Estados alterados -la cama de ayurveda-

En el mes de Agosto del año 2003 en la Ciudad de México, toda una familia descubre que el realizar actividades sexuales entre ellos no es tan malo como creían. La familia Gómez Ortiz descubre una nueva y diferente forma de vivir, un estilo de vida de placeres donde todo es permitido, llegando a tal grado de desenfreno para realizar orgías entre ellos donde todos los excesos son permitidos.

"ESTADOS ALTERADOS"

La cama de Ayurveda

PROLOGO:

En el mes de Agosto del año 2003 en la Ciudad de México, toda una familia descubre que el realizar actividades sexuales entre ellos no es tan malo como creían. La familia Gómez Ortiz descubre una nueva y diferente forma de vivir, un estilo de vida de placeres donde todo es permitido; donde el padre tiene relaciones con sus dos hijas y con su hijo; la madre entabla relaciones con su hijo y con su esposo al mismo tiempo; el hermano sostiene relaciones con sus dos hermanas; la prima tiene relaciones con sus primas y, con sus tíos; el tío sostiene relaciones con ambas sobrinas y con la madre de éstas, entre otras situaciones más; llegando a tal grado de desenfreno para realizar orgías entre ellos donde todos los excesos son permitidos.

Todos ellos se enredan en una historia difícil de creer, pero que... ¡puede que haya sucedido en la realidad! ,

Una realidad envuelta en un velo de historia fantástica

; que como menciona el gran escritor navarro: J.J. Benítez haciendo mención de su libro: "La rebelión de Lucifer", "... La Rebelión de Lucifer" es mucho más que una creación fantástica. Quizá porque los enemigos de la Verdad –dice J.J. Benítez en su obra- son todavía tan numerosos como para nublar la faz de la Tierra, he elegido para este libro el intangible y arcano ropaje de la fantasía. Estoy convencido de que, en la vida, la Verdad pasa muchas veces ante los seres humanos... disfrazada".

Tal vez la obra aquí expuesta: "ESTADOS ALTERADOS. La cama de Ayurveda", sea mucho, pero mucho más que solo una supuesta creación fantástica y que la

VERDAD

, como menciona J.J. Benítez, puede pasar ante los ojos de los seres humanos, disfrazada en un arcano e increíble ropaje de narración fantástica, tal vez como dice J.J. Benítez: "... porque los enemigos de la Verdad son todavía tan numerosos como para nublar la faz de la Tierra".

Esta historia ha sido escrita en forma epistolar. Es una trascripción fiel de los escritos originales de puño y letra de sus protagonistas; los hechos son contemporáneos y reflejan el punto de vista de quienes participaron en tales hechos tal y como ellos los vivieron.

Han sido ordenados dichos documentos para que la historia aparezca en orden cronológico. Es importante también mencionar que solo se consignan aquí las transcripciones de las hojas de los Diarios que hablan de los encuentros sexuales entre sus protagonistas, no se transcribieron hechos ajenos a la historia.

En México está penado por la Ley el incesto así es que los nombres, las personas, los lugares y las situaciones contenidas en la siguiente historia son "supuestamente" ficticios y cualquier parecido con la realidad actual(de la Ciudad de México) es... ¡¿mera coincidencia?!

" Pero la verdad está más cerca de lo que creemos, no permitamos que se nuble nuestro entender, el que quiera entender... que entienda, porque llegará así a la razón" Raymundo Gómez Ortiz.

AVISO IMPORTANTE: La siguiente historia contiene situaciones y palabras que pueden ser ofensivas para algunas personas y pueden herir la sensibilidad del lector. Es preciso señalar que la narración no contiene relaciones con menores de edad, todos los que aparecen en la presente historia son mayores de edad.

Esta es la historia...

CAPITULO I

EL INTRUSO

DIARIO DE CINTHIA. Agosto 1, Viernes.

Estoy inquieta y me calma escribir aquí mis pensamientos; es como decir confidencias y las escuchase al mismo tiempo. No sé por donde comenzar, mi cabeza está revuelta y me siento confundida, nunca me había sentido así.

Anoche vi algo que me dejó impactada en la recámara de papá y mamá; vi a mamá fornicando con otro hombre que estoy segura no era papá. No sé que pensar pero no puedo quitarme esas imágenes de la cabeza y que miré anoche... pero los hechos como son.

Yo había llegado a casa bastante tarde de tener una muy dura jornada de trabajo; el despacho donde presto mis servicios como secretaria había tenido muchísimo trabajo en captura de documentos en computadora, envío de cartas y faxes etc. Había llegado a casa a la 1:00 A.M. , me di cuenta que era esa hora ya que al llegar justo a la sala de casa el reloj daba sus campanadas. Sin encender la luz me dirigía hacía mi recámara, al final del pasillo y, antes de siquiera llegar al corredor que conduce a los dormitorios, escuché gemidos de mujer. Paré mis pasos y agudicé mi oído para saber de donde provenían; era en el dormitorio de mis padres.

Mi reacción inmediata fue botar mi bolsa de mano y dirigirme a la recámara de donde venían los ruidos, dispuesta a ayudar. Creí que mamá se sentía mal o algo malo le pasaba; papá no estaba ya que esa misma tarde había salido a Monterrey a entregar un pedido de ropa y tenía planeado regresar a casa 4 ó 5 días después. Llegué hasta la puerta y sin llamar, la abrí.

El espectáculo que se me presentaba era ver entre la penumbra a una mujer desnuda encima de la cama, que aunque estaba de espaldas a mí, identifiqué enseguida el cuerpo, era mi mamá; la mujer estaba encima y con las piernas abiertas a manera de jinete y, sentada en lo que identifiqué al principio como un bulto, pero pronto me di cuenta que no era un bulto, era un hombre desnudo que estaba boca arriba, me percaté cuando el hombre movió sus piernas y recogió sus rodillas (como si fuera a parir), lo anterior ayudó a que mamá, que estaba cabalgando lentamente en lo que deberían de ser las caderas del hombre, recargara su espalda en esos muslos y rodillas del intruso.

La única fuente de iluminación era la de la pequeñísima lámpara del buró de escasos 20 cms. de altura y que apenas irradiaba una muy tenue luz; aunque pobre la iluminación, me permitió ver a mamá que hacía movimientos circulares de su cadera y un bombeo lento de arriba abajo a la vez que emitía gemidos, algunos cortos y algunos prolongados; al estar mamá de espaldas a mí, ni ella ni el intruso se percataron de mi presencia; yo iba a cerrar la puerta pero la curiosidad con una mezcla de furia me hicieron decidir ver quien era ese hombre que se atrevía a tomar el lugar sagrado de papá.

Cerré un poco la puerta a manera que mi cabeza pudiera asomar y me coloqué a gatas; no lo podía creer mamá empezaba a acelerar gradualmente su cabalgar a la vez que comenzaba a emitir gemidos prolongados que cada vez se hacían más sonoros, también se comenzaron a oír el rechinar de los resortes de la base de la cama; de pronto mamá tuvo una serie de espasmos impresionantes mezclados con grandes gemidos (era signo inequívoco de que se estaba viniendo). El hombre, casi al unísono de mamá, también empezó, primero a jadear estrepitosamente y luego a gemir ahogadamente a la vez que tomaba con sus manos a mamá estrujando las nalgas de ella.

Yo me asusté y entré a mi recámara corriendo; no recuerdo si cerré o no la puerta del cuarto donde estaba mamá y ese hombre, pero eso es lo de menos. Yo me encontraba en mi recámara detrás de la puerta que había cerrado, a manera de una barrera humana, como queriendo que nadie entrara, con la luz apagada tratando de recuperarme; casi enseguida escuché pasos descalzos que salían de la recámara e iban hacia la sala y escuché claramente la voz de mamá que le decía desde la recámara al intruso y con voz baja (a manera de susurro) que lo esperaba nuevamente mañana a las diez de la noche para continuar con el juego. Mamá sabía que a esa hora, ni mis hermanos ni yo estaríamos porque teníamos planes de ir a bailar a una discoteque y, papá estaría cuatro o cinco días ausente de casa. Tiempo de sobra tenía mamá para hacer sus porquerías.

Es la 1:28 A.M. y no tengo sueño, por lo que me he puesto a escribir en mi diario lo que contemplé hace tan solo unos momentos; me encuentro muy confundida pero...

Se me acaba de ocurrir una idea, mañana fingiré un cuento: que voy con una amiga que se puso mal y está hospitalizada; así podré espiar a mamá y conocer quien es el intruso que mancilla la ausencia de papá.

DIARIO DE CINTHIA. Agosto 2, 11:23 P.M.

Estoy asqueada de saber lo que sé hoy, más me valiera nunca haber conocido la identidad de ese intruso. Es una porquería... no lo puedo creer... es como vivir una horrible pesadilla. Hoy estuve nuevamente en la recámara de mis padres y lo que vi me horrorizó, ahora sé quien es ese hombre que fornica con mamá, ese hombre es... mi hermano, mi hermano Raymundo. Mi mamá se acuesta con su propio hijo y fornican en la misma cama donde hacen el amor papá y ella. Lo tengo que escribir todo porque si no lo hago vomitaré.

Hoy entré a la recámara diez minutos antes de las diez de la noche y me encerré en el closet, ya que desde ahí podría ver sin que me descubrieran; me encontraba nerviosa, temerosa y molesta por esa situación; tener que esconderme en mi propia casa como si fuera una vil ladrona, pero tenía que saber quien era el intruso que usurpaba el lugar de papá, llevaba conmigo la cámara fotográfica para tomar unas cuantas fotos y mostrárselas a papá como evidencia del adulterio de mamá, pero había omitido un detalle, que no se podría utilizar flash; afortunadamente papá siempre cargaba su cámara con película ASA-400 y esperaba que esto funcionara al momento de tomar las fotografías, aunque no estaba segura ya que no sabría que tanta luz podría haber en la recámara.

Mi plan había salido a la perfección para no asistir con mis hermanos a la discoteque; les argumenté a mis hermanos que una de mis amigas se encontraba en el hospital por un accidente automovilístico; para sorpresa mía mi hermano Raymundo mencionó que el también no podría ir ya que "por coincidencia" , también el tenía un amigo en el hospital grave por un accidente automovilístico. Juliana, mi otra hermana decidió entonces quedarse en casa de una amiga. Salimos de casa alrededor de las 8:30 P.M. Yo solo di unas cuantas vueltas en el automóvil por la colonia Casas Alemán, colonia donde se encuentra nuestro domicilio, ubicada al noreste de la Ciudad de México, para después estacionarme y esperar fumando unos cuantos cigarros, esperé alrededor de 50 minutos y, me dirigí a casa.

Estacioné el auto cerca de casa para no hacer ruido. Entré sigilosamente y escuché el ruido de la regadera, mamá estaba bañándose; iban a ser las 10:00 P.M. Fui a la recámara y me escondí en el closet, como éste es de persianas de madera las abrí un poco para poder ver, llevaba la cámara fotográfica conmigo y esperé...

Cinco minutos antes de las diez de la noche escuché que llegaba mi hermano Raymundo (lo supe por el ruido característico que hacían sus llaveros metálicos al chocar contra la puerta metálica principal). Después silencio; yo estaba temerosa porque seguramente a mamá le iban a cambiar sus planes por la presencia de mi hermano, pero...

Escuché pasos y risas de mamá que se dirigían a la recámara donde estaba yo escondida. No tardaron en entrar; la luz de la recámara estaba apagada como si se tratase de un juego sucio, entró mamá primero y enseguida entró aquel intruso, enseguida encendieron la luz de la recámara y vi que aquel hombre claramente por entre las rendijas del closet... era mi hermano. Mamá entró con risas y tomando a su hijo de la mano; al principio creí que era una confusión, pero muy pronto me di cuenta que no era así cuando mi hermano Raymundo acercó sus labios a los de mamá y comenzaron a besarse apasionadamente.

Yo me había quedado como un témpano de hielo al ver esa asquerosidad, pero faltarían más sorpresas, esto tan solo era el comienzo...

Mamá sin dejar de abrazar a Raymundo y sin ningún pudor ante su propio hijo, se quitó la bata de color rosa y se mostró tal como era ella... desnuda. Después mi hermano de pié enfrente de ella, solo abrió la hebilla del cinturón y bajó su ziper, claramente mi hermano mostraba una erección. Mamá se arrodilló quedando su cara frente a ese bulto que sobresalía del pantalón y, sin mencionar palabra, mamá abrió los jeans, tomó la truza y la bajó hasta descubrir el pene de Raymundo el cual salió de su escondite vibrando pesadamente; acto seguido y sin ningún recato, mamá comenzó a lengüetear ese tronco para después engullirlo completamente y comenzar movimientos de adentro hacia fuera. De pronto mamá paró sus movimientos a la vez que se sacaba el pene de la boca, se limpió las comisuras de la boca con la mano y le dijo a su hijo que cuando "se viniera" lo hiciera afuera de ella. Yo podía observar con toda claridad ya que ellos habían quedado de lado (como si estuvieran en el teatro, en el escenario, y la regla fuera no dar la espalda al público). Mamá volvió a hacerle el sexo oral con movimientos un poco más rápidos; mi hermano la tomó de la cabeza y comenzó también a hacer movimientos de adentro hacia fuera un poco más agitados; de pronto mi hermano comenzó a resoplar con más fuerza anunciando el momento cumbre; mamá trató de zafarse pero Raymundo sostuvo con sus manos la cabeza de ella contra su vientre y de pronto, mi hermano comenzó a gemir estrepitosamente a la vez que su cuerpo mostraba unos espasmos impresionantes, haciendo que la cabeza de mamá también fuera movida al unísono y bruscamente por esos espasmos. Mamá por todos los medios trataba de zafarse pero no lo conseguía hasta que (lo supongo) mamá apretó sus dientes provocándole una mordida en el pene de Raymundo haciendo que éste la tomará de sus cabellos y la despegara violentamente de su vientre a la vez que Raymundo emitía un grito de miedo. Mamá tirada en el piso comenzó a escupir rápidamente, lo que supongo era el semen que se encontraba en su boca, formándose en sus labios varios y abundantes hilillos blanquecinos, colgantes, pegajosos y semi-espumosos (como si fuera una abundante baba asquerosa), y comenzó a toser, de esa tos que da cuando uno quiere vomitar, mamá se levantó presurosa hacia la puerta, pero en un rincón de la recámara y con los gemidos de mi hermano de fondo, comenzó a vomitar.

Yo había quedado impactada por lo que estaba viendo que ni de obtener algunas fotografías me acordé; apunto estuve yo también de vomitar al ver esa escena tan repugnante, sentía unas nauseas enormes, pero afortunadamente logré controlarme.

Después mamá salió de la recámara desnuda y aún tosiendo, limpiándose con las manos su boca y, segundos más tarde escuché que caía agua de la regadera, seguramente se estaba bañando. En cuanto a mi hermano, salió también de la recámara casi enseguida con las manos en sus genitales y con unos ligeros gemidos, fue hasta el baño, donde se encontraba mamá (lo anterior lo deduzco ya que solo escuchaba las ininteligibles voces cavernosas, producto del lugar donde ellos se encontraban), agudicé mis oídos y pude escuchar como le reclamaba a mamá él porque le había mordido el miembro, después pude oír varios reclamos de mamá y como los reclamos se convertían en gritos a tal grado que mi hermano le vociferó una serie de leperadas bastante fuertes a mamá, dichas groserías bastante duras y que las recuerdo muy bien porque ahora retumban en mi mente, fueron las siguientes: "¡Pinche puta!...¡Hija de tu perra madre, pero te vas a arrepentir de esto!...¡Vete y chinga a tu puta y culera madre! Mi hermano salió y azotó la puerta del baño y escuché que salía presuroso de la casa. Yo me había quedado como tabla, paralizada de pies a cabeza; en aproximadamente cinco minutos, medianamente me recuperé de lo que había visto y escuchado y sin pensarlo salí de casa sigilosa pero apresuradamente; llegué al auto pero tardé algunos segundos en abrir la portezuela ya que no podía insertar la llave en la cerradura, me di cuenta hasta esos momentos que mi cuerpo estaba temblando, seguramente por el gran nerviosismo que me embargaba; tan solo al subir al automóvil comencé a llorar amargamente para desahogarme; después alrededor de las 11:00 P.M. llegué a casa y me encerré en mi recámara, para fortuna mía mamá estaba en su recámara.

No sé como reaccionar el día de mañana al ver a mi madre y a mi hermano. Creo que no podré soportar más. Ahora, mientras escribo esto, estoy tomando unos tragos de tequila y fumando unos cuantos cigarros para calmar mis nervios... o tal vez para olvidar; a mis 36 años de edad aún sigue sorprendiéndome la vida.

DIARIO DE CONSUELO. Julio 31. 12:35 P.M.

Querido diario:

Hoy voy a intentar algo que deseo desde hace algún tiempo y que no me he atrevido a hacer. Voy a intentar tener sexo con mi hijo hoy por la noche. Anteriormente, como ya te he contado, solo he tenido sexo oral pero ardo en deseos que me penetre, quiero sentir su miembro viril dentro de mí, quiero ir más allá y conocer otros placeres. Hay algo que me impulsa a seguir adelante en esta situación, no se como explicarlo, pero esto que siento es algo muy hermoso, es como... protegerlo, y el a su vez me demuestra su cariño.

Querido diario, tu bien lo sabes, parece que fue ayer, pero hoy exactamente hace un mes cuando le mamé ese lindo pene a mi propio hijo, cuando iniciamos. Te parecerá extraño pero no me siento sucia ni siento que esté atentando contra las leyes naturales, al contrario fue tan bello que lo hemos venido repitiendo casi cada semana, claro que con muchísima discreción por las implicaciones que esto tiene; además, tu bien sabes que Manuel sigue con su amante, esa puta barata de su secretaria, y a mi... ni me atiende. Desde hace tres meses está siéndome infiel pero tengo que fingir que no lo sé, gracias a los negocios de ropa nos permite vivir cómodamente, así que si le pido el divorcio perdería esta vida de comodidades. Tu ya lo sabes, querido Diario; Manuel busca cualquier pretexto para no estar con nosotros y estar con esa puta, seguramente en este viaje a Monterrey se la va a pasar con esa pinche golfa; tan solo éste sábado pasado que nos habían invitado a celebrar los XV años de nuestra ahijada, el no asistió porque supuestamente tenía una comida de negocios; cree que soy una estúpida y que no me doy cuenta; por eso ese sábado, en un afán de vengarme, en el salón de fiestas, en pleno festejo de mi ahijada y con las tenues luces del lugar, estuve coqueteándole a Raymundo; tal vez para los invitados que estaban allí eran simplemente cariños normales de una madre hacia su hijo, pero ni Ray ni yo sabíamos que eso era cierto; es más, en la mesita del recibidor coloqué la fotografía que nos tomaron en esa fiesta, los dos abrazados... desde aquí puedo verla, por cierto voy a mandarla enmarcar porque actualmente tiene un corriente marco de cartón con letras( a manera de propaganda del salón de fiestas y eventos sociales) que dice: " El Castillo de México. Puerto Acapulco #114 Colonia Casas Alemán, Frente a la Iglesia del Sagrado Corazón de Jesús ( La iglesia de la Colonia Casas Alemán)".

En fin...hoy debe de ser el día, o mejor dicho la noche en que hagamos el amor mi hijo Ray y yo. Empezaré tiernamente a mamarle su hermoso pene y luego iré guiándolo poco a poco hasta que finalmente se lleve a cabo lo que tanto deseo: que forniquemos los dos. Hoy a las 11:30 de la noche lo haremos y te contaré todos los detalles.

DIARIO DE RAYMUNDO. Agosto 3. 11:13 A.M.

¡Qué pinche dolor aún tengo en la verga! , ¡esa perra me mordió la verga!

Pero juro que me las va a pagar todas juntitas, pinche vieja.

Trataré de contarte a ti mi querido diario lo que sucedió, tu que has sido el confidente y el amigo más fiel que está dispuesto a escuchar mediante los signos de las letras, tu que solo escuchas y no preguntas, tu que solo eres un cuaderno y sin embargo eres más fiel que un perro, que solo te limitas a aceptar las alegrías o fracasos de mi persona, que eres el mejor de los amigos; te abandoné hace un mes pero te prometo que ya no serán las ausencias tan largas, te contaré...

Recuerdas que la última vez escribí tan solo algunas líneas escuetas donde te contaba sobre que mi madre me había chupado mi pene, pues ahora te cuento algo más relacionado con la cabrona de mi madre, te contaré con todo detalle y que sucedió hace dos días...

Hasta aquí llevo la transcripción de estos diarios, pero continúo ordenándolos. No quise que demorará más esta historia y aunque esta incompleta, prometo que haré la transcripción de los diarios para darla a conocer en forma completa. Me di a la tarea hace unos días de fotocopiar los diarios para después dejarlos en donde acostumbran sus dueños, ya que la familia no sabe que se están dando a conocer sus "intimidades" por este medio.

Esta historia continuará conforme vaya terminando de ordenar y transcribir las fotocopias de dichos y extensos diarios.

Raymundo Gómez Ortiz

Septiembre 03, 2003. Ciudad de México

Cualquier sugerencia, pregunta y/o comentario ya sea favorable o desfavorable, por favor escríbeme al siguiente correo electrónico: blueprivate@hotmail.com , todos los correos serán atendidos y/o contestados.

El escritor de la presente narración expresa claramente que: Se permite la publicación, traducción y libre distribución de la historia, siempre y cuando se cite al autor y su correo electrónico; así como que no se mutilen, o se añadan o alteren fechas, palabras, nombres, títulos y subtítulos, lugares, frases o datos diferentes a los mencionados.