Esquina Cafe

Un café doble y una tostada

Deberías arriesgarte hoy

¿Debería yo arriesgarme hoy?

“Un café doble y una tostada”

Como lo esperaba

¿Qué más esperaba?

“Las almas destinadas a encontrarse no necesitan presentación” decía el titular de un artículo barato de revista juvenil. Siempre he sido una persona muy seca e insípida. Cuando alguna frase cursi se escucha salir de mi boca más de uno se siente aludido, ¿será que no soy capaz de amar? Pues tengo muy claro que amo a mi madre, a mi padre, a mi familia; pero nunca he sentido la locura producida por el amor romántico. Conozco a más de un amigo que ha realizado lo que yo llamaría una estupidez. Colgar carteles gigantes con alguna frase amorosa hacia “su alma gemela”, dejar de compartir con los amigos porque prefiere pasar todo su tiempo con quien es la fuente de su amor y otros capaces de dejar sus sueños por quedarse al lado del amor de su vida.

Pantalón azul, blusa blanca.

Nunca te había visto por aquí. ¡Ja! No es muy extraño. Cada día recibo a los mismos personajes.

1.El Doctor: Casado con dos hijos, una esposa trofeo y muchos ligues nocturnos.

2.El abogado: Soltero, un poco nerd, deja buenas propinas.

3.La maestra: Siempre está apurada, pero me saluda con una gran sonrisa

4.La estudiante: Nunca la he visto acompañada, muy solitaria, con ojos profundos y posee un aura que oculta algo.

Es un pueblo pequeño, hay 99% de probabilidades que cada persona que entre por esta puerta ya haya estado aquí anteriormente, aunque no nos visite cada día.

Pantalón azul, blusa blanca.

¿Te he visto?

No deja de sorprenderme.

Es la primera vez que quisiera acortar mi hora de descanso y ser yo quien tome tu pedido. Croassaint, huevos revueltos, chocolate caliente o quizás solo quieras un cigarrillo para poder soportar la dolorosa rutina. Veo tu boca moverse mientras mi compañero escribe. Tu voz, no la alcanzo a escuchar.

Pantalón azul, blusa blanca.

¿Te habré escuchado alguna vez?

El bullicio inunda esta pequeña cafetería, autos, voces, bocinas, el sonido de las máquinas de café. Bonita forma de iniciar la mañana, cada día, lo mismo, igual. Dicen que uno puede sentir cuando alguien le está viendo.

¿Lo sentirás?

Espero que no.

Hermosa sonrisa, supongo que todos se alegran cuando están recibiendo aquello que los saciará. Ojalá y conocerte sea tan simple como tu desayuno.

Un café doble y una tostada

¿Volverás mañana?

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ross.historias@gmail.com