Es cierto, mi vida, te corneo con todos... (12)
Es como un vicio, cielito. Alguno tiene que ser fiel en esta pareja. Yo no puedo porque tengo novio.
ES CIERTO, MI VIDA, TE CORNEO CON TODOS (12)
Por Mujer Dominante 4
Yo creo más bien que es como un vicio, ángel mío. Saber que cualquier tipo se puede tirar a tu mujercita, es algo que a tu mujercita la enloquece. Aunque las caricias y los juegos previos, si son hechos con suavidad suelen conmoverme Y cuando un hombre me conmueve, vidita
Pero no es sólo tener una buena polla adentro, cielo, es muy importante que sea de otros. Y entonces, los golpes de cadera, me trastornan. Los golpes que me dan, cielo, y los que devuelvo, porque tu mujercita no es perezosa a la hora de culear. Bien lo saben los hombres del barrio. Como ellos comentan: "si tenés un apurito, llamala, que ella está siempre dispuesta". Son cosas que los hombres saben, vidita, nomás con mirarme ya se dan cuenta. Por eso a cada rato tengo alguno sobándome las tetas o rascándome la conchita. Ellos saben que yo soy tu esposa, pero también soy una mujer que está muy buena, y cuando les doy mi sonrisa de putona, enseguida tengo sus pijas a mi alcance
Me cuesta un poco, eso sí, mantener la cosa lo suficientemente disimulada, como para que no te escandalices. Aunque una no es perfecta, y me has pillado alguna que otra vez con algún vecino, amigo o pariente, en incluso desconocido. En esos casos, que han sido unos cuantos, yo sigo con lo que me estén haciendo, porque si ya me pillaste, no me queda más remedio que dejarte ver, vidita.
Cuando me están dando por el culo. Puedo sonreírte como la esposa amante que soy. (Porque esposa soy, y amante soy )Y hasta sostenerte la mirada, inclusive cuando se me va poniendo turbia por la serruchada que me están dando. La verdad, mi cielo, es que me gusta mucho la expresión de tu carita en esos casos. Pero, si estoy para el otro lado, lo único que podés ver son las nalgas del tipo que me está culeando dale que dale. Y escuchar mis gritos, claro, aunque un poco roncos por la calentura.
En cambio, si me están haciendo la conchita, puedo rodear con mis soberbios muslotes la cintura del entusiasta que me está culeando, y hasta sacar mi cabecita por un costado, para que veas que soy yo a la que se están culeando en nuestra cama. Para que sepas que hay algo tuyo en esa cama, aunque tengas que esperar un ratito para usarla. Pero me gusta que veas que la que está allí es tu mujercita. Gimiendo, jadeando y dando alaridos, sí, pero tu mujercita.
Claro que tenés mucha paciencia, mi vida, porque al final siempre hacen que se las mame, y si no me lo piden igual se las chupo. Y vos, mi santo, esperás pacientemente hasta que me llenan la boquita de leche. Porque yo a mis amigos los quiero dejar bien atendidos.
Ahora, eso sí, después del tercer polvo que me echan, ya voy apurando la cosa, para poder atender las tareas de la casa, preparar la comida, cojerte, ya sabés, mis deberes de esposa.
Ahora, cuando me maman la conchita, ahí me pueden siempre, aunque estés vos, mi cielo. Porque cuando tengo la cabeza de un tipo entre los muslos bien abiertos, apretándosela por la nuca, para que siga chupándole la concha a tu mujercita, me puedo quedar horas. Y ahí sí, mi cielo, tenés que esperarme, no te cocino ni nada porque es más fuerte que yo, y me vuelvo loca con la lengua del galán de turno. Te miro con los ojos vidriosos, pero nada puedo hacer, vida mía, y me quedo recibiendo los lengüetazos y respondiéndolos con movimientos de mi pelvis en la cara del enamorado,
hasta que se decide a darme unos buenos pollazos y ahí sí, lo despacho rapidito.
Pero la mayoría de las veces no has estado presente, cielito, entre otras cosas porque voy a hacerme culear a otras partes. Voy mucho a la casa de mi novio, Lito, (porque él cree que es mi novio, y yo no tengo cara para decirle que soy casada). Y ya que estamos lo disfruto a lo loco, porque este muchacho no se cansa de cojerse una y otra vez a su noviecita, es decir a tu mujercita. Incluso me pide el culo muy seguido, y yo, loca de la vida.
Creo que lo que más me entusiasma de él como novio, es el grosor de su polla, que me deja la concha hecha un balde. Creo que por eso no lo desengaño, mi vida. Seguramente, si vieras, podrías comprenderme
Es muy valioso para mí que seas tan comprensivo, santo mío, alguien en esta pareja debe ser fiel. Yo no puedo porque tengo novio. Pero por suerte te tengo a vos.
Gracias amigos y amigas, por las calurosas cartas que me envían. Más que "calurosas" calientes, y me ponen a mil. Yo debo reconocer que tengo un problema con este asunto de la fidelidad
Gracias también por las fotos, y los "buenos deseos". Ser "bien deseada" es algo que me gusta mucho. Así que sigan con las cartas: mujerdominante4@yahoo.com.ar