Eres tu 16

Andrea:

Mi corazón iba a mil por hora no teníamos idea de a donde se había ido ese idiota y tampoco nos quedaríamos averiguarlo..

–Vamonos de aquí ahora mismo! –Dije con pánico

–Vamos caminen yo cargo a Karen –Dijo Samuel aparentemente tranquilo.

Íbamos a caminar y Samuel me detuvo nuevamente y me entregó él arma.

–Ni lo pienses samuel yo no se usar esa cosa! –Dije alejándome de el.

–Eres la unica que creo que esta dispuesta a disparar si algo nos pone en peligro..

–Bien.. Pero no la usaré a menos que sea necesario..

Caminé frente a ellos con el arma en la mano, almenos teníamos con que defendernos no estabamos tan perdidos.

Caminamos con paso mas apresurado al escuchar un ruido en la casa, abrí la puerta y salimos, la lluvia seguía y parecía que nunca iba a tener fin, él aire movía los arboles de una manera aterrorizante, no sabía cuanto tiempo había pasado pero él cielo estaba mas oscuro de lo que recordaba y eso dejaba poca visibilidad..

Corrimos bajo la lluvia no queríamos estar ni un momento en ese lugar con ese loco suelto por ahí, parecía que cada vez estabamos mas cerca del auto cuando una detonación nos paralizó..

Mi hermano Samuel cayó de rodillas con un disparo en la espalda, Karen como pudo se puso de pie y nos ayudó a mover a Samuel a un lugar donde ese desgraciado no nos pudiera ver..

–Hermanito! Por dios aguanta por favor saldremos de esta te lo prometo. – Dije llorando y  llena de ira.

–Escondanse bien iré por el auto y regresaré por ustedes  –dije viendo a todos..

–Andrea no vayas esperemos a la policía! –Dijo Samuel con dificultad para hablar.

–No permitiré que te desangres aquí! Estaré bien lo prometo..

–Andy –Habló Karen acercándose a mi –Hazle caso a Samuel no vayas.. Si te encuentra te hará daño.. Por favor no lo hagas..

Se acercó y pegó su frente a la mia  intentó besarme pero me aparté inmediatamente yo ya tenía claro lo que quería y no era ella.

Vanessa miraba a otro lado con un llanto silencioso, me dolió mucho verla asi.

–Pequeña.. –Me acerqué cuidadosamente. –Estaré bien lo prometo.. Nos quedan muchas cosas que hacer juntas..

Me miró fijamente a los ojos, no aguanté mas y la besé.. quería demostrarle que todo mi tiempo ahora le pertenecería a ella..

Nos separamos y la miré fijamente ella asintió y yo corrí a buscar él carro..

La lluvia era un estorbo, caí un par de veces en el lodo que me impedía él paso, pero estaba segura que no quedaba mucho para llegar al auto.

Caminé unos cuantos metros mas y sentí que alguien me tiró al piso, yo luchaba por librarme de la persona que me estaba atacando pero me era imposible, sentí un par de golpes en la cara

–Creías que te ibas a quedar con Karen?? –Decía con ira

Supe que era Ernesto.

–Eres un perro –Dije con dificultad.

–Y crees que me importa lo que pienses maldita perra? –Dijo ensima de mi –No debiste meterte conmigo, te lo advertí desde él principio..

Guardó silencio por un momento yo no podía hablar por falta de aire

Se levantó y me miraba con una sonrisa, aproveché y saqué mi arma cuidadosamente sin que me viera no podía hacer un movimiento en falso porque estaría muerta.

–No te culpo, es hermosa y se mueve muy bien en la cama.. Lastima que no la disfrutarás nunca mas

Apuntamos las armas al mismo tiempo y fueron accionadas a la misma vez, cayó al piso y yo sentí demasiado dolor en mi estomago, un dolor que me hizo quedar inconsciente..

Vanessa:

No sabía que sentir en ese momento, todo era demasiado confuso, miré a Edwin que sonrió por lo que acababa de pasar mientras que Karen veía al piso con lagrimas en los ojos que se confundían con la lluvia pero sabía que estaba llorando.

Después de 10 minutos nos asustamos al escuchar dos disparos cerca del lugar, todos nos miramos con cara de pánico y nadie se movía.. Quería llorar, gritar, salir corriendo de ahí y buscar a Andrea no podía dejarla ahí sola con ese loco..

Me disponía a salir del lugar donde estabamos escondidos pero sentí que Samuel me jaló del brazo.

–Vane no, quedate aqui.. Es muy peligroso para que salgas..

–Andrea esta en peligro y no la puedo dejar sola por favor Samuel sueltame –Dije llorando.

Samuel me soltó y yo corri hacia donde minutos atrás se había ido Andrea.

La lluvia había calmado su furia y tenía mejor vista, caminé y busqué con la mirada a Andrea pero no la veía por ningún lado, caminé unos cuantos pasos mas y la vi ahí cerca del coche inconsciente

Corrí hasta ella y pude ver que tenía un disparo en él estomago y la sangre no dejaba de de salir, tenía mucho miedo de perder al amor de mi vida.

Trataba de moverla hasta el carro pero no podía hacerlo yo sola, el llanto y la desesperación me invadieron hasta que a lo lejos pude escuchar a la policía, gracias a la luz que ellos traían lograron verme fácilmente y rápidamente se acercaron a mi con temor.

–Señorita esta usted bien? –Preguntaron..

–Por favor ayudenos, ese hombre que está ahí tirado nos atacó tenemos a dos personas heridas de gravedad necesitamos una ambulancia ya! –Grité nerviosa

Le di a uno de los oficiales las indicaciones de donde estaban los demás y fueron a buscarlos, yo no podía dejar sola a Andrea.

–Las ambulancias vienen en camino –Dijo él oficial levantando las dos armas que estaban en él piso.

Minutos después dos ambulancias llegaron al lugar, rápidamente se dirigieron a andrea a quien pusieron en la camilla con cuidado.

–Tenemos que irnos la señorita esta muy mal –Dijo él paramedico

–Vaya señorita, yo me encargo de sus amigos. –Me dijo él oficial

Asentí y me fui en la ambulancia.

Andrea corría peligro de muerte y yo no podía hacer nada.

Llegamos al hospital y rápidamente la bajaron de la ambulancia, corrieron hacia dentro del hospital, mi mente estaba perdida, era una de las sensaciones mas horribles que había sentido en la vida. Se perdieron detras de aquellas puertas dejándome ahi completamente destrozada.

Minutos después Karen y los chicos llegaron en la otra ambulancia, por suerte samuel estaba fuera de peligro porque la bala no había dañado ningún órgano vital.

–Como está andy? –preguntó Karen acercándose a mi y la miré con coraje.

–No se como esté, pero lo que si se es que todo esto es tu maldita culpa y si se muere tu serás la responsable.

Hablé con toda la ira que tenía en ese momento, Edwin me tomó del brazo y me llevó a un lugar alejado.

–Tranquila Vane porfavor estamos en un hospital eso lo pueden dejar para luego! –habló Edwin molesto.

–Bien –Dije caminando a los sillones que estaban en la sala de espera cuando Karen habló.

–Crees que te ama no? –Preguntó con burla.

Apreté mis puños para no hacer ninguna tontería.

–Si.. Me lo imaginaba eres tan tonta como para pensar que ese beso fue real.. Fue lastima Vanessa, a la que en realidad ama es a mi, si no no hubiera arriesgado su vida para salvarme o si?. –Volvió a hablar

Tenía razón las malditas dudas se instalaron en mi cabeza, si estabamos aquí era porque Andrea había arriesgado su vida por la idiota de Karen.