Es... Un poco Complicado 8 (Semi-Final)

Puede ser tan sólo una muestra de ironía, ó una simple jugada del destino en tu contra, puede ser que a veces las cosas no resulten, puede ser que no todo sea color de rosa, puede que a veces nos confiemos de todo a nuestro favor… que al final, sólo Dios sea él responsable de darnos una gran lección.

Días después

El reloj contaba exactamente las 5 de la tarde, era el festival de no sé que cosas de la universidad de Mariana, me entusiasmé a venir solo por que estaba cansada de estar encerrada en la casa, ya estaba trabajando pero a diferencia de lo que pensé, estaba trabajando en mi hogar, manejando mi propio tiempo… bueno, no? Quizás, Lo seria… si tuviera a alguien quien me acompañara todas las mañanas.

-   -en que piensas preciosa? – se me acercó ella, a punto de darme un beso que con gusto iba a recibir pero que sólo fue un “estuvo cerca”

-   -no sé, esto está aburrido…

-   -si? – siguió mi mirada – que quieres hacer? Te traje para que pasáramos más tiempo juntas

-   -Lo sé, pero no me siento a gusto – ya basta, a la mierda con la hipocresía, lo que realmente estaba jodiendome era que Mariana siguiera haciendo estas mismas estupideces y yo aún más de estúpida siguiendo su jueguito y aceptando sus ridículas condiciones.

-   -sabes que no me puedo ir aún, Lucia no ha llegado – y me puse a pensar en que momento había llegado a ser tan enormemente cachona

-   -Si, lo comprendo.

-   -Tati, amor…

-   -ah, Mariana que ridiculez, yo me voy – tomó mi mano con fuerza y me detuvo

-   -dejas ya esta tontería pues! Dame 30 minutos y estoy contigo – aparenté mirarla, cuando en verdad solo pude apreciar la llegada de “su nuevo amor” aunque según ella solo era “por el momento, mientras pasaba su mal tiempo” su papá había muerto, y su mamá no la quería Gay así que Lucia estaba viviendo en una habitación y Mariana sólo se sentía culpable de su suerte por que por ella Lucia había confesado su condición sexual y yo, nada mas que yo, tenia que aguantarme que mientras la niña se recuperaba de su fatal decepción, Mariana estuviera con ella.

Por que razón me tenia que aguantar esto? Sabrá Dios por que nací tan idiota para decirle que no a esta mujer.

Lucia se acercó, a mi personalmente no me parecía que estuviera tan mal, pero allá Mariana con su maldita inocencia (y disculpen mi mal vocabulario, sólo que hoy no amanecí con el mejor humor que digamos)

-   -Hola Amor – le dijo, dándole un beso sobre sus labios que Mariana retiró a punto de que yo estallara – Hola Tati – se acercó a mi y me dio un pequeño beso sobre mi mejilla

-   -¿Cómo estás?

-   -Bien. Hoy pude dormir hasta tarde – le tomó la mano a Mariana y miró a su alrededor, su novia y mi – ahora – amante, sólo pudo refugiar su mirada sobre la mía y pedirme paciencia que estaba apunto de perder. – hace rato están acá?

-   -no  - dije yo

-   -si -. Dijo mariana

Lucia nos miró a las dos, -de hecho Tati llegó hace poco – explicó “que bonita Manera de mentir” me pregunto si eso mismo hace conmigo y yo con solo mirarla le creo. Yo asentí, Lucia volvió a besarla y mejor opté por levantarme y mirar a otro lugar, esto en verdad estaba matándome, no tanto por los celos aunque de hecho fueran lo suficientemente grandes para estar cansada de esto, me sentía agotada más que nada con mariana por pasar de nuevo lo mismo, otra vez yo viéndola con alguien más… más que nada, era mi orgullo el que realmente estaba golpeado… Susurró una voz femenina a mi oído, me giré y vi a una de sus amigas que hace mas de un año ya que no veía

La abrasé de impulso, ella correspondió a mi abrazo y me dio un sonoro beso cerca a mis labios, que para mí – en verdad – fue accidente

-   -pero que perdida que estabas Tatiana

-   -Vale, como te ha ido? – sonreí.

-   -Bien, feliz de que ya por fin veo la luz en el fondo del camino

-   -jajajaja que exagerada

-   -ahhh en serio, 5 años seguidos y sin poder graduarme era mucho

-   -No jodas, no se quejan los de medicina

-   -y esa carita?

-   -tu amiguita que me vive rompiendo el corazón –

-   -aww, pa´ que veas como soy de buena, yo te lo compongo – se acercó a mi, siempre habíamos tenido esa misma confianza… me dieron unas ganas terribles por besarla aquí para que mariana se diera cuenta que yo en serio no estaba jugando… pero no, yo si tengo coherencia, pertenencia y sentido común y más que nada, yo respeto lo que “supuestamente” siente por mi.

Hablamos un largo rato, de hecho nos alejamos de la fiesta… quise matar esa media hora rápido, lo único que quería hacer así suene absurdo es estar a solas con ella.

-   -alo?

-   -Tati, ¿Dónde estás?

-   -con Vale, ya nos vamos?

-   -que haces con ella?

-   -ya nos vamos?

-   -eh, ven a la salida.

-   -está bien – colgué satisfecha, al menos ya seria hora de irnos. Me despedí de Vale y me fui a buscar la entrada de la u.

-

Mariana

-   -bebé  --intenté calmar la situación, sabia que se iba a poner furiosa y con justa razón, yo sólo estaba consiguiendo calmar las cosas entre lucia y su mamá para por fin poder estar con Tati, ahora había conseguido que su madre quisiera Al menos verme, pero.. justamente hoy, ahora.

-   -déjalo así

-   -Tati…

-   -¡Mariana ya basta! Ya me tiene harta esto

-   -Shh, Tati, ven

-   -¡NO! Deja de tratarme como una niña, ya me cansé, en verdad…

-   -Ok, te llevo a casa y me esperas que…

-   -no, quédate toda la noche con tu novia que yo veré que hago

Sólo pude ver que lucia se acercaba para empezar a sentirme realmente nerviosa, Tati se dio cuenta de eso y aprovecho el momento para hacerme lo peor…

-   -decídete, Ó ella o yo

-   -entiende que lo hago por las dos

-   ¿Qué pasa? – llegó lucia preocupada por vernos discutir

-   -dile Mariana

-   -que me digas que?

-   -luego hablamos Tati – y me dolió dejarla así, con sus lagrimas a punto de salir… pero, hoy hablaría con la señora y después… terminar con Lucia… aunque, A estas alturas comenzaba a encariñarme con Lucia, al punto de pensar si seria sencillo eso.  si sea tan fácil.

-   -que tiene Tatiana?

-   -está borracha, diciendo incoherencias

-   -Mariana!

-   -en serio Lucia, Vamos. Se nos hace tarde. –fue entonces cuando me di cuenta que a pesar de que tenia a Tatiana en mi corazón, Lucia no me era indiferente totalmente, que me sentía bien a su lado y que por alguna razón que aún no lograba comprender, no extrañaba tanto a Tati cuando la tenia a mi lado.

-   -estoy nerviosa, sabes? – fue quizás su ternura la que realmente me conmovió, esa alma de niña y su inocencia – pero, Feliz.

-   -Vas a ver como todo va a salir bien – me tomó la mano y se acercó para besarme. Correspondí a su beso, sintiendo como algo malo se atravesaba en mi, quizás por que yo misma y mas que nadie sabia que no estaba haciendo las cosas correctamente, quizás por que había otra mujer – la mujer de mi vida – que me esperaba en casa, esa mujer que… por que sé que ahora la tengo a mi lado me siento tan segura, pero que pasa donde se me vuelva a ir, o mejor dicho ¿Dónde haga que se vaya de nuevo?

-   -Mari

-   -si? – reaccioné – quería… que habláramos de algo… - jugó con mis dedos que estaban ocupados en la palanca del auto

-   -ajam – giré a la derecha para regresar mi mirada sobre sus ojos – que es?

-   -bueno… es que, me da algo de vergüenza – llamó mi atención con eso último –

-   -cuéntame hermosa

-   -tu  me gustas y… - tocó su cuello y supuse por donde iba la cosa – yo quiero estar contigo – intenté hablar, aunque a ciencia cierta ni siquiera tenia una idea de qué carajo iba a decir – shh, déjame – me calló – yo sé que tú no me has presionado por que alguna vez te dije que yo iba a saber con quien y en que momento ¿Lo recuerdas? – asentí, mi celular sonó… era Tati, no podía hablarle, no por que Lucia estaba acá, no por que nuestras conversaciones no eran de “dos amigas” no por que ella estaba molesta y no en este momento… desvié la llamada y devolví mi atención a ella  - este es el momento, cuando en realidad me siento enamorada y segura contigo… y eres tu la persona con quien quiero que Mi primera vez sea para toda la vida…

-   -Luci…

-   -Shhh – volvió acercarse justo cuando apenas había apagado el auto – te amo Mariana…

Tatiana

Ok, puede ser que ande un poco obsesiva, se supone que si hoy habla con la señora… las cosas se van a calmar, lo siento por Lucia, en realidad no es lindo lo que Mariana hace sólo por no causarle daño, me pregunto en que terminará esto cuando ella se de cuenta…

De seguro por la discusión que tuvimos ahora, no va a llegar a mi casa, así que me tocará dormir fuera de la mía hoy-

Para mi sorpresa, doña Gabriela pasará la noche donde su hermana, así que como tengo una copia de las llaves de la casa, ahora llegaré.

Puede que me pase, o puede que esté haciendo lo correcto en reprocharle todo esto, al fin y al cabo, Mariana es m… en realidad, ella es todo para mí. Llamarla “mi novia” después de todo lo que hemos pasado es realmente muy poco para lo que significa.

Tan sólo me basta bajar mi cabeza y darme cuenta que el orgullo queda en pañales cuando lucha contra el amor, tanto rato diciéndole a ella que no quería nada que no fuera más que amistad, luego fue algo más que simples amigas… compartíamos los días, los momentos con Manu, los domingos en la tarde, las sonrisas y también los llantos… La cama… todo para aceptar que era imposible estar lejos de ella, y luego… Luego ya no pude resistirme más, pero pasó que como estaba yo, también estaba lucia-

En fin, solo quiero que esto termine y que Mariana en verdad se decida.

9.48 Pm

Vuelvo a insistirle, necesito saber si está en casa pero vuelve a desviarme la llamada… Ok, que sea como Dios quiera, me voy a arriesgar a que esté o no esté.

Tardo cerca de 20 minutos, como de costumbre debo ir despacio por la lluvia, y me acompaña una botella de vino y una caja de sus chocolates preferidos, acepto que ahora me pasé con ella y que quizás por eso ni siquiera quiera hablarme.

Llego a la casa, todo está apagado, bueno todo excepto la luz de la cocina, enciendo la de la sala… y un “tun tun” se acelera en mi corazón… está el mismo bolso que hoy traía Lucia en la universidad, inmediatamente un tremendo “Huuuuuuuuummm” aparece por mis oídos y por impulso miro hacia arriba… no, no, no, esto no puede ser… Mariana no me puede hacer lo mismo otra vez…

En vez de retroceder, me adelanto… subo normal, como queriendo que me escuchen y que lo que sea que esté pensando no suceda ante mis ojos y alcancen a cubrirse, le ruego a Dios que esto solo sea otro más ataque de celos e imaginación traicionera, pero los sonidos son cada vez mas constantes… aunque más que de placer sea de dolor, y es la voz de ella de Lucia… cuando llego por fin al segundo piso, veo que apenas está la luz de la lámpara de Mariana encendida, un jean en mis piernas y un sujetador en la entrada de la habitación, la puerta está entre abierta… y todo llega a mis ojos…

-   -así… despacio – dijo Mariana, me entré un poco más y la vi… penetrándola con tanta sutilidad que sólo pude sentir que eso no era una simple escena de sexo, Mariana estaba haciéndole el amor.