Escapada rural 4

Llegamos a la casa rural sobre la hora de comer. El primero en abrirnos las puertas fue mí amigo Juan, y al momento llegó Pedro. Enseguida les presente a Sara, y tras los besos y presentaciones de rigor, enseguida conectaron con ella, ya que es imposible que no caiga bien a nadie, con esa risa que siempre tiene, y más con el vestido ligero que eligió para ese día. Ellos apenas sabían alguna cosa de ella, una vez tiempo atrás sí les conté de ella y como la conocí en un chat y el rollo que nos traíamos, además los días antes de subir a la casa rural también habíamos hablado algo, cosa que les pareció bien, y ella sobre ellos, ya sabía algunas cosas de cómo eran, tanto físicamente, porque le había enseñado alguna foto donde estábamos los tres, como de forma de pensar o hacer, con lo que resultó muy fácil el conectar rápidamente.

Entramos las cosas que llevábamos y le enseñamos la casa, que está muy bien equipada y nos repartimos los cuartos, ellos estarían en uno de camas individuales, y a nosotros nos dejaron uno con cama de matrimonio grande. La casa era una antigua casa de payes, completamente reformada y dividida en tres apartamentos independientes. El nuestro era para 4-5 personas, con techos muy altos, tanto que las habitaciones solo tenían las paredes y sin techo, por lo que se podía oír perfectamente todo.

Como ya eran las 15H, decidimos ir a comer a un restaurante del pueblo que está muy bien y tiene unas buenas vistas a las montañas y al pantano sobre el que se encuentra. Mientras nos servían la comida íbamos hablando de Sara y de mis colegas, pues al no conocerse en persona pues era lo normal, hablar de trabajo, familia, amigos, aficiones, todo en muy buen ambiente.

Cuando salimos de allí, y antes de regresar a la casa, dimos un pequeño paseo para bajar la comida y enseñarle 4 calles chulas del pueblo a mí amiga. Como no teníamos nada en la nevera, y tampoco nos habíamos subido nada, decidimos ir a un supermercado que hay en un pueblo cercano y comprar las 4 cosas para pasar esos 2 días, ese viernes haríamos para cenar algo tipo pizza o así, y para el sábado noche haríamos una barbacoa y fiesta en la terraza de la piscina, así que también compraríamos bebida y aperitivos para pasarlo genial.

S: Muy enrollados tus amigos… me está gustando mucho estar aquí…

Y: Jajaja.. ya me lo imagino, ya sabes que siempre vamos de buen rollo.

S: Sí.. además que son guapetes, y tienen su puntito…

Y: Jajaja… brujaaaa… que te conozco…

S: Yooo…??? Con lo buena que soy… (poniendo carita de pucheros)

Y: Sí, sí….. ya veo que vamos a ir bien… ya verás, te lo vas a pasar genial chiky…

S: Sí, ya estoy muy bien y lo que sea, será…

Y: Correcto cielo… venga, vamos que nos están esperando… jajaja…

Fuimos en mí coche al ser más grande, ellos detrás y Sara a mí lado, se le veía muy contenta. Llegamos al súper, como mi amigo Pedro es cocinero profesional, decidimos que ellos fueran a por la carne para la barbacoa. Sara y yo fuimos a buscar el resto de cosas. La muy jodida mientras íbamos por los pasillos buscando las cosas, sí no había nadie me hacía posturitas y gestos, se medio levantaba el vestidito, se agachaba a propósito mostrando su culete, la muy jodida, tenía su gracia y más con el riesgo de que alguien le viera, eso sí no le vieron con las cámaras de seguridad. También compramos un par de botellas de ginebra para ella y Pedro que le gustan los gintonics, y unas de ron que nos gusta más a mi colega Juan y a mí, para alegrar la velada nocturna. Una vez que ya teníamos todo comprado volvimos a la casa, que ya eran las 18H y con el calor y demás había ganas de darse un buen chapuzón en la piscina. Llegamos y enseguida guardamos las cosas en la nevera, y fuimos a ponernos los bañadores, quedando en vernos en la piscina.

Mientras que Sara se estaba quitando el vestido para ponerse su bikini verde, me acerqué por detrás de ella, y empecé a besarle el cuello, mientras le sujetaba con un brazo por su cintura y con mí otra mano libre le acariciaba su pecho. Empezó a ronronear como una gatita en celo y a pegar y mover su culo sobre mí polla, que poco a poco se iba poniendo más dura bajo mí bañador.

Y: Te lo estás pasando bien guarrilla?

S: …Mmmm… siiiiii…

Y: Ya te dije que estarás como una reina..

S: …Sí, golfo mío…

Y: Con un poco de paciencia y viendo cómo va el día puede ser que tú fantasía se haga realidad…

S: … Uffff, sí que me encantaría… me estás poniendo guarra… y me entran ganas de todo…

Y: …. Jajaja.. ya me lo imagino putita… pero no va a ser ahora…(Mientras dejaba de acariciarla y separandome de ella).

S: Me vas a dejar cachonda..? Que cabroncete… jajaja.. ya verás, ya….

Y: … Miedo me das… jajaja… venga vamos a la piscina mí niña…

Cogimos nuestras toallas y bajamos a la piscina dejándolas en las tumbonas de la terraza. Estaba muy sexy con su bikini verde, mis colegas ya estaban dentro del agua, pero ella no sabía una

cosa, y es que esa piscina, a pesar de que el sol le daba casi todo el día, no tenía especialmente el agua caliente, más bien fría al estar muy cerca del Pirineo. Al meter los pies ya dio un respingo con un “joder está fría”, cosa que nos hizo gracia, porque a nosotros cuando hemos ido nos ha pasado lo mismo, lo mejor es meterse de golpe y al cabo de un rato ya no se nota tanto el frío. Y así hicimos ella y yo a la vez, con algún tiritón por parte de los 2 que pasamos un momento juntos abrazados. Mis colegas nos miraban riéndose un buen rato.

Mientras estábamos dentro, y pasado el momento de frío fuimos nadando, hablando y riendo. Ella de vez en cuando pasaba provocándome rozando mí cuerpo, cuando no de forma disimulada mí polla. Me ponía malo, yo tampoco me estaba quieto sin tocarla, con el agua fría y mis caricias sus pezones se pusieron duros y se le notaban perfectamente en el bikini, alguna vez nos dábamos pequeños picos en la boca o la acorralaba contra la esquina de la piscina frotándonos. Note, y ella también, como mis amigos nos miraban con ojos de vicio, y veían como ella estaba empitonada, imagino que con las mismas ganas que yo de cogérmela, pero tenía otros planes y ya tendrían su oportunidad sí todo salía como lo tenía pensado. Al cabo de un buen rato y de ya tener frío de nuevo, salimos a secarnos y a tomar el sol a la terraza que era un poco estilo chill out, y a tomar unas bebidas y unos aperitivos que habíamos bajado. Mientras Sara se secaba pudimos observarla como se le marcaban perfectamente tanto los pezones como su coñito a través del bikini, mirándonos los 3 y riéndonos cómo unos golfos, preguntando Sara que pasaba y nosotros diciendo que nada.

J: Que tal? Que te parece el sitio?

S: Ah, muy guay, la verdad que es un sitio muy tranquilo para pasar unos días….

J: La verdad es que sí, jajaja… y la piscina?

S: Joder, el agua está bastante fresquita, jajaja….

Y: …Ya te avisé…jajaja…

S: Ya, ya… que cabritos… jajaja…

P: Nosotros?... Que vaaaa… jajaja…

S: …Sí, sí….

P: Y que te está pareciendo el día..?

S: Pues la verdad que muy bien. Es como sí nos conociéramos de hace tiempo y nos nos hubiéramos visto en bastante tiempo…

J: Ya te digo

P: Y sobre nosotros? Te había dicho algo de nosotros? (Señalándome a mí).

S: Alguna vez cuando hablábamos de los amigos le había preguntado y sí, alguna cosa me había contado de vosotros… Y la verdad, que estoy a gusto con vosotros, jajaja… (Mientras me miraba y me guiñaba un ojo).

Y: …Bueno, algunas cosas… pero todas buenas… jajaja.. igual que también les he dicho de tus amigas…

S: Ah, sí..? Vaya, vaya….

J: …. Jajaja… Pero no nos ha dicho mucho de ellas.. hubiera estado bien que también hubieran venido..

S: …jajaja… sí, quién sabe si en el futuro podríamos quedar todos, nunca se sabe…

P: Pues sí, ya verás tú misma como somos y ya les dirás de nosotros para otra vez…

Y: Pues sí… nunca se sabe… (Mientras miraba a Sara y le guiñaba el ojo).

Como ya anochecía, nos volvimos al apartamento para ducharnos, cambiarnos y preparar algo para cenar. Como el apartamento solo tenía un baño completo, con una buena ducha de plato, nos fuimos duchando de forma individual, mientras estábamos en el cuarto esperando nuestro turno, Sara y yo hablábamos bajito para que no nos oyeran mis amigos tumbados en la cama.

S: … Que buen rollo…

Y: Sí, ya te lo dije… nosotros somos muy legales y no vamos a malas.

S: Sí, sí, ya lo veo mí rey.

Y: (Riéndome) Que..? Te ha gustado el agua fresquita?.

S: Jajaja… que cabrones.. eso se avisa… me ha entrado un frío al meterme dentro que me a atravesado de punta a punta…

Y: Jajaja.. ya lo he notado, ya… se te han puesto los pezoncitos duros, duros…(mientras le acariciaba)

S: Jajaja.. ya lo sé… pero enseguida me has ido dando calorcillo golfo…

Y: Como no… sobretodo hay que ser un buen caballero… jajaja…

S: Totalmente… (susurrándome al oído)… y ahora entrarás conmigo a la ducha para relajarnos...?

Y: Jajaja… no me provoques, no me provoques…

S: …Yoooo..?.... Que vaaaa… jajaja..

Al rato nos fuimos a duchar, por separado, para no levantar la liebre entre mis amigos, preparamos la cena, unas pizzas, ensalada y una pequeña tarta helada, y para beber unas cervezas y vino. Cenamos hablando de cosas generales.

Como cuando terminamos de cenar eran ya las 10H, decidimos bajar al fresco de la terraza, bajándonos bebida para preparar los gintonics y los cubatas. Nosotros íbamos en pantalones cortos y camiseta, Sara también con unos pantalones de deporte cortos y una camiseta de tirantes, estaba muy sensual.

Mientras bebíamos nuestras copas, íbamos hablando y riéndonos de todo, en un ambiente muy agradable y con muy buen rollo, contándole algunas de nuestras batallitas de cuando jugábamos juntos y de algunos de los viajes con el equipo, mientras Sara se partía de la risa, en parte por las historias y porque ya a los 4 nos empezaba a afectar la acumulación del alcohol de la cena y los cubatas, sí bien no íbamos borrachos, sí que llevábamos un puntito subido de tono todos. El tiempo pasó volando, sin darnos cuenta el campanario de la iglesia dio la 1 de la madrugada, y como habíamos hablado y quedado en que al día siguiente al ser festivo en Cataluña, el 11 de septiembre, y estar todo cerrado, pues subiríamos por la mañana a Andorra a visitar un par de sitios que ya conocíamos y a hacer unas compras aprovechando la visita, comer allí y a la tarde bajarnos para darnos un buen baño en la piscina y a la noche preparar la barbacoa

Volvimos al apartamento para acostarnos. Sara se puso una camiseta y unos pantalones cortos de pijama, yo solamente unos pantalones cortos de pijama. Como estábamos cansados nos tumbamos enseguida, escuchando al rato como mis amigos empezaban a estar dormidos y Sara, a pesar de estar los dos acurrucados juntos, empezaba ya a quedarse adormilada.

Entonces decidí compensarla por lo que había sucedido entre nosotros por la tarde, de jueguecitos y comentarios entre nosotros con ganas de tener algo de sexo.

Pase mí mano por debajo de su costado, mientras me colocaba pegado a su espalda, dándole besos cortos en su cuello y mi mano llegaba a su pecho, empezando a acariciarlo, tocándoselo. Sara, que no estaba del todo dormida, empezó a ronronear, mientras se apretaba contra mí y empezaba a mover su cadera de delante a atrás, muy sensualmente

(En voz bajita)

S:… mmmmm… me encanta mí golfo…

Y: Lo sé mí lobita… y te voy a compensar el día, que seguro que te habrás puesto cachondita…

S:… Sí, ya sabes que siempre tengo ganas mí rey…

Y: Ya lo sé pequeña ninfómana…

S: … uffff… me pones perra… y estás cumpliendo con lo que me dijiste..

Y: Sí… y si todo sale como tengo previsto, mañana puede ser tú gran día brujita…

S: …mmmm….

Y: …. Pero ahora voy a ponerte a mil…

Mientras le decía eso, le iba quitando su camiseta , mientras una de mis manos jugaba con sus pechos y la otra la metía dentro de sus pantalones de pijama y comenzaba a acariciar su pubis suavemente.

S: …yo también quiero hacerte ver las estrellas…

Y: … ufff… vale…

Como los dos estábamos muy perros, nos fuimos desnudando mutuamente, olvidándonos de dónde estábamos y de mis amigos. Como tanto ella como yo teníamos ganas de hacernos un favor, entre risas decidimos que lo mejor en ese momento era hacer un buen 69.

Yo me tumbe en la cama y ella se colocó a horcajadas sobre mí pecho, para poder llegar los dos a nuestros sexos. Mientras ella empezó a salivar mí polla y darle pequeños masajes, yo comencé a ir besando sus muslos, mientras con un brazo estirado le tocaba sus tetas y con la otra jugaba con los cachetes de su culo, apretándoselos y dándole suaves azotes. Poco a poco nos fuimos poniendo más calientes. Ella movía suavemente sus caderas, mientras pasaba su lengua por el tronco de mí polla, me lamía los huevos y los apretaba suavemente, yo con mi boca me iba acercando poco a poco a su coñito, que se veía desde esa posición abierto y húmedo. Fue fantástico notar como se introducía mí polla dentro de su boca caliente y empezaba a mover su cabeza arriba y abajo, mientras yo también empecé a comerme su rico coño jugoso, jugando con su clítoris que asomaba durito, dándole chupadas y toquecitos con mí lengua. Se nos oía de

vez en cuando nuestros gemidos y jadeos, el ruido vicioso de nuestras chupadas el uno al otro, pero cada uno de nosotros estábamos centrados únicamente en dar placer al otro.

Se la metía y sacaba de su boca, la chupaba con ganas, le escupía dejando caer sus babas para volvérsela a meter dentro, en una garganta profunda, yo me comía sabrosamente su raja, moviendo mis labios sobre ella, recorriéndola con mi lengua, chupando, mojándola, jugando con ella a ponerla bien perra, mientras unos de mis dedos ya se habían metido dentro de su precioso coño y los de la otra mano frotaban su culo. Nos estábamos poniendo muy guarros y al límite de explotar.

Nuestros movimientos con el sexo del otro iban en aumento, igual que nuestra excitación, con ganas de hacer que el otro estallara de placer. Ella se sacaba entre gemidos mi polla de la boca, la pajeaba un par de veces, pegaba alguna lamida o chupón en mi capullo y se la volvía a meter entera moviendo rápidamente la cabeza provocando unos ruidos con ella muy viciosos y guarros, yo le daba rítmicamente a mis dedos dentro de ella, follando con ellos su coño mojado, buscando su punto G mientras chupaba y soltaba una y otra vez su clítoris, cosa que le ponía muy cerda. Los dos nos dimos cuenta que estábamos ya a punto de tener nuestros orgasmos gracias al otro. Mis piernas empezaron a temblar y a ponerse rígidas, signo de mí placer e inminente corrida, ella también frotaba su coño contra mí boca apretando con sus muslos mi cabeza, mientras mis dedos notaban como su coño tenía pequeños espasmos anunciando su orgasmo. Y llegó, fue maravilloso, notar como mi leche salía disparada con fuerza dentro de su boca de niña buena y como ella la dejaba caer mezclada con su saliva sobre mi polla para después jugar con ella, ella se corrió dejándome la cara y la barbilla llena de sus jugos y mis babas, mis dedos estaban bien pringados de sus jugos de perra en celo, los cuales también chupe y jugué con ellos. Una vez que ya habíamos satisfecho las ganas del otro pasamos por el baño para limpiamos un poco la mezcla de sudor, jugos y babas del uno al otro, nos volvimos a poner nuestros pijamas y nos volvimos a acostar dulcemente, frente a frente, mirándonos los dos, con una gran sonrisa en la cara.

Y: … Joder mí niña… me has dejado seco hoy…

S: … jajaja… Yooo…?.. y tú a mí, qué?...

Y: … jajaja… también, también…

S: …eres un golfo… mí rey…

Y: … y tú mí reina ninfómana.. jajaja.. vamos a dormir un poco, que ya es tarde y estoy algo cansado y mañana será un día muy movido…

S: Sí golfo mío… hasta mañana...

Y: Hasta mañana lobita…

Por la mañana entraba ya algo de sol por la ventana abierta y oía algo de ruido y a mis amigos hablando bajo en la cocina-comedor. Sara seguía profundamente dormida, y después del buen 69 que habíamos tenido por la noche, nos quedamos dormidos cansados, pero con una buena sonrisa. Me levanté despacio para no despertarla, y cerré las cortinas para que no entrase tanta luz dentro, y salí a ver a mis amigos, y empezamos a hablar en voz baja.

P: Hey… buenos días…

Y: Buenos días

J: Que pasa noi..?.. jajaja..

Y: Que pasa.. pues na… aquí aún medio sobado… jajaja…

J: … Ya, ya…. Ya me imagino.. jajaja

P: Jajaja…

Y: Y ese cachondeito matutino por…?

J: …Sí, sí… hazte el loco cabrito..

P: No, sí va a ser verdad que aún está dormido.. jajaja..

Y: …? … No lo pillo… que me queréis decir con el cachondeo?

J: Joder macho… pues que ayer tuviste una noche movida, no..? Jajaja…

Y: …Coñooo…

P: …jajaja… ahora parece que cae en lo que queremos decir…

Y:… Joder… tan evidente es..?

J:… Jajaja.. que no te enteras Contreras…

P: Te recordamos que las habitaciones no tienen techo y las paredes son medio de papel..?

Y: Ostia puta… nos oísteis ayer noche…?

J: …. Jajaja… toito to lo oímos…

P:… Dolby Soround.. ya te lo pasaste bien cabroncete… jajaja…

Y:… y yo que creía que ya estabais sobados, porque os oí roncar al momento…jajaja…

J: Somos de sueño ligero… jajaja…

Y: … ya, ya… bueno, pues sí… tuvimos un calentón y nos aliviamos.. jajaja…

P: …. Jajaja.. ya nos dimos cuenta, ya… jajaja…

Y:… ok, ok… pero no digáis nada delante de ella, no vaya a molestarse o cabrearse..ok?

J y P: … Vale, vale.. no te preocupes que ya nos conoces… ni mu…jajaja…

Y: de hecho esa fue la segunda vez ayer que lo hicimos…

J: Cómo…? Y cuando fue la primera? Porque aquí no fue, o al menos ni nos dimos cuenta..

P: pues sí… sí fue aquí ni nos dimos cuenta.. así que ahora cuenta….

Les conté como Sara y yo mientras subíamos a la casa rural íbamos jugando, y tuvimos un calentón, y que cuando paramos para refrescarnos nos fuimos detrás del coche y estuvimos un rato el uno con el otro dándonos el lote y aliviando la tensión, con el morbo de la situación, el sitio, el riesgo de que nos pillasen, etc. Ellos escuchaban entre risillas y gestos de aprobación, notando que a ellos también le ponía esa situación que yo viví con Sara. Como ya eran las 9H empezamos a preparar cosas para desayunar, y hicimos un poco de ruido, apareciendo al momento Sara en el comedor también para desayunar.

S: Buenos días…

J y P: Buenos días..

Y: Buenos días dormilona… jajaja..

S:… mmm.. síii, la verdad es que he dormido muy a gusto…(mientras se desperezaba)

J y P:…. Jajaja….

Y: …. Jajaja… pues venga.. a desayunar…jajaja….

S:… mmm.. pues sí, que buena pinta tiene todo.. no hay nada como levantarse y encontrarte el desayuno hecho… jajaja…

A todos nos hizo gracia el comentario de Sara, y nos sentamos en la mesa a desayunar para coger algo de fuerzas para pasar el día fuera. Mientras lo hacíamos, hablábamos un poco de todo con el cachondeo que a veces nos traemos entre nosotros, aunque también cuando tenemos que ser serios lo somos. Al terminar, recogimos las cosas y pusimos los trastos a lavar en el lavavajillas, mientras pasábamos por la ducha para refrescarnos, limpiarnos y prepararnos para subir a pasar medio día en Andorra.

Una vez aseados nos fuimos a coger mí coche al ser más amplio para irnos. Nosotros íbamos con pantalones cortos y camisetas, Sara también se había puesto unos pantalones cortos tipo shorts y una camiseta que le marcaba bien su cuerpo. Juan y Pedro se subieron detrás y yo conducía y Sara de copiloto. El viaje, unos 45 minutos, discurrió entre el buen rollo y las risas, además de ir oyendo la música y cantando. Como Andorra la conocíamos, y después de comer iríamos a alguno de los supermercados para hacer las típicas compras, decidimos ir a ver una de las pistas de esquí que no cierran nunca y que se pueden visitar. Aparcamos el coche y cogimos el telecabina que nos subiría hasta las pistas, desde donde se tienen unas vistas preciosas del Pirineo. Una vez en ellas, cogimos los remontadores para movernos por ellas, en el primero se subieron Juan y Pedro, y detrás de ellos Sara y yo, mientras nos desplazábamos en el nos íbamos dando picos, y jugando con nuestras manos, también haciendo algunas fotos.

Y: Chiky… que tal?

S: Muy bien, está todo precioso..

Y: No más que tú cielo..

S: Jajaja… zalamero…

Y: Jajaja… por cierto…. verás…

S: a ver….

Y: Está mañana antes de levantarte he hablado un rato con ellos…

S: … Aja.. y..? De qué..?

Y: …Jajaja… pues que ayer por la noche hicimos ruido…

S:… eh… quieres decir que nos escucharon…?

Y: Sí, sí… jajaja…. Yo también creí que estaban dormidos, pero no… y nos acabaron escuchando… jajaja…

S: …. Jajaja.. joder… que corte… vaya tela…. Jajaja… y que te han dicho…?

Y: …Jajaja.. sí… pues nada, que tranquilos, que lo entienden y más sabiendo que tú y yo nos traemos nuestro rollo de follamigos.. que es normal y se imaginaban que podía suceder…

S: Vale, vale…que morbazo, no? Jajaja… y que más?

Y: No, nada más… jajaja…

S: Ok… me ha gustado que me lo dijeras… ahora tengo más ganas de estar con ellos también haciendo realidad mí fantasía….

Y: …Jajaja… ya me lo imagino, ya… pero todo será, aún no ha terminado el día y todo es posible… ya se me ocurrirá algo…

S: Si, si, sí, porfa…. Jajaja…

Y: Zorrona… jajaja… ok… ya veremos…

Estuvimos un buen rato caminando por las pistas, viendo el paisaje, haciendo fotos y selfies, ya que el día estaba claro y habían muy buenas vistas del Pirineo. Nos volvimos a subir al remontador y nos fuimos a tomar un refrigerio en la terraza del bar de la estación. Al rato nos fuimos bajando con el telecabina para volver a coger el coche e ir al pueblo que conocíamos para comer en un sitio tranquilo y lejos de toda la gente. La comida fue muy agradable, hablando tranquilamente y disfrutando de lo que habíamos pedido para comer y beber. En la mesa disimuladamente, Sara y yo jugueteábamos con nuestras manos sobre nuestros muslos, de manera pícara e inocente. Casi sin darnos cuenta ya había pasado más de medio día, y sobre las 4, bajamos ya a Andorra a hacer las compras típicas en el supermercado y bajarnos de nuevo a la casa rural. Por el camino, y después de la charla con Sara en el remontador de la estación, iba pensando en como hacer para liar y entrar a mis amigos para que no pensarán mal y poder hacerle un buen grupal a Sara y que cumpliera su fantasía, aunque ya algo tenía pensado.

Llegamos a la casa sobre las 18:30. Guardamos las cosas y nos fuimos a cambiar para ponernos el bañador y darnos un baño antes de preparar la barbacoa de la noche. Sara se puso un bikini rosa chicle muy sensual. Esta vez no pillamos por sorpresa a Sara sobre la temperatura de la piscina, ya la conocía, y una vez dentro comenzó como el día anterior con sus jugueteos dentro del agua de manera disimulada, le encantaba provocarme y yo mientras tanto pensaba en como organizar algo para la noche.

Al cabo de un buen rato dentro nos salimos del agua y nos secamos, también aprovechamos para encender la barbacoa para hacer las brasas y bajar las cosas para hacerla, la carne, las bebidas, etc. Mientras se hacían íbamos tomando algo de beber entre risas y comentarios divertidos. Empezamos a preparar la cena, algo de carnes, pero nada que fuera muy pesado para pasar la noche, con lo que en un momento lo tendríamos preparado.

Como ya era de noche y empezaba a refrescar, ya que eran las 21H, decidimos cenar tranquilos en el apartamento, además también nos teníamos que cambiar los bañadores húmedos por nuestros pijamas, que como el día anterior eran pantalones cortos y camiseta. Mientras nos cambiábamos Sara me miraba de forma entre pícara e inocente, cosa que me ponía un montón y que internamente me ponía cerdo pensando en lo que se iba a liar después de la cena. Todo transcurrió de forma amena y divertida, comiendo y bebiendo de forma tranquila, pero las cervezas y el vino iban cayendo muy bien, provocando que nos fuéramos poniendo más alegres. Llegaron los postres, el café y unos buenos chupitos de Bailys, y entonces propuse que jugáramos a las cartas, cosa que todos estuvieron de acuerdo. Como solo había una baraja española, decidimos jugar en parejas, Juan y Pedro, y Sara y yo.

Mientras echábamos varias partidas, fuimos preparando y bebiendo nuestros cubatas y gintonics, pero sin ponernos borrachos, sí con cierta alegría, por lo que ya habíamos bebido. Ya era cerca de las 24, y con el puntito que todos teníamos encima decidí arriesgar mis cartas y provocar lo que Sara durante tanto tiempo me había pedido.

Y: … La verdad que está siendo una buena noche, no?

P: Pues sí, la verdad…

Y: Ya, ya… pero… hay una cosa que hablé con Sara hace un tiempo..

J: De que..?

S: Ahora no caigo… (Haciéndose la despistada)

Y:… Ya… bueno… la cuestión es que ella y yo tenemos pendiente una cosa… una partida de cartas en la que quien pierda de los dos ha de obedecer al otro en lo que quiera, y puede canjearlo en cualquier momento y lugar por lo que sea…

S:…. Ah, sí… no me acordaba… es verdad.. jajaja…

J: Vale… y eso…? Que quieres hacerlo ahora..?

P: Sí, y no sé sí eso nos incluye a nosotros…?

Y:… Jajaja.. sí y no… todo dependerá… Te juegas esa partida ahora chiky…?

S:… Jajaja… miedo me das… jajaja… pero sabes que me gustan los retos…

Y: Vale… sí te parece bien y para que sea justo, lo hacemos a la mayor puntuación… solamente dejamos las cartas de valor, As, tres, sota, caballo y rey, y las barajamos, cogemos tres y las vamos volteando, y quién tenga la puntuación más alta gana… te parece bien..?

S:… Mmm..??? Vale..! Acepto…!

J y P: Jajaja… ya verás…

Dejamos solamente las cartas con valor, y se las ofrecí a Sara para que las barajase, lo hizo durante un rato, mirándome a los ojos, retándome y provocándome, tenía la mirada preciosa, de fiera, con ganas de salir, se le notaba el vicio, pues creo que sabía que yo estaba provocando esa situación y captó lo que quería hacer y no se aguantaba las ganas de que se lo hiciera.

Ella sabía que sí ganaba yo provocaría su fantasía involucrando a mis amigos, siempre que estuvieran de acuerdo, pero sí ganaba ella, también podría suceder, así que era consciente de que de una forma u otra los dos ganábamos, aunque de cara a mis amigos uno de los dos era el perdedor.

Extendimos las cartas boca abajo en la mesa, y dejé que Sara cogiera 3, y yo cogí otras tres.

Iríamos descubriendo una ella y otra yo y sumando los puntos con el valor de la baraja española. Su primera carta fue un as, 11 puntos, empezó fuerte, la mía un caballo, 3 puntos. Su segunda carta fue un caballo, otros 3 puntos, la mía un 3, 10 puntos. Por fin teníamos que destapar la última.

Y: Venga… dale la vuelta, valiente… (Picándola)

S:…Jajaja.. te recuerdo que voy ganando por un punto, 14-13… jajaja…

Y: Jajaja.. lo sé.. pero tienta tú suerte…

S: Que cabrito..! Ya verás… mira…(Le dio la vuelta a su última carta y era una sota, 2 puntos)

Y:… Jajaja… solo llevas eso..? Mal te veo chiky… jajaja…

S:… Jodeeerrr… jajaja… aún vas a tener suerte cabrito… jajaja…

J: Pues mal lo llevas Sara… jajaja…

P: Todo puede ser… igual saca otra sota… jajaja..

Y: Ahora veremos… (Le di la vuelta y era un rey, 4 puntos, con lo que ella sumaba 16 puntos y yo 17)

Y:…. El rey siempre gana…. Jajaja…..

S:…. Qué cabrooonnn…! Jajaja…

J y P: Jajaja…

S: (Poniendo morritos y haciendo pucheros en broma) No es justooo!… Joooo…

Y:… Jajaja… Totalmente justo y con testigos… jajaja…

P y J:… Jajaja.. sí, sí, lo hemos visto todo….

Pasado el rato de risas entre los cuatro, decidí tomar otra vez la iniciativa y ver como podían reaccionar mis amigos a lo que iba a provocar a propósito, y cumplir la fantasía de mí preciosa y viciosa Sara.

Y:… Pues ya que he sido quién a ganado esa partida… hay testigos de cómo fue, y saben lo que nos jugábamos… pues quiero ahora hacer valer ese derecho…

J: Coñooo! Ya? Tan rápido…?

P: Sí… lo vas a gastar muy rápido… jajaja…

Sara me miraba con un brillo en sus ojos especial.

continuara