Erika: Experimentando el oral

Vamos a narrar la vida sexual de Erika, en esta primera entrega contaremos sobre su primer contacto con el sexo oral.

Hola me llamo Erika, Hace un par de años me gradué del bachillerato. La historia que les voy a relatar sucedió un par de años antes de terminar el cole, primero quiero que me conozcan un poco, mido 1,52, si lo se soy bajita, me dicen que soy muy tierna, no tengo pechos grandes pero tampoco soy plana, pero tengo un trasero bastante bueno diría yo, me encanta que me lo miren, me hace sentir sexy, mi color de piel es un poco oscuro algo trigueña, mi papá es blanco y mi mamá india, así que mi color de piel es algo canela, mi cabello lo tengo un poco más debajo de mi cintura, es negro y muy liso, mis ojos son oscuros y creo que eso es todo.

Cuando estaba en el cole me encantaba molestar con mis compañeros, provocarlos un poco solo por diversión, además yo también me calentaba. Algunas veces dejaba que me tocaran un poco, me metían mano debajo de mis piernas, agarraban mis tetas, pero lo que más les gustaba era agarrarme las nalgas, a veces me daban nalgadas, aunque me gustaba me hacia la indignada si lo hacían en frente de alguien más.

Yo solía tocarles las vergas a algunos de mis compañeros, pero siempre sobre el uniforme, pero esa vez nos tocó ir al cole un sábado, éramos el único curso que iría ya que teníamos que recuperar unas clases, afortunadamente terminamos la clase un poco temprano y algunos compañeros se fueron, otros nos quedamos ya que teníamos permitido quedarnos hasta las 3 y apenas eran las 11.

Estando en el salón comenzamos a hablar de todo un poco, pero al pasar el rato el tema se hizo un poco más caliente, hablamos de sexo y esas cosas, algunas compañeras “santurronas” se fueron, quedamos tres chicos y dos chicas. Ellos nos decían de cómo se masturbaban, de cómo le habían hecho sexo oral a alguna prima, hablamos de los gustos que teníamos ya que ninguno tenía como tal experiencia en el sexo, todos éramos vírgenes en ese momento.

-Erika tu alguna vez has visto una verga?

~Solo en películas o revistas.

-Y tu Sara?

~No, real nunca.

Mi compañero Diego nos preguntó esto, cuando le respondimos hizo una mirada picarona y se levantó del puesto, se bajó los pantalones y dejo salir una verga un poco grande o bueno así la vi, ya con la conversación estaba un poco caliente, pero esto me sorprendió.

-Vamos Sara tócala un poco.

Se la acerco a mi amiga que estaba al lado mío, ella dudando un poco se la agarro muy suavemente.

~E.. e… está muy dura, se siente raro.

-Agárrala así…

Tomo la mano de Sara para que cubriera más su verga y comenzó a hacer que ella le hiciera una paja, todos los demás mirábamos sorprendidos y al mismo tiempo prestando atención que no viniera nadie.

Sonó el celular de Sara, su mamá la necesitaba, ella le dijo que ya iría para allá, Diego se guardó su verga y le ofreció acompañarla a la casa, ella acepto, todos nos dirigimos a la salida, Andres y Cesar se ofrecieron a acompañarme a mi casa, les dije que iría al baño, cuando llegue ya Diego y Sara se habían ido, entonces les dije:

~Y si nos quedamos un rato más?

-Por mí no hay problema, dijo Andres

-Por mí tampoco, completo Cesar.

~Vamos a las bancas de la cancha.

Debo decir que Andres es un chico que me ha gustado mucho tiempo, y a veces siento que yo a él, pero nunca nos hemos confesado nada, Pero me encantaba.

Cuando llegamos seguimos un poco con el tema que habíamos tenido en el salón, habíamos ido en ropa deportiva, eso hacía que se les notara la gran erección que tenían, yo les miraba con mucho morbo. Cesar dijo:

-Eres capaz de hacer lo que estaba haciendo Sara?

~Emmm no, no creo, pero si quieren se las puedo tocar un poco, pero por encima de la ropa.

Andres dijo

-Pero vamos atrás de la tarima, no sea que alguien nos vea.

Era una zona muy bien protegida de cualquier mirada, aquí solían venir las parejas a besarse durante los descansos. Ellos se pusieron en frente mío recostados en el muro, con sus piernas estiradas en el piso y yo de rodillas en medio de ellos, pero mirándolos de frente, puse una mano en cada uno y comencé a tocarlos, los acariciaba y ellos disfrutaban.

-Ahhhh que rico se siente.

-Oohh si, es muy rico.

Gemían de placer, Andres dijo

-Se sentiría mejor fuera del pantalón.

~Bueno, pero solo un poco.

No sé si acepte solo porque fue Andres quien lo pidió, ambos se bajaron un poco sus pantalones dejando sus vergas a mi vista, como el destino me ama, Andres tenía una verga tan preciosa algo gordita y larga con sus venas bien marcadas, parecidas a las de las revistas porno, pero sin ser tan grande, Cesar la tenía quizás del mismo largo, pero más delgada y se torcía a un lado. Las sujeté con mis manos, se notaba que ellos estaban disfrutando con ese movimiento, yo veía como mi mano al subir la piel cubría la cabeza de la verga de Andres y al bajar dejaba al descubierto ese hermoso pene, con la cabeza rosada y brillando, en su punta había unas gotitas, lo cual en clase nos dijeron que era el líquido pre seminal.

(Sonidos de pasos)

Ellos se subieron la ropa tan rápido como un rayo, escuchamos el ruido de uno de los lados de la tarima así que corrimos por el otro lado, salimos del colegio.

-Que susto.

~Jajajaja no sabía que alguien se podía subir los pantalones tan rápido.

-Nuestra vida dependía de ello.

Me acompañaron hasta mi casa, Cesar se despidió rápido y se fue, supongo que se haría una paja o algo así, pero mi casa estaba sola, solo vivo con mi madre y ella los sábados trabaja hasta las 6 y apenas eran las 2, así que…

~Que te parece si me acompañas un rato

-Segura? No está tu mamá y ps…

~Dale no hay problema o no quieres que termine, además solos es mejor, ¿no crees?

-Si claro, vamos.

Entramos a mi casa, le dije que me esperara en la sala, que quería cambiarme el uniforme, me intente cambiar lo más rápido que pude, me puse una ombliguera sin sostén que dejaba marcar mis senos, y un short muy corto que mamá no me dejaba salir con él, pero bueno, estaba en casa jaajajaja.

Al salir su mirada fue sorprendente, solo con verme pude notar que se le estaba poniendo dura.

~Parece que te gusto verme así.

-Claro, te ves muy sexy.

~Gracias mírame bien.

Dije eso dándome vuelta y moviendo un poco el trasero.

Deje que me tocara el trasero como quiso, me dio unas nalgadas, yo le decía.

~Disfruta de este culote.

-Quiero cogerte.

Me di la vuelta y le dije:

~No, aun no quiero tener sexo, no me siento lista.

~Pero puedo complacerte de otra manera.

Me agaché en frente de él, el cual estaba sentado en uno de los sillones de la sala, se la comencé a frotar por encima del pantalón, puse mi cara casi que, frotándola sobre su verga, le di un beso a esa palpitante verga, pero sobre la tela.

-Ya no aguanto las ganas de que la agarres con tus manos, fuera del pantalón.

~Está bien, saquemos esta belleza.

La comencé a sacar y pude ver como palpitaba, y sus venas estaban muy marcadas, la tomé con mis manos, con ambas, y empecé a frotarla de arriba abajo.

-Dale otro beso.

~Así? No sé… me da cosita…

-Vamos dale, quiero sentir esos labios.

Di un suspiro y agarrándola con una mano le di un pequeño pico en la punta de su verga, lo miré a los ojos y vi cómo le gusto, así que le di dos picos más mirándolo a los ojos.

-Que rico se sienten esos labios.

~En serio te parece?

-Si, tienes unos labios muy bellos.

~Gracias.

-Pero… me gustaría que pudieras chupármela.

~No, ni siquiera sé cómo se hace eso. Pues he visto en películas, pero solo eso.

-No te preocupes lo harás bien, solo piensa que es un bombón.

Trague saliva, lo mire y el agarro su verga y la acerco a más a mi cara, puso la cabeza de su pene en mis labios, yo saque un poco la lengua y lamí un poco, la verdad no supo nada mal, era un sabor que no podría describir, pero me gustó.

~Está bien déjame lo hago sola.

La tomé con mis manos y metí su cabeza en mi boca, comencé a hacer movimientos rápidos con mi lengua, de arriba abajo, pero rápidos. Él se retorcía de placer, yo saboreaba esa deliciosa verga, nunca pensé que pudiera gustarme tanto, ya sé porque las actrices porno se veían felices de tener esas vergas en sus bocas.

-Te gusta?

~Podría acostumbrarme a chupártela más seguido.

Al decirle esto agarro mi cabeza e hizo que me entrara más de su verga en mi boca, solo la mitad y ya tenía la mandíbula bien abierta y la boca llena, comencé con el mete y saca que había visto, sacaba y metía su verga de mi boca, le hacía algo de presión con mis labios y succionaba como si quisiera que algo saliera.

-Ohhh Erika que rico se siente.

~Me alegra que ee guushee

No me dejo terminar de hablar hizo que me metiera de nuevo su verga en mi boca, sentía como me mojaba un poco, estaba disfrutando de tener su verga en mi boca, movía mi cabeza lo más rápido que podía, aunque me cansaba, después de estar un rato así la saqué de mi boca, estaba brillante por mi saliva que la recubría toda, comencé nuevamente a pajearle, sentía mi mandíbula cansada, le dije.

~Ya? Obvio ya sabía que los hombres se venían. Pero tenía pensamientos encontrados, en parte quería saber si sabría tan rico como su verga, o si sería tan asqueroso como suena y parece, aunque las chicas del porno parecen que lo disfrutan.

-Ya casi me vengo.

~Seguro?

No me respondió solo me agarro de mi cabeza haciendo que su verga entre a mi boca, aunque acepto que como buena putita abrí la boca, él comenzó a mover su cadera, su verga se movía entrando hasta mi garganta y sin salir de mi boca volvía y entraba hasta mas no poder, hacía que me dieran arcadas, pero a él no le importaba, ya tenía los ojos aguados y cayendo algunas lágrimas, él solo siguió moviéndose, estaba follando mi boca, estaba usándome a su antojo.

-Que rico se siente tu boca

~Uhhmm ahmm amm ehsjd

-Quieres hablar?

Saco su verga por completo de mi boca dejándola a escasos centímetros de mi cara.

~Cof, cof, cof

~Necesitaba respirar.

-Ok, pero ya me vengo…

Me volvió a tomar y follarme mi boquita, me sentía usada, como una puta, ni eso simplemente era una perra, pero se sentía tan bien. El movimiento se hizo más fuerte, más violento y sentí un fuerte chorro casi en mi garganta, quizás por la impresión del momento me hice un poco para atrás para sacar su verga de mi boca, pensé que era todo, pero…

-Ahhhh, que rico me sacas la leche.

Dos chorros más salieron disparados a mi cara, cayendo sobre mi cabeza en mi pelo, y uno muy largo que iba desde mi frente pasando por mi ojo hasta mi boca. Saboree lo que tenía en mi boca y aunque era raro no sabía mal.

~Me has dejado untada de tu leche.

-Lo siento, pero te ves tan sexy así

~Sexy?

-Si bañada de mi leche, marque territorio y ahora vas a ser mía.

~Pero yo no quiero tener sexo aún. (aunque en ese momento estaba mojada y deseando ser penetrada, pero pensaba que aún no)

-Tranquila, por ahora no, solo me la vas a chupar y quizás otro día te regrese el favor yo a ti.

recogió con su dedo lo que había en mi cara y lo llevo a mi boca, como buena putita lo saboreé chupando su dedo.

~Tu leche es deliciosa

Tome su verga y la dejé bien limpia con mi boca sin que me lo pidiera, lo mire y la fui metiendo en sus pantalones, me fui a limpiar. Se despidió dándome un beso en los labios, fue muy lindo, me agarro mi vagina.

-La próxima besare estos labios.

Me estremecí, aún estaba excitada.

~Claro es toda tuya.

Ese día me tuve que masturbar pensando en él.

El lunes en el cole, me propuso que fuera su novia, sin dudar le dije si, por supuesto, desde ahí comencé a tener más experiencias con él y otras cositas más. Se las contare poco a poco. Espero que lo hayan disfrutado

No olvides dejar tu comentario.