Esposa Infiel… La nueva Jefa

La jefa de Patty pasó por caja

Esposa Infiel… La nueva Jefa

En la empresa habíamos ganado un proyecto nuevo, por lo que tenia que viajar a AQP, para una reunión con un cliente y dar el arranque del nuevo proyecto.

Mientras que estaba en la sala de embarque me encontré con Allison, con quien hemos coincidido en varias oportunidades cuando viajamos a AQP. La última vez quedamos en salir a cenar y tomar algo, la salude y conversamos un rato.

Subimos al avión y ubiqué mi asiento, primera fila lado pasillo, Allison estaba al lado de la ventana y una señora entre nosotros, le pedí amablemente que cambiemos de asiento y ella accedió.

Hablamos durante todo el vuelo; pero hubo mucha turbulencia, propia de la ruta y más en esa época del año, hasta que un fuerte remezón, hizo que Allison me clave la uñas en el brazo izquierdo, a la vez que gritaba de pánico.

La cogí suavemente de su mano, tranquila linda no va a pasar nada, relájate es normal, ya estamos cerca de nuestro destino – le dije, ella sólo movió la cabeza afirmativamente, pero evidenciaba su nerviosismo. El resto del vuelo la turbulencia fue incrementando, incluso ya no me sentía tan seguro, pero aterrizamos con normalidad.

Recogimos nuestras maletas y salimos de la sala, para poder tomar nuestras respectivas unidades, momento que aproveche para hacerle recordar lo de la cena y los tragos, ella acepto gustosa y me dio su número de celular, marque y ella grabo el mío.

¿Allison dónde te vas a hospedar? – pregunté, mi reserva es en el Hotel Yanahuara ¿y tú? – contesto, yo en el Dreams Hotel – respondí. Le ofrecí tomar un café y desayunar antes de hospedarnos, acepto gustosa.

Salimos del aeropuerto en búsqueda del Starbucks más cercano para tomar algo, aunque en el camino ubique una salchichería La Alemana y nos bajamos, procedimos a desayunar y seguir hablando, quedamos en encontrarnos para cenar y tomar algo. La dejé en su hotel y yo me dirigí al mío.

Como les mencioné con anterioridad hemos coincidido varias veces en viajes a AQP, para ser más preciso en 6 ocasiones, Allison es rellenita, de 1.65 m y de cabello castaño claro, impresionantes ojos marrones claros, un buen trasero, de poco busto, siempre bien arreglada y de buen trato.

Me instale en el hotel, me cambie y fui a la oficina, hable con Paola, mi asistente para que me ponga al tanto de los detalles de la reunión, para variar mi reunión y visita programada habían sido canceladas, por problemas del cliente. Me quede viendo varios temas, luego de un largo día, ya con la noche en ciernes, invite a Paola a cenar, ella no acepto por una reunión en el colegio de su menor hija (había olvidado mi cita con Allison)

Llegué al hotel y fui a mi habitación, necesitaba un buen baño, después de salir de la ducha la llame al celular de Allison, me dijo que estaba llegando al hotel y que había un tráfico para el olvido en el centro de AQP, efectivamente AQP no deja nada olvidar a Lima la gris con su tráfico en horas punta.

Al rato, Allison me llamo y quedamos en encontrarnos en el Real Plaza para de hay definir a donde nos movíamos. Llegue con tiempo al punto de reunión, me sorprendió cuando me tocaron por el brazo, era Allison (había llegado antes), nos saludamos luego de una breve charla para decidir donde íbamos, acordamos y nos dirigimos a El Gaucho, donde despachamos una buena carne con su respectiva botella de vino y larga tertulia.

Lunatacas, ¿qué te parece si vamos a otro lugar a tomar algo y con buen ambiente? Nada de baile por si acaso – me dijo Allison, ¡música para mis oídos! (pensé); conozco un sitio bastante agradable, ¿si es qué te gusta el rock? – conteste, claro que sí – me respondió.

Nos fuimos a la Casona Forum, entramos al Zero Pub y pedimos un par de Erdirger para empezar otra larga tertulia, conversamos de muchas cosas sobretodo de nuestros asistentes, ella se quejaba de “su asistonta” (después descubriría que era Patty mi ex)

Cerveza tras cerveza hizo efecto en Allison, estaba picada y reía por todo, Lunatacas, seria mucho pedir que me lleves a mi hotel – me dijo sonriente, claro no hay problema – conteste. Pedí la cuenta y salimos del local rumbo a su hotel.

En el taxi se me pego más de la cuenta y apoyo su cabeza en mi hombro.

Llegamos a su hotel, la acompañe para que ingrese y se despidió de mi con un sonoro beso en la mejilla, quedamos el almorzar al día siguiente.

Estuve en la oficina atendiendo varios asuntos, Paola estaba muy retrasada con la documentación, a eso de las 11:00 Allison me llama para coordinar el tema del almuerzo, quedamos en vernos en El Manta en un par de horas.

Efectivamente, almorzamos y continuamos con la tertulia post almuerzo, acompañada de varias cervezas, me conto que era divorciada pero que tenía pareja estable, un señor mucho mayor que ella, eso me dejo un inquieto.

En fin, salimos del local con rumbo a su hotel, pero caminando y conversando,  sabes una cosa Lunatacas, eres diferente a otros hombres, no estas en modo cacería  – me dijo, ¿por qué debería estar en modo cacería? – respondí, es que es lo que me pasa cada vez que conozco a alguien, cree que estoy necesitada de hombre y ya me quiere llevar a la cama – contesto; hummmmm es difícil resistirse eres una mujer muy guapa y además estas muy bien como para no fijarse en ti – le conteste.

Llegamos a su hotel, me miró, Lunatacas, te molesta si te invito otra cerveza, sólo que acá no te venden ¿qué te parece? – pregunto Allison, claro – respondí

Me parece a ver visto que en tu hotel tienen un barcito y hay podemos conversar mejor, déjame sacar unas cosas y nos vamos para allá – exclamó Allison, sí, hay un bar – conteste.

Demoro 5 minutos y bajo, con un bolso de mano, ya estoy lista, ¡vamos! Ya en el bar del hotel, pedimos unas cervezas y seguimos “quejándonos” de la vida y comenzaron las preguntas de rigor:

¿Lunatacas, cuanto tiempo tienes de separado? – más de 2 años, respondí.

¿Fue una separación en buenos términos? – no para nada, pero no quiero hablar de eso en estos momentos.

¿cuántos hijos tienes? – una pareja; ah yo tengo dos nenas.

¿Tienes pareja actualmente? – si, se llama Elizabeth.

¿Te llevas bien con ella? – de maravillas.

¿Has tenido alguna aventura con otra mujer? – (difícil situación) sí, no soy un angelito, respondí sonriente.

Uy, las apariencias engañan – manifestó Allison,

¿A qué te refieres con eso? – no pareces de esos- respondió, a la vez que bajaba la cabeza y cogía su celular.

Jale mi silla para sentarme a su lado, levante su rostro suavemente mira preciosa no estoy buscando nada, la estamos pasando bien y no quiero arruinar una creciente amistad por una tontería – le dije, a la vez que le quitaba el celular de la mano y se lo cambiaba por una cerveza.

Bebimos un par de cervezas más, en silencio, ella estaba como ida, en eso se me acerca, Lunatacas no tengo nada que perder contigo – me dijo, acercando su rostro al mío con los ojos cerrados, entendí lo que quería y la besé suavemente, nos besamos largo rato.

La hale por la mano y nos dirigimos a mi habitación, Allison dio el segundo paso, me saco la camisa, luego el pantalón, no me hice de rogar y comencé a desvestirla, ambos en ropa interior, ¿Lunatacas no lo tomes a mal te parece si nos damos un duchazo?, tomados de la mano ingresamos al baño.

Desnudos dentro de la ducha, aprecie su cuerpo, acaricie su piel suave y note ese par de nalgas, enormes, regordetas, nada mal a la vista, un pubis cubierto por un pequeño mechón dorado, sus tetas pequeñas y de pezón rosado e hinchado, su respiración era entrecortada, síntoma de la excitación que tenía. Allison me agarro la verga y me halo hacia ella para besarnos nuevamente.

Salimos de la ducha envueltos en toallas, la tire en la cama acomodándole las piernas de tal forma que me permitía colocar mi rostro en su entrepierna.

Tomé una fotografía mental de su vulva, hermosa vulva, pequeña, en forma de almeja, humedecida y recién lavada, hundí mi lengua en su interior y comencé mi laboriosa sopeada, lamía, untaba de saliva su interior, succionada su clítoris, lo lamía, volvía a meter mi lengua en su interior. Allison emitía pequeños quejidos casi imperceptibles; no me detuve, por momentos bajaba a su perineo y lo besaba, lamía y chupaba, sintió la pegada cuando le di un beso negro, dejando ensalivado su arrugado ano, se notaba que no había usado esa ruta y no me equivoque.

Estuve entretenido en su vulva y ano buen rato, hasta que ella me hizo a un lado, Lunatacas ahora me toca a mi – mirándome pícaramente, saco un preservativo de su cartera, se lo puso en la boca y con la agilidad propia de una kinesióloga comenzó con la mamada de rigor, ufffff, esta señora si que sabe su negocio, ufffff, engullía, lamía, ensalivaba, me acaricia los testículos, hizo garganta profunda sin chistar ni ahogarse, me dejo en el limbo, casi me vengo, tuve que detenerla para no venirme en su boca.

¡Lunatacas que verga tan venosa tienes! Espero que este a altura nada más – dijo Allison, solo sonreí.

Me eche encima de ella, a lo misionero, mi verga entro sin dificultad, ahhhhhh – exclamo Allison, comencé el bombeo poco a poco, sentía apretado y el calor que irradiaba su interior, ella cruzo sus piernas por encima de las mías y nos besamos, un beso que pareció eterno, Allison se mueve muy bien, parecía que me estaba ordeñando la verga, ufffff éxtasis total, cogimos un ritmo acompasado y disfrutamos del momento, ella solo se limitada a gemir.

Luego de un rato en esa posición, la voltee a manera de cucharita, la penetre, ahhhhhh, ¡Lunatacas que rico! Hummmmm, gire su cabeza para besarla con facilidad e incremente el movimiento de mis caderas, las que chocaban con sus robustas nalgas, ahhhhhh, sigue, ahhhhhh, no te detengas, ahhhhhh, dale, ahhhhhh, dale – exclamaba Allison a cada embestida. Agarraba sus tetas en cuanto podía me las llevaba a la boca para chuparlas y lamerlas.

Allison se acomodo sobre mi, cogió mi verga y se la clavo de un solo golpe, ahhhhhh, así esta mejor, ahhhhhh, que bien se siente, ahhhhhh, hummmmm que rico, ella impuso el ritmo, primero apoyada sobre sus rodillas y ayudada con sus manos para darle armonía y luego se cogió de mis manos y digamos que de cuclillas comenzó a subir y bajar, ahhhhhh, hummmmm, ahhhhhh, hummmmm, que rico, solté sus manos para tomarla por la nalgas y hacer un movimiento más rítmico, ahhhhhh, sí, sí, sí, ahhhhhh, ¡yaaaaaaaaaaaaaaaaaa!, Allison se dejo caer sobre mi pecho con la respiración entrecortada, note que había alcanzado el clímax de su primer orgasmo, busque sus labios para besarla,

No le di tiempo para descansar, la rodeé con mis brazos y comencé a bombear con fuerza, ¡espera! ¿Lunatacas no seas malo! Recién acabo de llegar y estoy muy sensible – reclamo ella; hice caso omiso y continúe, esta vez tratando de que sus tetas queden a mi disposición y poder mamarlas, chupetearlas y morderlas a placer. Ella se recupero rápido y se apoyo otra vez en mi pecho para empezar a mover sus caderas con fuerza, la veía morderse los labios, ahhhhhh, ahhhhhh, sí, sí dale, dale, ahhhhhh, poco rato después, ahhhhhh, sí, sí, sí, ahhhhhh, ¡yaaaaaaaaaaaaaaaaaa!, alcanzó su segundo orgasmo y se desplomo sobre mi.

Nos besamos, ella estaba muy agitada, suavemente se recostó en la cama boca arriba, momento que aproveche para cogerla por las piernas y levantarlas, coloque mi verga en la entrada de su vulva y sin mediar contemplaciones se la hundí hasta la raíz, ahhhhhh, ahhhhhh, espera, ahhhhhh – reclamo Allison, para comenzar a bombear con fuerza, podía sentir como mis testículos chocaban contra sus nalgas. Me entusiasme y le di a mi antojo, ella comenzó a coger sus pezones y manosearlos, su cara era de lujuria absoluta, sigue así papi, sigue dame duro, dame, así sigue papi – exclamada muy excitada Allison, la bese, casi me arranca el labio de la mordida que me dio, aguante, embistiendo con más fuerza, así papi, sigue dame duro, dame, así papi, sigue papi – exclamaba Allison, puse sus piernas a un lado y seguí bombeando, comencé a sentir esa descarga eléctrica recorriendo mi espina dorsal, obligándome a arquear la espalda para sentir las descargas en el final de mi verga… ufffff, por cada contracción salía un chorro de semen, me desplome sobre Allison.

Ella me acariciaba el cabello, Lunatacas no se te ocurra salirte de mi, quédate como esta, ¡quédate donde estas! – dijo imperativamente, no tenia ni ganas de moverme, así que asentí con la cabeza.

Descansamos un rato, me levante para tomar un sorbo de cerveza, ella me pido que le invite le alcance la botella, brindamos por lo acontecido y reímos, me jalo hacia ella para estamparme un jugoso beso, nuestras lenguas se entrelazaron y lucharon mutuamente.

Lunatacas quiero seguir gozando, si necesitas ayuda te puedo dar un incentivo – me dijo mirándome fijamente a los ojos; no preciosa no necesito ayuda para satisfacerte – acote. Dicho esto, me saco el preservativo y se metió mi verga en la boca, succionando con fuerza, me dejo impávido y me causo un poco de dolor, se esmero demostrando que sabia lo que hacia, succiono mis testículos uno por uno, en un par de minutos estaba totalmente empalmado y listo para el segundo round, dejo mi verga limpia y lustrosa; d el velador cogí un preservativo para dárselo, lo rechazo, ¿qué pasa? Le dije, no Lunatacas quiero tu leche dentro de mi, sentir como te vienes y me llenas mi coñito con tu rica leche – acoto Allison.

Acto seguido se monto sobre mi, con su mano dirigió la cabeza de mi verga hacia la entrada de su vulva, clavándosela de golpe, ahhhhhh, sí, ahhhhhh, sí, sí, sí, ahhhhhh, ¡que rico! – exclamo Allison, fue incrementando el ritmo, ufff, que tales movimientos de cadera, en su ímpetu mi verga se le salió, estrellándose contra su muslo, lo que me arranco un quejido de dolor. Lo siento Lunatacas no fue mi intención, discúlpame – me decía, mientras yo me cogía la verga tratando de aliviar el dolor ocasionado por el golpe que acababa de recibir. Ella se puso de costado a cuatro patas y acariciaba mi verga suavemente para llevársela a la boca y comenzar a lamerla suavemente, le daba piquitos y acariciaba mis testículos; mientras le tocaba las nalgas, suaves, tersas y blancas, con una marca de bikini (imagine que había estado en la playa o tomando sol)

Me incorpore y dejándola como estaba, me posicione detrás, puse mi verga en la entrada de su vulva y de golpe hasta el fondo, ahhhhhh, ¡Lunatacas despacio! hummmmm, ahhhhhh, sigue Lunatacas, dame duro, ¡cáchame! Estando detrás pude apreciar en su magnitud ese hermoso culo blanco, con una pera casi perfecta, sus nalgas ondeaban en cada embestida, ella solo resoplaba y gemía a más no poder.

Con las variantes respectivas del perrito, de rodillas, con una pierna, con ambas en el aire, le di buen rato, ella seguía gozando, bueno ambos gozábamos, me agarraba fuerte por sus caderas, entraba y salía, jugueteaba con su vulva, con sus jugos me embadurnaba los dedos y se los ofrecía para que me los chupe, ufffff, era la gloria. Momentos en que me percato que no había “atendido” su ano, ese arrugado ano, me “miraba” preocupado por la desatención, pose mi mano en una de sus nalgas y mi pulgar hizo el embate en su ano, Allison reculo inmediatamente y se retiro, sentándose para cubrirse con la almohada. ¿qué paso? – pregunte, estas loco Lunatacas, por ahí no, ni hablar, ni a mi marido le permito eso – reclamo Allison; ¿espera no has tenido sexo anal? – pregunte, no y no tengo la más mínima intención de tenerlo, dicen que duele como mierda – contesto sonrojándose.

Esta bien, no te preocupes, no voy a hacer nada que tu no quieras, acto seguido le quite la almohada, la bese, alce sus piernas me las puse al hombro, ella entendió la situación, su mano atrapo mi verga y la coloco en su vulva, suaz de golpe hasta el fondo ahhhhhh, Lunatacas, no seas tosco, ahhhhhh, eres un bruto – reclamo airadamente en cada embestida que le daba.

En esta posición pude sentir más su estrechez, ajustaba de manera agradable, sentía mas calor en su interior y fue alucinante, ufffff, embestida tras embestida Allison resistió todo, por momentos agarraba con firmeza la almohada, por momentos las sabanas o simplemente se retorcía de placer, con ambas piernas en mis hombros, luego las dos en uno solo, un par de veces ella las sostenía con sus brazos, apoyaba sus pies en mi pecho, tenía mucho aguante, ambos disfrutábamos de nuestro momento.

Me acerque a ella para besarla y sentir sus labios, cuando, ahhhhhh, ahhhhhh, sí, sí dale, dale, ahhhhhh, poco rato después, ahhhhhh, sí, sí, sí, ahhhhhh, ¡yaaaaaaaaaaaaaaaaaa!, alcanzó otro orgasmo, libere sus piernas y me eche sobre ella, sin sacarle mi verga, bombeaba suavemente, y le chupaba las tetas, mi lengua jugaba con sus pezones uno a la vez, ahhhhhh, sí, que rico, ahhhhhh, sí, sigue así, hummmmm, ¡que rico! – exclamaba Allison.

Recogí sus piernas sobre su pecho y comencé a embestir con fuerza, ufffff, dándole y dándole, sin descanso, estábamos ensimismados y contagiados del mutuo placer que nos dábamos.

Lunatacas, déjame pararme al borde de la cama – me sugirió Allison, me pare en el acto, ella se paro y apoyo sus manos sobre la cama, apunte y adentro, ahhhhhh, así, ahhhhhh, ¡qué rico! Muévete, muévete, dame duro, me agarre por sus hombros y la embestía fuerte sin piedad, como se dice, ufffff momento divino. El panorama de sus ondeantes nalgas en cada embestida era alucinante, ufffff.

Variamos, una pierna levantada, agachada, parada, oportunidad para acariciar su mechón dorado y amasarle las tetas, volteaba su cara para besarla, ahhhhhh, ahhhhhh, sí, sí dale, dale, ahhhhhh, poco rato después, ahhhhhh, sí, sí, sí, ahhhhhh, ¡yaaaaaaaaaaaaaaaaaa!, un nuevo orgasmo, esta vez le flaquearon las piernas y se tendió sobre la cama; la seguí y sin dejar de bombear le di, Lunatacas no seas malo, deja que me recupere, ahhhhhhhh, por favorrrrrrrr, ahhhhhh, nooooo, ahhhhhh, sí, ahhhhhh, sí ahhhhhh, dale, ahhhhhh, poco rato después, ahhhhhh, sí, sí, sí, ahhhhhh, ¡yaaaaaaaaaaaaaaaaaa!, otro orgasmo, menuda niña me resulto, luego me confesaría que era su pose favorita ya que por ser mas sensitiva la hacia gozar a caudales.

Estando sobre ella, la recogí para atrapar sus tetas y hacerla gozar más, ella encogió una pierna y nos entregamos mutuamente, ufffff, su mano bajo hacia su entrepierna y se auto estimulaba con firmeza, ahhhhhh, ahhhhhh, ¡Qué rico! Ahhhhhh, dale cariño, no dejes de moverte, su rostro giro y mordisqueaba el lóbulo de mi oreja izquierda, ese estimulo no fue extraño, ya que sentí como la electricidad baja por mi espalda para terminar descargando mi semen en su interior, ufffff, ufffff, arghhhhh, Allison apretada o contraía sus nalgas tratando de sacarme todo el semen que le fuera posible, escuchando sólo un sí, ahhhhhh, ¡yaaaaaaaaaaaaaaaaaa!, me desplome sobre ella y ella a su vez se desencajo, habíamos alcanzado el orgasmo junto quedando totalmente extasiados.

Aquella fue una larga velada, con juegos y manoseos, nos quedamos dormidos, por la mañana siento que Allison me daba una mamada de verga y nos metimos un polvo mañanero, disfrutamos los otros 3 días de sexo.

Por cierto, me costo y mucho, me di el gusto de romperle el culo, pero eso es motivo de otra historia.