Esta no es una historia divertida

ESTA NO ES UNA HISTORIA DIVERTIDA

Esta no es una historia divertida, justo una más de las crudas realidades de la vida, creciendo durante los primeros años cuarenta, con una existencia muy perturbada, inquieto la vida debido a que mis padres se divorcian cuando tenía 3 años siendo el más joven.

Fui con mi madre durante años, pero debido a algunos de sus problemas de salud que fue transportado entre sus diferentes locaciones de casas; hasta que tenía unos siete años.

Debido a la constante inestable vida, (ahora, creo que esa fue la razón) que era un niño muy introvertido, tendiendo a jugar por mi cuenta y dedicar la mayor parte de mi tiempo libre para leer; cualquier y todo artículo, libro o poder ayudar a un animal que llegó a mis manos fue un paliativo a mi soledad, muchas veces la lectura de libros que eran solo adecuados para los lectores más maduros eran mi punto de atención.

Yo tenía unos diez años, hasta entonces, había tenido una vida bastante regular, sólo alterado cuando mi madre se volvió a casar.

Mi padrastro era también un tipo divorciado, en realidad era una persona muy buena, nunca me dio ningún problema, tuvimos problemas sólo por mi renuencia a aceptar "un nuevo padre".

Algún tiempo después de la boda, el hijo mayor de mí padrastro vino a vivir con nosotros; para continuar sus estudios, a niveles que no estaban disponibles en el ciudad del país donde vivía su madre.

Fue seguido por sus otros dos hermanos el año siguiente.

El primer año de este en la vida común, fue una introducción temprana a sexualidad, mi hermanastro era quizás tres o cuatro años mayor que yo: estábamos compartiendo una habitación, nuestra casa era un estilo colonial bastante grande, con una vieja distribución; salas de moda antigua, nuestra habitación sería la última de la casa, la más alejada de la entrada.

En ese momento a la hora de dormir no había entretenimiento en absoluto, la televisión era la pre-época y de radio conjuntos eran demasiado caro tener en todas las habitaciones, se tenía una radio en casa; eso si eras acomodado.

Resolví ese problema haciendo un set de cristal que se mostró en "populares Mecánica", si no; no había nada atractivo en la radio luego de vuelta a la lectura o entrar en conversaciones.

Mi hermanastro Pablo, siendo mayor que Yo; estaba en una sobrecarga hormonal y estaba muy interesado en la masturbación y de repente, la primera lección de sexo se produjo.

Comenzó, después que le pregunté por qué estaba haciendo esos movimientos rítmicos y sonidos raros en la noche, porque en mi novena lectura del libro I, sobre las relaciones sexuales que conseguí en la biblioteca, no conseguía encontrar en ninguna parte en esos los libros ninguna referencia a la masturbación.

Esto era antes de 1950, Bueno; él se ofreció a mostrarme cómo hacerlo, estaba tan avergonzado de que me negué y me di vuelta y fingí dormir.

Algún tiempo más tarde, después de muchas ofertas; la curiosidad pudo más que yo y acepté, por alguna razón que no podía llegar al orgasmo después de probar unos pocos veces en diferentes días.

Una noche se ofreció a ayudarme, Paul llegó hasta a mi cama y con la posición de cuchara a mi espalda me masturbaba, hasta que llegué a terminar, era sensacional.

Tener relaciones sexuales, nunca antes lo había probado nada igual; no había vuelta atrás, este ritual sexual se convirtió en un rito de cada noche; algún tiempo después, él se ofreció a chupar mi verga, acepté con mucho gusto y recelo, pero como él era aún mayor que Yo asumí la tarea de aprender.

Cuando me pidió que retribuir, dije NO; yo no podía siquiera pensar en poner su polla en mi boca.

Pero, en una noche especial; creo que era mi cumpleaños, Pablo entró en mi cama y me dirigió a modo de quedar en una posición de cuchara con su espalda pegada en mi pecho, entramos en movimientos ricos y bruscos y acariciando su pecho desde atrás mis caricias, se sentían tan bien con el calor de su cuerpo a mi lado, ya que era en una fría noche de invierno, después de un tiempo, él me pidió que poner un poco de saliva en su ano y dirigió mi polla que estaba como hierro de tiesa para ese entonces y la dirigí a su sólido en su agujero trasero, lo que fue un regalo de cumpleaños sensacional el sentirlo como se abría a cada pequeño intento de incursión a ese agujerito virgo y bien cerrado!

Luego de aquello, nuestros encuentros sexuales eran un asunto de cada noche; muchas veces más de una vez, lentamente Paul me convenció para que le permitiera jugar con mi parte de atrás.

Era bueno en ello, nunca se obligó violentamente o duro, era tan cuidadoso, que yo no recuerdo haber sentido ningún dolor nunca.

Entonces aprendí a masturbarme con una polla dura en total plenitud dentro de mí trasero.

Ahora me doy cuenta de que todo, era un caso de sexual el hecho de dejarme abusar de Pablo al ser mucho mayor, en esa etapa cuatro años es mucho, pero como lo consentí y como lo gocé nadie lo puede reprimir; era sensacional.

Después de las vacaciones de verano, los hermanos de Paul; Alberto, Paulino e Ignacio; llegaron a vivir con nosotros; se instalaron en nuestra habitación, la habitación era grande, pero solo podía tener 3 camas dobles y por esta razón, dos tuvieron que compartir una cama, guardando mi cama solo para mí, los otros tenían sus cambios de acuerdo a su decisiones propias.

Días después, salió a la luz que habían estado cogiendo desde hace años.

Habían intercambiado favores sexuales en todas las combinaciones posibles, los dos mayores y el menor de ellos; fueron en gran medida en lamer y chupar, algo que yo nunca podría hacer.

Pero también estaba el meterse las vergas muy suavecito de forma que no se enteraran sus padres, pues todos ellos eran “muy machitos”.

Se mamaban, se cogían, se lamían, se dediaban y hacían cuanta maña sexual se les antojaba.

Ellos eran los típicos hermanos machos machos, con novias y todo lo de haber; que andaban juntos como una sola manada y cogían a cuanta chavala se les cruzaba.

Pero en la intimidad, eran un puñado de hermanos que sabían cómo acariciar al otro, cómo lamer el agujero del otro, cómo puntear el culito del otro, cómo besar al otro.

Después de un tiempo de compartir nuestro cuarto y ver, sentir y vivir juntos, nos acomodamos en parejas, tríos y cuartetos y como ellos solos decían con migo formamos y fuimos una orgía de hermanos y más.

Paulino y Alberto, luego Ignacio con paul, Yo y cualquiera de ellos que se sumara; no importaba quien era el más cercano a mi edad, todos teníamos ideas similares con respecto a lo oral y el coger, la edad, eso no importaba; que no les gustaba era lamer culos, pero sí lo especial era el mamar vergas.

Tuvimos muy buen sexo por varios años, con una duración hasta cuando teníamoa algunos veinte y séis años, para entonces Paul había dejado de ir a trabajar fuera de la ciudad, Ignacio regresó a la otra ciudad de su madre.

Paulino y yo tuvimos unos dos años de "felicidad" con nuestra propia sala de nadie lo sabrá y otra cosa; yo estaba disfrutando de tener una esposa, como Paulino, era más pasivo que activo; Cuando Alberto se fue, yo estaba en mi propia vida sexual marital, pero no los dejaba de visitar ni ellos a mí y nunca he tenido ningún nuevo contacto homosexual que no sean ellos, o ellos con migo.

Este es un relato enviado a mí por un lector, en relación a los nombres y esas cosas ya saben bla bla bla; por cuestión de proteger a los involucrados y demás.

Un abrazo, un beso a mi amigo y espero le guste como está diseñada su historia con nuevos nombres y demás.

Espero sus comentarios, está apegada lo más posible a la realidad.

LUDAVAGI

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