Esclavo de mis vecinos. (capítulo 26)

CAPITULO 26

(se recomienda leer los anteriores)

En la otra cama aun seguían follando mi Ama y su amigo, mi Dueña ya había tenido varios orgasmos pero aún seguía con ganas de más y le cabalgaba de manera frenética.

-          Jorge, le dijo mi Ama, si quieres puedes correrte dentro de mi o en la boca de mi esclavo, donde más te apetezca y como quieras, solo tienes que decirlo.

-          Voy a correrme en la boca de tu perro Merche, me apetece que sea ahí.

-          Perro, prepara tu boca para la polla de mi amigo que quiere correrse en tu boca, me dijo mi Ama.

El aun siguió unos minutos más follando a mi Dueña, pero enseguida hizo que se bajara mi Ama de encima suya, agarro mi cabeza y metiéndome la polla en la boca empujo mi cabeza de manera que casi me daban arcadas para empezar a soltar dentro de mi boca chorros de su leche hasta que termino de correrse, la saco cuando ya empezaba a ponerse algo más flácida.

-          No te preocupes Jorge, le dijo mi Ama, ahora te la limpia, ven recupera un poco el aliento y serénate, limpiarnos a los dos es una de las obligaciones que le ha enseñado Chema.

-          No me extraña ahora todo lo que me había contado Chema sobre vuestro esclavo, tenéis que estar contentos.

-          Estamos muy contentos con él y el con nosotros, que es importante, nos satisface mucho, nos hace la vida más cómoda y sencilla, nos tiene la libido a tope como te he dicho antes y nos ha hecho experimentar cosas que soñábamos, deseábamos y que nunca se había dado el momento y aun menos la persona.

Entonces mi Ama chasco sus dedos y me indico su coño, yo metí mi lengua en él y comencé a tragar la corrida del Señor y los flujos de mi Dueña, le limpié todo el coño, los muslos y se dio media vuelta para que le limpiase el culo.

Cuando termine mi Ama se encendió un cigarrillo y me dijo.

-          Ahora limpia a mi amigo, lámele toda su polla bien, sin restos debe quedar y después especial atención a sus huevos y culo que le gusta que tu lengua pase por ahí.

Me metí su polla ahora ya más flácida en la boca y la limpie entera dándole varias pasadas por el glande, después el tronco y después sus huevos, los lamí y me los metí en la boca, los deje limpios, entonces mi Ama le indico que se voltease un poco para darme acceso a su culo, él lo hizo y le lamí todo el culo pasado le la lengua por su raja de manera profunda.

El Señor Jorge quedo muy contento y así se lo hizo saber a mi Dueña, comentándole que le encantaban todas las perversiones que ellos practicaban.

Allí se quedaron relajándose un rato y bebiendo la copa que les había preparado.

-          Por lo que veo también le aplicáis la disciplina necesaria para un esclavo, lo digo por las marcas que lleva, le comento su amigo.

-          Claro, por supuesto, es parte de su adiestramiento, además yo personalmente he descubierto el placer de azotar y castigar, de que entregue su dolor como ofrenda de mi placer, él es capaz de sacar mi lado más sádico, ese que desconocía que tenía.

No te has fijado también en las marcas de propiedad que lleva en su piel hechas a fuego?

Es una de sus más emotivas ofrendas.

-          Si que es cierto, no me había fijado, es increíble, todo es muy excitante, me gustaría presenciar una sesión tuya con él, verte en acción.

-          Y no te gustaría más probar tu?, supongo que serias un Amo muy bueno.

-          Nunca me lo he planteado, pero no digo a nada que no, algunas cosas sí que me excita el pensar en probarlas.

-          Como cuales Jorge? le dijo mi Ama bebiendo un sorbo de su copa.

-          Bueno alguna de ellas era que me comiese el culo y los huevos y ya lo ha hecho, también Chema me conto que su esclavo bebe su orina, que el mea en su boca y el la traga, suena excitante y desde luego lo que te he dicho antes de follarmelo, follar ese culo y que obedezca me parece excitante.

-          Perdonen Ama Mercedes y Señor Jorge, mi Ama me ha ordenado ir a la cocina y prepararle un gin tonic a ella y otro a Amo Chema, desean ustedes que les prepare algo?, les pregunto Lucia por orden de su Ama.

-          Ya sabes dónde está todo putita? le dijo mi Dueña.

-          Si Ama Mercedes, antes Dani me enseño donde estaba todo y como prepararlo, espero hacerlo bien.

-          Lo harás bien perra, yo quiero otro gin tonic, tu Jorge, quieres tomar algo?

-          Si, por favor, otro para mí, le dijo el Señor Jorge.

Lucia se fue hacia la casa a preparar las bebidas y vi como mi Amo se levantaba de la cama y se iba a la piscina a darse un baño.

-          Siguiendo con lo que me decías Jorge, algunas de esas cosas que deseas las puedes hacer cuando quieras, solo debes decírmelo y mi perro gustosamente y complacerá, ya te he dicho que es muy obediente y sabe cómo proporcionar placer.

-          Que cosas podría hacer Merche?

-          De lo que me has dicho, todo, follartelo o darle tu orina para que se la beba, ya no se si deseas algo más que aun te guardas, si es que deseas tu azotarlo o alguna otra perversión que tengas en mente.

-          No sé, quizás estaría bien eso de azotarlo, no sé, el ver cómo es humillado me pone con deseos de humillarlo yo, me excita.

Entonces mi Ama sonrió y quiso hacerle una demostración a su amigo.

-          Esclavo ven, me ordeno mientras ella se sentaba en el borde la cama con su amigo bien atento a todo.

Me puse de rodillas frente a ella.

-          Abre la boca, me ordeno mi Dueña.

-          Si mi Ama, le respondí y lo hice.

Ella acerco un poco su boca y escupió en la mía, se giró para ver la cara de su amigo que era de asombro.

-          Como veras mi perro aún no ha cerrado la boca, espera por si deseo escupirle más, le dijo a Jorge.

Entonces me escupió un par de veces más en la boca y después una más fuera de la boca, fue a parar a uno de mis ojos, ella con un dedo empujo esa saliva por toda mi cara hasta mi boca, yo seguía con la boca abierta y llena de su saliva.

De nuevo mi Ama se giró y vio con una sonrisa la cara de su amigo.

-          Cierra la boca y traga perro, me ordeno y así lo hice.

-          Gracias mi Ama, le dije

-          Esta sabrosa perrito?, me dijo acariciándome la cara.

-          Muy rica mi Ama, como todo lo que viene de usted.

En ese momento ella me levanto un poco la cara y me dio dos bofetones fuertes en la cara, yo no los esperaba y casi acaban conmigo en el suelo.

Se me quedo mirando y de nuevo me dio otros dos bofetones también fuertes.

De nuevo se giró y miro a su amigo.

Me puso la mano frente a mi boca y yo la besé con adoración y le agradecí las atenciones que recibía de ella.

-          Esclavo, mi buen amigo Jorge desea follarte el culo, quizás hoy no lo haga, porque tal vez no es el día más indicado, pero otro con más calma vendrá para que le hagas una buena mamada, se la pongas bien dura y entonces follarte el culo, a mí me complace mucho esa idea y estoy deseando que llegue ese día, verdad que a ti te apetece que lo haga?

-          Por supuesto mi Ama, si a usted le complace yo estoy deseando que me use como quiera hacerlo.

-          Como veras Jorge mi esclavo es muy puta y le encanta complacerme.

-          Si mi Ama.

-          Pues así lo haremos, vendré un día con más calma y poder disfrutarte perrito, dijo su amigo Jorge.

-          Pues a la espera de que llegue ese día, dijo mi Ama, creo que después de lo que ahora ha visto Jorge, quizás quiera darte alguna hostia o escupirte en la boca para que lo tragues, así que ponte a su disposición por si quiere hacerlo besándole los pies y rogándole que te use como quiera, vamos perro obedece.

Como veras Jorge disfruto mucho humillándole y el a su vez disfruta cuando lo humillo, ambos nos damos placer, pero siempre soy yo quien decide todo, lo mío y lo suyo.

Le di la vuelta a la cama y fui hasta la otra parte donde reposaba el Señor Jorge, cuando llegue a la altura de sus pies me incorpore un poco y se los bese y lamí con devoción, se le notaba que disfrutaba viéndome humillarme ante él, seguí besándole y lamiéndole los pies un buen rato y después me puse a su lado de rodillas, a la altura de su cabeza y humildemente le dije que le rogaba y suplicaba que me usara para su placer como quisiera, que era deseo de mi Dueña que me pusiera a su disposición y así lo hacía con placer de obedecerla por mi parte.

El volvió su cabeza hacia donde yo estaba y sonriendo me dijo.

-          Besa mi polla perro, solo besarla.

-          Si Señor Jorge, le dije y le di unos besos sobre su flácida polla.

-          Besa también mis huevos.

-          Si Señor Jorge, le respondí besándole los huevos.

-          Lámelos un poco perro.

-          Si Señor Jorge, le dije haciendo lo que él me ordenada.

Él se animó bastante al ver mi disponibilidad y mi obediencia, así que me ordeno ponerme otra vez de rodillas erguido, enseguida me ordeno abrir mi boca y entonces escupió en ella, lo hizo dos veces.

-          Ahora ya puedes cerrar la boca y tragar perro.

-          Gracias Señor Jorge, le respondí.

-          No te cortes Jorge, puedes disponer como quieras, ya te lo he dicho y esto no es un privilegio que le de a cualquiera, pero tu lo tienes, además justo en lo que antes era nuestro garaje hay una mazmorra que el ha construido para mi, asi que si quieres llevarlo ahí y aplicarle la disciplina que consideres puedes hacerlo, ya has visto que su disposición es real y sincera, verdad perro?

-          Por supuesto mi Ama.

-          Bueno quizás es mejor dejar eso para cuando venga otro dia, si que me apetece probarlo pero tal vez otro dia con mas calma, te agradezco Merche el detalle que tienes conmigo, sabes que eres especial para mi.

-          Como quieras Jorge, ya sabes, como tu dispongas.

-          Gracias Merche, le dijo su amigo volviéndose por un instante y besándola en la boca.

-          Escúchame esclavo, lo que quizás si le apetezca a mi amigo Jorge ahora despues o luego es darte su lluvia dorada, cuando desee hacerlo quiero que te pongas de rodillas frente a el y tragues toda su orina, entendido?

-          Si mi Ama, entendido.

-          Despues le limpiaras bien toda su polla, muslos y culo, y se lo agradeceras besándole los pies, queda claro?

-          Si mi Ama, muy claro, gracias.

Señor Jorge cuando usted quiera solo tiene que decírmelo, estoy a su disposición para que me use así.

-          Y aunque ahora no le apetezca llevarte a la mazmorra para tener una sesión de disciplina perrito, como te he dicho antes tal vez si le apetezca darte alguna hostia o azote, así que quiero que si lo hace se lo agradezcas besándole la mano, ya sabes que me gusta que seas muy agradecido siempre.

-          Si mi Ama, por supuesto, le respondí.

Mi Ama y su amigo siguieron charlando allí recostados y mi Dueña vio como su marido fue a bañarse a la piscina, así que su amiga se había quedado sola en la cama.

-          Virginia cariño, vente aquí y no te quedes ahí sola, le dijo mi Dueña.

La Señora Virginia se levantó y se fue hacia la cama donde estaba mi Ama, allí estaba ella y su amigo ya recostados sobre el respaldo, cómodamente sentados charlando, cuando llego Doña Virginia mi Ama le hizo hueco entre ellos dos.

-          Tu eres la nueva así que te toca en el centro, le dijo mi Ama sonriendo.

Que tal todo Virginia?

-          Muy bien Merche, ya sabes, como siempre que vengo a vuestra casa, le respondió su amiga.

-          Me encanta verte contenta y feliz después de follar, le dijo mi Ama dándole un beso en la boca y metiéndole la lengua bien profunda.

Doña Virginia respondió a su beso acariciando a mi Ama y teniendo las dos un momento de pasión y excitación.

-          Es que no se si sabes Jorge que a Virginia la compartimos de amante Chema y yo, además creo que yo follo más con ella que Chema, dijo mi Ama en plan de broma y sonriendo.

-          Bastante más Merche, le respondió en ese mismo plan su amiga.

-          Espero poder entrar en ese grupo de follar con vosotras, dijo sonriendo el amigo de mi Ama.

-          A mí ya me follas y además con mucho gusto por mi parte, le dijo mi Ama.

-          Ya estás en ese grupo, le respondió Doña Virginia acercando su boca a la de Jorge y dándole un beso lleno de deseo en su boca, ya te he dicho que estas en ese grupo porque espero que ahora después follemos tú y yo.

-          Lo estoy deseando Virginia, le respondió el acariciándole el pecho y dándole otro beso lleno de pasión.

En ese momento llego Lucia con una bandeja y las copas que se le habían pedido, las sirvió y todos cogieron la suya con ganas de darle un trago.

-          Lucia, ve y sírvele la copa a Chema en la piscina, le dijo mi Ama.

-          Si Ama Mercedes.

Hacia allí fue la perra a servirle la copa y mientras tanto la Señora Virginia y el Señor Jorge se besaban y acariciaban recuperando la excitación.

La perra volvió y su Ama le ordeno recoger las copas vacías y llevarlas a la cocina, mientras seguía abrazada al Señor Jorge le dijo que no quería verla parada cuando hay cosas por hacer.

Mi Amo salió de la piscina y mientras se secaba me llamo, fui hacia donde él estaba y me ordeno terminar de sacarle, lo hice y cuando ya estaba seco me indico que me pusiese de rodillas en la ducha que tenía ganas de mear, allí fui, me puse de rodillas y cuando el llego, levante mi cabeza hasta dejar mi boca a la altura de su polla.

En ese momento el Señor Jorge estaba encima de la Señora Virginia lamiéndole los pezones y acariciándola y mi Ama les interrumpió.

-          Chicos perdonar, perdona Jorge, sé que estabas muy entusiasmado con el pecho de mi amiga, pero quiero que mires allí, le dijo indicándole con el dedo la ducha.

Le decía que mirara lo que iba a hacer mi Dueño que era lo que el Señor Jorge deseaba pero quizás aún no se atrevía.

Mi Ama bebía un sorbo de su copa y sonreía.

-          Se te han adelantado Jorge, le dijo mientras ponía una cara risueña.

-          Es excitante como te dije antes Merche, esa humillación al esclavo es muy excitante, dijo el.

-          Es que antes, dijo mi Ama, me dijo que era una de esas cosas que pensaba y se excitaba soñando el hacerla, querida Virginia, y le he ofrecido a Dani para que se lo hiciese pero Chema ha salido del agua con ganas de mear y se le ha adelantado, dijo mi Ama.

-          Jorge cariño, le dijo Doña Virginia, si quieres mearle en la boca para que se lo beba a mi perra solo tienes que decirlo, ella está empezando y aun no lo traga todo, pero seguro te gustara y disfrutaras de hacerlo.

-          Os agradezco a las dos vuestros ofrecimientos y además os tomo la palabra, ya tenía algunas ideas formadas por Chema y Mercedes, pero hoy me habéis hecho que aún me interesen más estos temas, siento una excitación que no se explicar al humillar y eso me gusta, así que probare todo, dijo el.

-          Eso es el poder, dijeron ambas casi al unisonó, el poder es excitante.

El Señor Jorge estaba como hipnotizado viendo como su amigo Chema había puesto su polla dirección a la boca de su esclavo y había empezado a orina en ella, había apuntado bien y el chorro iba hacia dentro pero era imposible que el esclavo pudiese beber y tragar todo, así que caía por su cara lo que rebasaba mientras su Dueño le animaba a tragar más.

Se levanto y fue hacia donde estaba su amigo Chema.

-          Jorge, que tal todo? Lo estas pasando bien?

-          Perfecto Chema, como siempre, lo paso genial, ahora es que tengo ganas de mear y he pensado en imitarte.

-          Fantástico, me agrada que te animes a probar temas nuevos, te gustaran y los gozaras mucho, seguro, te conozco bien, nuestro esclavo te atenderá enseguida y podrás mearle la cara y en su boca para que trague y te saboree, que le gustara, pero espera un segundo que está terminando de limpiarme la polla y los huevos, solo le queda el culo que me gusta que me limpie también por ahí.

-          Si que tengo ganas de hacérselo a este perro en la boca y que lo trague todo, dijo su amigo Jorge.

-          Esclavo, ya sabes, atiende a nuestro amigo y sírvele como debes, traga todo lo que te dé y tu Jorge, si no te sientes bien atendido dímelo para que sea castigado, no permitimos insolencias de ningún tipo en esta casa.

-          Tranquilo Chema ya me ha dicho Merche que si debo darle una hostia que no me corte y se la de, que su obligación es obedecer y servir.

-          Así es amigo, disfruta que voy allí con las chicas si no necesitas nada.

-          Perro, besa mi polla y abre bien la boca que voy a darte mi orina y quiero que la tragues toda, me ordeno el Señor Jorge.

Bese su polla y sus huevos y retire mi cabeza unos centímetros abriendo la boca para que el pudiera apuntar y comenzar a mear.

Se agarro la polla, apunto hacia mi boca y quizás por los nervios al principio solo salía un chorro pequeño pese a que él tenía muchas ganas de orinar, al instante empezó a salir un buen chorro que iba directo a mi boca, yo tragaba lo que podía, pero era mucho y muy fuerte por lo que por mis labios caía al suelo alguna, pero trague bastante, a él se le notaba entusiasmado de haber sido capaz y todo eso hizo que lo disfrutase mucho, cuando termino me metí su polla en la boca y la limpie de lo que pudiese quedar, después le lamí los huevos para dejarlo bien limpios y él se dio la vuelta, se reclino un poco y me indico que le lamiese el culo, lo hice dándole varias pasadas de mi lengua por él, era muy evidente que estas lamidas le gustaban y excitaban.

Cuando volvió hacia donde estaban mis Dueños y Doña Virginia mi Ama le dijo.

-          Te has quedado a gusto Jorge?

-          Ha sido toda una experiencia, respondió el, y además muy placentera, creo que es muy humillante para él y excitante para mí, genial, me ha gustado mucho.

-          El solo hecho de que en nuestra presencia ellos se arrodillen y besen nuestros pies ya es humillante para ellos y muy excitante para nosotros, pero a ambos nos gusta y nos hace sentirnos bien, le dijo mi Amo.

-          Así es, respondió el Señor Jorge, me gusta esa sensación, me gusta mucho.

-          Dani, aséate, quítate la ropa y solo ponte un tanga rosita para servirnos el resto de la noche, cuando estes listo preparas todo para que piquemos lo que ha traído tu Dueño aquí en la pérgola, llévate a Lucia y que te ayude, me dijo mi Dueña.

-          Perrita, aséate tú también un poco, ponte el sujetador, ayuda a Dani y aprovecha todo esto para aprender, le dijo su Ama Virginia.

Ambos nos fuimos hacia la casa a obedecer lo que nos había sido ordenado, nos aseamos, nos pusimos como nos habían dicho y preparamos tanto la mesa y zona de la pérgola como la comida japonesa que había traído mi Amo.

Cuando todo estaba listo todos se sentaron a la mesa y empezamos a servirles la comida que ellos recibieron muy a gusto supongo que por el desgaste que llevaban, comían y charlaban animadamente cuando mi Ama me llamo, acudí donde estaba sentada y me arrodillé a su lado.

-          Ahora no nos haces falta aquí, así que aprovecha y cambia las sábanas de las camas balinesas que hemos usado, pon unas limpias, déjalo todo arreglado y saca toallas secas para dejarlas en las tumbonas junto a la piscina, toda la ropa llévala al lavadero y mañana lavaras.

Dani, llévate a la perra y que te ayude.

-          Si mi Ama.

En tono muy bajito me dijo.

-          Lo estás haciendo todo muy bien, estoy muy orgullosa, me dijo acariciándome la cabeza.

Abre la boquita perrito, me ordeno.

La abrí y entonces ella dejo caer un trozo de rico sushi masticado que llevaba en su boca.

-          Esta rico mi querido esclavo?

-          Esta delicioso mi Dueña, todo lo que viene de usted es fantástico, muchas gracias.

Le dije a Lucia que me acompañase y obedeciendo a mi Dueña lo dejamos todo limpio y preparado como ella quería.

Cuando volvimos habían terminado de picar y charlaban animadamente.

Entonces la Señora Virginia cogió la mano del amigo de mis Amos y levantándose le dijo de manera irónica y sonriendo.

-          Vamos hacia una de las camas Jorge y estaremos más cómodos para lo que tenemos pendiente.

-          Creo Jorge que Virginia muy sutilmente te está invitando a follar, dijo mi Amo y todos rieron.

-          Coincidimos en el deseo Virginia y yo, dijo el.

Se levantaron los dos y fueron abrazados hacia las camas.

-          Lucia a cuatro patas detrás de mí, le dijo a su perra.

Ella siguió a su Dueña a cuatro patas y a una prudente distancia.

Se quedaron solo mi Ama y mi Amo, ella ya le acariciaba la polla a su marido, él me dijo que le preparase un café y un ron añejo en un vaso bajo con dos hielos, mi Ama me dijo que ella quería que le trajese un limoncello en un vasito helado.

Fui a preparar lo que me habían pedido y cuando volví a servirles, ellos hablaban del deseo que tenían de tener una perra en propiedad, ahora que ya me tenían a mí y que ya estaba muy domado querían aventurarse a buscar una perra.

Mientras tomaban la copa mi Ama me indico que besase los pies de mi Dueño.

-          Sería la situación ideal Chema, le decía mi Ama, tener a Dani y una perra, así estaríamos bien servidos y además muy bien atendidos de todo lo que deseáramos, tanto sexual como de las rutinas diarias.

-          Lo se Merche, sería lo ideal, el problema es encontrar a la persona adecuada, hemos tenido mucha suerte con Dani, no sabemos si volveremos a tener esa suerte.

-          En estos días voy a hacer algunos cambios en el cuarto del perro, por si se diera la circunstancia y preparar todo para poder tener alguien más en propiedad, veremos cómo se da todo, pero es indudable que solo pensarlo me excita mucho la idea.

-          Ya noto que te excitas cuando sacas este tema.

-          Vaya que sí, Dani, cómele la polla a tu Amo y pónsela dura que quiero follar con él, me ordeno mi Ama.

Mi Amo hizo un poco su silla para atrás y abrió las piernas, yo subí desde sus pies por sus piernas hasta su polla y me la metí en la boca, aquella polla me encantaba, comencé a chuparla, besándola, adorándola y ella empezó a reaccionar y a ponerse cada vez más dura.

Doña Virginia y el Señor Jorge llegaron a una de las camas y antes de tumbarse se quedaron ambos de pie besándose abrazados, se besaban, entrelazaban sus lenguas y luego el bajaba a su cuello a lamerlo y besarlo mientras ella besaba su pecho y sus pezones, ambos estaban muy excitados, mientras Lucia estaba junto a su Ama de rodillas.

-          Quieres que mi perra te coma la polla Jorge?, le dijo Doña Virginia.

-          Prefiero que me lama el culo, es muy excitante para mí, después ya pasara a la polla mientras yo te como los pechos.

-          Perrita lámele el culo al Señor, quiero que lo excites mucho para que desee follarme bien rico, le ordeno su Dueña.

Ella se puso tras el Señor Jorge y abriéndole el culo empezó a lamérselo dándole lengüetazos por todo el ano, el empezó a excitarse y le daba mucho gusto aquello.

-          Vamos putita dale placer al Señor y cógele la polla, acaríciala mientras le comes el culo.

-          Tu puta me está dando mucho gusto y placer Virginia, le dijo el.

-          Ven, cómeme tu él coño, le dijo ella recostándose hacia atrás y abriendo las piernas.

El bajo su cabeza y la puso entre sus piernas lamiéndole el coño y clítoris mientras a él le comían el culo y le pajeaban de manera maravillosa.

Cuando ya estaba un rato así y el coño de la Señora estaba más que jugoso, él se dio media vuelta y le dijo a Lucia.

-          Vamos putita ahora cómeme la polla y termina de ponérmela dura que voy a follarme a tu Dueña.

La perra se tiro a por esa polla y comenzó a chuparla y lamerla con mucho gusto por ambas partes, mientras que Doña Virginia muy excitada y con muchas ganas de follar ya, se incorporó un poco para besar la boca de su amante.

-          Esta puta es buena comiendo polla, dijo el.

-          Si, es bastante viciosa y servicial, le respondió ella.

Follame ya Jorge, le dijo a él.

Él le saco la polla de la boca de la perra y se puso encima de ella metiéndosela y empezando a follarsela apasionadamente, ella que estaba muy excitada abrió sus piernas y las colgó en la espalda de él, de manera que la penetración era más profunda y no paso mucho hasta que ella gimiendo alcanzo su primer orgasmo que enlazo con toda la excitación que sentía en ese momento y con el ritmo que había puesto su amante Jorge, que era frenético, el seguía empujando y ella entro en una vorágine de placer que su coño parecía un grifo sin cerrar y cuando ya había perdido la cuenta de las veces que se había corrido, le dijo a el de parar un rato y recuperar el aliento más la respiración, el salió de ella y se tumbó a su lado con su polla toda inhiesta y bien dura, ella le hizo una indicación a su perra para que la limpiase de todos sus jugos y fluidos, cosa que ella hizo con mucho placer lamiéndole todo su coño.

-          Me gustas mucho Jorge, lo paso muy bien contigo y me gusta mucho como me follas, me gustaría verte más veces, que vinieras a casa a visitarme y que fueras mi amante, le dijo ella acariciándole su pecho.

-          Tú también me gustas mucho Virginia y claro que te visitare y claro que deseo ser tu amante, me siento muy bien contigo y creo que no tengo que decirte porque ya lo sabes  que eres una mujer espectacular.

-          Además si sigues interesado en BDSM supongo que sabes que tengo un esclavo y a esta esclava en propiedad, por lo que podrás experimentar lo que quieras con ellos.

-          Algo me dijo Chema, que tu esclavo era tu marido aunque ahora ya estas divorciada.

-          Si y esta perra era mi cuñada, dijo sonriendo.

En ese momento Lucia levanto la cabeza y su Ama que se dio cuenta, se enfureció y le dio un fuerte bofetón.

-          Ni se te ocurra volver a dirigir tu mirada a tus superiores y ni se te ocurra estar atenta a lo que yo hable perra, no dejes de hacer lo que te ordenado, así que sigue ahí lamiéndome el coño, luego te castigare por tu osadía.

-          Si que ha sido un poco osado por su parte levantar su cabeza y mirarte por haber oído que te referías a ella, dijo el.

-          No puedo dejar pasar ciertas cosas, aun menos ahora que está en pleno periodo de adiestramiento, así que luego la castigare con más contundencia para que aprenda.

-          Me permites?, le dijo el.

-          Claro, por supuesto, le dijo ella.

El agarro a la perra por el pelo y le levanto la cabeza, entonces le dio una, dos y tres hostias fuertes en la cara.

-          Has entendido lo que te ha dicho tu Dueña?, le dijo el.

-          Si mi Señor Jorge.

Le suplico que me perdone mi Ama.

Su Ama le indico que se bajase de la cama y dejase de lamerle el coño y dándose media vuelta se subió encima de su nuevo amante, clavándose la polla en su coño y cabalgándolo en rápidos metes y sacas que a los dos los pusieron extremadamente excitados enseguida.

Yo ya le había puesto muy dura y a tope la polla a mi Amo, que sin querer moverse de donde estaba le había dicho a su mujer que se apoyase en la mesa y allí mismo se la había metido en el coño desde atrás, había conseguido que mi Ama se corriese un par de veces y ahora él estaba sentado en una de las sillas y ella dándole la espalda estaba clavada en su polla, a mí me tenían delante de ellos lamiendo los huevos y lo que salía de polla de mi Amo y el coño y clítoris de mi Ama, así se corrieron los dos y así lamí yo toda la corrida que de allí salía aun sin sacar la polla mi Amo del coño de su mujer, cuando la saco les limpie a ambos bien, no deje nada de restos de las corridas y les lamí como a ellos les gustaba el culo.

Mi Amo se fue a darse un baño y mi Ama se quedó un momento allí reposando y relajándose, me pidió que le trajese un cigarrillo y otro licor fresco.

Cuando volví con lo que me había pedido ella se había levantado y quería acercarse hacia donde estaban sus amigos que en esos momentos estaban a punto de correrse ambos.

Le di el cigarrillo, lo encendió y se tomó el licor mientras caminaba lentamente hacia la cama donde estaban sus amigos follando, se paró allí y se quedó observándoles.

-          Estate atenta perra, dijo Doña Virginia, el Señor querrá correrse en tu boca, quiero que lo tragues todo y no desperdicies nada.

En ese momento ella se corría de nuevo y a una señal de su amante se bajó de su polla para que la perra pudiese metérsela en la boca y recibir toda la corrida del Señor Jorge, la trago entera con placer por parte de ella y después le limpio la polla y los huevos para no dejarle rastro alguno de su corrida.

Su Ama estaba recostada recuperando el aliento y abrió las piernas para que su perra la limpiase como era su obligación.

-          Ya te dije Virginia que Jorge follaba muy bien, que daba gusto follar con él, dijo mi Ama.

-          Ya lo he comprobado Merche y como es habitual, tenías mucha razón, así que hemos quedado para repetir de manera más habitual, le respondió a mi Ama mientras se besaba con el Señor Jorge.

Mi Ama se unió a ese beso y los tres juntaron sus lenguas dándose un apasionado beso.

Después todos se fueron hacia la piscina a darse un baño y refrescarse un poco, allí les esperaba mi Amo que fue el primero que se metió en el agua.

Se metieron en el agua todos y allí trataron de relajarse y recuperar fuerzas los cuatro.

Tranquilamente se dieron un baño en el que no dejaban de charlar y reír, me ordenaron traerles más bebidas y las consumieron enseguida, se notaba que lo estaban pasando realmente bien.

Mi Amo salió del agua y Doña Virginia detrás de él, ambos se secaron y se tumbaron tranquilamente a charlar mientras Lucia obedeciendo las ordenes de su Ama besaba y lamia los pies de mi Amo.

El Señor Jorge y mi Ama salieron después y directamente se sentaron junto a mi Amo y la Señora Virginia.

Él se tumbó de espaldas y haciéndome una indicación me señaló su culo.

-          Obedece enseguida perro, ya te dije que estuvieses atento a los deseos de mi amigo, me dijo mi Ama casi regañándome.

Estaba claro que el Señor Jorge estaba disfrutando de mi humillación y que mi Ama quería verme humillado ante él, el que ella provocara ese tipo de humillaciones para mí era algo que a los dos nos excitaba, por lo que gustosamente obedecí lo que se me había ordenado y mientras ellos charlaban sin apenas prestarme atención yo abrí su culo y me dedique a darle unas lamidas largas, profundas y llenas de dedicación, el las recibía con placer y buena prueba de ello era que su polla empezaba de nuevo a despertarse, yo seguía lamiendo su ano y tratando de meter mi lengua lo más dentro que podía, aquello le gustaba y estaba excitándose bastante, por lo que me tuvo lamiéndole su culo bastante tiempo, sin apenas darme descanso hasta que de repente se dio media vuelta en su tumbona y mientras seguía charlando su polla ya daba muestras de estar casi en plena erección, yo me había quedado sin saber que hacer al quitarme de su culo y el cogiéndome de una oreja me dio una hostia y sin decirme nada me indico con su dedo su polla, yo entendí que deseaba que le realizase una mamada y mi boca fue a tragarse aquella polla y a comenzar a lamerla y chuparla.

-          Veo que vas comprendiendo Jorge como has de hacerle entender al esclavo lo que deseas y lo que tiene que hacer, le dijo mi Dueña.

-          Soy primerizo Merche, pero aprendo y además tenía muchas ganas de usar la boca de tu perro y de darle una hostia.

-          Úsalo como quieras Jorge, ya te dije que si deseas azotarlo o darle de hostias o follarlo, solo tienes que indicárselo, él te obedecerá.

-          Alguna hostia se llevará si no me da el placer que deseo o si se entretiene en otros menesteres, a azotarlo y follarlo te aseguro que vendré un día, pronto, porque sí que me apetece mucho probar esa experiencia.

-          Cuando quieras Jorge, ya lo sabes, le dijo mi Dueña desde su tumbona.

Mientras Lucia seguía besando y lamiendo los pies de mi Amo y la Señora Virginia charlaba con él, yo me afanaba en chuparle la polla al amigo de mi Ama y darle mucho placer.

Mi Ama se levantó y acerco su tumbona a la de su amigo para tenerlo más cerca y poder besarlo, el mientras le acariciaba el pecho y ambos disfrutaban de sus caricias mientras me veían a mi comiéndole la polla al Señor Jorge.

-          Me correré pronto perro, me dijo Don Jorge, ya no me queda mucha leche pero toda la que salga quiero que te la tragues, sin dejar ni una gota.

Asentí con la cabeza y seguí lamiendo aquella polla que estaba muy dura y que de alguna manera anunciaba que pronto explotaría y se correría.

En apenas unos instantes su polla empezó a darme semen y yo comencé a tragar para que nada se me saliese, pese a que el Señor Jorge me había dicho que ya no le quedaría mucho tuvo una corrida cuantiosa que trague entera saboreándolo.

-          Límpialo bien perro, me ordeno mi Ama, que no le quede nada.

Lamí toda su polla limpiándolo bien, sus muslos y también sus huevos, lo dejé totalmente limpio y como el deseaba mientras se besaba con mi Ama.

-          He pasado una tarde genial Merche además de muy reveladora, muchas gracias por estos instantes tan placenteros, dijo Don Jorge.

-          Ya sabes que cuando quieras podemos repetir, que te haces muy caro de ver y aunque sé que tu trabajo te tiene fuera de la ciudad al final se trata de querer Jorge, así que ya sabes, aquí nos tienes para cuando quieras.

-          Lo se Merche y nos veremos pronto, muy pronto.

Bueno, para mí ya es algo tarde y mañana es un día complicado, así que me visto y os dejo.

-          Perro ve y trae la ropa del Señor, me ordeno mi Ama.

Fui, traje la ropa del amigo de mi Ama y le ayudé a vestirse, mi Amo y Doña Virginia se habían puesto en pie para despedirse, el Señor Jorge beso en la boca mi Ama, después hizo lo mismo con Doña Virginia y con mi Amo se dio un fuerte abrazo.

Me ordenaron ir a despedir al Señor hasta la puerta y así lo hice, despidiéndome de él arrodillándome y besando sus pies, el quedo complacido y se fue.

Cuando volví hacia la zona de la pérgola, mis Amos y Doña Virginia estaban en pie, Lucia de rodillas y yo me puse en la misma posición que ella.

-          Nos vamos a dormir, dijo mi Amo.

-          Dani, recoger todo esto, Lucia te ayudara, me dijo mi Ama, dejarlo todo como debe estar, lo mismo en el porche, lo quiero todo arreglado, después coges un par de colchonetas de las tumbonas y las pones en el suelo de tu cuarto para que la perra duerma, Virginia se queda a dormir en casa.

-          Lucia ayuda a Dani, obedece en todo lo que te digan y compórtate como lo que eres, haz que me sienta orgullosa de ti, le dijo su Ama Virginia, entendido?

-          Si mi Ama, respondí yo.

-          Si mi Ama, respondió Lucia.

-          Dani, mañana prepara desayuno para 3 en el porche, después deberé ir al despacho pero me apetece mucho desayunar con las Señoras.

-          Si mi Amo.

Besamos los pies de ellos tres y mientras se iban al dormitorio nosotros empezamos a recoger toda la vajilla, vasos, toallas, ropa, pareos y demás que aún quedaban por allí, después lo limpiamos todo y fuimos hacia la casa, hicimos lo mismo en el porche y cerrando todo terminamos en la cocina recogiendo y fregando todo lo que se había usado, apenas cruzamos una palabra, solo lo estrictamente necesario para nuestro trabajo, era lo que nos habían ordenado y obedecíamos.

Tras terminar con todo, puse las colchonetas en el suelo de mi cuarto y nos fuimos a dormir.

continuara ...

agradezco comentarios y también criticas