Eres mi mundo . Capítulo 13 : La suegra ( II )

Mi novio me había escuchado , tal vez toda la conversación o sólo una parte . Sus ojos hermosos estaban llenos de lágrimas y sus manos sujetaban con tanta fuerza el cinturón de su albornoz que parecía que iba a romperlo .

• Pablo , yo . . . - empecé a decirle porque se veía muy herido a todas luces .

• ¿ Cómo te has atrevido a hacerme esto ? - me cortó y preguntó lleno de rabia con la voz medio rota .

• Sólo quería que tú . . .

• ¡ Te pedí que no lo hicieras ! - me gritó -  ¡  Era lo único que no deseaba  !  ¡ Te has metido en algo muy íntimo para mí ! ¿ Qué pretendías , destrozar lo poco que puedo tener ?

• ¡ Amor , deja que . . . !

-  ¡¡¡ No me des excusas estúpidas !!! - se acercó a mí de tal forma que  se veía agresivo -  ¡ No sabes el daño que acabas de hacerme ! ¡¡¡ No tienes ni puta idea !!! Deseabas que estuviera muy feliz por tu buena acción , ¿ verdad ? ¡¡¡ Pues lamento decirte que no !!!

• ¡ No es lo que crees , Pablo ! ¡ Déjame . . . !

• ¡ No quiero escucharte más ! ¡ Me ha bastado todo lo que oí ! Si mi madre llegase  a odiarme por esto , ¡¡¡ NO TE LO PIENSO PERDONAR NUNCA !!!

Intenté abrazarle pero no pude . Me rechazó con fiereza y al irse a su habitación , se encerró dando un portazo . Me acerqué con disimulo y le escuché echarse en su cama y llorar muy amargamente .

Estaba  muy hundido y yo tenía la culpa de eso .

Al rato decidí irme de su casa , tras varios intentos en vano de que me abriese la puerta de su cuarto . Tenía la esperanza de que Pablo me llamase al móvil tras haberse calmado y pensado sobre la situación que le había provocado . Tal vez pude equivocarme y haber esperado al momento más correcto , pero ya lo había hecho .

Me dirigí a la tienda de Patricia como solía hacer para colaborar y le conté todo lo sucedido .

• Eres la leche , Rubén - me reprendió mientras se echaba en un vaso de agua una pastilla efervescente para aliviarse el dolor de cabeza por su medio borrachera - . ¿ Y ahora qué haras ?

• Esperar a que reaccione .

• ¿ Y crees que lo conseguirá ?

• Sí , lo creo - dije convencido .

• A veces pienso que nunca has dejado de ser un iluso romántico , tío . Vale que lo hiciste como un regalo para sus 26 años , pero por como se puso te coronaste , macho .

• Está distanciado de su madre . Se halla muy lastimado por eso y no deseo que se le convierta en algo patológico .

• Yo soy empática - me dijo mi amiga - . Me pongo en su piel y veo que algo así tiene que ser muy difícil .

• Eso está claro , Patri .

Justo entonces me sonó el móvil y lo saqué de mis bolsillos . Mi friend me miró atenta . Mi artista me estaba llamando . Le atendí .

• Rubén . . . - me dijo aún roto .

• ¿ Te pasa algo , cari ?

• Necesito que . . . que vengas conmigo . Yo . . . yo no quiero estar solo .

• Vale . Estaré allí enseguida - le colgué .

• Ahora es cuando te convertirás en su principal refugio para sus males - me anunció Patricia - . Me debes 50 euros por la consulta más unas copas de las de anoche .

Puse mis ojos en blanco .

• Te llamaré para tenerte al tanto .

Me fui . Cuando regresé a su piso , Pablo se me echó encima y me abrazó , llorando con aún más fuerza .

• Tranquilo , amor . Estoy aquí a tu lado .

• No me sueltes - me pidió tembloroso .

• No te soltaré .

Al fin logré calmarle . Me costó un huevo hacerle entender que necesitaba un reencuentro con su madre para solucionar esas rencillas y curar ese dolor que ya le estaba supurando . Pero casi se alteró de nuevo cuando le pedí que llamara a Andrea . Pero al final lo hizo ( cogido de una de mis manos , como si fuese de nuevo un baby de meses ) . Y mereció la pena mi `` intromisión ´´ , pues así contribuí a que se pusiera contento ante otro cumpleaños suyo junto aquien le dio la vida .

Estuve hablando con mi suegra por teléfono . Aún no me acostumbraba a ese término conocido pero nuevo para moi . Me recordó a la típica  suegra villana que aparece en las telenovelas , aunque Andrea fuese un encanto de mujer . Acordamos que Pablo y yo la recogeríamos en la estación de autobuses el día D a las once de la mañana , para que así se hiciera con un billete para poder llegar a esa hora que le equivaldría salir por la noche de Villavicencio .

Y el gran día llegó . Tras mi felicitación a Pablo , con previa noche de sexo incuida , nos plantamos ahí . Los autobuses fueron llegando uno a uno hasta que vino el procedente del pueblo . No me fijé en Andrea hasta que mi novio salió disparado hacia una mujer medio baja y llena de maletas a la que abrazó fuertemente .

Los vi . Y me alegré muchísimo .

Mi misión había concluido con éxito .