Esa mujer es mía IV

Cerró su laptop y se fue a dormir en brazos de su esposa, ya tendría tiempo para leer y seguir creando.

No existe nada más interesante que la conversación de dos amantes que permanecen callados. Achile Tournier

Cuando Alex entró a la cabaña, Adriana tenia en una mano una de las tantas fotos de ellas, donde Adriana la tenia abrazada con una sonrisa de felicidad y en la otra,  una imagen de ecografía tridimensional.   Con la las imágenes en las manos, se volteó a mirar a Alex, y la miraba intensamente. A su vez Alex le miraba expectante, pero sintió una extraña mezcla de confusión y culpa cuando vio las lagrimas de Adriana correr suavemente por su rostro, y corrió donde ella, y le abrazó,

-         no llores amor, ya tendremos tiempo de tener otro bebe- y le besaba en sus mejillas.

-        No, déjame llorar- decía Adriana con sus lágrimas corriendo por su rostro, pero no eran lágrimas de dolor, eran de descanso, de encontrarse esa tarde ya en el lugar donde podía hallar todas sus respuestas de búsqueda.    – Me tranquiliza saber que si es cierto,  que si pertenezco a tu vida.  Es era algo que aunque me asustaba, ahora lloro de tranquilidad.  Déjame llorar por mi hijo que aun no lo lloro, déjame que se me quite todo el miedo que tengo.

-        Amor quiere decir que ya recordaste?- preguntó feliz.

-        No Alex, aún no recuerdo mucho, pero siento una tranquilidad dentro de mí, y se tocaba el corazón y Alex la llevo al sofá, la sentó con ella, le quitó los zapatos, me siento que pertenezco al lugar.

-        No nena, el lugar nos pertenece y has puesto de ti en cada rincón,   hay de ti en la decoración, sientes pertenencia porque es tu hogar, no perteneces al lugar, el lugar nos pertenece y tu me perteneces, jajajaa Eres mía, y le beso tiernamente. El hogar esta donde estemos nosotras juntas, no importa el lugar.

-        A veces eres tan profunda y otras tan ….

-        Infantil? Jajaja. Nena mírame y siénteme con amor, para que perdones mis acciones infantiles, solo así sobrevivirá el amor que nos tenemos.

Alex le acariciaba, para consolarla y solo quería que sus caricias de amor, fueran tan constantes, que Adriana las aceptara de la manera más natural y viera en ellas todo el amor que le tenía.

-        Amor te enseño la casa? O quieres recorrerla tú sola y encontrar en cada espacio tus recuerdos, almorzamos antes? Descansamos luego? Hacemos cositas ricas y sigues explorando la casa, volvemos a descansar y volvemos hacer cositas ricas- le decía Alex, con una sonrisa coqueta.

-        Cositas ricas? jajaja. Puedo preguntarte algo serio, antes de mirar la vivienda- le preguntó Adriana expectante.

Adriana se preocupaba, porque sin desearlo pudiera lastimar a su chiquilla.

-         “Mi chiquilla?, es mía, es hermosa, en su rostro se le ve el desespero y la ansiedad, porque yo recuerde y que no la deje fuera.  ¿Fuera de qué, si no recuerdo, ¿qué me estoy perdiendo? ¿qué me espera a mi?”   Aún con todas esas dudas, ella misma se respondió.  “Adriana sino recuerdas igual no tendrás nada, con ella algo tengo, ¿será suficiente para sostenerse en el tiempo?”

-        Ay amor- dijo Alex colocando su manos en las mejilla de Adriana - deja de maquinar tanto, tus pensamientos saltan fuera de ti y se apoderan de la atmosfera, me has sentir vulnerable y temerosa, pienso que en unos de tus arranques, te quieras ir y me dejes.   Puedes preguntarme lo que quieras, si amor lo que tu desees, no me va dar infarto cerebral, no soy tan infantil como mi edad. – Le decía en broma pero con todo el miedo que Adriana veía en ella.

-        Quiero saber que esperas de mi? No te asusta que no recupere la memoria? No te asusta que no llegue amarte?

-        Okey, contestaré todas tus preguntas, si antes contestas una sola que yo tengo- Le dijo tomándole sus manos.

-        Cuál es? Le preguntaba recreándose en sus ojos verdes, en las pecas de su rostro, Adriana quería reconocer sin que se viera, cada centímetro del rostro de Alex y aprenderlo de memoria.

-        Por qué viniste conmigo? – Le pregunta sentada en el sofá al lado de ella, tomándole sus manos y viéndole fijamente a los ojos.

-        Porque me obligaste- dijo Adriana sonriendo, para bajarle la intensidad que cortaba el ambiente, ella misma tenía miedo de la respuesta.

-        Es serio Adriana Montoya, es serio. Yo sé que aun sin memoria no eres mujer que se deje dominar.

-        Ya lo sabes, vine a recuperar 5 años contando este que casi termina, de recuerdos que formaron vida y que se perdieron como la caja negra de la avioneta que piloteaba.

-        Ok ya están contestadas todas las tuyas. Esos 5 años de tu vida estuve yo, si recuperas tus recuerdos ahí estaré en ellos, si tu recuperas tus recuerdos ya no tengo que ejercer derecho, porque me lo concederás como siempre, y escucharé de tus labios y con tu voz que me excita, “soy tuya”.    Pero sino los recuperas, igual estaré para que formemos nuevos recuerdos. Porque te amo, y te enseñaré a amarme..- mientras le decía le pasaba el dedo por los labios y Adriana se dejaba hacer.  Sabes que tu boca me fascina- le dijo contemplando sus labios…. Es una tentación para mí- y le dio un beso suave.

Adriana, quería revestirse de indiferencia pero esa chiquilla no le daba tregua.  “Cada vez que me acaricia, mi piel se pone en pie, ya sé, por mi piel que es ella quien me hacía reír y convulsionar, en mis recuerdos cuando me sometían a hipnosis.  No creo que luego de ella yo tenga una amante, o será que si tendré una amante y ella no lo supo?”

-        Ya se acabó el drama- dijo Alex poniéndose en pie dándole la mano. Vamos te voy a presentar tu espacio personal, el cual hasta para mi estaba vedado. ¿Sabes que tú eres una mujer misteriosa? – decía llevándola de la mano recorriendo todas las estancias sociales de la casa, en busca del estudio, el sitio personal de Adriana.

-        Si? No sabia, pienso que siempre he sido tímida, algo asocial.

-        Pues yo creo que eso reflejabas a la gente, pero yo que te conozco, te digo que te gusta guardar mucho de ti para ti, y eso siempre me tenia expectante en querer descubrir tu misterio. Y tu solo sonreías diciendo no hay tal misterio.   Hoy podría aprovecharme de ti - decía sonriendo y viéndole mientras caminaban-.

Alex no podía o no quería apartar sus ojos de ella, aun no podía creer que Adriana estuviera viva, que estuviera con ella en casa, a pesar de todos sus miedos, estaba feliz de verla y que pudieran estar juntas recorriendo la casa, que habían decorado con sus gustos.

El gusto sereno y exquisito de Adriana y el gusto moderno y alegre de Alex, a pesar que si un decorador profesional, lo hubiese visto, de seguro no le hubiese gustado.   Ahí en su casa se veía el respeto por los gustos diferentes.

Adriana se sonreía cuando en una sala se veía una gran televisión conectada a juegos de video.

-        Hey no te  rías, y no me mires así- le dijo Alex, que aunque no lo creas esos juegos son tuyos, te fascina jugar Play y contra la maquina, porque yo soy muy mala para esos.  Así que mujer hermosa quita esa sonrisa socarrona.  ¿Y los juegos los recuerdas?, Adriana hacia gesto con su cabeza que no, y ambas se veían alegres por las pequeñas cosas que le daban a Adriana un sentido de pertenencia con su hogar.

En tu estudio hay muchas cosas tuyas a la vista, pero hay muchas que no conozco tampoco, porque aunque muchas veces te secuestré, alejándote de tu inspiración sabia que ese era tu espacio personal y que además hay cosas que guardas bajo llave.

-        Y no te daba curiosidad?

-        Bueno siempre fue motivo de bromas te preguntaba que si en esos cajones guardabas las pertenencias de tu amante.  Siempre me decías,  si tengo una amante. Y mantenías todo con llave, yo creo que si, tenías un amante.

-        Si? Lo sabia!!!!.

-        Jajajaajaa, si claro, como no,- dijo Alex de manera sarcástica- espérate que yo te iba a dejar- dijo riéndose, no nena, tu amante eran tus letras, yo a veces me ponía celosa cuando pasabas horas ahí encerrada escribiendo en tu laptop, y cada vez que yo quería leer.  Decías no!!!!, cómpralo cuando salga, burlándote de mí.   Tengo toda tu colección, autografiada tengo tres ejemplares por cada titulo.  Y al llegar al estudio le dijo : Y aquí esta tu santuario.

-        ¿Que mi fans numero uno?-preguntaba Adriana entrando al estudio y recorriendo con sus manos la fina madera del escritorio, luego se acercó a la biblioteca, un mueble de piso a techo, de pared a pared, lleno de libros y fue recorriendo. Se detenía  y sacaba cada libro por sus títulos y mirando a Alex, le dijo:

-        Lo más paradójico es que recuerdo cada libro que leí y en que época exacta, este por ejemplo lo leí en mi primer ciclo de universidad, porque quería coquetear con un chico que me gustaba, y era todo dado a la filosofía y las letras.

-        Si me habías contado de tus novios de la U, pero no quiero saber otra vez, no me gusta saber- dijo Alex impaciente.

-        Por qué? Te molesta?

-        Me molesta? … pues si me molesta saber que otros labios te tocaron, por eso no quiero recordar, pero me da un sentimiento aquí y se tocaba su pecho, saber que puedes recordar a tus novios de U, pero yo me fui dentro de la caja negra de la avioneta.- Le dijo dolida., pero inmediatamente sonriendo le dijo-     Adriana estas en tu casa, mira tus libros, mira todo lo de la casa, yo mientras voy donde Dolores, para que sepa que estamos aquí, aun que ya debe saber, para que este pendiente de los alimentos y todo lo que corresponde.

-        Tu hacías todo eso? de estar pendiente de la casa y todas esas  labores.- Preguntó asombrada.

-        No, yo soy un desastre para el hogar, todo eso lo hacías tu, pero como no recuerdas nada te ayudo, para eso te prometí en la salud y en la enfermedad, pero te prefiero buena y sana.

-        Para que recuerde pronto?

-        No!!!! como se te ocurre para que te hagas cargo de la casa, jajajaja, es broma nena, quiero que estés bien ya nena, decía desesperada.

-        Entonces te vas, ¿me vas a dejar sola?

-        Nena, estas en plena zona vedada, y conociéndote como te conozco, demoraras, y es preferible que estés sola, porque no soporto que me hables de tus novios.

-        Jajaja, eres tontita.

-        Ujummm, lo sé.

-        Bueno ve con dolores. Y yo me quedo conquistando tu zona vedada.  Donde queda Dolores? No vas a demorar? Dolores quien es? Tu amiga? Mi amiga?

-        Jajajaa, es la señora que cuida, no te preocupes.

-        De que me preocupo? No lo estoy.- decía sin reconocer que aun sin recuerdos era afectada por los celos.

-        Jajajaja, si claro que no, Bye hermosa, te amo. Y le dio un beso sostenido en sus labios. No demores mucho aquí amor, que yo quería…. bueno estas en tu casa- dijo haciendo un gesto de conformidad  y se dirigió a la puerta.

-        Alex, querías que? – le preguntó también anhelante- yo no te he dicho que te vayas.  Lamento si me aíslo, pero es que veo cosas que conozco, y me alegro, pero no quiero que te vayas. Tal vez antes me gustaba estar en este espacio sola, pero ahora no lo siento así, prefiero que estés conmigo.

-         Gracia amor, me quedo contigo. ¿puedo revisar como lo estas haciendo tu?, por que no me dejabas.

-        Revisa conmigo, no creo que sea tan importante que tú no debas saber.

Adriana a medida que veía lo que se encontraba en el estudio, veía muchas cosas que la ligaban a Alex, y ya no se trataba de un pensamiento.  Ya se iba formando un conjunto de imágenes, su imaginación, su memoria, eran a veces tan agudas que tenía la sensación de que las imágenes se proyectaban o surgían de algún modo, como fantasmas, del entorno que las rodeaba,  y de tantos flash de memoria le empezaba a doler su cabeza,

-         “Tantas imágenes me agobian,  no son imágenes vacías, son tantas y tan llenas de emoción que me están embriagando, ¿puede uno embriagarse de fotos y videos?”

Y cada vez que veía una fotografía, levantaba su vista mirando a Alex, que se había acostado en el sofá del estudio con un libro abierto sobre su pecho, solo contemplando a Adriana que tenia cada reacción en su rostro cuando veía las fotos, unas fotos cotidianas, otras fotos muy personales de ellas juntas.

Alex se sonreía cuando la veía ruborizar, porque sin levantarse sabia que foto podía estar viendo, porque ella recordaba esos tiempos cuando le gustaba tomarle fotos desnuda, luego de hacer el amor, porque en su rostro no solo  se veía la satisfacción del clímax, sino la gama de  emociones que da el amor.

-        “Dios todo lo que quiero es que retorne a mi la emoción que veo en mi en estas fotografías, esa alegría esas risas y porque no esa pasión, que aunque fuera en hipnosis me hacia convulsionar de éxtasis, solo quiero estar de verdad viva”   Así Adriana llego a su laptop y cuando la abrió, la misma tenia clave.

-        Alex cual es la clave del laptop.

-        Hmmm, difícil nena, ya te dije que

-        Si que era una estudio inexpugnable para ti. Yo era estúpida Alex, pero luego que casi muero, perdí la estupidez, bueno eso creo. Ayúdame a averiguar cual es la clave, que tal encontremos ahí el plano del tesoro.

-        El tesoro seria que recuperes la memoria ya. Jajaja

-        Te molesta que no tenga memoria?

-        Molestarme no, me duele, me cohíbe un poco.

-        Jajaja, Alex no creo que te cohíbas por nada, me gusta tu forma de ser,  y no debes hacerlo nena, porque así no tenga los recuerdos restaurados, yo quiero revivir todo como era antes, y si dices que soy tu mujer, entonces quiero ser tu mujer, quiero pertenecer a alguien.

No puedo creer que no sepas cual es la clave, has debido hacerme trampas y conocerla.- decía desesperada poniendo cuanto palabra se le ocurriera.

-        Jajajaja trampas?  ¿Sabes que nos prometimos cuando nos casamos? que siempre hablaríamos con la verdad, nos prometimos decirnos cuanto nos amamos sin ocultar sentimientos, nos prometimos que si dejamos de amarnos, mejor cerrar que destruirnos, nos prometimos que no importa que suceda, antes que la pasión, esta la amistad, el amor, la confianza, pero tu a veces me hacías trampitas, y entre ello esta la clave del laptop, nunca me lo dijiste, pero tampoco te presione a que lo hicieras. Eso era tuyo. -  Ok prueba con la fecha de tu cumpleaños- dijo Alex ya levantándose y yendo a su lado, para averiguar la clave.

-        Nada. Pondré el tuyo, nov10, nada.

-        Eres bella, y le dio un beso el la mejilla.

Adriana alza sus ojos y la mira,

-        Crees que soy así de cursi, para poner esa frase, y tecleo eres bella, nada Alex no es la clave, cómo accedo, quiero ver que tiene dentro,

-        No te dictaba una frase, te daba el mérito que recordaste la fecha de mi cumpleaños, ves, ¿sino hiciera parte de ti, como la sabrías?.  Ya vas entrando poco a poco en tus recuerdos. Y de verla desesperada, probando cuanta clave se le ocurría.  - Cálmate, mañana llamamos alguien que maneje sistemas y que le quite la clave.

Asi pasó otro día redescubriendo en cada espacio, en cada foto en cada video los momentos que formaron su cotidianidad y Alex aprovechaba cada espacio para darle su amor, le tomaba de la mano, le besaba, le tocaba la cola cuando pasaba, le besaba en el cuello, cuando dormían eran los senos de Adriana el lugar perfecto para reposar su cabeza.  Adriana todos los días, sentía que amaba a Alex, y era mientras dormía que su cuerpo la pedía a gritos.  Pero lo que solo se permitía en sus sueños ya le estaba agobiando en el día.

Por eso  exteriormente tanto Alex  como Adriana, se podían ver serenas, pero Alex seguía insegura, no sabia  si debía avanzar mas allá de los besos, que le prodigaba con amor a Adriana, y que en estos días eran devueltos sin reparo alguno, pero nunca surgían de Adriana para ella,  mientras que Adriana se sentía contenta, pero sentía que algo le faltaba,  y ya sabia que era, pero no se atrevía que saliera de ella un avance, ella no podía disimular el estremecimiento que le producía el contacto del cuerpo de Alex cuando dormían, o cuando por cualquier circunstancia, que era todo el día, Alex  le rozaba, la chiquilla  no le daba tregua, en eso se sentía como si estuvieran siendo novias,  cada toque de mano, cada caricia, cada beso, hacia que sus pezones se tensaran, siempre estaba conteniendo el aliento, de deseo.  Pero no se atrevía, porque no dejaba de ser una chiquilla, aun tuviera el nombre de esposa.

-        “Sí, oh sí - murmuró. Una parte de su mente daba respuesta a sus preguntas, la parte más primitiva, de su ser quería a Alex, y ya lo aceptaba.

En ese momento siendo casi las siete de la noche ambas reposaban en la cama, cada una en sus pensamientos.   Adriana sabia que ella tendría que dar mas de si, si quería recuperar todo, sabia que lo que le hacia falta era amar a su mujer. Y con timidez cogió la mano de Alex, que tenía sobre el pecho, le dio la vuelta, se la llevó a los labios y le dio un suave beso. Alex que leía un libro, se incorporó y en su rostro saltó la sonrisa más tierna, y coqueteó con su mirada con Adriana.

-        “ La chiquilla no es tan segura, como aparenta”- pensaba Adriana.

-        Alex hemos hablado de todo y no me has dicho como nos conocimos, fui yo quien avanzó contigo?.

-        Jajaja, bueno veras te dije que tengo tres ejemplares por cada libro tuyo, asi nos conocimos,

-        Si mi fans número uno.


Adriana Montoya, se hallaba sentada en la plaza del café, del centro comercial, antes de ingresar a la librería Latinoamericana a cumplir con  la sección de autógrafo, de su ultimo libro-  Adriana Montoya, quien a pesar de su joven edad, la vida le dio el regalo del triunfo, debido que en sus letras, se hallaba la imaginación desarrollada para el drama y la acción, pero su timidez, la hacia una joven solitaria,  le gustaba el brillo del sol del Caribe, siempre acostumbrada a la fría ciudad donde vivía y llevaba su profesión. Siempre pensó que el calor hacia a las persona del caribe alegres, extrovertidas, y le gustaba estudiar cada persona que veía, le gustaba analizarlas de acuerdo a su forma de sentarse, en su imaginación las clasificaba y hacia anotaciones que a futuro le sirvieran para describir personajes.

_ “Ese señor que esta ahí sentado, fumando su pipa, cuya picadura de tabaco huele rico, se nota en el olor que es fina, que es un hombre culto, lee el New york time, en su notebook, lo lee en ingles.  Si es culto acerté,”   A veces la gente se sentía incomoda, de tanta observación, por lo cual siempre disimulaba viendo varias personas.

En esa observación de persona conoció a Alexandra, que venia con un grupo de chiquillas de colegio, con un bullicio impresionante, que todos los que se hallaban en la plaza, volteaban a ver, se veía que, o se habían escapado de clases o les habían dado la tarde libre, porque aun con morrales se paseaban entre risas por cada vitrina del centro comercial, ilusionándose en compras que no harían ese día.   Cuando se oye una voz, que les grita

-  ¡!!!hey espérenme no me dejen y por todo el pasillo patinó corriendo para unirse a las otras chicas, traía volando el morral, y por la forma que volaba, se veía que no cargaba libros,  patinaba  por todo el corredor, y para  no incomodarse,  había alzado la falda del uniforme, por debajo se apreciaba su licra que ajustaba sus piernas, era lo mas llamativo  que se pudiera ver y su complemento era pelirroja, con toda su cabellera alborotada, se notaba en ella que no pasaba peine por esos rojizos cabellos, hace años luz.  Venia literalmente patinando con esas zapatillas patines, venia mirando Adriana quien también la observa sonriendo, pensando que podría ser fácilmente descrita, como bulliciosa, alegre, indisciplinada, irreverente, ahí no había misterio se veía en ella que era la chica popular, seguro era porrista.

Y Alex le grito al grupo de chicas:

-        Hey es Adriana Montoya, adoro a esa tipa, escribe genial, las chicas no le hicieron caso, no sabían quien era Adriana Montoya, espérenme ahí, y corriendo tal cual había llegado, llegó ante Adriana, se sentó frente a ella, con tal violencia que el café tinto que casi terminaba se volcó sobre la mesa.

-        Cuidado te quemas. Le grito Alex y trato de atrapar el vaso de papel y a la vez que Adriana hacia lo mismo, para detenerlo, sus manos se chocaron y la corriente que les pasó por sus manos hizo que ambas soltaran el vaso.

-        Jajaja perdón, le dijo Alexa, mientras Adriana simplemente bajaba su vista a sus manos que temblaban. “Esta chica esta magnetizada, pasa corriente”

-        Hey, te conozco tengo tus libros, me gustó el ultimo la “Musa de Papel”, esa que describes ahí, eres tu verdad?-  se fue sentando cómodamente a analizar lo que ella creía veía en las letras del libro.  Pero ese libro tiene continuación o ¿que?, ¿lo vas a dejar así corto en la conclusión? Sabes esa parte no me gustó.  Oye tus eres mucho mas linda que en las contraportadas, me gusta tu boca.

Adriana seguía cada palabra que salía incontenible de la boca de Alex, pero ella estaba muda, ruborizada de los elogios de Alex, y de pensar que también le gustaba la boca de Alex.

-         Hey, te pusiste roja como tomate, que linda.  Te invito al tinto que te derrame.

-        Disculpa me tengo que ir, tengo un compromiso.- le dijo mas huyendo de sentir lo que le despertaba la chica, que por lo que anunciaba.

-        Hey como así 5 segundos nos tomamos el tinto y me regalas tu correo,  quiero ser tu amiga, “ mas que tu amiga”- le decia sonriéndole con la mejor sonrisa, saliendo por sus ojos su admiración y coqueteo.

-        Disculpa en verdad tengo que firmar autógrafos en esa tienda.

-        Autógrafos, siiii fírmame mis libros. Hasta cuando estas?

-        Lo siento solo firmo si compran en la tienda, no me lo invente yo , son los editores.- le dijo sonriendo tímidamente.

-        Ok, si compro me autografías el libro?

-        Si, y tienes derecho a unos cuantos minutos de conversación, se reía de ella misma y de las reglas que se inventaban para vender.

-        Listo, y cuando Adriana ya se iba, ella la detuvo y volvió a pasar la corriente.  Hey que pasa porque me rechazas alzas el voltaje cuando te toco.

-        Jajaja yo? Podría decir yo lo mismo.

-        A ti, rechazarte, si tu provocas es darte un beso y abrazarte.   Entra a tu firmas de autógrafo, voy al cajero y tengo un montón de preguntas que hacerte.  Me vas a dar el correo, así exigiendo más que preguntando.


-        Y así nos conocimos,- dijo Alex- compré uno a uno de dos ejemplares por cada titulo, porque ya yo tenía en casa, y te dicté cada dedicación.

-        Jajaja, y que decían las dedicatorias.

-        Una decía con amor para Alex, con amor eterno, sino lo escribías tal cual no me movía de la silla, así que me mirabas y lo escribías.  Otro dice, ¿Alex quieres ser mi novia? Te amo tu escritora favorita Adriana. Y te reías y te veías tan linda. nos volvimos amigas, hablábamos todos los días por chat, y así empezaste a venir a verme.  Sabes  tú no demoraste mucho en aceptar ser mi novia, yo sabia que eras solitaria, y me apodere de ti y de tu soledad.   Te gusta conversar conmigo, hablas mas que yo Adriana y eso es mucho decir, jajaja.    Así se tomaban de la mano, y se miraban, con esas miradas de enamoradas, que dicen todo.

-        Además tu me dijiste que estábamos escrituradas la una para la otra.  Y la miraba con amor y con pasión y veía en Adriana también esa mirada de deseo- Amor en tu memoria nueva se puede modificar a mi antojo? O vienes con diseño de fabrica? – dijo mirándole con burla con sus ojos.

-        Que quieres decir? Tragando en seco cuando Alex se subió a sus piernas a horcajas, para hablarle Y Darle besos a cada palabra.

-        Pues que si no tienes tu memoria, te quitaría de ti, cosas que no deberías tener.

Y le besaba sus ojos, sus sienes.

-        Por ejemplo – y besó su cuello, con fricción que dejaba marcas en la  piel-  nos gusta hacer el amor de medio día, y con respiración entrecortada por la pasión, le quitó la camisilla que tenia,  besándole el inicio de sus senos, y luego ella se irguió y se quitó la suya.

Adriana  se sonrojó aun mas y su pulso se aceleró, ante la total intimidad, y los labios de Adriana se abrieron con voluntad propia, en espera de otro beso de Alex, estaba casi hipnotizada de ver la blancura de Alex, su rostro recubierto de pasión,  su cabellera roja,  Alex  bajó la cabeza y encontró la boca de Adriana . Ella se estremeció cuando le mordisqueó los labios, y arqueó su cuerpo de placer, tantos días en espera de ello, había sufrido por el deseo insatisfecho varias semanas. Y con ese placer contenido tomó Alex de su nuca y profundizó el beso y fue ella la que la probó con su lengua con una pasión intensa.  Alex también suspiraba dejándose disfrutar su boca.

-        Por ejemplo que?- decía Adriana tratando de controlar su respiración.

-        Que luego de hacer el amor, -decía mientras besaba sus hombros-   odio que te levantes y me dejes sola y te vayas a escribir.

Y mordió suavemente el hombro de Adriana, que respingó cuando le hincó los dientes

-         Yo quiero quedarme contigo toda la tarde y hacer el amor contigo todo el tiempo- decia Alex.

Y besó con ansia sus senos y se apoderó de su pezón y lo lamia, y succionaba con intensidad,- no podía dar crédito que estuviera haciendo el amor a Adriana a quien la respiración se le había tornado irregular y del fondo de su garganta brotó un gemido trémulo y ahogado, y pasó la mano por la espalda de Alex, y luego por su costado, en sus ojos se veía las ganas que tenia de tocar los senos de Alex y ella que la conocía tomó su mano  y la llevo a su seno, y Adriana en total contemplación de la blancura  con sus dedos exploraba el suave pezón rosado que se erguía a saludar y sus dedos exploraron la forma del seno y se anidaron en su cuna.  Ese contacto la hacia temblar mas a ella, porque a medida que avanzaba en la exploración del cuerpo de Alex, sentía que recuperaba la pieza faltante y eso le dio un brío inusitado cambiando su timidez o temor a un volcán de pasión,

-        Eres hermosa, Alexandra Montiel – dijo- antes de también erguirse y levantarse al encuentro de Alex y la besó nuevamente explorándole con su lengua. Alex, abrió la boca y acarició con la lengua la de Adriana, en busca de los recuerdos y creando nuevos.

El beso se volvió más profundo. Con un poderoso abrazo se acercaron más y ambas se estremecían.   Adriana estaba incontenible y trazó un sendero de besos y saliva por la piel de Alex por donde alcanzara su boca, y sus manos le tocaban por doquier, con ansias, con desespero, Alex le incentivaba mas la excitación que tenia Adriana,  quería que se entregara toda, sin reserva alguna,  que volcara en ella todo un año de extrañarse.  Los senos de ambas se rozaban, se frotaban, se besaban y se aprisionaban con ardor.

En segundos, o tal vez horas, las dos estaban desnudas y sus cuerpos  se trenzaban, dejando de existir para ellas  el  pasado, el futuro, el tiempo mismo y solo  existan ellas en su amor, que hoy luego de mucho tiempo se expresaban no solo con pasión, en sus rostros también se reflejaba el amor.

Ambas mujeres, se reconocían, Adriana perdía todo temor de hacer suya a su esposa, Alex se entraba  en brazos de su mujer, al mundo de sensaciones que antes disfrutó, sentía como  los músculos de su vientre se encogían cuando Adriana exploraba su humedad y sus dedos se perdían en sus labios vaginales encharcados , en busca de su capullo en flor que ya palpitaba con ansias de ser atendido, y los espasmos de su interior, atraparon dentro de ella los dedos de Adriana, que besaba a Alex con adoración, y no quería desprender sus labios de la boca de Alex, mientras que lentamente retiro los dedos del interior, Te amo Alex, te amo-solo musito.

Alex, en un momento se quedó sorprendida pero luego con un movimiento la hizo rodar y la colocó bajo su cuerpo. Y sin descanso con su  boca trazó una línea con su lengua desde el cuello hasta un seno y ella dejó escapar un jadeo de excitación, y rodeó con la mano el seno, mientras su boca degustó el pezón de Adriana y lo probaba con su lengua y succionaba como infante,   Adriana con su cuerpo ardiente ya temblaba de placer, sin contención su espalda se arqueaba buscando mas de Alex,  quien succionaba  por doquier, haciendo que su cuerpo se tensara mas, Alex solo la llevaba a la cima máxima, porque sabia que detrás de la timidez de Adriana, existía una sensualidad que siempre la había atrapado.

Y con desenfreno, bajó a su vagina y con su lengua probó la piel sensible y húmeda de Adriana  y reverenció con su lengua el templo de su feminidad, y la poseyó luego con sus dedos, y cada vez que la penetraba unas veces suave otras veces firme,- le decía eres mía , eres mi mujer , te amo, dime que me amas, Adriana grita mi nombre,  Adriana Grita mi nombre,- eso le exigía en cada arremetida y el interior de Adriana  temblaba con múltiples espasmos como bienvenida a los dedos de su mujer.

Adriana se ahogaba en un torbellino de deseo. Y buscaba amparo en los hombros de Alex donde clavó sus uñas, mientras su cuerpo sin control se dejaba llevar por los espasmos incontrolables que le obligaron a gritar en éxtasis Te amo Alex te amo,  ella miró y le suplicó:

-        Ya Por favor..ya, porque Alex sus dedos los remplazó con su lengua y se apoderó de cada espasmo del interior de  Adriana y su lengua al ritmo bailó y con sus labios degustó y absorbió el elixir de vida sin descanso.

Cuando ya juntas, desmadejadas después de la vorágine vivida Adriana balbuceó

-        Okey, cuando hagamos el amor de medio día, no iré a escribir. Ya? Solucionado?

-        Si, decia Alex, aun abrazadas, con secuelas de temblor en sus cuerpos..Jajajja, huy si todo va a ser así de fácil, pero intenso, voy a seguir pidiendo. También quiero volver a ver en ti tus ojos siguiéndome con pasión, pero también con amor.   Le dijo dándole un beso tierno.

-         Y yo quiero ver sobre mi tu mirada, despertando en mi las ansias de tenerte siempre cerca.  Amor ya se cual es la clave del laptop, dijo dándole un beso en la mejilla.

-        Cual es?

-        Alex te amo.

-        Gracias amor, yo también te amo, cual es la clave?

-        Esa es la clave Alex te amo.

-        Hmmm, y yo pensaba que me lo decías a mi.

-        A ti, dijo mirándole con pasión reposada te diría mi hermosa chiquilla, dos días, no mas has estado de nuevo en mi vida y te amo lo se, y quiero recuperar con este amor que nos tenemos todo el tiempo que no te tuve a mi lado y recuperar cada recuerdo porque no puedo dejar que el golpe se lleve nada, porque sé que lo que he vivido contigo han sido los mejores días de mi vida. Te amo mi niña y esperó que Alex se durmiera en sus brazos y se levantó sin hacer ruidos, se colocó una bata y fue a su estudio.  Y Se sentó frente a su laptop, y tecleó la clave para saber si era cierta “Alexteamo” y se encontró con el nuevo libro que estaba en ciernes, con el titulo.

Alexandra mi Flor Vestal Y cerró su laptop y se fue a dormir en brazos de su esposa, ya tendría tiempo para leer y seguir creando.

…..

lamusasolitaria: Gracias, por leer, igual que tú me gusta la “pulcritud” en los escritos, pero lo leo máximo tres veces, pero lo hago tan rápido que no veo el error.   Porque  si lo sigo leyendo termino borrando demasiado, y luego digo eso no va y este menos y este tampoco, conclusión no va nada.  Tenme paciencia. ¿TR no tienes editores? Jajajaja.

SWALLOW66: Gracias, espero que este te guste.  (Leí tu relato y cocinas frijoles   Zaragoza, quien fuera Sara.jajaja).  Arcoíris sigue irradiando tus múltiples colores.

Jhonita89: Estoy de acuerdo contigo, y ya lo había expresado en un comentario, las buenas autoras nos dejan, pero están surgiendo nuevas, que están creciendo en experiencia, con ayuda de cada  comentario edificador. Gracias por leer y comentar .

angie: Gracias por leer y comentar y al decirme excelente el relato, me colocas una gran responsabilidad, y espero cumplir con tus expectativas.

Dann Mystery Rhode : Okey, me alegra que me sigas, así me extienda, que no creo… Estoy haciendo ejercicio de síntesis. Jajajaja.

blue: Una abrazo también para ti, de veras fue algo corto?  Creo que lo extenso les cansa, y se pierde la sazón. Tratare, no prometo nada.

Katomy: Si estuvieras frente a mí pidiéndome autógrafo, me verías roja como tomate. El honor es mío, que dediques de ti en leer.  Un abrazo y besos.  Es bonito, lo que dices,  que al escribir se despierten tales emociones.

braguitas: Lo pensé al contestar, jajaja.  Viniendo de ti, creo que salí bien librada, porque… he leído varios comentarios tuyos y eres  exigente  Espero cumplir y que tus ansias se vean satisfechas hoy, para crear nuevas.

Vane: tratare de hacer efectiva la magia, para seguir cautivándote. Besos para ti también.

VeronicaDuncan : Ese nombre me gusta, tiene fuerza: Yo también siento que te quiero, jajaj, Preciso de tus palabras por ello no deseo que quedes sin ellas, no quiero que sufras por ello no demore mucho,  o por lo menos lo compense con un poquitín mas largo. jajaja.

Lorely : Gracias , por leer y comentar, trato de que cada persona que lea se apropie de cada sentir, no se si lo sienten, pero trato.

Littleangel7: Mis respetos para ti, que dedicas de tu tiempo para leerme, gracia. Y  gracias por catalogarme de genial, porque es un paso después de la locura, luego ya supere la mente perturbada, Mala broma, lo se, jajaja.

Kesatuan ; 5mentarios y ya sabes por qué.

alanna ; Si,  a pesar de ser un mandato, me parece tierno siendo Alex una chiquilla, pero el amor todo lo vale.

Blackhearts : Hola también un gran saludo para ti, espero que este capitulo cumpla también con las expectativas y ansias que quedaron en el aire. Traté de hacerlo mas larguito, Podría ser el cierre también.

Karina : Besos para ti, gracias por dejarte encantar.

HombreFx; Gracias por tus comentarios.

AbrilR : Gracias por leer y comentar, y darme alientos para continuar.

PiccoloPoulin: Saludos también para ti, gracias por leer y comentar, Y si Alex es digna de admirar.

Labrys28 : Saludos, si a much@s les pareció corto, pero no lo fue tanto.  Este trate que fuese mas largo.

Penelope ; Me gusta el nombre por ser símbolo griego de la fidelidad conyugal, espero que sigas atrapada por mi   relato.  Un abrazo.

NZ7 : Besos también para ti, gracias por leer y comentar.

MGR19 : Gracias por incentivar mis ánimos de continuar escribiendo. Gracias por comentar.

Geira : La princesa? Gracias por comentar, muchos saludos para ti, y una sonrisa también.

Eliza13: Gracias por leer y comentar, gracias por tu admiración. Te deseo muchos éxitos en tu incursión como autora, éxitos miles. Saludos

lenny . Gracias por leer y comentar, gracias, gracias, por esas palabras, Saludos, abrazos.

Catte : Que linda, visualizar la historia en la pantalla, bueno creo que lo máximo que lo he recreado es cuando saltan de mi imaginación a cualquier hora del día, ya sin control cuando quieren las letras que se plasmen, para recrear a otr@s. Abrazos para ti.

lucia; Saludos para ti desde Colombia, gracias por leer y comentar.

enla : Saludos, gracias por leer y comentar, aquí esta la continuación para tod@s, espero que sea de su agrado.

Jess : Gracias por leer y comentar, y no deberías privarnos de tus comentarios, no sabes lo que ayudan a dar ánimos.

alexa : Gracias, como dije anteriormente, los comentarios nutren cuando el animo decrece.  Abrazos y besos compatriota. Huy me sentí cuasi política, jajaja, Gracias por tu apoyo.

El conejo juan: Gracias porque te haya gustado, espero que la continuación sea de tu agrado. Abrazos .

Martin: Aquí esta la continuación espero que te guste, gracias por leer y comentar.

Gracias, gracias, a tod@s por leer, gracias por permitirme ser parte de su imaginación, gracias.

Gracias a todos y todas los que leen sin comentar, y todos lo que valoran, gracias por los ánimos a continuar. :)