Esta vez si

De nuevo una imaginada y esperada experiencia de un comienzo bi.

Según te veo en el centro comercial veo que tu mirada busca lo mismo que la mia. Bastan un par de miradas mas para que empieces a seguirme entre la multitud. Sigo mirando hacia atrás para aasegurarme de que no me he equivocado y que sigues detrás mia camino del servicio.

Entro dentro y tu vienes detras, me lavo las manos mientras el tio que habia meando termina y se va, tu haces lo mismo. Te lavas las manos y sin ningun disimulo me miras el paquete. Miro debajo de las puertas y no hay nadie. Me sitúo en un urinario mirandote y sin tener que decirte nada te pones a mi lado. No te esperabas otra cosa que lo que viste en mi mano. Tenía la polla en mi mano y ya estaba durisima. La masajeaba para ti para ponerte cachondo, para que supieras lo que podias tener si te gustaba. Te sacas la tuya y segun empiezas a tocártela, también ya dura, echas mano a la mia. Te dejo hacer, y empiezas a pajearme despacito. Noto tu mano un poco fria debido al contraste con el calor de mi polla, la tengo ardiendo. Alargo el brazo y empiezo a acariciar la tuya también está ardiendo. continuamos asi, masturbandonos el uno al otro solo unos segundos mas porque se oye la puerta y entra un tio. Fingimos que terminamos y a duras penas guardamos las pollas en los pantalones y salimos del servicio. Me miras inquieto y preguntando con los ojos. Te hago un gesto y me sigues. Vamos hacia el parking.

Llegamos a mi coche. Yo ya lo tenía aparcado estrategicamente fuera de cualquier camara de seguridad y en un lugar poco transitado. Aunque esto ultimo era un poco dificil porque habia bastante gente en el centro comercial. Ya dentro del coche, un par de miradas afuera, no viene nadie. Primer morreo. Rápido, apenas sin lengua. Otro par de miradas, segundo morreo. Esta vez con mucha mas saliva y mas lengua y mas lengua... Mientras te muerdo la boca y la lengua paso mi mano por tu polla. De abajo a arriba te voy acariciando los huevos y la polla. Seguía tan dura como antes y eso era lo que me esperaba.

Empiezo a desabrocharte el pantalon y la acaricio por encima de los calzoncillos. Pero por poco tiempo porque enseguida me coges la mano y la metes dentro sintiendo inmediatamente el calor que desprendía hace un momento esa polla que tantas ganas tenia de comerme.

Me gusta tu polla, increiblemente dura, caliente y con alguna gota ya de liquido preseminal. Te pido que vigiles a la vez que bajo la cabeza para lamer esas gotas e inmediatamente meterme tu capullo en la boca. Me encanta su olor, su sabor, seguía rezumando ese liquido semi transparente que con tanto placer había lamido al empezar a mamártela.

Mientras te la chupaba tu intentabas llegar con tu mano a mi polla, pero debido a la postura era casi imposible que pudieras hacerme algo así que te abandonaste a mi trabajo y me dejaste hacer. Seguía chupándotela, de abajo a arriba, dando lengüetazos de vez en cuando en la zona del frenillo. Me la metía entera en la boca e iba subiendo despacito y apretando fuerte con los labios mientras seguía bebiendo aquel liquido que ya casi se parecía más a una corrida que a otra cosa.

Poco tardaste en correrte, notaba como tus piernas se tensaban y tu cuerpo se estemecía cuando recibí el primer trago de tu polla. Me concentré en el capullo, apretandolo con los labios, aspirando suavemente y jugando con la lengua en la punta mientras seguías escupiéndome tus dulces jugos. Tu cuerpo se relajó y sin perder ni un segundo me la saqué de la boca y me desabroché el pantalón. Me lo bajé casi hasta los tobillos mientras echaba otro vistazo fuera por si acaso. Por allí no pasaba nadie.

Te cogí la mano, te la puse en mi polla y acerqué mi boca buscando la tuya. Te sorprendiste un poco al notar en tu lengua que de la mia caía tu semen que todavía seguía allí. Pero parecías disfrutarlo y así estuvimos unos largos segundos, jugando con tu semen de lengua en lengua mientras seguías masturbándome.

Me separé de tí y entendiste perfectamente que quería que me la chuparas. No tardaste más de medio segundo en bajar y calentar aún más mi polla con el semen que te había dejado en la boca. La sensación era alucinante, tu lengua jugando con mi capullo y tu semen chorreándome por la polla. Me lamías los huevos mientras me masturbabas con la mano y luego me chupabas solo el capullo aspirando fuerte sin cesar el movimiento con la mano. Te cogí la mano que te quedaba libre y te la dirigí hacia mi culo. Entendiste lo que quería y te soltaste de mi mano. Me quedé un poco cortado hasta que vi que lo que querías era meterte el dedo en la boca para lubricarlo. Tu sonrisa me volvió a relajar y sonreí yo también mientras acercabas tus dedos a mi culo empezando de nuevo con los juegos de lengua en mi capullo.

Me chupabas cada vez mas fuerte, y la sensación se hizo todavía más placentera cuando note tus dedos abriéndome el culo. Ibas despacito, se veía que sabías como hacerlo y como hacerme disfrutar.

Te avisé de que me iba a correr, en ese momento aceleraste el vaivén de tus dedos y la presión de tu boca sobre mi polla. Tu boca empezó a moverse cada vez más rapido y un chispazo de placer inundó todo mi cuerpo. La carne se me puso de gallina, la sensación en la entrada de mi culo se volvió increiblemente placentera y continuada hacia mi polla. Casi podía sentir exactamente cada borbotón de semen que salía por mi durísima polla llenando tu boca. Fueron varios espasmos de total y absoluto placer. Ya había sentido lo que era jugar también con el culo, pero nunca de una manera tan intensa. Creo que nunca tuve un orgasmo igual. Dejaste caer una cantidad enorme de semen de tu boca sobre mi polla y empezaste a lamerlo de nuevo. Tenía la polla super sensible y cada vez que tu lengua rozaba mi capullo era increible. Nos besamos un par de veces más saboreando el semen sobre nuestras lenguas y salimos de allí deseando volver a encontrarnos de esa manera.

Así que hasta la próxima o primera vez.