿Está bien?

--el me dijo, me dijo que si yo decía algo me iba a matar – y ma lloraba

--no, el solo dijo eso por asustarte, ¿no ves que estas con nosotras?

A mi también me daba miedo --¿llamaste a Sami?

--Si, ya va para allá – ni siquiera me miró, su mirada estaba perdida en el mas allá

Manejé hasta llegar al hospital, el día había comenzado fatal… sólo esperaba que no empeorara.

Cuando llegamos, me recibió nos recibió mi amigo y nos llevó a su consultorio, después de rectificar algunas muestras y charlar un momento con Maite, nos miró seriamente a las tres.

--el hecho no es de que si estás o no embarazada, vas a poder seguir con lo mismo Maite, te voy a preguntar algo y necesito que me lo respondas con toda tu sinceridad ¿Está bien?

Ella, asintió con su cabeza

--el hombre con el que estuviste ¿te obligó hacerlo o fue por elección tuya también?

La niña miró el techo, quizás buscando una respuesta para ella misma también, Luisa acaricio su espalda, dándole pequeños golpecitos que le dieran aliento

--el me llevó a su casa, se quitó la camisa, me ofreció algo de beber – no había respondido como Samuel lo había querido, Maite recordaba los sucesos, tratando, así; de responderse a ella, misma y de paso a nosotros – después comenzó a tocarme el rostro, me decía que yo le parecía una niña muy linda pero que nadie se tenia que dar cuenta, yo callé pero después me besó rápido, muy rápido, alzó mis manos, me quitó la blusa y con brusquedad hizo lo mismo con mi pantalón

--o sea que te violó? – Volvió a preguntar él

--el a mi me gustaba y al principio quise sus besos pero ya después fue tan rápido que yo sólo le pedí que no fuera brusco

--¡Maite! – Gritó Luisa - ¿tú quisiste también?

La niña bajó el rostro, Pablo no la había violado pero tampoco quedaba a salvo de lo que le esperaba, fuera como fuera Maite a penas comenzaba su adolescencia, y una niña es muy fácil embobarla por Dios!!

--bien – el tomó las manos de Maite dándole apoyo – después de revisar los exámenes, como resultado de la prueba que te hicimos ayer… y de acuerdo con esto tú… No estas embarazada

Supongo que los gritos de la felicidad de la implicada se escucharon por lo menos, en gran parte del hospital… sus saltos atinaban a ser acompañados con un repetitivo "Siiiiiiiiiii"

--Samuel ¿es decir que las pruebas de embarazo eran

--por eso no se puede confiar en ellas, es mejor hacerse un examen seguro y confiado y espero Maite que esto sea una gran lección para tu vida, cuando quieras estar con alguien CUIDATE hay muchos medios para que esto no vuelva a sucederte hasta que lo quieras ¿me entiendes?

--Si Doc, Muchas gracias eh? usted es el mejor


Camila

Me costó mucho abrir mis ojos, parecía que todo girara a mi alrededor, mi cabeza me pedía a gritos una pastilla y mi garganta solo quería algo helado de beber. Hice gestos de malestar, traté de levantarme y no pude, cuando Vi

--¡sami! – dije con sorpresa y en voz baja, no quería despertarla. Estaba hermosa así, es como si… me perdí en su rostro, viendo sus labios… su cuerpo subía y bajaba al compas con el ritmo de su respiración, la cobijé cuando miré que sólo estaba en un pequeño brassier negro… con mi mano toqué mi cabeza << Me acosté con ella y no lo recuerdo? No!! Así no lo quería argh

Bajé un poco mas mi vista y estaba en un pantie negro también, me causó gracia verla así ¿Cuándo iba a imaginarlo? subí mis manos a su cabello y bajé un poco a besar su frente, luego… la choqué con la mía sutilmente, y con mis dedos, dibujé la figura de sus labios sobre ellos.

Por instinto, miré mi cuerpo y estaba sin brassier, mi rostro se tornó sonrojado <<¿Qué Hice?>> con tragos no resulto siendo la mujer que en realidad soy… a penas… hubiera sido grosera, guache, o demasiado mojigata <> bajé de mi cama despacio y me fui a duchar.

cuando salí, ella seguía durmiendo… admiré su cuerpo un momento… en sus brazos, en especial en el derecho, tenia marcas de haberse hecho daño tratando de cortarse sus venas, sus piernas eran fuertes, tonificadas, pero también tenia cicatrices… se volteó de frente y como estaba descobijada miré su abdomen, perfectamente plano, su cintura me gustaba… tan perfecta… me acerqué a ella y miré que un poco mas abajo de sus senos tenia un rayón, como si hubiera sido con una navaja o un cuchillo quizás en forma oblicua. Como si hubiera sido un accidente… amé cada una de sus imperfecciones, errores del pasado que no iban a estropear su presente, su rostro era perfecto, sus labios eran pequeños, su nariz también, tenia rasgos muy parecidos a los de su padre… miré el color de su piel, estaba pálida… Sami no se había alimentado bien por mucho tiempo, no consumía calcio ni vitaminas… sus labios siempre estaban húmedos, así ella no hablara y excesivamente rojos… recuerdo el día que me llamó, cuando sucedió todo con Luisa y Cristina, me dijo que estaba en ese parque natural… cuando la vi… una capota cubría su cabello y parte de su frente, sus ojos estaban como si un vidrio hubiera entrado en ellos, su rostro blanco totalmente y sus labios rojos… parecía un vampiro, alguien tan frágil que necesita amor… su apariencia es tan distinta a como es en realidad, trata de demostrar tener todo bajo control cuando en verdad solo espera a que las cosas pasen para saber que va a ser. Y se ve como una adolescente rebelde que desea llamar la atención y sólo quiere cambiar su alrededor, su madurez impacta… tener tanta cordura en tantas situaciones, y perderla en unas que son tan… sami es distinta… de esas personas que no sabes que esperar, de esas personas que son misteriosas y es eso lo que te atrae, de esas personas que no les gusta demostrar lo que sienten, pero cuando lo hacen se vuelven las mas tiernas del universo

--Camila!! – un susurro de mi hermano, me hizo distraer de mis pensamientos

--me asustaste Poncho ¿Cómo amaneces?

--bien, oye… no la había reparado bien, pero está muy, muy. Muy bien – sonrió maliciosamente

--no comiences ¿Si? vamos afuera para que siga durmiendo

--vamos, déjame verla por mas tiempo…uff Cami, si que estás comiendo bien rico – siguió riendo

--Alfonso Por favor, deja de ser pervertido ¿quieres?

--uuhhh ta bien – se resignó – pero mira que bien elegiste lo tuyo

<>

Lo miré feo y sus carcajadas eran mas frecuentes

--Naahh, no te enojes que sabes que lo hago por joderte, aunque no es broma de que está muy bien, no es falso

--Ya Poncho, enserio

--Va, deja de ser aburrida hermanita

--deja de ser cansón

--ok – me abrazó y nos fuimos a la cocina -¿Qué vamos a desayunar?

--no se, aquí hay cereales y yogurt – sonreí

--jajá ¿Esperamos a tu novia?

--dile sami

--pero no es tu novia?

--si – dije feliz – si lo es

--Cami, enserio – me llamó para que me hiciera a su lado -- ¿Por qué no me habías dicho lo de tus preferencias?

--por que sólo lo descubrí con ella ¿Cómo iba a imaginarme con otra mujer? nunca! y la conocí y

--pero es una niña para ti ¿lo sabes, no?

--¿por qué? ¿Por qué tiene 19 años?

--por que tu ya eres toda una mujer, por que… Cami, es como yo

--¿Y?

--ok, no sigo mas, solo no me imaginaba verte con una mujer, y de mi misma edad jajaja ¿Qué vas a decir en casa?

--no hablemos de eso todavía

Terminé de organizarme, fui a la cocina… llamé a la mamá de sami, le dije que ayer salimos un rato y llegamos tarde por lo que preferí que se quedara en mi casa, comenté que aun dormía y quedó mas tranquila.

Inmediatamente desde que colgué, ella apareció… me gustaba su cabello, no quería obedecerle al ser ordenado como ella lo quería, y el mismo se cuadraba a su manera… --buen día

-Cuñadita!! Je!! ¿Cómo dormiste?

Poncho, era único para hacerme avergonzar

--bien y ¿Qué? ¿Mucho guayabo?

--ah solo un poco

Se acercó a mi, yo tenia una tasa de café en mis manos y se inclinó para darme un beso – buen día hermosa

Uff ¿Cómo no enamorarme de esta mujer por Dios?

Todavía sentía pena… no sabia, o mejor dicho no recordaba como me había comportado anoche con ella… <<¿apenas haya sido grosera, la haya lastimado>> Noo!! <<¿Y si no fui capaz de responderle como ella lo quería>> ay! ¡¡No!!

--¿Por qué esa carita?

Bajé mi rostro

--¿hice algo malo ayer?

Sonrió divertidamente

--no me digas que no te acuerdas de lo que hicimos

Ahora si… <<¿Qué habría hecho ayer?...TRAGAME TIERRA>>

--sami, discúlpame si hice algo que no debía yo

Y escuchamos el sonido de su celular

--espérame un momentito ¿si? – asentí y salió "corriendo" (lo pongo entre comillas por que todavía estaba algo coja por el accidente) a coger su celular

Se quedó un momento allá y yo le preparé los cereales… los llevé a la habitación y se estaba bañando… miré su celular… <<¿Quién la había llamado?>> esperé a que saliera del baño y le ofrecí el desayuno

--tengo que irme ya – dijo apurada

--¿Qué pasó?

--me llamó Luisa y me dijo que Pablo las había perseguido hasta la casa de cristina y que golpeó su carro y estaba amenazándolas… alcancé a escuchar a cristina discutir con el

--¿y donde están?

--me dijeron que me fuera ya para el hospital central que allá nos encontrábamos

--¿quieres que te acompañe?

--si, vamos

nos demoramos 8 minutos, en terminar de organizarnos, salimos casi que corriendo, vi su preocupación en sus ojos, entendía que eso le afectara… pero aun así no dejaba de dolerme, todavía amaba a Luisa, y por eso le dolía tanto que ella o su familia estuvieran mal

Encendí mi carro y aceleré lo mas pronto posible… el trafico estaba estresante, timbró al celular de Luisa y no le contestó, Luego, optó por llamar a cristina y tampoco recibía respuesta

--sami, acuérdate que no te conviene ponerte así ¿recuerdas?

--si, si, lo se… pero me preocupa que ese tipo les haga algo a las tres

--¿van a denunciarlo?

--todavía no se, si la violó, pero lo que hizo esta mañana si puede ser demandable

El semáforo cambió de color, ahora estaba en verde, arranqué y fui lo mas rápido posible… ella tomó mi mano y con sus dedos, rozó mi piel… --gracias

--sabes que siempre estoy ahí para ti

--ayer me dijiste muchas cosas ¿recuerdas?

--no recuerdo muy bien

Sonrió – jamás te había visto ebria

--ni lo digas que vergüenza contigo

--¿por qué? no hiciste nada malo, al contrario – y sonrió coquetamente

--sami ¿ayer pasó algo entre las dos?

piiiiiiiiiiiiiiiiii, un auto que al parecer tenia mas afán que yo, pitó fuerte, logrando desviar mi atención de ella… volteé a la derecha y llegamos.

--¿nos bajamos o nos quedamos aquí?

--esperemos aquí dentro

Sus piernas se movían de arriba para abajo, así con movimientos ligeros

--cálmate princesa, si sigues así, vuelves y te colapsas sami y sabes que no es bueno

--si – suspiró, tratando de controlar su agitada respiración – tienes razón

Me quedé pensando en lo que había dicho ayer… eso si lo recordaba medianamente… le dijo a poncho que yo era su novia… me había encantado eso

--sami, ayer dijiste algo que

--que es?

--le dijiste a poncho que… yo era

--mi novia – completó --- si lo recuerdo ¿Sabes? pensé que era

-mi novio? ¿Mi amante? ¿Un amigo?

--si, algo… me dio… sentí… no se

Reí,<>

Se inclinó a mi para darme un beso pequeño, al que correspondí, la abrasé y vi por su ventana a Luisa, Cristina y una joven mas pequeña salir, supuse que era ella la hermana de luisa.

--mira – señalé a donde estaban ellas

Salimos del auto, Sami cargó a Maite, la niña no se cansaba de sonreír, me hice a un lado de ellas… la relación no era la mejor pero

--Camila ¿Será que después podemos hablar tu y yo a solas?

--claro, cuando quieras

--¿mañana te parece bien?

--si, puedo en las horas de la tarde

--perfecto, yo tengo clases en la mañana

Entre las dos, cuadramos una cita, no sabia que esperarme de Luisa, pero esta vez no me habló con los aires de grandeza con los que siempre lo hacia, ahora estaba mas ¿Educada?.

--y no le digas a sami, que quede solo entre las dos

--Hecho – respondí a su sonrisa, aunque no sabia si lo hacia por pura hipocresía o sinceramente

--¿Qué pasó?

--NO ESTOY EMBARAZADA – dijo la joven feliz

--bueno, al menos una buena noticia ¿No?

Cristina y Luisa asintieron, aunque no se veían muy bien… al parecer si estaban igual de preocupadas que sami por lo de Pablo.

--vamos a un café a hablar ¿les parece? –propuso sami

Todas tres asintieron –sígannos

En ese momento, dejé de pensar en mi… ellas habían conformado parte de la vida de sami para bien o para mal

--Sami, si quieres te vas con ellas y mas tarde hablamos

--no, vamos ¿o no quieres acompañarme?

--no es eso, es solo que siento que te incomoda

--no, sino que estoy preocupada ¿vamos?

Un ligero puchero apareció en sus labios, me robó un beso y asentí.

--vamos al que queda a tres cuadras de aquí – expresó organizándose en su asiento

Mientras conducía… --¿Cuántos años tiene la niña?

--no lo se ¿14? ¿15? no pasa de los 15

--es una niña sami, en que mente puede caber hacerle daño a una niñita aun?

Se encogió de hombros –ese tipo es despreciable, así era antes en la universidad… no se Luisa como se pudo fijar en él – dijo con molestia

Yo, me quedé callada

--ei, perdona, no quise decir eso

--no te preocupes

-Cami, con Luisa ya no pasa nada… Créeme ¿Si? no es un secreto que fue importante, que lo sigue siendo y que la quiero y no le deseo nada malo, pero ya no pasa nada con ella

Asentí calladamente

Llegamos a la cafetería

Ellas llegaron después de nosotras, nos sentamos en una mesa para 5 y pedimos lo que íbamos a tomar

--vale ahora si ¿Qué pasó esta mañana?

--íbamos saliendo del parqueadero y se apareció golpeando las ventanas del carro y gritando como loco, diciendo que se iba a llevar a Maite

--Maite, ¿el abusó de ti?

Cerró sus ojos – no exactamente, fue brusco y me presionó pero yo también quería

Sami la miró con resignación, Luisa la estaba mirando de mal modo y cristina optaba mejor por ni mirarla

--sami, perdón que me meta, pero no deben juzgarla… mira, a esta edad se desarrollan sentimientos confusos y deseos alarmantes, no deben culparla por sentir y querer saber a que se debe lo que siente… no digo que esté bien lo que pasó

-Maite – dijo ella

-ok Maite, no está bien eso… no siempre que sientas deseos por estar sexualmente con otra persona, debe pasar… no estas embarazada pero pudiste haberlo estado ¿por qué? por que aunque todavía seas una pequeña adolescente, ya eres una mujer que puede perfectamente, darle vida a otro ser – las cuatro callaban y me miraban – si el no te obligó no podemos mentir e ir a la policía a decir que abusó de ti, pero si se puede demandar por que estuvo con una niña prácticamente, el ya es un hombre y ahí podemos hacer algo, además, si está comenzando a causarles miedo y a usar la violencia con amenazas también se puede denunciar – la niña, quebró en llantos – el dio con el paradero de tu casa – me referí a cristina, que en ese momento asintió – ok, quiere decir, que las está siguiendo… lo primero que debemos hacer es dividirnos… Sami, tu puedes ir con Cristina y Maite a denunciarlo, Luisa, tu debes tener mucho cuidado pero sigue con tus clases normales – sin pensarlo, me había convertido en la palabra de las 5… todas estaban asintiendo, estando de acuerdo con mis sugerencias

--pero, debemos irnos de tu casa Cris, no quiero que te haga daño y además, ya sabe que estamos allí

--no – me metí de nuevo – es obvio que el piensa que donde estés tu, está ella, por lo que opino es mejor que tu sigas donde cristina y si quieren, el a mi no me conoce… Maite podría irse a mi casa, al menos hasta que las cosas se calmen

Todas me miraron sorpresivas, yo misma lo estaba… pero ¿Cómo permitir que un loco les hiciera daño? además, en realidad estaban preocupadas… debía ayudarlas

--¿Camila ¿hablas enserio? – preguntó Luisa

--si, claro que si

Sami tomó mi mano y la besó

--¿les parece si comenzamos hacer todo esto desde ya?

--yo, solo… pido perdón – dijo la niña – en especial a ti, hermanita, no quería meterte en esto y

--shh, ya, no hay lio Maite

Cristina pagó la cuenta, y nos dividimos, en el carro de luisa, se fueron cristina, sami y Maite, y en mi carro Luisa y yo ¿un poco loco esto, no?

-Oye, mantén tu celular prendido ¿Si? yo te llamo a penas salga – susurró sami en mi oído

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-Si, yo lo tengo prendido – le di un abrazo deseándole suerte

Ella se despidió de Luisa, de la misma forma… las miré a ambas, sus ojos se cruzaron, pero no era una mirada cómplice a los que sentían… la de sami expresaba apoyo, y la de Luisa, gratitud.

-adiós – le dijo ella a sami

Nos montamos en mi auto, después de que cristina arrancó en el de Luisa

--te llevo a la universidad? – le pregunté algo incomoda, esto jamás me lo habría imaginado

--No, yo hablé con el decano y me dio esta semana… aunque la próxima debo recuperar y mañana debo asistir un momento. ¿Tú tienes que ir a trabajar?

--a consulta – respondí, Luisa se veía algo paranoica, miraba a todos lados, sentía miedo… --¿tienes a donde ir Luisa?

-No – dijo sinceramente

-Ok, entonces vamos

-a donde?

--a mi trabajo – sonreí-- te quedas conmigo hasta que Cristina te lleve a su casa ¿te parece?

-Gracias Camila – manifestó con algunas lágrimas en sus ojos – jamás imaginé estar contigo en esta situación. Yo, deseo disculparme contigo, me comporté mal y fui muy grosera

Asentí mientras manejaba, detallé sus gestos cuidadosamente, quería seguir hablando

-no ha sido fácil lo que me pasó con sami… créeme que no supero el hecho de ser la culpable de que casi acabe con su vida, de engañarla, todavía no comprendo como pude hacerlo… por que cometí tantos errores

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--Mi mamá es una vagabunda – cambiaba de tema simultáneamente, necesitaba desahogarse de todo lo que la perturbaba – jamás le ha importado darnos buen o mal ejemplo, es una arrimada… vive por la herencia que dejó mi padre, de hecho de eso vivimos las tres, pero ella jamás quiso superarse, trabajar… sólo cirugías supongo que de ella aprendí mi vanidad, el hecho de que mi belleza fuera antes que todo – ahora comprendía su actitud… ella estaba siendo sincera y lo que decía, tenia todo el sentido del mundo - mi papá murió de cáncer y no me pude despedir de él – lloró – desde ahí, me oculté en mis amigas, en el sexo, en salir, en cuidar mi cuerpo, y en ser porrista – la miré, ofreciéndole confianza – hasta que conocí a sami

Tragué saliva

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Debía escucharla

--¿quieres seguir? – le pregunté amablemente

--¿quieres escucharme?

--claro que si – sonreí – anda, cuéntame todo lo que tengas por sacar

--siempre me había llamado la atención, la veía en las gradas mirándome… hacia lo que fuera por lucirme, no entendía que me gustaba de ella, pero me atraía, cuando se iba yo, dejaba el show, en los pasillos la buscaba… sólo la veía escasamente con cesar y marcela – con esto, también estaba aprendiendo a saber mas de sami – era callada, cuando nuestras miradas chocaban, hacia que todo dentro de mi; Se revolcara

-ajam

--¿no te causo daño diciéndote esto?

--mira Luisa, tu fuiste la novia de sami, y me atrevo a decir que la persona mas importante de su vida, entiendo perfectamente de que tuvieron una historia, no te preocupes por mi, además… tómame en este momento como tu psicóloga ¿Está bien?

Asintió y continuó… el trafico estaba quieto… no avanzaba, por lo que todavía teníamos mucho tiempo

--cada vez me impactaba mas – sus ojos se perdieron en el cielo – además de que era interesante, también era muy linda, jamás la vi sonreír, siempre guardaba esa apariencia seria y fría – me miró – hasta que pasó muy cerca de mi, me olvidé de mi equipo, de quien me miraba… Pablo la odiaba, por que sabia que muchas de las niñas de la universidad querían con sami, pero nunca se le acercaban… él muy estúpido no entendía que tenia esa "anormal" que hiciera que fuera "buscada que él" aparte de que es un homofóbico de aquí al ultimo rincón del mundo, ese día el le tiró algo, no recuerdo si fue el balón o otra cosa

--Si… --estuve de acuerdo

--y su reproductor calló cerca de mi, lo tomé y se lo alcancé… por primera vez, la veía detenidamente y tan cerca… me encantó… me puse nerviosa… de todo… ese día hice la apuesta con ellos – dijo con fastidio y a la vez, con tristeza – tenia que demostrar que me había metido con ella y así lo hice… sabia que me estaba metiendo con algo que a lo mejor, no podría manejar después. Sami resultó siendo mas de lo que me esperaba y con los días la fui queriendo, me fui enamorando… pero ¿Yo lesbiana? – Negó con su cabeza – todavía no aceptaba eso, por lo que retomé la apuesta… grabé el momento en el que estuvimos juntas y a los tres días ella se dio cuenta. De ahí en adelante, todo comenzó a cambiar para mi, cuando supe lo de sami fue… dramático, me sentía culpable pero estaba eso y por otro lado, Luisa la niña popular, la niña que tiene que manejar su reputación todo, a lo mejor por eso, actué así.

El silencio le ganó la batalla por momentos, después volvía hablar

--quería pedirte disculpas sinceramente, yo… jamás volveré a meterme entre las dos, tu te la ganaste y ahora me doy cuenta que la mereces

-y tú? ¿Aun sientes algo por ella?

-si – me respondió directo – yo a ella la quiero mucho, pero se que la perdí y que sami y yo no somos compatibles, la quiero como que me ha ayudado a ver mi vida de otro color, la quiero por que me hizo sentir que valía mas que mi cuerpo, pero ahora… está Cristina – y sonrió

--umm ahora entiendo… ¿la quieres?

--Si y me está demostrando muchas cosas

--Luisa, no hemos sido las mejores amigas pero puedes contar conmigo y quiero que seas sincera, si vuelve a pasar algo con sami, dímelo

(Yo sabia que ella tenia que aprender a curar todo su pasado, sus heridas… la Luisa de antes por La Luisa que demostraba ser ahora, solo requería dar el primer paso para que su nueva vida comenzara mejor.)

Asintió nuevamente, ahora habíamos llegado a mi trabajo… preparadas para bajar, su celular sonó, lo que causó que rápidamente se ofuscara y con temor viera la pantalla

--¿Bueno?

--…………………………….

--¿Pablo?

Y su rostro se tornó diferente, la tranquilidad que había tomado en el camino, se había perdido con esa sola llamada… le pedí que lo pusiera en alta voz para escuchar lo que tenia que decirle ese tipo.

Fran07

Danii2