Espiando a mi abuelo

Espiando a mis abuelitos

Cada mes paso por lo menos un fin de semana en casa de mis abuelos maternos, El se llama Pablo de 68 mide como 1.70 de complexión muy robusta, bueno mas bien gordito, muy barrigón con el cabello completamente blanco, gruesa papada, cejas y bigotes tupidos blancos y ella Daniela de 57 como de 1.58 flaquita un poco morena a comparación de el que es muy blanco.

Son muy buena gente pero extremadamente estrictos, yo tengo 16 soy creo una chica muy tranquila, digo creo por lo que les voy a relatar.

Mi abuelo a pesar de ser gordo y canoso; es muy atractivo en su trato; fue diplomático en Europa cuando joven, eso le dio la oportunidad de tener una buena preparación intelectual y por ello vive muy cómodamente. Tiene una mirada muy varonil pero le gusta mucho beber.

Un día salí temprano del colegio, la maestra estaba enferma y nos dejaron salir horas antes de lo normal por lo que me dirigí a la casa de mis abuelos, al llegar la puerta estaba cerrada por dentro, cosa que me extraño porque no era común; me fui por el jardín trasero hasta llegar a un pasillo que conecta con la cocina y me meti por una ventana que en mis travesuras me había servido para entrar a la casa sin ser vista.

Todo estaba en calma, pense que no había nadie, subi las escaleras y conforme me acercaba al cuarto de lavado escuchaba algunos murmullos que me parecieron muy extraños por lo que con mucho silencio termine de subir y me acerque a la habitación, la puerta estaba entre abierta, me acerque y espié por la ranura de la puerta, quede realmente congelada por lo que estaba pasando adentro de el cuarto de lavado, la señora Julia una mujer viuda que 2 veces por semana lavaba y planchaba la ropa de la casa estaba sobre la meseta en cuatro patas, mi abuelo le lamia el culo al mismo tiempo que le metia los dedos por su cuca peluda, nunca había visto otra cuca mas que la mia, pero sobre todo nunca pense que mi abuelo le hiciera eso a la lavandera, ¿y mi abuela donde esta?, ¿qué pasa si entra?, pensé y me acorde que ese día tenía que pasar a cobrar su pensión al banco y después haría algunas compras.

En ese momento regreso la mirada y mi abuelo se esta quitando la camisa dejando a la vista su blanquísima y velluda espalda, solto su cinturón y dejo caer su pantalón junto con sus calzoncillos, nunca habia visto las nalgas de mi abuelo, eran blanquitas y muy llenitas, donde termina su espaldota y comienzan sus nalgas estaba lleno de pelos que se arremolinaban y bajaban entre las nalgotas blancas, la señora Julia se bajo de la meseta y se coloco de cuatro patas apoyándose en una silleta, sus nalgas tenían estrías y se le notaba la celulitis, tenia el culo y la cuca brillosas como mojadas, mi abuelo se inclino para seguir lamiendo, ¡caracoleess! Como imaginarme que mi abuelo tuviera esas monstruosidades entre las piernas, al esta inclinado entre sus piernas colgaban dos enormes y negros huevotes, realmente tremendos, me quede pendeja de la impresión, no lo podía creer, ese viejito tan diplomático y tan estricto, tan "escrupuloso" que no me dejaba ni eruptar o decir algun chiste o sentarme mal para comer, estaba lamiendo el culo de la lavandera con sus huevotes colgando libremente badajos, sus nalgas blancas estaban muy abiertas dejando ver su negrusco y peludo culo, la parte interna de sus nalgas era tambien muy negrusca y a mendida que bajaba la mirada a sus huevotes colgantes su piel era mas negra y peluda, sin embargo sus huevotes no tenian pelos negros, solo blancos, la señora Julia decia muchas cosas, algunas no las entendía y otras si, que eran palabras muy obsenas como: que cabron ya cojéeme, cojéeme no aguanto papito, dame tu verga yaaaa, damela, damela, mmmm aaaaah, los dedos de mi abuelo entraban y salian de la cuca mocuda con mucha rapidez mientras mi abuelo le pasaba la punta de la lengua en el culo, com la otra mano le pellizcaba los pezones, ella tenia unas tetas enormes, mi abuelita no estaba muy dotada de tetas.

Mi abuelo se paro y le dijo es hora de mamar verga puta de mierda, y le solto dos cachetones en las nalgas, la jalo del pelo como si fuera una mujerzuela y de otro jalon la tiro al suelo, ahora a mamar verga puta, mama,,,chupa mi verga que ya te quiero coger, la mirada de la lavandera estaba perdida de la lujuria, por la posición solo podia ver los huevotes meciéndose por los movimientos de la boca de la mujer, era un espectáculo increíble para mis ojos, El la tomo del pelo y le jalaba hacia el, ella comenzó a toser y a esgarrar como queriendo vomitar y se levanto un poco asustada, el le dijo con violencia,,, puta de mierda, no que querias comer verga, toda la semana estuviste chingando que te meta la verga y ya que te la doy te estas ahogando,,, giro levemente y pude ver la razon de la asfixia de la lavandera, mi abuelo tenia colgando una tremenda verga negrusca y venosa, muy brillosa yo creo que por las babas de la mujer, ¿cómo se pudo meter ese enorme tubo en la boca? ¿a que sabrá? ¿cómo puede mi abuelo esconderse esos huevotes y esa verga debajo de sus pantalones?, realmente nunca me había fijado de ello, el comenzó a restregarse la vergota con su mano derecha subiendo y bajando un pellejo arrugado que tiene, mientras que con la izquierda acariciaba a la mujer que aún no se reponía de ahogamiento, ella volteo y comenzo a besarlo, al verlos en esa posición me senti furiosa por mi pobre abuelita, ¿qué diría si supiera de esto?, el masajeba las tetotas de la mujer y ella le acariciaba los huevotes, La señora julia se acosto boca arriba sobre la meseta y le dijo, me clavas de una vez o te arranco los huevos a mordidas, ya no aguanto papito dame tu verga pero yaaaa,,, yo estaba atrás de mi abuelo, vi como se subio, tomo las piernas de la lavandera y las separo totalmente, yo solo veia los huevotes colgados meciéndose entre las piernas de mi abuelo, sus nalgas se arrugaron y su cadera se inclinó hacia delante, y empujo su cuerpo sobre la mujer que lanzo un gruñido como de perra, al mismo tiempo que mi abuelo suspiraba, comenzo a moverse mi abuelo subiendo y bajando sus nalgotas, coloco cada pierna de la mujer en sus brazos abriendole las piernas mas y mas, los negros huevotes de mi abuelo se estrellaban con el culo de la mujer cada vez que el subia sus nalgas y las empujaba, hasta ese momento me dí cuenta y conocí por primera vez lo que es una cogida, le había metido su vergota por la cuca, yo había escuchado en el colegio comentarios de esto pero no tenia ni la remota idea de cómo era en realidad.

Mi abuelo estuvo clavándole la verga a la lavendera por unos minutos mas, sus huevotes al estrellarse cada ves en la cuca de la señora, había formado una espumilla que se escurría por la raja del culo de la señora Julia que gritaba y sollozaba como una loca, mi abuelo le saco la vergota que estaba tremenda, su cabezota estaba morada y brillosa, se le notaban unas venas gordas hasta sus huevotes, en el grueso tubo habia una especie de moco blancuzco que le escurria por la cuca palpitante de la lavandera, mi abuelo le dice ,, vamos putita, ya te veniste tres veces ahora me toca ami, ponte de culo que te voy a llenar el culo de leche, yo no entendía que pasaría pero estaba atenta, nuevamente mi el gordo anciano le tomo del cabello y la obliga a bajar, le grita ¡vamos puta, vamos puta a coger coño, vas a tener mi leche como querias,, ya estas bien cogida y te vo a dar tu remate puta,,, ponte como lo que eres...una perra! la mujer se puso de cuatro patas mi abuelo detrás suyo, su verga muy gruesa le colgaba mientras se acercaba a la mujer, le dijo, apoyate con tu cabeza y abrete el culo que no te quiero sangrar como la ves pasada,,, si mi amor, como digas pero ya bañame con tu leche, dame tus mocos, me muero por tu leche viejo de mierda,,, coloco su cabeza en el suelo apoyándose y con sus manos se abrio las nagas, su culo se abrio como una cueva, pero era imposible para mi pensar que la enorme tranca de mi abuelo le entrase por su ojete, la cabezota amoratada de su verga la escupio y la coloco en el culo de la lavandera, eso si lo pude ver, lo siguiente fue como un rayo, su verga se hundio y desaparecio dentro del culo de la señora Julia que empalideció y se retorció ahogando sus gritos con los calzoncillos de mi abuelo en su boca, la negros huevotes de mi abuelo colgaban y escurrian la espumita que le salia a la mujer de su cuca, ya que cuando el le metia su palo con fuerza sus huevotes se estrellaban en la cuca de la mujer, mi abuelo en minutos se retorcia tambien enterrando sus dedos en las celulíticas nalgas de la lavandera, le empujo unas tres veces mas su verga en el culo y en la ultima se quedo quieto, sus huevos subian y bajaban, la mujer se retorcia y le dice como aterrada, sacamela,,, sacamela que me cago, me cago, me sacaste la mierda, esa puta verga me rompió las tripas, ten piedad que me mata el dolor, el abuelo se acomodo y de un jalon le saco la vergota hinchada, segundos después puaggg, puafffggg le escurre un liquido apestoso y viscoso con manchas de sangre del culo, el cuarto se minó rápidamente del hedor a mierda, mi abuelo tenia la verga aun tiesa y la hizo lamérsela, ¡hora puta, limpia la verga de tu macho, ya me cagaste la verga y ahora la limpias con tu lengua de putaaaa,,, ella le mamo la verga hasta que quedo flácida y colgada, pero limpia completamente.

Yo me escabulli y me salí nuevamente por la ventana de la cocina, espere unos minutos y toque la puerta de entrada como si acabará de llegar.